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SISTEMA DECROLY (1) I oe La critica formulada al método Montessori, de no concordar con la doctrina psicolégica de la estructura, hacia esperar, de parte de los que propician: la adopcién de ésta, las aplicaciones. pertinentus a su régimen escolar. No se conoce, empero, otro ensayo que el del doctor Ovidio Deeroly, cuyo estudio intentamos realizar, con la aten- cién que merece. EL doctor Ovidio Decroly, es, como la doctora Montessori, médico especialista de nifios anormales, especialidad que lo inicié en la carrera pedagégica, al fundar en 1901 el Instituto de Ensefianza Especial pa- ra Retardados y Anormales, en Bruselas, trasladado después a Ucclé. En 1907 fundé su primera escuela para nifios normales, que la de- nomin6 ‘‘Eseuela para la vida y por la ue en la calle Ermita, de Bruselas. No ha dado un concepto orgiifico de la ensefianza, ni tratado *-un plan general de reformas. Dotado de informacién cientifica es-- pecializada y de esa moderacién en las afirmaciones que da el con- tacto de la ciencia, ha rechazado todo dogmatismo y ha rehusado - presentarse con actitudes de apéstol y profeta. Repite constantemen- te que no ha salido del periodo de los ensayos, prevenido de lo dificil. que es realizar de un salto reformas de cardcter trascendental, que puedan comprometer el porvenir intelectual de una generacién. No es facil encontrar en los reformadores este sentimiento de responsabili dad: la gloriola del renombre, mas que la fe en la eficacia de sus ideas, les inspira habitualmente posturas detonantes. _ Graduado en la Facultad de Medicina de Gantes, amplié su cul tura en Berlin, donde recogié la enseffanza de los discipulos de Her- (1) Capitulo de un libro en preparaciéi titulado “La Eseuela en ol régimen de organizacién de la instruccién pfblica argentina”. El capitulo se compone de dos partes: la exposicién del sistema Decroly, que es el que apa- rece en este niimero y Ja eritica al mismo que se publjeard en el préximo, < a “bart y Pestalozzi y la eompleté en la Hscuela de Psicologia de Paris, iluminada con las leceiones de-grandes maestros como Janet, Binet, Dumas, Raymond. Su cultura se nutrié vigorizindose con el inf ujo de corrientes opuestas, influencias que.se advierten en su impresién sobre problemas fundamentales. Espiritu amplio, observador, concreto y extensivo, sin coordinacién filos6fica, su consagracién a la espe- cialidad de los nifios anormales y retardados, lo condujo, como a la doctora Montessori, a la investigacin pedagégica, desarrollindose en él el gusto por el estudio de los problemas educacionales. Con es- piritu eritico, pero sin educacién ui cultura filos6fica y sobre todo sin préetica en el manejo de las ideas generales, el creador de la doe- trina didéetica de la ‘‘globalizacién”’, carece de capacidad de sistemati- zacién. La practica hace a los médicos prolijos en !a deseripeién de los “‘easos’’, pero deficientes en la articulacién organiea de las ideas que de los hechos pueden desprenderse. El trabajo de comparacién, bisqueda de analogias y diferencias, con los factores que intervienen, el de la separacién y seleceién, para llegar a formulas generales y vcrificacio- nes superiores, no completa habitualmente en ellos, el de la historia deseriptiva de los ‘‘casos’’. La practica, con su labor menuda de ano- tacién del detalle, aminora o adormece la aptitud pensante, la capa- cidad de generalizacién y de sintesis. Es lo que ha pasado con el doc- tor Deeroly: la practica profesional ha menguado la actividad del pensador. En Paris se vineulé con otro psicélogo que carecia igualmen- te de educacién filosdfica y cuyg obra “L’Ame et le Corps’’, pone de manifiesto, como observa Dwelsshauvers, sus perplejidades ante los problemas filos6ficos y las ideas generales: Alfredo Binet. Pero esas deficiencias lo salvaron de otros peligros: el dogmatismo reformista y la ligereza de la generalizacién