EL MAESTROche Tu, que flee * do la sia ifm ada de Cristo y que has con- sagrado tu yo y tu vida al servicio de la humanidad; Tu, quethas sentido el imp Divino de dar h los demas de las bendiciones espirituales que ti has recibi- do; . ; . Qu. : . Tu, (que has asumido la posicién de maestro y direc- tor de las almas}sedientas que han venido a ti para beber; Escucha éste, Mi Mensaje especial para ti. Td eres Mi Ministro elegido. A ti te he elegido como canal por el cual Yo pueda derramar mis bendiciones sobre el mundo. Si, te he llamado aparte, y te he indicado la vasta tarea que hay que hacer, los millones de almas dormidas que estén esperando el toque que las despierte a la con- ciencia de su verdadero objeto de existir aqui, en esta vida. Te he mostrado cémo puedes ayudar en esta Tarea, y te he probado que verdaderamente puedes ayudar por el aprecio y la gratitud de aquellos a quienes he traido a ti, capacitdndote para ayudarlos. is aso al Serogces de f dyo Si, ti sientes que no estds trabajando en vano} y aunque el camino pueda parecer obscuro e incierto, y aunque los medios y la capacidad de continuar la obra no estén en evidencia, hay, sin embargo, algo que te compele a seguir, avisdndote que todo serd previsto a su causa que has convertido en tuya. Todo esto te lo recuerdo, aunque antes no haya tomado caracteres muy definidos en tu conciencia mortal, para prepararte para lo que ahora tengo que decirte. Porque YO deseo hacerte saber ahora que tengo un plan y un objeto definidos en todo esto, y ha llegado el momento en que debes convertirte en un cooperador consciente Conmigo para llevarlo a cabo. Has llegado ya a ese punto de tu vida espiritual en que tu verdadero lugar en Mi Plan y la plena comprensién de Mi Proposi- to te van a ser revelados, si estas palabras despiertan una respuesta real en tu coraz6n, y si tratas seriamente en adelante de obedecer las instrucciones que YO voy a darte aqui. iYO! {Quién soy YO? YO, que hablo con tanta autoridad y hago declara- ciones tan extraordinarias? {Quién soy YO, que puedo ensefiarte a ti, y que puedo prometer recompensas que sdlo Dios puede dar? jEscucha! YO SOY TU. Tu propio Verdadero YO.YO SOY tu verdadero YO, el Espiritu del Cristo, cuya llamada has escuchado; YO SOY tu Yo Superior, el Vivificador cuyo im- pulso has sentido; YO SOY tu Yo Divino, el dador de todas las bendi- ciones que has recibido; YO SOY DIOS, dentro de ti. No un espiritu separado, que more en algtin lado dentro de tu cuerpo, no. YO SOY Ti, tu mismo YO. Si, YO, DIOS, SOY TU, tu YO REAL, todo tt (cuer- po, mente, alma, conciencia, voluntad). YO, Dios, tu YO Real, hablo aqui estas palabras de viviente Verdad. la manera de saber que SOY YO, Quien habla, es xe ésta: - Stas palabras encuentran respuesta en ti, enton- ces es porque YO, tu Yo Real, es quien asi responde, llamando tu atenci6n para que asi puedas tratar de comprender todo el Significado de Mi Mensaje aqui oculto. Pero si no hay tal respuesta interior, y tu hermano intelecto te dice que ésta no es mds que otra tentativa para atraer tu interés hacia las ideas de otro maestro, y que tu ya tienes una filosoffa propia y no necesitas ense- fanza alguna de los demas —asi esta bien que sea. Pero sabe que no eres ti quien tal eleccién hace, sino YO, tu propio YO Omnisciente y todo Amor Uni- versal, es quien elige esto por ti. Porque para ti YO tengo otras ideas, y ya te daré a comprender Mi Propésito y laparte que td tienes en Mi Plan a su debido tiempo (cuan- do haya preparado plenamente tu_mente humana y tu conciencia_animica para que puedas recibir este cono- | cimiento). Sin embargo, si oyes una Voz interior, apenas audible, apenas inteligible, que te dice que sigas leyen- do porque quizd haya aqui algo de valor; aunque ti pienses que ya sabes cual es tu parte en mi Plan y que estas obrando de acuerdo con Mi Propésito; no te rehu- ses a seguir. Porque es Mi Voz la que asi trata de ser ofda en medio del tumulto de tu humana conciencia, suave- mente impulsdndote a mantener tu mente abierta, a escuchar cuidadosamente las palabras de verdad que te prometo aparecerén abundantemente, inconmensura- blemente, si es que verdaderamente quieres conocer la Palabra de Dios. Pero, con objeto de que puedas comprender todo el significado de lo que sigue, trata de imaginarte que el Yo que aqui habla es tu Verdadero YO, tu YO Superior; y aunque no lo creas por el momento, supén por ahora que es tu Yo Superior, esforzdndote asf por alcanzar la conciencia de ser ti, como si hablaras a tu mente mortal © a otra personalidad separada. Y si persistes en mantener esta conciencia mien- tras lees, obtendrés muchas mds bendiciones espiritua- les y cantards alabanzas al Sefior, agradeciéndole que este Mensaje haya llegado a tus manos. au piodlf q. we clubs Seger pee alu hey 10II Tu, mi elegido, que Me estas buscando, pero que todavia no Me has encontrado, salvo como algo intangi- ble que te ha levantado e inspirado y te ha guiado siem- pre adelante, por caminos cada vez mds angostos aun- que més brillantes, obligandote a auxiliar a todos los necesitados con quienes