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MACABEOS

PRIMER LIBRO

C
ontexto histórico. A la muerte de Alejandro, su imperio, apenas
sometido, se convierte en escenario de las luchas de los herederos.
En menos de veinte años se realiza una división estable en tres zo-
nas: Egipto, Siria y el reino macedonio. Palestina, como zona intermedia,
vuelve a ser terreno disputado por los señores de Egipto y Siria. Durante
todo el siglo III a.C. dominaron benévolamente los tolomeos, siguiendo
una política de tolerancia religiosa y explotación económica. En el 199
a.C., Antíoco III de Siria se aseguró el dominio de Palestina y concedió a
los judíos en torno a Jerusalén autonomía para seguir su religión y leyes,
con obligación de pagar tributos y dar soldados al rey.
En el primer siglo del helenismo, los judíos, más o menos como otros
pueblos, estuvieron sometidos a su influjo, y se fue realizando una cierta
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simbiosis espiritual y cultural, sin sacrificio de la religión y las leyes y tra-
diciones paternas. El siglo siguiente, las actitudes diversas frente al hele-
nismo fraguan en dos partidos opuestos: el progresista, que quiere conci-
liar la fidelidad a las propias tradiciones con una decidida apertura a la
nueva cultura internacional, y el partido conservador, cerrado y exclusi-
vista. En gran parte, las luchas que narra este libro son luchas judías in-
ternas o provocadas por la rivalidad de ambos partidos.
Antíoco IV hace la coexistencia imposible al escalar las medidas re-
presivas (aquí comienza el libro). Los judíos reaccionaron primero con la
resistencia pasiva hasta el martirio; después abandonaron las ciudades en
acto de resistencia pasiva; finalmente, estalló la revuelta a mano armada.
Primero en guerrillas, después con organización más amplia, lucharon
con suerte alterna desde el 165 hasta el 134 a.C.; hasta que los judíos ob-
tuvieron la independencia bajo el reinado del asmoneo Juan Hircano.
En tiempos de este rey y con el optimismo de la victoria se escribió el
primer libro de los Macabeos, para exaltar la memoria de los combatien-
tes que habían conseguido la independencia, y para justificar la monar-
quía reinante. Justificación, porque Juan Hircano era a la vez sumo sa-
cerdote y rey, cosa inaudita y contra la tradición. Si la descendencia
levítica podía justificar el cargo sacerdotal, excluía el oficio real, que to-
caba a la dinastía davídica de la tribu de Judá.

Mensaje del libro. El autor, usando situaciones paralelas y un lengua-


je rico en alusiones, muestra que el iniciador de la revuelta es el nuevo
Fineés (Nm 25), merecedor de la función sacerdotal; que sus hijos son los
nuevos «jueces», suscitados y apoyados por Dios para salvar a su pueblo;
que la dinastía asmonea es la correspondencia actual de la davídica.
Más aún, muestra el nuevo reino como cumplimiento parcial de mu-
chas profecías escatológicas o mesiánicas: la liberación del yugo extran-
jero, la vuelta de judíos dispersos, la gran tribulación superada, el honor
nacional reconquistado, son los signos de la nueva era de gracia.
El autor no vivió (al parecer) para contemplar el fracaso de tantos es-
fuerzos e ilusiones, es decir, la traición por parte de los nuevos monarcas
de los principios religiosos y políticos que habían animado a los héroes de
la resistencia. Fueron otros quienes juraron odio a la dinastía asmonea y
con su influjo lograron excluir de los libros sagrados una obra que exalta-
ba las glorias de dicha familia.
Por encima del desenlace demasiado humano, el libro resultó el can-
to heroico de un pueblo pequeño, empeñado en luchar por su identidad
e independencia nacional: con el heroísmo de sus mártires, la audacia de
sus guerrilleros, la prudencia política de sus jefes. La identidad nacional
en aquel momento se definía por las «leyes paternas» frente a los usos
griegos, especialmente las más distintivas. Por el pueblo, así definido, lu-
charon y murieron hasta la victoria.
El libro es, por tanto, un libro de batallas, con muy poco culto y de-
voción personal. Dios apoya a los combatientes de modo providencial, a
veces inesperado, pero sin los milagros del segundo libro de los Macabe-
os y sin realizar Él solo la tarea, como en las Crónicas. El autor es muy par-
co en referencias religiosas explícitas, pero el tejido de alusiones hace la
obra transparente para quienes estaban familiarizados con los escritos
bíblicos precedentes.
Introducción histórica paramos de ellos nos han venido muchas
1 Alejandro el macedonio, hijo de Fili- desgracias!
1 po, que ocupaba el trono de Grecia, 12 Esta propuesta fue bien recibida, 13 y
salió de Macedonia, derrotó y suplantó a algunos del pueblo fueron enseguida a ver
Darío, rey de Persia y Media, 2 entabló nu- al rey. El rey los autorizó a adoptar las
merosos combates, ocupó fortalezas, ase- costumbres paganas, 14 y entonces, aco-
sinó a reyes, 3 llegó hasta el confín del modándose a los usos paganos, constru-
mundo, saqueó innumerables naciones. yeron un gimnasio en Jerusalén, 15 disi-
Cuando la tierra quedó en paz bajo su man- mularon la circuncisión, renegaron de la
do, su corazón se ensoberbeció y se llenó santa alianza, se emparentaron con los
de orgullo, 4 reunió un ejército potentísimo paganos y se entregaron a toda clase de
y dominó países, pueblos y soberanos, que maldades.
tuvieron que pagarle tributo. 5 Pero después 16 Cuando ya se sintió seguro en el tro-
cayó en cama, y cuando vio cercana la no, Antíoco se propuso reinar también so-
muerte, 6 llamó a los generales más ilus- bre Egipto, para ser así rey de dos reinos.
tres, educados con él desde jóvenes, y les 17 Invadió Egipto con un fuerte ejército, con
repartió el reino antes de morir. 7 A los doce carros, elefantes, caballos y una gran flota.
años de reinado, Alejandro murió 8 y sus 18 Atacó a Tolomeo, rey de Egipto. Tolomeo
generales se hicieron cargo del gobierno, retrocedió y huyó, sufriendo muchas bajas.
cada cual en su territorio; 9 al morir Alejan- 19 Entonces Antíoco ocupó las plazas fuer-
dro, todos ciñeron la corona real, y después tes de Egipto y saqueó el país.
los sucedieron sus hijos durante muchos 20 Cuando volvía de conquistar Egipto,
años, multiplicando las desgracias en el
mundo. el año ciento cuarenta y tres, subió contra
Israel y Jerusalén con un fuerte ejército.
Persecución de Antíoco Epífanes 21 Entró con arrogancia en el santuario,
(2 Mac 4,7-17)
robó el altar de oro, el candelabro y todos
10 De ellos brotó un vástago perverso:
sus accesorios, 22 la mesa de los panes pre-
Antíoco Epífanes, hijo del rey Antíoco. Ha- sentados, las copas para la libación, las
bía estado en Roma como rehén, y subió al fuentes, los incensarios de oro, la cortina y
trono el año ciento treinta y siete de la era las coronas; arrancó todo el decorado de
seléucida. oro de la fachada del templo; 23 se apoderó
11 Por entonces hubo unos israelitas re- también de la plata y el oro, la vajilla de va-
negados que convencieron a muchos di- lor y los tesoros escondidos que encontró,
ciendo: 24 y se lo llevó todo a su tierra, después de
–¡Vamos a hacer un pacto con las na- haber causado una gran masacre y de lan-
ciones vecinas, porque desde que nos se- zar palabras insolentes.

1,1-9 Introducción histórica. El autor aprovecha ciéndose honrar como dios, establece su poder a tra-
los dos primeros capítulos para presentar los protago- vés de la invasión, dominio y sometimiento tributario
nistas del libro: el imperio, que llevado por la codicia de pueblos soberanos. A la muerte de Alejandro sus
pretende dominar el mundo a través de la guerra, el generales entran en conflicto por la ambición de po-
saqueo y la muerte (1); y el pueblo judeomacabeo, der (cfr. Josefo Ant. 11.8,7). Finalmente, el reino que-
que resiste para mantener su unidad, cultura y auto- dó dividido en cuatro partes: Siria bajo el dominio de
nomía (2). Lamentablemente, la historia macabea que Seleuco I; Egipto para Tolomeo I; Tracia para Lisíma-
nació como resistencia, terminará repitiendo los ma- co, y Macedonia para Casandro. Los sucesores de Ale-
les del imperio que combatió. jandro no cambian el esquema de poder, por el con-
Un nuevo imperio, cuyo centro de poder es Grecia, trario, «multiplican las desgracias en el mundo».
se une a la lista de imperios que invadieron y some- 1,10-64 Persecución de Antíoco Epífanes. Apare-
tieron al pueblo de Israel. Antes habían sido Egipto, ce en escena uno de los mayores símbolos del mal
Asiria, Babilonia y Persia. A la cabeza del imperio grie- para Israel: Antíoco IV Epífanes, rey de la dinastía Se-
go está Alejandro Magno (356-323 a.C.), quien ha- léucida y nuevo representante del poder imperial. Se
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25 Un lamento se oyó en todo el país por Israel
26 gimieron los príncipes y los ancianos,
desfallecieron doncellas y muchachos,
se desfiguró la hermosura de las mujeres.
27 El esposo entonó un canto fúnebre,
la esposa se entristeció en su lecho nupcial.
28 La tierra tembló por sus habitantes,
y toda la casa de Jacob se cubrió de vergüenza.
29 Dos años después el rey envió un re- deraron del ganado. 33 Después convirtió la
caudador de impuestos a las ciudades de Ciudad de David en su fortaleza, rodeándo-
Judá que se presentó en Jerusalén con un la de fuertes torres y una muralla alta y ma-
fuerte ejército. 30 Éste habló a la gente con ciza. 34 Instalaron allí un grupo de gente im-
palabras de paz, pero con la intención de pía, sin fe y sin ley que se acuartelaron en
engañarlos. La gente confió en él, entonces ese lugar, 35 almacenaron armas y víveres,
atacó sorpresivamente la ciudad, descar- y guardaron allí el botín que habían reunido
gándole un duro golpe: mató a muchos is- en el saqueo de Jerusalén. 36 De esta forma
raelitas, 31 saqueó la ciudad, derribó sus ca- se convirtieron en un gran peligro, una ace-
sas y la muralla entera. 32 Se llevaron chanza para el templo, una continua ame-
cautivos a las mujeres y los niños, y se apo- naza para Israel.
37 Derramaron sangre inocente
en torno al santuario, profanándolo.
38 A causa de ellos, huyeron los habitantes de Jerusalén,
y la ciudad se convirtió en morada de extranjeros,
casa extraña para los suyos;
sus hijos la abandonaron.
39 Su santuario quedó como un desierto,
sus fiestas se cambiaron en duelo,
los sábados en motivo de burla,
su honor en humillación.
40 Su deshonra igualó a su fama,
su grandeza se cambió en duelo.
41 El rey decretó la unidad nacional para ción particular. 43 Todas las naciones se so-
todos los súbditos de su imperio, 42 obli- metieron a la orden del rey, e incluso mu-
gando a cada uno a abandonar su legisla- chos israelitas adoptaron la religión oficial:

puso el sobrenombre de «theos Epiphanes», que sig- vos de imponer la cultura helenista –gimnasios–, es-
nifica «dios manifestado». Es significativo, que inme- tablecer un régimen tributario, saquear los tesoros
diatamente después de Antíoco IV el autor presente del Templo de Jerusalén para financiar la conquista
un nuevo e importante actor: el grupo de judíos lla- de Egipto (21-24), imponer un nuevo sistema religio-
mados «renegados» que abogan por la helenización so con dioses y cultos idolátricos, hasta el punto de
del mundo judío como vía de progreso y modernidad colocar al dios Zeus en el altar del Templo, prohibir
(11-14). Cuando hablamos de helenismo nos referi- el cumplimiento de la Ley (culto, circuncisión, nor-
mos a la cultura de origen griego. En contraposición al mas alimentarias, sábado, etc.), y asesinar a todos los
grupo de los judíos «renegados», están los judíos de opositores (41-50). Jerusalén, la ciudad de Dios, ter-
corte tradicional articulados en torno al proyecto ma- mina siendo una ciudadela griega (33s), y la Alianza
cabeo. El autor deja claro desde el principio su postu- con el Dios de la liberación se cambia por una alian-
ra promacabea, tanto que cuando habla de «Israel, za con el imperio pagano (15). El autor recoge en una
pueblo» se refiere a este grupo. elegía los tiempos de muerte, sacrilegio y abomina-
Aprovechando el viejo lema imperial de «divide y ción que llenan de luto y dolor al pueblo de Israel
vencerás», Antíoco IV hace alianza con los judíos he- (25-28.37-40; cfr. Sal 79,3; 106,38; Jr 7,6; 22,3; Lam
lenistas o «renegados» (15) para alcanzar sus objeti- 5,2).
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ofrecieron sacrificios a los ídolos y profana- en las ciudades. 59 El veinticinco de cada
ron el sábado. 44 El rey despachó correos a mes sacrificaban sobre el altar pagano en-
Jerusalén y a las ciudades de Judá, con ór- cima del altar de los holocaustos. 60 A las
denes escritas: tenían que adoptar las cos- madres que circuncidaban a sus hijos, las
tumbres extranjeras, 45 se prohibía ofrecer mataban, como ordenaba el edicto, 61 con
en el santuario holocaustos, sacrificios y li- las criaturas colgadas al cuello; y mataban
baciones, guardar los sábados y las fiestas; también a sus familiares y a los que habían
46 se mandaba contaminar el santuario y a circuncidado a los niños.
los fieles, 47 construyendo altares, templos 62 Pero hubo muchos israelitas que resis-
y capillas para el culto idolátrico, así como tieron, haciendo el firme propósito de no
sacrificar cerdos y otros animales impuros; comer alimentos impuros; 63 prefirieron la
48 tenían que dejar incircuncisos a los niños muerte antes que contaminarse con aque-
y profanarse a sí mismos con toda clase de llos alimentos y profanar la alianza santa. Y
impurezas y profanaciones, 49 de manera murieron.
que olvidaran la ley y cambiaran todas las 64 Fueron días de terribles calamidades
costumbres. 50 El que no cumpliese la or- para Israel.
den del rey sería condenado a muerte.
51 En estos términos escribió el rey a to- Rebelión de Matatías
1 Por ese tiempo surgió Matatías, hijo
dos sus súbditos. Nombró inspectores para 2
toda la nación, y mandó que en todas las de Juan, hijo de Simeón, sacerdote de
ciudades de Judá, una tras otra, se ofrecie- la familia de Yoarib; y aunque era nacido en
sen sacrificios. 52 Se les unió mucha gente, Jerusalén, se había establecido en Modín.
2 Tenía cinco hijos: Juan, por sobrenombre
todos traidores a la ley, y causaron tal daño
al país, 53 que los israelitas tuvieron que es- el Feliz; 3 Simón, llamado el Fanático; 4 Ju-
conderse en cualquier refugio disponible. das, llamado Macabeo; 5 Lázaro, llamado
54 El día quince de diciembre del año Avarán, y Jonatán, llamado Apfús.
ciento cuarenta y cinco el rey mandó poner 6 Al ver Matatías los sacrilegios que se

sobre el altar de los holocaustos un altar cometían en Judá y Jerusalén, 7 exclamó:


pagano, y fueron poniendo altares por to- –¡Ay de mí! ¿Para esto he nacido? ¿Para
das las poblaciones judías del contorno; ver la ruina de mi pueblo y la destrucción
55 quemaban incienso ante las puertas de de la ciudad santa? ¡Para quedarme senta-
las casas y en las plazas; 56 Se destruían y do en ella, mientras es entregada al poder
echaban al fuego los libros de la ley que en- del enemigo, y el santuario está en manos
contraban; 57 y al que se lo descubría con de extranjeros! 8 Su templo es como un
un libro de la alianza en su poder, o al que hombre deshonrado; 9 su ajuar valioso ha
vivía de acuerdo con la ley se lo ajusticia- sido llevado como botín; sus niños, asesi-
ba, en virtud del decreto real. 58 Como te- nados en las plazas; sus jóvenes, muertos
nían el poder, todos los meses hacían lo por la espada enemiga.
mismo a los israelitas que se encontraban
10 ¿Qué nación no ha ocupado sus palacios,
no se ha apropiado de sus despojos?
11 Le han arrebatado su hermosura;
era libre, y ahora es esclava.
12 Ahí está nuestro santuario,
nuestra hermosura y nuestro orgullo,
está desolado,
lo han profanado los paganos.
13 ¿Para qué seguir viviendo?

2,1-70 Rebelión de Matatías. Así como la historia primer libro de los Macabeos: ciclo de Matatías (2,1-
de los patriarcas la dividimos en ciclos: Abrahán, Ja- 70), de Judas (3,1–9,22), de Jonatán (9,23–12,53) y
cob y José (Gn 12–50), igual podemos hacer con el de Simón (13,1–16,24).
1 MACABEOS 2 612
14 Matatías y sus hijos se rasgaron las 24 Al verlo, Matatías se indignó, tembló
vestiduras, se vistieron de sayal e hicieron de cólera y en un arrebato de ira santa co-
gran duelo. rrió a degollar a aquel hombre sobre el al-
15 Los funcionarios reales encargados de tar. 25 Ahí mismo mató al funcionario real,
hacer apostatar por la fuerza llegaron a Mo- que obligaba a sacrificar, y derribó el altar.
dín, para que la gente ofreciese sacrificios, 26 Lleno de celo por la ley, hizo lo que Fine-
16 y muchos israelitas acudieron a ellos. és a Zimrí, hijo de Salu. 27 Luego empezó a
Matatías se reunió con sus hijos, 17 y los gritar con toda su voz por la ciudad:
funcionarios del rey le dijeron: –El que sienta celo por la ley y quiera
–Eres un personaje ilustre, un hombre mantener la alianza, ¡que me siga!
importante en este pueblo, y estás respal- 28 Después, dejando en la ciudad cuanto
dado por tus hijos y parientes. 18 Adelánta- tenía, él y sus hijos huyeron a las monta-
te para ser el primero en cumplir la orden ñas.
del rey, como lo han hecho todas las nacio- 29 Por entonces, muchos judíos amantes
nes, y también los hombres de Judá y los de la justicia y el derecho bajaron al desier-
que han quedado en Jerusalén. Tú y tus hi- to para instalarse allí 30 con sus hijos, muje-
jos recibirán el título de grandes del reino, res y ganados. Es que la situación se había
los premiarán con oro y plata y muchos re- hecho intolerable.
galos. 31 A los funcionarios reales y a la guarni-
19 Pero Matatías respondió en voz alta: ción de Jerusalén, de la Ciudad de David,
–Aunque todos los súbditos en los do- les llegó la denuncia de que unos indivi-
minios del rey obedezcan, abandonando la duos, que habían desobedecido el mandato
religión de sus padres, y aunque prefieran del rey, habían bajado a las cuevas del de-
cumplir sus órdenes, 20 yo, mis hijos y mis sierto. 32 Corrieron en su persecución mu-
parientes viviremos según la alianza de chos soldados. Los alcanzaron, tomaron
nuestros padres. 21 ¡Dios nos libre de aban- posiciones frente a ellos y los atacaron un
donar la ley y nuestras costumbres! 22 No sábado. 33 Y les dijeron:
obedeceremos las órdenes del rey, desvián- –¡Basta ya! Salgan, obedezcan las órde-
donos de nuestra religión ni a la derecha ni nes del rey y salvarán sus vidas.
a la izquierda. 34 Pero ellos respondieron:
23 Cuando acabó de hablar, se adelantó –Ni saldremos ni obedeceremos al rey,
un judío, a la vista de todos, dispuesto a sa- profanando el sábado.
crificar sobre el altar de Modín, como lo 35 Los soldados les dieron el asalto en-
mandaba el rey. seguida, 36 y ellos no replicaron, ni les tira-

