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PAINTINGS 1945
“The present study deals with the oldest known paintings; it does not deal with primitive art,
La primera paradoja que podría exponerse aquí, es aquella que muestra como
ello, de las primeras concepciones del arte rupestre se deriva de las objeciones
producidas por alguien completamente ajeno a su dinámica interna y que, desde otro
Lo que resulta cierto es que cada formulación aparentemente cifrada que este autor hace
(Max Räphael) muestra sin duda un camino de estudio bien distinto, que proviene de las
ha abierto rumbos para juzgar la intimidad de las discusiones, para orientar la ciencia
del hombre sobre la naturaleza. En esta misma vía ha podido construir una imagen de
(Hegel), para así poder hacer, sin duda intelectualmente una formulación teórica
compleja, que le permite configurar la reconstrucción de su unidad y proceso, en la
búsqueda del momento en que la conciencia pueda ser capaz de introducir lo concreto,
es decir, que supere la dificultad de lograr reunir todos los puntos de vista, establecer la
síntesis de lo diverso y exponer finalmente todas las determinaciones. Todo ello sucede
por que expresamente el hombre debe ser juez y parte, para introducir en las
crítico para pensar las actividades humanas, sus vínculos y sus contradicciones, pero
también sus instrumentos y lenguajes y con ello sus representaciones. Así la obra de arte
se ubica en otra esfera más allá del asunto biológico-técnico adaptativo, como una
No es nada casual que según la versión de Räphael la búsqueda de la libertad que viven
los franceses y españoles en la segunda guerra mundial este iluminada por el símbolo de
expresión estética, un ejemplo entre muchos otros que podrá realizar el hombre en su
recorrido histórico. Sin duda el sentido común diría que esto es de por si una
El libro de Max Räphael se inicia con una primera y extraordinaria objeción que
pretende mostrar que desde otra esfera intelectual, en otro horizonte, con otra
perspectiva tan rigurosa como aquella, es posible pensar exactamente todo lo contrario a
Desde el comienzo de este libro (Räphael 1945) se hacen las primeras precisiones sobre el
modo como este intelectual piensa el arte y con él las manifestaciones artísticas que están
presentes en las cavernas prehistóricas. En primer lugar anuncia que aunque trata del
fundamentalmente en que, tanto la historia humana como la naturaleza del arte de esta
divulgación han sido teóricamente mal formuladas por las interpretaciones que están
presentes en las concepciones que pretenden explicar el arte rupestre paleolítico en los
primeros años del siglo XX. El llamado de atención a estas versiones se puede entender
cuando se hace la pregunta simple que interroga por el fundamento de sus afirmaciones,
es decir a la pregunta que simplemente se interesa en saber cómo hicieron para saber
objetivamente que siendo antiguas tendrían que ser inmediatamente primitivas? Lo que
resulta inicialmente de esta primera objeción es que según Räphael estas versiones que
opinar sobre arte, imaginado, sin fundamento recurren a versiones que presumen un
existir en estos momentos iniciales humanos más que relaciones elementales. Al suponer
humano y con ello del lenguaje rupestre, produciendo afirmaciones sin soporte (sin
evidencia y sin argumentación), con lo cual es resultado es que han dogmatizado sus
Cada párrafo de este texto de Max Räphael muestra las distinciones que observa él
frente a la versión oficial divulgada fundamentalmente por una tendencia que asume el
perfecto (Magdaleniense) como de una cronología que debería ser análoga en muchas
áreas geográficas. Esta explicación tradicional no solo estaba interesada en responder
del arte, por el desarrollo del lenguaje y del sistema intelectual que producía las
evidencias. Sin embargo, con solo reflexionar con los primeros temas se puede deducir
que no solo no hay evidencias (Leroi Gourhan), sino que tampoco hay una reflexión
rigurosa.
