En contraparte, acadmicos como Miller y Slater (2000) y Kozinets (2010)
mencionan que la vida online no es necesariamente diferente a la offline:
ambas forman parte de la vida cotidiana de las personas, al grado de que pueden ser consideradas como parte de la cultura, y por ende es necesario estudiarlas para comprender el efecto que producen en las sociedades. (30)
La utilizacin y popularizacin de las Tecnologas de la Informacin y la
Comunicacin (TIC) ha generado y genera cambios en innumerables mbitos como la educacin, los medios de comunicacin, la economa... y, por supuesto, tambin en la poltica y en las relaciones de poder. Esas nuevas herramientas, como las redes sociales, han generado posibilidades reales de participacin para los ciudadanos, facilitan la organizacin cvica, globalizan los mensajes y fomentan la inteligencia colectiva (Reig, 2011). (3) Segn su anlisis, el uso de redes sociales para informarse incrementa de forma significativa el capital social y aquellas personas que lo hacen tienen mayor grado de compromiso cvico y participan ms en poltica. Efectos estos que no se producen en aquellos ciudadanos que solo utilizan Facebook o Twitter como actividad ldica. En las redes sociales, muchas de las informaciones que leemos han sido recomendadas por amigos y permiten comentarlas en tiempo real con esos amigos; as el impacto es mayor y la recomendacin se convierte en un factor clave para la participacin. (5)