Antonio Andrés Pueyo
Inteligencia y cogniciénSUMARIO
- Introduccion... 2... ee ee
2. El estudio psicolégico de la inteligencia.........
2.1. El estudio psicolégico de la inteligencia y los modelos
psicométricos. ee ee
2.2. La revolucién cognitiva, los modelos cognitivos y la in-
teligencia............ steesssuas
w
. La inteligencia general y los procesos cognitivos. . .
Apunte biografico de Douglas K. Detterman... .... .
«g Existe “g”?», D. K. Detterman (1988)... 0.5.0...
4. Los.correlatos cognitivos dela inteligencia. ... . . .
Apunte biogréfico de John B. Carroll... 2... 2...
«Aptitudes cognitivas, factores y procesos», J. B. Carroll
(1988) 2 eee
w
. Los componentes cognitivos de la inteligencia. . . . .
Apunte biogrfico de Robert J. Sternberg... . 2... .
«La teorfa tridrquica de la inteligencia: comprender
el aurogobierno mental», R. J. Sternberg (1985)... .
6. Conclusiones y perspecti los procesos cognitivos y
lainteligencia. .......... bees see ae ees
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS.. 0.22. 2 ee
ray
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125Capitulo 1
INTRODUCCION
Este libro que usted ahora inicia se ocupa de un fenémeno psico-
légico conocido por todos, la inteligencia. El estudio de la inteligen-
cia en la historia de la psicologia moderna y sobre todo las aportacio-
nes técnicas de sta a la sociedad civil (como ahora se estila) teflejan
la gran imporcancia que ha cenido este fendmeno en el desarrollo de la
psicologia no s6lo como disciplina cientifica, sino sobre todo como
actividad profesional. Este libro tiene como objetivo presentar unos
trabajos, publicados originalmente en inglés, representativos de un
cambio en el rumbo histérico de la investigacién psicoldgica de la in-
teligencia. Al hilo de esta presentaci6n se traza un pequeiio recorrido
por los avatares histéricos de la psicologia de la inteligencia a través de
estos tiltimos afios. Como en cualquier disciplina cientifica, los cam-
bios sociales, politicos y cecnoldgicos han afectado notablemente a la
Psicologia y en el caso de la inteligencia estos efectos han sido muy no-
tables. En las décadas de los afios 60 y 70 el valor y la trascendencia so-
cial que tecibia el estudio de la inteligencia era muy escaso y cuando
to tenia se escondfa tras un fuerte debate ideoldgico. Lo que en afios
anteriores, desde la década de los afios 20 hasta después de la Segunda
Guerra Mundial, habia sido considerado una de las aportaciones mds
interesances de la psicologia, los test de inteligencia y su medida, el
cociente intelectual (CI), se convircié en el talén de Aquiles de la in-
teligencia. Las criticas a la utilizacién del Cl se generalizaron a las con-
cepciones cientificas clasicas de 1a inteligencia y poco a poco el estu-
dio de la inteligencia se redujo, en ef mejor de los casos, al estudio de
cémo se desarrollaba la inteligencia en los nifios, dejando de lado otros
aspectos, tan interesantes como ésre. En un reciente (y polémico) libro
publicado en EE.UU. y titulado The Bell Curve de R. Hertstein y Ch.
Murray (1994) y dedicado al cema de las celaciones entre la inceligen-
llcia y la estructura social norteamericana, se dice: «En los ultimos 30
aos el concepto inceligencia ha sido un “paria” entre las ideas cient/-
ficas». Esta afirmacién es facil de contrastar y propongo al lector que
busque en las libretias cuantos libros (en castellano) de psicologia
de la inteligencia, excluyendo los dedicados al estudio del desarrollo de
la inteligencia, encuentre y que tengan fecha de publicacién entre los
afios 60 y 80. Répidamente, quien haga esta prueba, se dard perfecta
cuenta de que hay un vacio que ilustra claramence lo que hemos dicho.