El interés central del texto de Max Räphael es precisamente observar cómo desde una
embargo decir que este autor realmente hubiera ampliado su investigación y ajustado
diversos aspectos teóricos si hubiera tenido la feliz ocasión de visitar un número mayor
de cuevas, lo cual no pudo hacer, a pesar de que hubiera querido hacerlo y completar su
versión final[6], que es la que ahora se reseña. Anos mas tarde pudo observar (Les
Combarelles y Fonte de Gaume) que los sitios reales tienen una mayor complejidad y
derivada en buena parte de los dibujos de Breuil, anexados en la publicación. Y que fue
Uno de los argumentos iniciales con los cuales inicia su critica al modelo mas divulgado
hace referencia a cuál era el fundamento teórico que se derivaba de las formulaciones
usuales que producían la opinión que estas formas de representación eran motivos
aislados, “solamente animales aislados” (Max Räphael 1945). Según su reseña el incluye las
afirmaciones que fueron usadas y así dice que los hombres primitivos del paleolítico no
eran capaces de hacer grupos de animales y con ellas composiciones[7]. Según Räphael
esto puede explicarse y entenderse con cierta precisión porque estos enunciados
simplistas (Baffier 1988) desatendían nada mas ni nada menos una tradición de estudio
de la historia. Todo ello lo expresa Räphael indicando que a la base de estas exposiciones
del carácter primitivo y con ello también una real incomprensión de las discusiones
sobre las “formas del arte” tema que sin duda se había originado en la antropología
época contemporánea (Cassirer 1971) .Así que la primera objeción esta interesada en
mostrar que la versión inicial no puede percibir que existe una historia compleja que no
solo hace referencia a la historia de las formas materiales y de las actividades humanas,
sino que tampoco puede introducir una reflexión sobre las formas del lenguaje humano
para el estudio y comprensión de las formas de arte. Su formulación es tan sintética que
no resulta fácil para un lector que no tenga el prerrequisito de haber estudiado los
tener una noción siquiera aproximada de que esta discutiéndose realmente entre líneas.
Resulta sin duda muy interesante incluir aquí, en este primer aspecto, la reseña que se
hace de la edición francesa de los ensayos de Max Räphael en torno al espacio en el cual
Räphael manifiesta su sorpresa al imaginar que existen versiones que suponen que lo
característico de estas obras es que los artistas fueron incapaces de tener una noción del
espacio, de las superficies y que no pudieron más que reproducir los animales
cierto es todo lo contrario y que el puede pensar que no solamente hay grupos y
adicionalmente es posible reflexionar sobre las composiciones presentes en amplios
espacios de las paredes y los techos. Lo único que el no puede pensar es que estas obras
sean representantes del arte primitivo. Aparentemente son modernas y sin embargo son
Räphael algunas inquietudes que se interrogan por el tipo de respuestas producidas por
los prehistoriadotes y las implicaciones que estas podrían dar en la incomprensión del
producir la definición del arte primitivo?. Fue sencillamente una prolongación de los
estilísticas, lo que motivo esta interpretación? ¿Cuáles son las reales evidencias que
permitirían asegurar que pintaban figuras animales aisladas e inconexas? Como pueden
saber en el registro de las cuevas que no tenían ninguna noción del espacio y de la
composición de las formas de los animales organizadas en cada lugar? Cómo pueden
primitivos con tanta limitación realizar obras de arte? ¡Son actos gratuitos y caprichosos,
como rasguños de buena calidad, pues los animales están, -según esta versión extraña y
confusa magníficamente pintados! Por ello y por otros aspectos resulta sorprendente que
hechos por una mente primitiva! Algo en la argumentación desde su inicio estaba
Así que la respuesta inicial de Räphael es exactamente todo lo contrario. Con la real
dificultad de imaginar que las transcripciones recibidas son exactamente lo que hay en
las cuevas, lo cual no es cierto, Räphael considera que precisamente allí observa una
expresión extraordinaria de la estética y un virtuosismo del manejo del espacio. Es un
ejercicio que modela una peculiar organización de los grupos pictóricos y una
Pero además de esta primera objeción que resulta paradigmática en los estudios
definir el arte rupestre de las cuevas pintadas y grabadas como un arte no naturalista.