apresurada. Al doctor Deeroly, do- tado sin duda alguna de espiritu eritieo, no se le puede reprochar las actitudes caracteristicas de los dogmiticos de la reforma: gusto de la postura, culto de las palabras transcendentales, con aparato verbal adecuado a la escena. No: su modestia lq defiende de la ‘‘oficiosidad’” de los disefpulos, euyos fervores, en vez de afirmar, d-forman el pen- samiento del maestro. Rechaza toda afirmacién absoluta y se subleva contra las f6rmulas heehas y la inamovilidad de los sistemas. Nos deja, es cierto, en los ‘“‘centros de interés’’, un enrejado de hierro, donde la imaginacién de los maestros se agota, en una pobreza que abre facil camino a la tontera, y donde el artificio se asienta sobre “un pretendido pedestal de espontaneidad. * Pero ha formulado observaciones, con la anotacién, de hechos sig- nifieativos que pueden servir de base a estudios mas amplios y que con el progreso de la psicologia general y Ja infantil tendran su apli- cacién y desarrollo correspondientes. Ir Entremos al estudio de su sistema. Comienza con un estudio ert- tico de lo que lama la metbdologia de las materias-de ensenanza, que en su conéepto reposa en la teoria clisica de la induccién y de la de- duecién, en la construccién de las ideas, pasando de lo particular a lo general, de lo conereto a lo abstracto. Se lega, dice, a la idea gene- ral por la vineulacién siguiente: se adquieren las percepeiones sim- ples y después se las asocia, determinando los factores comunes por la comparaciéu, para obtener gradualmente los eorieeptos de género y especie, de clase cada vez mas elevada y universal. Se marcha asi de las partes al todo, de lo simple a lo compuesto, o a Jo complejo, proceso que se asimila, erréneamente, al que consiste en ir de lo eonereto a lo abstracto y de lo particular a lo general. Y asi las cualidades de una manzana se asocian para dar idea de esta manzana. La aplicacién de este principio, agrega, es muy manifiesta en todos los érdenes de Ja ensefianza, principalmente en la lectura, escritura y dibujo, ano- tindose también.en las materias Hamadas basicas, como en las leccio- nes de cosas y palabras. El método se extiende a las ciencias natura- les, anatomia, fisica, quimiea, geologia, lenguas antiguas y modernas, geografia, historia, matematica en general — aritmética, algebra y geo- metria — misiea, gimnasia, ete. ; Todo esto, dice, no esta justificado ni es racional, pues el prin- cipio en que se asienta y las reglas que formula no son la absoluta expresién de la verdad, ya que su aplicacién encuentra obstaculos . en la praetica diaria de Ja ensefianza. Y asi en muchos casos no se requiere pasar por los elementos para llegar al todo, sino al contrario, se comienza tomando el todo, tal cual es, para mis tarde ocuparse del elemento, 0 no ocuparse’de 1 en absoluto. Aqui formula una obser- yacién que fundamenta su sistema: comienza por anotar la forma en que los nifios adquieret del ambiente natural las primeras nociones, Ja de su madre, la del biberén, las partes de su cuerpo, su ropa, sus Juguetes, muebles, personas que lo rodean, lenguaje, utensilios fami- liares; objetos que se ofrecen a su vista sin orden previsto por el edu- cador y en una gran cantidad de veces en sus relaciones naturales verdaderas, Jos unos en funcién de los otros y no separadamente y por ‘fragmentos. Todo, tanto la mama como los objetos se presentan al nifio.en la integridad de su persona, de cuerpo entero, no en deta- llc y esa es la primera visién de las personas y las eosas. Las lecciones ‘que recibe de si mismio no estén seriadas en etapas racionales y pre- _ concebidas. His este el fendmeno que segiin éL habia pasado hasta en- tonees desapercibido, atin enando se lo haya contemplado desde otros aspectos, interpretado y clasificado bajo titulos diversos. Claparede lo llama ‘‘percepcion sincrética’’, Kenan ‘‘sincretismo’’, Revault D’ Auones “esquematismo sinerético”’ y por! su parte él propone la de- nominacién de ‘‘giobalizacién’’, como mas general que las otras, Con- sidera el primero conveniente para la designacién def estado percep- favo, mientras el segundo implica un andlisis previo y una sintesis. Nosotros consideramos inucho mas preciso y significativo el de ‘‘es: quematismo sinerético’’: fijacion de conjunto de una fisonomia en forma vaga y confusa. La palabra ‘‘globalizacién’’ parece indicar un _ trabajo previo de amontonamiento, de unién, , ~ Contintia expresando que si es ésta la forma en que se inicia naturaimente la actividad del nifio; por qué no se hia de aplicar el mismo método en el régimen de ensefianza? Es lo que se propone: demostrar que en los comienzos de la ensefianza primaria, el maestro debe ae en cuenta esta actividad y haeerle un Namamiento eon el fin de facilitar al disefpulo los primeros pasos en la adquisicién de Jos conocimientos que la escuela debe’ suministrar en este periodo. Si la actividad globalizadora, contintia, se muestra efectiva en _ los diversos niveles de las manifestaciones psiquicas, es de esperar, a priori, que aquella intervenga en el grupo de estas manifestaciones que se realizan en clase, en una leccién, en el curso de un ejercicio cual- quiera del horario normal. Antes de entrar al estudio de la aplicacién concreta del sistema a cada una de las actividades, lectura, escritura, dibujo, aritmética, ciencias naturales, comienza por invogar como antecedente de aplica- cién pr&ctica, dos heehos de adquisicién, producidos ‘‘globalmente’’ en forma natural y esponténea: el de la elgcucién en la lengua ma- terna y el canto. La madre, dice, sin necesidad de recurrir a método alguno establecido, con la simple ayuda del ambiente que rodea al nifio, le ensefia todas las dificultades del idioma; sin pensar en anali- zav ni articular en series los ejercicios, se hace comprender e imitar 0 a poco. En el canto se adopta igualmente él procedimiento ‘‘glo- bal”? representado por el denominado método del canto por audicién, ~ que no es, agrega, otra cosa que una aplicacién del método maternal. Establecidos estos principios generales entra de leno a conside- rar la forma en que eree debe hacerse intervenir la actividad ‘‘globa- lizadora’’ en la ensefanza de las materias principales del programa primario. ~Aplica a la leetura el método ideo-visual, que consiste en comen- zar por el empleo de la frase y de la palabra, en vez de la letra y de la silaba, métédo que reputa ser una aplicacién de la actividad globaiizadora en el orden perceptivo-visual-verbal. Suprime en ab- soluto el andlisis en sus prineipios, debiendo en cambio ser sustituido por adquisiciones de un gran mimero de imgenes, frases y palabras. Para que responda a la idea globalizadora, estas frases y palabras deben referirse a ideas sugeridas al nifio o concebidas por él y asocia- — das a sus emociones, a sus intereses. El anélisis vendré después, pau- latinamente y siguiendo la capacidad del alumno. La yentaja del sis- tema, dice el doctor Deeroiy, consiste en que establece la relacién de la lectura con la vida misma del nifio, con la posibilidad de tomar los textos de lectura en el dominio de sus pensamientos, de unir la lectura, como el lenguaje, a la efectividad desu vida. La repeticion — debe favorecerse por medio de’ juegos que consisten en asociacién de frases y de palabras con eseenas en estampas, objetos, personajes, ani- males, productos: Lo mismo se realiza con la lectura musical: operar el reconocimiento de la frase musical, desde su'‘iniciacién, por la per- _ eepeién visual en su conjunto, dando desde.el principio la frase com- pleta, en vez de empezar por notas aisladas y aprendidas en un orden preciso y légico, desde los puntos de vista de altura y variacién. Iguales principios se siguen para la eseritura, que debe unirse a la lectura, con el dibujo, en el que el dibujo espontineo 0 croquis debe preceder a la eseritura