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Espactos DEL Slavoj Zizek El espinoso sujeto El centro ausente de la ontologia politica SABER 2 Slavoj2fek El espinoso sujeto Stavoj Zizek (1949), doctor en Filosofia y en Artes, es investigador superior det insttuto de Estudios Sociales de Liubli- na, Eslovenie, y profesor vistante en la New School for Socal Research de Nueva York y en la Universidad de Pars Vil. En Ios titimos quince afios ha particinado en ‘numerosos simposios sodre critica cult ral, ilosética y politea, y ha tendo part epacibn politica activa en la Repubica de Eslovenia Enlre sus libros se cuentan Todo lo que usted queria saber sobre Lacan y nunca se atrevid a preguntarie a Hitcheack (Ma natal, 1994), ;Goza tu sintoma! (Nueva Visi6i, 1994), Poraue no saben lo que ha cen (1998) y Mando at sesgo (2000), es- tos titnos de nuestro fondo editonal Hy = = Slavoj Zizek El espinoso sujeto El centro ausente de la ontologia politica Teaducci6n de Jorge Piatigorsky PAIDOS Alagus Aires ~ Raveslunt - México 1d pa Te Tah Sug, The Abe re ae Ong 2 Sk) te, 1990 Vers, Lande aera Yr 199 Gaited Gustvo Mac Movin de cvbier Giuseppe Arumbelde, sie, en stre mader ar 1550 Oe tr re eran re tn aia meinntcetmenesmpecuek np ase cea UiLanin = niente menor alo aprancnpaer © 2001 ders lesen cn came Pate SAIC Defensa S99, Bucs Aer ssemtpanbnterridcn ches aids tks SA Mer C3, Bree {oars Pils teas SA Ketan Dato 18, en, DF Qu hc depen gue eis logs nls Argentine. ited in Arne Intey 1.728 Irpeto en Vari, Camanant Spor 653, Avan en a de 2008 ISD 950.12.4520-% Indice Iuntenduceién: Un espectro ronda la academia occidental 7 9 1 La ‘noche del meando” |. El aolladero de ls imaginacién trascendental, ‘6 Martin Heidegger como leeror de Kant wevane AD El espinaso sujeto hegeliano ” 0 La universlided ecinida 5. La politica de la verdad, 0 Alain Badiou como lector de San Pablo..... 187 4. La subjetivacién politica y sus vicisitudes sone INH mm De la sect a la desttucin bjetiva 5. (Des)apegos apasionedes, o Judith Butler como lecrora de Freud wun 266 6. -Adénde va Edipo: . nnn any) Indice analitico oo. a sss snnnnnns 423 Introduccion: Un espectro ronda la academia occidental... cl espectro det sujeto cartesian. Todos los pesleres académicon han enteaes 60 una sire alianza para exoreizarlo: la New Age oscurantists (que ysier® svcimplazar el “pazadigaa cartesisao” por un nuevo enfoque holistic) y el cles ‘vonstruecionismo posmoderno (pars el cual el sujeto eartesiano es una tieeidin dliscursiva, un efecto de mecarismos textuales deseentrados); los reGricos haber- tnisianos de la comunicacién (que insisten en pasar de la subjetivistad no wica cartesiana a una intersubjecividad discursiva) y los defensores hellegyeria~ ros cel pensamiento del ser (quienes subrayan la necesidad de “atravesir™ of hhorizonte de la subjetividad moderna que ha culminado en ef actual nihilissne Llevastador; los eientificos cognitivos (quienes se empefian en demostrar enypi= ficamente que no hay una nica escena del si-misina, sino un pandemdninn de fucrzas compettivas) y los “ecslogos profundos” (quienes acusan al miaterialis= mo mecanicista cartesiano de proporcionar el fundamento flos6ficw para Ia ex plotacién implacable de la naturateza); los (pas)marvistas cxiticos (aliens sus ‘ionen que Ja libertad ilosria del sujeto pensante lburgués arraiga en la dbivisictt tic cases) y lus feministas (quienes observan que el regate supucstamente aseXine do es en realidad uns formacion patciareal maseulina). deben incprse en una poitca ous, y después est la exevsion de certs tipos de diferencias cx inadmisibles 1a indecidibiidad es radical: nunca se puede llegar a un contexto “puro” an- terior a la decisin: todo contexto esti “siempre ya" eonstinido revoaetivainen= ts por una decision (gal que las razones para hacer algo, que siempre som pos- tuladas ceteonetivamence, por 20 menos en grado mvinimo, por el acto de decisién basado en ells solo después de que nos hemos decid a ereer nos re~ sultan convincences las razones para creer, y