Professional Documents
Culture Documents
Sin embargo, no lo hice. No me habran credo. Para ellos, yo no era mas que
un miembro insignificante de su raza. Como podan creer que ellos, sus
tradiciones y su historia, su mundo y su universo, haban surgido sbitamente
gracias a mi imaginacin?
Cuando ceso mi turbacin inicial, me desagrado el lugar. Lo haba creado
demasiado brbaro. Las salvajes violencias y crueldades que me haban
parecido tan seductoras como material para una historia , eran aberrantes y
repulsivas en mi propia carne. Solo deseaba volver a mi mundo.
Y no pude regresar! No haba forma. Tuve la vaga sensacin de que podra
imaginarme de vuelta en mi mundo as como haba imaginado mi viaje a ese
otro. Pero fue en vano. La extraa fuerza que haba propiciado el milagro no
funcionaba en la direccin contraria.
La pase bastante mal al percatarme de que estaba atrapado en un mundo
desagradable, extenuado y brbaro. Primero pens en suicidarme. Sin
embargo, no lo hice. El hombre se adapta a todo. Y yo me acople lo mejor que
pude al mundo creado por mi.
-Que hiciste all? Quiero decir: Que funcin cumpliste? -pregunto Brazell
Carrick encogi de hombros.
-No dominaba las habilidades y destrezas del mundo que haba creado. Solo
posea mi propio oficio el de contar historias.
Empec a rer.
-No querrs decir que empezaste a escribir historias fantsticas?
El asinti, sombro.
-No me quedo mas remedio. Era lo nico que poda hacer. Escrib historias
sobre mi propio mundo real. Para esa gente, mis relatos eran de una
imaginacin desbordante y les gustaron.
Nos echamos a rer. Pero Carrick permaneci mortalmente serio.
Madison llevo la broma hasta sus ultimas consecuencias.
-Y como te las arreglaste para regresar finalmente a casa desde ese otro
mundo que habas creado?
-Nunca regrese a casa! -respondi Carrick con un amargo suspiro.