A partir de los aiios 80 parece que, al menos, la actividad editorial re-
toma su ritmo y se empiezan a publicar, de nuevo, textos dedicados a
la psicologia de la inceligencia. Esta revitalizacién se produce porque,
en los centros de investigacién mas avanzados, se retoma con fuerza la
investigacién sistematica de los procesos mentales que sustentan y de-
terminan el rendimiento cognitivo de los individuos humanos. Este
indice, la actividad editora, refleja un hecho muy importante que su-
cedié en el seno de la investigacién psicoldgica de la inteligencia a
consecuencia del impacco de la llamada «revolucién cognitivas en el
estudio de la inteligencia. Y de este impacto nos vamos a hacer eco en
este libro.
En la década de los afios 80 sucedieron algunos hechos que, si bien
no cambiaron el rumbo de las cosas, sf fueron lo suficientemente im-
portantes para que nos sirvan de recuerdo histérico y asi contextualizar
la época en la que se publicaron los tres trabajos que aqui se incluyen.
En EE.UU., la cuna de los cambios més importantes en la psicologia
moderna, Ronald Reagan llegaba a la presidencia y con él se iniciaria
una era politica de marcado cariz conservador. En los mismos BE.UU.
asesinaban a John Lennon. En Polonia surgia Solidaridad, Israel ocu-
paba el Libano, la casa Philips presentaba el compact-disc, se descubre
el virus del sida, Espafia entra a formar parte de la Comunidad Econé-
mica Europea y se produce la tragedia de Chernobil. Concluye la gue-
tra de Afganistan y Gorbachev es elegido presidente de la URSS.
En la historia interior de la psicologia parece que en esta década la
«revolucién cognitiva» no solamente se ha acabado, sino que ha triun-
fado y los argumentos bdsicos de este nuevo enfoque han afectado a to-
dos los espacios donde la psicologia tiene algo que decir. En estos afios
ya no es extrafio hablar de la cerapia cognitivo-conductual; el mejor
exponente del conductismo acabé cediendo al empuje de las ideas
nuevas en psicologia.
12EI auréntico desarrollo de 1a llamada psicologia cognitiva se pro-
duce durante la década de los afios 70, cuando desde la mds rigurosa
experimentacién psicolégica se exporta un modelo, el del procesa-
mienco de la informacién, que acabaria imponiéndose en disciplinas
can alejadas, aparentemente, entre sf como son la psicologia social y la
psicobiologia. El auge que va tomando el estudio de la memoria
humana, en detrimento del estudio de los procesos de aprendizaje, va
a facilitar la trasposicién de los mérodos experimentales basados en
la analogia «mente humana-ordenador» a la mayoria de subdreas de la
psicologia cientifica. Este fenémeno impacté directamence en el campo
de estudio de las diferencias individuales dando lugar a la llamada psi-
cologia diferencial-cognitiva (Andrés Pueyo, 1994).
La aplicacién del enfoque de! procesamiento de la informacién al
estudio de la inteligencia humana era la consecuencia natural dei de-
sartollo y expansidn de los modelos del funcionamiento cognitive que
se formulaban en la década de los afios 70. El interés por cémo los or-
denadores eran capaces de razonar, organizar el conocimiento, tesol-
ver problemas o aprender no dejo insensibles a los psicélogos preocu-
pados por conocer cémo funciona la inteljgencia humana. Los
modelos de la inteligencia cldsicos estaban estancados en el problema
de conocer y describir la estructura factorial de la misma y las pro-
puestas de R.B. Cactell y de J.P. Guilford de acercar la investigacién
experimental de la cognicién a la investigacién faccorial de la inteli-
gencia, al parecer, no fructifican y, asf, atin en los mismos aéios 70 pa-
tecfa que la investigaci6n experimental de la cognicién y la investi-
gacién factorial de la inceligencia no se iban a encontrar nunca. Sin
embargo, este contacto se produjo en la década de los afios 80 y con
unos resulcados que, después de la leceura de este libro, el lector ya es-
tard preparado para juzgar.
La sintesis de los estudios experimentales de la cognicién y los estu-
dios factoriales de la inteligencia cristalizé en la década de los afios 80.
