Llamamiento del movimiento revolucionario marxista

“UNIDAD PARA EL CAMBIO”

¡A CERRAR EL PASO A LA DERECHA!

Ha causado escozor, que la organización revolucionaria marxista “UNIDAD

PARA EL CAMBIO” diera a conocer en su último documento, su posición de
respaldo al gobierno progresista de Daniel Ortega por sus importantes
emplazamientos de dignidad y soberanía a favor de la Unidad
Latinoamericana, su ubicación en el ALBA, la solidaridad con Cuba
Socialista y distintas reformas democráticas que se han venido aplicando
desde el inicio de su gestión.

En el análisis no se plantea como objetivo principal, definiciones ideológicas

y políticas que hemos abordado en documentos anteriores, sino, lo que
podría llamarse la transición histórica hacia posibles nuevos caminos
alternativos que nos conduzcan a reivindicaciones sociales más profundas,
donde tengan más protagonismo las masas trabajadoras obrero-campesinas.

Dichas reformas democráticas, contrarrestan de forma importante, las

secuelas de la brutal crisis económica heredada de los gobiernos pro-
norteamericanos que antecedieron, agravada por la crisis mundial del
sistema capitalista, que analizamos oportunamente en una publicación
anterior.

El Gobierno de Daniel Ortega reaparece después del surgimiento de varios

gobiernos progresistas en la parte sur del continente, cuando ya no esta el
campo socialista.

Gradualmente, se fue conformando un conjunto de ocho países, a cuya

cabeza se sitúa históricamente la República Socialista de Cuba, con una
realidad ideológica y política totalmente definida. Después del 90,
Venezuela, Bolivia, Ecuador, Chile, Nicaragua, Uruguay, Paraguay, que se
identifican con las ideas de democratizar y socializar el poder, cada cual
desde sus propias perspectivas y realidades nacionales.

Esta realidad concreta, puso en claro dos grandes frentes ideológicos, el

primero, donde se ubicó la mayoría de los revolucionarios no dogmáticos.
Esto significó, una bocanada de aire oxigenante que mitigó el golpe de la
derrota electoral de 1990 en Nicaragua y el derrumbe del campo socialista a
principios de esa década.

El segundo, donde se ubicaron los enemigos de la Humanidad y sus lacayos.

Allí también se localizó, una minoría que se llamaba de izquierda que por
inconsistencia ideológica, huyó en imparable estampida y cayó en las
trampas que tendió el Imperio.

Hemos mantenido de forma permanente, la continuidad y beligerancia de

un mismo hilo histórico de décadas anteriores a 1990, sin los recursos
materiales para difundir nuestro pensamiento, pero sí, con todo el vigor, con
toda la voluntad, con el espíritu noble, elevado y sincero de los
revolucionarios pertrechados de las herramientas del análisis marxista.

Aquellas antiguas experiencias históricas que hemos vivido nos sitúan,

como dice José Carlos Mariátegui, por encima de toda barrera teórica, para
expresar nuestra posición solidaria a los esfuerzos apuntados.

¿Que es lo que pasa?

Somos una Nación, que enfrenta con valentía la peor de todas las crisis
mundiales del capitalismo, la ofensiva bárbara del Imperialismo y sus
aliados, el boicot político y económico internacional contra el gobierno
nacional y la embestida feroz de toda la prensa hablada, escrita y televisiva,
nacional e internacional.
Nuestra Nación, desde posiciones de dignidad levanta su cabeza para hacer
frente a la intromisión extranjera, que con el más absoluto desparpajo, con
la banderita de “ayuda”, se inmiscuye en los asuntos internos
nicaragüenses con el pretexto de “fraudes electorales”.

La odiosa oligarquía y sus seguidores, con su nuevo ropaje de “salvapatria”,

ha sido conminada por sus amos gringo-europeos, con financiamiento
millonario para abalanzarse a las calles, en una nueva ofensiva que forma
parte de una escalada imperialista inaugurada con el golpe militar gorila en
Honduras.

Es de hacer notar, que las marchas y contramarchas reaccionarias, arrastran

a una masa de la población honesta, que ingenua y confundida por la
campaña intensiva de los medios y de un sector de la jerarquía de la
Iglesia, busca una forma de manifestarse.

