556 PLL, De Felipe 1 Calor H-Vereasle VENEZUELA CAPITULO I Discesis de Coro-Caracas 1. Sus yostnenos on1se05 ex x1 s1oLo xvt 1. Pedro de Agreda, O. P.,tercer obispo de Venezucla— ‘Al morir en 1560 el segundo prelado eorense, don Miguel Balles- teroo (p24), la pequena ciudad carbica atin fla. fa herdas ‘caumadas on st cure joven por las turbuloncias recientes. Su suce- fer, el dominico Agreda, catedritico de San Gregori de Valladolid, ‘levado por Pio IV el 27 de junio de 1361 a la sede venezolana, hhubo de verse cercado en su casa por los piratasfranceses y escoce 5 capitanesdas por Nicolis Vale, lorar sus gestos siclegos, ‘Que ni perdonaron sus bulas episcopsles. Pasada aquella tormenta, hho tivo a menos hacerse profesor de latines para los ninos que pudieran ser un dia scerdtes en aquells Iglesia sin pastores ‘Au asi tuvo valor para convocse el primer slneda venezalano, celebrado con la asistencia y eolaboracion de dos euras, dos domi- cos, dos franeiscanns yun sacristin mayor; hoy no we conservan Sus documentos, que 92 hacia Iamentarse en 1687 al obispo Banos ¥ Sotomayor cuando en el predmbulo de sus constituciones sino- Qoles declaraba: “Halland s6lo noticias de que en la. primera Fundacion de este obspado se celobré Sinodo, de cuyas ordenanzas rg habia quedado memoriael, Pero ya el mero hecho de su celebra~ ‘ion es fod un gesto. Hacia el 13 de mayo de 1579 fallect el buen pastor, ilustee profeor y humilde prelado de’ humilde Iglesia 2. Sus inmediatos suceiores —Fue fatal dentin del didesia enol es prior ep cata drain del po. jo de sus mitten, 9, consiglentemente fa cotta noticia que Teds perme y getione oguon foe archivoe, Mac se pote oper del Canréo lado, e'dominieo Juan Maul Manzano, {gue logrd sontarse er Su sila epicopal por diez anos, de rsa al $e ehero dl 92, 00 que flees en Caracam pro del slo se 1 ony agra ‘ache gr ef An de Sg ee saan of Buen shimano te att Oi Egat fo ea tel ca ete Aa SE ce es Het See Eales tego ‘cas 1037-38 B. he Lanes, Lo faneteanes Venera (Caras te Orie Thue ces feat tot "tae Te enc Car Bees Helv Gab Cota icin © act ono Son.) LASERS ie omen etl Gh. Dilceis de Coro Caracas sor recuerda que el 19 de noviembre del 8x presents ante el reducido abildo corense la real cédula de presentarii, focha #4 de octubve G2 So, aun sin reibi las bulas papules, cl cabilda le sent ex la fecde prelaticia Te entrogs las aves de Ia iglesia, basta que el ® de fnero del 84, Fecibidas las letras pontifis, se posesiond de Hi Sucedidle el jgualmente dominico Pedro Martir Palomino, quien cl 10 de octubce del 595 prewnt6 In real eédula de nominacin, pa Allecer el 22 de febrero siguiente como selecto obispo, de Venezuelt, sin recibir las bulas de su institucién, de forma que endnicamente no se le puede colocar en el epiacopologio venczo fanos. ‘Después de tees anos de sedevacaneta, otso dominico, Domingo de Salinas, era clecto prelado corense yen su nombre, el capitan don Alonso Ariso Baca prosentaba la veal otdula del 24 de absit Gal 98, el 20 de marzo del siguiente ato; el eabildo, educido a a persona de don Diego Fernindes de Cardenas, aceptando su p= Exntacion, le eenté en la sila episcopal y le entogé las Haves de la fitedral, sin considerar bice su carécter Incal- Poco durs este pontficido pus el prelado moria en El Tocuvo por junio del 6008 "Mientras tanto, [a capital episcopal, expuests low ataques de Ja pirateria y destentrada de ly oorrientecivilizadora, polition y sscondmica, que se diigla ms al oriente, iba perdiendo su impor tancia. La"balanza iba ya inclinindose hacia Caracas, TH, Sus pRnvERos opisP0s 2% ex stato vit 1. El teniente de Maracaibo y capitin general de la provincia don Pablo Lazay Brito, el 31 de agosto de 1602, presents al cabildo ‘corense a real cédula y las bulas pontifcias que consituan sexto ‘bispo venezolane al mercedavio Padro de Ona; en respuesta, al ‘apitin se le conesid fn corespondionte provision, conservindest el régimsen de la digeess en el mismo cabildo, mientras el prelado Sin estaba en Espans, desde donde se dirgird (xéos) © Gata (leila), su sues sede, sin preseatarse en ln lejana Coro®. 2. Antonio de Alzega, O. F, M,, séptimo obispo de Vene- ‘zucla.