Professional Documents
Culture Documents
todo el tiempo
¿Cuáles son esos rasgos y cualidades que generan sentimientos de amistad y agrado
en una persona? En sólo un minuto, usted descubrirá que no son esquivos en
absoluto. De hecho, pueden reducirse a una sencilla fórmula que lo ayudará a
desarrollar una química natural con todo el mundo.
El hecho es que una persona nos gusta o nos desagrada debido a una estricta serie
de procesos en su mayor parte inconscientes. No ocurre por casualidad. Pero que
seamos inconscientes de los procesos hace parecer como si ocurrieran sin ton ni son.
Nada más lejos de la verdad. A continuación presento una lista y una explicación
completa de las nueve reglas y fenómenos psicológicos que afectan, influyen e incluso
alteran la opinión que tenemos de alguien, de modo que usted pueda lograr gustarle a
cualquier persona.
Tenga en cuenta también que las investigaciones han demostrado que el hecho de
que nos guste una persona puede afectar nuestra opinión sobre su atractivo físico y
que también tendemos a que nos agrade más alguien a quien encontramos atractivo.
Así pues, este capítulo y el siguiente van de la mano y pueden usarse como partes de
una estrategia completa.
1. LA LEY DE LA ASOCIACIÓN
La ley de la asociación se trata con más detalle a lo largo de esta libro, pero tiene una
aplicación muy específica aquí. En resumen, cuando usted se relaciona con estímulos
placenteros, las personas empezarán a asociarlo con ese sentimiento. Varios estudios
han llegado a la conclusión de que si, por ejemplo, usted estuviera planeando sus
vacaciones, asociaría esa sensación placentera con cualquiera que estuviera cerca de
usted en ese momento, y por consiguiente le gustaría más esa persona. Por otra
parte, la investigación también demuestra que cuando usted tiene dolor de estómago,
por ejemplo, las personas a su alrededor se convierten en víctimas inconscientes de
las circunstancias y usted tiende a quererlos menos. Por supuesto, hay más en la
simpatía que la asociación de estímulos agradables con una persona, pero ésta puede
generar sentimientos fuertes, buenos o malos, hacia usted.
Punto de apoyo
A veces es fácil saber si una persona está de buen humor. Pero si no está seguro,
mírela a la cara.
Si está de buen humor probablemente lo saludará con una sonrisa amplia, con los ojos
bien abiertos. Si lo saluda con una sonrisa de labios para afuera, es una forma de
cortesía solamente y generalmente significa que la persona no está de buen humor.
El contacto visual es un indicador muy fuerte del humor. Cuando estamos de buen
humor tendemos a hacer contacto visual directo. Por el contrario, cuando estamos de
mal humor tendemos a esquivar la mirada de la persona con la que estamos hablando.
Así que si quiere gustarle a alguien trate de hablarle cuando esté de buen humor o
entusiasmado con algo. Esas sensaciones se asociarán con usted y la persona tendrá
sentimientos positivos hacia usted.
2. ExposICIóN REPETIDA
El viejo adagio la mucha confianza es causa del menosprecio" suele aceptarse, pero
curiosamente, no es cierto. En realidad ocurre lo contrario. Numerosos estudios han
llegado a la conclusión de que cuanto más interactúe usted con alguien, más
agradable le resultará a esa persona.
Por el solo hecho de estar cerca más a menudo, usted "crecerá" en esa persona. A
veces cometemos el error de tratar de ser misteriosos, lejanos o inasequibles para
alguien, pero al hacer eso disminuimos el número de nuestras interacciones. Los
estudios concluyen que tendemos a sentir más agrado por las personas que están
Físicamente más cerca de nosotros y nos hacemos amigos de ellas más fácilmente,
por ese nivel mayor de interacción. (A propósito, no debe preocuparse por aplicar la
ley de la escasez, a menos que desee que esa persona se sienta atraída por usted.
Esto debido a que la simpatía sigue un paradigma diferente al de la atracción.
Aprenderemos más sobre esta ley en esta sección.)
3. AFECTO RECÍPROCO
Punto de apoyo
4. SEMEJANZAS
No es cierto que los contrarios se atraigan. De hecho nos gustan más las personas
que son parecidas a nosotros y que tienen intereses similares. Puede que
encontremos interesante a alguien por lo diferente que es de nosotros, pero lo que
genera simpatías mutuas son las semejanzas y los puntos comunes. Lo semejante se
atrae. Cuando usted hable con esa persona, hable sobre lo que los dos disfrutan y lo
que tienen en común.
Parecido a esta ley es el principio de los "compañeros de armas". Las personas que
pasan juntas por situaciones determinantes tienden a crear un vínculo muy estrecho.
Por ejemplo, los soldados en batalla o los estudiantes que reciben una novatada juntos
tienden a desarrollar amistades fuertes. El vínculo que se crea puede ser fuerte
también aunque la experiencia no se haya compartido, si ésta ha sido similar. Por eso
dos personas que no se conocían, pero que han tenido experiencias anteriores
similares sea una enfermedad o haber ganado la lotería pueden hacerse amigos de
inmediato. Es la sensación de que "me comprende" la que genera esos sentimientos
cálidos por alguien que ha tenido la misma experiencia. Todo se reduce al hecho de
que queremos ser comprendidos y esa experiencia probablemente ha ayudado a
formar la personalidad actual de esa persona; por lo tanto "conoce y entiende" de que
se trata el asunto.
Lo que una persona siente por usted está determinado en gran medida por la forma en
que la hace sentir sobre sí misma. Usted puede pasarse todo el día tratando de
agradarle y de que piense bien de usted, pero lo que es determinante es cómo la hace
sentir cuando está con usted. ¿Se ha dado cuenta de lo agradable que es estar cerca
de alguien que es atento y sinceramente amable y cálido? Por el contrario, ¿ha
pensado en lo fastidioso que es pasar cinco minutos con una persona que siempre
encuentra errores en todo y en todos? Esa gente parece agotarnos la energía. Ser la
persona que hace sentir bien a los demás ayudará en gran medida a que lo
encuentren agradable.
6. EmPATiA
Hacer coincidir la postura y los movimientos. Por ejemplo, si alguien tiene una mano
en el bolsillo, haga lo mismo. Si hace un gesto con la mano, un poco después y sin ser
obvio, haga casualmente el mismo gesto.
Hacer coincidir el lenguaje. Trate de hablar al mismo ritmo que la otra persona. Si la
persona está hablando en un tono lento y relajado, haga usted lo mismo. Si está
hablando rápidamente, empiece a hablar más de prisa.
7. AYUDAR
Los estudios sobre la naturaleza humana muestran que nos desagrada más una
persona después de haberle hecho daño. Fíjese que no dije que hacemos daño a
aquellos que nos desagradan, aunque esto puede ser cierto. El punto aquí es que
cuando le hacernos daño a alguien, a propósito o por accidente, nos sentimos
inclinados inconscientemente a sentir desagrado por esa persona. Esto en un intento
de reducir la disonancia. (La teoría de la disonancia cognitiva, como se aplica aquí,
establece que nos sentimos incómodos cuando hacemos algo que es inconsistente
con la imagen que tenemos de nosotros mismos. Por lo tanto, para reducir este
conflicto interior, racionalizamos nuestras acciones para seguir siendo consistentes
con nuestra autopercepción.) El conflicto interno es: "¿Por qué le hice eso a esta
persona?" Entonces la racionalización es: "Debe ser porque en realidad no me cae
bien y se lo merece. De lo contrario yo sería una persona mala o desconsiderada y
eso no puede ser". También funciona en el sentido contrario. Nos gusta mas una
persona después de haber hecho algo bueno por ella. Si le hacemos un favor a
alguien es más probable que tengamos sentimientos positivos hacia esa persona
después.
Si usted logra que una persona le haga un pequeño favor, esto le generará
sentimientos amables y cálidos hacia usted. A menudo, en nuestro afán de gustarle a
alguien, cometemos el error de hacer cosas agradables por esa persona. Y aunque
ella pueda agradecer su amabilidad y pensar que usted es una persona agradable,
esto no hará que lo estime más, aunque lo perciba como más estimable. Lo que usted
quiere es que ella tenga buenos sentimientos hacia usted, no simplemente que crea
que usted es una persona amable. Esto se logra gracias a lo que ella haga por usted,
no a lo que usted haga por ella.
8. SER HUMANO
Ver a alguien que usted admira hacer algo estúpido o torpe hará que le guste aún más
(Aronson, Willerman y Floyd,1966). En contra de la creencia popular, ser una figura
perfecta y confiable no producirá el resultado deseado, es decir que rara vez lleva a
que usted guste más y a que tengan una mejor opinión de usted. Cuando quiera que lo
vean como más estimable, haga algo embarazoso y ríase de sí mismo. No trate de
ignorarlo o aparentar que no ocurrió. Burlarse de uno mismo es una forma
extraordinaria de congraciarse con cualquier persona.
Cuando usted muestra a los demás que no se toma muy en serio los hace sentirse
más cercanos a usted y querer estar con usted. A nadie le gusta un pretencioso o una
persona que está tan preocupada por sí misma y su imagen que necesita aparentar
que es perfecta. Tienden a gustarnos y atraernos aquellos que no son tan egoístas y
centrados en sí mismos. Mostrar que es capaz de reírse de usted mismo lo hace
infinitamente más asequible y agradable. Esto generalmente va en contra de lo que
creemos que deberíamos hacer. En nuestro intento de parecer tan "buenos" e
"importantes" los demás nos perciben como alguien que se toma demasiado en serio y
ese aire de "falsa confianza" puede ser muy poco favorecedor.
9. ACTITUD POSITIVA
Tal como hemos dicho antes, nos gusta la gente que se nos parece. Pero hay una
excepción a esta regla. Nadie quiere estar cerca de una persona malhumorada,
quejumbrosa y pesimista. Todos buscamos, admiramos y sentimos agrado por
aquellos que tienen una visión optimista y alegre de la vida. ¿Por qué? Porque eso es
lo que todos queremos. Y ver ese ánimo deseable en los demás nos hace quererlos
más. Puede que usted conozca a alguien (incluso usted mismo) que encuentra
molestos a los que se despiertan con una sonrisa y de buen humor. Sin embargo es un
hecho que en cierto nivel nos sentimos atraídos hacia esta actitud y este tipo de
persona. Piense en las personas que conoce que definitivamente no soporta tratar. Es
muy probable que estén siempre quejándose de algo, siempre molestas con alguien,
encontrando siempre faltas a todo. Como la confianza, una actitud positiva hacia la
vida lo ayudará a convertirse en un súper imán de gente y también logrará gustarle a
cualquier persona.
Repaso de la estrategia
Trate a la persona lo más que pueda, porque la familiaridad hace crecer el afecto, no
el fastidio.
Cuando hable con ella trate de hacerlo cuando esté de buen humor para aplicar la ley
de la asociación. Hable de experiencias o intereses comunes y trate de escuchar más
y hablar menos.
Aplique la ley del afecto recíproco: si usted respeta o admira a esa persona, asegúrese
de que ella lo sepa.
Permita que la persona le haga algún pequeño favor, pero asegúrese de que no lo
hace por obligación. Esto crea una motivación inconsciente a agradarle más.
Nos sentimos inclinados hacia las personas seguras. Muestre su confianza riéndose
de usted mismo y no tomándose demasiado en serio.
Haga que los demás se sientan bien consigo mismos. Sea atento y amable y cálido de
corazón.
Tenga una actitud mental positiva. Nos sentimos atraídos hacia las personas
apasionadas y felices de estar vivas.
Si usted quiere atraer a alguien, use las técnicas del capítulo anterior y después pase
a las de éste para lograr un mayor éxito. Numerosos estudios y también la vida diaria
nos muestran que cuanto mas nos gusta alguien más tendemos a encontrarlo
atractivo. Aunque las tácticas que se tratan a continuación están diseñadas
especialmente para cuando existe un interés romántico, debo advertirle que raramente
encontramos atractivas a las personas que no nos gustan. Así pues, incluya en su plan
las tácticas del capítulo anterior para tener una estrategia global a toda prueba.
1. EXITACIÓN EMOCIONAL
Esta táctica le conseguirá más citas que cualquier peinado, vestido o empleo
importante. Una de las bases de la conducta humana consiste en que cuando nuestro
cuerpo produce adrenalina, emergen sentimientos de atracción y deseo sexual . La
adrenalina, producida en cualquier estado de excitación miedo, entusiamo, ejercicio, o
cualquier otro genera e intensifica sentimientos apasionados (esto presupone que la
atracción existe de alguna forma, a cierto nivel).
Siempre que una persona esté excitada, ya sea por una película de terror, la montaña
rusa o incluso por el ejercicio físico, su excitación en parte será atribuida a la persona
que esté con ella. En efecto, hay una transferencia en la que la excitación que se
siente se traduce inconscientemente en deseo y excitación sexual. La próxima vez que
conozca una pareja que parezca no encajar pregunte dónde se conocieron. Es muy
probable que ocurriera en circunstancias en las que la excitación era grande... quizás
en el gimnasio o mientras uno de los dos (el más atractivo físicamente) estaba
preocupado, nervioso o excitado por algún motivo.
Punto de apoyo
Por esta misma razón los psicólogos están preocupándose cada vez más por la
tendencia en videojuegos, cine y televisión a asociar la violencia con el sexo. El unir
estos dos estímulos la satisfacción sexual y la violencia puede producir excitación
debida a la violencia y aumentar las tendencias agresivas en los encuentros sexuales.
2. FORMA DE CAMINAR
Punto de apoyo
Hay varias teorías populares sobre por qué nos sentimos atraídos por la juventud. La
más aceptada dice que se debe a un instinto biológico heredado de nuestros
ancestros. Las mujeres que tienen rasgos juveniles probablemente están en edad de
reproducirse, lo cual es un estado deseable para los hombres. Los hombres jóvenes
son percibidos como más viriles y considerados por las mujeres como buenos
protectores y proveedores, tanto para ellas como para sus hijos.
¿Sabía que mirar a los ojos a una persona puede hacerla enamorarse de usted? Esta
es la conclusión de numerosos estudios sobre la atracción y el amor romántico. En un
experimento en particular, se les pidió a dos desconocidos de sexo contrario que se
miraran a los ojos durante dos minutos. Este estudio concluyó que e¡ simple hecho de
mirarse a los ojos por unos momentos es suficiente para pro producir sentimientos
apasionados mutuos (Kellerman, Lesvis y Laird, 1989).
Use esta táctica cuando tenga una conversación con la persona en cuestión, mírela
directamente a los ojos mientras habla y escucha. La mayor parte del tiempo miramos
a la cara de la persona durante la conversación o distraemos nuestra mirada. Al
mirarla a los ojos mientras le habla, pone en marcha este fenómeno psicológico sin ser
obvio.
Generalmente no juzgamos a una persona por sí misma sino en contraste con los
otros. Esto se intensifica cuando vemos a alguien por primera vez. Vemos sus
atributos fisicos y los juzgamos en comparación con las personas que lo acompañan.
Se han hecho muchos estudios en este campo, incluyendo algunos que confirman que
los hombres que han estado viendo modelos en vestido de baño encuentran a las
otras mujeres e incluso a sus esposas menos atractivas.
De ahí uno de los mayores errores que cometemos. Antes de que alguien tenga la
oportunidad de conocer su verdadero ser y de ser influenciado por otras tácticas, lo
primero que juzga de usted es su belleza física. Así que ponga la suerte de su parte.
Nunca, repito, nunca se muestre en compañía de personas más atractivas que usted
(de su mismo sexo) cuando quiera que alguien se interese en usted.
Cuando se encuentre por primera vez con la persona en la que está interesado, trate
también de no estar con personas terriblemente feas, de ambos sexos. Esto se debe a
la ley de la asociación, que plantea que tendemos a ver un grupo como un todo y no
los individuos.
Por lo tanto, repito, la mejor forma de acercamiento es estar solo o con una persona
atractiva del sexo opuesto. Esto le dará la oportunidad de usar sus otras tácticas sin
distracción. (La razón por la que usted puede estar con una persona atractiva del sexo
opuesto es que la ley de la asociación prevalece sobre la ley del contraste cuando los
miembros del grupo tienen más diferencias que similitudes. En otras palabras, su
atractivo se realza por esa persona porque los dos son vistos como una unidad".)
5. AUTOESTIMA Y ATRACCIÓN
Ésta es una táctica que debe usar si su belleza es limitada, puesto que le permitirá que
lo vean mucho más atractivo de lo que parecería en otras circunstancias.
Un estudio de Elaine Waltser Hatfield mostró que cuando una mujer conoce a un
hombre, lo encontrará más atractivo si su autoestima ha sido herida recientemente,
que si ésta no ha sido dañada (Walster Hatfield, 1965). Aunque usted no quiere hacer
que alguien se sienta mal consigo mismo, si se da cuenta de que esa persona ha sido
rechazada recientemente, debe saber que usted le parecerá más atractivo que si su
autoestima estuviera en un punto alto. Esta ley es la causante del "efecto despecho^
por el que una persona se involucra rápidamente en una relación después de terminar
otra, generalmente con alguien con quien no lo hubiera hecho en "condiciones
normales".
Otra forma de llamar su atención es acercársele cuando esté con personas más
atractivas que ella. Los estudios concluyen que cuando estamos con gente que
creemos más atractiva que nosotros, tendemos a ser menos seguros de nosotros
mismos y de nuestra apariencia. Insisto, cuando nuestra autoestima sufre, tendemos a
ver a los demás más atractivos.
Así pues, cuando la persona no se sienta tan bien consigo misma, sea amistoso y
coqueto. Sin embargo le advierto que existe una ley de la naturaleza humana que
establece que queremos lo que no podemos tener y nos gusta más lo que nos cuesta
trabajo. Así que evite que esta ley lo perjudique tratando de no ser demasiado obvio.
Muéstrese interesado y atento, pero no en exceso. Este aspecto se tratará con más
amplitud más adelante en esta sección, cuando hablemos específicamente sobre las
relaciones y la forma de tener siempre el control.
6. GUSTO MUTUO
Hablamos de esto en el capítulo anterior pero se incluye aquí porque esta ley también
nos afecta en el plano sentimental. Numerosos estudios han demostrado que cuando
descubrimos que alguien que nos gusta nos encuentra atractivos, se despiertan
sentimientos románticos en nosotros. No sólo nos gustan las personas a quienes
gustamos sino que también nos sentimos más atraídos por ellas una vez que nos
enteramos de que se sienten atraídas por nosotros. Esto se debe a que un aspecto
fundamental de los sentimientos apasionados es la esperanza. Si una persona no
tiene ningún interés en nosotros podemos encontrarla atractiva, pero no
desarrollaremos una atracción y un deseo real e intenso. La esperanza prepara el
camino para sentimientos románticos más fuertes e intensos. Y descubrir que le
gustamos a alguien nos da la esperanza de que sea posible una relación e intensifica
nuestros sentimientos hacia él o ella.
Repaso de la estrategia
Realice alguna actividad en que la excitación emocional sea alta con la persona en la
que está interesado.
Encontramos a los demás más atractivos cuando nos sentimos menos seguros de
nosotros mismos. Acercarse a la persona que le interesa cuando ella se siente
insegura lo hará parecer más atractivo.
Repase las técnicas del capítulo 1. Entonces, una vez la relación empiece a marchar
asegúrese de seguir las técnicas del capítulo 5 para mantener la pasión. Pero antes de
hacerlo, no olvide que si todavía no se conocen, usted querrá causar la mejor
impresión posible. Así que pasemos al capítulo 3, que le proporciona más técnicas
psicológicas para completar su estrategia.
La táctica número uno para crear una primera impresión favorable es la más fácil:
¡Sonría! La sonrisa logra cuatro cosas poderosas: comunica confianza, felicidad y
entusiasmo, y lo más importante, demuestra aceptación. La gente que sonríe se
percibe como segura porque cuando estamos nerviosos o inseguros de nosotros o de
lo que nos rodea tendemos a no sonreír. Sonreír, por supuesto, transmite felicidad y
nos sentimos atraídos hacia la gente feliz, simplemente los vemos en forma más
favorable. El entusiasmo es esencial para causar una buena impresión porque es
contagioso. Su sonrisa demuestra que usted está contento de estar donde está y de
conocer a esa persona y ella a su vez se interesa más en conocerlo a usted.
Finalmente, la sonrisa transmite aceptación y permite que la otra persona sepa que
usted lo acepta incondicionalmente. ¿Alguna vez se ha preguntado por qué los perros
son tan encantadores? Porque nos saludan con aceptación completa. Si usted tiene
cola, menéela. Si no, sonría. Por supuesto, se necesita más para asegurar una buena
primera impresión, así que continuemos.
Con relación a las primeras impresiones hay algo llamado el efecto de la primacía:
proceso por el cual nuestra primera impresión de una persona hace que interpretemos
su conducta posterior de acuerdo con ésta. En palabras simples, esto significa que
nuestra primera impresión de alguien es tan crucial que todo lo que vemos y oímos
después pasa por el filtro de nuestra opinión inicial. En efecto, uno crea una imagen de
la persona en el momento que la conoce y luego ve sus conductas posteriores a través
de esa imagen. Así que si la primera impresión de usted es favorable, la persona
tenderá a ser más benévolo en sus evaluaciones futuras de usted.