No es secreto que el embajador Callahan, el nazi-holandés J. Cornelis van

Baalen, el subsecretario de Estado de EEUU Craig Kelly en Tegucigalpa, y
otros agentes del imperio, reiteradamente han vociferado su inconformidad
y rechazo a las políticas del gobierno de Daniel Ortega, al Proyecto
Bolivariano ALBA, ya no se diga, al Proyecto Petro-Caribe, Petro-Sur, Banco
del Sur, Merco-sur, al fortalecimiento de las relaciones entre China, Irán y
América Latina porque atentan contra una herencia perversa del
colonialismo y el gran capital.

Los marxistas analizamos y justificamos las políticas del actual gobierno

miembro del ALBA, bajo la lupa de la dialéctica, rompiendo tradiciones y
pensamientos petrificados para recuperar el vigor del análisis nuevo acorde
con la historia de Nicaragua, Latinoamérica y el mundo.

Enaltecer la posición Nicaraguense con respecto a la Unidad

Latinoamericana no significa enaltecer al Presidente Daniel Ortega, sino,
enarbolar una posición de Nación por la unidad continental contra el
“monstruo de las siete leguas” como llamaba Martí al imperialismo
norteamericano. Fidel Castro decía en una de sus reflexiones sobe la unidad
latinoamericana: “En esa constante ambición criminal de Washington se ha
basado la lucha popular y política Latinoamericana desde su independencia,
desde Bolívar hasta las FARC, pasando por el Che Guevara y la revolución
cubana, la revolución sandinista, la zapatista y el bolivarismo”

El ALBA es un extraordinario proyecto de integración latinoamericana

cuyos beneficios para Nicaragua no constituyen más, aquel botín de
enriquecimiento de corruptos oligarcas, adictos a las coimas y al robo de la
condicionada “ayuda internacional”.

Los intelectuales orgánicos

Por otra parte, existen escritores, “mezcla de esclavos y mercenarios”

como decía Aníbal Ponce, que con la bandera de “progresistas”, defienden
postulados de la oligarquía, hacen coro con ella para repudiar las posiciones
antiimperialistas y las reformas democráticas del gobierno nacional,
argumentando que Ortega es “burlador de sus libertades públicas” y que la
solidaridad venezolana no sirve al pueblo, sino a sus planes continuistas.

Se cobijan en el lloriqueo del llevado y traído “fraude electoral” que es

una orquesta montada por las élites criollas más reaccionarias en
contubernio con las metrópolis de las colonias.

Con toda la apariencia de ser pagados, dan su contribución a la burguesía

para afectar la organización de los trabajadores, fomentar su dispersión
ideológica y convocar al abstencionismo para dejar manos libres a la
burguesía en sus propósitos nefastos antipopulares ya conocidos.

Pretenden que el poder ganado por fuerzas progresistas sea devuelto a los
ladrones, a los banqueros que han ejercido su dictadura desde 1821.

Sus argumentos viscerales anti orteguistas solo chocan con la lógica de la

historia, rompen la ética intelectual y es bien sabido que la burguesía utiliza
a los intelectuales orgánicos para que la representen como lo dijo en su
momento el Gran Italiano Antonio Gramsci.

Rechazamos sus posiciones dogmaticas petrificadas que dicen: “¿para que

apoyan las mejoras en la producción masiva de alimentos, eso de nada sirve
con campesinos sin tierra, sin garantía de propiedad y asediados por
geófagos, incluso orteguistas?” Nosotros consideramos que esa forma de
ver el mundo, es oportunismo palmario, su “objetivo final”, se aparta lejos
de la agitación, es una posición liquidacionista, esto es como sentarse a
llorar o a esperar como sumarse a la pretensión de la burguesía por
derrumbar al gobierno de Daniel Ortega.

Todo el mundo sabe que los organismos financieros internacionales,

incluyendo los países donantes, basados en teorías hegemónicas de
“democracia y gobernabilidad”, elaboran programas de ayuda en base a sus
propios intereses geoestratégicos de política exterior. Para muestra un
botón, jamás aceptarían la posición digna de Cuba Socialista y alegan
“principios universales” que toda nación debe cumplir para merecer su
ayuda.