En oposición a Antíoco IV Epífanes, representante La muerte pasiva de estos israelitas por no violar la ley
del poder imperial, surge Matatías, que significa «don del sábado, hace que Matatías y sus hijos reinterpre-
de Dios», como líder de la resistencia judía. Matatías, ten este precepto, decidiendo que si son atacados,
un campesino de familia sacerdotal, hace una lectura aún en día sábado, responderán.
de la realidad y constata que su pueblo, nacido para Al ejército de Matatías se une el grupo de los «lea-
la libertad, ha sido esclavizado y saqueado. Su con- les» o «piadosos», de donde nacerán más tarde los fa-
ciencia religiosa le dice que no es posible seguir vi- riseos y los esenios. El ejército macabeo organiza una
viendo sin hacer algo por cambiar tal situación. campaña militar por el país con el fin de «rescatar la
Los funcionarios del imperio intentan comprar la Ley de manos de los paganos». A pesar del éxito de la
conciencia de Matatías y de sus hijos ofreciéndoles campaña militar, a cualquier cristiano le resulta difícil
títulos y riquezas. En clara opción por el Dios de los entender que se exalte un procedimiento que repite
padres y del éxodo, rechazan la oferta del imperio y exactamente las actitudes del opresor: violencia, ven-
organizan la resistencia armada –«guerra santa»– des- ganza, ira e imposición religiosa (45s). Es una «guerra
de las montañas de Judá. santa» comprensible dentro de su época y contexto.
Muchos judíos tradicionalistas huyen al desierto Con Jesús se dará otro modelo de resistencia.
para escapar de la avalancha helenista. La persecu- El testamento de Matatías recuerda el de Jacob (Gn
ción del imperio no se deja esperar y asesinan en día 49) y Moisés (Dt 33). En el testamento quedan consa-
sábado un grupo de judíos que eran estrictos en el grados dos consejos con sabor imperativo: perseverar
cumplimiento de la Ley pero que no participaban de en la lucha y dar la vida por el proyecto de Dios (50).
la resistencia armada promulgada por los Macabeos. Además, un catálogo de virtudes para imitar: fe, fide-
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ron una piedra, ni se atrincheraron en las tua. 52 ¿Acaso Abrahán no fue hallado fiel
cuevas, 37 sino que dijeron: en la prueba y por eso Dios lo contó entre
–¡Muramos todos con la conciencia lim- los justos? 53 José, en medio del peligro,
pia! El cielo y la tierra son testigos de que cumplió el mandamiento y llegó a ser señor
ustedes nos asesinan injustamente. de Egipto. 54 Fineés, nuestro padre, por su
38 Así fueron atacados en pleno sábado. gran celo recibió la promesa de un sacer-
Y murieron todos, con sus mujeres, hijos y docio eterno. 55 Josué llegó a ser juez de Is-
ganados. Había unas mil personas. 39 Cuan- rael por haber cumplido la ley. 56 Caleb, por
do lo supieron Matatías y sus hijos hicieron su testimonio ante la asamblea, recibió una
gran duelo por ellos, 40 y comentaban: tierra en heredad. 57 David, por su miseri-
–Si todos nos comportamos como nues- cordia, obtuvo el trono de una monarquía
tros hermanos, y no luchamos contra los perpetua. 58 Elías fue arrebatado al cielo
paganos por nuestra vida y nuestra ley, por su gran celo por la ley. 59 Ananías, Aza-
muy pronto nos harán desaparecer de la rías y Misael, por su fe, se salvaron de la
tierra. hoguera. 60 Daniel, por su inocencia, se sal-
41 Aquel mismo día celebraron consejo y vó de las fauces de los leones.
acordaron lo siguiente: Al que nos ataque 61 Y así, repasando las generaciones,
en sábado le responderemos luchando; así comprenderán que los que esperan en Dios
no pereceremos todos, como nuestros her- no desfallecen. 62 No teman las palabras de
manos en las cuevas. un pecador, porque su gloria acabará en
42 Entonces se les añadió el grupo de los
podredumbre y gusanos: 63 hoy es exaltado
Leales, israelitas aguerridos, todos ellos y mañana desaparecerá; volverá al polvo
sinceramente fieles a la ley; 43 se les suma- de donde vino y sus planes fracasarán.
ron también como refuerzos todos los que 64 Hijos míos, sean valientes en defender
escapaban de cualquier desgracia. 44 Orga- la ley, que ella los llenará de gloria. 65 Miren,
nizaron un ejército y descargaron su ira sé que su hermano Simeón es prudente;
contra los pecadores y su cólera contra los obedézcanle siempre, y hará de padre con
impíos. Los que se libraron fueron a refu- ustedes. 66 Judas Macabeo, aguerrido des-
giarse entre las naciones extranjeras. de joven, será el jefe del ejercito y dirigirá la
45 Matatías y sus partidarios recorrieron
guerra contra el extranjero. 67 Ustedes, por
el país derribando los altares, 46 circunci- su parte, reúnan a todos los que guardan la
dando por la fuerza a los niños no circunci- ley y defiendan los derechos de su pueblo.
dados que encontraban en territorio israeli- 68 Devuelvan a los paganos su merecido y
ta 47 y persiguiendo a los insolentes. La cumplan cuidadosamente los preceptos de
campaña fue un éxito, 48 de manera que la ley.
rescataron la ley de manos de los paganos 69 Y después de bendecirlos fue a reunir-
y sus reyes, y no permitieron que prevale- se con sus antepasados. 70 Murió el año
cieran los malvados. ciento cuarenta y seis. Lo enterraron en la
49 Cuando le llegó la hora de morir, Ma-
sepultura familiar, en Modín, y todo Israel le
tatías dijo a sus hijos: hizo solemnes funerales.
–Hoy triunfan la insolencia y el descaro;
son tiempos de calamidades y de terribles Actividad de Judas en Judea
castigos. 50 Hijos míos, tengan celos por la (2 Mac 8,1-7)
ley y sacrifiquen sus vidas por la alianza de 1 Lesucedió su hijo Judas, apodado
nuestros padres. 51 Recuerden las hazañas 3 Macabeo. 2 Todos sus hermanos y los
que hicieron nuestros padres en su tiempo partidarios de su padre le prestaron apoyo
y conseguirán gloria sin par y fama perpe- y combatieron con entusiasmo por Israel.

lidad, celo, observancia, testimonio, misericordia, 3,1-26 Actividad de Judas en Judea. Con un can-
confianza y resistencia activa. Seguir el camino de los to para exaltar su misión guerrera, comienza el ciclo
antepasados es garantía de triunfo contra los paganos. de Judas (3,1–9,22). Se apoda «Macabeo» –nombre
La comandancia del ejército es entregada a Judas (66), que asumirán los libros sagrados–, que significa «mar-
que sin ser el mayor es el más aguerrido. tillo» porque golpea con fuerza y sin descanso a sus
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3 Judas extendió –Voy a ganar fama y renombre en el im-
la fama de su pueblo; perio luchando contra Judas y los suyos,
vistió la coraza como un héroe, ésos que desprecian la orden del rey.
ciñó sus armas y entabló combates 15 Se le sumó un fuerte ejército de gente

protegiendo sus campamentos impía, que subieron con él para ayudarle a


con la espada. vengarse de los israelitas. 16 Cuando llega-
4 Fue un león en sus hazañas, ba cerca de la cuesta de Bet-Jorón, Judas
un cachorro que ruge por la presa; le salió al encuentro con un puñado de
5 rastreó y persiguió a los impíos, hombres; 17 pero al ver el ejército que venía
quemó a los agitadores del pueblo. de frente dijeron a Judas:
6 Por miedo a Judas –¿Cómo vamos a luchar contra esa mul-
los impíos se acobardaron, titud bien armada, siendo nosotros tan po-
los que hacían el mal fracasaron; cos? Y además estamos agotados, porque
por su mano triunfó la liberación. no hemos comido en todo el día.
7 Hizo sufrir a muchos reyes, 18 Judas respondió:

alegró a Jacob con sus hazañas, –No es difícil que unos pocos envuelvan
su recuerdo será siempre bendito. a muchos, porque a Dios le da lo mismo
8 Recorrió las ciudades de Judá salvar con muchos que con pocos, 19 por-
exterminando en ella a los impíos; que la victoria no depende del número de
apartó de Israel la cólera divina. soldados, sino de la fuerza que llega del
9 Su renombre llenó la tierra, cielo. 20 Ellos vienen a atacarnos llenos de
porque reunió a un pueblo insolencia e impiedad, para aniquilarnos y
a punto de ser exterminado. saquearnos a nosotros, a nuestras mujeres
10 Apolonio reunió un ejército extranjero
y a nuestros hijos, 21 mientras que nosotros
luchamos por nuestra vida y nuestra reli-
y un gran contingente de Samaría para lu- gión. 22 El Señor los aplastará ante noso-
char contra Israel. tros. No les tengan miedo.
11 Cuando lo supo Judas, salió a hacerle 23 Nada más terminar de hablar, se lan-
frente, lo derrotó y lo mató. Los paganos zó contra ellos de repente. Derrotaron a Se-
tuvieron muchas bajas, y los supervivientes rón y su ejército, 24 lo persiguieron por la
huyeron. 12 Al recoger el botín, Judas se bajada de Bet-Jorón hasta la llanura. Serón
quedó con la espada de Apolonio, y desde tuvo unas ochocientas bajas, y los demás
entonces siempre combatió con ella. huyeron al territorio filisteo.
13 Cuando Serón, general en jefe del 25 Judas y sus hermanos empezaron a
ejército sirio, se enteró de que Judas había ser temidos, y una ola de pánico cayó so-
reunido en torno a sí una tropa numerosa bre las naciones vecinas. 26 Su fama llegó a
de fieles seguidores suyos dispuestos a pe- oídos del rey, porque todos comentaban las
lear, 14 se dijo: batallas de Judas.

enemigos. Cuenta con el apoyo de todos. Es presen- 10,10). El miedo de Judas ante una derrota militar por
tado como un hombre sabio, valiente y de fe. Sus ac- inferioridad numérica, es superado por la fe en el Dios
ciones y hazañas recuerdan al patriarca Judá, a Saúl y de los «débiles», que da la cara por su pueblo en cada
Jonatán por la metáfora del León (Gn 49; 2 Sm 1,23); batalla y apoya a los que luchan por la vida y la Ley
a Moisés y los jueces en su liderazgo liberador; a Da- (21). La Ley, promulgada como un conjunto de señales
vid en sus hazañas militares. Judas Macabeo está con- que indicaban el camino correcto para una conviven-
vencido de ser un instrumento en las manos del Señor. cia justa, fraterna y en paz (Éx 20,1-17), se convirtió
En el año 166 a.C., Apolonio, gobernador de Sama- con el tiempo en un instrumento de poder que las au-
ría y responsable del saqueo de Jerusalén, es el prime- toridades religiosas utilizaban para imponer al pueblo
ro en salir derrotado a manos del ejército de Judas Ma- «duras cargas» (Lc 11,46), situación que permite enten-
cabeo. Después de su muerte, Judas le arrebata la der la postura crítica de Jesús (Mt 23,23). En la victoria
espada, tal como hizo David con Goliat (1 Sm 21,9). de Judas, además de la fe cuenta su genialidad estra-
Serón, general del ejército sirio, animado por el deseo tégica, al acomodar su pequeño ejército en la cima de
de fama y poder, será el segundo en la lista de derrota- la montaña, desde donde con sorpresa lanza su ataque.
dos. La batalla se desarrolló en Bet-Jorón (16), un lugar A partir de esta victoria Judas y su proyecto político, mi-
famoso en la conquista de la tierra prometida (Jos litar y religioso comienza a ser tomados en serio.
615 1 MACABEOS 3
Batalla de Emaús 38 Lisias escogió a Tolomeo hijo de Dori-
27 Cuando el rey Antíoco se enteró, se meno, a Nicanor y a Gorgias, hombres po-
enfureció y ordenó concentrar todas las derosos y grandes del reino, 39 y envió con
fuerzas de su imperio, un ejército podero- ellos cuarenta mil soldados de infantería y
sísimo. 28 Abrió el tesoro y repartió a las siete mil jinetes, para que invadieran y de-
tropas el sueldo de un año, ordenándoles vastaran Judá, conforme a la orden del rey.
40 Partieron con todo su ejército, y fueron a
estar preparados para cualquier eventuali-
dad. 29 Pero cuando vio que las arcas se le acampar junto a Emaús, en la llanura.
41 Cuando los traficantes de aquella zona
vaciaban y que los tributos de la región dis-
minuían por las discordias y la miseria que oyeron la noticia, acudieron al campa-
había desencadenado en el país al suprimir mento con muchísima plata, oro y con ca-
las leyes antiguas, 30 tuvo miedo de que, denas, para comprar israelitas como escla-
como le había ocurrido más de una vez, no vos. El ejército se vio reforzado además
le llegara para los gastos y regalos que so- con tropas sirias y filisteas.
42 Judas y sus hermanos vieron que se
lía hacer superando a los reyes anteriores.
31 Viéndose muy apurado, proyectó mar- agravaba la situación –los ejércitos acam-
char a Persia, para recoger los tributos de paban en su territorio, y conocían la orden
aquellas provincias y reunir una gran suma del rey que mandaba destruir y exterminar
de dinero. 32 A Lisias, miembro distinguido al pueblo–, 43 y comentaron:
de la familia real, lo dejó al frente del go- –¡Reparemos la ruina de nuestro pueblo!
bierno, desde el Éufrates hasta los confines ¡Luchemos por nuestro pueblo y por el tem-
de Egipto, 33 y le encomendó el cuidado de plo!
44 La asamblea se reunió para preparar-
su hijo Antíoco, hasta su vuelta. 34 Le dejó
la mitad de las tropas y de los elefantes, y se a la guerra y para rezar pidiendo miseri-
le comunicó todas sus decisiones, en parti- cordia y compasión.
cular las referentes a la población de Judá 45 Jerusalén estaba despoblada
y Jerusalén: 35 que enviara contra ellos un como un desierto,
ejército para aplastar y aniquilar al ejército ninguno de sus hijos entraba o salía.
de Israel y a los que quedaban en Jeru- El santuario, pisoteado;
salén; que borrara su nombre de aquel sitio los extranjeros ocupaban la fortaleza,
36 y estableciera extranjeros por todo el te- convertida en albergue de los paganos.
rritorio. Jacob había perdido la alegría,
37 El rey, por su parte, marchó de Antio- ya no sonaban la cítara y la flauta.
quía, capital de su imperio, el año ciento 46 Se reunieron y fueron a Mispá, frente
cuarenta y siete, llevándose la otra mitad a Jerusalén, porque antiguamente Israel
de las tropas. Después de pasar el Éufrates había tenido allí un lugar de oración.
fue recorriendo las provincias del norte. 47 Aquel día ayunaron, se ciñeron un sayal,

3,27–4,35 Batalla de Emaús. La victoria de los «dé- (59), consultando la Palabra de Dios (48), haciendo
biles» pone en alerta al imperio. Antíoco se ve en la ayuno y oración (47), respetando las normas para par-
necesidad de abrir dos frentes de batalla, uno contra ticipar en el combate (56), pero sobre todo, poniendo
Persia con el fin de conseguir dinero para mantener la todo en las manos del Señor (60). La lucha por la paz,
guerra contra quienes amenazan su poder y riqueza con libertad, justicia y dignidad lo merece todo, aun
–Aún hoy, se siguen haciendo guerras por razones la propia vida.
económicas sin importar las personas que mueren en El imperio a pesar de su superioridad sigue siendo
ellas–; el otro frente, bajo el mando de Licias, busca derrotado por varias razones: la inteligencia de Judas,
aplastar la sublevación judía y borrar su nombre del al mejor estilo de David, en su estrategia militar; la
lugar (3,35). El número de cuarenta mil soldados de memoria en un Dios liberador que siempre vence a
infantería y siete mil jinetes elegidos para esta tarea, cualquier faraón; y el sueño por mantener una Alian-
coincide con las cifras de 1 Cr 19,19, dejando ver en za que los hace libres e hijos predilectos de Dios.
el autor la intención de comparar a Judas con David. Cuando los pobres luchan con inteligencia por una li-
El ejército macabeo, conciente de su inferioridad, beración integral y unida al amor de Dios, no hay cau-
saca fuerzas para el combate, recordando la cruel si- sa que se pierda.
tuación que atraviesa el pueblo, la ciudad y el Templo
1 MACABEOS 3 616
se echaron ceniza en la cabeza y se rasga- que sin escudos ni espadas como hubiera
ron las vestiduras. 48 Desenrollaron el volu- querido. 7 Cuando vieron el campamento
men de la ley, para consultarlo lo mismo pagano fortificado, bien defendido, rodeado
que los paganos consultaban a sus ídolos. por la caballería, con tropas aguerridas, 8
49 Llevaron los ornamentos sacerdotales, Judas arengó a sus hombres:
las primicias y los diezmos; hicieron ir a los 9 –No teman a esta muchedumbre ni se
nazireos que habían terminado de cumplir asusten por sus ataques. Recuerden cómo
su voto, 50 y levantaron su voz al cielo di- se salvaron nuestros antepasados en el Mar
ciendo: Rojo, cuando los perseguía el Faraón con
–¿Qué podemos hacer con estos hom- un ejército. 10 Invoquemos ahora al cielo
bres? ¿A dónde los llevaremos, 51 si su tem- para que nos favorezca, acordándose de la
plo está pisoteado y tus sacerdotes tristes y alianza con nuestros padres, para que
humillados? 52 Ya ves, los paganos se han aplaste hoy a este ejército ante nosotros.
reunido para exterminarnos. Tú conoces 11 Así, todas las naciones reconocerán que
sus planes contra nosotros. 53 ¿Cómo po- hay alguien que rescata y salva a Israel.
dremos resistirles si tú no nos auxilias? 12 Cuando los extranjeros levantaron la
54 Tocaron las cornetas y lanzaron gran- vista y los vieron venir de frente, salieron
des alaridos. del campamento para la batalla. 13 Los de
55 Después Judas nombró jefes milita- Judas hicieron tocar la trompeta y se en-
res: comandantes, capitanes y suboficiales. tabló la lucha. 14 Los paganos fueron de-
56 A los que estaban edificando una casa, a rrotados y huyeron hacia la llanura; 15 los
los que iban a casarse, a los que acababan más rezagados cayeron muertos a espa-
de plantar una viña y a los miedosos les da; los de Judas los fueron persiguiendo
dijo que se volvieran a sus casas, como hasta Guézer y los llanos de Idumea, As-
manda la ley. dod y Yamnia; les hicieron unas tres mil
57 El ejército se puso en marcha, y acam- bajas.
paron al sur de Emaús. 58 Judas ordenó: 16 Cuando Judas y su ejército dejaron de

–¡Prepárense! Sean valientes, estén perseguirlos, 17 Judas advirtió a la tropa:


atentos mañana al amanecer, para dar ba- –No tengan ansia del botín, porque nos
talla a esos paganos que se han reunido queda otra batalla: Gorgias y su ejército es-
contra nosotros para exterminarnos, a no- tán en el monte, ahí cerca. 18 Ahora hagan
sotros y nuestro templo. 59 Más vale morir frente al enemigo y luchen; después podrán
en la batalla que ver las desgracias de apoderarse del botín tranquilamente.
nuestra nación y del templo. 60 Pero hágase 19 Aún estaba hablando cuando asomó
la voluntad de Dios. por el monte un escuadrón; 20 pero al ver
que los suyos habían huido y que el cam-
1 Gorgias emprendió la marcha de no- pamento estaba ardiendo, como lo probaba
4 che, con cinco mil hombres de infan- la humareda que se veía, 21 se desmoraliza-
tería y mil jinetes escogidos, 2 con idea de ron por completo, y cuando vieron al ejér-
caer sobre el campamento judío y aplastar- cito de Judas en la llanura, dispuesto al
los de improviso. Gente de la fortaleza de combate, 22 huyeron todos a territorio filis-
Jerusalén le servían de guías. teo.
3 Pero Judas se enteró, y también él se 23 Entonces Judas se volvió a saquear el
puso en marcha con sus guerreros, para campamento: recogieron gran cantidad de
aplastar al ejército real que quedaba en oro, plata, ropa de púrpura roja y violeta y
Emaús, 4 mientras el resto de las tropas es- muchas riquezas. 24 Y regresaron cantando
taban dispersas lejos del campamento. alabanzas a Dios, porque es bueno, porque
5 Cuando Gorgias llegó de noche al es eterna su misericordia.
campamento judío no encontró a nadie. Se 25 Israel consiguió aquel día una gran

puso a buscarlos por la sierra, pensando victoria.


