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Coll-Hurtado, A.

(2005),
Geografía Económica de México,
Instituto de Geografía, UNAM, México,
Colección Temas Selectos de Geografía de México (II.3),
146 p. ISBN 979-32-2823-2

La Geografía económica ha sido una de las muy riguroso y preciso, en el que se combi-
ramas de la Geografía de más temprano de- nan hábilmente descripción, crítica y expli-
sarrollo y consolidación. Manuales como el cación, revelando una sólida y amplia base
de Pierre George o el de Jones y Darkenwald, teórica. Si a ello se añade la clara y aparente-
son ya referencias clásicas en nuestra disci- mente sencilla cartografía, para cuya elabo-
plina. Pero es también una de las subdiscipli- ración ha contado con la colaboración de la
nas geográficas que ha experimentado más licenciada Lourdes Godínez Calderón, que por
innovaciones tratando de adaptarse a la cam- sí sola da ya una imagen de la economía mexi-
biante realidad del actual mundo globalizado. cana, se puede afirmar que estamos ante una
Por ello es, sin duda, una tarea compleja, obra básica para entender la actual realidad
elaborar una Geografía económica de un país mexicana, su dinámica y sus problemas, lo
a su vez complejo como es México que intenta que constituye un excelente punto de partida
insertarse en el actual modelo de globaliza- para la búsqueda de soluciones.
ción con sus viejos problemas y tratando de En una primera aproximación el libro de
afrontar los nuevos desafíos que se le plan- la doctora Coll parece un estudio convencio-
tean. Y esta tarea la aborda la doctora nal, un retrato, un flash, como indica el profe-
Atlántida Coll-Hurtado, investigadora del sor Córdoba en la presentación, de la econo-
Instituto de Geografía de la UNAM, dentro de mía mexicana; un estudio de base estructural
la colección de Temas Selectos de Geografía de sus ramas y sectores. Pero hay mucho más,
de México, lo cual le supone de partida una hay una realista y sentida interpretación de la
limitación en la extensión. Sin embargo, la problemática economía mexicana a luz de una
autora, siguiendo su ya dilatada carrera de serie de indicadores que muestran su pérdi-
investigadora que nos ha deparado magistra- da de competitividad en el actual mundo
les estudios sobre diversos aspectos de la globalizado, en el que se coloca en una situa-
Geografía de México, consigue una magnífica ción de creciente dependencia pese a ser un
y actualizada síntesis de la Economía mexi- país con recursos físicos y humanos aptos
cana desde una perspectiva geográfica que nos para situarle entre las principales potencias
recuerda el magisterio de Pierre George y en la mundiales. Diagnóstico que, sin embargo, no
que se combina hábilmente tradición y moder- hace perder la esperanza a la autora ya que,
nidad, teoría y práctica, texto y cartografía. acorde a su postura de considerar al territo-
Se trata de un trabajo muy documentado rio como una construcción social que refleja
desde muy diversas ópticas, pues en su pre- las acciones de sus habitantes a través del
ocupación por la búsqueda de indicadores tiempo, lanza el reto de superar la situación a
claros y expresivos de la realidad de la econo- las nuevas generaciones que, sin duda, tienen
mía mexicana, recurre no sólo a una amplia bi- en este libro numerosas ideas para ello.
bliografía y a estadísticas, sino también a todo Como se ha señalado, en el libro de la doc-
tipo de documentos incluyendo los existen- tora Coll se combina sabiamente tradición y
tes en las hemerotecas, así como a un riguro- modernidad. Prueba de esta última y de su
so trabajo de campo. Consigue así un estudio postura epistemológica, en la que hay mucho

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Aurora García Ballesteros

de Pierre George, de adaptar los estudios de exponiendo en primer lugar las causas del
geografía económica a los cambios de la eco- proceso de terciarización y el papel del Esta-
nomía mundial, decide empezar su obra por do en el mismo, en especial en la educación y
las actividades terciarias, ya que suponen el en los servicios sanitarios.
72% de la producción nacional y ocupan a Acertadamente inicia la exposición de las
más de 34 millones de personas. Hecho que distintas actividades terciarias con los trans-
supone un gran cambio para un país como portes y las telecomunicaciones, subrayando
México que a mediados del siglo XX era emi- su papel fundamental en la “economía actual
nentemente agrario. En efecto, en esa fecha la del justo a tiempo y del mundo compactado
economía mexicana “gravitaba sobre la agri- por el internet”. Epígrafes como los dedica-
cultura que transfería excedentes directamen- dos al comercio en el que de nuevo se subraya
te a la ciudad, mediante los propios insumos la convivencia de tradición y modernidad, de
tanto como por medio de las divisas que se los tianguis y el hecho de que el 10% de las
obtenían con una balanza comercial positi- mayores empresas del país son comerciales.
va, y apoyaba el desarrollo de la industriali- Muy sugerentes son los párrafos dedicados
zación”. Por tanto, las actividades de servi- al análisis del ambulantaje y del millón de
cios se consideraban sólo como la vía para personas que a él se dedican con la corres-
evitar una desocupación a gran escala. pondiente apropiación de espacios urbanos,
Sin embargo, en el 2003 la autora presenta o a los “toreros” y sus riesgos. Sin olvidar el
un panorama muy diferente: México es un fino análisis del comercio exterior y las re-
país con un PIB centrado mayoritariamente percusiones del TLCAN y sus políticas
en el sector terciario, aunque con contrastes neoliberales, que en algunos aspectos nos re-
regionales acusados, ya que el Distrito Fede- cuerda el clamor de Milton Santos por otra
ral, el Estado de México, Jalisco y Nuevo León, globalización.
aportan el 48% del PIB del sector terciario Las sugerencias y la necesidad de estudios
mexicano, mientras que Zacatecas, Nayarit, más amplios sobre numerosos temas están
Colima y Campeche apenas aportan, respec- también presentes en los epígrafes dedicados
tivamente, el 1%. a los servicios sociales, así el mapa que repre-
Ahora bien, ¿de qué terciario se trata? La senta la cobertura sanitaria de la población
autora responde con unos datos sencillos que es un fiel retrato de una de las muchas y ur-
revelan la coexistencia en el sector de tradi- gentes necesidades del país. O los finos análi-
ción y modernidad, de rezagos e innovación sis sobre el turismo, que ya dobla en su apor-
tecnológica, del vendedor ambulante y del tación al PIB a la agricultura, con una
cibercomercio, de la medicina tradicional y sugerente crítica sobre el ecoturismo y sus
de la más moderna y sofisticada, en suma de consecuencias.
actividades propias de los dos circuitos que La industria es objeto de 30 páginas de
señaló Milton Santos, el inferior y el superior. apretada síntesis en las que de nuevo se su-
A las dificultades estadísticas para precisar braya la convivencia de tradición y moder-
las diferentes actividades del sector, se añade nidad, así como la existencia de fuertes con-
el peso de la economía informal, que según la trastes regionales e incluso locales. Por
OIT proporciona el 62 % de los empleos de destacar algunos epígrafes e ideas, señalemos
México, y cuyo análisis es tan necesario como las páginas dedicadas a las maquiladoras y
difícil. su papel en la economía mexicana, teniendo
En 64 páginas de las 146 que componen el en cuenta que sólo el 25% de las mismas tie-
libro, la autora realiza con claridad y preci- nen un carácter puntero. Muy interesantes
sión un apretado análisis del sector terciario, son las consideraciones sobre el proceso de

