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COMPAÑER@S
Es democracia sindical
El 14 de Septiembre l@s judiciales fuimos a las urnas. Votamos
una propuesta, un programa y un Secretariado General que
garantice su desarrollo y cumplimiento en los próximos cuatro años.
Cinco son los ejes centrales del programa votado: Cambiar el
Poder Judicial para que haya Justicia, Ampliación de la
Democracia Sindical , Convenio Colectivo de Trabajo,
continuar con la Recuperación Salarial ganándole a la
inflación y terminar con la Violencia Laboral.
La Lista Roja “Unidad de los y las que Luchan” surgió de
un amplio debate democrático y de un consenso unánime. Ninguno
de sus integrantes, hoy conducción del SEJUN, mereció
cuestionamientos o impugnaciones al momento de definir los cargos
y sus responsabilidades. Tampoco tuvo objeciones el programa
puesto a consideración de los afiliados y afiliadas.
Éste es, entonces, el mandato expreso surgido de la
voluntad soberana expresada en las urnas. A él estamos
obligados todos y todas a someternos.
LOS AVANCES CONQUISTADOS.
El sindicato en los últimos años ha cambiado, para bien. Hemos
incorporado plenamente l@s Delegad@s a la vida sindical, se ha
impuesto y naturalizado colectivamente la asamblea como instancia
democrática de debate y resolución, y en lo que hace al órgano de
conducción permanente (el Secretariado General), se ha distribuido
la carga decisional en el cuerpo colegiado, restringiendo y limitando
el poder absoluto que anteriormente tenía el Secretario General. Esto
último se encuentra plasmado en nuestro Estatuto en sus Arts. 4, 15,
17 y 20. Y tiene que ver con un concepto fundamental: si en serio
pretendemos una profunda democratización de la sociedad y el
Estado, el conjunto de las instituciones y organizaciones populares (y
el sindicato lo es) deben producir necesariamente los cambios en esa
dirección.
Pero más allá de las instancias formales y estatutarias (sin
desconocer desde ya su importancia), la relación con l@s afiliad@s
venía siendo mucho más directa, inmediata y personal. Se había
instaurado de hecho un mecanismo de participación, en reuniones
regulares donde integrantes del Secretariado, Delegad@s,
Militantes, Activistas y Afiliad@s en general, informábamos,
debatíamos, analizábamos, proponíamos, en un ejercicio
democrático inédito en la historia del SEJUN.
Y todos estos cambios progresivos redundaron sin
ninguna duda en la masividad y la potencia evidenciada a la
hora de nuestras luchas y conquistas. Y también en el
enriquecimiento del perfil del sindicato, en su prestigio y en
la ampliación de sus objetivos.
CUÁL ES ENTONCES LA CRISIS DEL SEJUN?
Poco antes de las elecciones del 14 de Septiembre, después de
las mismas y mucho más ahora, comenzaron a aparecer señales de
retroceso. Se comenzó a cerrar el debate y la participación; se
pretende volver al pasado en términos de poder de decisión;
se instauró una práctica de fracción antagonizando lo
colectivo; no se respetan acuerdos internos de
funcionamiento y acción; se ningunea e intenta aislar y aun
peor excluir a compañeros y compañeras de la conducción; la
información no fluye y no es compartida con el conjunto; se
comenzaron a tomar decisiones autoritarias e inconsultas; no
se consideran propuestas e iniciativas concretas de trabajo;
se divulgan cuestionamientos a determinados compañeros
que nunca se debatieron en los ámbitos pertinentes; se
suspenden unilateralmente las reuniones semanales; Se han
venido concretando asambleas a espaldas de una parte del
Secretariado General; y lo más grave, se ha utilizado la
violencia física de manera consciente para dirimir presuntas
diferencias en un acto público del sindicato (fiesta en Cutral
Co).
También, y es muy lamentable tener que decirlo, se ha
difundido una descabellada “teoría del golpe de estado contra
el Secretario General”; copiando y siguiendo los pasos del
gobierno nacional cuando plantea el “clima destituyente”.
Esta falacia, además de insultar la inteligencia de tod@s,
demuestra una acción cuyos propósitos últimos
desconocemos, pero que sí podemos afirmar está dirigida a
justificar intentos de exclusión de algun@s, a victimizar
artificialmente dirigentes y en definitiva a violar el mandato
surgido de las urnas el 14 de Septiembre.