En el estudio hecho por Harold Kelley (1950), los estudiantes que leyeron la
descripción de un conferencista invitado en la lista a tuvieron una percepción más
desagradable de él que los que leyeron la lista b. Como puede ver, los adjetivos son
iguales, excepto el primero. Una vez que leemos la primera cualidad todas las demás
son filtradas por nuestra percepción inicial de esa persona: que es cálida o fría.
Haga que el momento inicial sea el mejor posible y el resto de su conversación será
filtrado por éste, creando de esta manera una impresión muy favorable. Insisto, esa es
la razón por la que sonreír es tan importante. Lo puede hacer de inmediato y dice
mucho de usted, todo positivo.
Otro factor que puede influenciar poderosamente cómo somos percibidos por primera
vez consiste en la accesibilidad y la preparación. Se ha demostrado claramente que la
facilidad con la cual podemos recordar ciertos pensamientos e ideas influye en nuestra
percepción.
En un estudio que demuestra justamente esto (Higgins, Rholes y Jones, 1977), los
participantes que memorizaron las palabras desconsiderado, presumido, distante y
testarudo, después tuvieron impresiones negativas de la persona ficticia. La veían
como una persona arrogante y que se arriesgaba peligrosamente sin necesidad. Sin
embargo, los que memorizaron primero las palabras seguro de sí mismo,
independiente y constante, después tuvieron impresiones positivas. Esto se debe a
que estas palabras y sus significados correspondientes lo que representan estaban en
primer lugar en sus mentes y eso influyó en su percepción de la persona a la que
"conocieron" por primera vez. Aunque estas palabras no tenían nada que ver con la
persona, esas cualidades eran "de fácil acceso" en su mente, por lo tanto atribuyeron
inconscientemente esos rasgos a la persona que conocieron entonces.
Así pues, si usted quiere causarle una buena impresión a alguien, sería beneficioso
que esa persona hubiera estado expuesta recientemente a palabras positivas. Si usted
busca empleo, utilice en su hoja de vida adjetivos positivos (por ejemplo, confiable,
enérgico, eficaz, con capacidad de decisión, entusiasta, recursivo). En lugar de decir
solamente quién es usted y qué es capaz de hacer, use lenguaje enfático, específico y
positivo para expresar con exactitud sus talentos y capacidades. Así cuando lo
entrevisten, poco después de leer su hoja de vida, estos rasgos estarán ya fijados por
asociación con usted. (Para otra aplicación interesante del poder del lenguaje, vea el
capítulo 26.)
Punto de apoyo
Uno de los mayores errores que cometen los abogados defensores es poner a su
cliente en el estrado cuando los detalles de¡ crimen están aún "frescos" y son
fácilmente recordables por el jurado. La mejor táctica es llevar al estrado a un testigo
que use lenguaje positivo y que dé confianza justo antes de llevar a su cliente a
declarar.
Tanto en situaciones personales como de negocios usted debe abonar el terreno antes
de ser presentado. Hacer que un socio de ventas o su asistente le hable a su cliente
potencial de unas vacaciones recientes o le cuente una historia con lenguaje positivo y
alegre, puede ser muy efectivo antes de su presentación. Por ejemplo, podría usar
frases como: "hermosa vista, me siento completamente en paz y con una gran
sensación de calma y seguridad". Así pondrá estos temas directamente en la mente de
su cliente potencial.
Las situaciones personales ofrecen más retos puesto que introducir a un tercero no
siempre es práctico. Una forma de resolver esto es que usted mismo use esas
palabras al comienzo de la conversación. A pesar de que así no obtiene el beneficio
del efecto de la primacía, traerá a colación el factor de la asociación, que se trató en el
capitulo 1. Estas palabras se mezclarán con usted y serán inconscientemente
asociadas a usted.
Punto de apoyo
¿Quién dice que usted no puede tener una segunda oportunidad para causar una
buena impresión? Si usted hizo algo increíblemente inadecuado o estúpido, no trate de
defender su conducta. Sólo una cosa funcionará, la frase: "Me siento tan
avergonzado..." ¿Por qué? Porque esta simple frase logra tres cosas muy importantes.
Primero, muestra que usted sabe que lo que hizo era inaceptable, lo que significa que
no es probable que vuelva a hacerlo. Segundo, muestra que usted es humano y a la
gente le gustamos más cuando reconocemos que hicimos algo estúpido o embarazoso
y nos hacemos responsables de ello. Tercero, muestra honestidad completa, y ¿quién
no quiere tratar con una persona honesta?
Repaso de la estrategia
Aproveche el efecto de la primacía y haga que el momento inicial, y los primeros cinco
minutos, más o menos, sean extraordinarios, y así el resto de su conversación será
filtrado a través de ese momento, creando por lo tanto una impresión muy favorable.
Usted odia los juegos, lo sé. Pero los está jugando de todas maneras, así que es
mejor ganar. Tanto en los negocios como en lo personal las reglas para tener el control
en cualquier relación son las mismas.
Cuando se trata de citas, ¿se ha preguntado por qué parece que no puede librarse de
las personas que no le gustan y las que realmente le gustan nunca se quedan? La
razón es simple. No es la persona sino la forma como usted actúa frente a ella.
Esto ocurre porque como seres humanos siempre somos guiados y regidos por la
naturaleza humana. Lo fundamental es que no es la persona con la que está saliendo
sino lo que usted está haciendo lo que determina su nivel de interés. De lo contrario
sería una coincidencia sorprendente, si no una improbabilidad estadística, que
precisamente todas las personas que le gustan "no quieran un compromiso" y aquellos
en los que usted no está interesado quieran casarse con usted. Así que si no es usted
su aspecto, su personalidad, su educación, etcétera debe ser su comportamiento con
esa persona lo que determina la dirección y, en últimas, el resultado de la relación.
Esta simple pero poderosa estrategia puede resumirse en una oración: Usted debe
comportarse con la persona que no le gusta de la forma que se ha comportado con la
que le gusta y viceversa. Aunque hay muchos pequeños aspectos en la conducta de
cada uno, hay cuatro factores fundamentales, que se tratan a continuación.
DiSPONIBILIDAD
¡Pero espere! En el capítulo 1, dijimos que si usted quiere gustarle a alguien debe
estar disponible porque eso aumenta el gusto. Si es así, ¿no contradice esto la ley de
la escasez? Aquí está lo que se interpreta mal a menudo. Si usted quiere gustarle a
alguien, debe estar ciertamente en su compañía a menudo. Eso es verdad, pero
recuerde que el agrado es el cimiento de toda relación. Eso significa que una vez que
sobrepase la etapa del agrado (es decir, que a la persona ya le gusta usted) y la
relación se desarrolla hacia algo más serio, usted debe limitar su disponibilidad.
Punto de apoyo
Una pregunta. ¿No vemos a menudo a personas bellas con compañeros atractivos y
viceversa? Si la atracción tiene poco que ver con la apariencia ¿por qué ocurre esto?
Se debe a que a menudo nos sentimos más cómodos con quienes tienen un nivel de
atractivo parecido al nuestro. (Esto coincide con los estudios que muestran que las
personas generalmente son amigas de los que tienen niveles similares de atractivo.)
Una persona bonita a veces puede hacer sentir incómoda a una menos atractiva. Así
pues, esa persona menos atractiva tiende a perder perspectiva y a actuar en forma
diferente, es decir, pone a la otra en un pedestal y hace las cuatro cosas señaladas en
este capítulo que no debería hacer. Pero son las cosas que hace no ella, la persona
física lo que causa la diferencia. Esto se valida por el hecho de que a veces las
personas atractivas están con personas menos atractivas. En esas relaciones es
probable que la persona menos atractiva se sienta segura de la relación y por lo tanto
actúe diferente de otros en la misma circunstancia. (Esta "confianza" se repite aquí
cuando aplicarnos los cuatro factores para ganar fuerza en la relación.)
PERSPECTIVA
PASIóN
Este es el punto crucial de por qué y cómo las relaciones funcionan o fallan.
Simplemente uno no aprecia lo que da por hecho. Esa es esencialmente la razón por
la que la gente, en general, es infeliz. Siempre quiere más, pero nunca está
agradecida por lo que tiene. Y si no está agradecida empieza a dar todo por hecho. Y
cuando hacemos eso, dejamos de apreciarlo. Y cuando no apreciamos algo, no lo
disfrutamos.
Nuestra gratitud se apoya en recordar que no debemos dar las cosas que tenemos por
sentadas. Usted no da por hecho lo que cree que le pueden quitar en cualquier
momento. Del mismo modo, si la persona a la que quiere está un poco insegura de la
relación es decir, hay un elemento de duda su falta de seguridad evitará conducirla a la
arrogancia y la ingratitud. Usted debe crear un elemento de inseguridad o perderá la
pasión que impulsa la relación.
Punto de apoyo
Puesto que es posible perder a alguien en cualquier momento por accidente, por
enfermedad ¿Por qué tenemos que crear más duda? Si usted está enamorado, no
tiene que hacerlo. Esto es para los que no están todavía en esta etapa, para los que
creamos artificial y temporalmente la misma "atmósfera" de inseguridad.
Insisto, sin alguna duda existe la sensación de que "usted siempre estará ahí".
Entonces la persona involucrada ya no ve lo extraordinario que es usted y deja de
apreciarlo. Empieza a darlo por sentado y la pasión muere. Pero en su relación, usted
puede volver a encender la pasión en un segundo y reavivarla introduciendo un
elemento de duda. La pasión se extingue cuando hay certeza de que a usted puede
dárselo por seguro. Igual que en el ejemplo anterior del médico: usted nunca se
preocupó por su oído hasta que pensó que podría perderlo. ¡Cuando se introduce la
duda en la ecuación ésta cambia la perspectiva! No puedo enfatizar esto lo suficiente:
Si todos los elementos de duda se suprimen, a usted se le dará por sentado y no será
apreciado y la pasión desaparecerá.
Desafortunadamente, cuando estamos inseguros de una relación la dañamos aún más
siendo insistentes porque necesitamos reafirmarnos. Pero al hacer esto, usted
refuerza la idea de que será suyo para siempre y elimina de la mente de la persona
cualquier duda de que usted vaya a estar siempre ahí. Y entonces la pasión se apaga.
Es un hecho de la naturaleza humana. Pero ahora que lo entiende, puede usarlo en su
beneficio.
Recuerde que éste y los otros factores que aparecen en este capítulo no son ideas o
trucos que funcionan a veces. Son leyes que rigen la conducta humana. Si usted las
usa y opera dentro de estos parámetros, puede ganar fuerza en cualquier relación.
Pero por último, asegúrese de que no comete el error que la mayoría comete cuando
se trata de ... cómo hace sentir a los demás.
Punto de apoyo
¿Por qué no puedo tener una relación abierta, honesta y confiada? Puede, por
supuesto, pero tiene que esperar hasta que estén enamorados los dos y aquí le
explico por qué. Las tres tácticas anteriores están basadas en el ego y diseñadas para
llevarlo a usted a este punto, pero deben dejar de usarse para poder avanzar hacia
una relación madura y duradera. En resumen, el amor es la ausencia M ego, del "yo".
Y una vez el amor echa raíces, la dinámica de la relación cambia. De modo que
cuanto más disponible está la persona y más hace por usted, usted más la ama. En
cuanto a la pasión, solamente necesita introducir algo de incertidumbre si siente que
está siendo dado por hecho.
Usted le gusta a una persona dependiendo de cómo la hace sentir. Esto no contradice
lo dicho anteriormente. Usted debe conservar de todos modos la conducta que se
explicó en lo referente a su actitud y a su disponibilidad pero tiene que tratar bien a la
persona. A menudo se da el mal consejo de que uno no debe ganarse la confianza de
la otra persona ni ser excesivamente amable y halagador, porque entonces esa
persona "sabrá que le gusta a uno" y perderá el interés. Hasta cierto punto sabemos
que esto puede ser verdad porque cuando le gustamos a alguien, a la vez que nos
sentimos halagados, podemos interesarnos menos en esa persona. Esta reacción se
desprende de la regla que dice: Queremos lo que no podemos tener y valoramos más
lo que nos cuesta trabajo conseguir. Simplemente, si algo nos llueve del cielo
tendemos a apreciarlo menos.
Repaso de la estrategia
La gente quiere lo que no puede tener y valora más lo que le cuesta trabajo. Si usted
es fácil de tener será fácil dejarlo ir.
Si usted tiene una vida desequilibrada tendrá una visión distorsionada de la relación.
El equilibrio le da perspectiva y la perspectiva le permite tomar mejores decisiones en
la relación.
En parte usted le gusta a una persona de acuerdo a cómo la hace sentir. Hágala
sentirse bien y ella se sentirá bien con respecto a usted.
Lea todas las tácticas del capítulo siguiente para completar su estrategia general
Casi todo en la vida es subjetivo. Esto significa que no hay verdad absoluta y que las
opiniones tienden a convertirse en hechos en casi todas las situaciones nuevas. El
resto de la información se filtra entonces a través de la estructura de esta nueva
creencia. Si usted quiere darse a sí mismo, o a cualquier cosa, valor inmediato, debe
crear la imagen adecuada. En las negociaciones empiece muy alto, aunque sea poco
razonable. Esto es importante porque usted tiene que establecer el tono (tenga en
cuenta que tampoco debe ser excesivamente exagerado porque quiere que lo tomen
en serio). Siempre que trate con alguien o con algo de valor desconocido, el primero
que le da un valor es el que lo establece. Para ser claro, cuando hablamos del valor de
una persona, nos referimos al valor percibido por los demás, no al valor del individuo
como ser humano, por supuesto. Por lo tanto, el valor es una cantidad desconocida
cuya percepción puede ser alterada al aplicar de dos principios psicológicos
específicos.
Cuando trate con algo intangible establezca su valor donde quiera, y puesto que no
hay un valor establecido, no parecerá irrazonable. Digamos que usted es un fotógrafo
aficionado toma fotografías como pasatiempo y alguien quiere contratarlo como
independiente. ¿Cuánto cobraría? Bueno, algunos fotógrafos cobran hasta diez mil
dólares diarios. ¿Está usted a esa altura? Probablemente no, pero si cobra cien
dólares diarios, evidentemente no será percibido como uno de los mejores. ¿Se reirán
de usted si dice que su tarifa son tres mil dólares diarios? Probablemente no. Incluso si
usted cree que no pueden pagarle tanto, está negociando desde un punto inicial muy
alto que usted ha establecido. Al final puede cobrarles mucho menos y se sentirán
felices porque no están contratando a un fotógrafo de quinientos dólares. ¡No, han
conseguido a un fotógrafo de tres mil dólares por sólo quinientos!
Veamos cómo afecta esta ley nuestra vida diaria. Digamos que usted va de compras y
ve una chaqueta que piensa que tiene un precio razonable de 69 dólares. Piensa:
"Bueno, no está mal". Después se da cuenta de que el precio es 690 dólares.
Inmediatamente, su opinión de la chaqueta cambia dramáticamente. Empieza a darse
cuenta de que lo que usted consideró calidad aceptable es en realidad confección
exquisita y se fija en cada pequeño detalle y puede "ver" ahora por qué es tan costosa.
Por 690 dólares puede que no la compre, pero si estuviera en realización la semana
que viene a 129, la raparla. ¿Por qué? Por su valor percibido.
Pero hay otro factor diferente al precio que ayuda a establecer el valor, y es la
disponibilidad de algo. Simplemente, cuanto más escaso es un producto, más valor le
da la gente. El oro, el petróleo y los diamantes son mucho más valiosos que el agua y
el aire porque no son tan abundantes. Aunque el agua y el aire son indispensables
para nuestra supervivencia, lo que valoramos son el oro y las joyas. (Por supuesto,
hasta que estamos sin agua un día: entonces su escasez la hace más valiosa que el
rescate de un rey.)
Así pues, ¿cómo establece usted su valor" en las relaciones personales? Puede
hacerse más valioso no estando tan disponible. ¿Sexo? Délo libremente al principio y
se lo valorará poco, al sexo y a usted. Eso es verdad tanto para los hombres como
para las mujeres. En el trabajo... su tiempo? Si está al lado del café todo el día, ¿cómo
cree que será percibido por su jefe y sus compañeros? ¿Lo considerarán valioso?
Repaso de la estrategia
Estas técnicas se incluyen en esta sección, porque, como hemos dicho en los
capítulos anteriores, la confianza y el atractivo van unidos. Nos atraen, admiramos y
tienden a gustarnos las personas que percibimos como controladas y seguras de sí
mismas. (No hay nada menos atractivo que una persona que tiene una baja opinión de
sí misma.) Y aunque este capítulo no le dará autoestima, las técnicas pueden hacerlo
parecer y de hecho sentirse más calmado y seguro. Esto le permitirá afrontar cualquier
situación o conversación en un estado óptimo.
Punto de apoyo
Estudios recientes han demostrado que las personas que sufren de trastornos
obsesivos compulsivos, ataques de pánico o de ansiedad, pueden sentir alivio con una
dieta baja en carbohidratos. Al mantener estables los niveles de azúcar de la sangre,
los síntomas de ansiedad disminuyen en gran medida.
¿Se ha fijado alguna vez en que después de una comida abundante se siente bastante
relajado y tranquilo? Eso se debe a que su nivel de azúcar en la sangre es estable y
su cuerpo no produce altos niveles de adrenalina para compensar las fluctuaciones. Lo
ideal, sin embargo, es hacer comidas pequeñas de alimentos no refinados. Esto
mantendrá estables sus niveles de azúcar en la sangre y su mente calmada; no sentirá
pereza para pensar con claridad. (Hay numerosos libros de nutrición que le pueden
ayudar en este tema mucho mejor de lo que yo puedo hacerlo en tan corto espacio.
Cualquier tienda naturista que tenga una sección de libros puede darle información
completa sobre cuáles son los alimentos no refinados.)
Otro aspecto fascinante a considerar es que las mismas cosas que usted hace para
parecer tranquilo y relajado en realidad pueden hacerlo sentir más tranquilo y relajado.
Así que desarrollando ciertas conductas y evitando otras, usted puede mantener una
sensación de calma y equilibrio interior.
.1 Sonría. Este es un signo universal de que uno está cómodo. Y, una vez más, de
acuerdo con varios estudios, el simple acto de sonreír calma y lo hace sentirse a uno
más relajado.
Punto de apoyo
¿Quiere saber si alguien está nervioso por algún motivo? Busque estos dos signos. Si
no sonríe ni respira regular y profundamente, no está tan tranquilo como quisiera
hacerle creer. (Usted puede saber si una persona no está respirando regularmente
porque de vez en cuando hará una inhalación muy profunda para tomar oxigeno muy
rápidamente.)
Las investigaciones en este terreno también nos muestran otra cosa notable, y es que
nuestras emociones no están sólo en nuestra mente sino en todas las células, en
todos los órganos y en todos los músculos de nuestro cuerpo. Si usted quiere asegurar
equilibrio y calma a largo plazo, practique yoga o algún tipo de rutina relajadora.
Nuestros músculos retienen nuestras emociones. ¿Nunca se ha preguntado por qué
se siente tan bien después de estirarse? Las tensiones psicológicas se relajan junto
con las físicas.
Repaso de la estrategia
¡Sonría! Las investigaciones muestran que el mero acto de sonreír de hecho lo hace
sentirse más relajado y tranquilo.
Para reducir a largo plazo la tensión practique yoga. Sistema nervioso central está
formado por el cerebro y la médula espinal. Es imposible sentirse completamente
relajado mentalmente a menos que el cuerpo esté tranquilo.
¿Se preocupa esa persona realmente por usted? ¿Es leal? ¿Sólo aparenta que usted
le gusta? A veces puede ser difícil distinguir a los que aparentan ser nuestros amigos
de los verdaderos amigos. Pero usted no tiene que perder tiempo en relaciones
egoístas o sin sentido nunca más. Con estos secretos psicológicos no tendrá que
preocuparse nunca de si su amigo ha tenido en cuenta sus intereses o los de él. Lo
sabrá con seguridad, siempre. Éste puede ser un buen momento para recordarle que
la amistad es el fundamento de cualquier relación. Si usted está con alguien que no
supera esta prueba, la relación probablemente no es sólida.
* Interés
* Lealtad
Cuéntele un secreto de un amigo mutuo y espere para ver si éste vuelve a su amigo.
Los verdaderos amigos conocen el valor de la confianza en una relación. Solamente
pida permiso a su amigo para decirle su secreto a la otra persona.
* Orgullo
Cualquier persona puede consolarlo. Eso la hace sentir bien. Pero vea quién lo felicita
por un buen trabajo. Sólo los que no actúan por envidia y celos lo harán. Sus
verdaderos amigos estarán orgullosos de sus logros, no celosos de sus éxitos. Vea si
su amigo viene cuando usted recibe buenas noticias, no sólo malas. Hay montones de
personas que están dispuestas a "animarnos" cuando las cosas no van bien, pero es
más difícil encontrar a alguien que nos felicite cuando las cosas van bien.
* Honestidad
Un amigo verdadero es aquel que le dice las cosas que usted no quiere oír. Está
dispuesto a permitir que usted se enfade con él si eso le ayuda. ¿Le dice cosas que lo
benefician aunque sepa que usted podría enfadarse con él?