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Geografía Económica de México

industrialización y la urbanización del país, Del magisterio de la doctora Coll son bue-
así como las relaciones entre frontera y na prueba las notas finales, en las que en siete
maquiladoras. Su diagnóstico sobre los efec- páginas que incluyen cuatro mapas que re-
tos de la competencia de China en la econo- presentan la población económicamente ac-
mía mexicana merecería una mayor exten- tiva y el PIB por ramas de actividad en 1970 y
sión. en 2000, se sintetizan los procesos económicos
Finalmente, el sector primario con el fuer- que han conducido a la especialización territo-
te dualismo entre la agricultura comercial y rial del país y a su situación actual. Páginas que
la tradicional, con sus rezagos, es objeto de constituyen un certero diagnóstico de la eco-
las apretadas páginas que nos remiten a otras nomía mexicana y de sus contrastes regiona-
obras de la misma autora, en las que diversos les vistos desde una perspectiva geográfica.
temas aquí sintetizados son expuestos con Una selecta bibliografía complementa un
mayor amplitud. Los contrastes regionales libro que es una acertada y documentada sín-
son una vez más subrayados y cartografia- tesis de la Geografía económica de México en
dos. el umbral del siglo XXI.

Aurora García Ballesteros


Universidad Complutense de Madrid

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González Sánchez, J. e I. Kunz Bolaños (2005),
Regionalización habitacional de la Ciudad de México,
Instituto de Geografía, UNAM, México,
Colección Temas Selectos de Geografía de México (I.4.3),
144 p. ISBN 970-32-2824-0

Cuando parecía no haber lugar para otro libro petroleras y una en la frontera norte, se
sobre la vivienda en México, aparece este texto develaron los mecanismos específicos median-
elaborado por Jorge González e Ignacio Kunz, te los cuales una extensa red de agentes políti-
como resultado de la tesis de Maestría del pri- cos operaba la incorporación masiva de suelo
mer autor bajo la dirección del segundo. agrario −o simplemente periférico−, al mer-
Podemos ubicar en los años setenta la pu- cado inmobiliario urbano. A diferencia de los
blicación de los textos fundacionales sobre primeros estudios, el interés se centró, bajo
este complejo problema. En la investigación una perspectiva urbana, en los vastos secto-
pionera del Centro Operacional de Vivienda res populares no organizados a los que el Estado
y Poblamiento (COPEVI) se analizó la vivien- buscaba integrar a los diferentes mecanismos
da del sector popular organizado a partir de formales mediante procesos de corporativiza-
una crítica de la incapacidad del mercado for- ción.3 Eran los años del boom petrolero cuando
mal para satisfacer la demanda habitacional. poco se hablaba de la otra cara del “milagro
Este esfuerzo formó una corriente de opinión mexicano”, la de la exclusión social impres-
que cristalizaría en la creación del FONHAPO cindible para la realización ilegal de negocios
y después influiría en las políticas seguidas inmobiliarios.
por el Instituto de la Vivienda.1 Casi al mis- Fueron diversas las formas de afrontar el
mo tiempo, Garza y Schteingart (1978) ini- impacto de esas operaciones en los precios de
ciaban el escrutinio de los programas oficia- suelo, lo que llevó a interesarse por la renta
les de vivienda, con énfasis en las condiciones del suelo y el mercado inmobiliario. En reali-
económicas estructurales que explican “el dad ninguno de estos temas era nuevo, pues
problema de la vivienda”, como se le llamaba estaban considerados en los modelos espa-
entonces. Desde una perspectiva teórica mar- ciales: la fricción de la distancia en el modelo de
xista, Pradilla (1982) compiló, poco después, círculos concéntricos de Bugues y la segrega-
varios ensayos sobre el problema de la vivien- ción socioespacial en el modelo de núcleos múl-
da en el contexto de Latinoamérica.2 Estos tres tiples de Ullman y Harris. Por su parte, el pre-
textos fijaron las perspectivas analíticas que dominio de la vivienda en el conjunto urbano
marcarían a la bibliografía especializada en los había dado origen al modelo de sectores de
años siguientes: las formas de producción social Hoyt (Richardson, 1993). Lo novedoso fue el
del espacio, en particular el interés por la vi- rechazo a la utilización de los modelos espa-
vienda informal, y el análisis de la políticas públi- ciales como explicación de los procesos, lo que
cas involucradas en la construcción de casas, en estricto sentido, ninguno de ellos se propo-
así como una fuerte crítica al uso de los “vie- nía. En esta vertiente destacan, además del tomo
jos” modelos urbanos, en especial de la Es- IV El capital en la producción de vivienda, del primer
cuela de Chicago. COPEVI (1977), el estudio de Schteingart (1981)
Un giro incipiente en el tratamiento del así como el de Iracheta (1984) sobre la impre-
tema fue aportado por el Centro de Ecodesa- sionante oleada especulativa de suelo urba-
rrollo (CECODES). Tomando como casos de no que se llevó a cabo en el Estado de México
estudio a las tres principales ciudades del durante los años sesenta y setenta. Posterior-
país, más las que “surgieron” en las regiones mente, varios autores se han sumado a ese

