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QUIN INVENT LA ESCUELA?.....

El demonio
Estos das, buscando bibliografa de O. Decroly (1871 1932), he recuperado del olvido a
un gran pedagogo. Adolphe Ferrire (1879 1960), heredero de J.H. Pestalozzi (1746
1827), fue un destacado miembro de lo que se dio en llamar la Escuela Nueva. A su
muerte, parece ser que, C. Freinet (1896 1966) dijo de l: traslad a la realidad los
sueos generosos de los grandes pedagogos. Ferrire, en 1920, hace casi 100 aos, escribe
Transformemos la escuela. En el prefacio, el ginebrs nos cuenta una historia sobre el
origen de la escuela. Segn el autor, la escuela se cre siguiendo las indicaciones de un
astuto diablo. Seguidamente, presento una adaptacin personal de este, para m,
estupendo cuentecito:
El demonio convenci a la muchedumbre de la necesidad de crear la escuela y, siguiendo
sus indicaciones, la crearon.
Al nio le gusta la naturaleza y le encerraron en el aula; al nio le gusta comprobar que su
quehacer tiene sentido y le llevaron a realizar tareas sin objetivo; le gusta moverse y le
ataron a la inmovilidad; le gusta manejar objetos y le pusieron en contacto con el mundo
de las ideas; le gusta usar las manos y slo le dejaron trabajar con su cerebro; le gusta
hablar y le obligaron al silencio; quisiera razonar y le hicieron memorizar; quisiera buscar
la ciencia y se la dieron ya masticada; quisiera entusiasmarse e inventaron el castigo.
Los nios supieron de la pena de estar separados de sus familias; incluso de su ambiente.
Los deberes les ocuparon su tiempo; no les explicaban nada, slo los obligaban.
Y, entonces, aprendieron aquello que, pudiera ser, nunca hubieran aprendido: supieron
disimular, engaar, mentir.
De acuerdo con el diablo, buena parte de la humanidad se adormeci, languideci, se
volvi circunspecta, pasiva, desinteresada. La salud, la felicidad, el amor, la bondad
terminaron.
Pero hubo nios que huyeron al bosque, treparon a los rboles, burlaron a los sabios.
Corrieron aventuras, se desarrollaron por ellos mismos, se hicieron fuertes, hbiles,
ingeniosos, perseverantes. De esta manera desapareci la escuela que tan sabiamente el
demonio haba imaginado.

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