* Respeto
Dígale que hay algo emocionante algo bueno que está ocurriendo en su vida, pero que
usted definitivamente prefiere no hablar de ello ahora y observe si lo presiona. Hay
una diferencia entre la curiosidad y la preocupación. Si la persona "tiene que saber",
está interesada sólo en el chisme y no en usted. Un buen amigo respetará sus deseos
y le dará su espacio. Puede que traiga el tema de vez en cuando porque está
interesado, pero no lo presionará constantemente si usted establece claramente que
prefiere no discutirlo ahora. La razón para usar un "misterio" positivo en lugar de uno
negativo es que si un buen amigo siente que hay algo que anda mal o que usted no
está bien, insistirá en saberlo en el momento porque está preocupado. Usted no debe
"probarlo así, porque no querría poner a su amigo en esa situación.
* Sacrificio
¿Está esa persona dispuesta a renunciar a algo si esto supone hacerlo feliz a usted?
¿Sacrificará su propio placer por darle a usted felicidad? ¿Quién decide qué hacer?
¿La palabra compromiso está en su vocabulario? Y cuando se trata de sus intereses
contra los de los demás, la mayoría de las personas corre a proteger sus intereses.
Mire si su amigo es el tipo de persona que tiene ideas o un plan para salir bien librados
los dos o si solamente busca salvarse y proteger sus propios intereses.
Repaso de la estrategia
Si su amigo pasa cuatro o más de las seis pruebas, usted probablemente tiene un
buen amigo con el cual puede contar. Si pasa tres o menos, usted debería pensar en
revisar su amistad o hablar con la persona sobre el tema. Claro que cuando tenemos
muchas responsabilidades en nuestra vida podemos volvernos distraídos sin darnos
cuenta o insensibles sin intención. Así que es mejor medir la relación usando estos
seis factores durante un periodo de tiempo largo y no sólo en un día.
Digamos que una mujer sospecha que su esposo no estuvo en el cine con sus amigos
como le dijo, sino que salió a pasar la velada con su secretaria. Preguntarle
simplemente si en realidad fue al cine lo obligaría a contestar que sí. Si hubiera estado
en el cine diría que sí y si no hubiera estado probablemente se aferraría a su historia y
diría que sí también. Y la mujer no sabría si creerle o no. Con esta técnica psicológica
ella introduce un "hecho" inventado y observa cómo lo maneja él.
Por ejemplo podría decir: "Oí decir que el tráfico estaba congestionado porque hubo
un accidente frente al teatro". Ahora todo lo que tiene que hacer es observar cómo
responde su marido,
Aquí él se enfrenta a un acertijo obvio. Si no estuvo en el cine, no sabe si reconocer
que hubo un accidente porque puede que no lo haya habido. Y si dice que no había
mucho tráfico y realmente lo había, ella sabrá también que no estuvo en el cine. Pero
independientemente de su respuesta, hará la única cosa que todos los mentirosos
hacen cuando se los confronta con un acertijo: dudará mientras decide cómo
contestar.
Tenga en cuenta que si hubiera estado en el teatro habría contestado inmediatamente:
"No había tráfico. ¿De qué me hablas?" Pero el mentiroso no está seguro porque no
estaba allá, así que dudará en la respuesta y al hacerlo se traicionará. Además,
probablemente contestará equivocadamente diciendo que sí a lo que la mujer afirma
porque no sabe que ella inventó el accidente.
Punto de apoyo
Todo está en los detalles. Cuanto más detallada sea la historia más puede creer en lo
que le está diciendo. Las historias inventadas a menudo tienen enormes lagunas y son
vagas y abstractas. ¿Qué tan específica es su historia?
Repaso de la estrategia
Aprenda cómo ver claramente y evaluar con facilidad la información sin ser
influenciado por personas que tengan intereses egoístas y malas intenciones. El
manipulador está provisto de siete trucos mortales para que usted haga lo que el
quiera. Lo bueno es que sabiendo cuáles son, usted puede estar atento y... ¡no dejarse
manipular de nuevo!
Estos trucos son: la culpa, la intimidación, la adulación, el miedo, la curiosidad, nuestro
deseo de gustar y el amor. Cualquiera que utilice esos recursos está tratando de
llevarlo de la lógica a la emoción, un campo bastante complejo. Esa persona sabe que
no puede ganar basándose en los hechos, así que tratará de manipular sus emociones
con cualquiera de estas tácticas o con una combinación de ellas.
La culpa: "¿Cómo puedes decir eso? Me duele que no confíes en mí. Ya no sé quién
eres".
La intimidación: "¿Qué pasa? ¿No puedes tomar una decisión? ¿No tienes la
suficiente confianza en ti mismo como para hacer esto?"
La adulación: "Veo que eres una persona inteligente. No intentaría ponerte una
trampa, no podría. Me pillarías en un segundo".
El miedo: ¿Sabes? Podrías perder todo esto. Espero sinceramente que sepas lo que
estás haciendo. Te digo que no lograrás mejores condiciones en ninguna otra parte. Es
tu última oportunidad para hacer funcionar las cosas. ¿Por que quieres arriesgarte a
perder la ocasión de ser feliz?
La Curiosidad: "Mira, uno sólo vive una vez. Inténtalo. Siempre puedes echarte para
atrás. Podría ser divertido, emocionante, una verdadera aventura. Nunca lo sabrás si
no lo intentas y además puedes lamentar no haber visto qué pasa".
Nuestro deseo de gustar: "Pensé que eras del equipo y todos los demás también. Va a
ser una desilusión si no nos apoyas. Vamos, a nadie le gusta que una persona se eche
para atrás... ésta puede ser tu oportunidad de demostrar de qué estás hecho".
Repaso de la estrategia
Observe y escuche objetivamente, no sólo las palabras sino también el mensaje. Estas
maniobras abusivas interfieren con su capacidad de digerir los hechos. Cuando estas
emociones se introduzcan en su mente, suspenda temporalmente sus sentimientos y
observe al hablante además del mensaje. Si usted oye algo que suene a una
manipulación de este tipo, deténgase y vuelva a evaluar la situación. No actúe rápida y
emocionalmente. Espere y recopile objetivamente los hechos para evitar convertirse
en una marioneta del malintencionado
¿Le gustaría saber si el tipo que está sentado ante usted en la mesa de póquer tiene
realmente una gran jugada o sólo una pareja? ¿0 si su ejecutivo estrella habla en serio
sobre renunciar si no le sube el sueldo? Hay una forma de saber casi siempre, en
cualquier situación, si alguien está alardeando, porque no importa cuál sea la
situación, todos los que alardean tienen una cosa en común.
Para entender cómo funciona esto vamos a definir lo que es en realidad un alarde.
Éste ocurre cuando una persona está realmente en contra de algo, pero aparenta
estar a favor. 0 cuando está a favor de algo pero aparenta estar en contra de ello. En
consecuencia, cuando una persona alardea, generalmente trata de parecer que no le
preocupa algo cuando en realidad le preocupa y aparenta estar interesada cuando en
realidad no lo está.
En cualquier caso, está tratando de crear una falsa impresión con la intención de
disfrazar su verdadera creencia. Ahí reside la clave: la gente que alardea se excede en
el contrapeso y si usted trata de descubrir esto, es muy obvio.
Tomemos otro ejemplo. Un socio en una firma de abogados dice que se irá a menos
que se le permita tomar cierto caso. ¿Es una amenaza hueca o real? Si fuera
auténtica, probablemente no insistiría en tratar de trasmitir su confianza. Sin embargo,
si se observa un aire de excesiva confianza, está alardeando. Por supuesto, esto es
así porque tenemos que asumir que si está en la firma es porque quiere estar allí. Y
que sólo se verá "forzado" a irse si no consigue lo que está pidiendo. Así que la lógica
dicta que preferiría quedarse y tener el caso, que no tenerlo e irse. Por lo tanto, si se
muestra excesivamente empeñado en la idea de irse si no logra el caso, está
alardeando, porque sabemos que no quiere irse realmente, pero que está tratando de
crear esa impresión.
Para comprender la psicología que hay detrás de estas actitudes, sólo necesitamos
observar cómo se comporta la gente en general. Una persona con autoestima alta y
confianza en sí misma no andará por ahí mostrándole al mundo lo estupenda que es.
Es la persona insegura la que se da aires de confianza, casi de arrogancia, para
compensar la forma en que realmente se siente. De hecho está tratando de comunicar
un falso yo". Y ocurre lo mismo en situaciones específicas también.
En una negociación, la persona que dice todo el tiempo cosas como: "Me voy a ir;
tiene que cumplir exactamente con lo que pido; no voy a aceptar esto; me va a
perder", no va a ninguna parte, está alardeando. La confianza en la propia postura
habitualmente habla por sí misma. Lo mismo que la confianza de una persona en sí
misma. El inseguro es el que tiene que decirnos lo seguro que está porque es la única
forma de que lo averigüemos. Sin embargo, si usted oye en una negociación alguna
de las frases siguientes, probablemente reflejan una persona sincera y que no está
alardeando: "Lamento que usted se sienta así; no nos enfademos; no lo creo, pero
permítame pensarlo un poco". Recuerde que la persona segura la que no está
alardeando no está interesada en cómo la ven los demás. No le preocupa su imagen,
al contrario del que alardea, que está obsesionado con la percepción que tienen los
demás de él.
Repaso de la estrategia
¿Alguna vez ha deseado penetrar en la mente de alguien para saber lo que realmente
piensa de usted, de sus ideas, de su proyecto o de su novia? Ahora puede hacerlo con
la mejor técnica de lectura de mente, que en realidad usa una combinación de varios
principios psicológicos. Cuando crea que alguien no está diciéndole la verdad esta
técnica es un método excelente para revelar los verdaderos sentimientos de una
persona en cualquier situación.
Lograr una opinión sincera de alguien puede ser difícil porque usted no puede llamarlo
directamente mentiroso argumentando que él no cree realmente lo que dice. Para que
esta técnica funcione es necesario que la persona diga que le gusta la idea, la
persona, etc. (Si no le gusta, no tiene por qué preocuparse de lograr saber la verdad
porque ya la sabe.)
Una vez le diga que le gusta, no lo presione o le discuta. Ahí es donde casi todos
cometen el error. Dicen algo así: "¿Seguro que te gusta? ¿De verdad?" La otra
persona no va a decir ahora: "Bueno, pensándolo bien..." Se volverá más enfático en
su aprobación y usted no sabrá lo que realmente piensa. .
Con esta técnica, usted verá que las palabras que usa en su respuesta indican que
usted está de acuerdo y que hay posibilidad de mejoría. La persona se siente en
libertad de criticar porque siente que usted espera que lo haga. Las dos tácticas
psicológicas fundamentales que funcionan aquí son la coherencia (los seres humanos
necesitan que sus acciones correspondan a su pensamiento) y la expectativa (las
personas hacen a menudo lo que se espera de ellas). Estos dos conceptos se
desarrollan más extensamente en otras secciones de este libro.
Ejemplo I
Usted no está seguro de que a su colega realmente le gusta la idea que usted tiene
para una nueva campaña de publicidad, aunque dice que sí.
Pregunta: ¿Te gusta el concepto de mi nueva campaña?
Respuesta: Claro, es muy original.
Pregunta: Bueno, ¿que necesitaría para que te encantara?
Ejemplo II
Usted quiere saber si su hijo está feliz de ir a un campamento este verano.
Pregunta: ¿Estás emocionado por ir al campamento el mes que viene?
Respuesta: Sí. Será divertido.
Pregunta: ¿Qué se necesitaría para que estuvieras realmente entusiasmado?
Ejemplo III
Pregunta: ¿Te gusta mi nuevo equipo de sonido?
Respuesta: Claro, se ve bien.
Pregunta: ¿Cómo crees que puedo mejorarlo?
Como puede ver, todas esas personas se sienten bien contestando sinceramente
porque las preguntas que usted les hace muestran claramente que usted sabe que no
todo es perfecto. Sin presionarlos sobre el punto de lo que les gusta, su respuesta se
despliega como una extensión de lo que ya han dicho y la verdad lo que en realidad
están pensando simplemente surge.
Punto de apoyo
¿Está tratando de averiguar lo que piensa una persona, pero ella no quiere hablar mal
de otro o de su trabajo? No hay problema. En lugar de decir: "¿Qué fue lo que no te
gustó?" o '¿Qué hizo mal?", pregunte: "¿Cómo lo habrías hecho tú?' o "¿Qué habrías
hecho de manera diferente?". Este tipo de formulación aparta el énfasis de lo que la
otra persona hizo mal y en cambio pregunta lo que esta persona hubiera hecho para
hacerlo mejor. Pero como ve, usted recibe la misma información.
Repaso de la estrategia
Haga que la persona diga que le gusta la idea, la persona o el objeto. Después
pregúntele simplemente cómo cree que se puede mejorar.
Usted está a punto de ver que por medio de una sencilla fórmula que usa seis tácticas
psicológicas diferentes, usted puede motivar a cualquiera persona a actuar en
cualquier momento. Esta poderosa estrategia que se esboza a continuación,
virtualmente garantiza la cooperación de los demás en casi cualquier situación.
Lo primero que debe hacer es reducir las opciones de alguien antes de presentárselas.
La sabiduría popular sugiere que al tener más opciones la persona encontrará
seguramente algo que le guste y que esto lo motivará a actuar. ¡Pero la verdad es todo
lo contrario! Si lo que usted quiere que haga la persona ofrece muchas alternativas
será menos probable que escoja una de ellas. A nadie le gusta equivocarse, y menos
hacer segundos intentos. Un menor número de posibilidades significa que la persona
decidirá más rápidamente y será menos probable que dilate el asunto.
Existe una conocida cadena de almacenes de muebles que se demora setenta y dos
horas en entregar cada pedido. ¿Por qué? Porque descubrió que aproximadamente el
sesenta por ciento de la gente regresa a cambiar el color, la tela o el diseño dentro de
los tres días siguientes a una compra grande. Al tener demasiadas opciones la
mayoría de las personas se paraliza y se toma mucho tiempo para decidir; y una vez
que lo hace se devana los sesos pensando: ¿Hice la elección correcta? A menos que
esté en una situación en la que la competencia le exija muchas opciones, no ofrezca
más de tres, dos es lo ideal. No tener opciones puede llevar a una persona a sentir
que su libertad está restringida y a echarse para atrás. Cualquier opción, incluso una,
le dará una sensación de poder, y usted quiere que la persona crea que tiene el
control.
Dar una fecha límite nutre las tres motivaciones psicológicas importantes que incitan a
la acción.
De acuerdo con esta ley, hay numerosos estudios que muestran que los seres
humanos responden a lo que es escaso y se está volviendo más escaso. Estoy seguro
de que usted lo ha vivido Cuando algo es lo último o lo de moda y todo el mundo lo
quiere, se vuelve tanto más deseable. Y si se empieza a agotar, lo deseamos más.
Valoramos lo que es escaso. Los diamantes, el oro y el petróleo no son esenciales
para nuestro bienestar, sin embargo se valoran mucho, pero sólo por la percepción de
que son escasos. Piense en ello. El platino es más valioso que el oro, el oro que la
plata y la plata que el cobre. Todo por la cantidad de éstos de que disponemos.
Sir Isaac Newton nos enseñó que los objetos en movimiento tienden a continuar en
movimiento y que los objetos en reposo tienden a permanecer en reposo. Debió haber
agregado que las personas en movimiento tienden a continuar en movimiento, y que
las personas en reposo tienden a permanecer en reposo. Si usted logra que la
persona vaya en la dirección adecuada, bien física o mentalmente comenzando con
algo fácil o divertido probablemente continuará así hasta el final. ¿Por qué ocurre
esto?
Los seres humanos necesitamos tener coherencia con nuestras acciones. Varios
estudios en este campo demuestran claramente lo efectivo que puede ser este factor
psicológico cuando se aplica para motivar a una persona. Estos estudios nos muestran
que cuando se le pide algo pequeño a una persona y lo hace, hay mayores
posibilidades de que acepte una petición mayor, lo que realmente queríamos que
hiciera. Sin embargo, si no se le ofrece primero la tarea pequeña y por lo tanto no la
hace, no tendrá motivación inconsciente para la coherencia.
El siguiente estudio, llamado la "técnica del pie en la puerta", demuestra la tendencia
de la gente que ha aceptado primero una petición pequeña a cumplir más tarde una
petición mayor. Freedman y Fraser (1966) les pidieron a varias personas que les
permitieran colocar en el jardín de sus casas un letrero enorme que decía CONDUZCA
CON CUIDADO. Sólo el diecisiete por ciento dio permiso. A otras personas se les hizo
primero una petición menor. Se les pidió que pusieran en la ventana un letrero de diez
centímetros que decía SEA UN CONDUCTOR CUIDADOSO. Casi todas aceptaron de
inmediato. Unas semanas más tarde se les pidió que colocaran el letrero gigante en su
jardín. Este mismo grupo aceptó de manera abrumadora el 76 por ciento tener el
horroroso letrero en su jardín delantero.
Cuando damos un pequeño paso en una dirección nos sentimos obligados a ser
coherentes aceptando peticiones mayores. Las personas que aceptaron la petición
menor, rediseñaron su concepto de sí mismos para incluir su preocupación por la
seguridad en la forma de conducir. Por lo tanto, aceptar la petición mayor era sólo
hacer algo por una causa en la que ya "creían" firmemente. Quienes recogen fondos
en forma eficiente conocen la regla número uno para hacerlo. La persona que más
fácilmente hará una donación es aquella que ha donado dinero antes.
Punto de apoyo
4. EXPECTATIVA
La ley de la expectativa establece que las personas harán lo que usted espera que
hagan. Hable y actúe directa y claramente y con seguridad. Adopte también la acción
física apropiada que corresponda. Ya sea ir hacia la puerta, tomar un bolígrafo o
marcar el teléfono, la gente responderá a su seguridad y actuará de acuerdo con ello.
En otros términos, usted puede usar más que sólo palabras use sus actos también
para iniciar la acción.
Si, por ejemplo, quiere que alguien lo siga -literalmente empiece a caminar sin
voltearse "para asegurarse de que la persona viene detrás". Sus palabras y acciones
deben transmitir confianza y expectativa de que la persona va a cumplir.
5. PROCESAR LA INFORMACIÓN
6. UN INCENTIVO ADICIONAL
Pero espere... ¡esto no es todo! ¿Cuántas veces ha oído esta frase familiar al final de
un comercial o de un informativo? El incentivo adicional es una herramienta altamente
efectiva para convencer en televisión, en persona o por teléfono. Así que úsela. Se
estima que el uso de esta técnica aumenta la audiencia de estos programas hasta en
un 35 por ciento. Le da a la persona un beneficio extra por obrar y lo más fascinante
es que casi no importa de qué se trate. Una vez que usted haya hecho su petición
empleando las tácticas anteriores, use un 'incentivo adicional". Puede ser cualquier
pequeño beneficio adicional que la persona obtenga por obrar a tiempo (por ejemplo:
"Después te invito a un helado"; "Te presto el auto"; "Iremos a cenar después"). Se
asombrará de lo eficaz que puede ser esta herramienta psicológica.
Punto de apoyo
El lenguaje que usted use también puede influir en también la ley de la inercia.
Palabras aparentemente inocuas como: mientras, como, durante, son motivadores tan
poderosos que se usan a menudo en la hipnosis. Recuerde que cuando una persona
ya está en movimiento mental o físicamente es más fácil para ella continuar. Por
ejemplo, si usted quiere consentimiento, le ira mejor si dice algo como: "Mientras
estamos fuera pasemos por casa de Jim, ¿te parece?" en lugar de: "Cuando
salgamos, ¿quieres que pasemos por casa de Jim?" ¿Se da cuenta de lo fácil que
fluye la primera oración con la idea de ver a Jim?
Repaso de la estrategia
Reduzca las opciones de la persona para evitar una deliberación muy larga. Un
número menor de opciones significa que decidirá más rápido y habrá menos
posibilidades de que dilate el asunto.
Ponga una fecha límite. La fecha límite restringe la libertad y aumenta nuestro deseo
de lograr lo que es cada vez más escaso. Esto nos motiva enormemente a avanzar y a
actuar de inmediato.
Involucre la ley de la coherencia empezando por pedir a la persona algo pequeño.
Cuando damos un paso pequeño en una dirección nos sentimos obligados a ser
coherentes aceptando solicitudes mayores.
Ofrezca algún pequeño beneficio adicional por actuar pronto. Esto aumentará
significativamente sus posibilidades de lograr acatamiento.
Recuerde que la regla psicológica número uno para que alguien haga algo para usted
o incluso con usted es que usted debe gustarle en cierta medida y preferiblemente
debe confiar en usted. Así que eche un vistazo al capítulo 1 para completar su
estrategia psicológica de esta sección.
¡Usted tiene una gran idea, pero nadie lo escucha! Esto puede ser extremadamente
frustrante, pero siguiendo una estrategia psicológica específica, usted puede
virtualmente asegurar que todos escuchen lo que tiene que decir. Los tres factores
principales que influyen aquí son (1) las emociones, (2) la estrategia y (3) las
consecuencias.
El noventa por ciento de las decisiones que tomamos está basado en las emociones.
Después usamos la lógica para justificar nuestras acciones. Si usted apela
estrictamente a la lógica para persuadir a alguien, tendrá pocas posibilidades de
lograrlo. Necesitará traducir los hechos a una enunciación basada en emociones y
ofrecer beneficios claros y específicos que apelen a las emociones de la persona.
