Hitomi se siente triste y sola desde que regresó de Gaea y se enteró que sus dos mejores amigos ahora están saliendo juntos. Extraña a Van y se pregunta por qué la dejó irse en lugar de pedirle que se quedara. Mientras mira las estrellas recuerda los momentos felices que pasó con Van en Gaea. Una sombra con alas blancas entra por su ventana trayéndole un mensaje de Van prometiendo que volverá por ella. Al despertar, Hitomi encuentra una pluma que le da esperanza de no sentirse
Original Description:
Fanfic de Tenku no Escaflowne.
Escrito por Gala - 17/07/2001
Hitomi se siente triste y sola desde que regresó de Gaea y se enteró que sus dos mejores amigos ahora están saliendo juntos. Extraña a Van y se pregunta por qué la dejó irse en lugar de pedirle que se quedara. Mientras mira las estrellas recuerda los momentos felices que pasó con Van en Gaea. Una sombra con alas blancas entra por su ventana trayéndole un mensaje de Van prometiendo que volverá por ella. Al despertar, Hitomi encuentra una pluma que le da esperanza de no sentirse
Hitomi se siente triste y sola desde que regresó de Gaea y se enteró que sus dos mejores amigos ahora están saliendo juntos. Extraña a Van y se pregunta por qué la dejó irse en lugar de pedirle que se quedara. Mientras mira las estrellas recuerda los momentos felices que pasó con Van en Gaea. Una sombra con alas blancas entra por su ventana trayéndole un mensaje de Van prometiendo que volverá por ella. Al despertar, Hitomi encuentra una pluma que le da esperanza de no sentirse
El silencio irrumpi de nuevo en su habitacin. Haca tiempo que ya no echaba las cartas a sus amigas y su rincn de revelaciones se haba convertido en un agujero oscuro y olvidado. La cita a ciegas que le propona su amiga Yukari no le apeteca en absoluto, pues desde haca tiempo sus relaciones personales con ambos se haban enriado mucho. !obre todo despu"s de su vuelta de #aea, cuando se enter de que sus dos amigos estaban saliendo juntos. $hora su mundo rutinario le resultaba catico y conuso, y a pesar de que era aqu"l el camino que haba escogido, se senta muy triste y sola. !i al menos pudiera cambiar el pasado... pero %seguro que todo podra volver a la normalidad& %a cu'l de aquellas dos vidas querra regresar& %a la vida tranquila en la que lea los secretos de sus amigas en el (arot& %o a la que se haba acostumbrado junto a )an *anel& +Estar bien, Van, record haberle dicho antes de verle por ,ltima ve- desapareciendo entre la lu- cegadora del atardecer sobre el mar... sin embargo al llegar a casa esa misma noche se encerr en su dormitorio a llorar por su cobarda. !e haba preguntado muchas veces por qu" )an nunca la retuvo, si de verdad la amaba no tena que haberla dejado marchar de su lado %no& .ara Hitomi habra sido su/ciente que le pidiera quedarse con "l, nada m's que eso...pero la dej volver... y ahora haba olvidado como deba vivir sola. El suave mecer de las cortinas le atrajo hasta el borde de la ventana desde donde pudo ver las estrellas m's brillantes colgadas del cielo, a e0cepcin de #aea, invisible para la (ierra a pesar de su corta distancia. El aire rerescaba sus mejillas h,medas y ue a cerrar la ventana cuando sinti una inesperada calide- dulce que la adormeca. 1ej'ndose llevar por la sensacin se imagin de nuevo surcando el cielo a-ul de *anelia a bordo del 1ragn Esca2o3ne... junto a )an... En esos instantes una esperan-adora mirada sali volando de aquella ventana buscando la ,ltima oportunidad de reencontrarse con la persona que m's quera. Y al no obtener la inmediata respuesta del cielo, se ue a dormir con el alma vencida por la realidad. .ero lo que Hitomi ignoraba era que cuando )an *anel, rey de *anelia, baj a la orilla del mar a buscarla, no se ue sin antes prometerla en su idioma que regresara por ella alg,n da. 4ierto que le haba detenido la respuesta de Hitomi al verle, pero no estaba dispuesto a renunciar tan 'cilmente. Los 'rboles se estremecieron ante la llegada del ser de alas blancas. La ventana entreabierta le dej invadir el peque5o dormitorio en medio de una r'aga de aire perumado y la joven que dorma en la cama se movi entre las s'banas. La sombra del 'ngel cay sobre su rostro pero en "ste slo se dibuj una dulce sonrisa. En ningn otro lugar podra encontrar una !irada co!o la tu"a, #ito!i $ las primeras luces del alba, Hitomi percibi un olor conocido en su almohada y nada m's abrir sus ojos a-ules descubri una pluma grande y suave. Y con ella la promesa de que muy pronto ya no volvera a sentirse sola nunca m's.