—Por 160 legabs a Venezucla el francicano Alzsya, ex con sp PE a a Se as et 2 MOMs Sita de Meson dt Campo, io a ceoento de Sox Andis dew pur pig a th ca Sc ri St ean. ti Oued nc de Vdd Fes Me aa sen ann fc ety pee cei ea ene eee eee eSthie EASIER Sunk SUR ane antes deca en58 PUL. De Felipe H a Cerlor Venezuela tador de la Real Hasisnda de Yucatin (Méjico), vado, figura netar Inentefrandaeana doco el 2 de diembxe da 6s. Vise vista i dldcein gerber en menos de tes afi a mae de 1609 dol Yeonvonar el serundo snedo diocesino de Venerucls el 14de agosto Ud tot; escois el eb por su repesenante at dein don Digg Ferninicr de Cardenas, quien se encagarla de preentat los me Imowlales de los expats, "El 25 de asosto del Gop anunciaba el prolado la apertura del sinodo para noviembre en Bargusinto,poto parece que ae celeb in'Sables on Caras dade els de octubre dl dicho ato hasta Gi ia, con In siafencla del gobernador y capitin general, dean, urs, ves, prin gutsy procares ds ciades se eonactva de fo decetado on in cesta junta & sabe {ee or determing ls eecein de un seminario doctano, sey el flan tedentino, Afos més frde, cuando el obspo Batic Soto- payor rodacte sua sinodales, bard constanin de qoe tats de aet~ Tear, ‘mudae yaar algo alo jstamente cablecidos por sl sinod del obispo Aliya. Después de solos tres aos do episcopedo, dling de mayo de 110, fllelo en Caracas el prea fancacano; “jas el recuerdo grate de su celo, que fe empulo a reunir un sinodo tn aquells sade exhasts de lero, pobre de Beles, saotacs por las Sennaas del evteris interorments lcerada por lor Indios ia frones en perpota rial domada actitud de revulta 3. Juan de Bohorques, O. P., octavo obispo de Venezuela. Efeato por las bulas femadas el r7 de agosto del 11 por Paulo V, cel r2 de enero del 613 hallsbase en Coto entendiendo en la fabeica fle mu catedral. No debio de agradarie sw situacién y el complejo Ae sus circunstancias price onto afeont el problema del taslado Sfectivw de la sede > Caracas, donde ya sus antocesores hablan permanecido casi habitualmente. Extudigne el anunto con lok capi- ules, presentronse razones on pro y en conta, y diliise Ia resolucién por su pute. Mas por pacte del regidor de la. capital ‘apitin don Diego Perozo, y su partido, se present 2 lo eclesi ticos una real cédub, fecha 19 de marzo de 84, que prohibia fa Supuesta traslacién. Desestimaron los capitulaes la regia notifca- clin por evr dirigida a un poder ical "Asi el obispo, a 10 de junio del 613, ordenaba trasladar a Ca- racas 2 ocho abreres negros de su catedral con sus familiares, fin cle entablar [as cbras neesarias para instalar Ia sede episcopal fn Ia nueva capital, Pero el cabildo, aun rechazando la dicha real edule, se adhitié amu sentir y so nego a trasladarse a Caracas, ‘Result, pues, que elobispo estaba en su sede caracense y ef eabildo seguia en su residessia corense, on los consiguientes resultados Ga, ices de Coro-Corseae 850 natives para a recta administracién diocesana. Ni el obispo, de ‘asicter enérgico, cao, ni los captulares, apoyados pot lar auto- ridades civiles de\Goro, se doblegaron. Sélo st promocién x fa sill de Oaxaca (Méjico) drimié la contiondas pero aa gest, cuando ‘alla en diiembre del 618 para su nuevo destino, dejaba ya sbierto el camino hacia Caracas, un cuando ef cabildo’pidiera a Ia corte ‘se determinase que los obispos resiiesen en Coro, dlimitindeles tiempo que hubieren de poder estar en visita en cada clad, fgue éste no pase de cuatro 0 scis meee ®, Pronto la realidad se Jmpondiia alos pertinaces capitulaces, 4. Gonzalo de Angulo, minimo, noveno obispo de Ve- neztela.~-Patilo V, e 20 de noviembre del 619, coloce en la sede corense a este hijo de San Francisco de Paula, active, decidido, tual convenia en la dificil diseesis; en 1622 hallibase en el concilio provincial de Sinto Domingo, cuyas decisiones intentari aplicar su cabildo el 28 de septiembre del 23 juntamente con algunas Teformas personales. Algunas fticiones com las autoridades cl- viles, cuya naturaleza deseonocemos, hubieron de agudizarse cuando el Ayuntamiento de Caracas envid al dicho concilio dominicano por procurador a don Nieolis de Penaloss, con intencién de snten: far recurso de fuerza contra el obispo. formada éte, an mis tirantes pusiéronse las relaciones, influenciado por don Gabriel de Mendoza, comisario de la Inquisicia, hombre sapera y valent, puntllows en sus derechos, "Estas alterativas no impidicron al obispo entender en la vida