que huían de él. 6 Al amanecer apareció Ju- 26 Los extranjeros que escaparon con
das en la llanura con tres mil hombres, aun- vida fueron a comunicar a Lisias lo ocu-
617 1 MACABEOS 4
rrido. 27 Lisias, al oírlo, quedó abrumado de del templo derruidas. 39 Se rasgaron las
pesar, porque a Israel no le había ocurrido vestiduras e hicieron gran duelo, echán-
lo que él quería, ni el plan le había salido dose ceniza en la cabeza 40 y postrándose
como le había ordenado el rey. 28 Así que al rostro en tierra. Al toque de corneta grita-
año siguiente reclutó sesenta mil infantes y ron hacia el cielo. 41 Judas ordenó a sus
cinco mil jinetes para luchar contra los ju- hombres que combatieran a los que esta-
díos. 29 Llegaron a Idumea y acamparon en ban en la fortaleza hasta terminar la purifi-
Bet-Sur. Judas salió a hacerles frente con cación del templo. 42 Eligió sacerdotes sin
diez mil hombres, 30 y al ver aquel ejército defecto corporal, observantes de la ley,
tan poderoso, rezó: 43 que purificaron el templo y arrojaron a un

–Bendito eres, Salvador de Israel, que lugar impuro las piedras que lo contamina-
quebrantaste el ímpetu de aquel gigante ban.
por medio de tu siervo David y entregaste 44 Luego deliberaron qué hacer con el al-
el campamento filisteo en poder de Jona- tar de los holocaustos que había sido profa-
tán, hijo de Saúl, y de su escudero. 31 En- nado, 45 y se les ocurrió una buena idea:
trega así ese ejército en poder de tu pueblo destruirlo; así no les serviría de oprobio por
Israel. Que ellos se sientan avergonzados haberlo profanado los paganos. Así que lo
de su infantería y de su caballería. 32 Méte- destruyeron, 46 y colocaron las piedras en el
les miedo, haz que se derrita su poderío y monte del templo, en un sitio apropiado,
que se tambaleen con la derrota. 33 De- hasta que viniese un profeta y resolviera lo
rríbalos con la espada de tus amigos para que había que hacer con ellas. 47 Luego to-
que te canten himnos de alabanza todos los maron piedras sin tallar, como manda la
que conocen tu Nombre. ley, y levantaron un altar nuevo, igual que
34 Cuando se enfrentaron los dos ejérci- el anterior.
tos, unos cinco mil hombres de Lisias ca- 48 Restauraron el templo y consagraron
yeron en la refriega. el interior del edificio y los atrios. 49 Reno-
35 Lisias al ver rotas sus líneas de com-
varon todos los utensilios sagrados y me-
bate y el valor de los soldados de Judas, tieron en el templo el candelabro, el altar
dispuestos a vivir o morir noblemente, mar- del incienso y la mesa. 50 Quemaron incien-
chó a Antioquía para reclutar más merce- so sobre el altar y encendieron los candiles
narios, con intención de volver a Judá. del candelabro, para que alumbraran el
Purificación del Templo templo.
(2 Mac 10,1-8) 51 Cuando pusieron panes sobre la mesa
36 Judas y sus hermanos propusieron: y corrieron la cortina, quedó ultimado todo
–Ahora que tenemos derrotado al ene- el trabajo.
migo, subamos a purificar y consagrar el 52 El año ciento cuarenta y ocho, el día
templo. veinticinco del mes noveno –diciembre–,
37 Se reunió toda la tropa, y subieron al 53 madrugaron para ofrecer un sacrificio,
monte Sión. 38 Vieron el santuario desolado, según la ley, en el nuevo altar de los holo-
el altar profanado, las puertas incendiadas, caustos recién construido. 54 En el aniver-
la maleza creciendo en los atrios como ma- sario del día en que lo habían profanado los
torrales en una ladera y las dependencias paganos lo volvieron a consagrar, cantando

4,36-61 Purificación del Templo. Con el enemigo ción o fiesta de las Luces –cada día se enciende una
derrotado y expulsado de la Ciudad Santa, todas las luz–. Jesús antes de su muerte participó en esta fiesta
energías son puestas en la purificación, reconstrucción (Jn 10,22). El texto nos sugiere una buena lección de
y consagración –dedicación– del Templo. La fiesta de liturgia: la materia prima de toda celebración litúrgica
la Dedicación se celebró el 25 de diciembre del año deben ser los acontecimientos más significativos de la
164 a.C., exactamente tres años después de la profa- vida. Es importante anotar que en este momento de la
nación, con una ceremonia que duró ocho días. Esta historia, el Templo es el centro de la vida y la religión
fiesta, que quedó institucionalizada para celebrarse judía; con Jesús las cosas cambiarán, será la vida del
anualmente, es conocida con varios nombres: Dedi- ser humano o su humanización, lo que estará en el
cación –«Hanukkah»– que es el más usado, Purifica- centro del proyecto de Dios.
1 MACABEOS 4 618
himnos y tocando cítaras, laúdes y platillos. anitas, una trampa peligrosa para el pueblo,
55 Todo el pueblo se postró en tierra, ado- con sus emboscadas en los caminos, 5 y los
rando y alabando a Dios, que les había cercó en sus castillos; tomó posiciones, los
dado éxito. consagró al exterminio y quemó sus casti-
56 Durante ocho días celebraron la con- llos con todos los que estaban dentro. 6 Des-
sagración, ofreciendo con júbilo holocaus- pués marchó contra los amonitas, y se las
tos y sacrificios de comunión y de alaban- vio con un ejército considerable y bien ar-
za. 57 Decoraron la fachada del templo con mado, a las órdenes de Timoteo. 7 Trabó
coronas de oro y pequeños escudos. Con- con ellos muchos combates; los destrozó,
sagraron también el portal y las dependen- los deshizo, 8 se apoderó de todo el territo-
cias, poniéndoles puertas. 58 El pueblo en- rio de Jézer y luego se volvió a Judá.
9 Los pueblos de Galaad se aliaron con-
tero celebró una gran fiesta, que canceló la
afrenta de los paganos. tra los israelitas que vivían en su territorio,
59 Judas, con sus hermanos y toda la con intención de exterminarlos. Los israeli-
asamblea de Israel, determinó que se con- tas huyeron a la plaza fuerte de Datema,
10 y enviaron a Judas y sus hermanos este
memorara anualmente la nueva consagra-
ción del altar, con solemnes festejos, du- mensaje: Los pueblos vecinos se han alia-
rante ocho días, a partir del veinticinco de do contra nosotros para exterminarnos, 11 y
diciembre. se están preparando para venir a apoderar-
60 En aquella ocasión construyeron en se de la plaza fuerte donde nos hemos refu-
torno al monte Sión unas murallas altas, giado. Timoteo es su general. 12 Ven a li-
con torreones, no fueran a llegar los paga- brarnos de sus manos, porque ya han caído
nos y las derruyesen como habían hecho muchos de los nuestros, 13 y todos nuestros
antaño. 61 Judas acuarteló allí una guarni- hermanos que vivían en el país de Tob han
ción para defender el monte. También forti- muerto; sus mujeres, hijos y enseres han
ficó Bet-Sur, para que la gente estuviera de- sido llevados al destierro; han muerto allí
fendida por la parte de Idumea. unas mil personas.
14 Estaban leyendo la carta cuando otros
Hazañas de Judas fuera de Judea mensajeros, con la ropa hecha jirones, lle-
(2 Mac 10,15-23) garon de Galilea con esta noticia: 15 De To-
1 Cuando las naciones vecinas se en- lemaida, Tiro y Sidón, y toda la Galilea de
5 teraron de que los judíos habían re- los gentiles, se han aliado contra nosotros
construido el altar y restaurado el santuario para aniquilarnos.
como estaba antes, se irritaron muchísimo, 16 En cuanto lo oyeron Judas y la tropa,
2 determinaron destruir a los descendientes
convocaron una asamblea extraordinaria
de Jacob que vivían entre ellos, y empeza- para deliberar qué podían hacer por los her-
ron a matar y eliminar a gente del pueblo. manos en situación apurada, hostilizados
3 Entonces Judas atacó a los descen- por el enemigo. 17 Judas dijo a su hermano
dientes de Esaú en Idumea, en Acrabatene, Simón:
porque hostigaban a Israel. Les infligió una –Elige unos cuantos y vete a librar a tus
gran derrota, los sometió y los saqueó. hermanos de Galilea. Mi hermano Jonatán
4 Después se acordó de la maldad de los be- y yo iremos al país de Galaad.
5,1-68 Hazañas de Judas fuera de Judea. Los ju- grientas (51), que es necesario insistir en la premisa de
díos exiliados y desplazados en tierra extranjera sufren entender estos hechos desde el contexto de un pue-
la venganza del imperio (2). Una asamblea demo- blo que hasta ese momento concebía a un Dios ven-
crática, liderada por Judas y sus hermanos, deciden gativo y hasta sangriento por defender a los suyos. La
responder con la misma moneda: atacar, someter y conciencia del pueblo llegará a su madurez con la
eliminar los pueblos vecinos que asesinan a sus her- presencia de Jesús quien nos mostrará el verdadero
manos. Hay que recordar que los edomitas y amoni- rostro de un Dios misericordioso. El texto sin embargo
tas son enemigos tradicionales de Israel (Gn 19,37s; nos permite reflexionar sobre la situación de muchos
Nm 20,14-21; 1 Sm 14,47). Las batallas son acompa- hombres y mujeres que como exiliados o inmigrantes
ñadas de oraciones de alabanza, petición y acción de sufren la persecución xenofóbica de algunos gobier-
gracias a Dios, pero también con acciones tan san- nos o sectores de la población.
619 1 MACABEOS 5
18 Dejó con el resto de las fuerzas, para 33 Avanzaron en tres columnas por de-
la defensa de Judá, a José, hijo de Zaca- trás del enemigo, tocaron las cornetas y
rías, y a Azarías, oficial del ejército, 19 dán- oraron gritando.
doles estas instrucciones: 34 Cuando los soldados de Timoteo se
–Tomen el mando de estas tropas, pero dieron cuenta de que era el Macabeo, hu-
no entren en combate con los paganos has- yeron. Judas les infligió una gran derrota:
ta que volvamos nosotros. les hizo aquel día unas ocho mil bajas. Lue-
20 A Simón le asignaron tres mil hom- go torció hacia Alema. La tomó al asalto,
bres para ir a Galilea, y a Judas, ocho mil mató a todos los varones, la saqueó y la in-
para la expedición contra Galaad. cendió. 36 Partió de allí y conquistó Casfo,
21 Simón partió para Galilea y trabó mu- Maqued y Béser, con las demás ciudades
chos combates con los paganos, los derro- de Galaad.
tó 22 y los persiguió hasta las puertas de To- 37 Después de estos sucesos, Timoteo
lemaida. Los paganos tuvieron unas tres reunió otro ejército y acampó frente a Ra-
mil bajas, y Judas recogió el botín. 23 Lue- fón, al otro lado del torrente. 38 Judas envió
go juntó a los judíos que había en Galilea y gente a reconocer el campamento, y le in-
Arbata, con sus mujeres, hijos y enseres, y formaron:
los llevó a Judá, con gran regocijo. –Se le han unido todas las naciones ve-
24 Por su parte, Judas Macabeo y su her- cinas; es un ejército numerosísimo; 39 tie-
mano Jonatán atravesaron el Jordán y ca- nen mercenarios árabes como auxiliares, y
minaron tres jornadas por el desierto. 25 En- están acampados al otro lado del torrente,
contraron a los nabateos, que los recibieron preparados para venir a atacarte.
pacíficamente, y les contaron lo que había Judas les salió al encuentro, 40 y mien-
pasado a sus hermanos israelitas en Ga- tras él y su ejército se acercaban al torren-
laad. 26 Muchos se habían encerrado en te, Timoteo dijo a sus oficiales:
Bosra, Béser, Alema, Casfo, Maqued y Car- –Si lo atraviesa él primero hacia no-
nín, todas plazas fuertes e importantes. sotros, no podremos resistirle; seguro que
27 Otros se habían reunido en las demás nos vencerá. 41 Pero si no se atreve, y
ciudades de Galaad, y el enemigo había de- acampa al otro lado del río, lo pasamos
terminado atacar esas plazas fuertes al día nosotros hacia él, y lo venceremos.
siguiente, ocuparlas y exterminarlos a to- 42 Cuando Judas se acercó al torrente,
dos en un solo día. formó a los oficiales de la administración en
28 Judas y su ejército desandaron in- la ribera y les ordenó:
mediatamente el camino hacia el desierto –No dejen acampar a nadie. Que avan-
de Bosra. Judas tomó la ciudad, pasó a cu- cen todos.
chillo a todos los varones, saqueó la villa y 43 Luego él, el primero, atravesó el río
la incendió. hacia el enemigo. Toda la tropa le siguió.
29 Por la noche marchó de allí, y cami- Derrotaron a los paganos, que arrojaron
naron hasta la fortaleza. 30 Al salir el sol di- sus armas y huyeron hasta el santuario de
visaron un ejército innumerable colocando Carnín. 44 Los judíos se apoderaron de la
escalas y máquinas de guerra para apo- ciudad e incendiaron el santuario con todos
derarse de la fortaleza; estaban dando el los que estaban dentro. Destruida Carnín,
asalto. ya nadie opuso resistencia a Judas.
31 Al ver Judas que había empezado el 45 Judas reunió a todos los israelitas que
ataque y que de la ciudad subía al cielo el había en Galaad, chicos y grandes, con sus
fragor del alarido de guerra y el son de las esposas, hijos y enseres –una muchedum-
cornetas, 32 ordenó a sus soldados: bre inmensa–, para llevarlos a Judá. 46 Lle-
–¡Luchen hoy por sus hermanos! garon a Efrón, una ciudad importante, bien

Todas las batallas fueron ganadas, excepto las de fama y prestigio (57); la segunda, porque el autor con-
José y Azarías, oficiales del ejército macabeo (56s), sidera que no pertenecen a una raza especial (62)
por dos razones: la primera, porque sus motivaciones como Judas Macabeo y sus hermanos.
no eran de solidaridad sino de intereses personales:
1 MACABEOS 5 620
fortificada, que les caía de camino –era im- una gran derrota por no haber obedecido a
posible dejarla a derecha o izquierda, había Judas y sus hermanos, esperando hacer
que atravesarla–. 47 Pero los de la ciudad la una gran hazaña; 62 no eran de la raza de
cerraron y obstruyeron las puertas con pie- los hombres destinados a salvar a Israel.
dras. 48 Judas les envió mensajeros en son 63 El valeroso Judas y sus hermanos se
de paz que les dijeron: hicieron muy célebres en todo Israel y por
–Queremos pasar por el territorio de us- todos los países donde se oía hablar de
tedes para llegar a nuestra patria. Nadie les ellos. 64 La gente se arremolinaba en torno
hará ningún daño, sólo queremos pasar. a ellos, vitoreándolos.
65 Judas y sus hermanos salieron a lu-
Pero se negaron a abrirle.
49 Entonces Judas ordenó pregonar por char contra los descendientes de Esaú, en
el campamento que todos formaran para el el sur. Conquistó el territorio de Hebrón, de-
combate, en el sitio donde estuvieran. rribó sus plazas fuertes e incendió los torre-
50 Los guerreros formaron. Dio el asalto a la ones de la muralla. 66 Luego emprendió la
ciudad, todo aquel día y toda la noche, y la marcha al país filisteo y atravesó Maresá.
67 Aquel día cayeron en el combate unos
ciudad se rindió. 51 Judas pasó a cuchillo a
todos los varones, arrasó la villa después sacerdotes que, queriendo hacer una haza-
de saquearla y la atravesó pasando por en- ña, salieron a luchar imprudentemente.
68 Luego Judas torció hacia Asdod, en
cima de los cadáveres. 52 Luego cruzaron el
Jordán hasta la gran llanura, frente a Bei- tierra filistea; derribó sus altares, quemó las
sán. 53 Judas iba reuniendo a los rezagados imágenes de sus dioses, saqueó las ciuda-
y animando a la gente durante toda la mar- des y se volvió a Judá.
cha, hasta que llegaron a Judá. 54 Subieron Muerte de Antíoco
al monte Sión, en medio de una gran ale- (2 Mac 9)
gría, y ofrecieron holocaustos por haber re- 1 Elrey Antíoco recorría las provin-
gresado sanos y salvos, sin ninguna baja. 6 cias del norte cuando se enteró de
55 Mientras Judas y Jonatán estaban en
que en Persia había una ciudad llamada Eli-
Galaad, y su hermano Simón en Galilea, maida, famosa por su riqueza en plata y
frente a Tolemaida, 56 José, hijo de Zaca- oro, 2 con un templo lleno de tesoros: escu-
rías, y Azarías, oficiales del ejército, se en- dos dorados, corazas y armas dejadas allí
teraron de las hazañas militares que habían por Alejandro, el de Filipo, rey de Macedo-
llevado a cabo, 57 y se dijeron: nia, que había sido el primer rey de Grecia.
–Vamos a hacernos famosos también 3 Antíoco fue allá e intentó apoderarse de la
nosotros. ¡Vamos a luchar contra las nacio- ciudad y saquearla; pero no pudo, porque
nes vecinas! los de la ciudad, dándose cuenta de lo que
58 Dieron órdenes a sus tropas, y mar- pretendía, 4 salieron a atacarle. Antíoco
charon contra Yamnia. 59 Pero Gorgias y tuvo que huir, y emprendió el viaje de vuel-
sus hombres salieron de la ciudad a pre- ta a Babilonia, apesadumbrado.
sentarles batalla, 60 y José y Azarías huye- 5 Entonces llegó a Persia un mensajero
ron. Gorgias los persiguió hasta las fronte- con la noticia de que la expedición militar
ras de Judá. Aquel día cayeron unos dos contra Judá había fracasado. 6 Lisias, que
mil soldados israelitas, 61 el ejército sufrió había ido como caudillo de un ejército po-

