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Luc 19:11 Oyendo ellos estas cosas, prosiguió Jesús y dijo una parábola, por cuanto estaba cerca de Jerusalén, y ellos
pensaban que el reino de Dios se manifestaría inmediatamente.
El reino de Dios vendrá pronto pero no ahora inmediato sino en el tiempo que Dios estime conveniente.

Luc 19:12 Dijo, pues: Un hombre noble se fue a un país lejano, para recibir un reino y volver.
La persona que fue a buscar un reino, que gano la batalla y que viene a reinar.


     
c !"# Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían
para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí.
Jua 14:1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
c$! En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar
para vosotros.
Jua 14:3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros
también estéis.
Jua 14:4 Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.
Cristo es este personaje que fue a recibir un reino y volver.
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Mar 13:31 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.
&"!" Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre.
Mar 13:33 Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo.
Mar 13:34 Es como el hombre que yéndose lejos, dejó su casa, y dio autoridad a sus siervos, y a cada uno su obra, y al
portero mandó que velase.
Mar 13:35 Velad, pues, porque no sabéis cuándo vendrá el señor de la casa; si al anochecer, o a la medianoche, o al
canto del gallo, o a la mañana;
Mar 13:36 para que cuando venga de repente, no os halle durmiendo.
Mar 13:37 Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: Velad.

Luc 19:13 Y llamando a diez siervos suyos, les dio diez minas, y les dijo: Negociad entre tanto que vengo.
1 mina = 100 dracmas
A diez hombres se les encarga que se hicieran cargo de esa moneda que tenía un buen valor. Y la instrucción era muy
clara, negociar.
Trabajar el dinero para ganar algo de ello.
Cuando uno tiene un negocio invierte de tal forma que puede sacar provecho del capital que se tiene, pero hay que
tomar consideraciones, riesgos, investigar bien la fuente del negocio, hay que meterse en el tema porque no es un
juego, casi siempre que se hacen negocios es para tener ganancias, no es la idea perder el dinero invertido, pero existe
muchas maneras de trabajar el dinero.
Además que era una orden, no era una opción.

Luc 19:14 Pero sus conciudadanos le aborrecían, y enviaron tras él una embajada, diciendo: No queremos que éste
reine sobre nosotros.
¿Este hombre sería malo?
Su pueblo no le quería, así seria también con el Señor.
Jua 1:10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.
Jua 1:11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.
Jua 1:12 Más a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;
En el mundo también hay rechazo hacia Cristo, no creen su palabra, no creen en su obra, prefieren creen cuentos
ficticios a creer en su verdad.

Por: Iván Pablo Yáñez Fica

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Luc 19:15 Aconteció que vuelto él, después de recibir el reino, mandó llamar ante él a aquellos siervos a los cuales había
dado el dinero, para saber lo que había negociado cada uno.
Luego que venga el Señor va a pedir cuenta a cada uno en particular, como fue que se comportaron con lo que Él les
dejaba.
Y a cada creyente se le pedirá cuenta, como trabajo para con el Señor, que fue lo que hizo con esas verdades que tenían.
Los siervos representan a los creyentes y aquel dinero representa el tesoro de la salvación y ¿Cómo podemos trabajarlo?
Compartiéndolo, conversándolo, regalándolo a otras personas y así multiplicando esto que se nos fue encargado.
Así de una mina se multiplicaran a muchas más.

Luc 19:16 Vino el primero, diciendo: Señor, tu mina ha ganado diez minas.
Luc 19:17 Él le dijo: Está bien, buen siervo; por cuanto en lo poco has sido fiel, tendrás autoridad sobre diez ciudades.
Un siervo modelo, esforzado, trabajador, que de una lo multiplico a diez en el tiempo que su Señor no se encontraba.
Un buen siervo que recompensó según su trabajo.
El no estaba ganando su salvación, sino que premios de su trabajo como siervo del Señor

Luc 19:18 Vino otro, diciendo: Señor, tu mina ha producido cinco minas.
Luc 19:19 Y también a éste dijo: Tú también sé sobre cinco ciudades.
Un siervo que solo pudo ganar cinco pero que también tuvo su recompensa de ese trabajo realizado.

Luc 19:20 Vino otro, diciendo: Señor, aquí está tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo;
Luc 19:21 porque tuve miedo de ti, por cuanto eres hombre severo, que tomas lo que no pusiste, y siegas lo que no
sembraste.
Un siervo temeroso, un siervo que no obedeció la orden de su amo, un siervo que fue negligente, que escondió algo de
tanto valor que necesitaba ser repartido.
Un hombre creyente que se oculta, que se avergüenza del evangelio, que no tiene temor de Dios, que le atrae el mundo
como a Lot. Un hombre que prefirió recibirlo y ocultarlo para no cansarse, que prefirió no hacerse problemas, no
trabajar.

Luc 19:22 Entonces él le dijo: Mal siervo, por tu propia boca te juzgo. Sabías que yo era hombre severo, que tomo lo que
no puse, y que siego lo que no sembré;
Luc 19:23 ¿por qué, pues, no pusiste mi dinero en el banco, para que al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses?
Luc 19:24 Y dijo a los que estaban presentes: Quitadle la mina, y dadla al que tiene las diez minas.
Luc 19:25 Ellos le dijeron: Señor, tiene diez minas.
Luc 19:26 Pues yo os digo que a todo el que tiene, se le dará; mas al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.
Este hombre solo recibió el reto de su amo, por desobediente, por no intentarlo, por ser un cobarde, ni siquiera busco el
modo indirecto de trabajar para El. Simplemente lo dejo de lado y lo dejo solo para sí.
El premio que merecía se le fue quitado, fue tan necio que no recibió ningún premio de parte de Dios, y sin embargo el
que más trabajo recibió premio sobre premio.

Luc 19:27 Y también a aquellos mis enemigos que no querían que yo reinase sobre ellos, traedlos acá, y decapitadlos
delante de mí.
Por supuesto a los que estaban en contra de Cristo solo recibieron la condenación, no es la idea ser un siervo infiel, ni
tampoco perecer como estos hombres pecadores sino que usted debe buscar a Dios de corazón, en verdad y dar frutos
de su salvación, no se conforme con poco, y no se avergüence de la verdad, Dios les dará mucha más recompensa en los
cielos de lo puedan trabajar en la tierra.

Por: Iván Pablo Yáñez Fica

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