You are on page 1of 14

Freud crea una teoría en la que considera que la sexualidad no es exclusiva de la

psicología de los adultos, sino que que la infancia también posee pusiones sexuales

Debemos tener en cuenta que la visión que tiene Sigmund Freud sobre la sexualidad es
mucho más amplia de la que se suele creer de usualmente. Sexualidad, según Freud,
será todo aquello que tiene que ver con el placer y sus fuentes. Por eso diferenciará
claramente entre sexualidad y genitalidad (lo que nosostros llamaríamos pulsión
sexual). Una de las novedades más destacadas de la teoría del Psicoanálisis de Freud es
la afirmación de la existencia de instintos sexuales en la infancia siguiendo las
siguientes fases de desarrollo.

Fase Oral

La fuente de placer es la boca, relacionada con el hecho de comer (concretamente


mamar). El niño obtiene placer por el hecho de chupar, y eso le permite alimentarse
inconscientemente. Esta es la razón de la necesidad del uso del chupete.

Fase Anal

El placer está relacionado con el control y el descontrol de las necesidades fisiológicas.


El niño empieza a controlar sus esfínteres, y empieza a entender el Principio de
Realidad (aplazar la satisfacción de las necesidades por razones sociales). Aparece un
cierto instinto sádico (se despiertan las pulsiones de Thanatos).

Fase Fálica

En esta fase se descubren los órganos genitales y la idealización de estos centrarán la


obtención del placer. En este periodo se produce el Complejo de Edipo: relación que el
niño / a establece con sus progenitores, existiendo una relación ambivalente, ya que el
niño siente odio y amor al mismo tiempo por el progenitor de su mismo sexo. El
descubrimiento de los órganos sexuales adultos, así como la diferenciación entre lo
masculino y lo femenino será la responsable de este sentimiento de ambivalencia.

Fase de latencia y genital

La fase de latencia coincide con la resolución del Complejo de Edipo y es un período de


tranquilidad pulsional que debe conducir a la maduración física. En este periodo
podríamos situar el origen del Super-Yo, es decir, la aceptación de las normas morales
del padre o la madre. En la fase siguiente (fase genital) La sexualidad empieza a
centrarse, debido a la maduración física, en la genitalidad.

El Complejo de Edipo

Un aspecto fundamental a la hora de entender el psiquismo humano es el Complejo de


Edipo. En este proceso el niño o ñiña siente una atracción natural hacia el progenitor de
sexo diferente, determinando un sentimiento de rechazo hacia el progenitor del mismo
sexo. El niño, por ejemplo, odia a su padre ya que es quien realmente posee a la madre.
Dentro de este proceso intervienen, sin embargo, otros factores importantes, como por
ejemplo, el descubrimiento de los órganos sexuales adultos. El niño cree que la ausencia
de pene en las niñas es debida a una castración, lo que determina un miedo muy grande
a su padre, ya que es quien puede castigarlo.

Sentimiento de ambivalencia con el padre

Así el niño tiene un sentimiento de ambivalencia respecto a su padre ya que lo odia, lo


ama y tiene miedo de él, hecho que determina la fase de latencia, posterior a la fase
fálica, y el nacimiento de los sentimientos morales con el Super-Yo.

Escala de Kinsey
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Saltar a navegación, búsqueda

La escala Kinsey establece una serie de 5 grados de bisexualidad, entre la


homosexualidad (6) y la heterosexualidad (0) exclusivas, se indica en azul la proporción
de prácticas homosexuales, siendo el grado 3 la bisexualidad completa.

La escala de Kinsey es una escala creada por el Biólogo Alfred Kinsey, que establece
siete diferentes grados de sexualidad, tradicionalmente existiendo sólo tres. Evaluando
el historial sexual de una persona o los episodios de su actividad sexual en un tiempo
dado, se usa una escala desde 0, es decir, exclusivamente heterosexual, hasta 6, es decir
exclusivamente homosexual. Proporcionando una gradación en la orientación sexual,
estableciendo grados de bisexualidad, siendo muy novedoso para su época por ser el
primer estudio que plasmaba tal diversidad y se alejaba de la monosexualidad entonces
comúnmente aceptada. En el Informe Kinsey, se usa un grado adicional para la
asexualidad. Su primera publicación se hizo en el libro Conducta sexual en el varón(ver
bibliografía) (1948) por Alfred Kinsey, Wardell Pomeroy entre otros, que se extendió
con el trabajo Conducta sexual en la mujer (1953).