6,1-17 Muerte de Antíoco. Antíoco Epífanes, al en- ministración del reino y la custodia de su hijo –en 1
terarse que los judíos han vencido sus tropas y han pu- Mac 3,33 la había encomendado a Lisias–. Antíoco
rificado el Templo que él había profanado, cae en un muere probablemente en la primavera del año 164
estado crítico de depresión. La descripción de su es- a.C., en Babilonia, ciudad que simboliza tragedia y
tado psicológico, hace honor al apodo que le tenían muerte para Israel (2 Re 24s; Ap 18,8; 16,19; 17,5;
algunos de sus súbditos: «epimanes», que significa 18,2.10.21), y se une a la lista de faraones o empera-
loco. Su confesión, aparentemente arrepentido por dores, que desde los tiempos de Egipto, han fracasa-
haber saqueado el Templo (1 Mac 1,54), no obedece do en su objetivo de desafiar el amor de Dios por los
a un acto de conversión sino más bien al reconoci- pobres y oprimidos.
miento de su fracaso. Antíoco encarga a Filipo la ad-
621 1 MACABEOS 6
deroso, había huido ante el enemigo; los los. 20 Se concentraron todos y empezaron
judíos, sintiéndose fuertes con las armas y el asedio el año ciento cincuenta, con ca-
pertrechos, y el enorme botín de los cam- tapultas y máquinas de asalto. 21 Algunos
pamentos saqueados, 7 habían derribado sitiados rompieron el cerco; se les juntaron
el altar construido sobre el altar de Jerusa- algunos renegados de Israel 22 que fueron
lén, habían levantado en torno al santuario a decirle al rey:
una muralla alta como la de antes, y lo –¿Cuándo piensas hacer justicia y ven-
mismo en Bet-Sur, ciudad que pertenecía gar a nuestros hermanos? 23 Nosotros nos
al rey. sometimos a tu padre voluntariamente,
8 Al oír este informe, el rey se asustó y procedimos según sus instrucciones y obe-
se impresionó, de tal forma que cayó en decimos sus órdenes a la letra. 24 El resul-
cama con una gran depresión, porque no le tado es que nuestros compatriotas han cer-
habían salido las cosas como quería. 9 Allí cado la fortaleza y nos tratan como
pasó muchos días, cada vez más deprimi- extraños. Más aún, han matado a los nues-
do. Pensó que se moría, 10 llamó a todos tros que caían en sus manos y, han confis-
sus grandes y les dijo: cado nuestros bienes. 25 Y no sólo extien-
–El sueño ha huido de mis ojos. Me sien- den la mano contra nosotros, sino también
to abrumado de pena 11 y me digo: ¡A qué contra todos los vecinos de su majestad.
26 Ahí los tienes, acampados ahora contra
tribulación he llegado, en qué violento ole-
aje estoy metido, yo, feliz y querido cuando la fortaleza de Jerusalén, intentando con-
era poderoso! 12 Pero ahora me viene a la quistarla; han fortificado el santuario y Bet-
memoria el daño que hice en Jerusalén, ro- Sur, 27 y si no te adelantas rápidamente, ha-
bando el ajuar de plata y oro que había allí rán cosas mayores todavía, y ya no podrás
y enviando gente que exterminase a los ha- detenerlos.
28 El rey se encolerizó al oír esto. Convo-
bitantes de Judá sin motivo. 13 Reconozco
que por eso me han venido estas des- có a todos los grandes del reino, jefes de in-
gracias. Ya ven, muero de tristeza en tierra fantería y de caballería. 29 Y como también
extranjera. se le presentaron mercenarios del extranje-
14 Llamó a Filipo, un grande del reino, y ro y de los países marítimos, 30 su ejército
lo puso al frente de todo el imperio. 15 Le contaba cien mil infantes, veinte mil jinetes
dio su corona, su manto real y el anillo, en- y treinta y dos elefantes amaestrados para
cargándole la educación de su hijo Antíoco la lucha. 31 Atravesando Idumea asediaron
y de prepararlo para reinar. 16 El rey Antío- Bet-Sur. La lucha se prolongó muchos días;
co murió allí el año ciento cuarenta y nue- prepararon máquinas de asalto, pero los si-
ve. 17 Cuando Lisias se enteró de la muerte tiados hicieron una salida y las incendiaron,
del rey alzó por rey a su hijo Antíoco, cria- luchando valientemente.
32 Entonces Judas levantó el cerco de la
do por él de pequeño, y le dio el sobre-
nombre de Eupátor. fortaleza y acampó junto a Bet-Zacarías,
frente al campamento del rey. 33 De madru-
Antíoco Eupátor gada, el rey hizo avanzar su ejército a toda
18 Mientras tanto, la gente de la fortale- prisa por el camino de Bet-Zacarías. Las
za tenía confinados a los israelitas en tor- tropas se dispusieron a entrar en acción, y
no al templo, y no perdía ocasión de ha- sonó la señal de ataque. 34 A los elefantes
cerles mal y favorecer a los paganos. les habían dado vino de uva y de moras,
19 Judas se propuso acabar con ellos, y para excitarlos a la lucha. 35 Los repartieron
congregó a todo el ejército para asediar- entre los escuadrones, asignando a cada

6,18-63 Antíoco Eupátor. La seguidilla de triunfos También la acción heroica de Lázaro Macabeo resul-
se interrumpe. Aunque el autor no lo dice explícita- ta ser un fracaso al no lograr el objetivo de eliminar al
mente, el ejército macabeo es derrotado por el nue- rey. Las contradicciones entre los poderosos –Lisias y
vo emperador Antíoco Eupátor. Un grupo de israelitas Filipo– a causa de la ambición y los celos, permite ali-
helenizados y traidores claman al emperador de tur- viar la situación de los judíos. A pesar que Lisias de-
no con palabras que deberían ser para Dios (22). rrota militarmente a Judas Macabeo, firma con éste
1 MACABEOS 6 622
elefante mil hombres protegidos con cora- en el país–. 50 El rey ocupó Bet-Sur y acan-
zas y cascos de bronce, más quinientos ji- tonó allí una guarnición para su defensa.
netes escogidos: 36 donde estaba un elefan- 51 Luego puso cerco durante muchos días al
te, allí estaban ellos; adonde iba, iban ellos, templo; instaló ballestas y máquinas de
sin separarse de él. 37 Cada elefante llevaba asalto, lanzallamas, catapultas, lanzadar-
encima, sujeta con un arnés, una torre de dos y hondas. 52 Los judíos hicieron tam-
madera bien protegida. En cada torre iban bién máquinas defensivas, y la lucha se
el guía indio y cuatro guerreros, que dispa- prolongó muchos días. 53 Pero cuando se
raban desde allí. 38 El resto de la caballería, acabaron los víveres en los almacenes, por-
protegido por las tropas de a pie, iba en las que era año séptimo, y los que se habían
dos alas del ejército, para hostigar al ene- refugiado huyendo a Judá desde el extran-
migo. jero habían consumido las últimas provisio-
39 Cuando el sol relumbró sobre los es- nes, 54 se quedaron pocos en el templo; el
cudos de oro y bronce, su reflejo en los hambre apretaba, y se dispersaron cada
montes los hizo resplandecer como antor- cual por su lado.
chas. 40 Parte del ejército real estaba for- 55 Lisias se enteró de que Filipo, a quien
mado en las cumbres de los montes; otra el rey Antíoco había confiado en vida la
parte en la ladera. Iban avanzando seguros educación de su hijo Antíoco como suce-
y en perfecto orden. 41 Estremecía oír el fra- sor, 56 había vuelto de Persia y Media con
gor de aquella muchedumbre en marcha y las tropas de la expedición real y que inten-
el entrechocar de las armas. Realmente era taba hacerse con el poder. 57 Rápidamente
un ejército inmenso y poderoso. determinó partir, y dijo al rey, a los genera-
42 Judas y sus tropas avanzaron, y en el les y a las tropas:
choque el ejército real tuvo seiscientas ba- –Cada día somos menos, tenemos po-
jas. 43 Lázaro, apodado Avarán, se fijó en cas provisiones y el lugar que atacamos
un elefante protegido con armadura real está fortificado; los asuntos del reino son
que sobresalía entre los demás elefantes; urgentes. 58 Hagamos las paces con esa
creyendo que el rey iba allí, 44 entregó su gente, firmemos un tratado con ellos y toda
vida para salvar a su pueblo y ganarse así su nación, 59 permitiéndoles vivir según su
renombre inmortal: 45 corrió audazmente legislación, como hacían antes. Porque, en-
hacia el elefante, matando a diestra y si- furecidos por haberles abolido su legisla-
niestra por en medio del escuadrón, que se ción, nos han hecho todo esto.
iba abriendo a ambos lados, 46 se metió 60 El rey y los jefes aprobaron la pro-
bajo el elefante y le clavó la espada; el ele- puesta; ofrecieron la paz a los judíos, y és-
fante se desplomó encima de él, y allí mu- tos la aceptaron. 61 El rey y los jefes confir-
rió. maron el pacto con juramento, y así los
47 Los judíos, al ver la fuerza impetuosa judíos salieron de la fortaleza. 62 Pero cuan-
del ejército real retrocedieron. 48 Los del do el rey llegó al monte Sión y vio aquellas
ejército real subieron contra ellos hacia Je- fortificaciones quebrantó el juramento y
rusalén; el rey acampó con intención de in- mandó derribar la muralla entera. 63 Luego
vadir Judá y el monte Sión, 49 hizo un trata- partió rápidamente y volvió a Antioquía
do de paz con los de Bet-Sur, que salieron donde encontró a Filipo que se había apo-
de la ciudad –no tenían ya provisiones para derado de la ciudad. El rey lo atacó y se la
resistir el asedio, porque era año sabático arrebató por la fuerza.

un pacto donde le concede a Israel libertad religiosa, ante el enemigo a sus propios hermanos. Comprar la
pero no la libertad política, militar y tributaria. Para conciencia de hombres y mujeres en las naciones so-
un autor enamorado de Dios y de la gesta macabea, metidas sigue siendo una tarea prioritaria de los nue-
es comprensible que en este capítulo con sabor a de- vos imperios. También son muchos los que hoy ven-
rrota no se mencione en la negociación ni a Dios ni a den su conciencia, la vida y la dignidad de su pueblo,
los macabeos. El principal culpable de la derrota judía por obtener privilegios y favorecer sus propios intere-
no es el rey de turno, sino los israelitas «renegados» ses. En este tipo de opciones es lógico que Dios esté
que vendieron su conciencia y su libertad, acusando ausente.
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Demetrio I parte de los israelitas eran los Leales,
(2 Mac 14,1-10) 14 porque decían:
1 El año ciento cincuenta y uno De-
–El que ha venido con el ejército es un
7 metrio de Seleuco se marchó de sacerdote de la estirpe de Aarón; no nos va
Roma, desembarcó con unos pocos en una a traicionar.
ciudad de la costa y allí empezó su reina- 15 Báquides habló con ellos en son de
do. 2 Cuando iba a entrar en el palacio real paz y les juró:
de sus antepasados, las tropas apresaron a –No los maltrataremos, ni a ustedes, ni a
Antíoco y Lisias para llevárselos a Deme- sus amigos.
trio. 3 Se lo dijeron a Demetrio, y respon- 16 Ellos le creyeron, pero él hizo arrestar
dió: y ejecutar a sesenta de ellos en un solo día,
–¡No quiero ni verles la cara! según aquel texto de la Escritura:
4 Entonces los soldados los mataron, y 17 Desparramaron los cadáveres
Demetrio subió al trono imperial. 5 Todos y la sangre de tus fieles
los israelitas renegados e impíos acudieron alrededor de Jerusalén,
a él, guiados por Alcimo, que aspiraba al y nadie los entierra.
cargo de sumo sacerdote, 6 y acusaron al 18 A la gente le entró pánico ante los in-
pueblo ante el rey: vasores. Se comentaba:
Judas y sus hermanos han exterminado –No tienen sinceridad ni honradez; han
a todos tus partidarios, y a nosotros nos faltado a su palabra y a su juramento.
han expulsado de nuestro país. 7 Envía a 19 Después Báquides marchó de Jeru-
uno de tu confianza a inspeccionar los des- salén para acampar en Betsaid. Mandó
trozos que nos ha causado Judas, a noso- apresar a muchos de los suyos, que habían
tros y a tu provincia, y a castigarlos a ellos desertado, y a algunos del pueblo, los ase-
y a todos los que los apoyan. sinó y los arrojó a la cisterna grande.
8 El rey eligió a Báquides, del grupo de 20 Luego puso la provincia en manos de Al-
los amigos del rey, gobernador de la zona cimo, dejando un destacamento para apo-
occidental del Éufrates, hombre influyente yarlo, y se volvió adonde estaba el rey.
y de su confianza. 9 Lo envió con el impío 21 Alcimo tuvo que luchar para defender su
Alcimo, confirmado en el cargo de sumo cargo de sumo sacerdote; 22 se le unieron
sacerdote, con orden de castigar a los is- todos los agitadores del pueblo y se adue-
raelitas. 10 Partieron. Entraron en Judá con ñaron de Judá, haciendo un estrago enor-
un ejército numeroso, y mandaron una em- me en Israel.
bajada a Judas y sus hermanos, con falsas 23 Cuando Judas vio que Alcimo y su
propuestas de paz. 11 Pero los judíos, al ver- gente hacían más daño a los israelitas que
los con un ejército tan numeroso no hicie- los paganos, 24 salió por todo el territorio de
ron caso a la embajada; 12 sin embargo, Judá para castigar a los desertores e impe-
una comisión de escribas se reunió con Al- dirles hacer correrías por la región. 25 Y al
cimo y Báquides para buscar una solución ver Alcimo que Judas y los suyos se reha-
justa; 13 los primeros en pedir la paz por cían, comprendió que no podría resistirles,

7,1-25 Demetrio I. Demetrio I, heredero legítimo res a sus propios hermanos. Para esta misión se apoyan
de Seluco IV no pudo ocupar el trono al morir su pa- en Alcimo –nombre helenizado de Joaquín–, nombra-
dre, ya que siendo todavía un niño fue arrestado y lle- do sumo sacerdote por el emperador (9) pero recha-
vado a Roma. Asumió el poder su hermano Antíoco IV zado por los judíos tradicionales por su corte helenista
y luego su sobrino Antíoco V, a quien Demetrio consi- y su actitud servil ante el imperio de turno. Alcimo y
dera un usurpador. Demetrio escapa de Roma y con el los «renegados» le declaran la guerra a sus propios
apoyo de una parte del ejército, retoma el poder y se hermanos (21-25). Judas Macabeo responde de igual
proclama rey en el año 161 a.C. Sus generales asesi- manera (23s). Es triste ver cómo la ausencia en los di-
nan a Antíoco V y a Lisias. Con la llegada de Demetrio rigentes de una conciencia alimentada por el diálogo,
al poder, se agudiza el conflicto entre los dos grupos la tolerancia, la justicia y el amor, termina dividiendo
judíos: los «renegados» –prohelenistas– y los tradicio- y enfrentando a los propios hermanos, mientras los
nales –promacabeos–. Los judíos «renegados» acuden poderosos, verdaderos causantes del mal, aprovechan
nuevamente ante el emperador para acusar de traido- las circunstancias para perpetuar su dominio.
1 MACABEOS 7 624
y se volvió al rey, con gravísimas acusa- 36 Los sacerdotes entraron, y de pie fren-
ciones. te al altar y el santuario dijeron entre lágri-
Derrota de Nicanor
mas:
37 –Tú elegiste este templo dedicado a tu
(2 Mac 14,12-36)
26 Entonces el rey envió a Nicanor, uno Nombre para que sirviera a tu pueblo de
de sus más famosos generales, enemigo casa de oración y súplica. 38 Castiga a ese
mortal de los israelitas, con el encargo de hombre y a su ejército. ¡Que caiga a filo de
exterminar al pueblo. 27 Nicanor llegó a Je- espada! Recuerda sus blasfemias, no les
rusalén con un gran ejército, y envió a Ju- des reposo.
39 Nicanor salió de Jerusalén y acampó
das y sus hermanos este mensaje, con pa-
labras fingidas de amistad: en Bet-Jorón; allí se le añadió un ejército si-
28 –No nos peleemos. Yo saldré con una rio.
40 Judas acampó en Adasa con tres mil
pequeña escolta para celebrar con ustedes
una entrevista amistosa. hombres, y rezó así:
29 Llegó a donde estaba Judas, y se sa- 41 –Cuando los embajadores del rey

ludaron amistosamente, pero los enemigos blasfemaron, salió tu ángel y les mató a
estaban preparados para secuestrar a Ju- ciento ochenta y cinco mil. 42 Aplasta hoy
das. 30 Judas se enteró de que la visita de igualmente a este ejército ante nuestros
Nicanor era una trampa, y le tomó tal mie- ojos, para que sepan todos que blasfemó
do que no quiso volver a verlo. 31 Entonces contra tu templo. ¡Júzgalo como merece su
Nicanor se dio cuenta de que su plan había maldad!
sido descubierto, y salió a luchar contra Ju- 43 Los ejércitos entraron en combate el
das, junto a Cafarsalán. 32 Nicanor tuvo trece de marzo. El ejército de Nicanor fue
unas quinientas bajas, y los demás huyeron derrotado; el primero en caer fue el mismo
a la Ciudad de David. Nicanor, 44 y sus soldados, al ver que había
33 Después de estos sucesos, Nicanor caído, arrojaron las armas y huyeron. 45 Los
subió al monte Sión. Algunos sacerdotes y judíos los persiguieron una jornada, desde
ancianos del pueblo salieron del templo Adasa hasta Guézer, tocando las trompetas
para saludarle amistosamente y mostrarle detrás de ellos. 46 De todos los poblados ju-
el holocausto que se ofrecía por el rey. díos a la redonda salió gente para cercar a
34 Pero él los despreció, se burló de ellos, los que huían, que se volvían unos contra
los escupió, profiriendo insolencias, 35 y otros; todos cayeron a espada, no quedó ni
juró encolerizado: uno. 47 Luego agarraron el botín y los des-
–Si no me entregan ahora mismo a Ju- pojos. A Nicanor le cortaron la cabeza y la
das y a su ejército, cuando yo vuelva victo- mano derecha, que había extendido inso-
rioso incendiaré este templo. lentemente, y las llevaron para colgarlas
Y salió enfurecido. frente a Jerusalén.

7,26-50 Derrota de Nicanor. Alcimo pide ayuda a derrota y muerte del invasor, huída del resto del ejér-
Demetrio, quien manda a Nicanor, su mejor general, cito enemigo y fiesta de los triunfadores (cfr. 2 Re
para atacar a los judíos y quitarles la poca autonomía 18,17–19,37). El triunfo macabeo se convierte en una
que mantenían. La estrategia de Nicanor se basa en el fiesta con intenciones de repetirla anualmente. Sin
engaño so pretexto de un proceso de diálogo y nego- embargo, muy pronto dejó de celebrarse, probable-
ciación. ¿Cómo lograr que la palabra, igual que la de mente por su proximidad con la fiesta de Purim (14 de
Dios en el primer capítulo del Génesis o la de Jesús, marzo). Este final, con sabor a triunfo liberador y tiem-
sea siempre una palabra creadora de vida, sincera y po de paz, recuerda las gestas narradas en el libro de
confiada, y no una palabra que se utiliza para enga- los Jueces.
ñar y destruir la vida? Ser hombres y mujeres de pala- Dos hechos para reflexionar desde una perspectiva
bra es un buen punto de partida para que los diálo- cristiana. El primero, la actitud poco tolerante y vio-
gos de las personas y los pueblos sean fructíferos y lenta de Judas Macabeo, quien después del pacto fir-
eficaces. mado con Lisias, recorría el país matando y maltra-
La batalla final sigue un esquema conocido en el tando los judíos «desertores» (7,23). La segunda,
Antiguo Testamento: presentación de los ejércitos, colocar a Dios como un general del ejército que man-
oración pidiendo la intervención de Dios, la batalla, da a sus ángeles a matar los enemigos de quienes ele-
625 1 MACABEOS 8
48 El pueblo se alegró muchísimo, y fes- chas bajas a los griegos, se llevaron cauti-
tejaron aquel día como si fuera una gran vos a las mujeres y niños, saquearon el país
fiesta. Determinaron celebrar anualmente
49 y lo sometieron, derribaron las plazas fuer-
aquella fecha, trece de marzo. tes y los redujeron a esclavitud perpetua.
50 Judá tuvo paz por algún tiempo. 11 Aniquilaron y esclavizaron los restantes
reinos, las islas, a cuantos les opusieron re-
Judas pacta con Roma sistencia; en cambio, se mantenían fieles a
1 Judas había oído hablar de los ro- sus amigos y a los que se ponían bajo su
8 manos: que eran muy poderosos, be- protección. 12 Dominaron a reyes vecinos y
névolos con sus aliados y que hacían pacto lejanos. Cuantos oían hablar de ellos los te-
de amistad con cuantos acudían a ellos. mían. 13 Aquéllos a quienes quieren ayudar
2 Le contaron sus hazañas militares en las en sus pretensiones al trono, llegan a reyes;
Galias: cómo las habían conquistado, so- a los que quieren cambiar, los destituyen.
metiéndolas a tributo; 3 y todo lo que ha- Están en la cima del poder. 14 Y con todo
bían hecho en tierras de España para apo- esto ni uno de ellos ha ceñido la corona ni
derarse de las minas de plata y oro que hay se ha vestido de púrpura para aumentar su
allí, 4 cómo habían sabido mantener su do- autoridad. 15 Han formado un Senado, y
minio en todo el país con paciencia y pru- diariamente deliberan trescientos veinte se-
dencia, y eso que estaba muy lejos. A los nadores, buscando siempre el bien público.
reyes que les habían atacado desde los 16 Confían cada año el poder y el gobierno
confines de la tierra los habían derrotado del país a un solo hombre; todos le obede-
aplastándolos definitivamente; los demás cen, sin envidia ni rivalidades.
les pagaban un tributo anual. 5 Habían de- 17 Judas eligió a Eupólemo, hijo de
rrotado y sometido a Filipo, a Perseo, rey Juan, hijo de Acos, y a Jasón, hijo de Láza-
de Macedonia, y a los que se les habían su- ro, y los envió a Roma para firmar un trata-
blevado; 6 derrotaron también a Antíoco el do de amistad y mutua defensa, 18 con la
Grande, rey de Asia, que salió a atacarles intención de sacudirse el yugo griego, por-
con ciento veinte elefantes, caballería, ca- que veían que el imperio griego estaba es-
rros y muchísima infantería: 7 lo apresaron clavizando a Israel.
vivo, y quedó obligado, él y sus sucesores 19 Partieron para Roma, un viaje larguísi-
en el trono, a pagar un fuerte tributo, a en- mo. Y al entrar en el Senado hablaron así:
tregar rehenes y ceder la India, Media y Li- 20 –Judas Macabeo, sus hermanos y el
dia, 8 las mejores provincias del rey; cuan- pueblo judío nos han enviado aquí para ha-
do los romanos las recibieron se las dieron cer con ustedes un tratado de paz y mutua
al rey Eumenes. 9 También los griegos pro- defensa, y para que nos inscriban en el
yectaron una campaña para aniquilar a los número de sus aliados y amigos.
romanos, 10 pero al enterarse éstos del pro- 21 Los senadores aprobaron la petición.
yecto mandaron contra ellos a un solo ge- 22 Copia de documento que escribieron
neral: entraron en combate e hicieron mu- en tablillas de bronce, y mandaron a Jeru-