no a la inversa). Otro aspecto de esti misma cuestion es que no solo no hay decisién sin exchisin (toda decision exchiye una serie de posibilidades), sino que el acto de devisin en si tesulea po~ sulle gracias a alin Spo de exclnsida:alzo debe ser esclvdlo para que nosotros ‘nos coavirtamos en seres que toman decisiones. La idea lacantana de la “eleecin forzada”, 2n0 nos proporciona un modo de expliar esta parnloja? La “exclusiGn” primordial que fda la decisin (es de- 6t,eleecibn), zn0 indica que la elecein, en an cier nivel fundamental, es forzada? Yo solo puedo elegir(libremente) con la condicién de que realce hn cleccidn corrects, de mado que, en este nivel, enconteanies wna elecein para 13. Mark Poster, The Second Medin e, Cambie, Polity Press, 199, pig. 81 28 Hatley magus tascndental dieu que Se superpane can sts nietnelecoan se mie tice ye es Io yu Tihremeene,-. cis de sen gree Us itartah eve nivel lc la "cleeciin Forzada” es previvamente le ste fal eu by resid paki (a poli pntctin psigtica: a Iremente a ta Tok De modo que, ances de deseartar come deseripen cuiicala cama sew srewlucién conservadora ess presentaciin que hace Heidegier fe le devin antcipatoria como libre asunciin del propio destino, deberiosletenernns jar tun momento, y recordar la afirmacién de Ered Jameson en evame a ye ut verdadero izquierdista esti en cierto modo mucho mss cerca del acta eon tatisino neoconservador que de los deméeratas liberales:suscrle la erica con- rvadora a deraoeraca liberal, y esti de acuerdo con los casero prfée nente en todo, sv el seca, salvo en un rasgoa veces mininno quay a embargo, implica un cambio completo. En cuanta a fa idea heidgeran de fa cleeviin auténsica como repeticidn, el paralela ven la concepeén He Benjani Ue la revolucidn como repeticin,dilucidada en sus “Tesi sobre bs ilasain le Ua historia" resulta sorprendenee también le revelucion ex eonceptuslira ewe 10 una repeticién que realiza una posbilidad oculta del pasa, se unexba que sol desl el punco de vista de un agente comprometido en una sinactn pre sente se puede tener una Visién correcta de ese pasado, una sisvn qwe nd Je peteiba como wa conjunto cerrado de hechos, sino como ebierto, com ineohie ‘rand una posibilidad que facasé 0 cuya realizacién fue reprimida. 1 reels cin presente, ens ineento de liberar ala dase wabsjadora, también reine te teoactivamente todos los incentos de liberacién que se frustravon et el pasndo. Bs decir que el punto de vist» de un agente presente compromitid en wn prot yeeto revolucionario hace de pronto visible lo que ls historiogralia ojetivis- ‘a/pasitivista,linaitada alo Fetico, ao puede percibir por defniciin: ks pote ciafidades ocultas de iberacién que fueron aplastadas por la maces vietoviant de hs fuerzas domsinanees Leida de este modo, a apropiacién del pasado a avés de su septic 2a tana dessin anticipatoria que pone en ejecuciéa un progcew (ets ilumilene cidn de destino y libertad, de asuncidn del propio destino come la eleccién Hbre mis ats, augue forzada) no inplice solo [aides nietzscheana th que Juelise ly deseripeién mis neutral del pasado sitve a los propésitos presemes de alin proyecto politic de poder. Debemos insistir en la oposieién entre la apni ion del pasado desde el punto de visu de quienes gobiernan (el relat de hie jews psivdticn aenin come si en vera diene ley I 14. Vaase Walter Benjamin, “Thesis on the Philosophy of Hiscory", eu {lait ‘Nueva York, Schocken Books, 1969. (Ed, cst: lewinacoues, Madrid, Tatu, VA] 29 ‘Shy Zitek ‘oria pasada como la evolucién que los llevé al triunfo y los legicima) por un la- do, y por et otro la apropiecién de aquello que en cl pasado subsiste como po- tencialidad vtdpica y (rostreda (*reprimida"), de modo que lo que le falta a la descripcién de Heidegger (para decitlo de modo directo y un tanto rudo) es la comprensién de la naturaleza radicalmente anzagénice de todo modo de vida hasta entonces eomual En realidad, la ootologia de Heidegger es eatonces “politica” (para remitir- nos al titulo del libro de Bourdieu