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Lucas 15 1-7 Parábola de la oveja perdida

Luc 15:1 Se acercaban a Jesús todos los publicanos y pecadores para oírle,
Cuando bueno es que los pecadores vengan a Cristo, Dios no busca justos o personas que se creen justos, Dios busca
pecadores que quieran llegar al arrepentimiento.
Publicanos: personas consideradas como ladronas dentro de los judíos, ya que trabajaban para los romanos traicionando
a sus hermanos judíos y además al cobrar los impuestos agregaban de más para dejarse parte para ellos, esta práctica
era muy conocida y los publicanos tenían grados de importancia llegando algunos a ser muy ricos.
Pecadores: Si bien todos somos pecadores acá debe referirse a personas que realizaban pecados muy mal vistos o muy
grandes ante los ojos de las personas. Como ahora se dice, esas son malas personas, de mal vivir, de mal actuar, aquellos
eran personas pecadoras.
Cuando bueno es oír a Cristo, porque al ver y escuchar se puede saber que lo que dice es verdad.
Dios nos quiere dar un mensaje que es importantísimo de escuchar, nos quiere dar un mensaje de salvación, un mensaje
de verdad, un mensaje de juicio y un mensaje de Amor.
Dios nos quiere dar de su amor a nosotros que somos simples pecadores.
Dios nos ha elegido sin nosotros ser merecedores de nada, estando tan alejados, estando tan desviados de tus caminos,
estando tan ciegos y perdidos.
Y es necesario que tu mí querido amigo escuches el mensaje que Dios te quiere entregar.

Luc 15:2 y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come.
Ahora vemos dos categorías más de personas, por una parte:
Fariseos: que eran personas muy entendidas en la ley, estudiosas, que practicaban los mandamientos día a día e incluso
incluían más para verse más santos ante el pueblo.
Escribas: personas dedicadas a la hermosa obra de transcribir la Biblia a mano, personas que cuidaban de limpiarse al
escribir la Biblia, de mantener la santidad del nombre de nuestro creador.
A diferencia del grupo anterior estas personas se veían como personas mas cerca de Dios por su actuar, por su conducta
diaria, por su trabajo pero lamentablemente venían a murmurar, hablar mal de Cristo, hablar en forma malintencionada
de otra persona, buscando defectos, buscando errores.
Jesús era malo ante sus ojos al recibir y comer con pecadores. Mas Cristo no hace acepción de personas.
Si usted o yo creemos que somos mejor que la personas de al lado, si pensamos que tenemos una vida perfecta, sin
mancha, estamos totalmente equivocados, porque ante los ojos de Dios somos todos pecadores, todos nacemos en
maldad, todos cometemos pecados y al no poder cumplir con toda la ley nos hacemos culpables de todos. Al igual que
un dominó, Dios quiere que seamos perfectos al cumplir su ley, pero como no somos capaces fue necesario que llegara
otro medio de salvación como es el creer por Fe, por la gracia de Dios.

Luc 15:3 Entonces él les refirió esta parábola, diciendo:

Nuestro Dios que sabe todo, también sabe la mejor forma de explicarnos lo que sale de nuestro entendimiento con
ejemplos sencillos y de fácil asimilar.
Una vivencia diaria para dar a entender cosas celestiales, es algo que solo Cristo podría hacer, de explicar su mensaje de
tal modo que un niño puede comprender su mensaje y que tanto gente estudiosa como gente más humilde, como gente
pobre y rica pueda llegar si lo desea al arrepentimiento de sus pecados.

Luc 15:4 ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el
desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?
Un ejemplo de cómo es la preocupación de un pastor cuando una de sus ovejas se encuentra perdida, las noventa y
nueve no necesitaban ser encontradas, no necesitaban atención, no necesitaban ayuda, pero aquella que estaba aislada,
que estaba con necesidad, que estaba triste, con dolor, con aflicciones, con molestias físicas, con hambre, etc. Esta oveja
que estaba en un camino tan errado, tan lejos de su pastor que la quiere, que le tiene aprecio, que le tiene amor, que
destina tiempo en su cuidado, en su alimentación y sustentar sus necesidades, este es quien realmente aprecia a su
Por: Iván Pablo Yáñez Fica Página
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oveja. El ajeno no se preocupa de ella, el lobo intenta comerla y matarla, fuera de su redil solo encuentra cosas que le
afectan a mal, solo con su cuidador puede tener paz, solo con su redil puede tener protección.
Y es así como usted se encuentra, triste, solo, necesitado, buscando en este mundo donde solo encontrara indiferencia y
desprecio, malas intenciones, y alegrías ilusorias de muy corto tiempo. Dios quiere para usted darle lo que necesita,
cuidarle, proveerle de todo lo necesario pero para eso usted debe estar junto al buen Pastor, que cuida a las ovejas,
nuestro Salvador, nuestro Señor, él es quien quiere el bien para usted y para su alma.

Luc 15:5 Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso;

Cuanto nos alegra cuando podemos cumplir una meta, trabajamos mucho tiempo, ponemos esfuerzo, ponemos
capacidades, ponemos interés y al lograr nuestro objetivo que felices nos sentimos, cuan satisfechos de nosotros
mismos.
Cuanto gozo hay en el cielo por un pecador que se arrepiente. Y es así como Dios actúa con nosotros.
Siendo nosotros los que nos alejamos, el nos encuentra.
Siendo nosotros quienes lo despreciamos y tratamos mal, el nos pone sobre sus hombros gozoso.
Ese amor que solo Dios puede entregar, junto a esa ternura en el trato, sin represalias por hacerse ido lejos, sino con
gozo porque fue rescatada.

Luc 15:6 y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja
que se había perdido.
Y como no, luego de haber sido rescatados, como no decirlo a los demás, como no compartir la alegría de estar
nuevamente con su Pastor, con quien nos vio crecer, con quien nos tenia predestinados desde antes de la fundación del
mundo.
Como no compartir el gozo que Dios tiene cuando nosotros nos arrepentimos.
Gozaos conmigo, porque he encontrado Mi oveja que se había perdido.
Aunque fue una oveja rebelde, una oveja que traiciona a su Señor, él la trata con amor y como de su propiedad, si bien
se había perdido, ahora estaba gozoso de que fue hallada.
Y ese gozo que tiene el Señor es el que sentimos al saber que una persona ha llegado al arrepentimiento. Por muchos
años se puede predicar y enseñar la palabra, sin que nadie escuche, pero si solo uno llegara al arrepentimiento, por ese
uno todo valió la pena.
Hablar y compartir esta bendición con cercanos como la familia, amigos pero también con vecinos que no tienen un lazo
afectivo, personas de todas partes que deben saber que somos creyentes y que Dios nos tiene contemplados en su
amor.

Luc 15:7 Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos
que no necesitan de arrepentimiento.
Todos necesitamos arrepentimiento, solo hay persona que creen que no lo necesitan. Se creen tan santos, se creen tan
puros, se creen superiores a los demás, pero sin embargo sin importar quienes seamos o que clase social, o que raza o
color, todo somos pecadores y necesitamos del Salvador.
Cuanto gozo es el que Dios recibe cuando uno se arrepiente, porque el Sacrificio del Señor fue realizado por ese uno,
esta salvación es personal y no colectiva.
Dios quiere que tú personalmente llegues a la salvación y puedas tener gozo así como Cristo y así como nosotros.

Por: Iván Pablo Yáñez Fica Página

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