estudiantl de su diminuto seminatio, dande asents las clases de ftamatica y moral, muy en consonancia con sv amor al estudio, ‘que, al fllecer el 17 de mayo del 633, legaba a su eabildo corense Su liberia vd calidad y eantidade 10” Atin prososuia la sitwacion, fnémala ereada por la separacién geogrifica de prelado y capitulo fatedral, aqudl resdente en Caracas y tate afincado duraments en Ib Iejand y tranquaila Coro. 5., Juan Lopez Angurto de la Mata, décimo obispo de Ve- neztiela—Era obispo de Puerto Rica cuando Urbana VII, el 20 de oviembre del 634,10 trasladé a Venezuela por julio dol siguiente ‘ho, el cabildo le entregabn std facultad asi neceuaria como volun= taria y delegaday; fue el ultimo acto del recalcitante capitulo cele~ brado en su querida Coro, pues vemos a los capitulares ya actuar en Caracas el 18 de marzo del 636. La vida habit impuesto 608 ‘exgenctas en las nucvas coyunturas historcas Con esta oeasion, el obispo Angurto pido organizar y aun ampliae el admero dé sus capitulares, de forma que el 7 de junio Se Tecursig a Roma y a Madrid para qite se recmociers canénicn ¥ politicamente la nueva sede carsconse, Felipe 1V, a 20 de junio ‘el 637, mandabs evigir en Caracas Ia iglesia catedeal, en vista de500 PAL. De Feline Wa Ganos U—Veneznela las ventajas de ordon natural, politico y cclesistico que oftecia fn nueva sede, y el 16 de marzo del siguiente afo 638, el cabildo, ‘Selovacante, forpaba posesion de la Iglesia: westidon los seiores Cipitulaes de capas blancas, ef senor dain (Bartolomé Escoto} brio cern el sagraria, y se dentaron en sus alla de prebendados, Y de all pasaron a ha sala capitular, y absieron y cevraron el exjon {que encerraba los libros capitulares y,en sefal de posesion, aeoja- Fon monedas de plata, "No por tado este aparato de toma de posesiin eesaron las repre= sentaciones del vecindario de Caro, que veia perderse el prestigio de su nombre. La corte no gadid, antes conftmé la resolucién ya tomads y aplicada en 1639. El prelado Angurto, sin embargo, no prado presenciar los tltimos actes realizados en Ia nueva capital Episcopal, pues alli mismo habia falleido el 24 de diciembee et 63 Hh TIL. Mauro nx Toran, O.B,, wsnécnso osise0 ne Venezusta 1. Aceié pastoral.—Con fecha 11 de octubre del 639 insti sbispa de Venezuela Urbano VIII al discutible y discuiido monje Benedictine Tovar; presentando sus bulas, se posesionaba de su titra el electo cl 20 de diciembre del ato siguionte. Hombre enérsi- Coy pido en sus suciones, al mes de cenrse la mitra, estudiaba, ‘Tuna con su cabildo, a forma de erigit on un plan de ficients vit kel linguido y casiinexistente seminario discesano, cuyo verdade= fo fundador iba a st mismo. El r7 de mayo del mismo 64% se iterminaba en el plno capitulardestina al efecto una casa propie= ‘dud de I catedral, vecina a la misma para cuyo sostenimiento habia {de aportar el migine expitule 150 pesow anuales. Parece que ni fue tan prespers la vida osminaistaen esta época, a juzgae por la escasez ide noticlas que legar, ni muy numeroso el clero que de sus aulas salle El terremoto que aplané lagiudadel 11 de junio del 641, reclams ln atencign pastoral di obispo Tovar:lacatedral, aecuinada acrasados los eliicion, Ia mises y el hambee cundian por encima de los es- ‘combtos. Obispo y cpitulares se interesaron como era justo: hasta 13.372 pesos ditibuy6 el cabildo entre la gente tan duramente eas- tia; y el obispo, sh casa, dejaba el corral donde se guatecia para ‘eparlis por sus mans Ia imosna y el eonsuelo “Una nueva neces, al ato siguiente, l mes de septiembre, puso ‘en sus manos pontifiales la expada e hizole tocar la mitra poe el Goseor ef gobernadar don Roi Fernindes de Fuenmayor, ante las Scometidas del peigr inglés, emprendié una eruzada maritima, le- ‘indows tec [a gente habil j, consiguientement, dejando indefen- Sola ciudad de Carcas y el puerta de Ta Gutira, Consticuyose Lon og, a Dar te enn ier th ai BE Gi dean as ms ‘perfexsones y cet de viruses (Ovi, Ga. Dideeris de CoroGarscar on ‘entonees el prolado en eapitin general: coneentearon mujeres y bios en Ia catodral, doa cévigas pasaron a La Guaira para reroget Acaantos enfermos hallasen yllevaslos a la capital; pref y sicer- Siotes se offecievon para cuidarlos personilmente en sts maradaa, ¥ Vos al obispo-manje luchar drectamente contra