Variaciones sobre una hiptesis, 2: trazar este camino ser borrarlo, borrar trazas de caminos borrados se parece a dibujarlos

en otras manos, en tus manos, nia; hay caminos por los que no has caminado, borradas sus huellas, quedas t, como la nica prueba de que s, de que hubo un camino que no se borr hasta que otros te llevaron a otras sendas sin ms retorno que este ir recuperndolos desde la memoria de lo que se recuerda a s mismo en uno mismo, experiencia extraa que traza lo borrado en libros de pginas blancas donde un escritor que ordena piezas perdidas de un rompecabezas inexistente casi escruta detenidamente el prodigio de este aparecer tuyo en medio de tantas certezas con tu aire de duda acerca de todo, nia, sutil silueta en esta marcha sin siluetas por calles sin senda, por caminos sin huellas; t, quin sabe donde estars apilando pruebas de que en algo tenas razn; algo as como una msica silente, deslizando sbita la consumacin de su estricto orden: no hay que trazar demasiadas lneas en la arena que rodea la fortaleza, demasiadas lneas no ilustran, borran lo claro, hacen demasiado riesgoso toda cobarda; siete cobardas no bastan para recorrer el vasto territorio que se extiende, sombra errante, entre tus evidencias acumuladas y estas torpes elucubraciones que se desparraman en mi mesa mientras comensales silenciosos esperan una eleccin que no puedo terminar de hacer; sus ojos esperan alguna seal, algn gesto de complicidad que ignoro: lentamente, voy borrando sus rasgos, nada quedar de lo hecho, ni siquiera esta cobarde letra detrs de tu nombre y del mo no presagiando nada: nada ser demostrado, en consecuencia, las causas quedarn debidamente archivadas dirs y me ir silbando bajito como quien no guarda para s ms que la huella de algo que se ha ido