te has encontrado; Tu, que estds consciente de Mi como el Cristo de Amor dentro de tu corazén, y que tratas de difundir mi Mensaje de amor, sembrandolo en todos los corazones que parecen capaces de recibirlo. Td, a quien he venido en radiantes relampagos de luz, 0 en visiones, mientras dormias o vigilabas, como Verdad, iluminando tu mente de manera que en ese instante vefas claramente la realidad de Mi Vida Espiri- tual y la ilusoriedad de todas las cosas que atraen a los sentidos exteriores; y que estas ahora tratando de ense- fiar esta Verdad a los demas; Td, que te has hecho consciente de Mi como la Vida que mora dentro de ti, y que se te manifiesta como Po- 11der, permitiéndote no solamente mostrar Mi Vida en tu cuerpo como salud vibrante, sino que también te permi- te transmitir esta vida a los demas, vitalizdndolos, for- taleciéndolos y sandndolos, trayéndolos asi a ellos tam- bién a la conciencia de Mi Vida dentro de sus cuerpos; Tu, a quien he levado un poco mas alld, a quien he ensefiado el uso de algunas de las leyes de Mi Ser, en quien he vitalizado y despertado ciertas facultades in- ternas y poderes que aparentemente te colocan aparte de los demas, de manera que ahora te Hamas a ti mismo__ ocultista, y que estdés tratando de conseguir un comple- to dominio de estos poderes del_yo; Si, y hasta ti, Mi elegido, que estdés consciente de Mi como tu Yo Divino, como Dios dentro de ti, y que bebes libremente de Mi Amor, de Mi Sabiduria y de Mi Poder, y que estas ensefiando esta Gran Verdad atrayén- dote discfpulos que te proclaman iluminado. A todos Yo os traigo este Mi Mensaje de la Vida Impersonal. La idea de lo /Impersonal”}quizé no sea nueva para ti, Puedes haber ya meditado en ella. Puedes haberte esforzado mas o menos en vivirla. Y hasta puede ser que hayas tratado de ensefiarla a tus discfpulos, y sin embar- go, no tener una verdadera comprensién de su significa- do. Y ahora es Mi propésito hacerte consciente de ese significado, de manera que como instructor y director de los demas no tengas nunca mas la excusa de no saber- lo, cuando YO en adelante, desde tu interior, insista en que manifiestes y expreses Mi Vida Impersonal. Por- 12que YO, tu Verdadero Yo en adelante no me satisfaré con nada menos. Estudia, pues, cuidadosamente todo lo que ahora voy a decirte, y trata de esforzarte en comprenderme (su aplicacién personal y vital en lo que a ti respecta) antes de seguir adelante o de desecharlo, si llegas a sentir este impulso. YO voy a hacerte primeramente algunas pregun- tas. Al hacerte estas preguntas, YO me dirijo directa- mente a tu conciencia animica. Pero, necesariamente, tendrdn que pasar a través de tu mente mortal. Y como tu mente mortal no es mds que parte de tu yo mortal, o sea, de tu humana personalidad, es necesario que primera- mente aprendas los caminos y maneras de tu mente mortal y veas este yo tal como es en realidad —y no como tt te imaginas que es— y que contemples cémo esta personalidad tuya pretende sentirse herida y co- mienza a rebelarse y a negar, y a indignarse ante estas preguntas. Porque YO voy a herir en lo vivo, en lo mas hondo de su propia complacencia, de su propio sentido de rectitud, de su orgullo espiritual, de su amor por el poder, de su deseo de ser director, o de que se la estime sabia y buena —si algunas de estas cualidades existen todavia en tu personalidad. Pero, recuérdalo, no eres ti quien asi se siente herido, o quien se rebela o enoja. No es mAs que tu per- sonalidad. Porque ti eres realmente YO, tu verdadero YO, quien estd haciendo estas preguntas, y quien esta sacando a la luz estas cualidades, insistiendo en que 13todas ellas estén obstaculizando la Perfecta Expresién de Mi Vida Impersonal, y por consiguiente, esas cuali- dades en adelante no deben encontrar lugar alguno en tu vida. Si estudias y observas cuidadosamente los pensa- mientos y sentimientos que se despiertan en ti cuando leas esas preguntas, descubrirds quizds una faz de tu naturaleza que tt creias no estaba ya més en evidencia. Pero la misién especial de este mensaje es precisamente la de destacar plenamente esa faz y todas las demas faces de tu humana naturaleza que todavia no estén sometidas a Mi dominio, al dominio de tu propio y verdadero Yo. Esta es una ensefianza interior, y una obra interior es la que tendrdés ahora que hacer. Conmigo, tu propio Yo Superior, como Maestro. Si tu Alma responde, y libre de todo temor y valien- temente estés dispuesto a aceptar lo que YO tenga que decir, acaténdolo con la verdadera humildad y compren- sion del Espiritu, sabe que una Gran Dicha Espiritual te espera y que muchas Bendiciones seguirdn. Pero si tu personalidad insiste todavia en que el YO que habla aqui es meramente alguna persona, que se considera a sf misma ordenada por la Divinidad, que se esté tomando la libertad de mezclarse en tus asuntos privados; y que ti no necesitas contestar a las pregun- tas, ni siquiera a ti mismo, porque es cosa estrictamente privada; si tu personalidad con su mera mente humana asi te persuade —asi esta bien, y YO necesito ensefiarte en otra forma, mucho mas