Se ha demostrado que si usted añade a esto una explicación de cómo su idea evitará
consecuencias negativas o desagradables, tendrá mucho más éxito en su intento de
persuadir (Leventhal, Singer y Jones, 1965). Una conocida empresa de apuestas tenía
un eslogan que decía: Usted puede ser un ganador. Le fue muy bien con él durante
mucho tiempo. Pero entonces, estoy seguro que después de consultar a uno o dos
psicólogos, su eslogan cambió a Usted podría ser ya un ganador. Esto aumentó
enormemente su éxito. ¿Por qué? Porque la persona que recibía el sobre tenía miedo
de perder algo que ya tenía. ¿Botar un sobre que contiene riquezas incalculables?
¡Por nada! Esto era diferente de ganar algo nuevo, como se deducía del eslogan
antiguo. Ahora se arriesgaba a perder algo. Éste es un aliciente mucho más poderoso.
Por lo tanto, concéntrese en lo que la otra persona se ahorraría (un dolor de cabeza,
dinero, energía, etc.) más que en lo que podría ganar escuchándole a usted.
La gente tiende a responder mejor a las soluciones si creen que el plan de acción vino
de ellos. Trate de recordarle a alguien que él fue el primero que tuvo la idea o que lo
encaminó a usted por la dirección correcta.
También hágale saber que esta forma nueva de pensar está de acuerdo con lo que él
es. Recuérdele otras cosas que él haya hecho que son coherentes con esta creencia
en particular. Recuerde lo que dije en un capítulo anterior: Todos los seres humanos
tenemos una necesidad inherente de orden y coherencia. Si la persona ve esto como
una continuación de su propio pensamiento y no como una desviación, usted
aumentará sus posibilidades de que siga su consejo.
Aplique esta estrategia para tener éxito seguro, pero antes de hacerlo, analicemos uno
de los mayores errores que comete la gente cuando da consejos. Este aspecto de la
naturaleza humana es más culpable de la terquedad que cualquier otra cosa. Las
investigaciones sobre la conducta humana nos muestran que cuando sentimos que
nuestra libertad está siendo restringida nos inclinamos más hacia lo que está siendo
limitado.
El noventa por ciento de las decisiones que tomamos está basado en las emociones.
Después usamos la lógica para justificar nuestros actos. Usted debe despertar
emociones en los demás para persuadirlos.
Ofrezca un plan específico con una línea de acción clara para proceder.
Explíquele a la persona las razones por las que su idea le evitará consecuencias
negativas o desagradables. Esto es más efectivo que explicarle lo que ganará
escuchándolo.
Si es cierto, recuérdele a la persona que en cierta medida ella fue la primera que le dio
a usted la idea.
Hágale saber también que esta nueva forma de pensar es realmente coherente con lo
que ella es. Mencione las cosas que ella ha hecho que están de acuerdo con esta idea
nueva.
La herramienta psicológica más efectiva para lograr que una persona le cumpla es
hacerle saber que usted cree que ella es el tipo de persona que cumple. Usar frases
como: "Usted es el tipo de persona que..."; "Siempre me ha impresionado su habilidad
para…" o "Siempre me ha gustado que usted invocan la poderosa ley psicológica de la
coherencia interna.
Estas frases hacen que la persona se sienta obligada a cumplir porque usted involucra
su ego y crea una necesidad de coherencia en ella. Las personas tienen una
necesidad inherente de actuar de acuerdo con la forma en que se ven a sí mismos y
con la forma en que creen que los demás los perciben. Por eso uno de los mayores
errores que comete la gente es decir cosas como: "Vamos, hazlo"; "Sabía que esto iba
a ser un problema" o "No sé por qué me molesté en contar contigo". Estas frases no
generan ninguna motivación psicológica a probar que usted está equivocado. Esos
comentarios van dirigidos a las acciones de la persona, no a su identidad, por lo que
obligan a su ego a buscar razones para justificar su conducta y no a cambiarla.
Por ejemplo, digamos que usted le ha pedido a alguien que organice unos archivos en
las próximas dos semanas. No le diga: "¿Cómo va el trabajo?" o "¿No deberías haber
empezado ya?" Esto sólo le da la oportunidad de sacarle una excusa o de echarse
para atrás. En cambio dígale: "¿Sabes, Sally? Te agradezco que me ayudes con esos
archivos. Respeto que seas el tipo de persona que no sólo se ofrece a ayudar sino que
persevera hasta que el trabajo está hecho". Con estas palabras usted ha unido el
concepto que tiene la persona de sí misma a una causa. La opinión que usted tiene de
ella está entretejida con su conducta respecto al proyecto. Usted puede estar seguro
de que responderá y continuará trabajando en él para que la imagen que usted tiene
de ella no se empañe. Esto hace casi imposible que diga: "Estoy demasiado ocupada"
o "no me apetece hacerlo". Porque no sólo se arriesgaría a que usted cuestionara lo
que ella es sino que también ella dudaría de sí misma. Sencillamente, ella se ve a sí
misma como alguien que "persevera en lo que emprende, y con quien se puede
contar". Si abandona el proyecto tiene que preguntarse a sí misma: "¿Qué clase de
persona soy?" Esto es algo que muy pocas personas están dispuestas o son capaces
de hacer.
Otra versión de esta táctica que también puede usarse en conjunción con la primera
es invocar una identidad de valor genérico. Por ejemplo, usted puede incorporar temas
como la amistad, el compromiso con el trabajo, la decencia y todas las cualidades con
las que la mayoría de las personas aspira a identificarse. Una pregunta como: "¿No es
asombroso que algunas personas no conozcan el significado de la palabra amistad? "
es muy poderosa. Con sólo esta pregunta usted involucra su sistema de valores lo que
es importante para ella en la tarea. Ahora ésta ya no es un trabajo aislado sino algo
que en realidad define su amistad. Está arriesgando más que simplemente
incomodarlo a usted al desentenderse del trabajo; está arriesgando la relación. En
lugar de plantear el trabajo como un proyecto aislado, usted está trayendo a colación
su amistad y el poder que tiene en la tarea.
Este tipo de frases ayudará a que la persona continúe con la tarea, pero cuando usted
quiera que alguien finalice la labor es crucial preparar el terreno desde el principio al
pedir el favor por primera vez. Observe el siguiente estudio y después hablaremos de
él.
Angela Lipsitz y otros (1989) reportaron que terminar las llamadas para pedir donación
de sangre con: "Contamos con usted, ¿de acuerdo?" y después hacer una pausa en
espera de la respuesta, aumentó la tasa de asistencia del 62 al 81 por ciento.
Solamente esta frase aumentó la tasa en un 20 por ciento. Cuando pida el favor
inicialmente asegúrese de que da una confirmación verbal rápida. Esto aumenta
considerablemente el nivel de coherencia interna y usted refuerza sus posibilidades de
lograr que la persona culmine la tarea.
¡Pero espere, hay más! Cuando inicialmente le pida un favor a alguien, siga el proceso
de cinco pasos para consolidar su intención de ayudar.
Usted le dice a un amigo, por ejemplo, que tiene problemas con su computador y él se
ofrece gustoso a ir a verlo el sábado siguiente. Ahora bien, podría decirle esto sólo por
ser amable o porque realmente tiene la intención de ir. Pero usted necesita de verdad
su ayuda y para asegurarse de tenerla debe inducirlo a convertir su ofrecimiento
informal en un compromiso firme. Verá que aplicando la secuencia psicológica
específica usted puede convertir un ofrecimiento vago en un compromiso formal.
Punto de apoyo
Tenga presente que el hecho de ofrecerse voluntariamente hace más probable que la
persona cumpla. Si usted le impone la tarea a la persona se arriesga a que encuentre
una justificación interna donde el razonamiento podría ser: "Si no la cumplo se
enfurecerá, me sentiré culpable o sufriré algún tipo de castigo". Esto puede entorpecer
su entusiasmo por terminar la tarea si encuentra una forma de resolver este conflicto
interno. En otras palabras, no hará el trabajo porque sea un gran tipo que siempre
persevera hasta el final, sino porque tiene que hacerlo. Para superar esta forma de
pensar (cuando crea que puede ser un problema), sólo tiene que incluir la frase: "Sé
que podrías haberte desentendido de ello si hubieras querido".
1 . Haga que lo diga él: Cuando lo dice usted es una cosa, pero cuando lo dice él, esto
lleva su compromiso a un nivel completamente diferente. Usted necesita que él diga
que lo hará. Por lo tanto usted dice: "¿En realidad tienes esa intención?" o "¿Lo dices
en serio?" Él muy probablemente responderá: "Sí, te ayudaré el sábado".
2. Concrete el tiempo: Usted debe hacer que se comprometa a una hora específica en
que lo pueda ayudar o el tiempo que le tomará hacer el trabajo. En este ejemplo, usted
diría: "Estupendo, ¿a qué hora?" o "¿Y más o menos cuanto tiempo te llevará?"
4. Apele a su conciencia: Hágale saber que ahora depende de él. Dígale lo importante
que es su ayuda realmente. Mencione algunas consecuencias que usted podría sufrir
si él no cumple. En este ejemplo podría ser que necesita el computador para hacer un
informe y tendrá graves problemas si no está a tiempo, o algo así.
5. Ver es creer: Los agentes de finca raíz conocen el poder de esta táctica. Cuando
muestran una casa quieren que la gente la imagine como suya. Convertirla de la casa
de otro en la propia es una poderosa técnica visual. Así que cuando se la están
mostrando al cliente le hacen preguntas como: "¿Dónde cree que podría poner el
televisor?" y "¿Dónde pondrá el sofá?" En este ejemplo usted podría preguntar a su
amigo: "¿Qué harás primero, conectar el monitor o leer el folleto?" Usted quiere que él
se "vea" a sí mismo haciendo lo que dice que va a hacer.
Punto de apoyo
El gran mago Harry Houdini daba una explicación simple cuando le preguntaban cómo
podía escapar tan fácilmente de una caja fuerte cerrada con llave. Decía: "las cajas
fuertes se hicieron para impedir que la gente entrara en ellas, no para impedir que
saliera de ellas". Si usted quiere comprobar sin ninguna duda que alguien está
verdaderamente comprometido, use esta técnica rápida.
Hay una puerta psicológica que mantenemos custodiada y bien cerrada, pero siempre
hay una puerta trasera por la que podemos pasar fácilmente. Esta táctica de la puerta
trasera es una técnica de preguntas sencilla y altamente efectiva. Funciona porque sin
importar lo entrenado que esté alguien para convencernos de su sinceridad, no está
preparado para responder a esta táctica.
La pregunta clave es: "¿Qué tendría que pasar para que esto no funcionara?" Ésta es
tan efectiva porque toda su línea de pensamiento esta centrada en por qué haría algo
no en por qué no lo haría. Está acostumbrado a contestar preguntas respecto a por
qué está haciendo o va a hacer lo que dice que va a hacer. Pero contestar claramente
qué le impediría cumplir su objetivo requiere que primero tenga intenciones sinceras
de cumplirlo. Dicho de otro modo, es pedirle que piense como alguien que tiene
creencias diferentes. Bajo circunstancias normales si es honesto en sus intenciones
esto no sería un problema, pero se vuelve un problema cuando la persona no es
sincera.
Después de hacer esta pregunta la única respuesta que usted debería esperar es un
rápido "nada" o un obstáculo razonable, algo específico que esté fuera de su control.
Todos tenemos reservas y reconocerlas no significa que no estemos comprometidos;
solamente nos hace honestos. Pero si usted le pregunta a Jake qué le impediría
casarse con su novia el próximo año y él sonríe y dice: "No lo sé... si las cosas
cambian..." Jake no está comprometido. Si usted simplemente pregunta: "Te vas a
casar con Jane, ¿verdad?" él contestará con un convincente sí y le dará todas las
razones por las que ama a Jane. Porque ésta es la pregunta que están haciéndole
continuamente y puede contestarla fácilmente y en forma creíble. La contraria, en
cambio, no es la que espera o aquella para la que está preparado.
Repaso de la estrategia
Cuando usted pida inicialmente un favor, toque el mayor número de estos puntos que
pueda: (a) haga que él lo diga; (b) fije un marco temporal específico; (c) cree una
sensación de obligación; (d) apele a su conciencia y (e) haga que él le diga cómo se
desarrollarán las cosas.
Después termine la conversación con una confirmación verbal firme y con algo como:
"Entonces nos vemos el sábado, ¿de acuerdo?"
Finalmente, a medida que se acerque el día, dígale que usted aprecia el hecho de que
él sea alguien que cumple lo que promete o que usted está contento de que él
conozca el verdadero valor de la amistad, de la responsabilidad, de la lealtad, o lo que
se adapte mejor a la situación.
16 Cómo lograr que una persona
testaruda cambie de opinión
Pocas cosas pueden ser más frustrantes que tratar de "ampliarle" la perspectiva a una
persona de ideas cerradas. Pero siguiendo una precisa serie de tácticas psicológicas
usted puede lograr que lo escuchen objetiva e imparcialmente. Más que esto, esta
estrategia prepara el camino para lograr que alguien cambie de parecer sin oponer un
muro de resistencia.
Cuando usted trata con este tipo de persona, hay cuatro factores posibles para su
actitud:
2. Esta persona tiene problemas con algunas personas, en este caso usted. Usted
descubre que no importa lo convincente o lo sensata que sea su idea, si viene de
usted, no quiere ni escucharla.
3. Esta persona acaba de salir de una situación, aunque no lo haya dicho y no tenga
nada que ver, en la que se sintió manipulada y utilizada; y las heridas están frescas
todavía. Cualquier cosa que se desvíe de su forma habitual de pensar no es bien
recibida. No' se siente segura de su capacidad para tomar decisiones así que prefiere
estar en terreno firme.
4. Esta persona tiene una aversión situacional. Esto significa que no es nada personal
con usted, pero "la idea" de lo que sea, no encaja con él. Ésta no es coherente con el
concepto que tiene de sí misma esta persona, con cómo se ve a sí misma.
Si usted se ha enfrentado alguna vez a personas de este tipo, sabrá que argumentar
con ellas no le llevará a ninguna parte. Cuanto más fuerte se vuelva su argumento,
mayor será el rechazo. La lógica sale de escena y nada que usted diga o haga
producirá una diferencia. A menos que, por supuesto, usted diga o haga lo correcto.
Fase I: Numerosos estudios muestran que si antes de pedir el favor, usted puede
lograr que la persona haga una declaración coherente con la concesión de ese favor,
entonces tiene posibilidades de lograr un cambio de actitud en la persona y por
consiguiente su consentimiento. Lo que usted debe hacer es hacerlo estar de acuerdo
con una idea o una forma de pensar que después neutralice su objeción.
No importa cuál sea la actitud de esa persona, usted puede hacer cambiar su forma de
pensar radical y rápidamente con sólo esta táctica. Por ejemplo, digamos que usted
quiere que su jefe le preste atención a una nueva idea. Simplemente dígale: "¿No le
parece que la estrechez de visión es un rasgo de carácter absolutamente indeseable?"
Luego, después de un tiempo, cuando usted traiga a colación el tema que le interesa,
lo encontrará inusualmente cooperador y abierto a sus sugerencias; porque una vez
que su jefe acepta gustosamente su observación, se siente empujado
inconscientemente a actuar de manera coherente con ella.
Esta táctica es tan efectiva porque los seres humanos tienen una fuerte necesidad de
ser congruentes con sus actitudes, creencias y acciones. Porque si alguien piensa de
una manera pero actúa de otra se lo considera desorientado o loco. Y nos percibimos
a nosotros mismos de la misma manera. Una vez que nos comprometemos
públicamente con una postura, nuestra actitud se adecuará a ella y después influirá en
nuestras acciones subsiguientes. Como veremos mas adelante, dependiendo de la
situación, usted puede hacer preguntas más específicas para crear una mayor
coherencia interna en una persona.
Fase II: Restrínjale, en cierta forma o hasta cierto punto, la posibilidad de hacer cosas
que no quiere hacer. Así es. Cuando alguien es testarudo es porque sabe que puede
hacer algo, pero escoge no hacerlo. Al limitarle su capacidad de hacerlo, la persona ya
no ve la decisión como suya. Y si usted no puede hacer algo no tiene razón para
oponerse tercamente a ello. ¡De hecho, aumenta el deseo de hacerlo! Esto derrumba
instantáneamente el muro de obstinación. Es como decirle a alguien a quien no le
gusta viajar que no puede abandonar nunca su ciudad natal. De repente, con la
libertad restringida, su ego desarrolla un deseo inconsciente de poder marcharse.
Entonces, al deseo de poder irse sigue el deseo de irse realmente, a causa de la
disonancia cognitiva. El proceso mental es: "Quiero poder irme porque debo querer
irme". Entonces la mente empieza a buscar formas de hacer lo que siente que debe
querer hacer.
Esta restricción puede tomar cualquier forma. ¿Por qué cree que los cupones tienen
fecha de caducidad y las realizaciones son por "tiempo limitado"? Si las opciones
están siempre abiertas nuestro impulso de actuar no es tan fuerte. Pero en cuanto algo
se nos restringe sea que lo hubiéramos querido en un principio o no nos interesamos
más en ello. ¿La prohibición toca alguna campana?
Pero aquí está la clave: La restricción debe poder ser superada cuando la persona
tenga una solución.
Ahora continuemos con el ejemplo anterior de la fase 1. Digamos que la idea que
usted quiere proponerle a su jefe es que la oficina debería organizar un picnic,
patrocinado por la empresa el próximo viernes. Usted cree que su jefe estará en
desacuerdo con la idea, así que empieza por preparar el terreno en la fase 1 con una
pregunta general como: "¿No cree usted que la estrechez de pensamiento es un rasgo
de carácter absolutamente indeseable?" o "¿No le parece detestable que no le
escuchen sus propuestas?" Después continúe con una pregunta más específica como:
"¿Qué tan importante le parece el estado de ánimo de los trabajadores para el
ambiente de una oficina?" Éstas son obviamente dos preguntas «cargadas» que una
vez que se está de acuerdo con ellas y que se expanden en la mente producirán una
necesidad interna de coherencia.
Después, simplemente termine la táctica con la fase 11, en la que podría decir algo
como: "Estoy segura de que la mayoría de las personas estarían encantadas de tener
un picnic, pero no creo que pudiéramos (a) conseguir un permiso para un parque, o (b)
decidir qué deportes jugar para que todo el mundo esté contento, o (c) conseguir a
alguien que atienda los teléfonos". Y eso es todo lo que usted tiene que hacer.
Ahora fíjese en lo que ha logrado. Tenía una persona de visión estrecha que escuchó
su idea, aceptó que era razonable y después procedió a buscar una solución para que
la sugerencia se pudiera poner en práctica de la mejor manera.
Esto en unión de los seis consejos siguientes, le dará la oportunidad de producir un
cambio de actitud en casi cualquier persona por más testaruda que sea. Estas claves
pueden emplearse como parte de la estrategia de dos fases, aunque no es necesario
usarlas todas.
1. Cuando una persona sea inflexible en su posición, cambie la única cosa que puede
cambiar, su fisiología. El estado emocional de una persona está directamente
relacionado con su estado físico. Si se obstina en una posición de negativa o rechazo,
hágalo moverse físicamente. Esto evita lo que se llama bloqueo mental y hace más
fácil que cambie su posición psicológica. Si está sentado, haga que se levante y
camine por la habitación. Si está de pie, intente hacer que se siente. Cuando nuestro
cuerpo está inmóvil, nuestra mente puede congelarse de la misma forma. Numerosos
estudios coinciden de forma abrumadora en que no hay una mejor forma de cambiar el
modo de pensar de alguien que haciendo que mueva su cuerpo.
Punto de apoyo
3. Los estudios nos muestran que cuando nuestra conciencia de nosotros mismos está
fortalecida somos más fácilmente influenciables. Esto sugiere que cuando nos
podemos ver a nosotros mismos literalmente en un reflejo, somos más fáciles de
persuadir. Tener una conversación junto a un espejo o un panel reflectivo aumentará la
posibilidad de aceptación.
5. Los estudios concluyen que cuando una persona tiene un punto de vista contrario,
usted debería adoptar un argumento de dos caras. Cuando usted trata con una
persona testaruda, puede asumir que ha basado su opinión, al menos en parte, en los
hechos. Por lo tanto, un argumento de una sola cara le parecerá como si usted no
estuviera tomando en consideración su forma de pensar. En consecuencia, debe
presentar las dos caras (siguiendo la regla de la primacía asegúrese de presentar su
punto de vista primero) para que la persona sea flexible en su forma de pensar.
6. Hágale creer que en cierta forma es responsable de la idea. Esto logra varias cosas;
la más importante es que se sentirá más identificado con el objetivo, y usted logrará
dirigir sus actos de una manera coherente con sus creencias. Una vez haya eliminado
su resistencia, debe continuar con algunos motivadores psicológicos para reforzar la
acción. Para redondear su estrategia use las técnicas del capítulo 13.
Ahora bien, esta fue la parte fácil. Pero recuerde que unas páginas atrás dijimos que
hay cuatro motivaciones tras un pensamiento testarudo. Las tácticas anteriores se
referían a las razones 1, 2 y 3. ¿Pero que ocurre si su testarudez se debe a la razón
4? (Recuerde que 4 es una aversión a la situación, lo que quiere decir que esta idea
nueva es incongruente con el concepto que alguien tiene de sí mismo, con la forma en
que se ve a sí mismo.)