en la expresién grdfica del pensamiento infantil; con la ortografia, la aritmética, ciencias naturales, geogra- . fia e historia. = : = a Tal el principio fundamental de su sistema y la reforma que pro- pone en la ensefianza: parte de la observacién de la vida normal, de la forma en que'el nifip inicia sti vineulacién con el mundo exterior y comienza:a adquirir los conocimientos necesarios para su manejo en el medio que debe actuar. Hs asi como. recoje y adopta el método ma- ternal de trasmisién de las primeras nociones del lenguaje y las cosas — familiares de la vida diaria, para hacerlas base de la primera ense- fianza en la escuela primaria. Pero’ para realizr la reform total que cree habria necesidad de operar a fin de obtener la aspiracién superior de una organizacién — de la ensefianza de acuerdo con sus ideas y ante la imposibilidad de una transformacién inmediata, propone un sistema de transicién. “En _ la hora, actual, dice, nos encontramos frente aun imposible, a una utopia: no podémos pensar en transportar de un golpe todas las es- cvelas & su-cuadro natural, como fuera deseable’’. Pero, prosigue, = 46" como no es posible continuar indiferente, paralizando nuestra labor y¥ es necesario hacer algo factible y que a la vez constituya un camino directo hacia el progréso sefialado, recogeremos las observaciones que se han venido efectuando desde hace mas de veinte afios, en ambientes diversos — institutos para anormales, clases para nifios atrasados, es- cuelas para nifios normales —‘a fin de que ‘‘la permaneneia obliga- toria pueda ser mas beneficiosa para un mayor ntimero de escolares”’, Con este propésito propone una serie de disposiciones, de cuya aplica- cién sistemdtiea espera ‘‘resultados positivos apreciables’? y que se prepararé ‘el advenimiento de la evolucién més radical’’. Las medidas consisten: 1° En someter a los nifios a una previa clasificacién, basada en-la confrontacién de los datos recogidos por las autoridades pa y del resultado del examen fisieo y psiquico. 2° En hacer homogéneds los grupos existentes y crear en consecuen- cia: a) Seeciones paralelas para los nifios sensiblemente adclantados © atrasados alli donde el ntimero de alumnos lo permita, pero agru- pando solamente los nifios que puedan ser sometidos al mismo régi- men. b) Clases especiales para nifios anormales. 3° En que no exceda el ntimero de nifios de 30 en las clases ordinarias, de 20 en las clases paralelas y de 12 en las clases de verdaderos anormales. 4° En los pai- ses bilingiies examinar seriamente el idioma en que debe hacerse la primera educacién escolar y si la ensefianza de un segundo idioma de- be ser impuesta a todos los nifios. (Bélgica y Suiza). 5° Modificar el programa de manera que se tenga en cuenta la evolucién del interés, el mecanismo del pensamiento del nifio, las condiciones locales y la disposicién de la mayor parte de los’ escolares para la adopeién de un programa de ideas asociadas. 6° En modificar los procedimientos de ensefianza desde el primer grado (seis afios) haciendo aplicacién del método de los centros de interés, 7° En dar preferencia a los ejer- cicios practicos' y a las disciplinas que favorecen la individualidad iy: la actividad personal. Todas estas disposiciones pueden reducirse fundamentalmente a dos: clasificacién de los alumnos, lo que importa considerar la orga- nizacién escolar en general y en segundo lugar lo que directamente trata de la ensefianza misma, es decir, el programa. 