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Regionalización habitacional de la Ciudad de México

esfuerzo de interpretación, sin que se tenga da (CENVI) del cual, entre muchas de sus apor-
aún un consenso sobre cómo abordar esa di- taciones, se cuenta el estudio de la vivienda
fícil arista del problema. en renta y el haber llamado la atención sobre
Carlos Fidel (1988) inició su estudio tam- el despoblamiento de las áreas centrales que, con
bién en CECODES, pero lo publicó posterior- muy pocas excepciones, se había ignorado
mente por la UAM. Concentrado en revisar hasta entonces (Connolly et al., 1991). Casa y
los antecedentes de la renta del suelo en la Ciudad, otro de sus desprendimientos que
teoría marxista del valor, concluía que los buscaba una mayor articulación con los movi-
principales problemas metodológicos estaban mientos sociales urbanos,4 ahora se concentra
en el tratamiento del papel de Estado y en el en la exploración del derecho a la vivienda
insuficiente estudio del capital inmobiliario (Verver y Macías, 2004; Casa y Ciudad, 2004).
con frecuencia asociado a las inmobiliarias. Un Durante el breve interludio de la administra-
primer intento por estudiar el mercado inmo- ción cardenista en la ciudad, la intensa labor
biliario fue realizado por Terrazas (1996). El de CyC coadyuvó para plasmar sus ideas en
papel de los corredores de transporte en la la política del Instituto de Vivienda en donde
conformación de la estructura urbana, al que impulsaron el diseño y aplicación del Progra-
otorga una atención especial era, ya, un fac- ma de Mejoramiento de Vivienda. Otro des-
tor clave en el modelo de sectores de Hoyt. prendimiento, la del FOSOVI, exploraba con
Otro esfuerzo investigativo que también éxito la participación de los usuarios en el di-
sufriría escisiones antes de concluir fue el seño de sus viviendas y la concepción de la
impulsado por Manuel Perló (2004) en la “vivienda como proceso” –y no la de “vivien-
UNAM sobre el mercado de suelo. Por su par- da terminada” que caracteriza a la produc-
te, Kunz et al. (2001), con base en una identifi- ción formal privada y buena parte de la pú-
cación de cinco diferentes submercados de blica−, ambos factores clave para entender la
producción de vivienda, concluyeron que, producción social del espacio (Romero y Mecías,
ante la profunda heterogeneidad que carac- 2004). Por su parte, el grupo original de COPEVI
teriza a la Ciudad de México, el esquema uti- ha reorientado su trabajo hacia la participa-
lizado en su estudio −centro y periferia− re- ción ciudadana y construcción de ciudada-
sultaba demasiado simple para explicar esa nía, vertiente abierta, entre otros, por Alicia
diversidad. Por su parte, Parnreiter (2005) al Ziccardi desde los años ochenta con sus ensa-
trabajar por AGEB en lugar de delegaciones, yos pioneros sobre gobernabilidad y la im-
identificó zonas de rápida valorización en portancia de los gobiernos municipales en la
áreas pobres, que interpretó como un despla- “construcción de ciudad”. A pesar de la im-
zamiento incipiente de las viviendas en con- portancia de la participación ciudadana en la
dominio, desde el oeste hacia el centro. Estos definición de políticas sociales, la formaliza-
últimos trabajos han encontrado una vertien- ción jurídico-política de esa interrelación, no
te más, la de los “fraccionamientos cerrados” está resuelta (Ziccardi, 2004).
de los sectores de altos ingresos que refuer- Como resultado de la crisis de los
zan su segregación espacial voluntaria res- paradigmas tradicionales, surgieron nuevas
pecto a otros sectores sociales con el pretexto vertientes analíticas como la urbanización del
de la seguridad. Tema también tratado, por ejido, las miradas antropológicas sobre la
cierto, en la “vieja”escuela de Chicago. cultura del hábitat, así como los efectos am-
El primer COPEVI resultó un semillero de bientales de la expansión urbana y los de gé-
jóvenes investigadores ante las diversas for- nero, temas ignorados en las etapas anterio-
mas de abordar el tema. Un primer desdo- res. La importancia de la peculiar tenencia
blamiento dio origen al Centro de la Vivien- ejidal en el proceso de urbanización tiene en

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María Soledad Cruz (2001) a su mejor expo- problemática social fundamental, como es la
nente. Dentro del enfoque cultural, el estudio necesidad ineludible de procurarse un lugar
de los procesos de apropiación y ocupación digno para vivir. Por si fuera poco, intervie-
de espacios habitables ha llevado al interés nen, en su conformación, diversos agentes
por la fragmentación de los espacios (Aguilar et al., inmobiliarios, formales e informales, así como
1998), a la especulación sobre la construcción numerosos actores sociales no siempre afines.
de imaginarios urbanos (Hiernaux y Lindon Todo ello ha modificado las modalidades de
(2004) o a la excelente exploración para inte- acceso a la vivienda desde mediados del siglo
grar la dimensión subjetiva de los procesos XX, cuando las ciudades del país entraron en
de cotidianeidad –en donde la diferenciación un proceso generalizado de expansión urba-
de género es clave, a la organización del espa- na y a que se encuentran actualmente en una
cio urbano (Salazar, 1999). En cambio, los efec- encrucijada crucial, ante el cambio de la polí-
tos ambientales de la expansión urbana em- tica tradicional del Estado ante las nuevas
piezan a ser, apenas, objeto de estudio tendencias privatizadoras. La magnitud de la
(Schteingart y Salazar, 2005). expansión urbana, en buena parte ligada al pro-
Cuando parecían ya agotados los enfoques blema de la vivienda, tiene impactos en el am-
originales, Herrasti y Villavicencio (1998) biente al ocupar áreas con valor ambiental.
regresaron al tema del financiamiento de vi- El texto de González y Kunz permite con-
vienda pública pero esta vez bajo las desfavo- solidar el conocimiento acumulado a través
rables condiciones generadas por el desmante- de la sistematización de variables clave en el
lamiento neoliberal del sistema de vivienda análisis de la localización de los diversos ti-
pública, también, en una perspectiva latinoa- pos de vivienda, en el contexto metropolita-
mericana. En otro texto coordinado por no de la ciudad en lugar de hacerlo en sólo
Schteingart y Graizbord (1998), se culmina una parte de la ciudad, como sucede con fre-
esa línea de investigación con el estudio de los cuencia. De esta forma, se ofrece una perspec-
conjuntos habitacionales del INVFONAVIT, en tiva distinta a los estudios convencionales
donde se demuestran las formas clientelares centrados más en el tamaño de la ciudad que
y corporativistas en la producción de vivien- en su complejidad. En segundo término, in-
da pública. Finalmente, una referencia obli- cluye al inicio de la descripción de cada tipo
gada para la discusión de la lógica de locali- de producción residencial, formal e informal,
zación espacial de las diversas modalidades una excelente síntesis de los principales estu-
de poblamiento en la Ciudad de México –tam- dios al respecto. Aun cuando se trata de revi-
bién con un rechazo explícito a la utilización siones no exhaustivas, esto es de agradecerse,
de los “viejos” modelos espaciales−, fue pu- pues muchas veces la descripción minuciosa
blicada por el Centro de la Vivienda y Estu- de procesos locales –importantes sin duda−,
dio Urbanos (CONAPO, 1998). no deja ver el conjunto. Un tercer mérito del
En síntesis, el tema de la vivienda es ensayo es ofrecer, también para cada modali-
complejo debido a las distintas formas de ocu- dad productiva, un doble esfuerzo por arti-
pación del suelo, de suyo complicadas. Se rela- cular la importancia de los actores sociales
ciona, además, con distintos procesos de estruc- específicos con los espacios urbanos particu-
turación de la ciudad. Lo afectan también lares en donde aquel tipo de intervención se
políticas gubernamentales, desafortunadas desenvuelve. Esto ofrece amplias posibilida-
las más de las veces o por lo menos insufi- des de volver a estudiar estas áreas y actores,
cientes para resolver el problema, pero que con el auxilio invaluable de una referencia
han dejado muy buenos dividendos al capi- metropolitana más amplia, más comprehen-
tal inmobiliario, principal beneficiario de una siva.