los ingleses, que zp lograron devetr I iad, Tal faci pov dl oiapo 2, ‘Duelo Tovar-Gedler—Una personalidad tan. destacada como la del Benedictino Tovar difslmente hubiers pasado un pon- Lfcado totalmente tanguilo. Difcler eran los tiempos, dies las personas, difcfes los problemas. Y paso en Caracas fo que vemos [pusaba en casi todos fos obispadas hispanoindianos: el imprescindi= ble capitulo de fos duclos entre ambas autoridades, ccesistica y civil. Era por 1643 gobernador de Venezuela el sargento mayor don Marcos Gedler Calatayud y Toledo y con él formaron partido los alcaldes de la ciodad, mis la Real Audiencia de Santo Domingo, rans se alaron cone prelado sus dos nico apitlacen Bosra Salté la chispa al excomulgar el ebispo a don Juan Méndez Conall, teniente del gobernador siete, Fernindez, Fuenmayor, y del actual, Geer, por haber negedo el auxilio del brazo seca para prender asus procesados, dos hermanos incestuosos, que ests ddaremos después, No consta que fue clergo el tal Mendez: pero, fnte su excomunida, el alcalde caraqueno Agustin Gutiéren de Lugo reaccion destorrando al prelado. No se iatimidé el obispo Tovar; respond extendiendo la excomonicn al mismo alealde. No sigtiéndose éstetranquilo ni ante Dios ni ante la ley vn tal estado, {xigioa los dos dichos cancnigos leabsolvieran dela pena fulminada por su obispo, alo que respandioroa lop eapitulates muy candi ‘mente que ellos no tenian atibuciones para conceder tal graci Poco debia de entender de legalismos el lealde:aprisiondlos en ‘gus casas, secuestté sus bienss, negoles la comida. Pero lograron fagarae al convento fnciseana de Ia cual ow sabesos del asi ttado aun alld los quisieron haber, pero no lo Tograton. Hasta que pasado el primer impetu, sosogdse el alcalde y rindi armas, mien {tas los eanénigos,refughcdos ya en la eatedraly mandaban = apei- ign a la Real Audiencia de Santo Domingo, que en este particular 52 declaré a favor de los exlesistcos “Entre tanto, elt de noviembre del 644 se Le intima al obispo fa orden de salir de la didcess; el prelado pidio un navio. EL ty del mismo mes se le dirigié una segunda intimacidn, ala que contests cl prelado que obedecia siempre que se le deparars un medio de lo- ‘comocion; dias mis trde se le ofreeié un navi; entonces el prelado hizo cucstion juridica: recus6 la orden corpo dimanada de un slealde {jutdicamente incapaz para fulminar tl pena, y exigi orden real ‘ode is Auiencia o del mismo monarca, Insists el pobernador Ged Ter. ¥ el prelado decaeé a todos incursos en las penne de Ta bula In ‘vena Domini por atacar la inmunidad eclesistica502 PAL De Felipe 1 Carle M—Verszacla Pro la autoridades civiles se habian emperiado demasiado eo Ja lid para poder retirarse tan a los comicnzos: obispo, viendose asediado, oped por salt a caballo a dos leguaa de Ia edad, pero notifieando que slo por la fuerza tomaria un bares camino de 8 Aeseierto; ast lo dovard desde el purblo de Petre. EI 19 de abril del 645 orden el alealde el embargo de los bienes episcopate, su destierro y au entrega a ia Real Auiiencia. Tovae Hegs hasta el puerto de La Gusta; ante su gesto se alboroté el pue~ blo, de forma que el alcalde ereyo mas diplomstico invtar al prelado 2 rogresar para dar el reapoto debido as said. Voli efectivamen te el obispo a Caricas; su aetitud constituia un éxito en aquellas El gobernador Gealer, ya en la capital, se avisté con Su Senora y por via concliatora se vino @ que el prelado levantara las penas fulminadas y la autridad civil suspendiera la aplicacion de ls con ddenas lanzadas contra el obispo, basta tanto que llegaran nuevas Sedenes © de la Audiencia o de la corte teal. Sin perder tiempo, “Tovar habla ya enviado a Madrid a st dein don Bartolomé Escoto, debidamente”facutado’@ instuido para actuar ea su nombre ¥ represeatacin. “En el fondo de est pleto lata otro que era au fundarmento y es cexpicacin: hemos notalo que en Caracas la elegante Babilonia del vieio, se habia dado el escandalauo incesto del heemano de alcalde con ia hetmana de entrambos. Ello tuvo sus salpicaduras hasta el Palacio del gobernador Fusnmayor, pues era complice eneubridora de Jos delincuentes su made, dota Elvira de Campos, sefora enco- petada de la aristcracia colonial caraquesa. El obispo no teparé fe nombres y apelidos; castigg a los infractoces y 2 dota