3 Lia idea de la organizacién escolar responde a la necesidad de> dar a las clases homogeneidad, lo que se obtiene con la clasificacién de los alumnos. Esta tendria por base la separacién de los aventajados © supernormales, de los atrasadosy anormales. Ia homogeneidad da- via como consecuencia, afirma, el mejoramiento-de las condiciones de trabajo en la ensefianza, disminucién del niimero de los que sufren un retraso més 0 menos considerable en sus estudios y aumento de los que pueden progresar regularmente en la escuela; nocién mas exac- ta de la situacién real de la ensefianza primaria y de la labor que debe realizarse en lo que concierne a la ensefianza especial, dedieada a los nifios aventajados, los atrasados y los anormales. Entremos ahora al estudio de la segunda faz de su reforma, mas importante y sobre todo de mayor trascendencia porque produce una reyolucién, no precisamente en los métodos, sino en la misma estruc- tura de organizacién de la ciencia. Comienza por criticar la forma en que esta organizada la ense- fianza, por el sistema de clasifieacién de materias, lo que en su con- eepto rompe la cohesién que debe haber entre las diferentes activi- dades del nifio. Los programas, que estableecen un orden de clasifi- cacién y diferenciacién en el estudio de las materias, crean, al no ar- ticular en ellas un orden de relaciones, una honda separacién entre ja cultura y la realidad, haciendo de que el nifio experimente la sen- sacién de que trabaja para la escuela, no para si mismo. Es esta sepa- racién en materias, esta adaptacién a la clasificacién de las ciencias, a este orden fijado por una nocién de relacién cualitativa y que pre- senta a las diversas disciplinas como una estructura, con limites y jurisdiccién determinados, lo que Decroly considera en sustancia como deleznable. Sefiala las deficiencias y propone los remedios, Son las primeras: 1° Nada o casi nada de eohesién entre las actividades del nifio. 2° Poco contenido de la ensefianza en relacién con los intereses fundamentales del nifio y de su evolucién. 3° Excesivas leeciones con temas y finalidades totalmente diferentes. 4° Divisién de las asigna- turas sin tener en cuenta el proceso del pensamiento en el nifio. 5° En Ja mayor parte de las asigaturas se sobrepasa la capacidad de asimi- lacién y de memoria de la mayoria de los escolares. 6° Predominio de las“asignaturas que pueden ensefiarse por el procedimiento verbal. 7° Falta de ejercicios que den motivo a la actividad personal y espon- tinea del nifio. Tales deficiencias pueden corregirse con los siguiente ‘‘remedios’’: 1° Apliacién de un programa de ideas asociadas; estudio del nifio y del ambiente en que vive. 2° Empleo del método de los centros de in- terés. 3° Division de las materias de ensefianza teniendo en cuenta Jas grandes funciones psicolégicas: observacién, asociacién, expres‘én. 4°. Cantidad de materias apropiada a los diversos grupos establec’dos. 5? Preferencia acordada a los métodos intuitivos, activos y constructivos. 6° Actividad personal fayorecida por la practica de las ocupaciones manuales (diversos ejercicios en relacién con los centros de interés) y por el empleo de los ‘‘Juegos educativos”. Lua eseuela, dice, debe responder 4 una finalidad de educacién general, preparando al nifio para la vida social actual; preparacién que debe hacerse en las mejores condiciones, iniciéndolo para la vida general y para la vida social en particular. Decroly concibe, pues, a la educacién con una finalidad m4s amplia que la doctora Montessori, quien da poca importancia al ambiente social. Esta iniciacién, en lo que al programa respecta, eae: dice, el examen de dos dominios fundamentales de conocimientos: a) E) conocimiento de parte del nifio de su propia personalidad, coneien- cia de si mismo, de sus necesidades, aspiraciones, ideales y fines. b) El conocimiento de la naturaleza del medio ambiente en el cual vive - y del que debe depender y en el que debe obrar para que sus aspira- ciones, necesidades, fines e ideales sean accesibles. A) Comprenden cuatro necesidades primordiales, correspondientes tinicamente a los hechos faciles de observar por el nifio y atin otros mas generales que influyen en la actividad humana: Io — la necesidad de alimentarse, a la que se une, ee la de respirar y la de limpieza. 2° — La necesidad de luchar contra las intemperies. 