pesada y dura. Y sin embargo, todo esto es verdad; estas pregun-tas son una cosa privada. Son para ti y a nadie mas im- portan. Pero recuerda que SOY YO, m propio y verda- dero Yo, Dios dentro de ti, quien esté haciendo esas pre~ guntas. Y si YO te las hago es simplemente para que contemples tu ser, para que puedas ver claramente esa personalidad tuya, con todas sus humanas debilidades, faltas, defectos y malentendidos que todavia existen en ella, y que debido a tu incapacidad para percibir su sutil influencia sobre ti, te estén impidiendo la perfecta ex- presion de Mi Vida Impersonal, que debe expresarse en ti. Y si YO asi hago reventar las burbujas de todas esas ilusiones de la personalidad que todavia se encuentran flotando en tu atmésfera mental, después de demostrar- te su falta de realidad, es sdlo con el objeto de que si luego reaparecieren, puedas reconocerlas de inmedia- to y rehusarles toda intervencién en tu vida. Quizd tu personalidad te esté diciendo, conforme esto lees, que nada de esto se aplica a ti y que no necesi- tas estas instrucciones. iLo crees asi? Entonces, contestame a Mi, tu Ver- dadero Yo, estas preguntas, estudiando cuidadosamen- te tus sentimientos, después de buscarlos uno por uno en tu alma: jEstés seguro de que en esta obra que pretendes estar haciendo por la Humanidad no existe ningun inte- rés egofsta? jEstas seguro de que ti, personalmente, no te estas aprovechando del crédito que suscita la ayuda y el auxilio que estds prestando a tus estudiantes y seguido- res? 15 oO 2jEstés seguro de que no sientes cierto secreto pla- 3) cer y cierto orgullo en su actitud de veneracion, admira- cién y respeto hacia ti? Esas ensefianzas que estés dando a otros, jestds seguro de que provienen directamente de Mi, tu Yo (4) Divino? O no son mas que tus opiniones personales, 0 los pensamientos ¢ ideas que has recogido de otros ins- tructores humanos? iAcaso has manchado esta Obra que YO te he dado, introduciendo sutilmente tu personalidad en ella, tra- (5) tando mds bien de atraer su atencién hacia ti como ins- tructor, en vez de dirigirlos a Mi que moro en su interior y que SOY su tinico y verdadero Maestro? {Puedes decir sinceramente que solo tienes pensa- mientos de amor y que solamente hablas las palabras de (6)ctis cuando te preguntan o hablan de otros instructo- res 0 maestros, sin importar quienes sean ellos? Cuando te encuentras con otros instructores o di- rectores, {no tratas de ocupar el primer término?, ,no @) has deseado nunca impresionarlos con tu personalidad © poderes? Cuando te encuentras con alguno que ha llegado a cana mas elevada realizacién de Dios que ti mismo, gsientes solamente el amor mds puro y fraternal por é1? Cuando uno de tus propios discipulos, mediante tu auxilio, despierta a la conciencia de Mi presencia inter- na en él, y llega répidamente a una conciencia superior de Mis Poderes, mucho mayor que la que tt tienes, {te regocijas td sinceramente por ello y alabas sinceramen- te a Dios por las Bendiciones que ha derramado sobre él? 16jEstas seguro de que todo cuanto haces, lo haces sin pensar para nada en la recompensa, preocupdndote absolutamente nada de los resultados, descansando solamente en la conciencia de que YO lo estoy haciendo todo y que solo YO soy responsable? {Comprendes y realizas que tu y tu personalidad sois uno, que no hay diferencia; y comprendes plena-(11) mente tu propio yo, y conoces tu identidad Conmigo, Dios, tu YO Divino? En todas tus ensefianzas acerca de estas Verdades superiores, {reconoces en tu Alma la Unidad de Todo; > que YO, Dios, SOY todo lo que hay; que no hay separa- (12) cién; que todo lo que ti haces Dios lo hace; que tt eres UNO CON DIOS, y que todos los poderes de Dios son tus propies poderes? jEstds seguro, oh ti, Mi elegido, de que todas las cosas que estas ensefiando ti mismo SON y de que estas haciendo, manifestando y VIVIENDO todo lo que pre- dicas a los demas? Si en verdad puedes contestar satisfactoriamente a Mi, tu Yo Superior, todas estas preguntas, entonces, este, Mi Mensaje, no es para ti, y no necesitas leer mas; porque entonces ya sabes todo lo que YO voy a decir. Pero si tt no estas seguro, y comprendes que tu per- sonalidad es todavia un factor més o menos dominante en tu vida, entonces es conveniente que sigas leyendo. Porque ahora estoy llegando a la parte vital de Mi Mensaje. 