Elvira la fendend a scr azotida en pablico. ¥ el deereto episcopal hubo de aplicarse. Pero no sin que apelaran loa incursos a la Audiencia de Santo Domingo ¥ a su matopolitano, representado, en sedevacante, por el provisor, acusando al obispo Tovar de usurpacién de facultades, in- {omisiones en juridiccin seglar sin demandar su ausilio, secves- tracion de bienes bicales, afrentas pUblicas, ete. Apoyaba, natural- ‘mente, esta apelacin el ex gobermador Fuenmayar, ala sazén pre- potente’en la isla diminicana. De donde resulto que la Audiencia $e inclinara favor de los apelantesy, lo mis inexplicable, ef propio provisor inhibiera a Tovar, privindolo de su derecho ordinario de fonocer en a eausa en primera instancia,y Heyara el provisot, sade ‘acante, a anular ls disposiciones plats, 3, Duelo Torar-Fuenmayor.—No eran ya muy amistosas lap flacionssen losdias del gobierno de Fuenmayor en Caracas entre mbes caberas,y minos desde quel 4 de enero del 643 ol goberaadoe ‘bo invto al preladoa la consulta que se ils a tener sobre guerra contra la piratorla. Mostrése, sin embargo, muy cortes exe dis el primer masistrado eando, pat Ch. Dikeeis de CoroCanscas 69 propia de un eclesistico, y suplicindole que fase el mismo obispo {llugar donde ve elebrasia In junta aquella tarde. Contests malhumorado el cbispo que, ante todo, no reconocia al tal eseribanoy y en cuanto a la cust ofvecia, mas conoeia €l de Armas, pues que sha visto mucho mis en un dia que quien Te envia texte road [Fucnmayor) todos los de su vidat; que estaba pronto a Syndr a esta republics desauiciada spor el mal gobiemno militar 4 politicos, que en st morada episcopal bien podia celebrars Ia con Sultade puerra, aunque aquella tarde tenia él que celebrar confirma iones inaplazables, por lo cual quiza,hablan Fjado tal fecha también para la sesicn, Respondié Fuenmayor que se avenia a los deseos det pretado yy que no hatia tmovimienta inmost al respecto de tan sagrada Aignidads. No fue poco que el lugarteniente regio adoptase esta pos- ura mesurada, pues recordabs, sin duda, que cuando pid levantar- ie Ta excomunign que lanes contra su persona, contest el prefado aque se a dé su madre, sque ya tena mitra, aludiendo a lt coraza ‘que le bablan posto eaando lo de los aztes. Pero ya liovian qusjas al rey sobre la conducta extrafa dl obispo vvenezolano: en noviembre del 643 Foenmayor pedia stemediox; 2 1646, Gedler y el Ayuntamiento declareban que wu asistencia alles de grandes peligros; el alcalde, que renuncie aque obispo». “Ante ests demetraciones, el 8 de junio dal 646, el Consejo, mien ‘ras encargaba al arzobispo dominicano no excediera de au derecho ¥ tratase con respeto a Tovar, el 29 de mayo del 653 el monarea de~ fermin6 el tradado de éste « Chiapa (Méico), y el 18 de octubre siguiente el mismo Tovar lo notificaba ofcalmente a su eabild y te entregabs la jurisdicein diocesina, que el cabildo hubo a bien de volyérmla al mismo hasta que abandonase el distrito, como lo hizo el siguiente ato 1654. "No se pisede desconocer la erudeza de procederess del obispo ‘Tovar, se nde airmar que ino anduvo my clara la justciay bene volencia del prelado para con sus enjuiciadose en el caso Geller, zs en cuanto alos procedimientes que en cuanto la sustancia de causa, en fs cual asistia toda la rz6n al prelado;ni que siempre reli i ou prudencia en sus tespuestas y acibudes, or otra parte, ila condita del elemento laic con el prelada se hace inexplicable, aunque no excusable, la dela minima autordad clerical dominicana te nos hace de todo punto injustifeableenvitud, urs, de st calidad de ordinario venezolano era al obispo Tovar a ‘Guien correspondia entender en el caso pilbicamente escandaloso ya referido, ya él apicar las eorrespondientes sanciones, sein Ia ‘entaldady eostumbres dela ¢poca. Si se sabrepass en algunas inci ddencias accidentalesy pevfércas, no quita ello el que obré dentro de su derecho en cuango @ la sustancialidad intrinsesa del seuntoy de ‘competencia eclesistica esencialmente. Y justa fue la conducta de Felipe IV al recordar al metzopalitano sus deberes, como 3¢ los ‘pA SSubyngg sa 2g erm. A Ani dS ai TT a02 PAL De Felipe Wa Calor Ve Pro las autotidades civiles se habian empeftado demasiado en la lid pora poder reurarse tn a los comionzos: el obispo, vendose asediado, opto por sali a caballo