Su argumentación está retratada en el criminal bloqueo de 50 años a Cuba.

Así funcionan también las organizaciones de la Sociedad Civil que

administran millones de euros y dólares, cuyo control corrupto ha servido
para el enriquecimiento de unos cuantos tragaldabas que basado en la
desinformación, utilizan a sectores incautos de la población, en beneficio
de sus espurios intereses de clase.

¿Cuál es la fuerza organizada visible y palpable que representando los

intereses de las grandes masas populares va a contraponerse al FSLN en
las próximas elecciones regionales del 2010 en la Costa Caribe y las
elecciones generales del 2011?

Simplemente no existe, a no ser las desprestigiadas fracciones de la

oligarquía y sus aliados que defienden los mezquinos intereses de una
burguesía lumpen.
 La siguiente etapa:

Para hacer avanzar este proceso social, el gobierno del FSLN, en su contexto
burgués, con sus actuales nexos con el Fondo Monetario Internacional (FMI)
y alianza con los grandes grupos financieros nacionales, no está en
capacidad de nacionalizar los medios de producción ni promover una
Reforma Agraria profunda, ni una verdadera reforma Urbana. Aparte de que,
16 años de neoliberalismo, no se desmontan así nomás en 36 meses de un
gobierno.

No existen en este momento, las condiciones nacionales ni internacionales,

para iniciar esa etapa histórica.

En el aspecto nacional, el poder oligárquico pro-imperialista, encabezado por

Alfredo Pellas, Juan Bautista Sacasa, Ramiro Ortiz Gurdian, Eduardo
Montealegre Rivas, pudo haber perdido una parte del escenario económico y
político en el aparato estatal, también su liderazgo, pero sigue ejerciendo su
influencia en la economía nacional, dado el elevado grado de la
transnacionalización del gran capital mundial. Ellos ven con preocupación
creciente y como un peligro, que el proceso político toque sus intereses
económicos, de allí que, resulta más fácil tocarle el tridente al diablo que el
bolsillo a la burguesía.

Grandes grupos económicos operan en la región, con capitales históricos

hoy, transnacionalizados. Cabe la pregunta: ¿Quién verdaderamente detenta
el poder en Nicaragua? ¿Quién tiene el poder en Centroamérica?

La apertura de esa etapa histórica, para abrir nuevas rutas hacia la verdadera independencia económica,
no depende caprichosamente de la visión de país que tenga Daniel Ortega Saavedra o cualquier otro
gobernante.

Por sobre todas las cosas, la nacionalización rápida o gradual, depende de las exigencias de la Ley de la
correspondencia entre las relaciones de producción y el carácter de las fuerzas productivas, constituye
una de las Leyes generales de la revolución social en camino al Socialismo. Es el resultado de agudas
contradicciones que se avecinan, entre fuerzas productivas y relaciones de producción, en el contexto de
una correlación de fuerzas donde el capital nacional o regional está globalizado.

transformaciones democráticas burguesas, más profundas

Es la siguiente etapa de
que las actuales reformas democráticas. En resumen, es el paso hacia la
liquidación de la propiedad capitalista y la de los terratenientes sobre los medios de producción, la
antesala del Socialismo.
 En el aspecto Internacional, tenemos que reconocer, que todos estos
esfuerzos de estos nuevos gobiernos, se desarrollan dentro de la espesa
telaraña del imperialismo mundial (Ver “Analisis de la crisis mundial del
capitalismo y la situación de nuestros pueblos latinoamericanos” del
Movimiento Revolucionario Marxista UNIDAD PARA EL CAMBIO).

Debemos seguir ejerciendo la tarea de desenmascarar permanentemente

la guerra sucia de los medios de comunicación internacionales y nacionales,
contra los gobiernos democráticos y progresistas, dirigida a confrontar,
tergiversar y alentar a la derecha, para inducir confrontación, desgaste y
desmoralización de las fuerzas progresistas.

Después de una década, de nuevos movimientos independentistas

latinoamericanos y 5 años del proyecto del ALBA, la construcción de la
Unidad Latinoamericana es la tarea fundamental.