17Ill Oh, Mi elegido, gcémo decirtelo? ~Céomo poder penetrar a través del muro levantado por el inconscien- te sentimiento de tu propia virtud, de tu autosuficien- cia, de tu orgullo e independencia espiritual, que tu per- sonalidad ha quizd levantado en torno tuyo, y que tan a menudo impide que Mis Palabras de Verdad, habladas por boca de otros lleguen a tu conciencia animica? {Como poder dominar los sentimientos que atin ahora mismo, puede ser, estén inundando tu conciencia humana, despertando tu ira y tu oposicién, para que no puedas comprender el profundo significado de Mi Mensaje? Si esos sentimientos se manifiestan en tu corazén, {no ves que es porque tu personalidad estd todavia demasiado en evidencia, ya que asf consigue dominar- te? ,No puedes comprender que hasta que las palabras como éstas, vengan de donde vinieren, solo creen en ti una comprensién simpatica de su sana y afectuosa in- tencidn; y que, si algtin sentimiento de rebeldia o de 19antagonismo surge, y mientras ti no puedas reconocer- los inmediatamente transmuténdolos en amor y grati- tud hacia Mf por indicarte asi tus debilidades, no podrds ser un canal verdaderamente puro por el cual puedan fluir las ensefianzas de Cristo? {No comprendes que cuando uno se erige en maes- tro de otros, y se pone a obrar como mediador entre ellos y Dios, interpretando para ellos Su Voluntad y Su Pro- pdsito, te echas sobre ti una tremenda responsabilidad —salvo qué uno more plenamente en la conciencia de Dios y de su Amor, de manera que Dios pueda hablar y obrar por intermedio de la mente y el cuerpo humano sin obstaculos de ninguna clase? Y con objeto de capacitar a los que sincera y verda- deramente estan buscando a Dios, a aquellos que hon- damente desean morar en El, dejando que Su Concien- cia more en su corazon, si sdlo supieran cémo conse- guirlo; a aquellos que no desean mds que conocer su voluntad para obedecerla y servirlo en todas las formas posibles —con objeto de capacitarlos para que conoz- can que YO (el verdadero Ser Interno) SOY DIOS, sin el menor asomo de duda— estas palabras han sido escri- tas, Hay muchos que profesan conocerMe, que son Mis fieles, que aseguran estar dando Mi ensefianza, y que estan a la vez ensefiando y predicando el camino de la salvacién; pero que externamente y en sus mds intimos pensamientos estén tan imbuidos y empapados de su propia personalidad, estan tan influenciados y domina- dos por ella, que no Me conocen aunque asi lo procla- 20men diariamente diciendo que YO SOY quien los dirige y que YO SOY quien habla por ellos. Y para éstos tam- bién, estas Mis Palabras han sido escritas. Es verdad que YO hablo por fa boca de ellos; pero no como ellos lo entienden. Pero ellos, personalmente, aungue siempre enorgulleciéndose por los hermosos pensamientos que fluyen de sus bocas a veces y de la ayuda que esos pensamientos representan para los dems, no saben en realidad cudndo SOY YO quien habla y cuando sus personalidades. Porque si ellos Me cono- cieran en verdad, no sentirfan el menor orgullo, y no se sentirfan halagados por ninguna alabanza_personal- mente; sino que simplemente se mantendrian humilde- mente en la conciencia de que YO SOY quien lo hago todo, y dejarfan que Yo y Mi Amor Impersonal rigieran todos los detalles de sus vidas. Pero, no obstante, YO hablo por intermedio de esas personalidades vanidosas, y hasta por intermedio de los hipdcritas y maestros e instructores de falsas doctrinas, utilizando todo medio para llevar a las almas que bus- can esas faces de la Verdad que necesitan, para guiarlas a la conciencia de su unidad Conmigo. Porque, recuér- dalo, la Verdad no es siempre azucarada, y frecuente- mente es necesario que uno pruebe lo amargo para que asi pueda aprender a apreciar lo dulce y puro. jNo sabes que es gracias a tus pecados, a lus erro- res, a tus decepciones, a tus falsos amigos, a las falsas doctrinas, como has aprendido y te has fortalecido? Es asi principalmente como YO ensefio. Y YO te guio por esos caminos para que puedas aprender a distinguir lo 21verdadero de lo falso, las realidades de la vida de las falacias y de las ilusiones. Y el sufrimiento y el dolor que este aprendizaje entraiia, no es mas que el fuego de Mi Amor ardiente en tu corazon, quemando las lujurias de la carne, los errores de tu pensamiento, el egoismo, el orgullo, el interés, implantados y nutridos alli por la personalidad, todo lo cual debe ser reducido a cenizas para que Mi Vida Impersonal pueda manifestarse libre y plenamente. Y esta personalidad, ,qué es? No es mds que eso que ti, con tu mente humana, te imaginas que eres. Es la criatura que muchas edades hace diste ti mismo a la luz, y que has estado nutriendo y alimentando, amando y defendiendo, y en la que has confiado y creido, como si fuera real, todos estos aiios; ese hijo tuyo, la creacién de tu humana mente, nacido del pensamiento, cuando cais- te de tu conciencia de Mf en el Edén después de tu primer pecado, y que desde entonces has alimentado y criado con la idea de que ti estabas separado de Mi, y de que YO, DIOS, estaba disgustado contigo y que he estado continuamente castigéndote por haber comido del Arbol del Conocimiento del Bien y del Mal. Y si YO te he permitido amar y confiar y obedecer a este hijo imaginario que ahora se ha desarrollado en tu conciencia hasta su plena madurez, convirtiéndose en fuerte y poderoso en forma tal que ahora domina a su padre con vara de hierro, fue sdlo con el objeto de que gracias a los pecados y errores a que te arrastro y al consiguiente sufrimiento que te trajo, YO pudiera des- pertarte a la realidad de su irrealidad, al hecho de que 22esa personalidad no tiene existencia sino en tu mente, y que sdlo proviene de tu constante pensar en que ti eres esa personalidad y que estas separado y aparte de Mi. Y si se ha despertado en ti ya un vago