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EL POSITIVISMO
(LA TEORÍA DEL SABER)
CONTENIDO DE LA UNIDAD
El positivismo evolucionista
Contexto y noción de positivismo
El iniciador y representante principal del positivismo fue el filósofo francés
Auguste Comte (1798-1857). Fue en el segundo cuarto del siglo xix cuando
este hombre hizo sentir su presencia con la aparición del Curso de filosofía
positiva, obra que la situación del momento reclamaba.
Terminada la Revolución Francesa, tomó forma un movimiento contrarre-
volucionario al cual se aliaron los burgueses y los últimos nobles. Al
aparecer la industria, empezó a conformarse un nuevo tipo de sociedad
donde la técnica y la ciencia desempeñaron funciones relevantes, pues se
esperaba que con ellas se volvieran reales los ideales del hombre moderno:
organización del trabajo, organización de la sociedad y fuentes constantes de
riqueza.
La conciencia que se empezó a configurar hizo evidentes dos cosas:
1. Que el hombre podía transformar la naturaleza, convirtiéndola en
medio o material de trabajo.
2. Que convenía incrementar el impulso a la técnica por ser la aplicación
de la ciencia y la interpretación de la razón (se referían naturalmente a
la técnica de las máquinas).
Al incrementarse la nueva conciencia, se presentó el fenómeno de la crisis
social, pues había un sistema social que se extinguía y otro nuevo que estaba
llegando a su madurez. Comte apreciaba con claridad la importancia del
momento y contribuyó para que la sociedad fuera conducida a su estado
social definitivo.
La contribución de Comte fue la propuesta de una filosofía positiva, ya
que, según él, la única solución a la crisis o anarquía del momento era una
reforma intelectual fundada en la ciencia. Esta filosofía fue una continuación
POSITIVISMO
del empirismo de los siglos XVII y XVIII. En la primera mitad del XIX ya el
Teoría filosófica defendida por
empirismo, con los adelantos técnicos y científicos, había recibido una
Comte cuyas característicos son:
corroboración muy fuerte y despertado mucho entusiasmo a su favor.
atención o los hechos, aversión o
!a metafísica,, hostilidad hacia los
Otro factor que avaló la iniciativa positivista fue el fenomenalismo de
grandes sistemas, reducción de
Emmanuel Kant. El sistema kantiano, en efecto, había defendido que lo
la filosofía o lo ciencia y a lo idea de único cognoscible para nosotros eran los fenómenos; los noúmenos o las
progreso. esencias
son incognoscibles.
El positivismo propuesto por Comte tiene las siguientes características
generales:
• Atención a los hechos. Por hecho se entiende todo aquello y solamente
aquello que puede ser observado.
• Aversión a la metafísica. Con esto se hace referencia al rechazo que la
ciencia y la filosofía deben formular, respecto de entidades abstractas
como la esencia y la sustancia.
• Hostilidad hacia los grandes sistemas. En este terreno, el sistema que
Comte tuvo en mente fue, sobre todo, el sistema hegeliano.
Reducción de la filosofía a la ciencia. La filosofía, según Comte, debía ser
elaborada sobre bases científicas y adquirir el rango de ciencia suprema.
• La idea de progreso. Esta idea prácticamente llenaría todo el siglo XIX. Se Hecho
hablaba de progreso en dos sentidos: como una realidad que siempre está en Todo aquello y solamente aquello que
marcha, o bien, como un mejoramiento sucesivo de la realidad. pueda ser observable
Leamos ahora un texto de Comte donde nos explica cómo entiende él la filosofía
positiva:
Dado el empleo constante (dentro de una acepción invariable) del vocablo filosofía, en este
curso me ha parecido superfluo definirla de otro modo que por el uso uniforme que hago de
ella. La primera lección puede ser considerada, en particular, como el análisis de la
definición exacta de lo que denomino filosofía positiva. Lamento, sin embargo, haber tenido
que aceptar el término filosofía, tan abusivamente empleado en multitud de acepciones
diversas; pero el adjetivo positiva con que modifico su sentido, me parece suficiente para
deshacer desde luego todo equívoco, al menos para quienes conozcan bien su significación.
Me limitaré, por ello, a declarar que uso la palabra filosofía como la emplearon los antiguos,
especialmente Aristóteles, en su significación de sistema general de las concepciones
humanas. Añadiendo la palabra positiva, anuncia esta manera especial de filosofar, que
consiste en ver en las teorías, cualquiera que sea su orden de ideas, como dirigidas a la
coordinación de los hechos observados, lo cual constituye el tercero y último estado de la
filosofía, primitivamente teológico y después metafísico, según explico desde la primera
lección.
COMTE, Filosofía positiva.
AUGUSTE COMTE (1798-1857).