a dos leguas de Ia edad, pero rotificando que s6lo poe la fuerza tomaria un barco camino de et Aestireo; ato daclar6 deade l pueblo de Petre. "EL 19 de abril del 645 ordend el alealde el embargo de los bienes cepiscopales, ut desterra y-au entroga a la Real Audiencia, ‘Tovar Iegs hasta el pacreo de La Guairy ante su genta ae alboroté el pce bio, de forma que el alcalde creye més diplomatic invitar al prelado 1 rogtesar para dar el vespeto debido a su slida, Volvo fectivame tweet obispo Caracas; su aetitud conaitul un éxito en aquclse El goberradlor Gedler, ya en la capital, se avisté con Su Sotora, ¥y por via conciliatoia se avino a que el prelado levantara las penas Fulminadas y la autoridad civit suspendiera la aplicacin de las con ddenas lanzadas contra el obispo, hasta tanto que llegaran nuevas Grdones 0 de la Audiencia o de la corte real Sin perder tempo, ‘Tovar habia ya enviada a Madrid a su dein don Bartolome Escoto, debidamente facultado @ instuido para actuar en su nombre y representacion ‘En el fondo de este pleto lata otro que cra su fundamento y ex cexplcacién: hemos notado que en Caracas, la elegante Bubilona del ‘iti, ve habia dado el escandaloso incesto del hermano del alcalde ‘oon ia hermana de entrambos. Ello tuvo sus salpicaduras hasta el Fralacio del gobernador Fuenmayer, pues cra cémplice encubsidora Ue los dlincuentes su madre, dota Flvira de Campos, seiora enco- ppetada de la aristocrcia colonial caraquefs. El obispo no repaté fen nombges y apellidos; castig a los infractores ya don Evita [a ‘ondond 2 ser azotada en public. ¥ el deeseto episcopal hubo de aplicase, Pero no sin que apelaran los incursos a la Audiencia de Santo Domingo y a su metropolitano, representado, en sedevacante, por el provisr, acusando al obispo Tovar de usuepacicn de facultades, in {romisiones en juisdicidn seglar sin demandar su aunilio, secuce. tracign de bienes licals, afrentas pablics, te. Apoyaba, natura mente esta apelacin el ex gobernadoe Fuenmayor, a hx satin pre- potent en la ila dominieana, De donde resulta que Ta Avdiencia, ‘= inclinara a favor de os apelantes y, lo mas inexplicable, el propio provisorinhibiera a Tovar, privandolo de su derecho ordinatio de conocer en la causa en primera instanca, y Hegara el provisor, sede ‘vacant @anular las disposiciones preaticias. my 3, Duelo TovarFuenmayor—No eran ya muy amistonas las reaciones en los dias del gobierno ce Fuenmayor en Caracas entre ambas caberas, y menor desde quel 4 de enero de 643 el gobeenador no invité al prelado 2 a consulta que se iba @ tener sobre gucera Contra a pirtteria, Mostrése, sin embargo, muy cortes eve di el primer maigistrado cuando, para subsanar sy omisién, envig un escri- bbano al prelado, explicande su conducts por no ser Ia tal materia GA. Dikeeis de ConoCarscer 863 propia de un eclesistico, y suplicindole que fia el mismo obispo llugar donde se celebraria Ia junta aquella tarde, Contesté mathumorado el obispo que, ante todo, no reconocta al tal csribanos y en estan a la excustoftecida, mals conoea dl de armas, pues que sha visto mucho mis ea un dla que quien le envia tte recado (Fucnmayor] todos los de su vida»; que extaba pont syudar a esta repiblica desguiciada spor el mal gobierno militar ¥paiticos, ue en su morada episcopal bien pola celebrate I cons Sula de guerra, aunque aquela tarde tenia € que clebrar confirma clones inaplazables, por cual, quiza,bablan fjado tal fecha tambien pera la sein TRespondis Fuenmayor que se avenia a los descos del prelado ¥y que no urla smovimiento inmediato al respecto de tan sagrada Aignidadb. No fue poco que el Iugarteniente regio adoptase esta pose fa roesurada, pues recordata, sin duda, que cuando pid levatar~ Ta excomunion que lanz6 contra su persona, contesté el prelado due se la dé su made, sue ya tenia mitts, aludiendo 2 lt eorara ‘Que le habian puesto cuando lode los azote. ‘Pero ya lovian quejs al ey sobre Ia conduct extraia dl obispo vvenezolane: en noviembre del 643 Fusnmayor pedia sremedion, fen 1646, Godler y el Ayuintamiegta declaraban que «su ssstoncet allies de grandes peligro; el alealde, que renuncieaquel obispadon, ‘Ante estas demastraciones, ef 8 de junio del 646, el Consejo, mien: ‘as encargaba al arzabispo dominicano no exoediera de a derecho {ytatase con reapeto a Tovar, ol 29 de mayo del 653 