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Regionalización habitacional de la Ciudad de México

En cuanto a los referentes teóricos utiliza- ma de producción, recurren a una noción de


dos para explicar el tema de la vivienda, si “regiones” no contiguas, fragmentadas, a lo
bien no se abordan con profundidad, es re- largo de la estructura metropolitana y que
frescante ver que no se presenta una sola pers- eventualmente adoptan concentraciones
pectiva analítica, sino que se señalan, tam- prototípicas en algunos sectores urbanos es-
bién, algunas críticas a los enfoques previos. pecíficos y que, reconocen en las conclusio-
Así, se presenta una apretada pero certera nes, conforman una estructura concéntrica.
síntesis de los acercamientos predominantes Así, aprendemos que la vivienda en renta si-
–desafortunadamente casi siempre fragmen- gue concentrada principalmente en las áreas
tados−, en el estudio de la vivienda como son: centrales de la ciudad a pesar de los intensos
la correlación con el surgimiento de la ciudad cambios de uso del suelo (de habitacional a
industrial, el tema de la demanda solvente, otros de comercio y servicios) verificados en
los componentes físicos –terreno, materiales las últimas décadas. Este proceso, que sin
y construcción−, que la vuelven una mercan- duda debe estar generando ganancias ex-
cía particular, la cuestión de la propiedad, las traordinarias como en su momento lo hizo la
redes de intermediarios y de servicios surgi- urbanización irregular, tolerada y muchas
dos con el fin de especular con las dificultades veces organizada con la anuencia del poder
sociales para su distribución y las numero- público, se ha intensificado a partir de los años
sas formas de intervención estatal. ochenta, bajo la égida de la globalización.
Ante estos frecuentes planteamientos, se in- Otro hallazgo del estudio, si bien conoci-
cluyen otros en donde se pone más atención a do pero pocas veces fundado en cifras, es que
las relaciones sociales involucradas, prove- la vivienda formal, sobre todo la de ingresos al-
nientes, principalmente, del campo analítico tos y medios se concentra a lo largo de un
marxista. Lo interesante es que, en el libro, extenso arco poniente de la ciudad, en casi
ésta no se propone como una perspectiva “al- perfecta coincidencia con el trazo del Perifé-
ternativa” que busque invalidar los plantea- rico. En el otro extremo geográfico y social de
miento anteriores, sino para ampliar la mi- la ciudad, predominan, en cambio, los tipos
rada, constituir una “nueva investigación de vivienda informal, sobre todo la no conso-
sobre vivienda”. Se trata de enmarcar su es- lidada de acuerdo con un esquema centro-
tudio dentro de los procesos históricos de las periferia, (“marginal” y periférica dicen los
relaciones sociales y la lucha de clases asocia- autores).
das en cada caso particular de estudio, en este Sin embargo, el resultado más interesante
caso, de la Ciudad de México. En este sentido, del estudio es demostrar, con base en la esta-
los autores se alejan de explicaciones “estruc- dística y no como mero discurso formal, que
turales” en donde la vivienda es reconocida la producción informal fue la principal mo-
como una estructura asociada al capitalismo dalidad de acceso a la vivienda en los noven-
o a una de sus fases, y buscan explicar lo que ta. Ubicada ésta en zonas polarizadas y segre-
tiene de particular para nuestra ciudad. gadas (“marginadas”, insisten en llamarlas los
Tal vez como consecuencia de lo anterior o autores) presentan los valores más bajos de
como herencia de los estudios fundacionales, los indicadores utilizados. En efecto, en don-
la explicación espacial adoptada por los au- de se concentra la población con menores in-
tores rehuye la utilización de los modelos tra- gresos confluyen la más baja dotación de ser-
dicionales de la estructura urbana como son vicios y mala calidad de sus materiales. Todas
los de círculos concéntricos, de sectores o de ellas son áreas de reciente incorporación, es
núcleos múltiples. Por el contrario, para ex- decir, no planeadas y ubicadas en la periferia,
plicar la localización especifica de cada for- con un costo social muy alto. Pésimas noti-