Esta idea también será reiterada veinte años más tarde por los arqueólogos Peter Ucko y
número importante de cuevas, tal y como lo informan en su trabajo de 1967 (Ucko &
del arte y de las concepciones teóricas (filosóficas y sociológicas) que reflexionaban sobre
la estética permitiría decir que el autor de las obras paleolíticas hizo una versión
fotográfica o mimética de la naturaleza. Quien estudia con algún rigor las temáticas
épocas el hombre ha atribuido este nexo y ha imaginado que es posible sin pensar
objetividad empírica, nada en el estudio del lenguaje y del pensamiento humano puede
demostrarlo racionalmente, como tampoco la capacidad de poder aislar los datos de los
argumentar de que manera el hombre del periodo paleolítico primitivo o no pueda tener
la capacidad de aislar las figuras y ponerlas sucesivamente unas al lado de otras sin
ninguna relación aparente. Si se reflexiona con algún fundamento tendría que decirse
que si alguien es capaz de hacer tal estructura de distinción (capacidad analítica) es
porque previamente tiene que hacerlo desde una síntesis, lo quiere decir que no es
posible dividir y fragmentar un espacio de la realidad sin que previamente exista una
estética.
De otro lado si se ha aceptado como se hace hoy que el Homo Sapiens tenia las mismas
cualidades del hombre actual, aceptar estas potencialidades significaba que las pinturas
como lo ha hecho en diversas etapas. La obra de arte es una “emancipación desde el estado
animal (que) encontró una expresión artística” (Max Räphael 1945). En la versión tradicional
breuliana, el autor de las obras rupestres del “paleolítico superior” es casi un ente
aisladas, pues aún no es capaz de pintar estructuras complejas. Según Max Räphael el
ejemplo contrario podría buscarse igualmente en todas y cada unas de las obras de arte
es necesario reiterar en cada concepto que expone Räphael que los errores de la otra
de la naturaleza de la obra del arte, de la historia del arte como tal y de una un
territorio laico.
Su afirmación se explica cuando dice que no existe una reflexión sobre la historia del
arte y con ello las representaciones rupestres estarían únicamente ubicadas en los
procesos de hominización resultantes de las asociaciones de la geología, paleontología y
del sentido común, que hace metáforas con los procesos biológicos, cuando en realidad
Pues ya se sabe que el análisis como tal, es decir la habilidad de diferenciar es una
capacidad que sólo es posible previa condición de una síntesis anterior, que le
fundamente.
Es también Max Räphael quien formula por vez primera una objeción en el sentido de
los errores que se cometen con una teoría de la historia que imagina que se trata de una
línea recta que se inicia en un punto cero[10], punto de origen, que aparentemente
semejantes a aquellos argumentos que fueron expuestos por Räphael en 1945. No son los
progresos técnicos, aunque ellos estén allí en el camino de las actividades humanas los
que deciden el modo humano de relación. Son según Räphael el estudio de los
hombre, del nivel, del grado y de la clase de relación en donde las estructuras de sus
instrumentos no serán más que evidencias de esta dinámica, pero que no podrían
diferencias de las formas que están presentes en las representaciones sean de animales o
de otros simples trazos podrán ayudar a definir con claridad las etapas. Y aunque este
sea el camino convencional tendrá que buscarse en otra parte y no en las simples formas.
cualidades, como un problema histórico social, que permitía explicar aún mejor, el
esta perspectiva del proceso social era posible unificar diversas “factores sueltos” y
(escolástica) fue remplazado por la observación con principios científicos (Kant) hasta
sociedad tendría que incluir en su análisis, el modo como pensamos los problemas
dinámica de estos desarrollos y en las dificultades que fue tener la reflexión al intentar
sociología tendrá que mostrar dos cosas fundamentales: la perspectiva desde la cual se
piensan los problemas de la vida social y las opciones que existen para reconstruir
con las evidencias, y un aparato crítico refinado las posibilidades de articulación de los
objetos de una época, en el flujo histórico que le determina. Una sociología del arte
tendrá entonces que estar en este contexto singular, tratando de comprender las formas
racionalmente el arte antiguo del paleolítico superior debió iniciarse antes (en etapas
tempranas) aunque no existan evidencias pues estas desaparecieron. Y sólo por que
algunos registros corresponden a este período, se asume que únicamente allí debió
estas manifestaciones debieron ser un resultado una síntesis, de diversos y aún más
Max Räphael le interesa y esto se hará en cada nivel en relación las versiones mas
divulgadas.