Presentando la escala en el primer tomo del informe dedicado al hombre (aunque


también la aplicaría a la mujer) Kinsey escribió:

El varón no es quien representa estas dos poblaciones distintas, heterosexual u homosexual. El


mundo no puede ser dividido entre cabras y ovejas. Es un fundamento de la taxonomía en que
la naturaleza raramente se enfrenta con categorías separadas... El mundo vivo es continuo en
cada uno de sus aspectos. Mientras enfatizo la continuidad de los grados entre las historias de
los exclusivamente heterosexuales y los exclusivamente homosexuales, ha parecido deseable el
revelar algunos tipos de clasificaciones que podrían estar basados en montones de experiencias
heterosexuales y homosexuales, o las reacciones en cada historia... A un individuo le puede ser
asignada una posición en esta escala, para cada periodo en su vida.... Una escala de siete puntos
está más cerca de mostrar los muchos grados que actualmente existen."1

Lo siguiente es sólo una adaptación más extendida donde se explica detalladamente el


mecanismo de cada grado de sexualidad en particular:

Frecuentació
Frecuentació
no
no
Rango Descripción Detalles atracción
atracción
entre gente
entre gente
de sexos
del mismo
opuestos
sexo

0 Exclusivamen El individuo del rango 0 es 0% 100%


te heterosexual, no desarrolla
heterosexual afecto que no sea amistad
con otros de su mismo sexo
(cualquier rango) y
difícilmente hace amistades
con individuos rango 0 del
sexo opuesto. El rango 0 en
el varón no es igual que en
una mujer. Las mujeres del
rango 0 expresan más
afecto, como los saludos de
beso en la mejilla, algo
menos común en varones.
Nadie dice que uno de
rango 0 en realidad si podría
haber tenido contacto sexual
con gente del mismo sexo,
pero esto es en el caso en
que alguna vez lo intentó
por única ocasión para
determinar si le agrada o no,
y por otro lado están las
violaciones homosexuales
totalmente contra la
voluntad de la víctima
heterosexual. Pero cuando
un individuo que toda su
vida se consideraba
heterosexual sostiene
relaciones homosexuales
más de una vez,
automáticamente abandona
el rango 0. La intimidad se
limita a darse sólo entre un
hombre y una mujer, pero
paradójicamente, en el
rango 0 uno de los dos
necesita ser bisexual o de
otro rango, ya que un
hombre y una mujer siendo
ambos con rango 0 jamás
son compatibles. El rango 0
se dedica a cazar y no puede
ser cazado, y por lo general
prefiere ir en busca de lo
prohibido, como lo son los
del rango 6 (homosexuales)
del sexo opuesto, así como
el rango 0 es prohibido para
los rango 6 del mismo sexo.
El individuo del rango 0 es
compatible sólo con
personas del sexo opuesto
que posean otro rango,
excepto el rango 6.