van sus oraciones al cielo. Aunque Jesús es duro con terna en cabeza de un senado que busca siempre el
los enemigos del pueblo y de los pobres, la justicia y bien público (15). Cabría preguntar: ¿el bien público
la paz no se consiguen con la violencia, sino con la de quién? De ellos mismos, es decir de los que tienen
concientización y la organización de los pueblos. ciudadanía romana, pues su política exterior está cla-
8,1-32 Judas pacta con Roma. El autor hace un pa- ramente caracterizada por la discriminación, el ani-
réntesis en su relato –continuará en 9,1– para presen- quilamiento, la esclavitud, el sometimiento, la imposi-
tar a Roma, nuevo actor imperial que ha entrado en ción de gobernantes y de un modelo económico
escena y que para mediados del s. II a.C. ya domina- tributario (4.5.7.11).
ba todo el Mediterráneo. A pesar del esfuerzo que En poco difieren las características del nuevo impe-
hace el autor por justificar el pacto del pueblo judío rio romano con las de todos los imperios, bien señala-
con Roma, sus mismos comentarios lo hacen contra- das en 1 Sm 8,4-22. ¿Cuál será entonces la motivación
dictorio. Los elogia por su lealtad (1.11), su poderío real para que los Macabeos firmen con los romanos
militar (2-12), porque gobiernan sin soberbia a pesar un pacto de «amistad y mutua defensa» (20s), preci-
de su poderío (14) y por su organización política in- samente cuando se disfrutaba de un triunfo liberador
1 MACABEOS 8 626
salén para que quedase allí como docu- Báquides y Alcimo al territorio de Judá con
mento fehaciente del pacto de paz y mutua el ala derecha del ejército. 2 Emprendieron
defensa: la marcha por el camino de Guilgal, toma-
23 ¡Gocen bienestar perpetuo romanos y ron al asalto Mesalot de Arbela y asesina-
judíos en tierra y mar! ¡Lejos de ellos la es- ron a mucha gente. 3 El mes primero del
pada enemiga! año ciento cincuenta y dos acamparon
24 Pero si estalla la guerra contra Roma o frente a Jerusalén, 4 pero luego partieron de
uno de sus aliados en el imperio, 25 el pue- allí, camino de Berea, con veinte mil de in-
blo judío luchará a su lado con toda el fantería y dos mil jinetes.
alma, conforme lo exijan las circunstan- 5 Judas acampaba en Elasa con tres
cias, 26 a los enemigos no les darán ni su- mil soldados, 6 y al ver la enorme muche-
ministrarán alimentos, armas, dinero, na- dumbre de enemigos se aterrorizaron;
ves. Es decreto de Roma. Cumplirán estas muchos desertaron del campamento, y
cláusulas sin compensación alguna. sólo quedaron ochocientos. 7 Judas vio
27 Igualmente, si estalla una guerra con-
que su ejército se deshacía precisamente
tra el pueblo judío, los romanos lucharán a cuando era inminente la batalla, y se des-
su lado decididamente, conforme lo exijan corazonó, porque ya no era posible reunir-
las circunstancias, 28 y no darán a los ene- los. 8 Aunque desalentado, dijo a los que
migos alimentos, armas, dinero ni naves. quedaban:
Es decreto de Roma. Observarán estas –¡Ataquemos lo mismo a nuestro enemi-
cláusulas lealmente. go! A lo mejor podemos presentarles ba-
29 En estos términos quedaba estipulado
talla.
el pacto de los romanos con el pueblo ju- 9 Los suyos intentaban convencerle:
dío. –Es completamente imposible. Sal-
30 Y si más adelante alguna de las partes
vemos primero nuestras vidas, luego volve-
quisiera añadir o rescindir algo, se hará de remos con los nuestros, y entonces les da-
común acuerdo, y lo añadido o rescindido remos la batalla. Ahora somos pocos.
tendrá fuerza de ley. 10 Judas repuso:
31 En cuanto a los daños que les ha cau-
–¡Nada de huir ante el enemigo! Si nos
sado el rey Demetrio, ya le escribimos en ha llegado la hora, muramos valientemente
los siguientes términos: ¿Por qué oprimes por nuestros compatriotas, sin dejar una
tiránicamente a nuestros amigos y aliados mancha en nuestra fama.
los judíos? 32 Si se nos vuelven a quejar de 11 El ejército enemigo salió del campa-
ti, defenderemos sus derechos atacándote mento y formó frente a ellos, con la caba-
por tierra y mar. llería dividida en dos cuerpos, y los honde-
Muerte de Judas ros y arqueros delante del ejército, los más
1 Pero
Demetrio, en cuanto oyó que aguerridos en primera fila. Báquides iba en
9 Nicanor y su ejército habían su- el ala derecha. 12 La tropa avanzó por am-
cumbido en el combate, volvió a enviar a bos lados, a toque de la trompeta. 13 Los de

y de un tiempo de paz? (1 Mac 7,48-50). Según los 9,1-22 Muerte de Judas. Continúa el relato del ca-
macabeos, buscan sacudirse del yugo de los griegos pítulo 7. Judas no se conforma con la autonomía reli-
(18). Estos tratados se grababan en tablas de bronce. giosa sino que continúa luchando por una autonomía
Se hacía un original en latín que reposaba en el capi- política. Demetrio, rey sirio, queriendo vengar la
tolio romano, y otra copia en griego que se entregaba muerte de Nicanor, pero también preocupado por los
al estado con el que se firmaba el pacto. El autor de acuerdos de los judíos con Roma, envía un gran ejér-
Macabeos omite el preámbulo y el final del pacto por- cito para aniquilar la resistencia judía, cuyo ejército
que se mencionan los dioses romanos Júpiter y Capi- se encuentra desintegrado, desanimado y temeroso.
tolio. Comienza así una nueva etapa en la historia de Llama la atención que Judas, a pesar de la inferiori-
Israel, que como se verá con el tiempo, antes que be- dad numérica, no invoca a Dios como en otras oca-
neficios aumentará la opresión y esclavitud. Se dice siones (1 Mac 4,10.30-33; 7,41s), sino que decide
que los judíos llegaron a odiar tanto a los romanos que enfrentar la batalla con la convicción de ofrecer la
será una de las razones para excluir el libro de los Ma- vida por la causa liberadora del pueblo judío (10). Es
cabeos del canon judío. como si presintiera la derrota y la muerte (8-10). Ju-
627 1 MACABEOS 9
Judas también tocaron las trompetas, y el lucha contra el enemigo, ese Báquides y los
suelo retembló por el fragor de los ejércitos. que odian a nuestro pueblo. 30 Por eso te
El combate se entabló al amanecer y duró elegimos hoy a ti para que lo sustituyas
hasta la tarde. como jefe y caudillo que dirija nuestra gue-
14 Judas vio que Báquides y lo más fuer- rra.
te del ejército estaba a la derecha; se le jun- 31 En aquel mismo instante tomó el

taron los más animosos, 15 destrozaron el mando Jonatán, sucediendo a su hermano


ala derecha y la persiguieron hasta los Judas. 32 Báquides se enteró y quería ma-
montes de Asdod. 16 Pero cuando los del tarlo; 33 pero en cuanto lo supieron Jona-
ala izquierda vieron que el ala derecha es- tán, su hermano Simón y todos sus cama-
taba destrozada se volvieron en persecu- radas, huyeron al desierto de Tecua y
ción de Judas y sus compañeros. 17 El acamparon junto a la cisterna de Asfar.
combate arreció, y hubo muchas bajas por 34 Báquides lo supo un sábado, y fue él

ambas partes. 18 Judas también cayó, y los en persona con todo su ejército a la otra
demás huyeron. orilla del Jordán.
19 Jonatán y Simón recogieron el ca- 35 Jonatán envió a su hermano al frente

dáver de su hermano Judas y lo enterraron de la comitiva, a pedir a sus amigos los na-
en la sepultura familiar, en Modín. 20 Lo llo- bateos que les cuidaran todo el equipaje,
raron, y todo Israel le hizo solemnes funera- que era mucho. 36 Pero los hijos de Jambrí,
les, entonando muchos días esta lamenta- de Madabá, salieron y capturaron a Juan
ción: 21 ¡Cómo ha caído el héroe, salvador con todo lo que tenía, y se marcharon lle-
de Israel! vándoselo todo.
22 No hemos escrito otros datos de la 37 Poco tiempo después comunicaron a

historia de Judas, sus hazañas militares y Jonatán y su hermano Simón:


sus títulos de gloria, porque fueron muchí- –Los hijos de Jambrí celebran una gran
simos. boda; a la novia, hija de uno de los ricos de
Canaán, la llevan desde Madabá en un gran
Jonatán y Báquides cortejo.
23 Después que murió Judas, por todo el 38 Recordando el asesinato de su her-
territorio israelita asomaron de nuevo los mano Juan, subieron a ocultarse al reparo
renegados y reaparecieron todos los mal- del monte. 39 De pronto vieron aparecer en
hechores. 24 El país se pasó a su bando, dirección hacia ellos y en medio de un gran
porque por entonces hubo un hambre terri- gentío que llevaba regalos, al novio, que
ble. 25 Báquides eligió a unos impíos y los avanzaba hacia el cortejo de la novia con
puso al frente del gobierno de la zona. sus amigos y parientes, al son de la músi-
26 Ellos seguían el rastro de los amigos de
ca, de tamboriles y otros instrumentos.
Judas, y se los llevaban a Báquides, que los 40 Los de Jonatán salieron de la emboscada
castigaba y humillaba. y se lanzaron contra ellos para matarlos.
27 Fue un tiempo de grandes sufrimien-
Hirieron a muchos, y los supervivientes es-
tos para Israel como no se había visto des- caparon al monte. Les quitaron todo el bo-
de que desaparecieron los profetas. tín, 41 y la boda se cambió en luto, y el can-
28 Todos los partidarios de Judas se reu-
to de los músicos en lamentación. 42 Así
nieron y dijeron a Jonatán: vengaron la muerte de su hermano. Luego
29 –Desde que murió tu hermano Judas se volvieron a las regiones pantanosas del
no tenemos un valiente como él que guíe la Jordán.

das, tras una férrea resistencia muere en su ley. Llama Jonatán (2 Sm 1,19-27) y refleja el amor que le profe-
la atención que el autor no acuse a Roma de violar el saba su pueblo. El título de salvador es el mismo que
pacto al no acudir en defensa de su aliado. Ésta es la se daba a los jueces de Israel. Judas hizo muchas ha-
primera prueba que el pacto con el imperio romano zañas que no se recogen en este libro (cfr. Jn 20,30;
antes que beneficios sólo significó ruina y muerte 21,25).
para los judíos. La elegía por la muerte de Judas re- 9,23-73 Jonatán y Báquides. Comienza el ciclo de
cuerda la reacción de David ante la muerte de Saúl y Jonatán (9,23–12,53). El vacío dejado por Judas es
1 MACABEOS 9 628
43 Cuando Báquides lo supo se fue un 54 El año ciento cincuenta y tres, el se-
sábado hasta las riberas del Jordán con un gundo mes, Alcimo ordenó derribar el muro
gran ejército. Jonatán dijo a los suyos:
44 del atrio interior del templo, destruyendo la
–¡Ánimo! Luchemos por defender nues- obra de los profetas. Empezó la demolición,
55 pero precisamente entonces Alcimo su-
tras vidas, que hoy no es como antes. 45 Mi-
ren, el enemigo nos asedia por delante y frió una enfermedad que detuvo sus planes;
por detrás, de un lado están las aguas del la parálisis le cerró la boca de forma que no
Jordán y del otro los pantanos y las male- podía hablar ni hacer testamento. 56 Y así
zas; no hay donde batirse en retirada. 46 Así murió entonces, entre enormes dolores.
que clamen al cielo para que nos salve de 57 Cuando Báquides vio que había muer-

nuestros enemigos. to Alcimo, regresó a donde estaba el rey.


47 Se trabó el combate. Jonatán alargó Judá quedó en paz durante dos años.
el brazo para herir a Báquides, pero éste lo 58 Todos los judíos renegados delibera-

esquivó echándose atrás. 48 Jonatán y los ron:


suyos se echaron al río y lo atravesaron a –Ahí tienen a Jonatán y los suyos, tran-
nado hasta la otra orilla; el enemigo no quilos y confiados. Traeremos a Báquides
pasó el Jordán en su persecución. 49 Báqui- para que se apodere de todos ellos en una
des tuvo aquel día unas mil bajas; 50 luego noche.
se volvió a Jerusalén y comenzó a fortificar 59 Fueron a verlo y parlamentaron con
algunas ciudades en Judea: las fortalezas él.
de Jericó, Emaús, Bet-Jorón y Betel, Tim- 60 Báquides se puso en marcha con un
ná, Piratón y Tefón, con murallas altas, gran ejército. Envió instrucciones secretas
puertas y cerrojos. 51 En todas ellas acuar- a todos sus aliados de Judá para que apre-
teló guarniciones para hostilizar a Israel. saran a Jonatán y sus compañeros; pero no
52 Fortificó también la ciudad de Bet- lo consiguieron, porque se descubrió su
Sur, Guézer y la fortaleza, y dejó en ellas plan. 61 Jonatán y los suyos apresaron a
tropas y depósitos de víveres. 53 Tomó unos cincuenta hombres de la región, de
como rehenes a los hijos de las autoridades los principales conspiradores, y los mata-
de la zona y los encarceló en la fortaleza de ron. 62 Jonatán y Simón se retiraron con su
Jerusalén. gente a Bet-Basí del Páramo, reconstruye-

aprovechado por el grupo de los «renegados» para au- su fracaso y humillación, hasta el punto de castigar-
mentar su poder e influencia. Para eso cuentan con el los y romper toda relación con ellos. Situación que
apoyo de los gobernantes sirios. La situación se vuel- aprovecha Jonatán para lograr un pacto de no agre-
ve insoportable para los judeomacabeos, que deciden sión con Báquides. Jonatán va consolidándose como
acudir a Jonatán, hermano menor de Judas Macabeo, un gran comandante militar y un hábil negociador,
para pedirle que se ponga al frente del ejército judío. hasta el punto que el autor lo presenta con las carac-
Un mal cálculo militar de Jonatán causa la muerte de terísticas de los Jueces de Israel (73). En medio del re-
Juan, su hermano mayor (1 Mac 2,8) a manos de una lato se cuenta la muerte del sumo sacerdote Alcima
tribu árabe, la familia de Jambrí, por robarle todo su después de haber derrumbado el muro del Templo
equipaje. La reacción de Jonatán es ejecutar una ven- (54s) que separaba los atrios de los judíos y los gen-
ganza que asedia, roba y mata a la familia Jambrí tiles (1 Re 7,12; Ez 44,9). Recordemos que si un gen-
mientras celebraba una boda. La alegría de la boda se til, en el Templo de Jerusalén, pisaba el patio de los
convirtió en luto y lamento (cfr. Am 8,10). Una acción judíos era sometido a la pena de muerte. El autor
que hay que comprenderla dentro del contexto de la considera la enfermedad y muerte de Alcima como
época, pero que todavía está lejos del espíritu evan- un castigo por esta acción sacrílega. Respetando el
gélico. contexto de la época, tendríamos que decir que la
El relato continúa describiendo las batalles entre actitud reprobable de Alcima, al quitar el muro que
Báquides, representante del imperio Sirio, apoyado separaba a judíos y gentiles, será por el contrario,
por los judíos «renegados» (9,23) y Jonatán, repre- parte de la misión de Jesús y de los cristianos de to-
sentante del grupo judeomacabeo. La actitud de los dos los tiempos. Por ejemplo, el desgarro del velo del
«renegados» de acusar a sus hermanos ante los sirios Templo de Jerusalén al momento de la muerte de Je-
y ganarse el favor del imperio, esta vez se vuelve en sús (Mc 15,38), se interpreta también como el derri-
su contra, dado que Báquides al fracasar en su inten- bamiento del muro que separaba a Dios de su pue-
to por derrotar a Jonatán, acusa a los «renegados» de blo.
629 1 MACABEOS 10
ron lo que estaba en ruinas y la fortificaron. ta amistosa, dándole mayores poderes;
63 En cuanto se enteró Báquides, reunió to- 4 porque pensó:
das sus tropas y avisó a los de Judá; 64 lle- –Voy a adelantarme a hacer con ésos las
gó a Bet-Basí, la cercó y la atacó durante paces, antes de que las haga con Alejandro
muchos días, emplazando máquinas de en contra mía, 5 cuando se acuerde de todo
asalto. el daño que le hice a él, a sus hermanos y
65 Jonatán dejó a su hermano Simón en a su raza.
la ciudad, salió hacia el campo y se puso en 6 Le autorizó para reclutar tropas, fabri-
marcha con unos cuantos. 66 Derrotó a car armas y ser su aliado, y mandó devol-
Odomera y sus parientes, y a los hijos de verle los rehenes de la fortaleza.
Farisón en su campamento. Luego empe- 7 Jonatán fue a Jerusalén y leyó la carta
zaron a repartir golpes, avanzando por en- a todo el pueblo y a los de la fortaleza. 8 To-
tre el ejército. 67 Entonces Simón y los su- dos se aterrorizaron al oír que el rey lo au-
yos hicieron una salida e incendiaron las torizaba para reclutar un ejército. 9 Los de la
máquinas de asalto. 68 Lucharon contra fortaleza devolvieron a Jonatán los rehe-
Báquides y lo derrotaron; quedó profunda- nes, y él los entregó a sus padres. 10 Jona-
mente humillado, porque su plan y su cam- tán se instaló en Jerusalén, y empezó a re-
paña habían sido inútiles. 69 Entonces se construir y restaurar la ciudad. 11 Ordenó a
enfureció contra los renegados que le ha- los albañiles que reconstruyeran la muralla
bían aconsejado la expedición, mató a mu- y rodearan el monte Sión con una fortifica-
chos y decidió volverse a su tierra. ción hecha de piedras talladas. Así lo hicie-
70 Al enterarse Jonatán, le envió em-
ron.
bajadores para tratar con él la paz y la de- 12 Los extranjeros que vivían en las pla-
volución de los prisioneros. 71 Báquides los zas fuertes construidas por Báquides huye-
recibió, accedió a su petición y juró a Jo- ron, 13 todos abandonaron sus puestos y se
natán no hacerle más daño en toda su volvieron a su tierra. 14 Únicamente en Bet-
vida. 72 Le devolvió los prisioneros que ha- Sur quedaron algunos de los que habían re-
bía hecho en Judá, y regresó a su tierra, negado de la ley y los mandamientos. Bet-
sin volver a hacer incursiones en territorio Sur les ofrecía asilo.
judío. 15 El rey Alejandro se enteró de las pro-
73 La espada descansó en Israel. Jona-
mesas de Demetrio a Jonatán; le contaron
tán vivió en Micmás; empezó a gobernar al las hazañas militares llevadas a cabo por él
pueblo, y barrió a los impíos del territorio y sus hermanos y las fatigas que habían so-
israelita. portado, 16 y comentó:
Jonatán y Alejandro Balas –¿Encontraremos un hombre como
1 El año ciento sesenta Alejandro de éste? ¡Hagámoslo amigo y aliado nuestro!
10 Antíoco, por sobrenombre Epífanes, 17 Luego escribió una carta y se la man-

se hizo a la mar, tomó posesión de Tole- dó. Decía así:


maida, donde fue bien recibido y empezó a 18 El rey Alejandro saluda a su hermano
reinar allí. Jonatán. 19 Hemos oído que eres poderoso
2 Cuando se enteró el rey Demetrio, reu- y digno de nuestra amistad. 20 Ahora bien,
nió un gran ejército y salió a enfrentarse te nombramos hoy sumo sacerdote de tu
con él. 3 Demetrio envió a Jonatán una car- nación y te damos el título de Amigo del