Desde la perspectiva de la historia crítica del arte las representaciones presentes en las
cuevas paleolíticas muestran según Räphael una relación extraordinaria de cercanía [12]
sino la distancia real (pues el cazador paleolítico luchaba con el animal a pocas cuartas de
pictórico los mínimos detalles de los diversos animales. Será, según su interpretación un
momento único de la historia del arte, de una visión a corta distancia, que genera un
observación del animal y cuando adquiera una mayor distancia (visión a distancia) en
con los cuales podrá establecer una nueva relación de emancipación de la naturaleza. Es
indispensable que se entienda que aquí esta expresada una forma de trabajo relativa a
este período, que sin duda es contradictoria con las comunes formulaciones, en donde se
caza y recolección. La noción de trabajo intelectual esta aquí como lo va estar en los
precisiones. En primer lugar es necesario mostrar que la representación y con ello las
pinturas y grabados paleolíticos son una construcción humana (Kant), que se inicia en el
privilegiar cierto tipo de elementos y aspectos, es decir que el objeto final, en este caso la
representación pictórica se fundamenta en la naturaleza del pensamiento. Esta formula
Fenomenología del Espíritu, en la cual se discute con la tradición empirista. Según Hegel es
contrario aún las palabras que enuncian lo más singular de lo externo, son expresión en
entender el lugar de donde extrajo Räphael sus conceptos para el análisis de las obras
paleolíticas y el punto de vista que habría que asumir para entender su formulación. El
por lo menos dentro del lenguaje humano una realidad que no tenga en cuenta el
pensamiento. Todas las propiedades de los objetos que se enuncian, son en cada caso,
formas universales que no sólo se usan para describir una única cosa en el mundo, sino
que son universales que ayudan a simular lo singular mismo. Así pues, la noción de
visión a corta distancia determinada por Max Räphael no hace en ningún caso referencia
elaboración intelectual muy compleja que escoge y privilegia elementos y siempre desde
De otro lado, habría que preguntar cuál es el fundamento de la versión tradicional. ¿En
a la comunidad de donde provienen sus ideas pues ello haría de cierta manera, que
documento y en este caso, el registro arqueológico: los murales rupestres. El que todo
los sentidos deberá ser afectado y con ello, podrá ubicar con su capacidad inteligible el
lugar que tiene dentro de la estructura. Imaginado el primitivo como un ser sin esta
cuevas paleolíticas de animales aislados y la inexistencia de una noción del espacio como
tampoco la organización de una escena compositiva que reuna todas las figuras. Así que
encuentra ubicada en las disputas entre la tradición escolástica y las filosofías ilustradas
que ya en la mitad del siglo veinte, se llamaban genéricamente como teoría critica.
Si el arte del periodo paleolítico no es primitivo ni tampoco puede ser entendido con una
interpretación con los conocimientos que se tiene de otras etnias en otras latitudes
mundo. Lo cierto es que el uso de los paralelos etnográficos no sólo supone que todos
los grupos étnicos tendrían que pasar por los mismos desarrollos sino que las etapas
las cuales salieron los informes de los etnógrafos. Para Max Räphael es indispensable
reflexionar sobre la peculiaridad de esta etapa de relación del hombre con la naturaleza.