Varias causas dan cuenta de ello y la raz6n de ser de este libro es ser
testimonio de aque! momento. Vayamos a las causas. Los primeros
psicdlogos inceresados en el estudio cientifico de la inteligencia que-
rfan describir cémo funcionaba la cognici6n humana. Spearman, el
mejor exponente de lo que hemos dicho, se esforzaba no sélo por des-
cribir la estructura de la inteligencia (factores g y s), sino también por
explicar cémo funcionaba y qué leyes regulaban su accidn (leyes de la
13neogénesis). Este espiritu se mantuvo en el seno de la tradicién anglo-
$ajona, pero pronto se sustituyé por el afin de describir la auténtica es-
tructura de la inteligencia humana por medio del andlisis factorial. El
resultado de esta cradicién fue la conceptualizacién estética de la inte-
ligencia en tanto que conjunto de capacidades responsables de la va-
riabilidad del rendimiento cognitive humano. El espiritu original por
descubrir las leyes que regulan el funcionamiento cognitivo se recu-
peré casi 60 afios mas tarde, cuando la psicologta cognitiva del proce-
samiento de la informacién permitié a los psicélogos explorar el fun-
cionamiento de los procesos cognitivos a pertit de un modelo redrico
y unos procedimientos cécnicos que ponen al alcance de la mano de los
investigadores algunos de los secretos del funcionamiento cognitive
del ser humano. Entre los primeros investigadores de la inteligencia y
los nuevos aires de la psicologia experimental surgieron unas coinci-
dencias que facilitaron el surgimiento del nuevo enfoque en el estudio
de la inteligencia que se ha denominado «psicologia diferencial-cog-
nitiva~. En este enfoque se trata de analizar la conducta inteligente en
términos de los procesos cognitivus que la sustentan, atendiendo a la
aparicién de las diferencias individuales en la conducta inteligente co-
mo uno de los principales datos que hay que «explorar» para com-
prender el funcionamienco de tas Ilamadas capacidades intelectuales.
Enel proceso de sintesis histérica que hemos descrito brevemente
una serie de autores jugaron un papel fundamental, Unus cuantos co-
mo pioneros de la nueva «psicologéa de la inteligencia» y otros ya
como ««lasicos» de este nueve enfoque al cual ofrecieron sus modelos
tedricos. Entre los primeros destaca E. Hunt, quiet se acerca al estu-
div de la capacidad verbal desde los paradigmas experimentales del es-
cucho del lenguaje (Hune, 1971, 1978) mostrande unos resultados
prometedores para aquellos que siguieran su camino. Enere los que
llamamos «clisicos» han destacado J.B. Carroll, D.K. Detterman ¥
RJ. Sternberg, a los cuales se suele citar como lus principales expo-
nentes de este nuevo enfoque.
La inteligencia, como ei resto de fenémenos psicoldgicos, es algo
tremendamente complejo. Diferentes argumentos, de ipo funcional,
histérico, social, etc., avalarian la afirmacién anterior. Sin embargo,
las explicaciones crentificas mas plausibles no son tan complejas como
la misma inteligencia, puesto que se limitan a ser un modelo de aquel
fenémeno. E] modelo cientifico actual disponible de la inteligencia
14debe explicar parsimoniosamente !a estructura de ésta, sus procesos y
los mecanismos funcionales que la componen, su accién adaptativa, su
desarrollo, etc. Un modelo de estas caracteristicas es el resultado de la
acumulacién de conocimientos cientificos, de la integracién de los
mismos y de su actualizacién constante; de ahi que ta «validez» del
mismo tenga una duracién temporal limitada, pero en cualquier mo-
mento la psicologia cientifica debe proveer a los estudiosos del com-
Pportamiento un modelo «simple» de la inteligencia, el «mejor» mo-
delo posible. Por supuesto que estos modelos estén afectadas por los
avatares cientificos propios de cualquier disciplina viva, como loes sin
ninguna duda la psicologia. Ademas es importante, por razones que
no desarrollaremos aqui, considerar que los modelos ciencificos deben
tender a la simplicidad, es decir, intentar explicar los fenémenos na-
turales en términos sencillos, faciles de manejar sin por ello perder la
precisién y exactitud que caracterizan a las ciencias en nuestros dias.