10,1-50 Jonatán y Alejandro Balas. En el año 152 Jonatán aprovecha la primera propuesta de Demetrio
a.C. entra en escena Alejandro, que se hace pasar para retomar a Jerusalén, pero se inclina finalmente
como hijo de Antíoco IV Epífanes. Con el reconoci- por apoyar a Alejandro, probablemente porque tenía
miento de Roma como legítimo sucesor de Antíoco IV, más perspectiva de triunfo por su buena relación con
y el apoyo de Egipto, Pérgamo y Capadocia, Alejandro Egipto. La elección resultó acertada, dado que Deme-
se proclama rey y establece la sede de su reino en To- trio morirá en combate contra Alejandro. Jonatán lo-
lemaida. Tanto Demetrio como Alejandro, se apresu- gra de Alejandro el nombramiento de sumo sacerdo-
ran a buscar el apoyo de Jonatán como aliado estra- te, vacante desde la muerte de Alcima, que inaugurará
tégico, a cambio de concesiones militares y tributarias. en la fiesta de las Chozas. La vestidura de púrpura y la
1 MACABEOS 10 630
rey, para que apoyes nuestra causa y seas dos quedarán libres de impuestos, incluso
siempre amigo nuestro. de los del ganado.
Y le envió un manto de púrpura y una 34 Las festividades, los sábados, luna
corona de oro. nueva y las fiestas de guardar, más los tres
21 Jonatán se puso los ornamentos sa- días anteriores y posteriores a cada fiesta,
grados el mes séptimo del año ciento se- todos esos días serán días de exención y re-
senta, en la fiesta de las Chozas; reclutó misión para todos los judíos que haya en mi
tropas y almacenó muchas armas. imperio, 35 y nadie tendrá derecho a perse-
22 Demetrio se enteró y comentó entris- guir ni molestar a ninguno de ellos por nin-
tecido: gún motivo.
23 –¿Qué habremos hecho para que Ale- 36 Serán llamados a filas para el ejército
jandro se nos haya adelantado y se haya real hasta treinta mil judíos; se les dará la
ganado la amistad y el apoyo judío? 24 Voy ración normal de las tropas reales; 37 se les
a escribirles yo también, a ver si logro con- acantonará en las plazas fuertes más im-
vencerlos ofreciéndoles altos puestos y re- portantes, y se les pondrá en puestos admi-
galos, para que luchen a mi lado. nistrativos de confianza. Sus jefes y oficiales
25 Y les escribió lo siguiente: serán judíos, y podrán seguir su legislación,
El rey Demetrio saluda a la nación judía. como ha ordenado el rey para Judá.
26 Hemos recibido con alegría la noticia de 38 Los tres distritos de Samaría anexio-
que han guardado los pactos hechos con nados a Judá le quedarán unidos, y serán
nosotros y perseverado en nuestra amistad considerados dependientes de la misma
sin pasarse al enemigo. 27 Ahora bien, sigan autoridad, no estando sometidos más que a
siéndonos leales y les recompensaremos la jurisdicción del sumo sacerdote.
los favores que nos hacen. 28 Los dejare- 39 Dono Tolemaida y sus alrededores al
mos exentos de muchos impuestos y les templo de Jerusalén, para sufragar los gas-
haremos regalos. tos del templo, 40 y asigno además quince
29 De momento los libero, y eximo a to- mil siclos de plata anuales, que se tomarán
dos los judíos, de los impuestos y contribu- de los ingresos del rey en las localidades
ción de la sal y de las coronas. que parezca conveniente. 41 Y la cantidad
30 Renuncio, a partir de hoy para siem- que no pagaron los funcionarios, como se
pre, al tercio de las cosechas y a la mitad hacía al principio, la entregarán desde aho-
de la fruta que me corresponde percibir de ra para las obras del templo. 42 Además, los
Judá y los tres distritos de Samaría y Gali- cinco mil siclos de plata que se retiraban de
lea anexionados a ella. 31 Jerusalén con su los ingresos anuales del templo quedan li-
territorio, sus diezmos y derechos, será sa- bres de impuestos, por tratarse de ingresos
grada y exenta de impuestos. de los sacerdotes oficiantes. 43 Todo deudor
32 Renuncio asimismo a mis atribuciones del rey por asuntos de impuestos o cual-
sobre la fortaleza de Jerusalén y faculto al quier otro motivo que se refugie en el tem-
sumo sacerdote para acuartelar allí una plo de Jerusalén o en su recinto queda per-
guarnición de hombres a su gusto. donado con todas las posesiones que tenga
33 Concedo libertad, gratuitamente, a en mi imperio. 44 Los gastos de reconstruc-
todo judío que haya sido deportado desde ción y restauración del edificio del templo
Judá a cualquier parte de mi imperio. To- correrán a cuenta del rey.
corona de oro son signos del sumo sacerdocio. Este dío. Algunos especialistas afirman que muchos de los
nombramiento tiene varios problemas: Jonatán, aun- opositores al nombramiento de Jonatán como sumo
que de familia sacerdotal, no era de la dinastía sacer- sacerdote se retiraron al Mar Muerto y fundaron la co-
dotal sadoquita; se ponen las bases para establecer la munidad de Qumrán. La ambición de acaparar no
dinastía asmonea, continuadora de los macabeos y a solo el poder militar y político, sino también el reli-
la que pertenecerán en adelante los sumos sacerdotes, gioso, es un pecado común de todos los faraones y
y lo que es peor, el sacerdocio queda sometido al im- emperadores, que parece contaminar el corazón de
perio de turno y supeditado a intereses políticos y par- Jonatán. Aquí ya no podemos decir que hay que com-
tidistas. Esta situación hizo que en el futuro la dinastía prenderlo por el contexto, pues la ambición y la codi-
asmonea fuera odiada por gran parte del pueblo ju- cia son rechazadas por Dios desde siempre.
631 1 MACABEOS 10
45 Los gastos de reconstrucción y fortifi- Tolemaida, con gran esplendor, como co-
caciones de la muralla en torno a Jerusalén rrespondía a su dignidad real.
correrán a cuenta del rey, lo mismo que la 59 El rey Alejandro escribió a Jonatán
reconstrucción de murallas en Judá. para que fuera a verlo. 60 Jonatán marchó a
46 Cuando Jonatán y el pueblo oyeron Tolemaida con un gran cortejo, para entre-
todo esto no le dieron crédito ni lo admitie- vistarse con los dos reyes; a ellos y a sus
ron, acordándose de los graves daños infe- amigos los obsequió con oro y muchos re-
ridos a Israel por Demetrio y de su dura galos, y se ganó sus simpatías.
opresión. 47 Se inclinaron a favor de Alejan- 61 Entonces se confabuló contra él la
dro, porque les había dirigido mejores pro- peste de Israel, unos renegados dispuestos
puestas de paz, y ellos querían ser siempre a querellarse ante el rey, pero el rey no les
sus aliados. atendió; 62 ordenó que quitaran a Jonatán
48 El rey Alejandro reunió un gran ejérci- su ropa y lo vistieran de púrpura. Así lo hi-
to y formó sus tropas frente a Demetrio. cieron. 63 El rey lo hizo sentar a su lado y
49 Los dos reyes trabaron combate. El ejér- dijo a sus nobles:
cito de Demetrio huyó. Alejandro los persi- –Salgan con él por la ciudad y procla-
guió y se le impuso. 50 Y aunque luchó en- men que nadie lo acuse de nada ni lo mo-
carnizadamente hasta la puesta del sol, leste por nada.
Demetrio cayó aquel día. 64 Cuando los acusadores vieron los ho-

Alejandro, Tolomeo y Jonatán nores que le tributaban, los términos de la


51 Alejandro envió entonces embajado-
proclama y la púrpura con que estaba ves-
tido, se dieron a la fuga.
res al rey Tolomeo de Egipto, con este 65 El rey lo honró elevándolo al rango
mensaje: superior de los grandes del reino, y lo nom-
52 –He vuelto a mi reino, he ocupado el
bró general y gobernador. 66 Jonatán regre-
trono de mis padres, conquistado el poder, só a Jerusalén en paz y contento.
derrotado a Demetrio y soy dueño del país
53 –trabé combate con él y lo derrotamos Actividad de Jonatán en tiempo de Demetrio II
junto con su ejército y ahora he ocupado su 67 El año ciento sesenta y cinco, Deme-

trono–; 54 hagamos un tratado de amistad: trio, hijo de Demetrio, llegó de Creta a su


dame tu hija por esposa, yo seré tu yerno, patria. 68 El rey Alejandro se disgustó mu-
y les haré, a ella y a ti, regalos dignos de ti. cho cuando lo supo, y se volvió a Antio-
55 El rey Tolomeo respondió: quía.
–¡Feliz el día en que has vuelto a tu pa- 69 Demetrio confió el mando a Apolonio,
tria y has ocupado el trono real! 56 Haré lo gobernador de Celesiria, que reunió un
que pides, pero sal a entrevistarte conmigo gran ejército y acampó frente a Yamnia. Y
en Tolemaida; yo seré tu suegro, como di- mandó este mensaje al sumo sacerdote,
ces. Jonatán:
57 Tolomeo salió de Egipto con su hija 70 –Tú eres el único que se ha rebelado
Cleopatra, y llegó a Tolemaida el año cien- contra nosotros y me has dejado en ridícu-
to sesenta y dos. 58 El rey Alejandro salió a lo. ¿Por qué alardeas desafiante en la mon-
su encuentro. Tolomeo le dio su hija Cleo- taña? 71 Si confías en tu ejército, baja aquí,
patra por esposa, y celebraron la boda en a la llanura, que nos veamos las caras, por-
10,51-66 Alejandro, Tolomeo y Jonatán. Reapa- 10,67-89 Actividad de Jonatán en tiempo de
recen los judíos «renegados» en un intento vano por Demetrio II. El sumo sacerdote Jonatán aparece
indisponer a Alejandro contra Jonatán. Sin embargo, como un excelente estratega militar. Vence sin pro-
las relaciones entre estos se fortalecen. Jonatán no blemas a Demetrio que lo había desafiado militar-
solo es invitado a Tolemaida para presenciar la boda mente. Es aclamado por su pueblo. Felicitado por el
de Alejandro con Cleopatra, hija del rey Tolomeo de rey Alejandro, quien le da más poder y le obsequia
Egipto, sino que es revestido de más poder político y una propiedad en el territorio de Ecrón. Jonatán,
militar. El autor sigue obsesionado en mostrar el poder además de haber concentrado todo el poder políti-
que va acumulando Jonatán. Nada se dice de la situa- co, militar y religioso, es ahora un verdadero latifun-
ción del pueblo. dista. Esta carrera macabea por el poder y la rique-
1 MACABEOS 10 632
que está conmigo el ejército de las ciuda- las ciudades del contorno; se llevó sus des-
des. 72 Pregunta, entérate de quién soy yo y pojos e incendió el santuario de Dagón con
quiénes nuestros aliados, y te dirán que us- todos los que se habían refugiado allí.
tedes no podrán resistir contra nosotros 85 Sumando los caídos a espada y los
porque los antepasados de ustedes ya han muertos en el incendio, las bajas fueron
sido derrotados dos veces en su propia tie- unas ocho mil.
rra. 73 Ahora no podrás resistir a la caballe- 86 Jonatán marchó de allí y acampó
ría ni a un ejército tan poderoso, en esta lla- frente a Ascalón. Los de la ciudad salieron
nura, donde no hay piedras, ni guijarros, ni a recibirlo con grandes festejos. 87 Después
sitio donde escapar. regresó a Jerusalén con los suyos, llevando
74 Cuando Jonatán oyó el mensaje de consigo un gran botín.
Apolonio, todo alterado, eligió diez mil 88 Cuando el rey Alejandro se enteró de
hombres y salió de Jerusalén; su hermano todo, concedió nuevos honores a Jonatán:
Simón se le juntó con refuerzos. 75 Acampó 89 le envió un broche de oro, como suelen
frente a Jafa; como allí había una guarni- regalar a los familiares de los reyes, y le dio
ción de Apolonio, los de la ciudad le cerra- en propiedad Ecrón y su territorio.
ron las puertas. Jonatán dio el asalto. 76 Los
de la ciudad, atemorizados, le abrieron, y Tolomeo VI en Antioquía
1 El rey de Egipto reunió un ejército
Jonatán se apoderó de Jafa.
77 Cuando se enteró Apolonio, formó en 11 numeroso, como la arena de la pla-
orden de batalla a tres mil jinetes y mucha ya, e intentó apoderarse astutamente del
infantería, y marchó a Asdod como si fuera imperio de Alejandro, para anexionarlo a su
de paso; pero al mismo tiempo, contando propio imperio. 2 Marchó hacia Siria con
con su numerosa caballería, avanzó por la pretextos pacíficos, y la gente de las ciuda-
llanura. des le abría las puertas y salía a recibirlo,
78 Jonatán los persiguió por detrás, ha- porque el rey Alejandro había dado orden
cia Asdod, y los dos ejércitos trabaron de hacerle recibimientos, por ser su yerno.
3 Pero a medida que entraba en las ciuda-
combate. 79 Apolonio había dejado a su es-
palda mil jinetes ocultos, 80 pero Jonatán des, Tolomeo iba dejando en todas una
sabía que tenía a su espalda una embosca- guarnición militar.
da. Y aunque el enemigo rodeó a su ejérci- 4 Cuando llegaron cerca de Asdod le en-

to disparando flechas contra la tropa desde señaron el santuario incendiado de Dagón,


la mañana hasta la tarde, 81 la tropa aguan- Asdod y sus alrededores en escombros, los
tó bien, siguiendo las órdenes de Jonatán, cadáveres esparcidos y los cuerpos calci-
mientras que los caballos del enemigo se nados en la guerra con Jonatán porque los
cansaron. 82 Cuando ya la caballería estaba habían amontonado a lo largo del camino.
fatigada, Simón hizo avanzar a sus tropas y 5 Le contaron lo que había hecho Jonatán,

trabó combate con la infantería enemiga; la para que el rey lo reprobara; pero el rey ca-
destrozó, y huyeron; 83 la caballería se des- lló.
parramó por la llanura; huyeron hasta As- 6 Jonatán salió a recibirlo en Jafa, fas-
dod, y se guarecieron en Bet-Dagón, tem- tuosamente. Se saludaron y pernoctaron
plo pagano. 84 Jonatán incendió Asdod y allí. 7 Luego Jonatán acompañó al rey has-
za, a pesar de ser presentada con toques de alaban- amor con la humanidad, que se rompe cuando la in-
za, es inaceptable cuando se mira con los ojos de Je- justicia y la violencia excluyen el proyecto de Jesús
sús. para incluir el proyecto de los codiciosos y ambicio-
11,1-18 Tolomeo VI en Antioquía. Estamos ante sos. Restablecer el amor y la justicia en el mundo es la
una página magistral que demuestra la fragilidad de única manera de respetar y hacer visible la alianza con
los pactos entre emperadores o poderosos, al estar Dios y su Hijo Jesucristo en el mundo de hoy.
mediados casi siempre por el engaño, la calumnia, la La mujer es presentada como un premio mayor en
muerte, la codicia y la ambición de poder. Todo lo manos del padre, que lo entrega al que más se acer-
contrario con el pacto o alianza de Dios con su pue- que a sus intereses. Así, Cleopatra pasa de Alejandro
blo, mediado siempre por la fidelidad y la misericor- a Demetrio sin que en algún momento se le consulte.
dia. Cristo también selló con su sangre un pacto de Un signo de patriarcalismo que aún sigue vigente.
633 1 MACABEOS 11
ta el río Eléutero y regresó a Jerusalén. cha hacia Tolemaida; escribió a Jonatán
8 Pero el rey Tolomeo se apoderó de las ciu- que no continuara el asedio y que fuera a
dades de la costa hasta Seleucia del Mar, entrevistarse con él cuanto antes en Tole-
tramando planes siniestros contra Alejan- maida.
dro, 9 y envió al rey Demetrio unos embaja- 23 Cuando Jonatán se enteró, ordenó
dores con este mensaje: Vamos a hacer un continuar el asedio; escogió un grupo de
pacto; te daré a mi hija, la mujer de Alejan- ancianos y sacerdotes de Israel, y se lanzó
dro, y reinarás en el imperio de tu padre. al peligro. 24 Con plata y oro, ropas y otros
10 Estoy arrepentido de haberle dado mi muchos regalos, fue a presentarse al rey en
hija, porque ha intentado matarme. Tolemaida, y lo halló favorable. 25 Algunos
11 Lo calumnió porque codiciaba su im- compatriotas renegados lo acusaban,
perio. 26 pero el rey lo trató como sus predeceso-
12 Le quitó su hija y se la dio a Demetrio. res, honrándolo ante todos sus amigos; 27 lo
Así rompió con Alejandro, y su enemistad confirmó en el puesto de sumo sacerdote y
se hizo pública. las demás dignidades que tenía antes, y lo
13 Tolomeo entró en Antioquía y se ciñó puso en el rango superior de los grandes
la corona de Asia; así, ciñó su frente con del reino. 28 Jonatán pidió al rey que exi-
dos coronas: la de Egipto y la de Asia. miera de impuestos a Judá y los tres distri-
14 El rey Alejandro estaba en Cilicia por tos de Samaría, y le prometió unos nueve
aquel entonces, porque se habían subleva- mil kilos de plata. 29 El rey lo aprobó, y le
do los de aquellas provincias. 15 Pero, en escribió sobre este punto la siguiente carta:
30 El rey Demetrio saluda a su hermano
cuanto se enteró, marchó contra Tolomeo
para atacarle. Tolomeo salió a enfrentarse Jonatán y al pueblo judío. 31 Les enviamos,
con él con un ejército poderoso, y lo hizo a título de información, copia de la carta
huir. 16 Alejandro huyó a Arabia en busca que escribimos a nuestro pariente Lástenes
de protección, mientras que el rey Tolomeo acerca de ustedes: 32 El rey Demetrio salu-
quedaba vencedor. da a su pariente Lástenes. 33 Por sus buenos
17 El árabe Zabdiel decapitó a Alejandro sentimientos hacia nosotros, hemos deter-
y envió la cabeza a Tolomeo. 18 El rey Tolo- minado favorecer a nuestros amigos los ju-
meo murió dos días después, y los habitan- díos, que respetan nuestros derechos.
34 Les confirmamos los límites territoriales
tes de las plazas fuertes asesinaron a las
guarniciones acantonadas allí. de Judá y los tres distritos de Samaría
–Ofrá, Lida y Ramá– que se añadieron a
Demetrio II y Jonatán Judá, con todos sus alrededores, en benefi-
19 Demetrio subió al trono el año ciento
cio de los sacerdotes de Jerusalén, como
sesenta y siete. compensación por los impuestos que paga-
20 Por entonces Jonatán reunió a los de
ban al rey anualmente por los productos
Judá para atacar la fortaleza de Jerusalén e agrícolas y la fruta. 35 En cuanto a los de-
instaló en ella muchas máquinas de guerra. más ingresos nuestros a los que tenemos
21 Unos malos patriotas, renegados, fue- derecho, los diezmos y los tributos de las
ron a decir al rey que Jonatán tenía cerca- salinas y las coronas, se los cedemos des-
da la fortaleza. 22 El rey se puso furioso al de este momento. 36 Es una determinación
oírlo, y emprendió inmediatamente la mar- irrevocable, que surtirá efecto a partir de