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Javier Delgado

4
cias para quienes tienen la responsabilidad El recuento de esta vertiente, por sí sola, es
de planear y actuar en este complicado ámbi- muy amplio, pero se puede ver el trabajo de
to de la vida de nuestra ciudad, lástima que Ángel Mercado (1990).
no existan formas eficientes de rendición de
cuentas. Referencias
A manera de síntesis se puede decir, pri-
Aguilar, M. A., C. Cisneros y M. Urtega (1998),
mero, que un simple recuento de las investi- “Espacio, socialidad y vida cotidiana en los con-
gaciones sobre la vivienda en nuestro medio, juntos habitacionales”, en Graizbord, B. y M.
resulta ser un mapa de la génesis de los prin- Schteingart (coords.), Vivienda y vida urbana en la
cipales grupos de investigación e investiga- Ciudad de México. La acción del INFONAVIT, El Co-
dores mexicanos en la disciplina. En segundo legio de México, México.
término, que la crisis de los paradigmas, como
suele denominarse a la crítica del estructura- Casa y Ciudad (2004), “Comentarios sobre el
derecho a la vivienda del diagnóstico sobre la
lismo, si bien llevó a la diversificación de los
situación de los Derechos Humanos en Méxi-
temas clásicos, adolece actualmente de un es- co”, México.
fuerzo correlativo de unificación o mejor, de
abstracción y reconstrucción teórica, general, Castañeda, V. y D. Villarreal (1986), Urbanización
de las especificidades y, en tercer lugar, que la y autoconstrucción de vivienda en Monterrey,
vertiente espacial del problema de la vivienda –en CECODES, México.
particular la aversión a los modelos espacia-
CONAPO (1998), Escenarios demográficos y urbanos
les−, sigue siendo un problema sin resolver. de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México,
Por ello, es bienvenida la lectura fresca, 1990-2010: Síntesis. México, CONAPO.
informada y certera de un tema de por si ar-
duo, que culmina de manera afortunada los Connolly, P., E. Duhau y R. Coulomb (1991), Cam-
estudios previos de los autores. Se puede de- biar de casa pero no de barrio. Estudios sobre la
cir que, quien se interese hoy por “el proble- reconstrucción en la ciudad de México, CENVI,
UAM, México.
ma de la vivienda” tiene mucho que leer.
Javier Delgado COPEVI (1977), Investigación sobre vivienda, 4 vols.,
Instituto de Geografía, UNAM Centro Operacional de Poblamiento y Vivienda,
México.
NOTAS:
Cruz, M. S. (2001), Propiedad, poblamiento y pe-
1
Los resultados aparecieron en cuatro volúme- riferia rural en la Zona Metropolitana de la Ciu-
nes, uno por cada tema: producción, políticas, el dad de México, UAM-Azcapotzalco, Red Nacio-
capital inmobiliario y mercado de tierras y se- nal de Investigación Urbana, México.
gregación urbana, bajo el titulo genérico de “In-
vestigación sobre Vivienda” (COPEVI, 1977). Fidel, C. (1988), Elementos de renta urbana. Los frac-
cionamientos, UAM, Azcapotzalco, Ed. Gernika,
2
Hoy diríamos que no hay “una” perspectiva México.
marxista sino varias, pero ese, es otro proble-
ma. Garza, G. y M. Schteingart, (1978), La acción
habitacional del Estado en México, El Colegio de
3
Los textos sobre la urbanización en ciudades México, México.
petroleras fueron de Nolasco (1979) y Legorreta
(1983 y 1984); de Castañeda y Villarreal en Herrasti, M. E. y J. Villavicencio (1998), La política
Monterrey (1986), sobre Tijuana escribió habitacional en México y América Latina, UAM-
Hiernaux (1986) y López Rangel (1987) sobre Azcapotzalco, México.
Guadalajara.

166 Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006


Regionalización habitacional de la Ciudad de México

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Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006 167


XVII Congreso Nacional de Geografía Acapulco 2006,
Acapulco, Guerrero, 26-30 de marzo de 2006

Después de la ruptura en la secuencia de los en relación con la cantidad de personas que lo


congresos nacionales de Geografía, originada presenciaron, este congreso nacional de Geo-
por la organización del IX Encuentro de Geógra- grafía ha sido el más concurrido, pues hubo
fos de América Latina, en Mérida, en el 2003, se un registro de casi 500 ponentes y asistentes;
concretó la celebración el XVII Congreso Nacio- en esta cifra se incluye un número considera-
nal de Geografía Acapulco 2006, que tuvo efecto ble de estudiantes de Geografía procedentes
entre el 26 y el 30 de marzo de 2006, en el de diversas partes del país.
Centro de Congresos Copacabana de ese puer- La lógica de organización del congreso
to guerrerense. demandó la presentación de trabajos en 30
Las instituciones que participaron en la mesas, que incluyeron temas de Geografía Fí-
organización de este congreso fueron la So- sica, Geografía Social, Geografía Económica,
ciedad Mexicana de Geografía y Estadística Geografía Política, Historia de la Geografía,
(SMGE), mediante el concurso de su Acade- Sistemas de Información Geográfica y Ense-
mia de Geografía y la Universidad Nacional ñanza de la Geografía. Al interior de estas
Autónoma de México (UNAM) a través del grandes divisiones temáticas destacaron, por
Instituto de Geografía, la Facultad de Filosofía el número de trabajos sustentados, las sesio-
y Letras y la Dirección General de Posgrado. La nes de Geografía del turismo, Cartografía au-
convocatoria al congreso, como es tradición tomatizada, Geografía de la población y En-
y por derecho, fue emitida por la Academia señanza de la Geografía. También hubo mesas
de Geografía de la SMGE que eligió al puerto sobre Geografía de los estados, en particular
de Acapulco como sede de tan importante se abordaron los casos de Guerrero y Tamau-
encuentro académico. Esta selección se debió lipas. Los temas novedosos en Geografía tam-
a la intención de la Universidad Autónoma bién se hicieron notar en este encuentro aca-
de Guerrero de iniciar la carrera de Geogra- démico con la presentación de trabajos sobre
fía, probablemente en su unidad académica Geografía de género, desarrollo local, orde-
de Taxco el viejo, en un futuro inmediato. No namiento territorial, aplicaciones de los sis-
obstante la naturaleza de Acapulco, en consi- temas de información geográfica y las maneras
deración de ser un centro turístico de playa creativas de impartir Geografía en distintos
afamado, el desarrollo de los trabajos del con- niveles de enseñanza. Por la inspección he-
greso fue exitoso. cha a las salas donde se efectuaron las pre-
El número de resúmenes recibidos por el sentaciones orales, es posible afirmar que las
comité organizador, en respuesta a la convo- sesiones referidas a Geomorfología y Geogra-
catoria original, fue de 206 y de ellos, después fía del turismo fueron las más concurridas,
del proceso de dictamen, se aceptaron 189 tra- con más de 200 personas presentes, al mismo
bajos; en este sentido, un hecho a destacar es tiempo, en cada caso.
la proporción real de presentaciones orales res- La procedencia geográfica de los trabajos
pecto al programa oficial del congreso, que presentados en el XVII Congreso Nacional de
alcanzó la cifra de 173, lo que representa el Geografía Acapulco 2006 indica que los ponen-
92% de lo anunciado en primera instancia. La tes trabajan en diferentes lugares de México,
exhibición de carteles no se concretó debido desde Baja California y Chihuahua hasta
al número reducido de propuestas en este sen- Campeche y Quintana Roo. Sin embargo, la
tido. Con base en cifras procedentes de diver- mayoría de los estudios fueron hechos por
sos medios, se puede indicar que, a la fecha, académicos radicados en el Distrito Federal y