A pesar de la apariencia que indicaría el vinculo entre las comunidades paleolíticas y las
étnicas descritas por la etnográfica, es fundamental considerar que son realmente dos
tipos distintos de relación y por ello los elementos extraídos de las descripciones
etnográficas en nada ayudan al estudio de las formas de relación del hombre primitivo
las expresiones de cambio del lenguaje y en las comunidades “primitivas de hoy” lo que
libertad es manifiesta en las organizaciones descritas por los viajeros y etnógrafos estas
comunidades “desarrollan los métodos de dominación fantástica ideológica del mundo, más
etnográficos es erróneo para explicar todos grupos humanos de las mismas etapas pues
cual se expresan las primeras vivencias religiosas que fueron introducidas precisamente
bajo el influjo de los paralelos etnográficos y que aun hoy continúan usándose para
explicar el sentido y función del arte rupestre. La reflexión teórica y la sociología del arte
con una perspectiva histórica hace posible acceder a otras distinciones y diluye la
formulación dogmática que imaginaba posible conectar con facilidad todas las formas de
los grupos indígenas de todos los continentes, como algo semejante al periodo
paleolítico. Primitivos son según esta antigua fórmula los hombres paleolíticos, del
mismo modo que son primitivos los grupos étnicos que son objeto de la antropología en
inconsistencias, no solo puede observarse en Max Räphael para el estudio del arte
paleolítico, sino también con Levy Strauss (Pensamiento Salvaje- /La ciencia de lo concreto)
para el estudio de los indígenas America fundamentalmente del brasil, que claro fueron
considerados primitivos.
[3]
En
realidad
este
fue
el
centro
objetivo
de
la
disputa
y
continua
hasta
el
presente
siendo
el
lugar
en
donde
se
proponen
y
rechazan
los
argumentos
[4]
This
emancipation
from
the
animal
state
found
an
artistic
expression
as
great
and
universally
human
as
was
later
found
by
the
Greeks
to
express
their
emancipation
from
agriculture,
when
they
broke
with
an
existence
bound
exclusively
to
the
soil
and
took
up
navigation
and
maritime
trade
and
began
to
live
the
social
political
life
of
the
polis.
The
Palaeolithic
paintings
remind
us
that
our
present
subjection
to
forces
other
than
nature
is
purely
transitory;
these
works
are
a
symbol
of
our
future
freedom.
Today,
mankind,
amidst
enormous
sacrifices
and
suffering
is,
with
imperfect
awareness,
striving
for
a
future
in
the
eyes
of
which
all
our
history
will
sink
to
the
level
of
“prehistory.”
Palaeolithic
man
was
carrying
on
a
comparable
struggle.
Thus
the
art
most
distant
from
us
becomes
the
nearest;
the
art
most
alien
to
us
becomes
the
closest.
(Max
Räphael
1945)
[5]
“The
present
study
deals
with
the
oldest
known
paintings;
it
does
not
deal
with
primitive
art,
even
less
with
the
beginnings
of
art.”
(Max
Räphael
1945)
[6]
En
la
edición
Francesa
existen
referencias
sobre
la
visita
de
Max
Räphael
a
las
cuevas
que
iniciaron
los
descubrimientos
y
la
corrección
del
libro
publicado
en
1945
en
ingles.
Una
estudio
detallado
de
su
versión
final
podría
complementar
mucho
mas
lo
que
aquí
se
enuncia
de
manera
general
(Max
Räphael
versión
francesa)
[7]
“It
has
been
said
that
Palaeolithic
artists
were
incapable
of
dominating
surfaces
or
reproducing
space:
that
they
could
produce
only
individual
animals,
not
groups,
and
certainly
not
compositions.
The
exact
opposite
of
all
this
is
true:
we
find
not
only
groups,
but
compositions
that
occupy
the
length
of
an
entire
cave
wall
or
the
surface
of
a
ceiling;
we
find
representation
of
space,
historical
paintings,
and
even
the
golden
section!
But
we
find
no
primitive
art.”(Max
Räphael
1945)
[8]
«
Ils
sont
suivis
d’un
important
appareil
critique
et
d’une
bibliographie
substantielle.
L’illustration
est
composée
uniquement
de
relevés
de
l’abbé
Breuil
et
ne
présente
guère
d’autre
intérêt
que
d’offrir
un
support
au
lecteur
non
spécialisé.
Paradoxalement,
Max
Raphaël,
théoricien
marxiste,
a
été
plutôt
négligé
par
les
préhistoriens.