11,19-53 Demetrio II y Jonatán. La historia y los Cuesta entender que el ejército judío termine al
personajes se repiten, solo cambian los años y la des- servicio de emperadores que han tejido por siglos his-
cendencia. Demetrio II llega al poder y los judíos torias de opresión y esclavitud para él. El autor, en su
«renegados» aprovechan para hablarle mal de Jona- intención de resaltar la figura de los Macabeos, des-
tán. La diferencia con los relatos anteriores es que De- cribe el contraste entre la fidelidad de Jonatán a lo
metrio, antes de iniciar una guerra, invita a Jonatán a pactado y la traición de Demetrio II, quien en la pri-
un diálogo en Tolemaida. El autor entusiasma a sus mera oportunidad incumple los acuerdos. De nuevo
lectores contando los detalles de la habilidad diplo- se confirma que los pactos de los poderosos son flor
mática de Jonatán y la «bondad» de Demetrio II, que de un día.
ratifica sus privilegios y concede otros al pueblo judío.
1 MACABEOS 11 634
hoy. 37 Manden sacar una copia de este do- dos en torno de él; luego se esparcieron por
cumento, que entregarán a Jonatán y la ex- la ciudad, y mataron aquel día a unos cien
pondrán en el monte santo, en un sitio visi- mil, 48 e incendiaron la ciudad, después de
ble. recoger un cuantioso botín. Así salvaron al
38 Cuando el rey Demetrio vio que el rey.
49 Al ver los de la ciudad que los judíos
país quedaba tranquilo bajo su mando, eli-
minada toda resistencia, licenció todas sus se habían apoderado de la villa a placer, se
tropas, cada uno a su casa, excepto los acobardaron y clamaron al rey, suplicán-
mercenarios extranjeros que había recluta- dole:
50 –Hagamos las paces, y que los judíos
do en ultramar. Así se ganó la hostilidad de
los soldados movilizados en tiempo de sus dejen de atacarnos a nosotros y a la ciudad.
51 Rindieron las armas e hicieron la paz.
antepasados. 39 Entonces Trifón, antiguo
partidario de Alejandro, al ver que todos los Los judíos se cubrieron de gloria delante del
soldados protestaban contra Demetrio, se rey y de todos los súbditos de su imperio;
presentó a Imalcúe, el árabe preceptor de luego regresaron a Jerusalén con un abun-
Antíoco, hijo de Alejandro, 40 y lo presionó dante botín.
52 El rey Demetrio ocupó su trono real, y
para que se lo entregara a fin de que reina-
ra en lugar de su padre. Le contó lo que ha- el país quedó en paz bajo su mando. 53 Pero
bía hecho Demetrio y lo impopular que era no cumplió ninguna promesa; se distanció
entre sus soldados. Trifón se quedó allí mu- de Jonatán, y en vez de pagarle los buenos
chos días. servicios le dio mucho que sufrir.
41 Jonatán envió a pedir al rey Demetrio Intrigas de Trifón
que retirara a los de la fortaleza de Jerusa- 54 Después de estos sucesos volvió Tri-
lén y a las guarniciones de las plazas fuer- fón con Antíoco, un muchacho muy joven
tes, que hostigaban continuamente a Israel. todavía, que subió al trono y se ciñó la co-
42 Demetrio le remitió esta respuesta: Por ti
rona. 55 Se le sumaron todos los soldados
y por tu pueblo no sólo haré eso, sino que que había licenciado Demetrio de mala ma-
los colmaré de honores, a ti y a tu pueblo, nera; atacaron a Demetrio, y éste, derrota-
en cuanto tenga ocasión. 43 Ahora hazme el do, tuvo que huir. 56 Trifón se apoderó de
favor de enviarme gente que luche en mi Antioquía utilizando los elefantes.
favor, porque todos mis soldados han de- 57 El joven Antíoco escribió a Jonatán:
sertado. 44 Jonatán le envió tres mil hom- Te confirmo en el puesto de sumo sacerdo-
bres aguerridos a Antioquía. Cuando se te, te pongo al frente de los cuatro distritos
presentaron al rey, éste se alegró de su lle- y te confirmo grande del reino. 58 Y le envió
gada. una vajilla de oro con todo el servicio com-
45 La población, unas ciento veinte mil pleto, autorizándole a beber en copas de
personas, organizó una manifestación en el oro, a vestirse de púrpura y usar prendedor
centro de la ciudad con la intención de ase- de oro. 59 A su hermano Simón lo nombró
sinar al rey. 46 El rey se refugió en su pala- gobernador militar en la zona que com-
cio; los vecinos de la ciudad ocuparon las prende desde la Escala de Tiro hasta la
salidas de la villa y empezaron el asalto. frontera de Egipto.
47 Entonces el rey llamó a los judíos en su 60 Jonatán marchó a hacer un recorrido
ayuda; inmediatamente se congregaron to- por la región y las ciudades del otro lado

11,54-74 Intrigas de Trifón. La historia se repite. de poder de Jonatán a Simón Macabeo. Pero antes
Los herederos de Lisias y Antíoco V siguen enfrenta- de la despedida, el autor le tributa un homenaje a Jo-
dos: Demetrio II contra Antíoco VI. Jonatán vuelve a natán, describiendo una batalla «fantástica» donde
estar en medio de los oponentes. Antíoco VI lo con- abandonado por su ejército, decide él solo, acompa-
firma como sumo sacerdote y como «grande en el rei- ñado de dos oficiales y en una actitud de penitencia
no» (57). Hay que resaltar la entrada en escena de Si- y oración, enfrentar el ejército enemigo compuesto
món, hermano de Jonatán, nombrado gobernador por millares de militares. Lo que se presagiaba como
militar y protagonista de una importante acción mili- una segura derrota se convierte en una sólida vic-
tar. El autor comienza a prepararnos para el traspaso toria.
635 1 MACABEOS 12
del río Éufrates. Todo el ejército se le agre- día unas tres mil bajas. Jonatán volvió lue-
gó como aliado. Al llegar a Ascalón, los go a Jerusalén.
habitantes de la ciudad lo recibieron con Embajada a Roma
todos los honores. 61 De allí marchó a 1 Viendo Jonatán que el momento
Gaza, pero los de Gaza le cerraron las
puertas; entonces la cercó; saqueó los al-
12 era favorable, eligió a algunos para
rededores y los incendió. 62 Los de Gaza pi- enviarlos a Roma a confirmar y renovar el
dieron la paz a Jonatán; se la concedió, pacto de amistad con los romanos. 2 A Es-
pero retuvo como rehenes a los hijos de las parta y otros países despachó mensajes en
autoridades y los envió a Jerusalén. Luego el mismo sentido.
3 Los embajadores partieron para Roma,
prosiguió su viaje a través del país, hasta
Damasco. y cuando entraron en el Senado, dijeron:
63 Cuando se enteró de que los oficiales –El sumo sacerdote, Jonatán, y el pue-
de Demetrio se encontraban en Cades de blo judío nos han enviado para que ustedes
Galilea con un gran ejército, en plan de es- renueven con ellos el antiguo pacto de
torbarle su proyecto, 64 salió a hacerles amistad y de mutua defensa.
4 Los romanos les dieron un salvocon-
frente, dejando en la región a su hermano
Simón. 65 Simón cercó Bet-Sur, la atacó du- ducto con el que pudieran llegar a Judá sa-
rante muchos días, apretando el asedio. nos y salvos.
66 Los de la ciudad le pidieron la paz, y se la 5 Copia de la carta de Jonatán a los es-

concedió; pero les hizo evacuar la ciudad, partanos:


6 El sumo sacerdote, Jonatán, el consejo
la ocupó y puso en ella una guarnición.
67 Jonatán y su ejército acamparon jun- de la nación, los sacerdotes y toda la na-
to al lago de Genesaret; de madrugada fue- ción judía saludan a sus hermanos de Es-
ron a la llanura de Jasor 68 y se encontraron parta.
con que el ejército de extranjeros avanzaba 7 Ya en tiempos pasados el rey Areo en-

hacia ellos por la llanura y les había puesto vió al sumo sacerdote, Onías, una carta re-
emboscadas en los montes; ellos iban de conociendo nuestro parentesco, como
frente. 69 Cuando surgieron los emboscados consta en la copia adjunta. 8 Onías recibió
y se trabó el combate, 70 todos los de Jo- al mensajero con todos los honores, y
natán huyeron; no quedó ni uno, fuera de aceptó la carta, que hablaba de mutua de-
Natatías, hijo de Absalón, y Judas, hijo de fensa y amistad. 9 Y aunque con el estímu-
Alfeo, oficiales del ejército. lo de los libros santos no necesitamos tales
71 Jonatán se rasgó las vestiduras, se alianzas, 10 nos hemos permitido enviarles
echó tierra a la cabeza y oró. 72 Luego vol- una embajada para renovar con ustedes
vió a la lucha contra el enemigo y les hizo nuestra alianza fraternal, a fin de no mirar-
emprender la huida. 73 Al ver esto, los que nos como extraños, ya que ha pasado mu-
se le habían marchado se le incorporaron cho tiempo desde que nos enviaron aquel
de nuevo, persiguieron juntos al enemigo mensaje.
hasta su campamento de Cades y acampa- 11 Por lo que a nosotros toca, con oca-
ron allí. 74 Los extranjeros tuvieron aquel sión de las festividades y en otros días de-

12,1-38 Embajada a Roma. Después de la victoria sus aliados por una razón eminentemente teológica:
militar, el autor presenta la victoria diplomática de para qué importunar, si con la ayuda de Dios como
Jonatán al enviar una comisión para ratificar con los aliado mayor, pueden derrotar a sus enemigos. Por
romanos y con los espartanos pactos firmados ante- primera vez se menciona un «consejo de la nación»
riormente por su hermano Judas (1 Mac 8,17) y por el (6) que luego se convertirá en el Sanedrín. En 12,9 se
sumo sacerdote Onías. La verdad es que los romanos habla de los «libros santos», para referirse a los libros
hasta ahora no han sido mencionados, tampoco los de la Ley, los Profetas y otros Escritos. Por esta época
espartanos. A los romanos poco les interesa intervenir las autoridades religiosas judías están fijando el canon
como mediadores, prefieren la agudización del con- o lista de los libros considerados inspirados.
flicto entre los países hermanos para aprovechar la di- El autor cierra el paréntesis sobre la acción diplo-
visión en su propio beneficio. De otra parte, dice el mática, para continuar con el relato del capítulo 11
autor que los judíos tampoco solicitaron el apoyo de que involucra la hostilidad permanente de los sirios.
1 MACABEOS 12 636
signados no los olvidamos en nuestros sa- 27 En cuanto se puso el sol, Jonatán or-
crificios y oraciones, porque es justo y de- denó a los suyos estar en vela y con las ar-
bido acordarse de los hermanos. mas a mano toda la noche, preparados
12 Nos alegramos muchos de la gloria para el combate, y destacó puestos de
que ustedes tienen. avanzada alrededor del campamento.
13 Nosotros nos hemos visto cercados de 28 Cuando los enemigos se enteraron de
muchas tribulaciones y muchas guerras; que Jonatán y los suyos estaban dispuestos
los reyes vecinos nos han atacado, 14 pero al combate se acobardaron, llenos de mie-
no hemos querido molestarlos a ustedes ni do; encendieron fogatas en el campamento
a los demás aliados y amigos nuestros con [y se retiraron]. 29 Jonatán y los suyos,
motivo de esas guerras, 15 porque gracias a como veían el resplandor de las hogueras,
la ayuda protectora del cielo nos hemos li- no se enteraron hasta por la mañana de lo
brado de los enemigos, que han sido derro- ocurrido. 30 Entonces Jonatán los persi-
tados. guió, pero no pudo alcanzarlos, porque ya
16 Ahora hemos elegido a Numenio, de
habían pasado el río Eléutero. 31 Luego se
Antíoco, y a Antípatro, de Jasón, y los he- volvió contra los árabes llamados zaba-
mos enviado a Roma para renovar el ante- deos; los derrotó y los saqueó. 32 Empren-
rior pacto de amistad y mutua defensa. dió la marcha hacia Damasco y atravesó
17 Les hemos ordenado presentarse tam-
toda la región.
bién a ustedes, saludarlos y entregarles 33 Simón había salido, mientras tanto, y
esta nuestra carta sobre la renovación de había llegado hasta Ascalón y las plazas
nuestra fraternidad. 18 Hagan el favor de fuertes cercanas; se desvió luego hacia
respondernos a esta carta. Jafa y la conquistó 34 porque se había ente-
19 Copia de la carta enviada a Onías:
rado de que querían entregar la plaza fuer-
20 Areo, rey de Esparta, saluda al sumo
te a los de Demetrio. Dejó allí una guarni-
sacerdote Onías. ción de defensa.
21 En un documento relativo a espar- 35 A su vuelta, Jonatán convocó a la
tanos y judíos se ha descubierto que son asamblea de los ancianos y decidió con
parientes, de la estirpe de Abrahán. 22 Aho- ellos construir plazas fuertes en Judá, 36 dar
ra que lo sabemos, les pedimos por favor más altura a las murallas de Jerusalén,
que nos escriban con noticias de ustedes. construir una gran barrera de separación
23 Por nuestra parte, les decimos: sus gana-
entre la fortaleza y la ciudad para aislar la
dos y todos sus bienes son nuestros y los fortaleza a fin de que sus habitantes no pu-
nuestros son de ustedes. Por tanto, ordena- dieran comprar ni vender.
mos que se les envíe un mensaje para co- 37 Se reunieron para reconstruir la ciu-
municarles esto. dad, porque estaba caída una parte de la
24 Jonatán se enteró de que los oficiales
muralla oriental, sobre el torrente del este.
de Demetrio habían regresado con un ejér- Jonatán restauró la muralla de Capenat.
cito más numeroso que el anterior para ata- 38 Simón, por su parte, reconstruyó Adida
carlo. 25 Salió de Jerusalén para hacerles en la Sefela, la fortificó y le puso puertas
frente en la zona de Jamat, sin dejarles po- con cerrojos.
ner pie en su territorio. 26 Envió espías al
campamento enemigo, y al volver le comu- Secuestro de Jonatán
nicaron que se preparaban para caer de no- 39 Trifón había intentado ocupar el trono
che sobre los judíos. de Asia, ceñirse la corona y eliminar al rey
De nuevo el ejército de Demetrio huye ante la pre- rreras de separación, y no se mencione soluciones
sencia del ejército judío. La intención del autor en concretas para los más pobres de la población. Un
este caso, no busca mostrar la dimensión militar de los ejemplo de cómo los gobiernos con el discurso de la
hermanos Jonatán y Simón, sino su liderazgo en la guerra invierten los recursos en armas antes que en in-
construcción y reconstrucción de Judá y Jerusalén (35- versión social.
38), tras un ejercicio democrático que involucró «la 12,39-53 Secuestro de Jonatán. La ambición de
asamblea de los ancianos». Lástima que las construc- Trifón incluye la eliminación de su «amigo» Jonatán y
ciones se reduzcan a fuertes militares, murallas y ba- de su protegido Antíoco. Trifón sabe que no puede
637 1 MACABEOS 13
Antíoco. 40 Pero temiendo que Jonatán no de su escolta, se animaron mutuamente, y
le iba a dejar, o que a lo mejor lo atacaba, avanzaron en escuadrón cerrado, dispues-
andaba buscando la manera de prenderlo y tos a la lucha. 51 Sus perseguidores los vie-
deshacerse de él; así, se marchó hasta Bei- ron dispuestos a jugarse la vida y se volvie-
sán. ron. 52 Así, los de Jonatán pudieron llegar
41 Jonatán salió a hacerle frente con sanos y salvos a Judá. Lloraron a Jonatán
cuarenta mil soldados escogidos, y llegó a y a los de su escolta, muy alarmados. Todo
Beisán. 42 Al ver Trifón que Jonatán había Israel hizo gran duelo.
53 Todos los países vecinos intentaron
venido con aquel ejército, temió echarle
mano; 43 es más, lo recibió con todos los entonces exterminarlos, y decían:
honores, lo recomendó a todos sus genera- –No tienen jefe ni defensor. ¡Vamos a
les, le hizo regalos y ordenó a sus genera- atacarlos y borrar su recuerdo de entre los
les y soldados que le obedeciesen como a hombres!
él mismo. 44 Y dijo a Jonatán: Simón asume el mando
–¿Para qué has cansado a toda esta gen- 1 Cuando Simón se enteró de que
te, cuando no hay guerra entre nosotros?
45 Mándalos ahora mismo a sus casas,
13 Trifón había reunido un gran ejército
para ir a destruir Judá 2 y vio a la gente ate-
quédate con una pequeña escolta y ven rrorizada, subió a Jerusalén, congregó al
conmigo a Tolemaida; te la entregaré con pueblo 3 y los animó diciendo:
las demás plazas fuertes, el resto del ejérci- –Ustedes saben lo que yo, mis hermanos
to y todos los funcionarios; después em- y mi familia hemos hecho por la ley y el
prenderé el regreso; para esto he venido. templo, las guerras y dificultades que he-
46 Jonatán se fió de él e hizo lo que le
mos pasado. 4 Por eso todos mis hermanos
dijo: licenció a los soldados, que se fueron han muerto por Israel. Quedo yo solo. 5 Pero
a Judá; 47 se quedó con unos tres mil hom- lejos de mí tratar de ponerme a salvo en los
bres: dejó dos mil en Galilea, los otros mil momentos de peligro, ya que no valgo más
lo acompañaron. 48 Y cuando entró en Tole- que mis hermanos. 6 Al contrario, vengaré a
maida, los habitantes de la villa cerraron las mi pueblo, al templo, a sus mujeres y a sus
puertas, lo apresaron y acuchillaron a todos hijos, ya que todas las naciones, por odio,
los que habían entrado con él. se han unido para aniquilarnos.
49 Trifón envió tropas de infantería y ca- 7 Al oírlo hablar así, todos se reanima-
ballería a Galilea y a la gran llanura de Es- ron, 8 y le respondieron con una aclama-
drelón para eliminar a todos los de Jona- ción:
tán. 50 Pero éstos, que ya sabían que –¡Tú eres nuestro caudillo después de
Jonatán había caído preso y muerto con los Judas y de tu hermano Jonatán! 9 Dirige

