Dedicamos esta edición especial a contemplar a María Santísima, Mediadora de todas las Gracias, cuya festividad celebraremos el 7 de noviembre y fue instituida por el Papa Benedicto XV en 1921. Esta festividad nos invita (y nos recuerda) a recurrir siempre con confianza a la mediación de la Madre del Redentor.
A comienzos del siglo XX el Papa Pio X, a través de su Encíclica "Ad Diem Illum Laetissimum" del 2 de febrero de 1904 había declarado:
"La Santísima Virgen es Dispensadora universal de todas las gracias, tanto por su divina Maternidad: que las obtiene de su Hijo, como por su Maternidad espiritual: que las distribuye entre sus otros hijos, los hombres. Esto lo hace subordinada a Cristo, pero de manera inmediata. Y ello por una específica y singular determinación de la Voluntad de Dios, que ha querido otorgar a María esta doble función: ser Corredentora y Dispensadora, con alcance universal y para siempre". (Pío X, Encíclica "Ad Diem Illum Laetissimum", 2 de febrero de 1904).
El Concilio Vaticano II da a la Virgen María el título de "Mediadora" al afirmar que "continúa procurándonos con su múltiple intercesión los dones de la salvación eterna" (Lumen Gentium, 62). Y con el título de "Madre en el orden de la gracia" (Lumen Gentium, 61) el Concilio enseña que la Virgen coopera con Cristo en el renacimiento espiritual de la humanidad.
En la Encíclica Redemptoris Mater San Juan Pablo II nos ha enseñado que "la Mediación de María está íntimamente unida a su maternidad y posee un carácter específicamente materno que la distingue del de las demás criaturas" (Redemptoris Mater, 38)
La Mediación de María no ofusca ni disminuye "la única mediación de Cristo, sino que manifiesta su eficacia...; favorece, y de ninguna manera impide, la unión inmediata de los creyentes con Cristo" (Lumen Gentium, 60). En realidad, la mediación materna de María es un don del Padre a la humanidad. Por esto el mismo Concilio concluye que "la Iglesia no duda en atribuir a María esta misión subordinada, la experimenta sin cesar y la recomienda al corazón de sus fieles para que, apoyados en su protección maternal se unan más íntimamente al Mediador y Salvador" (Lumen Gentium, 62)Dedicamos esta edición especial a contemplar a María Santísima, Mediadora de todas las Gracias, cuya festividad celebraremos el 7 de noviembre y fue instituida por el Papa Benedicto XV en 1921. Esta festividad nos invita (y nos recuerda) a recurrir siempre con confianza a la mediación de la Madre del Redentor.
A comienzos del siglo XX el Papa Pio X, a través de su Encíclica "Ad Diem Illum Laetissimum" del 2 de febrero de 1904 había declarado:
"La Santísima Virgen es Dispensadora universal de todas las gracias, tanto por su divina Maternidad: que las obtiene de su Hijo, como por su Maternidad espiritual: que las distribuye entre sus otros hijos, los hombres. Esto lo hace subordinada a Cristo, pero de manera inmediata. Y ello por una específica y singular determinación de la Voluntad de Dios, que ha querido otorgar a María esta doble función: ser Corredentora y Dispensadora, con alcance universal y para siempre". (Pío X, Encíclica "Ad Diem Illum Laetissimum", 2 de febrero de 1904).
El Concilio Vaticano II da a la Virgen María el título de "Mediadora" al afirmar que "continúa procurándonos con su múltiple intercesión los dones de la salvación eterna" (Lumen Gentium, 62). Y con el título de "Madre en el orden de la gracia" (Lumen Gentium, 61) el Concilio enseña que la Virgen coopera con Cristo en el renacimiento espiritual de la humanidad.
En la Encíclica Redemptoris Mater San Juan Pablo II nos ha enseñado que "la Mediación de María está íntimamente unida a su maternidad y posee un carácter específicamente materno que la distingue del de las demás criaturas" (Redemptoris Mater, 38)
La Mediación de María no ofusca ni disminuye "la única mediación de Cristo, sino que manifiesta su eficacia...; favorece, y de ninguna manera impide, la unión inmediat
Dedicamos esta edición especial a contemplar a María Santísima, Mediadora de todas las Gracias, cuya festividad celebraremos el 7 de noviembre y fue instituida por el Papa Benedicto XV en 19…