El documento discute las lecturas políticas de la Escritura y la interpretación feminista. Resume que la Biblia tiene que ver con cómo se debe estructurar la sociedad aunque no apoya sistemas políticos particulares. También analiza diferentes perspectivas feministas sobre la interpretación bíblica como la de Mary Daly y Phyllis Trible, señalando posibles errores en forzar el texto para apoyar una posición. Finalmente, resume principios bíblicos sobre la relación entre hombres y mujeres.
El documento discute las lecturas políticas de la Escritura y la interpretación feminista. Resume que la Biblia tiene que ver con cómo se debe estructurar la sociedad aunque no apoya sistemas políticos particulares. También analiza diferentes perspectivas feministas sobre la interpretación bíblica como la de Mary Daly y Phyllis Trible, señalando posibles errores en forzar el texto para apoyar una posición. Finalmente, resume principios bíblicos sobre la relación entre hombres y mujeres.
El documento discute las lecturas políticas de la Escritura y la interpretación feminista. Resume que la Biblia tiene que ver con cómo se debe estructurar la sociedad aunque no apoya sistemas políticos particulares. También analiza diferentes perspectivas feministas sobre la interpretación bíblica como la de Mary Daly y Phyllis Trible, señalando posibles errores en forzar el texto para apoyar una posición. Finalmente, resume principios bíblicos sobre la relación entre hombres y mujeres.
Lecturas polticas de la Escritura y La interpretacin feminista
Lecturas polticas de la Escritura
Menciona el autor que, la afirmacin de que la Escritura no tiene que ver con la vida humana en su conjunto, con la polis, les habra sonado muy extraa a la mayora de los cristianos antes de finales del siglo xviii, y creemos que el texto bblico si tiene que ver con la forma como la gente se debe estructurar y dirigir. Lo que no se comparte es que la Biblia sea usada para apoyar determinada tendencia poltica. Ciertamente a simple vista y tal vez para muchos la Biblia y la poltica son incompatibles, tal como leemos, dolf von !arnac", quien desdeaba el primitivo material del ntiguo #estamento y tomaba del $uevo una sencilla religin %tica de paternidad divina y fraternidad humana que estaba por encima de la poltica& El Evangelio, deca, proclama una santa indiferencia con respecto a los problemas mundanos, lo cual no parece austarse a la realidad bblica, toda vez que las !scrituras si tienen que ver con los problemas de la humanidad no sin dear clara la advertencia de no austarse a la forma mundana de pensamiento "#om. $%&%'. !s interesante la posici(n de )ames Barr, que seg*n el autor, llama modelo teocr'tico a este recurso tradicional a la Escritura, pues descansa sobre la creencia de que en la Escritura poseemos una explicacin revelada por (ios del modo en que se debe gobernar la sociedad& +ebemos observar que una definici(n aceptada de ,poltica- es la de, ,la .tica "o el arte' de gobernar a los muchos "a la polis'- y ciertamente, desde Mois.s se observa el modelo de una teocracia en /srael y la forma de gobierno humana era dirigida por +ios en forma directa y los !scritos 0agrados dictaban las normas morales de comportamiento del pueblo. 1or otro lado, no parece ser la intenci(n de +ios dear registrado un modelo de direcci(n poltica, pues ello se sale del prop(sito de las !scrituras, pero si se hallan all principios que pueden aplicarse a cualquier sistema poltico. Con respecto a algunos comentaristas bblicos, el autor menciona que, )as diversas formas de notas de estudio de la *iblia de que disponen las comunidades cristianas de Europa est'n enmarcadas, en su mayora, dentro de la hermen%utica del individualismo& +u objetivo es ahondar la devocin al +alvador, y evitan decididamente cuestiones polticas& 2unque la devoci(n al salvador sea prioritaria en la Biblia, necesariamente no hay que evitar la referencia bblica al hecho poltico, adem3s de ser una realidad vivida por todos. 