1 Heteroflexible El individuo del rango 1 1%-25% 99%-75%


en 1er. grado acepta amistades de
cualquier sexo y preferencia
sexual. Es
predominantemente
heterosexual y sólo
incidentalmente
homosexual. Se considera a
sí mismo como
heterosexual, mientras
encierra en el armario su
otra sexualidad.
Mayormente tiene relación
con el sexo opuesto, aunque
también elige a gente del
mismo sexo en ocasiones
remotas. El varón con rango
1 por lo general adopta el
rol activo con la pareja o
persona que elija para tener
relaciones,
independientemente del
sexo de ésta última con la
condición de que tenga
apariencia femenina, es
decir, la pareja pasiva del
varón rango 1 (de sexo
femenino o masculino) está
obligada todo el tiempo a
asumir el papel femenino en
el acto sexual, sea o no
mujer. Por ejemplo, en
relaciones varón-varón, el
varón rango 1 obligará al
varón gay pasivo a que
asuma un papel femenino, y
difícilmente acepta que éste
último asuma un papel o
apariencia varonil en el
acto, pues en ese caso la
relación fracasa. No se han
conocido todavía mujeres
heteroflexibles, debido a la
creciente aceptación del
lesbianismo. La intimidad
ya no se limita a darse sólo
entre un hombre y una
mujer, sino también entre
dos varones (un hombre con
una travesti o transexual) y
dos mujeres de forma muy
ocasional. En este rango, el
individuo es compatible con
heterosexuales del sexo
opuesto, con heteroflexibles
de ambos sexos y con
bisexuales de ambos sexos.

2 Heteroflexible Aunque el individuo del 26%-49% 74%-51%


en 2º grado rango 2 puede empezar a
tener interés en el mismo
sexo, aún es mayor lo que
sostiene con el sexo
opuesto, y debido a ello, se
esfuerza en ocultar toda
señal de otra preferencia
sexual. El rango 2 aún se
sigue considerando a sí
mismo como heterosexual,
pero ya siente una
curiosidad por los de su
mismo sexo. Esto significa,
por ejemplo, que un varón
con rango 2 acepta tener
relaciones no sólo con
mujeres, travestis y
transexuales, sino también
de manera furtiva con
varones pasivos de
apariencia varonil (puede
aplicarse en casos de
compañerismo y amistad,
donde ambos mantienen una
relación en secreto), pero en
la mayoría de los casos esto
último es pasado por alto
como fantasía o juego.
Aunque en este rango
todavía no se enamora, ya
mantiene relaciones
frecuentes con otro
individuo del mismo sexo
pero sin que ello signifique
serle infiel a la pareja de
sexo opuesto. En la
intimidad todavía adopta el
rol activo con la pareja o
persona que elije para tener
relaciones. En este rango, el
individuo es compatible con
heterosexuales del sexo
opuesto, con heteroflexibles
de ambos sexos, con
bisexuales de ambos sexos,
con homoflexibles de
ambos sexos y con
homosexuales del mismo
sexo.

3 Bisexual El individuo rango 3 es 50% 50%


bisexual, y desea a ambos
sexos por igual. El
individuo rango 3 no es
muy notable, debido a su
aparente "doble vida", pero
lejos de la creencia común,
las relaciones del individuo
con rango 3, a diferencia de
los rangos anteriores, no son
furtivas. Rango 3 se
distingue en hacer uso de un
criterio muy avanzado para
llevar sus relaciones fuera
del closet con éxito sin nada
que ocultar, y sin que
ninguno de los bandos se
quede con la peor parte. La
mujer del rango 3 resulta la
favorita para los varones
heterosexuales del rango 0,
ya que a pesar de ser casi
tan prohibida como la mujer
del rango 6, es quien les
abre posibilidades infinitas
en el mundo de las fantasías
sexuales. A partir de este
rango, el individuo ya se
puede enamorar de alguien
del mismo sexo de igual
forma como del sexo
opuesto, y por lo mismo, la
fidelidad si juega un papel
muy importante en
cualquier relación que
sostenga. El varón con
rango 3 ya acepta parejas
varoniles en su relación, y
adopta en la intimidad el rol
inter, pero en diferentes
casos puede adoptar todavía
el rol activo. En este rango,
el individuo es compatible
con heterosexuales del sexo
opuesto, con heteroflexibles
de ambos sexos, con
bisexuales de ambos sexos,
con homoflexibles de
ambos sexos y con
homosexuales del mismo
sexo.

