Este cuento chino narra la historia de un granjero cuya suerte parecía cambiar constantemente entre buena y mala. Primero, su caballo se escapó pero luego regresó con más caballos; luego, su hijo se rompió la pierna intentando domar uno de los nuevos caballos, pero esto le salvó de ser reclutado para el ejército. A través de estos eventos, el granjero mantuvo una actitud filosófica de que es imposible saber si un evento traerá buena o mala suerte.
Este cuento chino narra la historia de un granjero cuya suerte parecía cambiar constantemente entre buena y mala. Primero, su caballo se escapó pero luego regresó con más caballos; luego, su hijo se rompió la pierna intentando domar uno de los nuevos caballos, pero esto le salvó de ser reclutado para el ejército. A través de estos eventos, el granjero mantuvo una actitud filosófica de que es imposible saber si un evento traerá buena o mala suerte.
Este cuento chino narra la historia de un granjero cuya suerte parecía cambiar constantemente entre buena y mala. Primero, su caballo se escapó pero luego regresó con más caballos; luego, su hijo se rompió la pierna intentando domar uno de los nuevos caballos, pero esto le salvó de ser reclutado para el ejército. A través de estos eventos, el granjero mantuvo una actitud filosófica de que es imposible saber si un evento traerá buena o mala suerte.
Un granjero viva en una pequea y pobre aldea. Sus vecinos le
consideraban afortunado porque tena un caballo con el que poda arar su campo. Un da el caballo se escap a las montaas. Al enterarse los vecinos acudieron a consolar al granjero por su prdida. "Qu mala suerte", le decan. El granjero les responda: mala suerte, buena suerte, quin sabe.
Unos das ms tarde el caballo regres trayendo consigo varios
caballos salvajes. Los vecinos fueron a casa del granjero, esta vez a felicitarle por su buena suerte. Buena suerte, mala suerte, quin sabe, contest el granjero.
El hijo del granjero intent domar a uno de los caballos salvajes
pero se cay y se rompi una pierna. Otra vez, los vecinos se lamentaban de la mala suerte del granjero y otra vez el anciano granjero les contest: Buena suerte, mala suerte, quin sabe.
Das ms tarde aparecieron en el pueblo los oficiales de
reclutamiento para llevarse a los jvenes al ejrcito. El hijo del granjero fue rechazado por tener la pierna rota. Los aldeanos, cmo no!, comentaban la buena suerte del granjero y cmo no, el granjero les dijo: Buena suerte, mala suerte, quin sabe?. Anthony de Mello Sadhana, un camino de oracin SAL TERRAE, 1992