Pourtant
il
est
le
premier
à
refuser,
arguments
à
l’appui,
les
théories
simplistes
de
l’art
pour
l’art,
de
la
magie
de
la
chasse
et
de
la
fécondité
qui
lui
sont
contemporaines
et
à
affirmer
que
les
figures
paléolithiques
ne
sont
pas
disposées
au
hasard
dans
les
grottes
mais
que
leurs
groupements
sont
volontaires
et
forment
des
ensembles
cohérents
et
significatifs,
reflets
de
l’idéologie
des
chasseurs
cueilleurs;
ses
travaux
préfigurent
ainsi
ceux
d’A.
Laming-‐Emperaire
et
d’A.
Leroi-‐Gourhan»
(Baffier
1988)
[9]
The
Palaeolithic
paintings
remind
us
that
our
present
subjection
to
forces
other
than
nature
is
purely
transitory;
these
works
are
a
symbol
of
our
future
freedom.
(Max
Räphael
1945)
[10]
“One
such
theoretical
error
is
to
conceive
history
as
progress
along
a
straight
line,
to
imagine
that
what
exists
today
has
been
created
gradually
out
of
nothing,
as
though
the
process
of
history
followed
the
pattern
laid
down
in
the
Biblical
story
of
creation.
Actually,
no
one
has
ever
been
able
to
discover
an
absolute
“origin”
for
the
very
reason
that
the
idea
of
an
absolute
origin
is
only
a
metaphysical
hypothesis.
A
number
of
categories
are
present
in
all
real
existence
and
thinking
and
in
the
relations
between
existence
and
thinking;
these
categories
remain
fundamentally
constant,
only
their
concrete
realizations
vary
historically,
change
and
evolve”.
(Max
Räphael
1945)
[11]
“Pero
no
hay
razón
para
asumir
que
el
arte
se
desarrolló
sólo
entonces.
Las
armas
representadas
en
las
pinturas
de
las
cavernas
de
en
Dordoña
y
Cantabria,
así
como
el
sistema
mágico
de
signos
lógico
y
elaborado
sobre
las
ollas
egipcias
neolíticas,
indican
que
la
pintura
en
madera
y
el
tallado
debieron
existir
durante
la
era
paleolítica
temprana,
pero
que
por
la
corruptibilidad
del
material,
ese
arte
está
para
siempre
extinto.
Sólo
porque
la
naturaleza
de
la
historia
y
formas
del
arte
estaba
malentendido
teóricamente,
pudieron
esos
hechos
ser
ignorados
hasta
ahora”
(Max
Räphael
1945
Trad
Carvajal
2009).
[12]
“Finalmente
el
objeto
del
arte
paleolítico
no
es
pintar
la
existencia
de
hombres
y
animales
individuales,
sino
representar
la
existencia
del
grupo,
el
rebaño
y
la
horda.
Si,
pese
a
todo
eso,
las
pinturas
de
la
caverna
nos
golpean
por
su
aparente
concepción
moderna,
y
por
tanto,
familiar,
la
razón
es
que
fueron
producidas
en
una
situación
histórica
única,
y
son
un
gran
símbolo
espiritual;
pues
datan
de
un
período
cuando
el
hombre
recién
emergía
de
la
pura
existencia
zoológica,
cuando
en
vez
de
ser
dominado
por
los
animales,
él
empezaba
a
dominarlos”(Max
Räphael
1945
Trad
Carvajal
2009)..
[13]
“Suponen
este
trozo
de
papel
en
que
escribo,
o
mejor
dicho
he
escrito,
esto;
pero
no
dicen
lo
que
suponen.
Si
realmente
quisieran
decir
este
trozo
de
papel
que
suponen
y
esto
es
lo
que
quieren
decir
esto
es
imposible,
ya
que
el
esto
sensible
supuesto
es
inasequible
al
lenguaje,
que
pertenece
a
la
conciencia,
a
lo
universal
en
sí.
Por
tanto,
bajo
el
intento
real
de
decirlo
se
desintegraría;
quienes
comenzaran
a
describirlo
no
podrían
acabar
su
descripción,
sino
que
deberían
dejarlo
a
cargo
de
otros,
los
cuales
tendrían
que
reconocer
ellos
mismos,
a
la
postre,
que
hablaban
de
una
cosa
que
no
es.