Lograr que alguien estrecho de visión debido al factor 4 cambie de opinión requerirá
una estrategia diferente. La razón es que cuando nos apegamos a una creencia,
usualmente ésta involucra nuestra identidad. Y esto significa que cambiar de opinión
nos obliga a revaluar cómo nos percibimos a nosotros mismos y cómo percibimos el
mundo.
Continuemos con el ejemplo anterior, en el que usted quiere que su jefe le haga un
favor que él ve como "algo que nunca haría". La mayoría de nosotros nos
consideramos buenas personas. Y se puede decir, dentro de esa definición, que, por
supuesto, no mataríamos a otra persona. Sin embargo, ¿en que circunstancias
consideraría usted permitido hacerlo? ¿Si su vida o la de un miembro de su familia se
viera amenazada por un loco armado, tal vez? En ese caso usted puede matar y
conservar al mismo tiempo una imagen de sí mismo que sea consecuente. Al cambiar
los parámetros usted incluye la conducta para que sea aceptable o incluso necesario.
Esta táctica se hace mucho más fácil cuando se usan ideales genéricos de la conducta
humana, que es la forma ideal en la cual a todos nos gusta pensar de nosotros
mismos. Para hacer esto, simplemente apéguese a un valor mayor y más importante
en el que esa persona crea.
¿En que circunstancias sería correcto pasar el nombre de un ejecutivo por delante del
de otro en la lista? Podría ser aceptable si este ejecutivo sufriera algún tipo de
consecuencia grave si no recibiera la bonificación. Ahora bien, seamos claros, usted
no debe fabricar la razón, ni tiene que hacerlo. Si usted en realidad necesita que
alguien haga algo, su razón real debe suficiente. Y recuerde, no se trata tanto de cuál
es la razón, siempre que la presente de la manera adecuada; la cual consiste en
incorporar su deseo en la idea de moralidad de la persona y en la visión que tiene de
sí misma. En lugar de tratar de vencer su sentido de la decencia, apele a él. Hemos
tomado uno de los ejemplos más difíciles posibles. Sería raro que usted tuviera que
luchar con una postura tan obstinada, pero cuando tenga que hacerlo, estará listo para
ello.
Pero espere, ¿hay alguna forma de saber lo obstinada que está una persona en algo?
¿Seguro que no puede cambiar la forma de pensar de una persona sobre cualquier
asunto? Bueno, habrá veces en que una persona sea absolutamente inamovible, así
que para ahorrase tiempo y energía use la técnica que aparece a continuación, no sólo
para determinar si se le puede hacer cambiar, sino también para ayudarlo a cambiar
su forma de pensar si es algo flexible.
LA PALANCA
¿No hay veces en las que le gustaría poder saber si alguien está dispuesto a hacer
algo? ¿Qué tan abierto de mente es para intentar algo nuevo? ¿Alguna vez ha querido
saber si alguien sólo estaba mostrando un "frente fuerte% pero podría rendirse
fácilmente a su petición? Intente esta palanca psicológica para abrir una mente
estrecha y vea lo que la persona está pensando realmente. Éste es el test perfecto
para decirle qué tan abierto de mente es alguien. Además, le ayuda a preparar el
camino para lograr que la persona acoja su idea completamente.
A veces las personas son tan renuentes porque saben que no podrían defender su
posición. Se ha dicho que la gente a quien se le puede vender más fácilmente es
aquella que tiene un aviso que dice NO SE ADMITEN VENDEDORES. La razón es
que esas personas saben en el fondo que si llegara a ellos un vendedor, le comprarían
todo.
Con esta técnica usted le dice a la persona que quiere que acepte hacer lo que usted
pide, pero sólo si usted logra cumplir una tarea muy dificil y asombrosa. Por ejemplo,
le dice que escriba en un trozo de papel un número del uno al cien y que si usted
puede adivinarlo, ella aceptará lo que usted quiere. Probable~ mente aceptará este
reto porque cree que hay pocas posibilidades de que pueda adivinarlo. Si no acepta
estos términos, es seguro que es inflexible en cuanto a su Posición.
La estrategia psicológica aquí no está en acertar (si lo logra, estupendo) sino en que la
persona acepte correr el riesgo. Una vez más, si en este punto se rehusa
absolutamente, usted sabrá que no hay forma de que pueda condescender, Sin
embargo, si acepta, quiere decir que usted ha logrado cambiar ligeramente sus
creencias, y eso es todo lo que usted necesita. La ha llevado de un no a un quizás.
Ahora la persona tendrá que alterar sus creencias para permitir la posibilidad aunque
remota de que esto ocurra. Para reducir la disonancia ajustará inconscientemente su
forma de pensar y se volverá más abierta.
Sólo una persona que en el fondo esté dispuesta a hacer lo que usted le pide
participaría en este test. Así que una parte de ella, hasta cierto punto, está dispuesta.
Ahora usted sabe que no está enfrentando una tarea imposible.
Repaso de la estrategia
Comience con el test de la palanca para saber qué tan abierta es realmente la
persona.
Puesto que los seres humanos tienen una gran necesidad de coherencia haga que la
persona esté de acuerdo con una idea o una forma de pensar que neutralice sus
propias objeciones después.
Restrinja en cierta medida su capacidad de hacer lo que usted quiere que haga y déle
la oportunidad de ofrecer la solución.
El estado emocional de una persona está en relación directa con su estado fisico.
Cambie fácilmente la única cosa que le puede cambiar: su fisiología.
Menciónele que usted ha sido influenciado por sus ideas recientemente. Si alguien
logra persuadir a otra persona, generalmente ésta responde recíprocamente
cambiando sus actitudes hacia lo que le interesa a la primera.
1. EL COMPONENTE TIEMPO
¿Cuál es el mejor momento para pedir un favor? ¿Debe pedirlo cerca del momento en
que necesita que la persona actúe o lo más anticipadamente posible? La respuesta es
con la mayor anticipación posible. Según se acerca el suceso aumenta la ansiedad y
la persona se hace más consciente de lo que hay que hacer, lo que hará menos
probable que le coopere. Sin embargo si usted necesita ayuda de inmediato, los
estudios sugieren que busque a alguien que no esté apurado o preocupado por otra
cosa. La posibilidad de lograr cooperación de alguien que no esté bajo presión de
tiempo es grande comparada con la de alguien que esté apurado o preocupado.
2. RECIPROCIDAD
¿Se ha preguntado por qué los grupos religiosos ofrecen a los transeúntes una flor u
otro obsequio? Es porque saben que la mayoría de las personas que acepta el regalo
después se siente obligada a dar un donativo. Sabemos que no tenemos que hacerlo,
pero nos sentimos incómodos aunque no hayamos pedido el obsequio. Cuando
alguien nos da algo, a menudo nos sentimos en deuda con esa persona. Si usted le
ofrece algo, cualquier cosa, a la persona que tiene como "objetivo", aumenta rá
significativamente la posibilidad de anuencia. El "regalo" puede tomar la forma de su
tiempo, su atención o incluso un gesto o un cumplido.
4. ESTADO DE ÁNIMO
¿Es mejor esperar a que la persona esté de buen humor para pedirle el favor? No
necesariamente. En realidad existen dinámicas ligeramente diferentes en el trabajo, y
por tanto distintas estrategias dependiendo del estado de ánimo. Las investigaciones
muestran que si la persona está de buen humor usted debe decirle claramente lo que
necesita y que se sentirá bien haciéndolo. Esto se debe a que las emociones positivas
pueden causar menos deseo de ayudar si la necesidad es ambigua o si' las
consecuencias de la ayuda son desagradables. Cuando nos sentimos bien no
queremos perder nuestro humor.
Los estudios muestran también que las emociones negativas pueden aumentar la
disposición de una persona a ayudar porque ayudar hace sentir bien a la gente y los
que están de mal humor están motivados a hacer algo que los haga sentirse mejor.
Hay algunas excepciones, pero en la mayoría de los casos la conducta que se solicita
debe percibirse como relativamente fácil y efectiva y tiene que ser claro que el acto de
ayuda llevará a sentimientos más positivos. Así que cuando la persona no esté de muy
buen humor, asegúrese de enfatizar que lo que usted quiere que haga no le requerirá
mucho esfuerzo y que realmente se sentirá bien después de hacerlo.
5. APATÍA 0 EMPATÍA
6. SEMEJANZA
Dicho sencillamente, tendemos a ayudar más a aquellos que nos gustan y nos gustan
aquellos que son como nosotros. (Para una explicación más detallada, vaya al capítulo
I.) El hecho es que siempre nos sentimos más inclinados a ayudar a los que nos
gustan y a menudo nos gusta alguien sólo porque "es como nosotros" o parecido en
algunos aspectos.
7. COHERENCIA INTERNA
Ahora bien, si usted quiere que una persona muy tensa esté calmada y relajada, pero
cree que ella no podrá recordar muchas veces en las que estuviera calmada, eso no
es un problema. La investigación muestra que usted puede lograr el resultado deseado
hacer que temporalmente se considere a sí misma una persona calmada haciéndole
recordar un momento específico en que estuviera calmada. Esto ocurre porque se
hará una pintura mental de su estado. Y como dice el dicho, "una imagen vale más
que mil palabras". El tiempo que pasa recordando el suceso es un buen sustituto del
número de veces que lo ha experimentado.
Punto de apoyo
Por esta razón algunas personas tienen una visión tan sesgada de sí mismas. Tienen
memoria de computador cuando se trata de recordar sus fracasos y sus errores: así
que se ven a sí mismas como fracaso. Y aunque nuestros triunfos superen con creces
nuestros fracasos, es lo que recordamos, los fracasos, lo que dicta cómo nos
percibimos a nosotros mismos.
Lograr que alguien le haga un favor es infinitamente más fácil con esta táctica porque
actuamos de acuerdo con la imagen que tenemos de nosotros mismos. Y si usted
cambia la forma en que una persona se percibe a sí misma, puede cambiar
instantáneamente su conducta.
Saber que los demás "hicieron lo correcto" motiva el deseo inconsciente de hacer lo
mismo. Puede incluso llevar a un aumento en la donación de sangre, como 1rwin
Sarason y sus colegas (1991) descubrieron después de hacer una encuesta a casi
10.000 estudiantes de enseñanza media. Los estudiantes que vieron una muestra de
diapositivas en la que se incluyeron treinta y ocho fotografías de escenas de donación
de sangre, estuvieron en un 17 por ciento más dispuestos a donar que los que no
vieron esas fotografías. Simplemente, más estudiantes de los que vieron las fotos de
gente donando sangre se sintieron inclinados a hacer lo mismo que los que no vieron
esas fotos. Incontables estudios, que van desde donar dinero voluntariamente hasta
ayudar a alguien a arreglar una llanta pinchada, muestran lo mismo. Es clara la
evidencia de que los modelos sociales promueven el altruismo.
Habrá muchas veces en las que usted simplemente no pueda hacer que alguien sea
testigo de que los demás hacen lo que usted quiere que haga él. Y eso está bien.
Porque puede activar esta ley sin que esta persona vea en realidad al otro individuo
ayudando. Y de hecho puede ser más efectivo, porque como leyó arriba, en la ley
número tres, usted quiere evitar diluir la responsabilidad social para actuar. Por lo
tanto, si alguien se entera de que todos los demás están ayudando, puede producir el
efecto contrario. En lugar de ello, use metáforas e historias, que son herramientas
poderosas de persuasión. Háblele de los que han ayudado en ocasiones similares (no
tiene que ser necesariamente ésta) para producir el efecto psicológico deseado.
9. EL EGO
Los estudios concluyen que la gente está más inclinada a ayudar a un amigo si los
éxitos de éste no suponen un reto a su autoestima. Por eso puede que estemos más
dispuestos a ayudar a un extraño que a alguien que conocemos. Asegúrese de que la
persona no se siente amenazada por usted o de que usted no esté compitiendo con
ella de ninguna forma. También la envidia o los celos a cualquier nivel pueden inhibir
una atmósfera de cooperación. Trate de eliminar cualquier elemento de competencia
entre ustedes. Usted quiere promover un espíritu de tú y yo contra otra cosa, en lugar
de tú me ayudas a lograr lo que quiero.
Punto de apoyo
Sin duda la persona debe preocuparse por usted y por su situación. Y si usted ha
hecho un buen trabajo con las tácticas, lo hará. Sin embargo, si no está muy
entusiasmado por ayudar, la investigación indica que cuando la empatía es baja
estamos más preocupados por las recompensas y los costos. Por lo tanto, si al final
simplemente la persona no se involucra, usted debe explicarle claramente lo que va a
recibir a cambio de ayudarle. Ahora es un simple asunto de ilustrar cómo los beneficios
de ayudar sobrepasan el trabajo que ella se pueda tomar.
Repaso de la estrategia
Si usted necesita que le hagan algo pronto, pídalo a la persona cuando no esté
preocupada por otra cosa. Si es algo que no necesita hacerse de inmediato, pida el
favor tan pronto como sea posible, con la mayor anticipación que pueda.
Su petición debe contener estos tres componentes: (a) lo que usted quiere
específicamente, (b) la explicación de en qué forma se sentirá bien la persona
haciéndole el favor y (c) la relativa facilidad con que puede cumplir la tarea.
Si su situación se debe a su incompetencia, usted producira apatia, no simpatía.
Concéntrese en los aspectos de su problema que no fueron causados por usted.
Redefina el concepto que tiene la otra persona de sí misma para que la idea de
ayudarlo a usted sea coherente con ella misma.
Finalmente, una vez que la persona acepte ayudarle, es importante que lo haga. Por lo
tanto aplique las técnicas del capítulo 15 para asegurarse de que consigue la ayuda
que le han prometido.
Usted tiene grandes ideas, una visión clara y está dispuesto a cambiar el mundo. Sin
embargo hay un problema... usted guía, pero nadie lo sigue. El liderazgo parece muy
fácil para los que lo dominan pero es muy esquivo para los que lo desean. El liderazgo
efectivo, sin embargo, no es tanto un arte como una ciencia. En este capítulo
exploramos las claves esenciales para convertir a cualquier persona en un líder
carismático y apasionado.
Hay varios factores que conforman la dinámica del liderazgo efectivo y se dividen en
dos categorías: la personalidad del liderazgo y la mecánica del liderazgo.
IDENTIFICACIÓN
HUMILDAD
No es suficiente estar al servicio del pueblo, usted debe ser del pueblo. El ego, al
contrario de lo que se cree a menudo, no es lo que hace grande a un líder. Basta con
mirar líderes como Mahatma Gandhi o Martin Luther King Jr., para saber que la
humildad atrae seguidores. Otra cita del Tao te Kíng: "Cuando queda claro en sus
palabras y actos que los líderes no se sienten superiores a aquellos a quienes dirigen,
el pueblo se ve a si mismo en sus líderes y no se cansa nunca de ellos" (Wing, 1986).
Los que gobiernan con el ego gobiernan con ira y miedo y cuando éstos desaparecen
también desaparece su influencia. La historia está llena de esos tiranos, dictadores y
guerreros dominados por el ego. Se ha dicho que la mejor persona para liderar es
aquella a quien se ha forzado a tomar el papel de líder, más que la que busca
gobernar porque desea poder. No se sienta mejor que los demás sino con una mayor
disposición a dirigir y como alguien que está preparado para hacer lo que sea
necesario.
ESTILO
Aun así, la herramienta más efectiva para influir y liderar se puede resumir en una
palabra: simplicidad. A nadie le gusta o se inclina a seguir estrategias complejas y
desorganizadas. Más sabiduría del Tao te King: "Los líderes que imponen estrategias
elaboradas al pueblo, causan reacciones sociales que minan la estructura de la
organización porque las estrategias inteligentes tocan una cuerda de resonancia en la
gente y disparan sus propias respuestas inteligentes. Si en lugar de ello los líderes
guían la organización con simplicidad y rectitud, la inteligencia inherente del pueblo
estará desarmada" (Wing, 1986).
Sea claro y organizado en su plan cuando busque animar a la gente a alinearse con su
forma de pensar. Si sus ideas son confusas, ambigüas y con incontables excepciones,
usted indudablemente perderá el interés de la persona y después su apoyo. Sea claro,
sea simple y sea directo. Por favor, fíjese que en ninguna parte digo que sea rígido. Si
a usted lo ven como a alguien que no cede, lo percibirán como poco razonable.
Mantenga un grado de flexibilidad, pero sólo cuando tenga sentido, no simplemente
cuando sea fácil.
PODER PERSONAL
Así pues, usted conoce ahora la estrategia efectiva para el liderazgo, pero como todo
buen líder sabe, a veces uno necesita ser capaz de influir en los individuos para
conseguir su cooperación. Así que vamos un paso adelante y hablemos de cómo debe
presentarse usted como persona y como líder.
Aquí le presento algunas cosas que debe y que no debe hacer para representar el
papel de un líder responsable y con autoridad. Primero, no confunda nunca la pasión
con la autoridad. No sea excesivamente emocional. La emoción transmite pasión, lo
cual está bien, pero esto no le da a usted confianza ni autoridad. Los líderes
demasiado apasionados son creíbles, pero nadie quiere seguirlos. Segundo, nunca
grite ni le levante la voz a nadie. Esto le hará perder respeto. Y si no puede
gobernarse a sí mismo, no puede guiar a los demás. Y si no puede controlarlos, no
hay razón para que lo escuchen. Tercero, sea respetuoso con todo el mundo. Al
ignorar a una persona usted no muestra lo importante y grande que es, sino al
contrario, lo pequeño que en realidad es. Al darle a todo el mundo respeto y atención
obtiene un ingrediente increíble que es esencial para todo gran líder: ¡carisma! Este
rasgo tan esquivo se consigue mostrando a las personas lo importantes que son, no lo
maravilloso que es usted. La gente seguirá a alguien que la haga sentir bien y valiosa,
no a alguien que la haga sentir poco importante. Los grandes líderes no tratan de
lograr que la gente crea en ellos; más bien le muestran a la gente cómo creer en sí
misma.
Finalmente, numerosos estudios señalan que cuando dos personas o equipos trabajan
juntos para lograr una meta común la tensión se reduce. Si hay lucha interna o falta de
cohesión, desvían su atención a una fuerza externa común. Para una elaboración más
profunda de esta idea, vaya al capítulo 21.
Una vez que usted tenga la pasión y el apoyo de la gente, aún necesita conseguir su
compromiso firme por medio de técnicas psicológicas. El ingrediente más importante
de la mezcla es saber cómo y cuándo pedir ayuda. Los líderes a menudo se hacen y
se deshacen segun manejen este aspecto.
La pregunta es: ¿Cuál es el nivel de participación ideal para el liderazgo? ¿Debería
manejar la situación como una democracia o como una monarquía? El siguiente
estudio ilustra cómo debería comportarse un líder en cuanto a la participación del
grupo. Los líderes que permiten una cantidad razonable de participación de sus
seguidores serán más efectivos en general que los que permiten demasiada o
demasiado poca participación (Vroom y Yetton, 1973). Otra investigación muestra que
si el líder no necesita el apoyo de sus seguidores y puede tomar las decisiones según
su propia pericia, no debería pedir ayuda. En cambio, si necesita el apoyo de la gente,
debe pedirla. El estilo de liderazgo de una persona necesita ser flexible para permitir
las diferencias en estas situaciones.
Repaso de la estrategia
Su visión debe ser clara, simple y organizada. A nadie le gusta o se siente inclinado a
seguir estrategias complejas y desorganizadas.
Entienda la mecánica del liderazgo y cuándo es mejor pedir apoyo y cuándo es mejor
mandar.
Si usted quiere que alguien acepte o haga algo, la primera regla es que debe entender
claramente de qué habla usted y qué le está pidiendo exactamente. Explicar algo una
y otra vez puede ser muy frustrante. Pero adoptando estas dos tácticas usted puede
prácticamente explicar cualquier cosa a cualquiera persona.
Primero, la persona debe conocer el contexto de la información. Para explicar
fácilmente un asunto difícil de entender usted necesita ofrecer una amplia perspectiva
explicando primero toda la situación.
Déle a la persona una visión general para que comprenda el contexto de la situación.
Por ejemplo, usted puede escuchar y memorizar una oracion porque sabe lo que
significan las palabras. Pero diez palabras al azar, como murciélago, ir, volar, cómo,
para, arranque, nunca, caliente, tremendo y gallina son difíciles de recordar. Sin
embargo, una oración de diez palabras es infinitamente más fácil: Los cuatro
muchachos estaban leyendo a Shakespeare en la habitación. Usted puede repetirla y
memorizarla con gran facilidad. ¿Pero cuánto tiempo le llevaría memorizar las diez
palabras anteriores escogidas al azar? La oración es más fácil porque usted entiende
el orden y el contexto de las palabras y cómo se relacionan unas con otras.
Explicar los detalles específicos sin asegurarse primero de que la persona entiende el
concepto, el panorama general, es como armar un rompecabezas sin saber cuál es la
figura. Los que no tienen una buena comprensión de algo generalmente no tienen una
visión general.
Repaso de la estrategia
Déle una visión general antes de entrar en detalles. Esto ubica la información nueva
en un contexto comprensible.
Aplique la ley de la expectativa. Sencillamente afirmar que usted espera que esta
información sea comprendida rápida y fácilmente aumenta su comprension y retención
en gran medida.
