De los grupos de duelo al duelo grupal, devenir del duelo en la

actualidadad

Ante la realidad de que todo duelo es una respuesta a una pérdida, y dadas
ciertas condiciones sociales (violencia, desaparición forzada, enfermedad
terminal, entre otras), y, que éstas no sólo recaen sobre una persona en
específico sino sobre una comunidad ¿Existe la posibilidad de hablar de duelo
colectivo, de duelo en un grupo? No obstante, en la ciudad han surgido grupos
que interrogan su existencia en tanto abren una posibilidad para intervenir a
nivel social los procesos de acompañamiento y elaboración de una pérdida.

Instituciones funerarias, hospitalarias y oncológicas, han hecho una apuesta

por acompañar los duelos de los familiares que han sufrido el fallecimiento de
seres queridos o que están en proceso de pérdida (duelo anticipado). A partir
de esto, nos preguntamos ¿Existen los duelos grupales en tales instituciones?

Cuando en psicología se hace referencia al duelo, hay que tener en cuenta que
se contextualiza en la pérdida de algo y el dolor que esta sustracción significa.
Entonces, a partir de una preocupación (especialmente clínica), se ha
consolidado poco a poco el concepto de duelo, éste implica un proceso
psíquico que por ser “la reacción frente a la pérdida de una persona amada o
de una abstracción que haga sus veces, como la patria, la libertad, un ideal,
etc.”1 Concierne a la movilización del alma, de la mente en torno a algo perdido.
Sin embargo ¿se podrá hablar de una movilización social como manifestación
de un proceso de duelo a partir de un acontecimiento particular? Se pretende
pues articular las nociones de duelo a las vivencias de enfermedad y asesinato
que se observan en una institución que afectan no sólo al individuo sino a las
interacciones entre los mismos (para hablar de lo social en tanto un objeto de la
mirada de la psicología social). Y de este modo, introducir cuestiones que
permitan pensar la problemática social en torno al duelo grupal.

1
FREUD, Sigmund. Duelo y melancolía. Obras competas. Vol. 14. 1915. Amorrotortu. Buenos
Aires.
En las últimas décadas, tal vez efecto de la postmodernidad, tanto el muerto,
como el doliente, es decir, lo perdido y quien pierde, se ven relegados a un
silenciamiento del dolor, ¿qué puede decir la psicología de ello? ¿será esta la
razón de la emergencia de los grupos de duelo?

Ahora bien, ¿qué puede denominarse como duelo grupal? ¿Por qué han
emergido en instituciones grupos de duelo? ¿Cuál es la función de estos? Se
trata entonces de abordar una problemática social que toca lo individual, pero
así mismo, es cuestionar desde la psicología un fenómeno que competa a la
sociología, antropología y otras ciencias de lo humano.

La problemática entonces está planteada a partir del preguntarse por el duelo y

sus manifestaciones, si éstas a su vez, se observan en lo social y si así fuese
¿permitirá hablar de duelos grupales? Del mismo modo la pregunta por la
existencia de grupos de duelo, impulsa la pregunta por el papel de lo social en
el mismo, la posible existencia de duelos grupales y el posible lugar de la
psicología en este ámbito.

Así pues, ¿cuál es la función de un grupo de duelo? ¿qué puede decirse del
duelo hoy?, es decir, ¿cuál es la conceptualización actualmente del duelo?
¿qué es lo que ha cambiado? A partir de la emergencia de tales grupos
¿podemos identificarnos a un mismo dolor?

BIBLIOGRAFÍA
• ARIES, Phillip. La muerte en occidente. Barcelona: Argos Vergara, 1982.
• DÍAZ FACIOLINCE, Victoria Eugenia. Del dolor al duelo. Universidad de
Antioquia: Medellín. 2001.
• ELÍAS, Norbert. La soledad de los moribundos. 1987. México DF: Fondo
de cultura económica. 2da edición.
• FREUD, Sigmund. Duelo y melancolía. Obras competas. Vol. 14. 1915.
Amorrotortu. Buenos Aires.