4tro hecho resaltable es el de Barton, a saber, ,ohn *arton concluye que el peligro de or de la *iblia lo que queremos or es en realidad demasiado grande, y por eso prefiere no justificar sistemas polticos recurriendo a modelos bblicos, que se comparte plenamente, pues no es la intenci(n de la Biblia ustificar determinado sistema poltico. 5n principio bblico de direcci(n se observa en 1roverbios %6&%, ,Cuando los ustos dominan, el pueblo se alegra7 cuando domina el malvado, el pueblo gime-, porque es de suponer que el usto actuar3 conforme al dise8o de +ios aplicando la santidad y la usticia en su gobierno. !n el 9uevo :estamento, 1ablo ordena, ,Somtase toda persona a las autoridades superiores, porque no hay autoridad que no provenga de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas (Rom. 131!, precisamente en el conte"to de dominaci#n romana, cuando los cristianos no eran muy bien vistos por el imperio, de$%ndonos principio b&blicos que nos ense'an que Dios es soberano para admitir cualquier clase de gobierno y por otra parte, el comportamiento cristiano, siempre que la autoridad establecida no entre en con(licto con la obediencia a Dios ()ec. *+,! iniciaba una revoluci#n no violenta sino que parte del cora-#n y va a(ectando a la sociedad. La interpretacin feminista 2l respecto, nos muestra el autor una forma feminista de interpretar el texto sagrado. Los siguiente parece ser una advertencia del autor, -abe sostener que tanto los hombres como las mujeres padecen daos espirituales y de otro tipo cuando el simbolismo es falso o equivocado& +e modo que si la interpretaci(n feminista de la Biblia est3 fuera de orden, luego afectar3 no s(lo a los hombres sino a las mueres y por l(gica tambi.n afectar3 a las familias. 5na de las representantes de este mover feminista es Mary +aly,de la cual cita el autor, $o deseamos ser redimidas por un dios, ser adoptadas como hijos, ni tener el espritu del hijo de un dios artificialmente inyectado en nuestros cora.ones gritando /0padre1/& !sto ya afectara la vida espiritual de quien comparta este punto de vista, pues es el deseo de +ios que todos se arrepientan y crean en )esucristo, no obstante si +aly no desea ser redimida, esa es su decisi(n y se respeta su libertad, pero no coartar la libertad de las mueres que si desean ser salvadas. !n relaci(n al m.todo de 1hyllis :riple, leemos que )as feministas necesitan todos los recursos que puedan encontrar, y todava cabe que entre dichos recursos se encuentren los textos bblicos, aunque en la actualidad son pocas las feministas no creyentes que suponen algo por el estilo& Lo que lleva a forzar el texto para que apoye su posici(n como muy bien lo hace ver el autor. !emplo de esto es +eut. ;%&$<, =9o hiciste caso de la roca que te engendr( y olvidaste al +ios que te dio a luz>. ? /s. @%&$@ =Como parturienta grito, resoplo y adeo entrecortadamente>, que pretende colocar a +ios como parcializado por el g.nero femenino, errando al ignorar trascendencia divina que para comunicar una verdad utiliza los elementos que la humanidad pueda entender. +ebe aceptarse que como consecuencia de la maldici(n, ,el deseo de la muer ser3 para su marido- "Aen. ;&$B', ha dado pie para que el hombre se ense8oree de la muer en forma desp(tica, pero el evangelio ha rescatado la dignidad de la muer, pues ,en el 0e8or ni hombre el hombre es sin la muer ni la muer sin el var(n- "$ Cor. $$&$$', pues la esencia de ambos es la misma, nadie es superior al otro. 1or otro lado, tambi.n ense8a el evangelio, que por motivo de funcionalidad, es necesario que el hombre sea la cabeza de la muer as como +ios es la cabeza de Cristo "$ Cor. $$&;', lo cual no significa que +ios sea superior a Cristo en esencia. +e este modo, en la familia, la muer debe someterse a su marido "Col. ;&$<', y .ste debe amarla como Cristo am( a su /glesia, y debe entregarse por ella como Cristo por la /glesia, protegi.ndola y proveyendo para ella "!f. C&%6', no siendo un dictador ni consider3ndose superior a ella. 9o hay raz(n para que la muer se sienta amenazada por el var(n que ha comprendido y practica los principios de la 1alabra de +ios referentes a la relaci(n hombreDmuer. #afael Auedez