3° — La necesidad de defenderse contra los peligros y aecidentes diversos. 4° — La neeesidad de la accién y del trabajo solidario, de la re- » novacién constante y la alegria del espiritu, a la que hay que agre- ~ gar la necesidad de la luz, del deseanso, de la asociacién, de la soli- daridad y de la ayuda mutua. B) En Jo que respecta al medio ambiente, considerado, sobre todo del punto de vista de Ja satisfaccién de aquellas necesidades, con- viene estudiar todos sus factores, desde el ambiente humano — fami- ~ liar, eseolar y social — y el animal y vegetal hasta el medio inanima- ~ do, comprendiendo el sol y los astros, Debe, en consecuencia, estudiar- se: a) La aecién favorable o desfavorable del ambiente sobre el indi- -viduo. b) La reaceién del individuo sobre el ambiente y muy espe- cialmente Ja apropiacién de este a sus necesidades. _ Comprende: 1. — El nifio y la familia./2. — El nifio y la escuela. _ 3. — El nifio y la sociedad. 4. — El nifio y los animales. 5. — El nifio _ y las plantas. 6. — El nifio y la tierra: agua, aire, piedras. 7. — El nifio y el sol, Ja luna y las estrellas. El segundo de los remedios propuestos comprende lo que se Ila- ma: empleo del método de los centros de interés. Deeroly sustituye al sistema de clasificacién de materias, uno asentado sobre la base de los intereses y medios generales del nifio en la edad escolar, es decir, sobre las diversas necesidadés anteriormente formuladas en las que el autor agota lo que comprende los ‘‘intereses’’ que tienen significa- cién para’el nifio. Al eliminar el sistema de la clasificacién que separa Jos conocimientos, busca presentarlos ‘‘globalizados”’, para lo que tra- ta de vineularlos y relacionarlos estableciendo a cada instante un me- dio de uni6n entre los miltiples elementos de su contenido. El princi- pic que sirve de eje de asociacién, es el ‘‘centro de interés’’. Tomando — asi como centro una de “‘las necesidades”’, por éjemplo, “‘la de ali- mentarse’’, se sigue por asociacién todo lo que a ella se refiera: origen de los alimentos, su clasificacién, su precio, procedencia, quien los produce, como se preparan, donde y quién. Alli entran todas las ma-" * terias: geografia, historia, ciencias naturales, higiene, moral, céleulo, ~ dibujo, trabajos manuales, ete. Comprende, dice Decroly, todo lo que encierra los programas corrientes, con la diférencia de que estén dis- tribuidos de otra manera y con el euidado de una coordinacién basada en la capacidad y orientacién del nifio antes de la pubertad. Pro- pongo, agrega, crear un lazo entre las materias para hacerlas conver- gentes o divergentes de un mismo centro. Y tengo siempre en cuenta el elemento afectivo primordial: el interés del nif. . Hay, de otro punto de vista, dice, que considerar a las cosas y los < hechos bajo cuatro aspectos diferentes: 1° Directamente por la inter- vvencién de-los sentidos y de la experiencia inmediata. (Comprenden los ejercicios de observacién). 2° Indirectamente por el recuerdo per- sonal. 3° Indirectamente por el examen de diversos documentos rela- tivos a objetos o fenémenos actuales, pero no asequibles a la experi-— mentacién. 4° Indirectamente en fin, por el examen de diversos do- + cumentos relativos a objetos o fenémenos pasados. (Comprenden los ejercicios de asociacién). 5 = De ahi dos tipos de ejercicios: 1° Los llamados de observacién : adquisicién personal y directa. 2° Los denominados de asociacién: adquisicién indireeta 0 también Mamado sstema de adquisiciones an- terores. A estos dos grupos de ejercicios que tienen por finalidad la uti- lizacién de juicios y opiniones de primera. mano o Ja confrontacion de esos juicios y opiniones con los trasmitidos sobre todo por la via ar fica o verbal, es decir, de segunda mano, han de agregarse los ejer- cicios denominados de expresién. Ie este modo, dice, se completa el ciclo de operaciones de una actividad mental sintética que compren- de: 1° El trabajo de los seritidos estimulados por el interés, trabajo que conduce a: 2° La elaboracién, merced a las asociaciones de ideas mds 0 menos generales (induccién) y de aplicacién de esas ideas a los Oe casos particulares (deduecién). 