Desde los afios en que Spearman o Binet debatian sobre la natura-
leza real de la inteligencia hasta hoy, sin duda alguna tos modelos de
la inteligencia han avanzado notablemente. La incorporacién de los
conacimientos acerca de los procesos cognitivos pata la explicacién de
la inteligencia ha favorecido la integracién de dos corrientes de estu-
dio psicolégico que corresponden al estudio experimental de la cogni-
cidn y el estudio diferencial-psicomérrico de Ja inteligencia. Esta in-
tegracién nos permite tener un modelo de «cémo» funciona la
inceligencia que ademas incluye un esquema bdsico de «cémo» estd
organizada la misma. Los términos necesarios para comprender esta
nueva formulacién de la inceligencia son muy simples y son de dos ti-
pos. Por una parte, tenemos que considerar la inteligencia como una
capacidad o aptitud que permite a los individuos procesar la informa-
cién que reciben o de la que disponen (canto la externa como la infor-
maci6n «interna» de la que disponen en su memoria) por medio de un
conjunto de procesos cognitivos. El segundo cipe de términas son los
Procesos y operaciones cognitivas gracias a los cuales se construyen o
S$¢ ¢fean nuevos contenidos mentales que son aplicables telealdgica-
mente por fa conducta del individuo para determinados fines adapta-
civos o utilitarios. La forma en que accdan integtadamente los proce-
$0$ Cognitivos y que componen la inteligencia se debe comprender en
tanto que constituyentes de estadios y operaciones mencales que de-
penden simultdneamence de la naturaleza de la informacidn a tratar,
iede las exiyencias de la tarea, de la finalidad de la misma y del teperto-
tio de procesos que el sujeto (por experiencia anterior o de farma no-
vedosa) va a aplicar a esta tarea. En resumen, una combinacidn de es-
tadios que operan horizontalmente y de disposiciones que actdan
sobre éstos y con respecto a la tarea de forma vertical es la que ceal-
mente constituye la aucéncica natutaleza de la inteligencia.
Ya es el momento de exponer directamente las razones de este li-
bro. Son muy simples y responden a la necesidad de acercar al lector
en castellano aquellos trabajos que cepresencan de forma nitida esce
nuevo enfoque en el estudio de la inteligencia. La iniciativa partid de
la edicorial Paidés, que nos propuso presentar la traduccién de una se-
rie de articulos onginales, de reconocide impacto en el contexto de
nuestro interés, y presentatlos en castellano con el fin de que pudiése-
mos disponer de estos «clasicus» y asi conocer de primera mano los
pensamicntos y propuestas de las personalidades mds destacadas ac -
tualmente en la psicologia de la inteligencia.
El autor de estas lineas creyé, espero que con wn criterio compar-
tido por otros especialistas, que los tres trabajos que componen este li-
bro, cada uno de un autor reconocido, satisfacen suficientemente los
objetivos de esta obra.
Los trabajos en cuestidn son: de D.K. Detcerman «;Existe “g"/»,
publicado en inglés en Ja revisca Intelligence, en et afi 198H; el si-
guiente trabajo se titula «Apticudes cognitivas, factores y procesos»,
también publicado en la revista latelligence en 1988 y que fue escrito
por J.B. Carroll. Por ultimo, el trabajo de R.J. Sternberg, de 1985, e1-
tulado «La ceoria tridrquica de la inteligencia: comprender el autogo-
bierno mental», que forma parce de un libro del mismo autor donde
se describe extensamente su teoria de la inteligencia y las implicacio-
nes de ésta para su comprensién en el contextv aplicado. Este libro es-
td constituido por estas tres traducciones, realizadas y revisadas por el
autor en colaboracién con A. Rodriguez Fornells, al que desde estas
Iineas quiero expresar mi ayradecimiento. Junto a estos tres articulos
Se presenta un capitulo general donde se pretende describir ta historia
y la actualidad de los modelos diferenciales de la inteliyencia. Antes
de cada trabajo se incluye una breve referencia biog rdfica a lus autores de
los trabajos originales y por ilamo, en el capitulo 6, se presentan las
perspectivas y conclusiones de este nuevo enfoque, conclusiones que
necesarramente son abiertas, dado que la distancia cempural entre las
16Propuestas y sus resultados es todavia muy pequefia. Estoy seguro de
que el lector, en el futuro, si sigue atentamente el desarrollo de este
nuevo enfoque, podré juzgar con mejor criterio si la revolucién cogni-
tiva aporeé nuevas ideas al concepto de inteligencia o simplemente
sirvié para revitalizat la investigacién empirica en este campo.