168 Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006


XVII Congreso Nacional de Geografía Acapulco 2006,

el Estado de México que, en su conjunto, re- sentación del ballet folklórico de la Universi-
presentaron más del 60% de los trabajos con- dad Autónoma de Guerrero. Después, para
tenidos en el programa. Se registraron 48 ins- los miembros de la Academia de Geografía,
tituciones ante el congreso, la mayor parte una cena de trabajo en el Centro Cultural
universidades públicas; también hubo parti- Guerrerense y, finalmente, la ceremonia de
cipación de profesionales de la Geografía ads- clausura, por la tarde del 30 de marzo, mo-
critos a secretarías de Estado y empresas e mento en el que fueron anunciados los acree-
instituciones de enseñanza privadas. Los seis dores a distintos premios: la medalla Benito
centros del país donde se imparte la carrera y Juárez, que otorga la SMGE al mérito geográfi-
se hace investigación en Geografía estuvie- co, para un profesional distinguido por su pro-
ron presentes en Acapulco: la Universidad moción de la Geografía en el ámbito nacional y
Nacional Autónoma de México, la Universi- que, este año, fue recibida por Miguel Aguilar
dad Autónoma Metropolitana, la Universidad Robledo de la Universidad Autónoma de San
de Guadalajara, la Universidad Autónoma del Luis Potosí.
Estado de México, la Universidad Autónoma de Asimismo, se hizo entrega de los premios
San Luis Potosí y la Universidad Veracruzana. María Isabel Lorenzo Villa a los autores de las
Asimismo, fue considerable la presencia de la mejores tesis de licenciatura presentadas en
Escuela Normal Superior de México, repre- réplica oral, en las distintas universidades
sentada por maestros y alumnos de la espe- donde se imparte esta carrera; en esta oca-
cialidad de Geografía. sión, fueron distinguidos cuatro alumnos:
El horario de presentaciones generales, que Rosaura Carmona Mares, mejor tesista, en
abarcó un período de trabajo entre las 9:00 y 2004, en el área de Geografía Económica. En
las 18:00 horas, fue complementado con la 2005, Leticia Gerónimo Mendoza, como auto-
participación de personalidades reconocidas ra de la mejor tesis en Geografía Social y Pe-
en el ámbito geográfico nacional que desde la dro Montes Cruz en el área de Geografía Físi-
palestra abordaron temas diversos, como las ca, todos ellos de la UNAM y Héctor Hugo
nuevas plataformas de información compu- Regil García, de la Universidad Autónoma del
tarizada y cibernética o la semblanza de la Estado de México, por su trabajo de tesis en
maestra Dolores Riquelme de Rejón, fallecida Sistemas de Información Geográfica.
recientemente. Mario Alberto Reyes Ibarra, En la ceremonia de clausura de los traba-
María Isabel Vázquez Padilla, Miguel Cortez jos del XVII Congreso Nacional de Geografía
Vázquez, Alejandro Ramos Trejo, Alma Acapulco 2006 se propusieron, y fueron acep-
Villaseñor Franco, José Juan Zamorano tadas, las candidaturas de Monterrey, para
Orozco, Atlántida Coll-Hurtado y María Te- realizar el V Simposio de Enseñanza de la Geogra-
resa Gutiérrez de MacGregor presentaron, fía en México, en mayo de 2007 y de la ciudad
cada uno en su oportunidad a lo largo de cua- de Zacatecas, como sede del XVIII Congreso
tro de los días que duró el congreso, trabajos Nacional de Geografía, 2008. El momento final
plenarios en auditorios repletos. del congreso fue la cena ofrecida a todos los
El programa social del congreso incluyó ponentes, en el hotel Mirador, frente a la Que-
varias actividades. Primero, la inaugura- brada, al oeste de Acapulco.
ción de este encuentro académico en un es- Este congreso sirvió de foro para el inter-
cenario insuperable: el Museo de Historia de cambio de ideas, posturas, métodos de traba-
Acapulco Fuerte de San Diego, que lució ilu- jo y comunicación de hallazgos de investiga-
minado y que permitió la observación de la ción entre los diferentes profesionales de la
bahía y puerto de Acapulco, la noche del 26 Geografía, mexicanos y extranjeros, que acu-
de marzo de 2006; a este acto se adosó la pre- dieron a Acapulco. Se manifestó la diversi-

Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006 169


Álvaro Sánchez Crispín

dad de opiniones respecto a temas que susci- grupo de académicos, de profesionales, de do-
tan discusión como la reforma educativa en centes que trabajan en este país por el desa-
secundaria, que sostiene la pertinencia de un rrollo de la ciencia geográfica.
solo curso de Geografía, ámbito en el que ha- Finalmente, una nota sobre quienes parti-
bría que replantear los principios básicos ciparon en la organización del XVII Congreso
de la enseñanza de esta materia, asociados Nacional de Geografía Acapulco 2006. Alrededor
con la explicación de la ubicación, la rela- del núcleo de personas siguiente se pudo con-
ción naturaleza-sociedad, la escala geográfi- cluir, más que satisfactoriamente, con esta
ca y el concepto de región, para la defensa de tarea académica: los estudiantes de la licen-
no sólo un año de obligatoriedad de Geogra- ciatura en Geografía Gerardo Mollinedo
fía sino a lo largo de toda la educación secun- Beltrán, Miguel Ángel Garrido Espejel, Alberto
daria. También fue notable el avance que han Julián Domínguez Maldonado y Gino Jafet
tenido los sistemas de información geográfi- Quintero Venegas; asimismo, la pasante de
ca y la aplicación de éstos en diferentes esce- maestría en Geografía Miriam del Carmen
narios de investigación, evidenciados en dis- González Catalán. En Acapulco, fue valiosa
tintas presentaciones en varias sesiones del la aportación del doctor en Geografía Naú
congreso. La realización de encuentros aca- Niño Gutiérrez. La organización general del
démicos de la envergadura del de Acapulco congreso estuvo a cargo de quien escribe es-
facilita la comunicación, el intercambio, el des- tas líneas.
cubrimiento de personas que comparten en-
tre sí un objetivo y una afición común: la Geo- Álvaro Sánchez Crispín
grafía, lo que permite la consolidación de un Instituto de Geografía, UNAM
Academia de Geografía, SMGE