el monarea de {ermind el trslado de éste a Chigpa (Mico), y el 18 de octubre siguiente el mismo Tovae lo notifieba ofcaimente a au cabo y le entcegaba lt jurisdiceion diocesina, que el cabo hubo a bien de Volvérsela al mismo hasta que abandonase el distrito, como lo hizo ‘el siguiente ato 1654 1 "No se puede desconocer Ia udeza de procederest del obispo ‘Tovar, se ade afirmar que sno anduva navy clara la justia y bene volencia del prelado para con sus enjuicados» en el caso Geller, ‘mis en cuanto alos procedimientes quo en cuanto ala eustancia dea ‘causa, en la cuzlasstia toda la razén al prelado; i que siempre Fela ‘i at prurdenciaen sus respuestas y acttudes, ‘Por ota pure, si la conduct del elemento Iaico on el pretado se hace inexplicable, aunque no excusable, la de Ts masdona atoridad ‘epeiones de a ley general, y cas siempre, con tondencia regis, tsubrayando los devechos de real patronato. ‘Tal se nota tepetidae ‘mente al tratarse de los regulates: mientras el sinodo tend a des ‘conocer sus prvilegioe de exencién de la autoridad episcopal, el ‘Consejo las pone de relieve en euanto facultades pontifictas concedi- das alos mendicantes por via del monarea catdlico 31 "EL Gde septiembre del referido ano 1687, terminada la lectura de las actasy cantado el Tedéum, predics el prelado Bats y Soto- ‘mayor, ¥ vuelto a palaci, todos los sinodales le dieton muchas grax clas a Su Seforia Hustrisima por haver celebrado Ia sinodo, que tanto we ha deseato en este cbispado para uv goviemno y régiment ®, Podia el celoso obispo caracense dedicarse ya a conclutt fa obra desu seminasio y a sembrar su mundo venezolano de obras pss, hase que el 13 de mayo de 1706 fllecié en su capital episcopal y prado descansat en la capilla citedeuicia de Nucstes Senora del P= polo, qe atin perdire st weneranda memoria. Habla terminado tame bien para la Iglesia venerolana su siglo x01, de sino positvo: crea cdo ya su seminario, dispeso el cleso en parroqulas en la zona ‘mis bien ltaral, mientras.en ef interioe la vid eclststca era de tipo fisional, celebrado su tercer sinodo divcesano, obra macstra de elo, discrecin y valentia apostdica, CAPITULO II ‘Vida misional ™ 1. Las Onpenes mastoxseas Como recuerdo de los primeros tempos dela Iglesia en el suelo ‘venezolano hemos registrado la presencia del dominico Bartolomé ‘de las Cantey de sub hermanos en foe dias de ls primerts experien~ as paciitas falas (p.22s). Aquel resltado, asesinados algunos A ta es ca dei a ep cn andi et a tn. eee EEA Wein cehierecmernaceee ee ‘aie y at, me bea canst mo se es debe beta an piven con gots b= op ope Coon po eG orca de toh eoyecelince ‘Enc tors tls beatoc vo ince i ho sede oo ea eras Sigsmrdnasr es By antsy grata Vike] pes Alcester ttl eu Rs din Pie ‘er src Wea te’ sg Mgt Cri ae i ana Pls ty Rules Se Ue pteon PAL, De Felipe Ha Carlen U—Venesnca dominicos, regremidos a Santo Domingo los franciscanos, devasta- ‘dis las smsiones erigidas en la costa de Chirivichi, que los prime- fos llanaron Santa Fe, y las fevantadas al margen del elo Cumand por los segundos (1521), abligaron a abandonar esta regiin hasta fgue Ta fuerza militar de los expedicionarios, ast Diego Castellon (Gs28), normalizaran la stuacion, construyendo fuertes como el de Nueva Condobs, fundamento del vill stual de Cuman, se acuio= taran los indigenas acomnodindose a ine vida paca y Iograran (certs estabilidad, con que se consiguid en 1585 consttuir un gobierno Independiente «las Grdones del eapitan Francisco Vides. its agricltura reglamentada y las salinas explotadas por Diego Fernindes de Serpa en 1570 dieron ala regign el aspecto de tiers. ‘conquisteda, pronta a la obre evangelizadora sistemaitia. Pero In tier se monfraba horsendaments hostl alos expedicionarios qu, fengafades con el fimoso Dorado, pretendian interrarse: en 1378, {2 francissanos acomparaban a los atrevidos hombres del oro ds: G: ln isla de Trinidad lag enfermedades tropicalesciezmaban las Fhvestes; lograban, con todo, en 1502 fundar un eonvento en Santo ‘Toms de: Guayana; une sgunda expodicion, en 1593, hiché por intemarse por el Orinoco en el Guayana; guerreando eon lo caibes ppenctraron hasta Angostara, donde exista un convento francitea: fo, pera sin lograr ni establecerse all ni adclantar, muchos volvie= roma Trinidad y algunos a Espana, ‘Sin embargo, estas