3° El eotejo y la traduecién de estas por la expresién concreta y abstracta. Luego, agrega, podemos repre- sentar provisionalmente el orden psicolégico de los ejercicios que de- ben realizarse, de la siguiente manera: 1° Bjercicios de observacién. 2 Wjereicios de asociacién. 3° Bjer¢ sios de expresiones diversas: a) Eixpresiones concretas. b) Hxpresiones abstractas. Relaciona después este sistema de enseiianza con_el programa ac- tual para comprobar que este Ultimo esté totalmente comprendido en aquél. Y asi, dice, es facil constatar en esa divisién de materias parti- cularmente: 1° Que la observacién representa las lecciones de cosas y palabras y las lecciones de ciencias naturales elementales. 2° Que la asociacién en el espacio y el tiempo reemplaza a la geografia y la historia, pero concebidas desde un punto de vista mas extenso. 3° Que la expresi6n comprende todos los ejercicios del idioma, incluyendo la ortografia, las lecciones de memoria, ete., asi como también los Nama- dos trabajos manuales y el dibujo. En cuanto a las canciones y a los ejercicios gimnasticos, entran igualmente en los ejercicios de expre- sién, pudiendo también derivarse de la idea central expuesta en los ejereicios enumerados. La higiene y la moral también estén incluidas en los ejercicios de observacién y asociacién a la ‘vez, puesto que deri- van directamente de la confrontacién de las necesidades, de las exi- gencias de la vida individual y del grupo y de los conocimientos que proporciona el medio ambiente. El céleulo esta sobre todo unido a la observacién, bajo la forma, primero, de ejercicios de comparacién ; después, de medida con unidades naturales, y por tiltimo de med.das _ con unidades convencionales. Estas explicaciones permiten completar, termina, el esquema anterior, de este modo: 1° Observacién con la palabra y la medida: higiene, moral. 2° Asociacién: A) En el espacio, las cosas y los heehos actuaies no directamente asequibles: a) en 15 cereano; b) en lo distante. B) En el tiempo, las cosas y los hechos pasados. 3° Expresiones: a) concretas: trabajos manuales diversos; modelado, trabajos en papel, cartén, madera, ete.; gimnasia utilita- ria y euritmica; juegos diversos: educativos e instructivos; dibujo: libre, del natural, de memoria, ete. b) Abstractas. Lenguaje; canto, lec- tura, ortografia, escritura. ne El doctor Decroly agrega a este régimen de ensefianza un ins- trumento que él considera indispensable para completar el trabajo escolar y al que denomina “‘juegos educativos’; Reposa, como es na- tural, en una aplicacién de la actividad lidiea, tan llena y rica de modalidades en la naturaleza del nifio. Decroly, como Froebel, tiende a hacer de ella la fuente iniciadora del trabajo, organiz4ndola en for- ( 6 actividad misma tiene sy fundamento en el instinto de Eitan “se comienza por actos simples de reproduccién de movimientos, que se repiten varias veces, sea trasladando objetos, colocéndolos en diver- -sas_posiciones'o formando combinaciones miiltiples. Se trata después — de despertar la aptitud de observacién, haciendo que descubran entre distintos objetos, grabados, dibujos, materiales diversos, el que mejor : se adapte a la labor a realizar. Se entrega, por tiltimo, al nifio el mo- — delo, para que por su inventiva propia encuentre las imigenes que ree producen las que en el modelo figuran. El sistema de juegos de De- — croly tiende sobre todo ala educacién del sentido de la vista — per- eepeion de tormus, tamano, posicion y aireceion — sim aescuiaar, empero, los otros sentidos, pues los hay destinados al cultivo del an- ditivo y el motor, como de iniciacién a la artmética, gramatica, lec- tura, lenguaje. ~ * oa

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