sobre este flésofo): su esfuerz0 por fraccurar y salir de la ontologia eadicional, y por afirmar como clave del “sentido del ser" Ia decisin del hombre de adopeae un proyecto por medio del eval asuime activa- mente su condieién de arrojado a una situacién histria Gnita, sia el acto bis- trico-politico de la decisiGn en el corazdn mismo de la ontologia. La eleccién de la forma histérica del Dasein es en cierto sentido politica, consiste en una de~ cisidn abisinal no basada en ninguna escructura ontol6gica universal. Por ejem= plo, la argumencacin liberal convencional habermasiana, que ubiea Ia fuente de Ja tentaci6n fascisea de Heidegger en su decisionismo “itracional”, en su cecha- x de cualquier criterio universal racional-normativo de la actividad politica, ye ra por completo: lo que esta eritca rechaza como decisionisino protofascista es sencllamence la condicin basics de lo politico. De un modo pervers0, el com promiso nazi de Heidegger fue entoaces “un paso en la direeciGn correcta”, un ‘paso hacia ia admisién abiertay Ia asvncidn completa de las consecucncias de Ia falta de garancia ontol6gice, del abismo de la libertad humana:** como dice [Alain Badiou, a los ojos de Heidegger la “revolucién” nazi era formalmente in- diferenciable det “acontecimiento™ politico-histérieo auréntico. O, para decirlo de oro modo, el compromiso politico de Heidegger era una especie de pase al 42210 en lo Real, testimonio de que se negabs a ir hasta el final en lo 4 pensar las consecuencias tedricas de la irrupcidn consumada con Tienpe. La historia habitual sobre Fleidegger dice que realieé su Kebre (giro radical 0 conversiGn) después de tomar conciencia de que el proyecto original de Et Ser _y l Tiempo volvia a Mevarlo al subjetivismo erascendental: en razéin del vesto no teflexionado de subjesvismo (decsionisino, excéera), Heidegger se dejé seducie por el nazismo; sin embargo, cvando tomé conciencia de que al haces» “se ha bia quemado las manos", limpié los restos de subjeiviseao y desarrollé la idea del carfeter histérico y de época del ser... Nos sentimos tencados de invertir es- Ser y et 1S, Fredric Jarseaon ys habia dado en el blaneo con sv polémicsafirmacin de que e shiene compro de Heidexger en 1933, lj de repeesntsr una anomals deplorable, fe su irica gost pice sips, 30 HLealadry ele mayeneoin vsweienutl mls cure ol Heidegger Fy of Heidegger Ht fey una especie ona posicin de: subjetivitad radiealizad que coin- ‘una posicidn reducida 3 an pesto vacio, «ln tater smo" del Heidegger Cy su ulterior “aralismn" (et a historia conven ade *inediador evanescence” ceule con sn opmesto: es posible del “de acomecimiento del ser “dene lugar” en ef hombre, qe sree ermno x par.) {Leis de constinur la “comsecucncia prietica” de esta svhjerivsial radicalizady sl enmpromisn nai de Heidegge fue un intent desespetaue de earn toa palabra, Heidegger tenia que haberaeatenid Yo uc is ord dex 16 como resto del enfoquetrascendental sujet subse ct el &Y Ser 1 el Tipe reas final de Heeger no consse en que ya quel px fgado al horizonte de la subjetivided trascendental, sino en que sand ata Horizonte demusiado pronto, antes de pensar todas vs posTisades inraaum. El nazismo oo era na expresién poles del "potencial wis deuce, de Insubjesvided moderna, sino mis bien esacramence [o ope am intent de> vesperado de evi este pencil sta login del “eslabon perdido” ha aparecido a menudo en a histie da pensamiento, desde Schelling hasta la escola de Fréncfors En cl co di Schelling, enenos ls cist ncoporabl tens ce los bosqcjo ie Wehr, ms fracino fundamental En efecto, su filosofi ulterior resvelve et tenn inspar- table, pero de mado erSneo:perdiend l dimension més produedva. Enconr= mos el musme procediniento de ‘esohuin fas” en el mod en ye cl pry to de Habermas se relaciona con la“dinsie def Siosacin” de Adorno ortheimer, La “inéctin dela stacio® ambien se derot 2 tn fracaso gigantesc yuna ver is Habermas resoele eo tenn israble ineroduciendo una ditineiOn, una especie de “divissn del taba” entre dos ie shensiones, entre Is produccion yl ireraccién sbi (en uma sit homer login con Schelling, que diselv Is renin de Wel inrotuiendo la dain. cian ent la loses “negative” y fs “pentva"), Nosotros sonenenvay que o lan “pensmiento de se?” eideggelano realiza una andloga resol la del aroUaderoineinseco del proyete original de B! Sry Trompa.