sentimiento de su irrealidad, y te estds ya volviendo hacia Mi, bus- cando libertarte de su tirania, sabe que esto no podra nunca ser hasta que estés plenamente consciente de que ti y YO, Dios dentro de ti, somos UNO; que no hay separacién; que todo YO SOY ti eres; que todo cuanto YO tengo es tuyo; que todo poder te es dado en los cielos y en la tierra; y que ya que YO SOY y tu tienes que ser Sefior, y que esta personalidad tuya no es mds que una faz de pensamiento mortal que YO permiti naciera en tu humana conciencia, con objeto de desarrollar tu cuerpo y tu mente lo bastante como para que pudiera contener y expresar plenamente Mi Vida Impersonal. Tui tienes que ser el Sefior, absoluto Sefior de ti mismo. Pero tii no puedes serlo hasta que te Conozcas a ti mismo, y conozcas también todas la fases de tu perso- nalidad; todas tus fuerzas y todas tus debilidades, todos tus poderes, fisicos, mentales y espirituales; todos tus defectos humanos; todas tus tendencias y limitaciones, y puedas ver y conocer tu personalidad en la misma forma que los demas la ven y conocen, con ambos ojos, y a la vez con el juicio del mundo y la comprensién del Espi- ritu. Es necesario que conozcas perfectamente todo lo referente a esa personalidad que tan sutil y artificiosa- mente se ha adherido a tu conciencia, en tal forma que ahora apenas puedes decir cuando es ella la que se esta manifestando y cuando YO, tu Verdadero Ser. 23Y asi, esta personalidad tuya debe ser dominada, debe ser sumergida en Mi Impersonalidad, antes de que Mi Verdadera ensefianza pueda surgir. Ti tienes que realizar, animicamente, que ti, el ti Impersonal, el verdadero ti, es uno con el de tu hermano, asf como tt eres Uno Conmigo, y debes aprender a verme a Mi como su yo Impersonal, bajo todas las ilusiones de su perso- nalidad, no permitiendo que ningiin reflejo de tu propia personalidad nuble la clara visidn de Mf en su interior, pacientemente esperando la hora en que él, gracias a ti, quizd pueda también ser llevado a reconocerme a Mi, morando en su corazon. En lo Impersonal, todo es UNO. Cuando puedas penetrar en la unidad de la conciencia Impersonal y puedas morar alli a voluntad, habrds entrado en Mi Reino y habraés encontrado a Dios; y desde entonces podras verlo y conocerlo en Todas Sus creaciones. Porque la Conciencia Impersonal es Mi Conciencia, y Mi Reino es el reino de Mi Ser; y como YO SOY la Vida de todas las cosas, una vez que has entrado en este reino te con- vertirés en Uno Conmigo, y por lo tanto en uno con todos los seres; y entonces podras salir y entrar y encontrar pasto. Porque Yo te alimentaré con el Pan del Espiritu y con el Vino de la Vida, que fluird por ti en rios de Amor Viviente, bendiciéndote a ti en toda forma e igualmente a todos aquellos con quienes te pusieres en contacto. 24IV Te digo, pues, todas estas cosas, elegido Mio, para que puedas esforzarte incesantemente en conocer esta personalidad, conociendo todas sus sutilezas egoistas, muchas de las cuales estén tan profundamente ocultas dentro de tu conciencia, que ni siquiera estas seguro de que existen. Porque fuiste ti quien las escondi6 alli hace largas edades, habiéndote engafiado y crefdo que eran buenas y necesarias en tu vida; y por lo tanto las hicistes parte de tu naturaleza. Pero ahora, con Mi ayuda, vas a cazarlas todas y arrojarlas fuera de ti, de manera que Mi Naturaleza Impersonal pueda manifestarse libremen- te. Y como YO te he elegido y llamado aparte y te he permitido creer que tienes un trabajo especial que ha- cer, deseo que estés absolutamente seguro de que es Mi Voz la que has estado oyendo mientras hacias ese traba- jo, y no la voz de tu personalidad. Si YO debo ser tu Maestro, y ti quieres que te guie y dirija en tu trabajo, y en verdad deseas servirme a Mi, entonces todos los atri- 25butos de tu personalidad humana deben rendirse a Mi, y tu debes compelerlos a ellos. Mientras permanezca en ti un solo deseo o instinto egoista, es seguro que tu obra quedardé manchada y tefiida por él, y estards atin bajo el dominio de la personalidad. Hay muchas formas en que trataré de manifestarse; pero YO estoy siempre aqui, y te lo indicaré cada vez claramente, si Me lo preguntas. Y te lo diré, no con autoridad insistente y dominadora, ni tampoco con alboroto interior, sino como una insinuacién suave y gentil, que no podras dejar de comprender si estas siem- pre alerta y escuchas Mi Voz, que esté siempre aconse- jando y dirigiendo a todos aquellos que descansan en Mi con viviente fe y confianza. Y aprenderdés gradualmente que mi obra sdlo pue- de hacerse en el espiritu del Amor Impersonal de tu coraz6n. Solamente en tal espiritu inegoista, desintere- sado, que nunca se preocupa del resultado, puedo YO expresarme por medio de ti. Debes someter todo a Mi, debes dejarme gobernar, dejando todas las consecuen- cias a Mi cargo. Y cuando hayas aprendido a hacer esto, entonces YO despertaré en ti Ja conciencia de tu identidad Con- migo, de Mi Poder, y de Mi Sabiduria y de Mi Amor dentro de ti. Y entonces, gradualmente, tu vida perso- nal se sumergiré en Mi Vida Impersonal, y