20 La regla de la minoría
¿Pero qué ocurre si usted quiere sushi y todos los demás quieren comida italiana? No
hay problema, usted puede salirse con la suya. Cuando la mayoría está en su contra,
esta táctica la inclinará hacia su forma de pensar. Ya sea que quiera que sus ideas se
pongan en práctica en la oficina o ver la película que nadie quiere ver, encontrará muy
útil este método. Ya sea que cuente con un aliado, diez o ninguno, estas reglas de la
naturaleza humana están organizadas estratégicamente para ayudarlo a influir sobre
fuerzas mayores que la suya, (Las técnicas de los capítulos 14 y 16 para lograr que
una persona tome su consejo y para cambiar la forma de pensar de una persona
ciertamente pueden usarse para completar su estrategia general.)
1. COHERENCIA
2. FLEXIBILIDAD
Los estudios muestran que los miembros deben evitar parecer rígidos y dogmáticos.
Una minoría que sostenga la misma posición, independientemente de la nueva
información y de que la situación haya cambiado, no es tan efectiva como una que
demuestra alguna flexibilidad. Esto no contradice la ley anterior. Usted debe ser
consecuente e inflexible en su posición, pero cuando se le presente nueva evidencia o
una situación única debe tomarse tiempo (o al menos parecer como si lo hiciera) para
considerar los hechos nuevos y sopesarlos y no descartarlos sin tenerlos en cuenta.
Una afirmación congruente con esta regla sería: "Es una forma de pensar interesante
que no se ha considerado todavía. ¿Por qué no nos tomamos un tiempo para
determinar su valor?" Una afirmación poco efectiva sería algo como: "¡No, no, no... no
me importa! Nos mantenemos en nuestra posición y ya".
3. DIVIDE Y VENCERÁS
Muchos estudios prueban que cuando tenemos un aliado es mucho más probable que
nos mantengamos en nuestra posición. Eso significa que si Jim sabe que Bob también
está en contra de la idea que usted plantea, será mucho más difícil hacerlo cambiar.
Sin embargo, si Jim piensa que está solo en su postura, no sólo es más probable que
cambie su punto de vista sino que aceptará cosas más fácilmente si piensa que el
grupo está en esa tónica también. No los deje aumentar porque así ganará confianza.
Hable con cada uno por separado e influya en ellos siempre que sea posible.
4. SIMPATÍA
Como una función de la discordia, cuando usted está en desacuerdo con la mayoría a
menudo es percibido como menos amistoso y puede que hasta desagrade. Gustarle a
los demás es un factor esencial un componente esencial para influir en la gente. Así
que el secreto está en señalar que su punto de vista está en favor de los intereses de
los demás, no sólo de los suyos. Aplicar las tácticas del capítulo 1 evitará también que
pierda popularidad.
5. ANGULOS NUEVOS
Siempre que quiera que alguien revalúe su forma de pensar, recuerde introducir
información nueva en la ecuación. De esa forma la persona puede tomar una nueva
decisión basada en información adicional. Esto le resulta más fácil que "cambiar de
opinión". Una buena forma de decirlo es: "Comprendo por qué pensabas así, pero
acabamos de descubrir que [la información nueva]. Basándonos en esa nueva
información quizás podríamos enfocar esto en una forma diferente".
6. APOYO EXTERNO
Ahora bien, ¿qué hace si nadie lo apoya? Cuando no haya logrado nada, apele a la ley
de la prueba social buscando a otras personas, fuera de su grupo, que compartan su
punto de vista. Esto hará que su grupo se incline a revaluar su forma de pensar.
¿Tiene dificultad para encontrar a alguien que lo apoye? No hay problema, busque a
un experto u otras personas que estén de acuerdo con usted y que no estén
involucrados personalmente, en la situación.
Cuando unos estudiantes recibieron un mensaje que apoyaba la realización de un
examen departamental antes de graduarse, encontraron los argumentos fuertes más
convincentes que los débiles. No es extraño. Pero cuando el mismo mensaje no tenía
efecto en los estudiantes aduciendo que esa política comenzaría diez años después la
calidad del argumento no tuvo mucha importancia. La experiencia y credibilidad de la
fuente, en cambio, sí importaron (Petty, Cacioppo y Goldman, 1981).
Así pues, cuando usted no tenga un argumento eficaz, trate de buscar apoyo en
personas que no estén involucradas directamente, puesto que las otras personas
estarán inclinadas a prestar menos atención a la calidad de sus argumentos.
Repaso de la estrategia
Evite parecer rígido o dogmático. A la luz de nueva información, una minoría que
mantiene la misma posición sin tener en cuenta la situación no es tan efectiva como
una que demuestra tener flexibilidad.
Divide y vencerás. Muchos estudios Prueban que cuando tenemos un aliado es mucho
más probable que nos mantengamos en nuestra posición.
Cuando usted está en desacuerdo con la mayoría causa desagrado, lo que hace difícil
que pueda influir en ella. Aplicar las tácticas del capítulo 1 le dará ventaja.
Cuando no haya logrado nada, apele a la ley de la prueba social buscando otras
personas fuera del grupo que compartan su punto de vista.
Lea el capítulo 18 para hacer su argumentación lo más sólida y persuasiva posible
Numerosos estudios han llegado a la conclusión de que la división entre las personas
se diluye cuando hay una amenaza externa. Los sucesos externos despiertan nuestra
necesidad de pertenencia a un grupo y buscamos apoyo, creando un sentido
reforzado de unidad. Las guerras civiles, los conflictos sociales y el malestar interno
cesan a menudo cuando entra en escena un enemigo externo común. Al contrario, los
individuos volverán su atención y hostilidad unos contra otros cuando no están
presentes fuerzas externas. La forma más rápida de lograr cooperación en un grupo
es (a) crear una amenaza externa o (b) contraponer su grupo a otro en algún tipo de
competición. Un enemigo común reúne los bandos contrarios más rápidamente que
cualquier otra técnica de cohesión de grupo.
Una mente sin nada en qué ocuparse, lo mismo que un grupo, se volverá contra sí
misma. Cuando no tenemos nada en qué enfocar nuestra atención, nuestra mente
crea su propio malestar y los temores empiezan a echar raíces. Pero en cuanto hay
algo de interés que absorbe nuestra atención, nuestra mente se aquieta. Por eso
mucha gente encuentra los pasatiempos tan relajantes. Nuestro objetivo es externo y
nuestra mente se absorbe totalmente en algo y nos perdemos a nosotros mismos, por
así decir. Por esta razón los que no tienen nada que hacer son a menudo lo más
neuróticos. Sin un objetivo externo en qué ocupar su atención su mente empieza a dar
vueltas sobre sí misma. Pero una vez que se crea un objetivo nuestra atención se
vuelca hacia él. Del mismo modo, los grupos que se enfrentan a un problema serio
descubren que la lucha interna rápidamente da paso a este nuevo objetivo.
También es interesante un estudio hecho por Ross y Samuels (1993) que muestra que
el nombre dado a un juego tiene una influencia mayor en el nivel de competitividad que
la personalidad de los individuos. Descubrieron que cuando los participantes jugaban
un juego llamado Wall Street eran mucho más competitivos que otro grupo que jugaba
el mismo juego pero que se llamaba Juego Comunitario. Esto es fascinante porque
algo aparentemente tan trivial como el nombre de un juego puede "anular" las
personalidades de los miembros. Por lo tanto, podemos concluir razonablemente que
se debe dar importancia dentro de su grupo al nombre de los subequipos y al del
grupo general. Por ejemplo, si usted tiene dos subgrupos con nombres como "Los
justos" y "Los vencedores" es probable que no inspiren tanta cooperación como si los
nombres fueran "Fondo Común" y 'Tensadores Flexibles".
Punto de apoyo
Organice los bandos opuestos de forma que estén uno junto al otro, no uno frente al
otro. Cuando estamos frente a otro físicamente, nuestra posición se radicaliza, puesto
que empezamos a desarrollar una mentalidad de "nosotros contra ellos". El sentarse
uno junto al otro promueve la atmósfera óptima para la unificación y la cooperación.
Contacto y proximidad: Mantenga los bandos cerca y en constante contacto. Como
hemos visto, la proximidad aumenta el agrado por el otro. Sin embargo, debe tener
cuidado de no exagerar el contacto, pero cierto grado de cercanía es esencial para un
máximo de cooperación.
Repaso de la estrategia
Asegúrese de que su grupo se identifica con una imagen que sea coherente con un
espíritu de cooperación, no de competencia. El nombre que se da a su grupo influye
enormemente en los niveles de cooperación.
Incluso cuando tratamos con personas buenas, honestas y decentes, hay ocasiones
en que se trata de usted contra ellas. Estas tácticas psicológicas le enseñarán a
asegurarse de que saldrá vencedor en cualquier btalla, sea una competición física o
una lucha de ingenios.
Se trate de una batalla de la mente o del cuerpo, las estrategias son casi idénticas.
Esto se debe a que todas las batallas se emprenden primero en la mente: es ahí
donde usted gana o pierde y después el resultado se manifiesta en el mundo material.
Se trate de un partido de tenis, una prueba de ortografía o dos hombres compitiendo
por la atención de una mujer, competir es competir. Ataque la mente de su opositor y lo
dividirá contra sí mismo y después él caerá ante usted sin siquiera haberlo tocado.
Usted no tiene que ser el mejor o el más brillante para ganar, sólo tiene que hacer lo
necesario. Se trate de una batalla física o de una lucha de intelectos, ganará siempre
el que esté mentalmente preparado y tenga una estrategia psicológica. La situación
determinará cuántas de estas tácticas son apropiadas, pero indudablemente cualquier
combinación le dará una ventaja arrolladora.
Existen dos áreas de estrategia diferentes en una contienda militar.
Ánclese en el éxito. Como hemos dicho antes, las anclas se usan a menudo en
hipnosis para ligar eventos o sensaciones que no están relacionados. Repasemos, un
ancla es una asociación entre un conjunto específico de sentimientos o un estado
emocional y un estímulo único, una imagen, un sonido, un nombre, un sabor, etc.
Vemos ejemplos de reflejos condicionados en nuestra vida. Quizás el olor del vodka lo
enferma porque tuvo una experiencia mala con él hace varios años. 0 suena en la
radio cierta canción y usted se acuerda de un amigo en el que no pensaba hace
muchos años. Todos éstos son anclas. Muy similar a la forma en que un hipnotizador
puede chascar los dedos y hacer que una persona se quede dormida, usted puede
"encerrar con llave" cualquier conducta.
Usted puede usar el poder de anclar para mejorar su actuación. Digamos que está
jugando tenis. Cada vez que haga un tiro excepcionalmente bueno, repítase una frase
corta o haga un gesto rápido con la mano. Ésa es el ancla para su acción. Después,
cuando quiera jugar en un estado óptimo, simplemente repítase la frase o haga el
gesto y esto devolverá a su cerebro al mismo estado mental en que estaba cuando
jugó tan bien. Ésta es una herramienta muy poderosa, que usada correctamente, le
permitirá entrar en su mejor estado de actuación fisica o mental en cualquier momento.
Usted puede condicionarse a sí mismo a actuar en un estado óptimo cuando quiera.
Siempre que esté actuando en forma óptima, ancle su estado y después libere esta
energía cuando quiera actuar con la máxima eficiencia.
Ensaye mentalmente. Vea y sienta cómo se verá y actuará en su estado ideal. Cuando
se trata de actuar, los estudios sugieren que un ensayo mental puede ser tan efectivo
como la práctica real. Use su mente para lograr la mejor imagen de cómo le gustaría
comportarse, ¿Cómo se ve y se oye? ¿Cuál es la reacción de los demás? ¿Cómo lo
ven? Hágase una imagen completa de cómo quiere exactamente que se desarrolle su
realidad. Tiene que verse a sí mismo triunfando mentalmente antes de verlo con sus
ojos.
Tenga siempre un plan B. Así no sólo su perspectiva será más sana sino que también
aumentarán sus posibilidades de éxito. El reto, sin embargo, es no prepararse para el
fracaso abandonando el plan original demasiado rápido. Así que recurra al plan B sólo
si su plan original es imposible de realizar. En las fuerzas armadas durante los
ataques, siempre tienen un plan de contingencia para continuar por si algo sale mal.
Recuerde, no importa lo que ocurra, si usted está preparado siempre podrá proseguir.
La facilitación social es la emoción que surge cuando hay otras personas presentes y
nuestra actuación puede ser evaluada; los estudios muestran que esta emoción
mejora nuestra actuación en tareas sencillas, pero la empeora en tareas complejas.
Estos estudios ilustran también que cuando usted es diestro en algo, complejo o no,
tener personas cerca ayuda a su desempeño. Cuando le falta confianza y no es
diestro, actuará peor si hay otras personas observando. Cuando esté compitiendo con
alguien que sea más experto que usted, hágalo sin espectadores. Sin embargo, si
usted es más competente, tenga personas cerca mirando porque lo ayudará a actuar
mejor y su contrincante se desempeñará peor.
Repaso de la estrategia
Haga que haya espectadores cuando sienta que usted es más competente que su
contrincante. Cuando se sienta menos confiado trate de competir sin público.
Para mejorar su desempeño, ancle su éxito para que pueda entrar en su estado
mental ideal cuando quiera.
La forma en que la gente juega y en la que lleva su vida a menudo son paralelas.
Porque, realmente la vida es una serie de decisiones y jugadas, y lo que decidimos
arriesgar y lo que resulta de ellas, a menudo determina el tipo de vida que tenemos.
Mucha gente comete sistemáticamente el mismo error en la vida y podemos verlo
claramente con el ejemplo del juego.
Los casinos funcionan con un porcentaje tan pequeño como el dos por ciento en
juegos como el blackjack y el baccarat. Algunos juegos dependiendo de la habilidad o
falta de ella del jugador pueden dar al casino un margen que llega al veinte por ciento
o más. ¿Entonces por qué en un día típico el ochenta por ciento de las personas
pierde dinero?
JUGADOR A: EL PERSEGUIDOR
Éste es un ejemplo típico del jugador A. Apuesta diez dólares y pierde; apuesta otros
diez y pierde; ahora apuesta veinte y pierde, treinta y pierde. Aumenta sus apuestas
cuanto peor le va. El jugador persigue su dinero tratando de recuperarlo todo en una
sola mano al apostar más para compensar las veces que ha perdido.
¿Y qué ocurre cuando ganamos? Otra razón por la que los casinos tienen lámparas de
un millón de dólares en los vestíbulos no es porque el gobierno los subsidie; es porque
los jugadores no saben cuando parar. Cuanto más tiempo juegue usted, mejor para la
casa. Cuando se queda sin dinero, para. Pero cuando está ganado, ¿cuándo para? A
menudo no lo hace puesto que no hay razón para ello, así que continúa hasta que la
suerte se vuelve contra usted, pierde y entonces se ve forzado a parar.
Otro hecho interesante para tener en cuenta es que todas las estrategias de juego no
exitosas surgen del miedo. Cuando actúa por temor sus decisiones no son lógicas sino
emocionales. I sto hará que usted acabe perdiendo. Nunca haga nada por miedo. Si
necesita ganar, perderá. Debe concentrarse en el juego, no en los resultados. Si usted
está rezando para ganar entonces está temeroso de perder. La mejor mentalidad es la
de desapego total, en la que usted es completamente objetivo y sin emociones. Si
usted está jugando con dinero que no puede permitirse perder es imposible quitar el
elemento emocional de su proceso de toma de decisiones.
Repaso de la estrategia
Cuando las cosas marchan según sus deseos cuando está en una racha de éxito tiene
sentido poner más en juego y aumentar ligeramente sus riesgos. Y cuando esté fuerte,
decida usted cuando parar; no se vea forzado a retirarse prematuramente. Pero
cuando las cosas vayan en contra suya, deténgase y reorganícese.
Nunca haga nada por miedo si puede evitarlo. El miedo nubla su pensamiento y lo
concentra en los resultados negativos. Si usted necesita ganar, perderá porque estará
concentrado en lo que arriesga y no en el objetivo. Desapéguese del objetivo y
concéntrese en la acción antes de realizarla.
Hay varias estrategias diferentes que la gente usa para que le contesten los mensajes.
El menos eficaz, pero más usado, es el mensaje "esto es realmente importante".
Suena más o menos así: "Será mejor que me devuelvas la llamada ... » o "Ésta es una
emergencia..." Lo único que logran estos mensajes es molestar y preocupar
innecesariamente a la persona llamada. Por supuesto, la ocasión determinará el tipo
de mensaje que es más apropiado, pero las siguientes son las mejores tácticas
psicológicas para lograr que cualquier persona le conteste su llamada. Apelan a un
aspecto de nuestra naturaleza primitiva: la curiosidad.
. Estoy tan emocionada por ti. Llámame, hablaremos de ello. Te debo tanto. Cuando
me llames te cuento. Tenías razón, cuando me llames hablaremos de ello. ¡Sé que te
va a encantar! Cuando me llames te diré por qué. ¿Pero qué mensaje hará que le
contesten su llamada más rápidamente que cualquier otro? Deje estas catorce
palabras en un contestador o con una secretaria y espere a que suene su teléfono.
Agradezcolo que has hecho... por favor, llámerne. Me gustaría darte las gracias
personalmente".
Éste es el mensaje completo. La persona llamada sabe que con un mensaje así, no
hay problemas, ni dolores de cabeza, ni explicaciones. Mezcla la curiosidad con la
gratificación. Muestra que usted es una persona agradable por reconocer lo que ella
ha hecho (lo que sea) y eso la hace sentir bien: ser apreciada. Lo más importante, es
confuso. No importa lo tentador que sea un mensaje, si está claro de qué habla, la
persona siempre puede decidir si es o no suficientemente importante para devolverle
la llamada. Sin embargo, si no puede tomar la decisión porque no tiene suficiente
información, como es el caso aquí, entonces no puede concluir que no tiene que
llamarlo. ¿Alguna vez ha encontrado un mensaje confuso en su contestador mezclado
con un montón de mensajes normales? Si le ha ocurrido podrá recordar que el que no
tiene sentido es el que lo hace querer llamar primero para averiguar qué pasa, porque
puede ser importante. Si la persona entiende el mensaje puede concluir por sí misma
si es o no importante. Y usted no quiere que lo haga.
Lo desconocido es lo que necesita ser clarificado. Por esa razón muchas personas
interrumpen una conversación telefónica agradable con un buen amigo para contestar
una llamada en espera anónima. ¿Por qué? Porque no saben quién es ¡y podría ser
importante! Lo desconocido nos atrae. Puesto que quiere que le contesten el mensaje
debe decir quién es usted, por supuesto, pero en cuanto al resto del mensaje déjelos
intrigados. Combinar todos estos factores en un mensaje es una forma certera de
lograr que cualquier persona le responda.
Punto de apoyo
Si usted llama a una empresa pregunte a la persona que contesta el teléfono si usa
libretas de mensajes blancas o de color. Cuando le conteste dígale: "Bien, ¿Me haría
un gran favor? ¿Podría dibujar una cara sonriente junto a mi mensaje?" Se asombrará
de cuántas personas aceptan. Entonces, cuando la persona a la que le dejó el
mensaje los revise, el de la cara sonriente llamará su atención.
Repaso de la estrategia
Deje un mensaje que de algún modo muestre su aprecio, pero no especifique sobre lo
que se trata. Los seres humanos tienen una curiosidad inherente a ellos y al no ser
claro el mensaje obliga a la persona a descubrir de qué se trata.
Bien. Usted ha hecho algo malo, se siente culpable y ha prometido no volverlo a hacer.
Si esto es suficiente para arreglar las cosas, estupendo. Sin embargo, los dos
sabemos que a veces se necesita mucho más que un "lo siento" para arreglar las
cosas. Veamos cómo podemos usar la psicología para lograr el perdón rápidamente.
La estrategia psicológica para lograr el perdón por haber engañado a su pareja es por
supuesto diferente de la que usaría si llegó tarde a una reunión con su jefe por culpa
de un accidente de tránsito. (También la táctica varía dependiendo de si ha sido su
conducta o sus palabras lo que lo metió en problemas. Primero nos referiremos a la
corrección de actos; después verá cómo lograr el perdón cuando dice lo que no debe.)
En los casos en que sus intenciones eran buenas pero las influencias externas
interfirieron, use la siguiente táctica.
Así que si su error está fuera de su control, permita que la persona lo sepa. Una
advertencia: Debe hacerle saber que usted trató de prevenir esta posibilidad, pero no
tuvo éxito. Por ejemplo, si el tráfico fue lo que causó el retraso, debe adelantársele
porque puede estar pensando: "Sabías que esto era importante para mí, así que ¿por
qué no saliste antes?". Cuando explique las circunstancias incluya también el hecho
de que usted anticipó la posibilidad de este problema en este caso el tráfico pesado
pero era mucho mayor de lo que usted estaba razonablemente preparado.
Otra cosa para tener en mente es que su disculpa debe ser sincera y específica. Se ha
comprobado que hacer un recuento específico de la situación al contrario de
generalidades vagas, es altamente efectivo para reducir la cólera de una persona
(Shapiro, Buttner y Barry, 1992). ¡Todo está en los detalles!
Esto debería ser suficiente, pero si no lo es, usted puede proceder a aplicar las
tácticas siguientes, que están diseñadas para rupturas más serias de la confianza y la
consideración y para cuando las circunstancias no estaban fuera de su control.