™ 16. in este ponte hay qe tanar en cuent l nivel del io el Helge I ex erin “no musica” ineaice nue disor dines Uunicas, seat ngewe 1imN, rice ide se insercioner eoneret 3 categorise de conntacin ie, etary; el Tiley 1 ccmplaza el desarrllo prolongadoy siramabico dela Tacs angumentl (seme lo ph os en 1 Sry ef Ties) po ramiaras podticn broves¥ cieelates Dele ey lela yu presarstenin a la que guts excuido en la alterna: embor Hchlepget wt “tate ne de an moc werico compulso, sie stom na Tennis nue ped Exped on Slay Zeek Por QUE EL See ye. Tro QUEDO INCONCLUSO? Por qué es esencal en este caso otto libro de Heidegger. Kant ve problema dela metaica?® Recorders el simple hecho de que El Ser ye Tempo, al co smo fo conocemos, es un fragmento: lo que Heidegrer publi como libro consta solo de las dos primeras secviones ile la Primera Pate; el proycer results impo- sible de realizar, y lo que sali6 a luz de este fracoo, lo que (para ular Ia Ine~ 1a y vieja jergaestructuralist) len6 el vacio de la parte final falrnte de El Ser ‘yet Tiempo, fue la abundancia de escrtos de Heidegger vlteriores a Ia famosa ‘Kebre. Desi luego, 00 pretendemos imaginarsencilamnence la versin termina- da de la obra obsticulo que detuvo a su autor era inerinseco. Un examen mis acento descubre que la siuacidn es mds compleja. Por un lado (al menos en el nivel de borrador) el proyecto total de EY Sere! Tiempo en realidad se comple- ‘6 no solo teneravs Kent yl prolena de le mafsna, qu abarcs la provera sec- cin dela Segunda Parte provectada, sino que las conferencias de Fleidegger en Marburgo, de 1927 (reis tarde publicadas con el stulo de Lax probienas bios de 1a fenomendogén)cubren aproximadamente las Secciones restontes de! proyecto ‘original de E/ Ser y el Teno (e! tempo com el horizante de Js euestin del ser, legit carcesiano y la concepciénarisrotalea del tempo, segunda y cereera sce- led edifcio ontotigico,o relaciona con el empsjeanioncoligiw npc nl cagitecartesiane como primer anunci de "noche del wil") nf thunea cs por qué no pudo Heidegger completar sw ray sisteitia esplearis del rewpo como horizon del ser. La respuesta canvencional, “vials Hen “omc: porque ele volsié elaro que elenfoque de EI Serf Tremp e “leas mtafisico/tascendental, metodoliivo, al paar detect Dann ai ‘custin del ser, en hugur de enearar direcramente el develamiento tempral del Sercomo lo que sstenta el esau Sco del Dasin etc tons ls tithes Vern, cys hubieta aqui oto atolladero, otro cpo de abn, que Heidegger eh comin, yds que 6 apart? Por lo tanto, quereis diseutir la vers 0 aiuprszmenco.Heigegger toms concicncia de que el prosect te F Ser 4 ef ‘ienpo sega atrapndo en el prosedimientosubjetvise-trascenfennal een Iecer en primer efrmin las condiciones de posibilidad del sensi sel wet» través del andlisis del Dain lo que Heidegger encontré reahente oh the tla de B Soy of Tipo foe el abismo de a suhtvida enc anni In imaginacvn raseendentalKantena,y ace ese abisino cl rete hace 9 peimicnto del historiidad de se. 1. Eo a vel mie gone ‘um snconeon”, dene el prunes Hegel fasta Micke! Focal uy peer via de la asurdadansncia vn proyecto global fondawentalnente dist tare desplegso Tos vokimencs Hy de fos flere gue (desde Fichts hasta Hasserl) aunce van alla dh peti tes he so elie wire, of dedi, que eviterulasiene felesenan el ania fx ee, strato, aml css B So diet Esca critica a Heidegger no parece nueva en absoluc: entre otros, ya la rea Jizb Comnelius Castoriadis,segin quien la nocién kantiana de imaginacién (co- ro lo que socava la imagen ontologies “cercada™ convenecional del cosmos) ya aparece anunciada en un. pasaje singular de De Anna (I, 7 8), donde Arsté- teles sostiene que “nunea el ama piensa sin fantasia, y desarrolla