Un chico de 18 aos es juzgado por el asesinato de su padre. El jurado debe
emitir su veredicto en un caso en que todas las evidencias parecen condenar al acusado. Estos doce hombres, a los que el sistema presupone imparciales, comienzan a manifestar su personalidad a medida que deliberan, a peticin de uno de ellos, sobre los testimonios que fueron presentados. La fuerza del dilogo y de la lgica va desmoronando la consistencia de esos testimonios que, una vez que son unidos como un puzzle, manifiestan su inconsistencia. La racionalidad del protagonista se va abriendo camino entre la niebla de los prejuicios, pasiones y motivaciones anmicas de los dems miembros del jurado. Uno a uno son incitados a reflexionar, comprender y aclarar lo que se esconde tras las apariencias del caso. En este proceso, son sus propias personalidades las que estn siendo analizadas una vez que se embarcan en el ejercicio esclarecedor de la razn.