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Jess nos dice por donde debemos ir ante tantas falsas alternativas; que
debemos evitar para hacernos dao; donde est la verdad en un mundo
lleno de mentira y como promover la vida en una sociedad plagada de
muerte y de pecado. Hay quienes viven sin horizonte, impulsados solo
por el afn del placer y del propio inters no conocen la alegra de quien
se renueva y crece.
Aaden aos a su vida, pero no infunden vida a sus aos, les falta
capacidad para reconocer que Cristo es el camino verdadero que hay
que seguir para orientar la vida, y emplearla de la mejor forma, sin
desperdiciarla.
Jesucristo nos dice: no son ustedes los que me han elegido, soy Yo quin
los eleg, de modo que lo que pidan al Padre en mi nombre se los d.
Esto les mando, que se amen unos a otros; l es la muestra mxima del
amor que el padre os tiene, por lo tanto no pensemos que hay algo en l
que est mal o equivocado, sino que debemos ver en todo su
pensamiento y actuar segn el modelo que debemos seguir. No es
casualidad que l se llame a s mismo el camino, la verdad y la vida,
es decir, que el amor mismo de Dios que se ha hecho cercano a
nosotros.
No nos dice la escritura que el amor es la mayor virtud?
Presentadas as las cosas, en este tiempo, nos debemos esforzar por
caminar en el amor, por conocer el amor y por vivir en el amor. En otras
palabras, nos debemos preocupar por conocer al Seor Jess, por
relacionarnos con l y por llegar a ser verdaderas imgenes suyas. Si no
nos dejamos transformar por el amor del Seor, difcilmente llegaremos
a ser templos del Espritu, pues nuestro pecado y soberbia no dejarn
entrar en nosotros la vida y el mensaje del Seor Jess. Entonces,
pensemos que si estamos dejando que el Seor se haga presente en
nuestra vida sea un instrumento para la construccin de su templo.
Por mi parte lo que queda claro es que no hay ms quien interceda ante
el Dios vivo, sino su hijo Jesucristo.