serds cons- ciente de toda tu Herencia Divina, y de la verdadera Obra que Yo habfa elegido para ti. Pero hasta que tu humana conciencia se haya su- mergido en Mi Conciencia Divina, hasta que puedas 26conocer verdaderamente y usar tus Poderes Divinos, seria bueno que vivas en tal forma que no parezcas poseer mas poderes o sabiduria de la que tienen tus semejantes. Seria mejor que te pruebes a ti mismo primero que pue- des vivir y ser todas estas cosas que ahora ves mds o menos claramente con el ojo interior, antes de que te pongas a darlo a los demds como Verdad que proviene directamente de Dios. Porque ti sabes que es solamente la personalidad la que se erige a sf misma como autoridad, o se pretende sabia en espiritu como elegida de Dios, siendo su porta- voz. Y, recuérdalo, YO SOY en tus discfpulos y segui- dores, lo mismo que YO SOY en ti. Muy frecuentemen- te, los hermosos pensamientos que emanan de los ins- tructores no llevan consigo la conviccién de la verdad, porque SOY YO quien hace que sus oyentes vean clara- mente que no estan viviendo las verdades que ensefian; © que sus personalidades son demasiado dominantes, o que estén demasiado deseosos de producir impresién con su sabidurfa, su espiritualidad o sus poderes; o que solamente e inequivocamente estan tratando de dirigir a sus seguidores con objeto de sacar de ellos todo el dinero posible, engafidndolos con razonamientos tales como ese de que “el trabajador es digno de su salario” o de que “el que da ensefianzas espirituales debe recibir en compensacion paga material” siendo esa la ley. jAh!, joh ti, Mi elegido! jestds bien seguro de que ninguno de tus discipulos nota esas cosas en ti? Estas bien seguro de que la cuestién financiera no es la que ocupa el lugar més prominente en tu mente y que el deseo aTde servirme a Mi es sélo una cosa secundaria? ;Puedes decir en verdad que Me abandonas a Mi todos tus pro- blemas materiales, sabiendo que YO siempre proveeré a todas tus necesidades, sf, a todos tus deseos? Y si es asi, ,porqué seria necesario obrar o aceptar pagos por el auxilio que Yo dé por tu intermedio? {No es Mi servidor digno de su salario, y no proveeré YO a todo? Considera los lirios del campo y las aves del aire. { Quién los viste y alimenta? Y jno eres ti mds que ellos? No eres ti para Mi mds que ellos? jOh ti de poca fe! jEscucha! Sélo si das libremente de la plenitud del Amor, sin pensar en recompensa, es como puedes reci- bir de Mi Abundancia. Pero quizd ti no puedes aceptar esto ahora. Y si es asi, estd bien. Porque Yo deseo que asi sea y que tt apren- das la Verdad por otros conductos. Ti debes todavia atenerte a la creencia de que hasta los servidores del Sefior deben vivir, y que mientras vivan y trabajen en el mundo material, estén obligados a seguir los métodos mundanos, aunque sea en su trabajo espiritual. Y esto es verdad, pero no como tt lo entiendes. El tiempo vendra, sin embargo, cuando a fuerza de prue- bas y sufrimientos aprenderds a conocer Mis Caminos, cuando podras ver con Mis ojos impersonales y a cono- cer mi entendimiento Impersonal, dejando a un lado todos los intereses personales en tu ensefianza, lo mis- mo por lo que toca a sus resultados que a la recompensa que puedes recibir por ella —llegaré el momento en que conocerés como utilizar los instrumentos mundanos en tu obra espiritual. 28Pero quizds, antes de que eso llegue, puede ser que YO tenga que guiarte por el Aspero Sendero que condu- ce a la elevada montajfia de la realizacion espiritual (por el aspero sendero de la amarga experiencia). Si, puedes llegar también a la cumbre por ese camino. Pero, jcudn larga y dolorosa es la jornada! Quizd, dirds, ese es el tinico camino en que uno puede aprender. No, sélo es uno de los caminos en que ti puedes aprender —el camino duro y dspero. Es el camino per- sonal, y para algunos puede ser necesario seguirlo. Pero YO estoy tratando precisamente de salvarte de ese camino. iNo has visto la triste suerte de algunos de aquellos a quienes YO guié asi a la elevada montafia, a aquellos que subieron por el dspero sendero —y que cayeron, cuando ya estaban cerca de su cumbre? jSi! Nadie puede elevarse tanto que no pueda caer; porque la personalidad estd siempre en evidencia en su jornada. Es el adversario que se opone a cada paso. Es ella la que hace tan duro el camino. Y mientras quede algo de ella, de egofsmo, siempre habré oposicién en el camino. YO puedo guiarte hasta la cumbre de la monta- fia, y mostrarte todos los reinos del aire, de la tierra, del fuego y del agua, y hacerte presente de ellos y decirte que todos son tuyos para que los uses. Pero si ti no has purgado completamente tu corazén y tu mente y tu alma de todo egoismo, de todo yo separado, he aqui que de pronto la personalidad aparece y habla tras de ti, y tan sutilmente imita Mi Voz, que tt creerias que en verdad 29SOY YO. Y cuando te hable y te diga que uses esos rei- nos para glorificarte a ti mismo, y que habiendo ascen- dido a tal altura esa es tu recompensa, bien pudiera ser que conffes en su voz y la obedezcas; si, al igual que aquellos que cayeron de su