Cuando usted ha hecho algo malo, la persona se siente violada en cierto sentido. Hay
una sensación de traición. Siente que no la respeta lo suficiente, que no le importa,
que no está interesado, etc. Por lo tanto, decir simplemente "lo siento" no corrige la
situación, porque usted no ha restaurado su sentido de la dignidad. Sus acciones le
quitaron algo de su poder, y para hacerla sentir mejor usted necesita devolver su
estado psicológico al punto en que estaba.
Al contrario que en la situación anterior, aquí es importante que usted asuma total
responsabilidad por sus acciones. No eluda la culpa ni busque excusas; eso sólo
exacerbará la situación. La persona espera, hasta cierto punto, que usted le eche la
culpa a los demás. Esto no ayuda, porque si la culpa se sitúa en otra parte, entonces
sólo esa otra cosa o persona puede restaurar el sentido de importancia de la persona
afectada. Si usted asume la responsabilidad, entonces tiene el poder de arreglar las
cosas. Insisto, se debe restablecer el equilibrio del ego de la persona. Necesita saber
que no se aprovecharon de ella y que se consideraron sus sentimientos.
A continuación, discúlpese por su conducta. A veces olvidamos decir las palabras "lo
siento". Y aunque sólo esas palabras no son suficiente, son esenciales para su
estrategia general para lograr el perdón. A veces es muy difícil decirlo, pero así como
es de dificil es de importante para lograr el perdón.
Finalmente, asegúrese de ser sincero. No le creerán una excusa que no sea sincera. Y
si no le creen, no lo perdonarán. Si no está verdaderamente arrepentido
probablemente repetirá lo que hizo y le causará dolor y tristeza de nuevo a la persona.
Así que si no lo siente de verdad no lo diga. Si no está realmente apenado y
arrepentido puede que sea hora de revaluar la relación o la situación.
Una fase muy importante en este proceso es hacerle saber a la persona que usted
está dispuesto a enfrentar y aceptar todas las consecuencias de sus actos. Una
disculpa sin remordimiento es como un auto deportivo sin combustible: se ve
grandioso pero no hace nada. Mostrar remordimiento le devuelve a la otra persona lo
que perdió: poder.
Probablemente ella no hará nada o mucho menos si usted no pone su destino en sus
manos. Pero recuerde que su destino (al menos con respecto a ella) en este momento
de todos modos está en sus manos. Pero darle libremente el poder de determinar su
destino y reconocer que es de ella es extremadamente importante. Quiere justicia por
lo que usted ha hecho. Quiere poder ejercer sus derechos como ser humano y recibir
el respeto que merece. Devuélvale lo que le quitó y será perdonado. Puede empezar
por decir algo como: "Sé que lo que hice está mal. Tienes todo el derecho de estar
furiosa conmigo. Estoy dispuesto a aceptar las consecuencias de mis actos".
Punto de apoyo
palabras o su disposición a ser castigado como una forma de arreglar las cosas. En el
equilibrio encontramos justicia. Y en la justicia encontramos el perdón.
En casos extremos, puede ser necesario emplear la siguiente técnica que le permitirá
apaciguar rápidamente la ira. En ella usted va un paso más lejos y realmente sugiere
un castigo, el más duro que se le ocurra. Entonces la persona se verá forzada a
disuadirlo, porque probablemente sentirá que ni siquiera usted merece un castigo tan
duro. Y al hacerlo, sin darse cuenta, crea un efecto que en psicología es llamado
disonancia cognitiva. (Este se caracteriza por un estado de ansiedad que surge
cuando un individuo mantiene dos actitudes o ideas en conflicto. Para reducir la
ansiedad, la persona tiene que justificar la inconsistencia.) Una vez que lo disuada
tiene que aceptar que lo que usted hizo no era "tan malo como pensaba" como una
forma de darle sentido inconscientemente a sus pensamientos encontrados. En otras
palabras, racionalizará para sí misma: "Si lo que hizo es tan malo, ¿por qué habría de
disuadirlo de ese castigo.
Hasta ahora las tácticas lo tienen en el agua, pero si quiere llegar a tierra firme,
necesitará ir más allá y aplicar la siguiente.
Pero en este punto usted enfrenta un reto, uno que hunde a la mayoría de personas
que ha llegado hasta aquí con éxito. ¿Cómo explica sus acciones sin que parezca que
las está justificando? Esto es lo último que usted quisiera hacer.
Lo mejor que puede hacer para explicarlas es atribuirlas al miedo. Bien se trate de
algo personal o de una situación de negocios, usted está tratando con seres humanos.
Y todo el mundo entiende el miedo. Es primario y puro (por ejemplo: "Estaba aterrado
porque las cosas iban tan bien"; "Temía que usted me despidiera si no mentía sobre la
garantía"; "Mentí porque temia que me odiaras si averiguabas la verdad").
Ahora sus acciones se ven menos como una traición que violó la confianza y más
como un acto irracional de miedo realizado por una persona confundida. Promueve su
vulnerabilidad y ayuda a restaurar la sensación de poder y de dignidad de la persona.
Al mitigar sus miedos, usted toma un papel activo e 1 . mportante en la restauración de
la sensación de control de la persona.
Punto de apoyo
¿Alguna vez se ha preguntado por qué después de que otro conductor se nos
atraviesa en la carretera a menudo hacemos dos cosas? Una, nos enfurecemos, y
dos, intentamos ver como es el aspecto de la persona. Primero, nos enfadamos
porque no se nos "respetó" y segundo queremos ver su aspecto para determinar si es
el tipo de persona que lo haría "a propósito". Una viejecita no nos enfurece tanto como
lo haría un joven. Eso es porque asumimos que nos interceptó por accidente y que no
es algo personal. Todas nuestras respuestas están basadas en el ego. Alguien nos
hizo algo y nos enfadamos.
Lo que se ha tratado son errores de conducta, pero a veces son nuestras palabras las
que hieren. Esto es tan sencillo que puede ser tratado con una técnica llamada
globalizar. Si usted mete la pata con demasiada frecuencia o habla sin pensar, esta
técnica le ahorrará mucha energía y pesares.
EN PERSONA
TERCERA PERSONA
Si sus palabras se interpretan mal o usted ofende sin intención a alguien, globalice sus
palabras y ubique su afirmación en un contexto más amplio. Por ejemplo: %o, yo no
dije que me estuvieras enloqueciendo, dije que todos me estaban enloqueciendo".
Puesto que lo está oyendo en tercera persona, generalmente queda una duda
razonable sobre lo que quiso decir como para sacarlo a usted del apuro.
Repaso de la estrategia i
Haga saber a la persona que usted está preparado para enfrentar y aceptar todas las
consecuencias de sus actos y que su destino está en las manos de ella. Debe
restaurar su sensación de poder.
Como lograr que alguien tome las malas noticias de la mejor manera posible
A veces la vida puede traernos sorpresas desagradables. Cuando usted esté en una
situación en la que tenga que ser portador de malas noticias, esta estrategia será de
gran ayuda. Usted está a punto de ver que puede modificar sustancialmente la forma
en que una persona responde a cualquier situación cambiando la forma en que da la
información.
Los líderes de las sectas religiosas conocen el poderoso impacto del lenguaje. En
1997, treinta y nueve miembros de la Iglesia de las Puertas del Cielo se suicidaron en
masa. Al revisar las cintas de vídeo que los miembros grabaron antes de su muerte,
repetidamente se les oyó referirse a sus cuerpos como un recipiente. Es mucho más
fácil destruir un "recipiente" que el propio cuerpo. Con el tiempo empezaron a aceptar
gradualmente la idea de que sus cuerpos eran meramente un recipiente y por lo tanto
de poco valor e importancia. Por eso resultó tan fácil para ellos "prescindir» del
recipiente y matarse.
Punto de apoyo
Los políticos entienden bien el poder de las palabras para influir en las actitudes y en
la conducta. La gente se siente más cómoda al oír hablar de una acción militar que de
una guerra, aunque significan lo mismo. Preferimos oír daños colaterales a que la
propiedad de los civiles fue destruida accidentalmente; y no nos molesta tanto oír
fuego amistoso como lo que realmente significa, que nuestros soldados dispararon a
sus propias fuerzas. Y, por supuesto, al ver las noticias de la mañana nos
conmovemos menos cuando nos hablan de víctimas que si el reportero dijera lo que
esto significa: muertes. La mayoría sabe lo que estas palabras "significan realmente",
pero, insisto, eso no importa. Se trata de cómo digerimos la información y el lenguaje
es esencial en ese proceso.
Usted debe evitar el lenguaje duro. No use palabras que tengan una fuerte
connotac¡ón negativa. Hacer esto evita una reacción automática como la que a
menudo tenemos al Firmar contratos y ayuda a que la información se procese y se
interiorice más lentamente. En forma muy similar a la que un cuerpo entra en
conmoción si hay una sobrecarga de dolor, la mente puede conmocionarse. Sin
embargo, si recibimos la información en intervalos más pequeños (usando un lenguaje
más suave) la conmoción se atenúa y esto ayuda a disminuir el impacto de la noticia.
Decimos que "el tiempo lo cura todo porque lo repentino de la información negativa es
lo que amplifica el dolor. El paso del tiempo nos permite poner las cosas en la
perspectiva adecuada. Cuando algo acaba de ocurrir no tenemos perspectiva porque
está en el presente; es completamente absorbente.
Digamos que usted acaba de enterarse de que su hijo de nueve años tomo su auto
para dar una vuelta y la policía lo trajo a casa. Usted estaría enfadado con toda razón.
Sin embargo, ¿qué pasaría en cambio si usted se enterara ahora de que su hijo de
diez y nueve años tomó el auto hace diez años?
Punto de apoyo
El lenguaje también modifica nuestra percepción de cómo recordamos las cosas. Una
investigación de Loftus (1979) sobre los testimonios de testigos oculares nos muestra
que la forma en que se formula la pregunta puede causar un impacto sustancial en
cómo recordamos los detalles. Por ejemplo, respecto a un accidente automovilístico, a
quienes se preguntó a qué velocidad iba el auto cuando se estrelló contra el otro,
hicieron estimaciones más altas que aquellos a quienes se preguntó a qué velocidad
iba cuando golpeó al otro auto.
Cuando una persona se desestabiliza por un suceso de su vida, es por una o más de
estas creencias: (1) siente que la situación es permanente; (2) siente que es crítica en
el sentido de que es más significativa de lo que realmente es; (3) piensa que es
completamente absorbente, es decir que va a invadir y afectar otras áreas de su vida.
Cuando estamos inseguros de lo que significa algo, miramos a nuestro entorno para
que nos dé información de lo "perturbados" que deberíamos estar. Cuanto más
relajado y seguro esté usted al relatar los hechos, más calmada estará la otra persona.
Otra técnica psicológica que forma parte de su estrategia general está basada en la
ley del contraste. Esta ley establece que no vemos o pensamos algo como es por sí
mismo, sino en relación con otras cosas. Es decir, contrastamos y comparamos. (Este
fenómeno se discute con mayor profundidad en la sección I.) Al contrastar la situación
con una peor se percibe bajo una nueva luz y desde una perspectiva mejor. Por
ejemplo, si usted lleva su auto al mecánico y él le dice que necesita frenos nuevos,
usted puede que se sienta muy disgustado. Sin embargo, si primero él le dijera que tal
vez necesite un motor nuevo, una nueva transmisión y un nuevo sistema de escape, y
una hora después le dijera que sólo necesita los frenos delanteros, su pensamiento
podría ser: "Tuve suerte". No es la información en sí misma lo más importante, sino
más bien su contexto y como se relaciona con todo lo demás.
Tomemos un ejemplo que incluye algunas de las tácticas explicadas. Aunque depende
completamente de la situación, la siguiente estrategia reducirá en gran medida el
impacto psicológico y el dolor. En esta situación un médico determina que su paciente
tiene diabetes. Fíjese en la diferencia de enfoque y decida, si usted fuera el paciente,
de qué doctor preferiría recibir la noticia.
DOCTOR A
Señor Doe, siento tener que darle esta noticia, pero usted tiene diabetes. Las pruebas
de laboratorio lo confirman. Y, no sé si usted lo sabe o no, esta enfermedad puede
amenazar su vida y usted puede tener complicaciones serias como la amputación 0 la
ceguera. Todo en su vida debe cambiar desde este momento, lo que come, el ejercicio
que hace y así sucesivamente. Realmente lo siento mucho.
DOCTOR B
Bueno, usted está en un buen estado de salud, excepto por una anomalía en los
niveles de azúcar de la sangre. Estoy contento por los resultados y que usted viniera
en este momento, porque se podría haber convertido en algo mucho peor. Usted está
en buena compañía también, hay millones de personas que tienen diabetes; ése es su
nombre técnico. Y la mejor noticia es que es completamente controlable y si se toman
los cuidados adecuados ni siquiera será consciente de ella. De hecho, creo que la ha
tenido desde hace un tiempo y verá que con una dieta mejorada y un programa de
ejercicios usted tendrá mucha más energía y vitalidad.
Como vio, los dos doctores dieron esencialmente la misma información, pero el doctor
B dio la noticia en dosis más pequeñas, lo que permite que la persona empiece a
aceptar la idea, digiriendo mentalmente la situacion y por lo tanto reduciendo
significativamente el impacto. Usó un lenguaje más suave e insistió en que había
aspectos positivos en la situación como una salud general buena. Su tono fue
completamente positivo y dijo frases como: "me alegra haber detectado esto..." en
lugar de "siento..." Por supuesto que el paciente necesita ser informado de otros
detalles, pero a su tiempo. Y una vez que se digiere la novedad se puede recibir más
información sin la conmoción usual y la depresión que la acompaña.
Repaso de la estrategia
Evite palabras que tengan una connotación negativa. El lenguaje es la base del
pensamiento y el pensamiento es la extensión de la emoción. Por lo tanto, usted
puede disminuir sustancialmente la reacción de una persona ante una situación
escogiendo las palabras adecuadas.
Use la ley del contraste y la comparación para ilustrar cómo la situación podría haber
sido peor de lo que en realidad resultó.
Muchos de nosotros hemos tenido la experiencia de prestar algo, dinero, una sierra o
cualquier otra cosa y de sentirnos incómodos cuando pedimos que nos lo devuelvan.
Por supuesto no es su obligación recobrarlo, la persona que lo pidió prestado debería
devolverlo sin tener que pedírselo. Pero cuando no lo hace, éste es el modo de
recuperar cualquier cosa rápida y fácilmente. (A propósito, si usted tiene dificultad para
decir no cuando le piden algo, lea el próximo capítulo y ¡no vuelva a sentirse culpable
nunca más!)
Si esto no funciona, entonces usted necesita presionar más. Puesto que alguien tiene
lo que usted quiere, necesita apelar a su ego. Esto puede hacerse de varias maneras.
Se pueden usar en órden las siguientes estrategias hasta que logre el éxito. Como
verá, si encuentra resistencia, las tácticas aumentan en presión.
Dígale que usted sabe que ella es el tipo de persona que actúa correctamente. De
hecho, es algo que le admira mucho. Esta afirmación trae su autoestima y sus
creencias a colación (hemos hablado de esto detalladamente en capítulos anteriores).
Ahora, no devolviéndole lo que le pidió prestado se arriesga a tener que revaluar el
concepto que tiene de sí misma. Usted podría decir algo como: "Sabes, Samantha, lo
que me gusta de ti es que siempre tratas de hacer lo correcto y lo justo". Entonces,
unas horas después, simplemente pídale el dinero y ella estará inconscientemente
motivada a hacer lo "correcto y lo justo".
2. Con esta técnica usted apela a su sentido de la dignidad. Dígale que algunas
personas que ambos conocen (no necesita mencionar nombres) le han dicho que
nunca le devolverá lo que le prestó. Usted podría decir: "No quisiera que tuvieran
razón; eso nos haría vernos tontos a los dos". Esto le hará sentir que todo el mundo
está hablando de ella y va a querer establecer un control de daños, lo que significa
que le dará lo que le debe.
3. Si esto no funciona usted necesita tomar medidas más severas. Dígale que va a
tener que decirle a los demás lo que pasa para que no pierdan dinero con ella como le
pasó a usted. La mayoría de las personas harán cualquier cosa para proteger su
imagen pública, especialmente si depende de algo tan sencillo y tan fácil como
devolver algo que han pedido prestado.
Repaso de la estrategia
Simplemente pida lo que prestó y explíquele a la persona la razón por la que necesita
que se lo devuelva ahora.
Dígale que usted cree que ella es el tipo de persona que siempre trata de hacer lo
correcto.
Apele a su sentido de la dignidad. Dígale que algunas personas que ambos conocen le
han dicho que no le devolverá lo que le prestó.
Dígale que va a tener que contarle a los demás para que no pierdan algo con ella
como le pasó a usted.
Recuerde también que las personas hacen favores a las personas que les gustan. Y
sí, algunos consideran un favor devolver lo que deben. Si lo anterior no sirve, lea el
capítulo 1 para asegurar el éxito.
"No" es una oración completa, así que dígala. Pero si usted siente que al decir no dará
inicio a una discusión, use la siguiente técnica. Es una de las mejores herramientas
psicológicas y le ahorrará mucho pesar y aflicción.
Hay una regla de persuasión llamada reciprocidad que dice básicamente que cuando
alguien nos hace un favor sentimos la necesidad de corresponderle. Hemos
mencionado esto antes, pero lo explico brevemente de nuevo: Es la misma razón por
la que los grupos religiosos ofrecen una flor o algún otro obsequio en los aeropuertos o
en las calles. Saben que muchas personas se sentirán impulsadas a darles un
donativo. Sabemos que no tenemos que hacerlo, pero nos sentiremos incómodos si no
lo hacemos, aunque no pedimos el obsequio. Cuando alguien nos da algo (por
ejemplo, tiempo, información, un regalo) a menudo nos sentimos en deuda. Ésta es la
razón también por la que muchos de nosotros tenemos dificultad para no comprar algo
en una tienda después de que el vendedor "empleó todo ese tiempo" en nosotros. Nos
hace sentir más cómodos corresponder en alguna medida, en este caso comprando
algo. En general, los vendedores son muy conscientes de que si invierten mucho
tiempo en usted, mostrándole un producto o demostrándole cómo funciona, usted se
sentirá en cierta medida obligado a comprarlo, incluso si no está seguro de que
realmente lo quiere.
Aquí tiene otro rasgo fascinante y efectivo de esta técnica. Fíjese en el uso del
"porque" en el ejemplo anterior, está ahí por una razón. Un estudio hecho por Langer,
Blank y Chanowitz (1978) descubrió que la palabra "porque" tiene un poder
asombroso.
Al pedir pasar primero en una fila para usar la fotocopiadora, el colaborador de Langer
decía: "Disculpe, ¿Puedo usar la fotocopiadora?", lo que poco más de la mitad de las
personas aceptaba. Lo fascinante es que Langer descubrió que podía lograr la
aceptación de casi todo el mundo cuando cambiaban la petición a: "Disculpe, ¿puedo
usar la fotocopiadora porque tengo que hacer unas copias?" La razón no tenía ningún
sentido. Por supuesto, uno necesita la fotocopiadora para hacer copias. ¿Entonces por
qué funciona tan efectivamente? Porque la palabra "porque" libera una aceptación
inconsciente de que una explicación válida será dada. Oímos algo y tenemos una
respuesta casi automática a aceptarlo. Tenga o no sentido la oración, asumimos que sí
lo tiene y por lo tanto no nos molestamos en procesar la información.
Así que cuando quiera decir no, simplemente dígalo, use la palabra porque y pida un
favor a continuación. La conversación acabará sin sentimientos desagradables y con
una gran sensación de bienestar por su parte.
Punto de apoyo
Si usted no está muy seguro de que puede ayudar, no diga que no está seguro o que
lo pensará. la cosa más inteligente que se puede hacer cuando le pregunten es dar un
"¡síV' rotundo. Si puede cumplirlo, estupendo, pero si no puede, la otra persona al
menos sabe que lo intentó porque inicialmente usted aceptó con entusiasmo. Por lo
tanto, la razón por la que no puede cumplir no es porque no quiera sino porque no
puede. El asunto empieza al comienzo, cuando le preguntan por primera vez. Si
alguien le pide un favor, diga inmediatamente: "No hay problema". De esa forma si
resulta que no puede hacerlo no parecerá que está buscando excusas.
Repaso de la estrategia
Cuando diga que no al favor (que le piden) pida un favor a la otra persona
inmediatamente después de decir no a su petición. Al pedirle un favor que no puede
hacer, usted cancela en efecto su deuda en cuanto la otra persona declina su petición.
Cuando usted le diga que no y antes de pedirle que haga algo por usted use la palabra
porque en su excusa. La palabra porque dispara una aceptación inconsciente de que
dará una explicación válida.
29 Cómo convertir a una persona descortés y antipática en su mejor amiga
Siempre que alguien lo trate con rudeza o crueldad es por alguna de estas cuatro
razones. Primera, piensa que no le gusta a usted; segunda, se siente amenazado por
usted; tercera, actúa cruelmente con todo el mundo y cuarta, usted le ha dado una
razón para no gustarle. Si el caso es la razón cuarta, vaya al capítulo 25 que le enseña
cómo lograr que lo perdonen. Si se trata de las razones uno, dos o tres, lea este
capítulo para que se entere de una estrategia psicológica muy efectiva para mejorar la
actitud de cualquier persona hacia usted.