4 Homoflexible Al individuo del rango 4 51%-74% 49%-26%


en 1er. grado supuestamente le empieza a
gustar menos el sexo
opuesto. En el caso de los
hombres, aprecian la belleza
femenina sin morbosidad y
de forma más equilibrada,
es decir, deja de enloquecer
por el sexo opuesto, y por lo
mismo, empieza a volverse
prohibido para las mujeres
heterosexuales. La mujer
homoflexible sigue
frecuentando a los hombres,
pero su desinterés en ellos
no es tan notable. El hombre
rango 4 puede adoptar un
rol activo, un rol inter o rara
vez un rol pasivo. En este
rango, el individuo es
compatible con
heterosexuales del sexo
opuesto, con heteroflexibles
de ambos sexos, con
bisexuales de ambos sexos,
con homoflexibles de
ambos sexos y con
homosexuales del mismo
sexo.

El individuo del rango 5


frecuenta mayormente a los
de su mismo sexo que del
opuesto, por lo que las
relaciones que lleguen a
tener con alguien del sexo
opuesto son muy
ocasionales o se limitan sólo
a la amistad. El hombre en
este rango puede adoptar el
rol inter, el rol pasivo y rara
vez el rol activo, y busca
mayormente parejas
varoniles con rangos
menores, por ejemplo el 1 o
el 2. La mujer en este rango
fácilmente es confundida
con una del rango 6 o
Homoflexible
5 lesbiana, ya que suele tener 75%-99% 25%-1%
en 2º grado
relaciones más seguido con
otra mujer. En el caso de los
hombres, cuando rangos 5
tienen relaciones con rangos
1 del mismo sexo, las
relaciones suelen ser
furtivas debido a que los
rangos menores, en especial
hombres, todavía se
avergüenzan de su otra
sexualidad. En este rango, el
individuo es compatible con
heteroflexibles de ambos
sexos, con bisexuales de
ambos sexos, con
homoflexibles de ambos
sexos y con homosexuales
del mismo sexo.

6 Exclusivamen Quien es rango 6 sólo puede 100% 0%


te homosexual sostener relaciones con
gente de su mismo sexo,
que en el mejor de los casos
también sea homosexual,
pero prácticamente
pudiendo ser de cualquier
preferencia sexual, aunque
paradójicamente el rango 6
hace lo mismo que los
rango 0: ir tras lo prohibido,
por ejemplo, los
heterosexuales del mismo
sexo. Se pueden conformar
parejas con dos rangos 6, y
en estos casos las relaciones
no son furtivas. El rango 6
es totalmente prohibido para
los rango 0 del sexo
opuesto. En la mayoría de
los casos el rango 6 tiene
más amistades del sexo
opuesto que del mismo, así
que ya se ha acostumbrado
a la constante convivencia
con el sexo opuesto que
prácticamente no hay
intereses mayores, ya que
ve a los del sexo opuesto
prácticamente como
parientes (ejemplo de lo
anterior lo representan
grupos como las
mariliendras). La mujer de
rango 6 tiene relaciones de
rol inter totalmente sin
riesgo con su pareja, y es la
prohibición total para el
hombre 0. El individuo
rango 6 es compatible
primordialmente con rangos
6 del mismo sexo, con
rangos 3 del mismo sexo,
con homoflexibles del
mismo sexo y con
heteroflexibles del mismo
sexo.

Este individuo no se inclina


hacia ningún grupo, por lo
X Asexual general opta por la 0% 0%
abstinencia de por vida ya
que no disfruta el sexo.
[editar] Resultados

[editar] Informe Kinsey

Artículo principal: Informe Kinsey

• Hombres: El 11,6% de los varones blancos entre 20 y 35 años manifiestan un


rango de 3 para este periodo de sus vidas.2
• Mujeres: El 7% de las mujeres solteras entre 20 y 35 años y el 4% de las
casadas entre 20 y 30 años daban un rango de 3 para este período de sus vidas.3
Del 2 al 6% de las mujeres, entre 20 y 35 años, se colocaban en un grado de 54
Del 1 al 3% de las solteras entre 20 y 35 tenían un rango de 6.5

• Se definió, por ejemplo, que el 60% de los hombres y el 33% de las mujeres
participaron al menos en una práctica homosexual manifiesta hasta los 16 años
de edad.