primeras exploraciones no fueron insiles: Jos fransiscano® se diewoa a conocer & los aborigencs, ellos misoie se percataron de Ia importancia de extenderse por aquellae zonas J se crs en el sono de sus comunidades un vivo fervor misional us, en la segunda mitad dal xen y primoras ddeadas del ven, se ‘Concretarin en t3 misiones, desde Cumand hasta ef Una, 23'le- [puss de conta, do este a oeste, y desde la costa hasta el Orinoco, de Fore sur, con wn total de 16 pueblos reducidos y 14 en formacion, ‘Mientras tanto el conquistador Juan de Urpia (Orpin), en 1634, junto la desembocadura del Tuy, funda el pueblo de Santa Ma. a de Manapice; en 2637, al pie del cerro Santo, a una leyua de ‘Comanagoto,ceeaba el pueblo de Nueva Dareslona (en 1671 tras: ladato a mt actual ubieacion), y, posteriormente, a 17 leguas, otra tercera poblacién, Nueva Tatragona. Con ello se lograba que los Indios estuvieran mis eontrolados por el poder espaftol, mis dene dldor de las incursiones de los catibes los mismos blancos mig ‘dsciplinados por In peoximidad de las autoridades reales 1. En este mundo de transici iban a presentarse los grandes sisioneros venezolanes, los capuchines, dvigidos por un hombre ex Expciogal, fray Francisco de Pamplona. Figura digna de leyenda, don Tibreio de Red, Nacida en ls capital navars el tt de agost ge Ha fe iti ip Cerra Oe ‘Tow (Mite 9s 8 CavencAsoorh Anais de Gasyona (Chad Balen) ™ "seni dey Cobo Veto ac 0) $337 Mansi, 62. Vide mivonal sma to de 1597, hijo del barn de Bigiézabal, sehor de Redio, y do ddoaia Teabel Crtat, hija del setor de Ori} militar el futuro capue chino el 28 de marzo de 1617, guerred en Italia hasta la paz de Pavia; apitin de mar y guecrs, destinado en busca de las perlas de la isla Margarita; en 1624, caballero del habito de Santiago; ma- fino sin miedo, a las drdenes de dan Antonio de Oquendo, en fa farrera de Indias (1627); eapitin de mar y guerra en las fuchas contra fos francesese ingleses (1629); gobermador de Ia armada de (Catilufa (1635); macsere de campo contra la iovasi6n frances [Navarra (1636); general de la primera flota do Tierra Firms (1637): vallents, ircundo, arrojado, mujeriogo y asesino, franc, lal, ge= neroso y desinteresado, ef 26 de julio del 637, sin saber por qué, ‘omaba ef habito exspuchino en el convento de Tarazona, asus us” renta aftos de edad. Ya fay Francisco, lego capuchin, necesitaba anchos horizontes pra desfoyar su desticada personalidad. Gracias a una ascesis fuer- {e, aauella su alma tremenda iba moldedndese, aunque con difcul- {ad as nueva vide prende dramticamenteen su pacologia avent~ rer la idea misional cuando precisamente en el Seno de la Orden fe wiven con intensdad los ideals misioneros, puss desde el princ pio de nt profsion aspiro con ansia ef mario y, para sutsacer ‘Ste anhelo, puso por bea telos Tos modios lito rocurador de las misiones entre la joven Congreyaciin de Pro- paginda Fide y la corte de Madrid (1644), ogra disipar cuantas Aifculedes = levantan para ir al Congo fa primera expedicion ci- pushin, sprineipl fundador y promotor de la mision cel Congo, friciat «I inflaencia de que goza ante el Rey Catlics, segin de: claraba la citada Gongregacién; ilegs al puerto de Pinda en ol ‘Congo el 2¢ de mayo de 1645, de dande regresd Europa para informar a Roma y Madrid. Dediease en Europa a organizar las mnisianes de su Orden, dos en Aftica y dos en América (1646). Pate después para Darin (1647), mision lograda tras largos force- feos cond Cojo de Tad enuets ate maces Ondees fn el suelo ultramarino 3, De nuevo en Madsid, el infatiguble onganizador (1649) gestiona ‘otra expodicion capuchina 4 las Indias, esta vex eumbo alas Antils, ‘conctetamente para la isla de Granada, conocida para fray) Fran ‘son de cuando eta marino, En junio’ del 650 Ueyaban ly os ‘suyoe a a isla, pero estaba ocupada por lon feuocses de alli hubie- fon de dirgitse a Ja Margarts, donde ef gobernador les sugiie [a ‘des de prolongar el viaje 2 In ropion de Comang, y, con lx venia dda obispo de Pucrto Rico, a cuya jurisdiccon pertenecia esta zona, aribaron a ella en julio del dicho ato. Aloe pocos dla, el 23 dal miamo mss, fay Francisco, sabiendo ‘que tenia licencia para domiciiarse dnicamente en la isla de Gra 2 Gime B oe Camara Fy mc Pros, in ey mpg te aaa pat ote a SSSI grt Stn opp co ea de