Primero, asegúrese de que el problema no es suyo. Con esto quiero decir que las
investigaciones muestran que una persona con imagen positiva de sí misma tiende a
asumir que los demás responderán amablemente a ella. Y lo contrario es cierto
también. Los que tienen una imagen pobre de sí mismos tienden a creer que
simplemente no les gustan a los demás. (Puesto que no se gustan a sí mismos sienten
que a los demás les pasa lo mismo.) Por lo tanto, si usted tiene una baja autoestima
esto es lo que podría estar causando su sensación de que le desagrada a los demás.
Si éste es su caso hay varios libros excelentes para aumentar su autoestima.
Yendo más allá de la autoestima, si usted espera que alguien sienta desagrado por
usted independientemente de cómo se siente usted consigo mismo esa persona
seguramente cumplirá esa profecía. Incluso si usted tiene una autoestima alta pero
cree que no le gusta a esa persona, es probable que la perciba en forma coherente
con sus creencias. Adicionalmente, sus expectativas pueden incluso causar que ella
actúe de esa manera. Las expectativas juegan un papel preponderante en cómo se
desarrollan nuestras relaciones, porque como hemos visto a lo largo de este libro, la
gente lo tratará en la forma que usted espera que lo haga. Asegúrese de que no es su
actitud o sus falsas creencias lo que está causando la desavenencia.
Muchos estudios indican que una vez que descubrimos que le gustamos a alguien,
tendemos a que él o ella nos guste también. Esto se conoce como afecto recíproco.
Tendemos a admirar, respetar y a que nos guste alguien una vez que se nos dice que
tiene los mismos sentimientos hacia nosotros.
Ahora bien ¿cuál es la mejor forma de comunicar su afinidad con esa persona? Dígale
a un tercero, quizás a un amigo mutuo, que usted sinceramente quiere y respeta a esa
persona. Una vez que esta información llegue a la otra persona, usted se asombrará
de lo rápido que se acerca. Todo el mundo, sea un compañero de trabajo, su jefe, su
asistente o un vecino, necesita sentirse apreciado. Deje que esta tercera persona sepa
lo que usted siente de verdad por esa persona y observe cómo ocurre la magia.
Usted puede estar pensando: "¿Por qué no voy y le digo yo mismo? ¿Por qué toda
esta mascarada con una tercera persona?" Bueno, hay en realidad dos razones por
las que no debe decírselo usted mismo. Una es que corre el riesgo de que el otro
piense que usted no es sincero. Cuando usted oye algo de una tercera persona
raramente cuestiona la veracidad de esa persona. Esto se debe a que la tendencia del
pensamiento es: "¿Qué ganaría con mentirme?"
Otra razón por la que esto funciona mejor por medio de una tercera persona es por
una singularidad de la naturaleza humana que se ilustra en el siguiente estudio. La
gente con una autoestirna alta o moderada responde al afecto de los demás con
afecto recíproco. Pero la gente con baja autoestima responde en forma muy diferente
(Curtis y Miller, 1986). Lo mismo que su propia imagen distorsiona sus creencias sobre
cómo lo ven los demás, la imagen de la otra persona distorsionará cómo lo ve a usted.
Si ella piensa que no tiene mucho valor o incluso que no es digna de ser estimada, sus
palabras amables no tendrán garantía y probablemente no responderá a ellas. Aunque
la lógica simple podría concluir que una persona con baja autoestima se sentiría
encantada de gustarle a alguien, usted debe superar sus barricadas mentales, que
son: "¿Por qué esta persona está siendo tan amable conmigo? ¿Qué está mal en
ella?" Sin embargo, al no expresarle su afecto directamente, usted evita esta barrera
negativa.
Bien, usted usa la táctica de la tercera persona para poner a la persona de su lado,
pero cuando se encuentra con ella ¿habla sólo de cosas sin importancia? Hablar sobre
el clima no es una mala elección, pero si usted realmente quiere causar impacto use la
regla más antigua para lograr gustarle a cualquier persona. La tomo de Dale Carnegie,
que fue uno de los grandes en comprender la naturaleza humana. En las ocasiones en
que hable con esa persona mantenga la siguiente táctica en su mente. Interésese en
los demás y logrará gustarles más rápidamente que si gastara todo el día tratando de
hacerlos interesarse en usted. Y es increíblemente fácil hacer que una persona hable
de sí misma por horas. Simplemente hágale preguntas sobre ella y las compuertas de
la conversación se abrirán.
Pero una conversación con un solo participante es más un monólogo que un diálogo.
Así que cuando dé información sobre usted mismo, recuerde esta regla de la
naturaleza humana. Nos gusta la gente que gusta de nosotros y que es como
nosotros. Si descubre que ustedes dos comparten creencias o ideas similares sobre
algo, usted habrá creado un puente psicológico que hará a la otra persona sentirse
más cerca de usted y responder más favorablemente.
Y sobre todo, recuerde que usted le gusta a la gente, no por lo que ellos sientan por
usted sino por cómo los hace sentir consigo mismos. Usted puede pasar todo el día
tratando de que la otra persona lo estime y piense bien de usted, pero lo que marca la
diferencia es cómo la hace usted sentir cuando está cerca. Cualquiera que sea la
dinámica de la relación, al hacerla sentirse cómoda, bienvenida y relajada usted habrá
avanzado mucho hacia el desarrollo de una buena, sincera y duradera amistad.
Repaso de la estrategia
Al mostrar interés en ella usted logrará gustarle más rápidamente que si gastara todo
el día tratando de que ella se interese en usted.
Hable de las cosas que ustedes comparten y tienen en común, ideas, valores,
pensamiento, etc.
Usted le gusta a otra persona dependiendo de cómo la hace sentir consigo misma.
Usted puede ser la persona más extraordinaria del mundo, pero le desagradará si la
hace sentir poco importante o insignificante.
¿Le gustaría defenderse sin ponerse a la defensiva? ¿Le gustaría darle la vuelta a las
acusaciones falsas y usarlas en su favor? Ahora será capaz de detener un rumor en
seco y obtener beneficios con esta certera táctica psicológica.
Este estudio ilustra la efectividad de esta táctica y cómo el anonimato físico disminuye
las inhibiciones. Zimbardo (1970) vistió a unas mujeres de la universidad de Nueva
York con capas y capuchas blancas. Se les pidió que dieran "choques eléctricos" a una
mujer. (Por supuesto los choques no eran reales, pero las participantes creían que sí
lo eran.) Apretaron el interruptor del choque por un periodo dos veces más largo que
otro grupo de mujeres que no estaban enmascaradas y que llevaban escarapelas con
sus nombres claramente visibles.
También es más fácil hacer daño a aquellos que no vemos como personas reales y
también a aquellos que no vemos físicamente. En la guerra, arrojar una bomba sobre
una ciudad puede acarrearle menos trauma psicológico a un piloto que el que puede
causarle a un soldado disparar a un solo hombre. Algunos experimentos paralelos nos
muestran esto: Cuando no estamos unidos a una persona cuando no la vemos y está
lejos fisicamente estamos más dispuestos a infligir dolor físico. Esto también se aplica
a infligir dolor psicológico, como cuando se hacen afirmaciones difamadoras. Fíjese en
que hay dos criterios psicológicos independientes. Uno es el de la visión podemos ver
a la persona y el segundo es el de la proximidad, qué tan cerca está la persona de
nosotros físicamente.
Estos estudios y muchos como ellos, delinean tres estrategias diferentes para detener
la murmuración. Primero, vaya a la fuente o a quien sea responsable de los rumores e
identifique a esa persona. Hágale saber que usted es consciente de quién es y de lo
que está haciendo. Segundo, debe humanizarse ante esa persona. Hágale ver que
hay una persona real detrás de los rumores. Tercero, haga esto en persona cuando
sea posible. La proximidad real la cercanía establece una gran diferencia.
Bien, esto funciona cuando usted conoce la fuente, ¿pero si no la conoce? ¿Qué
ocurre si es sólo un rumor que anda por ahí y usted no sabe cómo empezo ni quién lo
comenzó? 0, ¿qué pasa si usted conoce a la persona pero a ella no le importa el daño
que esos rumores le están haciendo a usted y a su reputación? Para estos casos, la
siguiente estrategia psicológica es un método increíblemente efectivo de control de
daños.
Pero usted puede usar esto en su favor. En lugar de tratar de negar, de defenderse o
de minimizar el rumor, lo que puede hacer que la gente lo crea más, simplemente
extienda un rumor más exagerando que opaque al otro, pero que también lo
incorpore... por ejemplo, digamos que anda rodando un rumor de que usted ha estado
robando a la empresa. Negarlo puede hacerlo "parecer" culpable. En lugar de ello,
debería extender el rumor de que usted usó el "dinero robado" para mantener a sus
treinta y seis hijos adoptivos o para comprar un puesto en la cápsula espacial. Ahora
bien, este nuevo y más audaz rumor es más difícil de creer y arroja dudas sobre la
veracidad de los dos. La mayoría de la gente lo rechazará como falso si no suena
plausible. No tendrían razón para desmenuzarlo buscando los detalles de verdad si
todo el asunto suena inventado. Esto se debe a que los rumores se ven en blanco y
negro, como verdaderos o falsos. Puesto que rara vez hay evidencia material en un
rumor, cada persona decide si tiene sentido o no. Así pues, cuanto más exagerado es,
menos sentido tiene y menos interesante se vuelve. El rumor se diluye en una
corriente de falsedades obvias, enterrado bajo una avalancha de absurdo. Nadie sabe
qué creer de quién.
Repaso de la estrategia
Si usted sabe quién es el responsable de los rumores, diríjase a él y hágale saber que
usted es consciente de quién es él y de lo que está haciendo.
Debe humanizarse. Hágale ver que hay una persona real detrás de los rumores.
Cuando alguien es rudo con nosotros nuestra primera reacción es proteger nuestro
ego. Respondemos con algo como: "Cómo se atreve a hablarme así"; No me gusta
eso y me siento muy molesto"; "No me grite" y así sucesivamente. Convertimos a esa
persona furiosa en nuestro problema. ¿Por qué debería usted dejar que otro determine
cómo se siente? Enfadarse sería darle a otra persona el control sobre su estado
emocional. Esto es mucho poder para una persona, especialmente para alguien que
es rudo con usted. Esto es más que palabras huecas de autoayuda; hay en realidad
un componente psicológico muy fuerte aquí.
Si usted resiste su inclinación natural a ponerse a la defensiva, puede sorprenderse de
lo que pasa. En lugar de: "¿Por qué me está tratando así?" intente decir: "Usted
parece estar teniendo un mal día hoy". En lugar de: "Yo no hice nada, no me hable
así", diga: "Esto parece haberlo molestado". No tome posesión del problema de él, es
su problema no el de usted. Las dinámicas psicológicas cambian dramáticamente tan
pronto como usted usa la palabra "yo" o "me". Entonces se vuelve algo entre usted y
él. Al usar la palabra "usted" mantiene el balón en su campo y el problema se queda
como algo exclusivamente de él.
Si esta conducta abusiva es parte de un patrón general y usted tiene una relación con
esa persona, preste atención a lo que sigue. En el fondo de las relaciones
interpersonales yace la verdad de que una persona lo tratará en la forma que usted lo
entrene para hacerlo. Usted debe hacerle saber que su conducta es inaceptable y no
será tolerada. Así que la primera cosa que usted debe hacer es llamarle la atención
sobre su conducta y hacerle saber que es inaceptable. En un mundo perfecto esto
sería suficiente... pero no vivimos en un mundo perfecto. Así que veamos por que la
persona hace esto y qué puede usted hacer al respecto.
Lo trata de ese modo porque lo hace sentirse poderoso. Si usted está preocupado por
su seguridad física reconozca su 11 autoridad y poder" para atenuar su ira. Para hacer
eso, diga simplemente: "Usted tiene razón, lo siento". Estas palabras mágicas
habitualmente cierran el flujo verbal de veneno. Después aléjese y póngase en
contacto con las autoridades. Si lo anterior no funciona suficientemente rápido, puede
usar esta táctica: muéstrese más molesto consigo mismo de lo que está la persona.
Está gritando porque quiere que usted se sienta como él: furioso, herido, frustrado y
pequeño. Así que si lo hace creer que usted se siente peor que él, no logra nada más
gritando. Cuando usted se golpea a sí mismo él no tiene razón para seguir pateando.
Cuando la andanada termine, aléjese y considere seriamente la relación.
Repaso de la estrategia
¿No le parece molesto hacer una pregunta y recibir una respuesta vaga o apática?
Supongo que sí. Le dan una respuesta, pero no tiene ninguna información útil. Las
siguientes herramientas psicológicas le permiten concretar fácilmente una respuesta
vaga en una más directa y confiable. Aquí tiene algunos ejemplos de cómo convertir la
ambigüedad en información específica, detallada y utilizable. Fíjese cómo es más útil
la técnica "b" que la respuesta tradicional que aparece en "a".
aIb
COMENTARIO No me pareció que la reunión saliera bien
aIIa
COMENTARIO: No sé si podría.
RESPUESTA: ¿Qué quiere decir con que no sabe? o ¿Por qué no podría?
COMENTARIO: Simplemente no sé
aIIb
COMENTARIO: No sé si podría.
A nadie le gusta que lo pongan en una situación en la que siente que tiene que
defenderse. Por eso, muchas veces, cuando le pregunta usted a alguien qué piensa o
qué siente, contesta: "No sé". Esta respuesta puede atascar una conversación y
dejarlo a usted en el aire. A veces es más fácil decir "No sé" y por eso lo decimos en
primera instancia. Y si usted responde con un "¿Cómo así? , como se hace
tradicionalmente, a menudo recibirá otro No sé" por respuesta. Cuando escuche un
%o sé" use estas técnicas para lograr la respuesta que quiere. (Escoja las más
apropiadas para la situación.)
• "Bien, entonces ¿por qué no me dices cómo has llegado a pensar así?"
• "Sé que no sabes, pero si tuvieras que adivinar, ¿Qué crees que podría ser?"
Un "No sé" podría significar también que la persona se siente culpable o tonta por sus
actos. En ese caso debe quitarle la responsabilidad. Esta técnica psicológica es
excelente porque le permite a la persona contestar sinceramente sin miedo de que
usted la juzgue. A fin de cuentas ella puede creer que no lo hizo a propósito. Esto
funciona bien porque la persona no tiene que sentirse responsable por sus actos. No
era su "intención" hacer lo que hizo. Su conducta no fue motivada conscientemente.
Dígale algo como: "Sé que no estás segura de por qué hiciste eso, así que ¿puedes
decirme cuáles motivaciones inconscientes te llevaron a actuar así?"
Repaso de la estrategia
Cuando le den una respuesta vaga, haga una pregunta más específica relacionada
con la respuesta. Si usted hace una pregunta general de verificación recibirá otra
respuesta general.
Si la persona está insegura de qué contestar, pídale que le diga cómo se siente
respecto a un aspecto de la situación, en lugar de toda la situación.
Pregúntele si pudo haber motivaciones inconscientes. Esto alivia la culpa puesto que
no implica que hubiera intención.
Se trate de un asunto profesional o personal, siga esta lista de tácticas y estará seguro
de suavizar las quejas de cualquier persona sobre cualquier cosa.
A veces la gente sólo necesita desahogarse, así que deje hablar. Otras personas
buscan pelea. Si usted no interrumpe, eventualmente se les agotará lo que tienen que
decir. Si usted las interrumpe, les dará más municiones y se arriesgará a tener una
discusión acalorada en lugar de un monólogo.
Nadie quiere sentir que está siendo manipulado. Y ese es el 99.9% de la razón por la
que la persona está tan enfadada.
Su ego ha sido herido. Alguien o algo no la respetó y eso le duele. Cuando haya
acabado de hablar haga lo siguiente.
Primero parafrasee lo que ha dicho para que sepa que usted ha estado escuchándolo.
Después anímelo diciéndole cosas como: "Nadie tan importante como tú debería tener
que soportar esto"; "Sé que no estás acostumbrado a ser tratado así" o "Si fuera tú yo
estaría tan molesto como tú". Esto le quita toda la fuerza a su perorata. Lo último que
usted debe hacer es ser combativo y con este primer paso usted lo desarma
completamente. Lo ha hecho sentirse importante al escucharlo, estar de acuerdo con
él y consentir su ego. Usar este proceso de escuchar, estar de acuerdo y consentir, a
menudo calmará la situación. Pero si no es así continúe con lo siguiente.
Ahora, pregúntele qué le gustaría que usted hiciera. Lo que proponga como solución a
menudo será mucho menos de lo que usted hubiera dado para compensarlo por sus
problemas. En las situaciones de negocios a menudo cometemos el error de querer
dar el mundo para evitar un problema mayor. Pero no se deje llevar por la tentación
inicial y pregúntele qué le gustaría que usted hiciera.
Mientras hace eso, trate de generar simpatía para lograr gustarle a la persona y para
calmarla. La forma en que usted se comporte influye mucho en la actitud de la otra
persona. Si mientras la otra persona está desahogándose, usted tiene sus brazos
cruzados, y su postura dice: "¿Cuándo vas a callarte?", está a punto de causar una
confrontación. Por eso cosas sencillas como desabotonar su chaqueta o descruzar sus
brazos pueden hacer que la otra persona se sienta menos a la defensiva. Cuando
usted tiene buena química con alguien, es mucho más probable que la persona se
sienta cómoda y abierta. La simpatía crea confianza, lo que le permite tender un
puente psicológico hacia la persona. Probablemente la conversación será más positiva
y usted mucho más persuasivo. Para recapitular, aquí tiene algunas claves poderosas
para establecer y hacer crecer la simpatía:
Punto de apoyo
Repaso de la estrategia
No diga nada, sólo escuche. Parafrasee lo que la otra persona acaba de decir. Use
frases alentadoras para reforzar su ego y su sensación de importancia. Pregúntele qué
le gustaría que usted hiciera.
Mientras hace lo anterior trate de generar simpatía para ayudarlo a sentirse más
cómodo y relajado con usted.
Supongamos que usted es una mujer que tiene un amigo rico. El es atractivo,
inteligente, cariñoso y trabajador. Pero se siente inseguro porque no tiene mucho
dinero, porque para él el dincio es muy importante. Por lo tanto, en su opinion, su
amigo es más valioso y "mejor" que él. Usted podría emplear la estrategia típica de
halagar a su novio y decirle lo extraordinario que es y lo mucho que le importa; pero
encontrará que esto es ineficaz. Decirle que lo ama y que es más atractivo e
inteligente que su amigo hará muy poco para atenuar sus celos. El problema no viene
de ahí. En lugar de eso, usted debería explicarle por qué la "cualidad" de su amigo en
este caso el dinero no tiene importancia para usted y así sus celos sencíllamente
desaparecerán.
Así pues, son las cualidades de su amigo o en este caso el dinero en lo que usted
necesita concentrarse, no en las de su novio. Simplemente déle una explicación
racional de por qué no es importante para usted y su novio entenderá. Por ejemplo,
usted puede decir algo como: 'La medida verdadera de un hombre no es cuánto dinero
tiene sino quienes son sus amigos. Me gusta mi amigo, pero creo que la gente que
ostenta su dinero lo hace para compensar sentimientos de incapacidad. Me gusta mi
amigo pero siento pesar de él. Después de oír esto, a su novio no le va a importar que
sean amigos porque ya no se sentirá amenazado por el asunto del dinero. Si acaso,
ahora el hecho de que tenga dinero será tranquilizador, porque pensará que esa es la
verdadera razón por la que usted no lo encuentra atractivo.
Cuando usted emplee esta táctica, es mejor hacerlo casualmente. Así no creerá que
usted está diciéndolo sólo para hacerlo sentir mejor. Un enfoque despreocupado le
garantiza que usted lo cree y que quiere participarle a él sus sentimientos, no que está
diciendo esto sólo para cambiar lo que él siente.
Punto de apoyo. Si usted trata con alguien que es celoso enfermizo de todos y de
todo, tiene que manejar el asunto de manera algo diferente. Los celos de esa persona
se deben a una gran inseguridad e interpretará todo lo que usted diga o haga para
concluir que sencillamente no puede confiar en usted. Incluso las situaciones más
inocentes serán mal interpretadas y la lógica se perderá en un mar de emociones
desequilibradas. Aunque la terapia sería lo más conveniente para esa persona, hay
una táctica psicológica que proporcionará alivio temporal. Está celoso porque percibe
un desequilibrio en la relación, ya que piensa que usted es más valiosa que él; y
piensa, aunque a veces inconscientemente que es una cuestión de tiempo que usted
lo descubra. Por lo tanto, si usted se muestra abiertamente celosa de todo lo que él
haga, su perspectiva debería cambiar completamente. Esto se hace evidente por el
hecho de que casi nunca se ve una relación en la que ambos sean enfermizamente
celosos el uno de¡ otro. Eso se debe a que los celos de uno hacen a la otra persona
`retirarse" a un campo más neutral.
Repaso de la estrategia. Una persona se siente amenazada sólo en las áreas que
considera la base de su identidad. La solución no es reforzar su autoestima. Usted
debe restarle importancia al rasgo que él siente que le falta y que los demás poseen.
Sus celos son en realidad envidia de lo que otras personas tienen que él no.