Iniciador Y representante del positivismo,
nació en Montpellier y murió en París. En los
Teoría del saber positivo i primeros años de su vida intelectual fue
colaborador muy cercano de Saint-Simon,
El positivismo tiene dimensiones filosóficas porque, según Comte, lo que iniciador del socialismo francés. Sufrió uno
más interesa es la reforma social y ésta sólo es posible sobre la base de un crisis cerebral y al recuperarse publicó el
primer volumen del Curso de filosofía
sistema intelectual. En otras palabras, para la reforma social positiva es
positiva. Otras obras suyas son: Sistema de
indispensable disponer de una teoría del saber positivo.
política positiva, Catecismo positivista y
Comte empezó por explicar el sentido del término "positivo", Discurso sobre el espíritu positivo.
aprovechando los cinco significados que tiene en el lenguaje vulgar:
En primer lugar "positivo" es sinónimo de real.
También es sinónimo de útil.
A las cinco acepciones precedentes, que son del sentido común, Comte
añadió una sexta, según la cual "positivo" equivale a "aplicación
sistemática del sentido común".
Un concepto del saber positivo puede ser éste: es el saber que,
partiendo de la experiencia de los hechos, se preocupa por descubrir y
establecer rela-
Positivo ciones con la finalidad de lograr la utilidad social. De esta definición podemos
colegir la naturaleza, la función y el objetivo del saber positivo.
Sinónimo de real.. Sinónimo de En cuanto a su naturaleza, el saber positivo es real y social. Es real porque
útil. En sentido estricto, significo lo
los hechos constituyen su objeto, y es social porque la realidad concreta es la
contrario de negativo; por lo tanto,
sociedad, es decir, los auténticos hechos reales son los sociales. Para el estudio
lo positivo tiene el carácter de
constructivo y eficaz. Aplicación
de la sociedad y, en general, para el estudio de la historia del espíritu, hay que
sistemática del sentido común. Es
valemos de tres categorías: orden, progreso y estado.
el saber que, partiendo de la La categoría orden se refiere a la coherencia y estructuración de todos los
existencia hechos, se preocupa por factores sociales en una época determinada.
descubrir y establecer relaciones La categoría progreso significa el paso de una época orgánica a otra, o bien,
con la finalidad de lograr la el tránsito de un orden social a otro. Esta categoría, en cierto modo, es opuesta
utilidad social. a la anterior. Mientras aquélla implica estabilización, ésta tiende a la
superación y transformación constante de la historia.
La categoría estado hace alusión a la unidad sistemática intelectual en que
Categoría-orden se encuentra el espíritu humano en una época determinada.
Comte decía que es la coherencia y El saber positivo se preocupa por descubrir relaciones. Esta característica es
estructuración de todos los probablemente su función principal. El saber científico (o positivo) no consiste
factores sociales de una época en establecer hechos, sino más bien en establecer leyes a partir de los hechos.
determinada. Para esto, es necesario observar un número suficiente de hechos para entonces
expresar, de manera general, las relaciones existentes entre ellos. Debido a que
la ley se descubre por observación, contiene valor objetivo y racional.
Categoría-progreso Mediante el conocimiento de leyes, la ciencia positiva logra su objetivo, que
Según Comte es el paso de una es la utilidad, porque la ley permite predecir o prever los cambios de
época orgánica a otra, o bien, el comportamiento en los fenómenos. Bacon quería conocer la naturaleza para
tránsito de un orden social a otro.
dominarla; a Comte le interesaba más bien conocerla para prever, es decir, su
utilización. El lema de la ciencia positiva es: "Saber para prever; prever para
Estado
Comte lo concebía como la unidad
proveer".
sistemática Intelectual en que se Leamos ahora un texto de Auguste Comte:
encuentra el espíritu humano en
una época determinada. Importa mucho, pues, percatarse de que el verdadero espíritu positivo no está menos lejos, en el
fondo, del empirismo que del misticismo; entre estas dos abstracciones, igualmente funestas, debe
avanzar siempre; la necesidad de tal reserva continua, tan difícil como importante, bastaría, por
otra parte, para comprobar, conforme a nuestras explicaciones, el comienzo, cuan maduramente
Ciencia positiva preparada debe estar la auténtica positividad, de tal modo que no pueda en forma alguna
Su lema es: Saber para prevr y convenir al estado naciente de la humanidad. En las leyes de los fenómenos es en lo que consiste,
prever para proveer. realmente, la ciencia, ciencia a la cual los hechos propiamente dichos, por exactos y numerosos
que puedan ser, nunca procurarán otra cosa que materiales indispensables. Considerando el
destino constante de estas leyes, se puede decir, sin exageración alguna, que la verdadera ciencia,
lejos de estar formada de meras observaciones, tiende siempre a dispensar en cuanto es posible,
de la exploración directa, sustituyéndola por aquella previsión racional que constituye, en todos
los aspectos, el principal carácter del espíritu positivo, como el conjunto de los estudios
astronómicos nos lo hará advertir claramente. Una previsión tal, consecuencia necesaria de las
relaciones constantes descubiertas entre los fenómenos, no permitirá nunca
confundir la ciencia real con esa vana erudición que acumula hechos maquinalmente
sin aspirar a deducirlos unos de otros. Este gran atributo de todas nuestras
especulaciones no importa menos a su utilidad efectiva que a su propia dignidad; pues
la explotación directa de los fenómenos realizados no podría bastar para permitirnos
modificar su cumplimiento, si no nos condujera a preverlos convenientemente. Así, el
verdadero espíritu positivo consiste, ante todo, en ver para prever, en estudiar lo que
es, a fin de concluir de ello lo que será, según el dogma general de la invariabilidad de
las leyes naturales.