Respuesta sexual humana


De Wikipedia, la enciclopedia libre
Saltar a navegación, búsqueda

La respuesta sexual humana fue estudiada por el famoso ginecólogo William Masters y
la trabajadora social Virginia Johnson (conocidos popularmente por sus dos apellidos
juntos: Masters y Johnson incluso después de casarse). Diferenciaron 4 fases:
excitación, meseta, orgasmo y resolución.
Contenido
[ocultar]

• 1 Fases
o 1.1 Fase de deseo sexual
o 1.2 Fase excitación
o 1.3 Fase meseta
 1.3.1 Hombres
 1.3.2 Mujeres
o 1.4 Fase orgasmo
 1.4.1 Tipos
o 1.5 Fase resolución
• 2 Curiosidades
• 3 Origen evolutivo
• 4 Véase también

• 5 Enlaces externos

[editar] Fases

[editar] Fase de deseo sexual

Procede de nuestros pensamientos la estimulación o la postergación de los impulsos


sexuales; estos pensamientos son inducidos por los órganos de los sentidos, en especial
la visión, la cual estimula zonas de ensoñación y la fantasía en el cerebro. A su vez,
existen conexiones con centros de control hormonal, que secretan especialmente
testosterona y luteína que aumenta el deseo sexual. No se observan cambios visibles en
el cuerpo durante esta fase, ya que se trata solamente de un proceso mental. La fase del
deseo o apetito sexual debe funcionar para que la persona se interese en la actividad
sexual.

[editar] Fase excitación

La excitación es la primera fase, se puede provocar por muchos estímulos diferentes: la


visión de un cuerpo desnudo, una caricia, una mirada... la lista puede ser infinita. Aún
no se ha podido clasificar de manera diferenciada si hay algo que excite a hombres y
mujeres por separado, aunque las creencias populares son que el hombre se excita más
por la visión y las mujeres más por el tacto, la mirada, una palabra o un gesto. Esto no
está estudiado a fondo.

Durante la excitación, en los hombres el pene se agranda y endurece, se pone erecto. En


las mujeres la vagina se lubrica, la vulva se hincha.

[editar] Fase meseta

Aquí la respiración se entrecorta, las pulsaciones son muy altas y todos los efectos de la
excitación aumentan. También se produce el rubor sexual, un enrojecimiento sobre
todo del pecho y la cara, la tensión muscular aumenta. Al final de la fase de meseta,
cerca del orgasmo, es habitual tener la sensación de no poder más.

Si la excitación desaparece durante la meseta y no se produce el orgasmo, se pueden


causar algunas molestias. En el hombre pueden doler los testículos y en la mujer se
produce una congestión en la zona genital.

[editar] Hombres

Cuando la fase de excitación llega hasta su punto máximo, todos los cambios se
mantienen en su nivel más alto durante un cierto tiempo llamado «meseta»,
proporcionando una agradable sensación de placer. El varón puede notar una especie de
presión o calor en la zona de la pelvis, que está provocada por el estrechamiento de los
vasos sanguíneos, especialmente en las vesículas seminales y la próstata. Durante este
momento de aparente calma, la tensión muscular se incrementa. El ritmo cardiaco y la
respiración se aceleran. Aumenta asimismo la presión sanguínea.

La duración de esta fase es muy variable. Hay parejas que prolongan voluntariamente
este momento por medio de los juegos amorosos para conseguir una mayor satisfacción.

[editar] Mujeres

Los cambios alcanzados en la fase anterior de excitación se mantienen e intensifican


también en la mujer durante un cierto tiempo. Quizás la variación más significativa es
que el clítoris se retrae de nuevo bajo la membrana que lo recubre (el capuchón del
clítoris), haciéndose más inaccesible. Poco a poco, los niveles de excitación se van
incrementando para preparar la llegada del orgasmo. Los pechos siguen creciendo y la
areola se dilata. La vagina sigue expandiéndose. Aumenta la congestión vascular en los
labios menores. Los labios mayores se separan aún más. A muchas mujeres les salen
unas manchas rojizas por algunas zonas de su cuerpo. Este fenómeno es conocido como
«rubor sexual» y no debe preocuparles ya que se debe a un aumento de la circulación de
la sangre bajo la piel. Finalmente, tienen en común con los hombres el incremento en la
tensión muscular y la presión sanguínea, así como la aceleración del ritmo cardiaco y la
respiración.