elevado estado para hundir- se en la profunda obscuridad del exterior. Y para salvarte de esa jornada y de esa tentacién, oh mi elegido, es que aqui te extiendo mi mano y te ofrezco el camino Hano y facil. Si moras en la conciencia de Mi, tu Verdadero Yo interno y dejas que Mi Amor Impersonal more en ti, permitiéndole fluir libremente, sin obstdculo, sin limi- tacién, desde el fondo de tu corazén, para que bendiga a todos aquellos con los que te encuentres —si quieres hacer esto, puedes pedirme a Mi cualquier cosa que quieras, y sera hecha para ti. Porque si puedes armonizar plenamente tu vida con Mi Vida, eliminando todas las fases de tu egofsta perso- nalidad, si simplemente echas a un lado todas tus ideas personales, creencias y opiniones, de manera que Mi Vida, que no es otra cosa que Mi Amor VIVIENTE pueda fluir libre y plenamente expresdndose por tu interme- dio, el vacfo que quede al desaparecer tu vida personal, seré llenado inmediatamente con Mi Vida Impersonal, en la misma forma en que el aire fluye inmediatamente en donde se haya producido un vacio. Porque Mi Vida Impersonal es la substancia real de todas las cosas y esta siempre tratando de expresar externamente su verdade- ra naturaleza; y todo lo que de ella sea necesario para llenar y completar Mi Divina Naturaleza en ti, fluira 30seguramente en ti y por ti, siempre que la dejes. Y armo- nizara contigo y te llenard de bendiciones, y hard mani- festarse tangible y externamente todas las cosas buenas necesarias para completar y redondear tu humana natu- raleza, todas esas cosas que constituyen la Dicha, la Satisfaccién y la Paz dentro de tu alma. 31jTe hablaré ahora acerca de Mi Vida Impersonal, de cémo puedes vivirla conscientemente Conmigo, y ser completamente Uno Conmigo, tu Verdadero Ser, tu Padre en los Cielos? Entonces, escucha. Y medita larga y seriamente en todo lo que ahora voy a decirte. No saltes ninguna sen- tencia y pensamiento, hasta que Mi Significado te sea claro. Yo no quiero otra cosa que SER y EXPRESAR Mi Ser en y por ti. Mi Ser es puramente impersonal, porque es el verdadero yo de todo ser humano. YO SOY el puro, el perfecto; la naturaleza interna personal de todo indi- viduo humano, que anima sus cuerpos fisicos con obje- to de convertirlos en medios para la expresién de Mis Divinos atributos tanto en la tierra como en el Cielo. Por lo tanto, ti también, no debes buscar otra cosa mas que ser y expresar tu Verdadero Ser, que es YO, tu Ser Divino e Impersonal. Y haciéndolo asf unirdés tu propésito con el Mfo, tu voluntad con Mi Voluntad, tu naturaleza con Mi Naturaleza; y asi seraés Uno Conmi- 33go, y seremos Dos-en-Dos, el estado Divino sobre la tierra. Y con objeto de que esto pueda realizarse, debe- mos primeramente purgar tu coraz6n, y luego tu mente, y més tarde tu cuerpo, de todo sentido e inclinacién de tu ser personal. Y esto sélo puede realizarlo Mi Santo Amor Impersonal, con el que YO llenaré tu corazén, de mane- ra que no quede sitio alguno para nada personal. Y con el corazén purificado y dulcificado, la mente no atraera més que pensamientos puros y dulces: Mis Pensamien- tos, que siempre son Pura Sabidurfa. Y Naturalmente, entonces, no estando ya mds dominado o influenciado por erréneos pensamientos, tu cuerpo vendrd a ser el templo de Mi Vida, cuyo poder vitalizante, purificador y perfeccionante, arrojard de él toda inarmonia y toda discordancia. Y entonces, con s6lo Mi Amor en tu cora- z6n, y Mis Pensamientos en tu mente, y Mi Vida en tu cuerpo, conocerds que YO SOY tu propio Verdadero Ser —porque entonces no habrd ningtin otro Yo. Entonces YO SOY, tu verdadero Ser, ira al Mundo, pero no serd de él. Ya no serds mds atraido por él. Pero ti verds con Mis Ojos, y oirds con Mis Oidos y conocerds con Mi Entendimiento todas las cosas. Ya no verds mds solamente la apariencia externa de las cosas, sino que las verds en su realidad. Nada de lo pasado, del presente o del futuro, se te ocultard; porque las limitaciones de la naturaleza humana ya no estardn mas alli, y en el Espi- ritu no hay tiempo, ni espacio, ni personalidades, ni separacién: TODO ES UNO. Y ti marchards adelante con la conciencia de este 34gran Amor Impersonal en ti, la verdadera e intrinseca substancia de tu naturaleza, y por su medio YO elevaré, fortaleceré, ayudaré y bendeciré a todos aquellos a quienes Yo guie o atraiga a ti. Como el amor es tu natu- raleza, y como en el mundo terrestre en el hombre el Amor es la pura y perfecta expresiédn de Mi Vida, esté siempre tratando de manifestarse por él en expresién completa y armoniosa. Y con la conciencia de tu Divinidad y de] Divino Poder de Mi Amor, en vez de demostrarlo 0 ponerlo en evidencia en forma personal, lo dards, ayudards y ben- decirds impersonalmente, tratando de remover todos los grilletes, todos los obstdculos y todas fas limitacio- nes que en alguna forma impidan a Mi Vida manifestar- se y expresarse en tus semejantes. Y asf te convertirds en Uno con la Vida Unica, con Mi Vida Interna e Impersonal; y por lo tanto en Uno Conmigo, el Manantial y la Fuente de toda bendicidn, terrestre o Divina. Y por lo tanto ya no buscards ni tratards mds de ensefiar o guiar a otros, porque habiéndote convertido en Impersonal, y siendo Impersonal, Me dejards que dentro de ti mismo y dentro de los otros sea YO el que ensefie y dirija. Ya no buscards nunca dirigir, sino se- guirme a Mi. Y tampoco tratards mds ni siquiera de ser sabio, 0 bueno, 0 fuerte, 0 rico, o sano, o feliz, porque ti eres toda esas cosas siendo Uno Conmigo, que Soy la esen- cia interna, de la cual todas esas cosas no son més que la manifestacién externa. 