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El Señor Jesús reveló que el secreto de la armonía en el mundo interior del

cristiano es "permanecer" (Del Gr. Mero, que traduce quedarse, continuar,


permanecer, vivir)."El que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho
fruto; porque separados de mí nada podéis hacer" (Juan 15:4, 5)
Tarde descubrimos que se ha desgastado en cultivar la dimensión pública y no
nuestro interior.
Se conquistan títulos académicos y reconocimiento al interior de la iglesia, pero
dentro de nuestro interior no hay crecimiento personal ni espiritual.
La importancia del dominio propio en el cristiano
Permanecer firmes en nuestras convicciones.
(Actuar con cordura» «es aquel control interno habitual del yo, con su
refrenamiento constante de todas las pasiones y deseos.)
Abstenerse, sobrios, mente sana.
¿Cómo se logra? Permitiendo que Dios obre en nuestro ser.
I. El crecimiento cristiano es un proceso ascendente.
1.- No estamos llamados al estancamiento espiritual.
2.- No estamos llamados al retroceso espiritual.
Que podemos y debemos escapar de los malos deseos
II.- Crecer en la vida cristiana implica esforzarse
1.- Quien asume una actitud pasiva, se estanca.
2.- La Palabra de Dios nos enseña ocho virtudes:
a.- Fe
b.- Buena conducta.
c.- Entendimiento.
d.- Dominio propio.
e.- Paciencia.
f.- Devoción.
g.- Afecto fraternal.
h.- Amor.
Quien es hijo de Dios debe tener dominio propio
¿Para qué sirve el dominio propio?
Tito 1:15(RV60) Todas las cosas son puras para los puros, mas para los
corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su
conciencia están corrompidas.
(BLS) Los que obedecen sinceramente a Jesucristo consideran que todo es
bueno. Pero no hay nada bueno para los que no obedecen ni confían en él,
pues sólo piensan cosas malas y no les remuerde la conciencia.
Tito 1:16 (RV1960) Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan,
siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.
(BLS) Dicen que conocen a Dios pero, cuando vemos el mal que hacen,
sabemos que eso no es cierto. Son odiosos y desobedientes, incapaces de
hacer algo bueno.
1.- Para tener dominio sobre el pecado –
Salmo 119:11. En mi corazón he guardado tus dichos para no pecar contra ti.
(VM) Dentro de mi corazón he atesorado tu palabra, para no pecar contra ti.
(JER) Dentro del corazón he guardado tu promesa, para no pecar contra ti.

2.- Para tener dominio sobre lo que pensamos –


Filipenses 4:8. Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo
honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen
nombre, si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.
(TKIM-DE) Hermanos, enfoquen sus pensamientos hacia todo lo que es
verdad, honesto, justo, puro, amable, todo aquello admirable si hay bondad
moral, o en algo digno de alabar, hay que practicarlo.

3.- Para tener dominio sobre las emociones –


Efesios 4:31. Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y
maledicencia, y toda malicia.
(BLS) Dejen de estar tristes y enojados. No griten ni insulten a los demás.
Dejen de hacer el mal.

4.- Para tener dominio sobre lo que decimos –


Colosenses 4:6. (RV1960) Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada
con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
(VM) Vuestra palabra sea siempre con gracia divina, sazonada con sal, para
que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
(BLS) de conversar con ellos. Hablen siempre de cosas buenas y díganlas en
manera agradable, y piensen bien cómo hay que contestar a cada uno.

5.- para tener dominio sobre la maldad que nos asedia –


1 Tesalonicenses 5:22. Absteneos de toda especie de mal.
(TKIM-DE) aléjense del mal.
(SyEspañol) Huyan de toda cosa mala.
(BLS) y rechacen todo lo malo.
(CST-IBS) Evitad toda clase de maldad.

Conclusión: una vida cristiana de muchos años se puede echar a


perder por una mala reacción, por un comentario inapropiado, por
dejarnos vencer de la maldad.
Esa es la razón por la que debemos actuar con dominio propio.
No alcanzamos tal dominio en nuestras fuerzas sino en las fuerzas que
provienen del Señor Jesucristo.

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