Ningún país puede hacerlo por separado, todos los pasos tienen que pasar
inequívocamente por el proceso de integración, al que urge, mayor
dinamización, frente a los planes guerreristas imperiales y cada país
integrado, hará lo suyo, para avanzar en la profundización de los cambios
que lo conduzcan a su independencia económica.

El Imperialismo norteamericano, tiene puestas sus miras en Irán, Irak,

Afganistán y Pakistán donde con sus políticas de saqueo y rapiña piensa
asegurarse del petróleo para mantener su supremacía imperial en el
mundo, pero no olvidemos que América Latina como ha sido su primera
base fuente de saqueo y enriquecimiento para convertirse en Imperio, su
patio trasero, y ya han instalado su caballo de Troya en Honduras y
Colombia.

La integración Latinoamericana y el fortalecimiento del ALBA seguirán

siendo la garantía fundamental para el desarrollo social continental y
particularmente el desarrollo social nicaragüense, es indispensable
fortalecer el movimiento de solidaridad con Cuba, Venezuela, Bolivia,
Ecuador, Chile, Uruguay, Paraguay que son, bastiones de lucha social del
continente, contra las injusticias sociales, para enfrentar al enemigo de
siempre, el imperialismo y sus secuaces locales.

En medio de esos acontecimientos diarios, demos estimular, impulsar y

forjar, la organización de la clase obrera, que debe cultivar la conciencia
antiimperialista de la revolución de 1979, la conciencia anticapitalista y
revolucionaria, que rompa las trabas mediatizadoras del reformismo
burgués y en el fragor de esa lucha, forjar su conciencia de clase
organizándose en un autentico partido revolucionario marxista.

Ese es nuestro deber hacerlo, el maná no caerá del cielo, la clase obrera
actual “llegará a constituirse en clase, solo a través de la lucha, definición
que está relacionada con el grado de conciencia que con la estructura de
clase” ”…en la lucha contra la burguesía, el proletariado se constituye
indefectiblemente en clase”, es decir, prepararse para la conquista del
poder político para poder realizar sus concepciones políticas, económicas y
filosóficas.

Respaldamos las reformas democráticas actuales y al mismo tiempo

llamamos a impulsar más y profundos cambios contra la crisis del
capitalismo dependiente, a favor de los obreros y campesinos, de toda la
población. Es nuestro deber difundir a la par, las ideas clasistas más allá
del reformismo.

Los marxistas lejos de quedarse a la zaga, debemos ir muy por delante, en

lo que se refiere a la utilización práctica de las reformas y a la lucha por las
reformas de hondo contenido democrático y social.

Por el contrario, los marxistas dogmaticos pueden caer en posiciones

contrarrevolucionarias a través de la historia. Mientras que el marxismo que
se ejercita como ciencia es un método para comprender más exactamente
la realidad y transformarla.

A cerrarle el paso a la derecha

Ratificamos nuestro análisis marxista. Continuaremos trabajando sobre la

base de la teoría revolucionaria de la clase obrera- el marxismo.

En esa perspectiva revolucionaria, hacemos un llamado a los obreros y

campesinos, a toda la población Nicaragüense, a hacer suya la
profundización del avance de estas reformas democráticas, apropiarse de
ellas para cerrar el paso a la derecha y forjar una verdadera UNIDAD
NACIONAL sin sectarismos

Finalmente, a las puertas del año 2010 saludamos a nuestro pueblo y le

deseamos que el nuevo año, todos unidos tengamos más energía y
voluntad revolucionaria para avanzar con organización, más allá del
espontaneismo para distinguir con claridad meridiana entre quienes
defienden los intereses populares y los instigadores de la división, el
patrioterismo, el entreguismo y el retraso social.

Managua, Nicaragua 15 de Diciembre 2009

SECRETARIADO POLITICO

MOVIMIENTO REVOLUCIONARIO MARXISTA

“UNIDAD PARA EL CAMBIO”

Dr. Julio Briceño
Dávila Federico Kraudy Salgado

Prof. Lombardo Aburto Cornejo Prof.

Abel Castañeda Miranda

Roger Callejas Moreira