pesa más que el agua. Los barcos siempre han sido de madera, este material flota por sí solo pero a veces el sentido común nos traiciona. Sin haber visto ningún barco actual y nos preguntaran que si un barco de hierro flota ¿qué contestaríamos? El hierro no flota y por consiguiente el sentido común nos dice que un barco de hierro tampoco. Es evidente que sí flotan, casi todos hemos viajado en ferry alguna vez, para acceder a una isla, para cruzar un río « Pero ¿por qué?, según el sentido común deberían irse al fondo tan rápido como podría hacerlo una piedra. Existe una ley que descubrió Arquímedes allá por el siglo III a. C. llamada la Ley de los cuerpos flotantes, que dice: M
M M
Este es el mismo Arquímedes del cual se dice que salió corriendo desnudo de la bañera gritando , cuando descubrió la solución a un problema que le habían planteado, y que a la postre le iba a servir para postular la ley que nos atañe. Así pues un objeto muy pesado, si es voluminoso y hueco experimentará un empuje hacia arriba equivalente al peso de toda el agua que ocuparía el volumen sumergido, por tanto no se hundirá. Contra más grande y pesado sea el barco mayor volumen será el que está sumergido. Con este principio se podrían construir barcos de casi cualquier material Siempre me asombra ver cómo barcos gigantescos de toneladas y toneladas, son capaces de flotar, mientras que un simple trozo de metal se hunde hasta el fondo del mar. Al igual que pasaba con los aviones, los barcos flotan porque existe una fuerza (llamada Empuje) que les "empuja" hacia arriba evitando que se hundan. El Empuje fue descubierto por Arquímedes, y viene a decir que un cuerpo sumergido en un fluido, sufre una fuerza en sentido ascendente igual al peso de la masa de fluido desplazada. Es decir, que el empuje es proporcional a cuanta agua desplacemos, o lo que es lo mismo, al volumen de agua que ha sido ocupado por nuestro barco. Por este motivo, al poner un barco en el mar, al principio se hunde, pero a medida que se va sumergiendo, desplaza más agua y el empuje aumenta. Llegará un momento, que el empuje habrá equilibrado el peso del barco y éste deje de hundirse. ¿Eso quiere decir que un barco pesa lo mismo que el agua que ha sido desplazada debajo de él? En efecto, por mucho que el barco esté hecho de acero, por dentro está lleno de aire, y su peso es el mismo que la masa de agua que había antes en el mar y ahora ha sido ocupada por el barco.