[editar] Fase orgasmo

El orgasmo se presenta tras haber pasado las fases de excitación y meseta, tras el
orgasmo se produce la resolución, la 4ª fase. Durante el orgasmo las pulsaciones y la
respiración llegan a la máxima frecuencia e intensidad, se produce una gran tensión
muscular y contracciones en la zona ano-genital. En el hombre se produce la
eyaculación. También en la mujer se puede dar, en algunos casos, un orgasmo líquido,
con una eyaculación parecida a la del hombre. Esta eyaculación parece estar relacionada
con el punto G. Además de la respuesta física (contracciones musculares, etc.), se
produce una respuesta emocional muy variada, que aparte de placer de gran intensidad,
puede provocar gritos, llanto o risas. Aunque también es normal una respuesta mucho
más contenida. Se ha demostrado que la dilatación pupilar es fugaz, como indicador de
estas fases.
[editar] Tipos

Dependiendo de su origen y naturaleza, podemos distinguir tres tipos, tanto en hombres


como mujeres: [cita requerida]

• Peneano (masculino) o clitoriano (femenino): es producido desde las


terminaciones nerviosas del glande en el hombre y en el clítoris en la mujer.
Poseen la misma naturaleza evolutiva, ya que en el feto, la misma zona sexual
evoluciona en el macho hacia el pene y en la hembra hacia el clítoris.
• Prostático (masculino) o vaginal (femenino): se puede producir también desde el
glande o clítoris, aunque por sí solo también puede desarrollar un estilo de
placer propio con unas características más o menos distintas (dependen de cada
persona). Éste gozo tiende a proporcionar una curva de placer distinta, más
intensa y en menos tiempo, y con mayor control. Ambos sexos pueden llegar al
orgasmo sin estimular su pene o clítoris, con práctica y autoconocimiento.

[editar] Fase resolución

Es la vuelta del cuerpo a la normalidad, luego de haber experimentado un orgasmo.


Tanto hombres como mujeres pueden experimentar más de un orgasmo en un solo
coito, sin embargo, si en el hombre el orgasmo es acompañado de una eyaculación
(fenómenos distintos que se pueden disociar mediante prácticas especiales), se
desencadena el periodo refractario, durante el cual el hombre no puede volver a
excitarse. La mujer carece de periodo refractario.

[editar] Curiosidades

Para algunos estudios, la fase de resolución del orgasmo (y no el sexo que crea tensión)
está considerado como un poderoso sedante, debido a la masiva secreción de endorfinas
al cerebro y a la relajación profunda del cuerpo tras la tensión múscular y cardiaco-
circulatoria de las fases previas a su obtención.

[editar] Origen evolutivo

El origen evolutivo del orgasmo humano en los varones no tiene mucha discusión ya
que este tiene una evidente función reproductiva. El caso del origen evolutivo del
orgasmo femenino es motivo de una gran discusión. Entre las teorías que se presentan al
respecto algunas consideran que se trata de una adaptación que cumple alguna función y
otras proponen que simplemente es consecuencia del desarrollo paralelo de los
embriones femeninos y masculinos en las primeras semanas de gestación, como las
tetillas. Dentro de las teorías que lo consideran una adaptación hay algunas que parten
de la suposición que el ser humano es monógamo por naturaleza y otras, de la
suposición de que el homo sapiens es naturalmente promiscuo. Como ejemplo de esta
última, la antropóloga Sarah Blaffer Hrdy, afirma que el carácter esquivo del orgasmo
femenino lleva a las mujeres a buscarlo insistentemente y tener una vida promiscua que
resulta más beneficiosa. Ambrosio García Leal; Jorge Wagensberg y Magí Cadevall
(2004-2005). «Sesgos ideológicos en las teorías sobre la evolucion del sexo». Tesis
doctoral págs. pág. 141. Universitat Autonòma de Barcelona.

You might also like