170 Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006


I Simposio Iberoamericano de Historia de la Cartografía.
Imágenes y lenguajes cartográficos en las
representaciones del espacio y del tiempo,
Buenos Aires, 20, 21 y 22 de abril de 2006

El I Simposio Iberoamericano de Historia de detalle del programa, los resúmenes de las


la Cartografía. Imágenes y lenguajes carto- conferencias y los trabajos a ser presentados
gráficos en las representaciones del espacio y y las actividades propuestas durante el Sim-
del tiempo, fue organizado por el Instituto de posio. Dicha carpeta contenía también una
Geografía de la Facultad de Filosofía y Letras tarjeta con la dirección de URL de la publica-
de la Universidad de Buenos Aires. La inicia- ción electrónica que reúne los trabajos com-
tiva y la coordinación general estuvo a cargo de pletos: se trata de Imágenes y lenguajes carto-
Carla Lois, de la Universidad de Buenos Ai- gráficos en las representaciones del espacio y del
res y el selecto Comité Académico fue integra- tiempo (ISBN 950-29-0919-4), disponible en
do por académicos de primer nivel, como An- el sitio Web del evento: www.historia
tonio Carlos Robert Moraes (Brasil), João cartografia.com.ar/publicacion.html. Los
Carlos Garcia (Portugal), José Omar Moncada idiomas oficiales fueron el español y el portu-
Maya (México), Pablo Cicolella (Argentina) y gués.
Carla Lois (Argentina). Es interesante destacar que el evento fue
Este evento, que cuenta con ciertos antece- organizado en sesiones plenarias, de manera
dentes aislados en el ámbito hispanoameri- tal que las mesas de exposición y discusión
cano, se organizó con el fin de constituir un fueron sucesivas y no simultáneas. Esto posi-
espacio de discusión para explorar las mane- bilitó la asistencia de todos los participantes
ras de aproximación al estudio de la cartogra- en las diferentes instancias, generando un es-
fía histórica y de la historia de la cartografía. pacio continuado de diálogo que atravesaba
Dicha iniciativa se enmarca en un contexto los diferentes ejes temáticos.
intelectual y regional de renovación y conso- Ochenta y seis personas −provenientes de
lidación de enfoques culturales que revisan distintas instituciones académicas de Argen-
las formas de representación del mundo pre- tina, Brasil, Chile, México, Colombia, Portu-
sentes en la cartografía y los supuestos epis- gal y España− participaron del evento. A los
temológicos, sociales y políticos involucrados tres conferencistas invitados −reconocidos
en la producción, la circulación y el consumo de especialistas en el tema convocado− se suma-
estas representaciones. ron 17 participantes de diversas disciplinas
Las actividades del Simposio tuvieron lu- como la geografía, historia, historia del arte,
gar en la Biblioteca Nacional y en el Museo arquitectura y geología, y 66 asistentes no
Etnográfico “Juan B. Ambrosetti”, dependiente expositores. La amplia mayoría de los expo-
de la Facultad de Filosofía y Letras de la Uni- sitores eran graduados de diferentes unida-
versidad de Buenos Aires. Ambas sedes tienen des académicas nacionales; sin embargo, tam-
una ubicación céntrica en la ciudad que per- bién se contó con la presencia de estudiantes.
mitió el fácil acceso de los asistentes; además, Al comienzo de la primera jornada tuvo lu-
estas instituciones contaban con el espacio y gar la inauguración, con las palabras de bien-
el equipamiento necesario para el desarrollo venida a cargo de Pablo Cicolella, director del
de las actividades programadas durante el Instituto de Geografía de la Universidad de Bue-
evento. nos Aires.
Los asistentes al Simposio recibieron una Durante las tres jornadas, el evento contó
carpeta que contenía un cuadernillo con el con el desarrollo de tres conferencias. La con-

Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006 171


Claudia Alejandra Troncoso

ferencia inaugural estuvo a cargo de João Car- pacio. Asimismo, se argumentó que la idea de
los Garcia de la Universidad de Porto, Portu- Brasil se desarrolló como producto de una in-
gal y versó sobre el tema El Río de la Plata en la vención colonial portuguesa a partir del siglo
cartografía portuguesa (siglos XVI-XIX). En la XVI, que consistió en conformar un territorio
misma se abordó la presencia portuguesa en de contornos desconocidos (con excepción de la
el área del Río de la Plata haciendo referencia costa atlántica) que sería explorado y tendría
a las campañas militares e intentos de coloni- límites efectivamente marcados en el terreno
zación de esta área geográfica desde el siglo en los siglos sucesivos.
XIV al XIX. El estudio de estos procesos fue Durante el Simposio se expusieron 17 tra-
acompañado de un análisis de la cartografía bajos, agrupados en seis ejes temáticos, a sa-
producida en ese mismo periodo, tanto por ber: Representaciones del mundo, representa-
portugueses como por otros actores con pre- ciones del nuevo mundo; Arte y técnica en la
sencia o intenciones en este territorio. cartografía de América (siglos XVIII-XIX);
La segunda conferencia intitulada Constru- Política y producción cartográfica (siglos XIX
yendo el territorio. El desarrollo de la cartografía en y XX); Viajeros e imaginarios cartográficos; Pla-
Nueva España, estuvo a cargo de José Omar nos y catastros en el proceso de constitución
Moncada Maya del Instituto de Geografía de la del territorio argentino e Instituciones en la pro-
Universidad Autónoma de México. Aquí se dis- ducción y difusión las cartografías nacionales.
cutieron los cambios en la forma de representa- Los trabajos expuestos en los distintos ejes
ción del territorio de la Nueva España en el pe- introducían varios aspectos de la representa-
riodo colonial. Específicamente la exposición se ción cartográfica relacionándola con las formas
centró en las formas de representación del te- de conocer el territorio, las imágenes que sobre
rritorio desarrolladas por grupos indígenas con los mismos generaban, las condiciones de pro-
anterioridad a la llegada de los españoles y las ducción de este tipo de representaciones y sus
transformaciones incorporadas por la carto- usos en distintos momentos y lugares. Se anali-
grafía novohispánica. Se sostuvo durante la zaron las formas de representación de diferen-
exposición que estas incorporaciones no impli- tes espacios americanos, sus ocupantes y las
caron una supresión de las formas de represen- formas de expansión que tuvieron lugar a par-
tación prehispánica, sino que éstas pervivieron tir del encuentro con América y las imágenes
con formas más científicas de representar el te- generadas sobre este territorio. Además, se de-
rritorio. sarrollaron temáticas vinculadas con las for-
La última conferencia designada Indagações mas instrumentadas desde el poder político
históricas sobre a idéia geográfica de “Brasil”, estuvo para conocer, representar y ordenar los terri-
a cargo de Antonio Carlos Robert Moraes de la torios y generar formas de apropiación efec-
Universidad de San Pablo, Brasil. En ella se abor- tiva acompañadas de la elaboración de una
daron algunas cuestiones metodológicas y la cartografía que recurría al conocimiento téc-
utilidad de ciertos conceptos comprendidos en nicos de expertos. En relación con esto, varios
el campo de la historia territorial. Se rescató la trabajos analizaron la producción de mate-
utilidad de conceptos tales como ideologías geo- riales cartográficos formando parte de una
gráficas y valorización territorial que permiti- estrategia al servicio de los intereses de dife-
rían comprender los procesos de apropiación rentes entidades políticas (imperios, estados
simbólica y material del espacio. Se rescató la nacionales, gobiernos locales), actuando en
importancia del papel jugado por la cartogra- diferentes territorios (gobernaciones colonia-
fía en estos procesos, ya que la misma está les, ámbitos urbanos, fronteras, áreas
involucrada no sólo en los procesos de la repre- costeras) y generando distintas formas de
sentación sino también de apropiación del es- apropiación de estos territorios.

