You are on page 1of 1

La llamada

Laura estaba hablando por telfono cuando la lluvia arreciaba y el cielo se


iluminaba con explosiones de luces.
Mario le hablaba de su actual problema pero ella, debido al miedo que le
producan las tormentas, no poda seguir prestndole atencin. Le explic sus
temores y finaliz la conversacin fijndola para otro da.
Pens que su psiclogo tena razn, las engramas de su psique no le permitan
resolver el problema de la fobia a las tormentas. En eso pensaba cuando de
pronto se interrumpi la corriente elctrica y todo qued en penumbras.
Le cost recordar dnde haba dejado la linterna. A tientas fue recorriendo con
sus manos los estantes de la biblioteca donde imaginaba la haba dejado. En
un rincn la sinti en sus dedos.
Entre la luz de los relmpagos le pareci ver, en el edificio vecino, a una pareja
que discuta. Sacudi la cabeza para borrar la imagen que haba observado
pensando que su vista, ayudada por las luces le haba producido esa extraa
ilusin ptica.
Volvi a la sala, mir nuevamente la casa del frente y supo que no se haba
equivocado. Ahora s y con claridad vio a un hombre que, con furia, clavaba un
arma semejante a un cuchillo una y otra vez en el cuerpo de una mujer.
Asustada dio vueltas en crculos. No atinaba a nada. Senta aumentar su
impotencia pero luego reaccion.

Sali corriendo mientras profera gritos para llamar la atencin y lograr que los
vecinos la siguieran.
Al llegar a la casa golpe desesperada con los puos. Luego de unos instantes
que le parecieron eternos la puerta se abri.
Apareci una mujer joven y bella que, apoyando el antebrazo sobre el marco y
recostndose displicente sobre l, levant una ceja en seal de asombro y
pregunt:
_ Todos vienen al curso de teatro!?
Fin

You might also like