Suponen,
por
tanto,
indudablemente
este
trozo
de
papel,
que
aquí
es
completamente
otro
que
el
de
arriba;
pero
hablan
de
“cosas
reales,
de
objetos
externos
o
sensibles,
de
esencias
absolutamente
individuales”,
etc.;
es
decir,
sólo
dicen
de
ellos
lo
universal;
por
tanto,
lo
que
se
llama
lo
inexpresable
no
es
sino
lo
no
verdadero,
lo
no
racional,
lo
simplemente
supuesto.
Si
no
decimos
de
algo
sino
que
es
una
cosa
real,
un
objeto
externo,
no
decimos
solamente
lo
más
universal
de
todo,
y
de
este
modo
enunciamos
más
bien
en
su
igualdad
con
todo
que
su
diferenciabilidad.
Si
digo
una
cosa
singular,
la
digo
más
bien
como
totalmente
universal,
pues
todo
es
una
cosa
singular;
lo
mismo
que
esta
cosa
es
todo
lo
que
se
quiera.
Y
si,
más
exactamente,
se
indica
este
trozo
de
papel,
tendremos
que
todo
papel
es
un
este
trozo
de
papel,
y
yo
he
dicho
siempre
solamente
lo
universal.
(Hegel)
[14]
“Esta
sal
es
un
aquí
simple
y,
al
mismo
tiempo,
múltiple;
es
blanca
y
es
también
de
sabor
salino,
y
es
también
de
forma
cúbica,
posee
también
determinado
peso,
etc.
Todas
estas
múltiples
propiedades
se
dan
en
un
simple
aquí,
en
el
que,
por
tanto,
se
compenetran;
ninguna
de
ellas
tiene
un
aquí
distinto
del
de
otra,
sino
que
cada
una
de
ellas
se
halla
siempre
en
el
mismo
aquí
que
las
demás;
y,
al
mismo
tiempo,
sin
hallarse
separadas
por
distintos
aquí,
no
se
afectan
las
unas
a
las
otras
en
esta
compenetración;
lo
blanco
no
afecta
o
hace
cambiar
a
lo
cúbico,
ni
lo
uno
a
lo
otro
al
sabor
salino,
etc.,
sino
que,
siendo
cada
una
de
ellas,
a
su
vez,
un
simple
relacionarse
consigo
misma,
deja
tranquilas
a
las
otras
y
sólo
se
relaciona
con
ellas
por
el
indiferente
también.
Este
también
es,
por
tanto,
el
mismo
puro
universal
o
el
médium,
la
coseidad
que
las
reúne”
(Hegel)
[15]
“La
etnografía
podría
explicar
hechos
prehistóricos
aislados,
si
la
explicación
se
adecua
al
contexto
general
de
los
tiempos
prehistóricos,
pero
no
es
correcto
evaluar
la
vida
de
los
pueblos
paleolíticos
sobre
la
base
de
las
condiciones
prevalentes
entre
los
pueblos
primitivos
de
hoy,
porque
lo
que
sea
que
tengan
esos
primitivos
pueblos
en
común,
resulta
de
su
haber
quedado
en
un
estadio
del
desarrollo
material.
Si
el
totemismo
existió
en
la
edad
paleolítica,
no
necesariamente
tuvo
las
cualidades
y
funciones
que
muestra
hoy,
aun
entre
las
más
primitivas
tribus
de
cazadores.
Así,
el
arte
paleolítico
no
puede
ser
entendido
trazando
una
analogía
con
la
escultura
de
los
“pueblos
primitivos”,
con
la
cual
no
tiene
absolutamente
nada
en
común,
porque
esos
pueblos
primitivos
o
usan
el
arco
y
la
flecha,
o
viven
en
los
alrededores
escogidos
en
concordancia
con
sus
medios
de
producción
y
armas,
mientras
los
paleolíticos
constantemente
lucharon
contra
un
medio
peligroso.
Por
esta
razón
debemos
tratar
de
entender
las
pinturas
de
caverna
como
expresiones
espirituales
sui
generis”
(Räphael
1945
Trad
Carvajal
2009)..