172 Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006


I Simposio Iberoamericano de Historia de la Cartografía

El desarrollo de las temáticas planteadas estimular y acompañar otras formas de ima-


en las conferencias y los paneles dio lugar a ginar África, ya sea en términos identitarios,
una serie de debates. Uno de los principales en relación con las redes de movilidad que la
se centró en los motivos que explican la orien- vincularon históricamente a otros espacios
tación de los mapas anteriores a la adopción (América, por ejemplo) y en relación con su
generalizada de la convención europea que fija diversidad.
el norte en la parte superior del mismo. Aquí se La especificidad de la temática del simpo-
puso de manifiesto la importancia del punto de sio permitió un intercambio rico entre los
vista y la perspectiva de quien confecciona el participantes en los foros de exposición y de-
mapa que representa adelante suyo el objeto de bate, ya que se retomaron discusiones ya exis-
interés: el territorio sobre el que se pretende tentes, se instalaron nuevas y se multiplica-
avanzar, o el que pretende ser administrado o ron los interlocutores del debate. Por último,
dominado. cabe destacar que la participación de asisten-
También se debatió en torno a las transfor- tes no expositores permitió que un público no
maciones manifestadas en las formas de repre- especialista asistiera a los debates relativos a
sentación del territorio como consecuencia de un campo de conocimiento que reflexiona so-
los cambios políticos operados en el paso del bre aquello que tradicionalmente se conside-
régimen colonial a la independencia en el caso ró una herramienta neutra que reflejaba fiel-
argentino. Esta situación habría alterado tam- mente lo representado.
bién las condiciones de producción de los ma- En el marco del Simposio se programó una
pas, ya que los españoles, que habían tenido en visita guiada a la Biblioteca Nacional que
sus manos la tarea de cartografiar, en su retira- incluyó a la mapoteca de esta institución, ac-
da se habrían llevado esos instrumentos y tualmente cerrada al público.2 Además, se or-
saberes. Aquí el debate se planteó en términos ganizó otra a la exposición con sede en el Museo
de cómo interpretar este proceso y las posturas Etnográfico “Las fronteras de África”, donación
variaban entre aquéllas que lo entendían como realizada por la Comisión Nacional de la Con-
un quiebre epistemológico en tanto sumía a los memoración de los Descubrimientos Portugue-
criollos en un “analfabetismo cartográfico” y ses (Portugal). La presentación de dicha exposi-
aquéllas que lo entendían sólo como un quiebre ción estuvo a cargo de João Carlos Garcia,
político. Universidad de Porto y Marisa Pineau, Univer-
Asimismo, se generaron discusiones sobre sidad de Buenos Aires.
la retórica estética de los mapas y su vincula- Durante el evento también pudieron apre-
ción con el objetivo de convencer y de difun- ciarse las láminas que reproducían algunas
dir ideas que parece caracterizar, al menos, de las cartas y planos de los siglos XVI al XX
un tipo de representaciones cartográficas (jun- que componían la Exposición de Cartografía
to a otros objetivos, como conocer, reivindi- Antigua de los Mares y Costas Colombianas,
car y dominar un espacio). con materiales del Archivo General de la Na-
Además, se reflexionó sobre la utilidad de ción de Colombia.
los mapas históricos1 en contextos de enseñan- En la última jornada del evento se realizó
za de nivel superior, en particular sobre su po- el acto de cierre del mismo donde la coordi-
tencialidad como herramienta para romper con nadora general, Carla Lois, informó sobre los
ciertas ideas cristalizadas sobre algunos espa- alcances y los resultados del foro y la conti-
cios poco conocidos (puntualmente, se comentó nuidad del trabajo realizado en este primer
el caso del continente africano). En este sentido, simposio. José Omar Moncada Maya, por su
el debate aportó pistas para pensar sobre las parte, anunció la realización del II Simposio Ibe-
posibilidades que brinda la cartografía para roamericano de Historia de la Cartografía en el 2008

Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006 173


Claudia Alejandra Troncoso

en la Ciudad de México. La organización es- bilidades que brindaba la cartografía en la en-


tará a cargo del Instituto de Geografía de la señanza superior para desarmar ciertas visio-
UNAM, con la colaboración del INEGI, la So- nes cristalizadas sobre determinados espacios
ciedad Mexicana de Geografía y Estadística, geográficos.
la Mapoteca Manuel Orozco y Berra de 2
Los motivos de estas restricciones en la con-
Tacubaya, entre otros. sulta de la mapoteca se explican por las tareas
de reformas y recatalogación que está llevando
Claudia Alejandra Troncoso adelante la institución.
Instituto de Geografía
Universidad de Buenos Aires
NOTAS:
1
Durante el debate no se realizaron aclaracio-
nes sobre qué se entendía por este tipo de ma-
pas, más bien el foco estuvo puesto en las posi-

174 Investigaciones Geográficas, Boletín 60, 2006

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