esta idea en una especie de “esquematismo aristotlieo” (coda nocidn abstracts por ejem- pl, las un idngulom debe aeumpafarse en nuesto pensaaiento de und re- presentacinfantasmdtica sensible, aunque no corporal; cuando pensamos en un tridngulo, enemos en la mente Is imagen de un tring concrete)" Arstote- Jes amuncia incluso la concepcién kanvana éel tiempo como el horizon insu- perable de nnestra experiencia, al afirmar: “No es posible pensar sin el tempo lo que no esté en elriempo” (Spire la memoria, 449-450), sin encomtar na es- pecie de Riguracin en algo temporal por ejemplo, “lo que dura por siempre”. Castoriadis pone esta concepcicn de laimagioacién la idea convencional, que por otra parte prevaleci6 tanto en De dina como en toda la tradicién metaisi- a subsiguiente. Para esta concepcidn radical, la imaginacién no es pasivo-re- ceptiva ni conceptual; esto significa que no se la puede ubicar oncoldgicamnente, puesto que indica una fisura en el eificio ontoldgico del sr, Castoriadis parece entonces plenamentejustifcado en su enfogue {con reget al Metrocso" que Heideggrleimputs a Kant vendo enfens et “aso sin fondo" bien por esorimtenta dee aginacsn cescendena al propio Heiepzer quien en ead “erocoke”devputs de baer cio 3 oro Sobre Kant Fay um nies odo, encabraintay orradara des cocston de a Imani, pus cn callers du xcronrbeguicnes no econ wg ‘shell al eae bay asprin de lo Qe es csi pura en oda om tol ened pestle del se) Castoradis también extae consecuencias politicas: el retroceso de Heideg- ger ance el abismo de la imaginacién justfica su acepraciéa del cierre politico {otalitario, mientras que el abismo de la imaginacién propocciona el fandamer to Flosiico de la apercura democratic: la concepeién de Ia sociedad como ba- sada en un acto colectivo de imaginacién historia. “El reconocimiento pleno de Ia imaginacién radical solo es posible si va de la mano con el descubrimiemto de la ura dimensicn del imaginario radial, el imaginario sociohistério, que insttuye ala sociedad como fuente de una ereacién ontologica que se desplicga 19. Vésse Cornelis Castriadis, “The Discovery of she Imagination’, Conlon, val I. 2,cembre de 1998 20. thi, pgs. 185-186, 4 Mandaders de a ganas asennad fists No abstante, la eoocepeidn que tiene Castoriads de ls imagi- twin na alsndona el horionte exstencialsta del hombre como ei ser que nape sy “esencia® en e acto dels imaginacin, wascendiendo a todo ser po- tuten, De modo que, antes Je que pronunciemos nuestro juicio defintivo al Tespevto serfaapropiado exeminar mis atentamente los periles de la imagina- ‘nol propio Kane Ii wistetin dela imaginacign traseendeneal en euanco espontaneidad reside rel hecho de que es imposible siuarla adecuadamente con respecto la pareja ste le fenoméiico y lo newnienal. Fn este punto, e propio Kant queds atrapado tnt nw aolladero, en fs ambigiedad, o en uno y ora, Por uma parte, concibe la libertad trascendental Ga “espantanciad” como notmenal: en cuanto entidades Ieaoméniens escamos apresados en Ia red de lag eonexiones causal, mientras yur nuestra libertad (el beck de que, como sujetos morales, somos libres, so- thurs agentes que se originan a si mismds) indica la dimensién novmenal. De este nal, Kane resuelve las antinoosias dindmicas dela x2n: ambas proposiciones ypwaten ser verdaleras. Puesto que tos los fendmeaosestin rinculados causal nt, cl hombre, como entidad Fenoiénics, no es libre, pero en tanto entidad ‘mnncnal puede acruar moralmente como un agente libre... Lo que desdibyja ‘te cuadro clara es la comprensién que el propio Kant tiene de bs consecuen- ‘as catstr6fices de nuestro acceso directo a la esfera noumenal: i exte acceso ‘sisters, los hombres perderian su libertad moral y su espontancidad trascenden- tak se convertran en teres inertes. En un subcapitulo de su Grice del rain rain, coisteriosamentetculado “De le sabia adapeacion de las facultades cog fnvae el one a su vocaci6n pritie”, Kant exponde al intercogante de qué sus scederfa

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