35Y aprenderds que toda inarmonia presagia la armo- nia venidera; que toda escasez no es mds que Mi impul- so hacia una mds completa expresién; que toda obscuri- dad no es mds que la sombra indicadora de la Luz; que toda debilidad es parte de los efectos del ejercitamiento que resultard en una voluntad perfecta; y que todo mal es bueno y necesario —para aquel que ha alcanzado Mi Conciencia Impersonal y Mi punto de vista. Y asi irds a tus ocupaciones, sean Jas que fueren, porque entonces conocerds que toda ocupacién es mi ocupacién y en vez de buscar y luchar por conseguir para el yo las bendiciones espirituales que estén en la cumbre de la montafia, cesards en toda busqueda y en toda lucha, y te habrds olvidado de ti, y sdlo sentirds el impulso de dar, de dar y de dar de ese Gran Amor inte- rior, dejando que él despierte, auxilie y fortalezca a las almas que estan luchando en torno tuyo, tratando de comprender y obedecer Mi Presencia en sus corazones, pero que debido a la falta de ejercitamiento y madurez de sus mentes, no comprenden esa sensacion de Mi en su interior, y por lo tanto tampoco comprenden Mi Mensa- je cuando trato de hacérselo conocer internamente. Y YO las guiaré a ti, 0 te llevaré a tia ellas, de manera que pueda primeramente ensefiarles desde el exterior, por tu intermedio. Y asf como YO te he trafdo este Mensaje Mio en estas palabras, asf también daré Mi Mensaje a muchos centenares de otros por medio de las palabras que YO hablaré por medio tuyo. Pero esto no podra suceder como lo deseo hasta que YO pueda vivir Mi Vida Impersonal en ti, hasta que ti 36hayas sometido tu personalidad humana a Mi Divina Impersonalidad. Y hasta que ti mismo determines con todo el poder de tu voluntad, y lo desees con toda el hambre de tu alma, vivir la Vida Impersonal y hacer que tu yo personal me siga y me sirva, a Mf, tu propio, Ver- dadero Ser Impersonal, no podré darte ni siquiera un vislumbre de Mi Verdadero Significado, Pero una vez que te dé ese vislumbre, oh Mi elegido, su gloria sera siempre contigo, y te guiaré adelante, siempre adelan- te, hasta que todo Mi Significado Me sea arrancado por el poder del Deseo de tu Alma. Este es Mi Mensaje. Su objeto es despertar en ti este Deseo, el Deseo de vivir la Vida Impersonal Esta es una ensefianza superior, y es s6lo para aquellos que puedan verla, para aquellos a quienes Yo he preparado y madurado para su recepcién. Sin embargo, para éstos no es mas que la puerta por donde vendran ensefianzas mucho mas elevadas, que YO les daré directamente desde dentro de sus propias Almas —aquellos que vengan a Mi con fe y confianza amantes, y que estén dispuestos a vaciar sus corazones de todo yo, para que YO pueda llevarlos con Mi Santo Amor Impersonal. Porque YO aqui te prometo, que YO tengo para aquellos que quieren venir a Mf, por el sendero sencillo, suave e Impersonal, grandes maravillas y Bendiciones Espirituales que serén para ellos un manantial inagota- ble de Felicidad; y que YO les daré, morando YO en ellos y ellos en Mi, el empleo ilimitado de TODOS Mis Poderes y Atributos Divinos. 37hayas sometido tu personalidad humana a Mi Divina Impersonalidad. Y hasta que ti mismo determines con todo ef poder de tu voluntad, y lo desees con toda el hambre de tu alma, vivir la Vida Impersonal y hacer que tu yo personal me siga y me sirva, a Mi, tu propio, Ver- dadero Ser Impersonal, no podré darte ni siquiera un vislumbre de Mi Verdadero Significado. Pero una vez que te dé ese vislumbre, oh Mi elegido, su gloria sera siempre contigo, y te guiard adelante, siempre adelan- te, hasta que todo Mi Significado Me sea arrancado por el poder del Deseo de tu Alma. Este es Mi Mensaje. Su objeto es despertar en ti este Deseo, el Deseo de vivir la Vida Impersonal. Esta es una ensefianza superior, y es sélo para aquellos que puedan verla, para aquellos a quienes Yo he preparado y madurado para su recepcidn. Sin embargo, para éstos no es mas que la puerta por donde vendrdn ensefianzas mucho mds elevadas, que YO les daré directamente desde dentro de sus propias Almas —aquellos que vengan a Mi con fe y confianza amantes, y que estén dispuestos a vaciar sus corazones de todo yo, para que YO pueda Ilevarlos con Mi Santo Amor Impersonal. Porque YO aqui te prometo, que YO tengo para aquellos que quieren venir a Mi, por el sendero sencillo, suave e Impersonal, grandes maravillas y Bendiciones Espirituales que serdn para ellos un manantial inagota- ble de Felicidad; y que YO les daré, morando YO en ellos y ellos en Mf, el empleo ilimitado de TODOS Mis Poderes y Atributos Divinos. 37