COMTE, Discurso sobre el espíritu positivo
Cada época necesita de una teoría que explique la conexión entre los Alude a la unidad sistemática intelectual
hechos, y en esto consiste su saber o su ciencia. "Toda concepción o rama en que se encuentra el espíritu humano
en una época determinada: Para Comte
del conocimiento marcha siguiendo una ley general que preside su
son tres los estados en que puede
evolución: es la ley de los tres estados." Según esta ley el conocimiento, o
encontrarse el espíritu humano:
las ciencias en general, pasan por tres estados: el teológico, el metafísico y
teológico, metafísico y positivo.
el positivo.
Para Comte, la categoría "estado" significa la unidad sistemática
intelectual en que se encuentra el espíritu humano en una época
determinada.
El punto de partida del espíritu humano es el estado teológico. En esta
etapa los hombres se interesan mucho por la causa y el origen de los
fenómenos. Para la explicación de éstos se recurre a seres ocultos y
sobrenaturales, a quienes se les considera la causa de dichos fenómenos.
La segunda etapa de la marcha es el estado metafísico. Aquí ya hay pro-
greso. Ahora los hombres se preguntan el porqué y creen que la explicación
de la naturaleza se encuentra en entidades abstractas que existen en las
cosas mismas. Tales entidades son de carácter metafísico, pero ya no las
conciben como seres superiores que existen fuera de este mundo.
La tercera etapa del proceso histórico es el estado positivo. Es la última
etapa del desarrollo del espíritu. Ahora no se busca el porqué o el origen de
los fenómenos, como en el estado teológico, ni la causa o esencia de los mis-
mos, como en el estado metafísico. Aquí se investiga la descripción y el
comportamiento de los fenómenos para descubrir las regularidades que en
ellos pueden darse. En otras palabras, el estado positivo se interesa
únicamente por conocer las leyes que rigen el obrar fenoménico, para
entonces llegar a prever comportamientos futuros.
La ley de los tres estados no se cumple únicamente en la historia o en la
marcha de los conocimientos; también se observa en el propio desarrollo de
la inteligencia individual. Todo hombre, de niño, ha sido teólogo; después,
metafísico, y en la madurez, físico. En la primera etapa del individuo
prevalece la imaginación y después, progresivamente, interviene la razón,
hasta que logra el predominio; al final, la imaginación queda subordinada a
la razón y a la observación: tal es el estado positivo.
Respecto del proceso o la forma en que se descubre la ley de los tres esta-
dos, Comte decía que no se obtiene mediante la observación directa de la
realidad histórica, sino que se extrae de una especie de intuición. Considerada en
su aplicación al desarrollo de la inteligencia individual, esta ley, según el
positivismo, tiene el carácter de una ley biológica. Leamos algunos párrafos del
propio Comte:
El positivismo evolucionista
Una variante muy importante del positivismo fue la que tuvo lugar entre los
científicos del evolucionismo, quienes, observando hechos y razonando sobre ellos,
dieron forma a sus teorías. Aquí mencionaremos a Lamarck y a Darwin.
Lamarck (1744-1829) fue el primero que estableció leyes de transformación. La
ley general relativa a las transformaciones afirma que el empleo sostenido de un
órgano desarrolla éste y lo mejora; por el contrario, la falta de empleo en un órgano
lo deteriora, lo reduce y tal vez lo haga desaparecer. Las transformaciones o
modificaciones que sufre un ser vivo se deben a cambios en sus necesidades; estos
cambios, a la vez, son producidos por variaciones en las circunstancias.
Teniendo a Lamarck como precursor inmediato, Charles Darwin (1809-1882)
sentó las bases para la teoría de la evolución de las especies, con la cual explica las
causas que originan los cambios evolutivos.
Frente a las afirmaciones tradicionales de que los seres vivos siempre han
existido tal como hoy los conocemos, Darwin pretendía demostrar que la vida
surgió gradualmente sobre la Tierra y que los seres vivos se desarrollan a partir de
formas inferiores hacia otras superiores.
Dos puntos son los centrales en la teoría de Darwin:
1. Las especies evolucionan sus características en forma muy lenta.
2. El mecanismo fundamental de la evolución es la selección natural, que tiene
como propósito alcanzar un tipo superior en el que los órganos se especialicen
y se diferencien. La especialización tiene lugar gracias a otro mecanismo, que
Darwin llamó la lucha por la existencia, cuya práctica hace que los mejor
dotados triunfen y que desaparezcan los menos capacitados.