vencer a Jonatán en la batalla, pero también sabe de tán que aunque prisionero, se le da por muerto
la ambición judía por controlar el puerto de Tolemai- (12,50). Simón está preocupado porque sabe que su
da. Trifón le ofrece Tolemaida a Jonatán, quien la pueblo ha estado siempre rodeado de imperios que
acepta cayendo ingenuamente en la trampa. Al llegar sueñan con eliminar al pueblo judío de la faz de la tie-
a Tolemaida es hecho prisionero mientras sus soldados rra. Pero también preocupa que Israel, cuando alcan-
son asesinados. La ciudad, que tiempo atrás le había za un poco de poder, cae en la misma tentación de
tributado riqueza, honor y poder, le ofrece ahora una eliminar, discriminar o someter a los más débiles.
cárcel. Mientras el pueblo llora a su líder prisionero, El pueblo aclama por unanimidad a Simón como su
los pueblos vecinos buscan aprovechar el vacío de po- líder. Éste sigue justificando la guerra santa con los ar-
der para «atacarlos y borrar su recuerdo de entre los gumentos de la defensa de la Ley y el Templo, pero sa-
hombres» (53). Con Jonatán termina el tercer ciclo de bemos que éstos ya han sido conseguidos, lo que bus-
la familia de los Macabeos. ca en realidad es la conquista de la independencia
13,1-30 Simón asume el mando. Comienza el ci- nacional y del poder político.
clo de Simón (13,1–16,24), el último de los hermanos El misterio de Jonatán comienza a despejarse, no
Macabeos. Recordemos que Lázaro murió aplastado está muerto sino prisionero en manos de Trifón, situa-
por un elefante en un intento fallido por matar al rey ción que quiere aprovechar el secuestrador para
(6,43), Judas murió en el campo de batalla (9,18), chantajear a Simón, buscando una oportunidad para
Juan fue asesinado por una tribu árabe (9,42) y Jona- aniquilar el ejército judío. Simón, sabiendo que Trifón
1 MACABEOS 13 638
nuestra guerra, y haremos lo que nos man- seguían a todas partes. 21 Los de la fortale-
des. za enviaban mensajes a Trifón, insistiéndo-
10 Simón congregó a todos los guerreros le que cortara por el desierto y les enviara
y se dio prisa a terminar la muralla de Je- víveres. 22 Trifón preparó toda su caballería
rusalén, fortificándola toda en derredor. 11 A para ir allá, pero aquella noche caía una ne-
Jonatán, hijo de Absalón, lo envió a Jafa vada tan fuerte que no pudo ir a causa de
con bastante tropa. Jonatán expulsó a los la nieve. Entonces emprendió la marcha
de Jafa y se estableció allí. hacia Galaad. 23 Al llegar cerca de Basca-
12 Trifón salió de Tolemaida con un gran ma mató a Jonatán, y allí lo enterraron.
ejército para ir a Judá; llevaba con él a Jo- 24 Luego regresó a su tierra.
natán, prisionero. 13 Simón acampó en Adi- 25 Simón envió a recoger los restos mor-
da, frente a la llanura. tales de su hermano Jonatán, y lo enterró
14 Cuando Trifón supo que Simón reem-
en Modín, su pueblo natal. 26 Todo Israel le
plazaba a su hermano Jonatán y que esta- hizo solemnes funerales y lo lloraron duran-
ba a punto de atacarle, le envió este men- te muchos días.
saje: 27 Sobre la sepultura de su padre y her-
15 –Tenemos cautivo a tu hermano Jona-
manos, Simón levantó un monumento de
tán, por el dinero que debe al fisco a causa piedra pulida por ambas caras, bien visible.
de los cargos que tenía. 16 Si mandas tres 28 Erigió siete pirámides, unas frente a
mil kilos de plata y dos de sus hijos como otras, en honor de su padre, su madre y sus
rehenes, para que no se rebele cuando que- cuatro hermanos. 29 Las rodeó artística-
de libre, lo soltamos. mente con grandes columnas; sobre las co-
17 Simón comprendió que le hablaban
lumnas colocó escudos con armas para re-
de mala fe, pero mandó traer el dinero y los cuerdo perpetuo, y junto a las armas hizo
niños, para no hacerse odioso entre la gen- esculpir unas naves, para que las vieran los
te, 18 que comentaría: navegantes. 30 Así era el monumento que
–¡Ha muerto Jonatán porque Simón no construyó en Modín y que todavía se con-
envió a Trifón el dinero ni los niños! serva.
19 Así que envió los niños y tres mil kilos
de plata. Pero Trifón, faltando a su palabra, Actividad político-militar de Simón
no soltó a Jonatán. 31 Por su parte, Trifón conspiró contra el
20 Trifón marchó después para invadir y joven rey Antíoco y lo mató; 32 lo suplantó
saquear el país; dio un rodeo por el camino en el trono y ciñó la corona de Asia, cau-
de Adora, mientras Simón y su ejército lo sando grandes estragos en el país.

lo engaña, accede a entregar el rescate exigido por la cedente (11,46-52) y porque la alianza con los judíos
liberación de Jonatán, pues temía los comentarios del lo hace más fuerte frente a Trifón, quien le disputa el
pueblo. Una actitud comprensible pero típicamente trono del imperio sirio. Los títulos de general y caudi-
populista. Trifón no solo falta a su palabra sino que llo que le otorga Demetrio a Simón demuestran que
mata a Jonatán, demostrando que los que ejercen el la independencia no es total y que sigue bajo la tute-
poder de dominio eliminan a quien sea por alcanzar la del rey. De todas maneras, este tratado de paz, que
sus ambiciosos intereses. incluye la exención del tributo de la corona, se con-
13,31-53 Actividad político-militar de Simón. vierte en un momento especial en la historia de Israel
Con la muerte de Antíoco VI, asesinado por Trifón, Si- al recobrar después de 25 años de lucha macabea,
món queda libre de los pactos firmados anteriormen- gran parte de su libertad e independencia.
te. Conociendo los planes usurpadores de Trifón, Si- Simón comienza a contar los años a partir de su
món retoma los contactos con Demetrio para asunción al poder, tal como lo hacían los faraones en
establecer un nuevo pacto. Demetrio se muestra ge- Egipto. No hay duda de la fidelidad de la familia ma-
neroso, confirmando los poderes religiosos y políticos, cabea con la justicia y la libertad del pueblo judío, pero
la exención de impuestos y el permiso de seguir las también se nota con el pasar del tiempo que los peca-
fortificaciones, que ya antes le había concedido dos propios de la ambición del poder comienzan a to-
(11,27-53). Solo añade el de «amigo de reyes». Es car sus corazones. Hacer las cosas como el faraón es un
comprensible la actitud positiva de Demetrio, porque mal recuerdo y un mal presagio para el futuro de Israel.
su poder es todavía muy débil, porque debe un favor La independencia política será confirmada con la
a los judíos que lo habían salvado en una ocasión pre- recuperación de la ciudad de Guézer y de una forta-
639 1 MACABEOS 14
33 Simón construyó las plazas fuertes de rasgándose las vestiduras, pidieron la paz a
Judá, las rodeó de torres elevadas y altas Simón, con grandes gritos:
murallas, con puertas y cerrojos, y las dejó 46 –¡No nos trates como merece nuestra
bien aprovisionadas. 34 Eligió a algunos maldad, sino conforme a tu misericordia!
para enviarlos al rey Demetrio a pedirle que 47 Simón accedió y suspendió el ataque.
condonase los impuestos al país, porque Pero los expulsó de la ciudad, purificó las
todas las intervenciones de Trifón habían casas en las que había ídolos, y entonces
sido un verdadero saqueo. 35 El rey Deme- entró en la ciudad entre cantos de alabanza
trio respondió a su petición con la siguien- y acción de gracias. 48 Echó fuera de la ciu-
te carta: dad todo lo que la profanaba e instaló en
36 El rey Demetrio saluda al sumo sacer-
ella gente observante de la ley. Fortificó
dote, Simón, aliado de reyes, a los ancia- Guézer y se construyó allí una casa.
nos y al pueblo judío. 49 Los de la fortaleza de Jerusalén, como
37 Hemos recibido la corona de oro y el
no podían salir ni entrar en la provincia
ramo de palma que enviaste, y estamos para comprar y vender, pasaban un hambre
dispuestos a firmar con ustedes una paz espantosa, y muchos de ellos morían de
duradera y a escribir a los funcionarios para inanición. 50 Clamaron a Simón, pidiéndole
que los eximan de impuestos. las paces. Él accedió. Los expulsó de allí y
38 Sigue en vigor cuanto hemos de-
purificó la fortaleza de las profanaciones.
cretado a favor de ustedes. Las plazas fuer- 51 El día veintitrés del mes segundo del
tes que han construido quedan en poder de año ciento setenta y uno entraron los judíos
ustedes. en la fortaleza, entre vítores, con ramos de
39 Asimismo, concedemos amnistía por
palma, cítaras, platillos y arpas, con him-
los errores y transgresiones cometidas has- nos y canciones, porque había sido derro-
ta el presente. Les perdonamos la corona tado el mayor enemigo de Israel. 52 Simón
que nos deben. Y si en Jerusalén deben al- declaró aquel día fiesta anual. Luego fortifi-
guna contribución, no se le exigirá. có el monte del templo, del lado de la for-
40 Si algunos de ustedes están dispues-
taleza, y habitó allí con los suyos. 53 Y cuan-
tos a alistarse en nuestra escolta pueden do vio que su hijo Juan era ya un hombre,
hacerlo. lo nombró general en jefe del ejército, con
¡Haya paz entre nosotros! residencia en Guézer.
41 Israel se sacudió el yugo extranjero el
año ciento setenta, 42 y empezaron a fechar Gloria de Simón
así los documentos y contratos: Año prime- 1 El año ciento setenta y dos el rey
ro de Simón el Grande, sumo sacerdote, 14 Demetrio concentró sus tropas y
general y caudillo de los judíos. marchó a Media en busca de ayuda para la
43 Por entonces acampó Simón frente a guerra contra Trifón.
Guézer y la cercó con su ejército; armó una 2 Pero cuando Arsaces, rey de Persia y
torre de asalto, la arrimó a la ciudad, abrió Media, se enteró de que Demetrio había en-
brecha en un torreón y lo ocupó. 44 Cuando trado en su territorio, envió a uno de sus
los que iban en la torre móvil saltaron a la generales con orden de apresarlo vivo.
ciudad se armó un gran revuelo en la po- 3 Fue el general, derrotó al ejército de De-
blación. 45 Los vecinos de la ciudad subie- metrio, lo apresó y se lo llevó a Arsaces,
ron a la muralla con sus mujeres e hijos, y que lo metió en la cárcel.

leza griega enclavada en la misma Jerusalén, a las que de la ciudad se llevó a cabo el 4 de junio del año 141
el imperio sirio nunca había renunciado. Simón, apro- a.C. Fue declarada fiesta nacional y quedó fijada para
vechando que Trifón y Demetrio están ocupados en celebrarse anualmente. Simón nombra general a su
sus disputas por el poder, conquista ambas ciudades y hijo Juan quien en poco tiempo además de sumo sa-
las purifica de todas las impurezas paganas que allí se cerdote se convertirá en rey.
habían alojado. Recordemos que la población que allí 14,1-49 Gloria de Simón. Después de 25 años de
vivía estaba compuesta por pagano-helenistas y ju- lucha macabea, Simón alcanza por fin el poder reli-
deo-helenistas o «renegados». La fiesta de Purificación gioso, político y militar. Israel se cubre de gloria y es-
1 MACABEOS 14 640
4 Mientras vivió Simón, Judá estuvo en paz.
Simón buscó el bienestar de su pueblo,
que aprobó siempre su gobierno y su magnificencia.
5 Añadió a sus títulos de gloria
la conquista de Jafa como puerto,
y así abrió un camino al tráfico marítimo.
6 Extendió las fronteras de su patria,
se adueñó del país;
7 repatrió a numerosos cautivos,
se apoderó de Guézer, Bet-Sur y la fortaleza;
y las purificó de toda impureza,
no hubo quien le resistiera.
8 La gente cultivaba en paz sus campos,
la tierra daba sus cosechas
y los árboles de la llanura sus frutos.
9 Los ancianos se sentaban en las plazas
hablando todos del bienestar reinante,
y los mozos vistieron gloriosos uniformes militares.
10 Abasteció de víveres a las ciudades,
las equipó con medios de defensa,
su renombre llegó a los confines de la tierra.
11 Hizo obra de paz en el país,
e Israel se llenó de inmenso gozo.
12 Cada cual pudo habitar bajo su parra y su higuera
sin que nadie lo inquietara.
13 Acabó con los enemigos en el país,
en su tiempo los reyes acababan derrotados.
14 Protegió a la gente humilde; tuvo en cuenta la ley,
exterminó a impíos y malvados.
15 Dio esplendor al templo
y aumentó los utensilios sagrados.

peranza porque el territorio soñado es una realidad. (24). El hecho que Roma y Esparta tomen la iniciativa
Sus fronteras se han ampliado, los enemigos externos de renovar el pacto con Israel demuestra el alto grado
e internos han sido vencidos. Toda esta alegría la ex- de independencia y soberanía alcanzado por Israel.
presa el autor a través de un poema, muy semejante La renovación de los pactos con Roma y Esparta co-
al de Judas (3,1-9), que describe las gestas de Simón, loca a Simón como continuador del proyecto diplo-
el último de los hermanos Macabeos, protagonista de mático de sus hermanos Macabeos. Llama la atención
este glorioso momento. El poema es una síntesis de el interés del autor por reiterar y elogiar los pactos con
recuerdos bíblicos: 14,4 (Jue 5,31; 1 Re 5,4; Sal 72), imperios de tinte faraónico, como el de Roma, ha-
14,5 (1 Re 9,27), 14,6 (Éx 34,24; Is 26,15), 14,7 (Is ciendo caso omiso a las advertencias de los profetas
4055; Jr 31,12; Ez 39,28), 14,8 (Lv 26,34; Zac 8,12), sobre este aspecto (Ez 17,15; Os 12,1). Además que
14,9 (Zac 8,4-6); 14,10 (1 Re 24-26); 14,11 (1 Re el pacto con Roma de nada ha servido a los judíos,
1,40), 14,12 (1 Re 4,25; 5,5; Zac 3,10; Miq 4,4), pues en los momentos críticos nunca pudieron contar
14,13 (Sal 18,38-40; 45,6), 14,14 (Sal 72; Is 11,4), con su ayuda. No hay duda que la diplomacia es algo
14,15 (1 Re 5,15–9,25). Vale la pena notar la relación fundamental para mejorar la convivencia internacio-
justicia, paz y ecología en el poema, pues cuando en nal, sin embargo, uno esperaría que el proyecto ma-
un país reina la justicia y la libertad, las personas pue- cabeo hubiera dado ejemplo en este campo, estable-
den vivir en paz y los campos dar sus frutos en abun- ciendo primero alianza con los países pobres, y los
dancia (8). pobres unidos, si es necesario, establecer acuerdos
Era costumbre de la época renovar los pactos cuan- con los países poderosos. Entre los pobres se hacen
do llegaba un nuevo gobernante. Recordemos que el pactos, con poderosos acuerdos. El pacto de Israel
primer pacto con Roma lo firmó Juan Macabeo en el con Roma mantiene la dependencia y la esclavitud tri-
año 161 a.C. (8,1-32), lo ratificó su hermano Jonatán butaria, actitudes faraónicas rechazadas por el Señor,
en el año 144 a.C. (12,1-23), y ahora lo hace Simón Dios de los excluidos y de la liberación.
641 1 MACABEOS 14
16 En Roma y Esparta sintieron profun- –¿Con qué podremos pagar a Simón y
damente la muerte de Jonatán cuando su- sus hijos? 26 Porque él, sus hermanos y su
pieron la noticia; 17 pero al enterarse de que familia han luchado con constancia para
su hermano Simón le había sucedido como rechazar a los enemigos de Israel, y le han
sumo sacerdote y que se había hecho car- conseguido la libertad.
go del país y sus ciudades, 18 le escribieron Grabaron una inscripción en bronce y la
en tablillas de bronce para renovarle el tra- fijaron en unas columnas en el monte Sión.
tado de amistad y mutua defensa pactado 27 Copia de la inscripción:
con sus hermanos Judas y Jonatán; El dieciocho de septiembre del año cien-
19 aquel documento se leyó en Jerusalén
to setenta y dos –que corresponde al año
ante la asamblea. tercero de Simón, sumo sacerdote–, duran-
20 Copia de la carta que mandaron los
te la tribulación del pueblo de Dios, 28 en
espartanos: una asamblea solemne de sacerdotes y
El gobierno y la ciudad de Esparta salu- pueblo, autoridades y ancianos del país, se
dan a sus hermanos el sumo sacerdote Si- nos notificó lo siguiente. 29 Cuando en el
món, los ancianos, los sacerdotes y demás país se libraban frecuentes combates, el sa-
pueblo judío. cerdote Simón, hijo de Matatías, descen-
21 Los embajadores que nos han enviado
diente de Yoarib, y sus hermanos se expu-
nos han informado acerca de la gloria y el sieron al peligro y resistieron a los
prestigio de ustedes. Nos hemos alegrado enemigos de su patria para salvar incólu-
con su venida, 22 y sus discursos constan mes su templo y su ley, y así dieron gran
en las actas oficiales, en estos términos: gloria a su nación, haciéndola gloriosa.
Numenio, de Antíoco, y Antípatro, de Ja- 30 Jonatán, después de unificar a su patria y
són, embajadores de los judíos, han venido hacer de sumo sacerdote, fue a reunirse
aquí a renovar su pacto de amistad. 23 El con los suyos. 31 Sus enemigos quisieron
pueblo ha decretado recibirlos con todos poner el pie en el país y atacar el templo,
los honores y depositar una copia de sus 32 pero entonces surgió Simón, para luchar
discursos en los documentos oficiales, para por su pueblo; gastó gran parte de su fortu-
que sirva de recuerdo a la nación esparta- na en equipar y pagar a los guerreros de su
na. Se ha sacado una copia de todo esto patria. 33 Fortificó las ciudades de Judá y la
para el sumo sacerdote Simón. ciudad fronteriza de Bet-Sur, antiguo cuar-
24 Más tarde envió Simón a Numenio a
tel enemigo, y dejó allí una guarnición ju-
Roma, con un gran escudo de oro, de seis- día. 34 Fortificó Jafa, en la costa, y Guézer,
cientos kilos, para ratificar el pacto de mu- en la frontera de Asdod, antiguo enclave
tua defensa con los romanos. enemigo, y estableció allí colonias judías,
25 Al correrse estas noticias entre el pue- proporcionándoles todo lo necesario para
blo, la gente comentó: su buen funcionamiento. 35 Al ver la gente

El autor aprovecha el elogio del pueblo para desta- envergadura, no tuvo el respaldo de algún profeta o al
car los méritos de la vida y obra de Simón, igualmen- menos una resonancia profética? Es cierto que para
te, para hacer una síntesis histórica de toda la gesta esta época la profecía estaba en crisis, pero también
macabea. La doble datación de los hechos (27) es sig- es cierto que algunos hechos del proyecto macabeo
no de la conciencia que había en el pueblo de haber van en contravía del modelo bíblico-profético, por
comenzado con Simón Macabeo una nueva etapa en ejemplo, la alianza con los países imperialistas o fa-
la historia de Israel. El pueblo decide atorgar a Simón raónicos; la preocupación por acaparar todo el poder
los títulos de sumo sacerdote, caudillo y jefe militar político, militar y religioso en una sola persona, tal
con carácter vitalicio y hereditario (41.48) dejando las como lo hacía el faraón, los reyes de Asiria, Babilonia,
bases para el establecimiento de la dinastía Asmonea. Grecia o los mismos reyes de la fracasada monarquía
No aparece todavía el título de rey, probablemente israelita; el establecimiento de una dinastía (41), pos-
por dos razones, la primera, porque a pesar de la so- teriormente llamada Asmonea, con pretensiones de
beranía alcanzada, todavía era un estado vasallo del perpetuarse en el poder, quitándole la posibilidad a
imperio Sirio (14,38). La segunda, porque no tenía la Dios y al pueblo de elegir sus propios gobernantes y
confirmación de los profetas (cfr. Dt 18,15-22). Cabe dirigentes religiosos.
la pregunta, ¿por qué una gesta nacionalista de tanta
1 MACABEOS 14 642
la fidelidad de Simón y su interés por en- viole estas prescripciones o desobedezca
grandecer a su patria, lo nombraron caudi- uno solo de estos puntos será reo de culpa.
llo y sumo sacerdote suyo, como recom- 46 Todos aprobaron que se otorgase a Si-
pensa por los servicios prestados, por su món autoridad para actuar conforme a ta-
honradez y lealtad para con la patria, inten- les normas. 47 Simón aceptó con agrado
tando por todos los medios enaltecer a su actuar de sumo sacerdote, ser general y
pueblo. 36 En su tiempo pudo llevarse a jefe de los judíos y de los sacerdotes y pre-
buen término la expulsión de los paganos sidirlos a todos. 48 Decretaron grabar este
de la zona ocupada, y de los de Jerusalén, documento en tablillas de bronce y colo-
la ciudad de David, que se habían edificado carlas en el recinto del templo, en un sitio
una fortaleza de donde salían a profanar los visible, 49 depositando en el tesoro copias a
alrededores del templo, profanando grave- disposición de Simón y sus hijos.
mente su pureza. 37 Simón instaló judíos en
la fortaleza, la fortificó para seguridad del Antíoco y Simón
1 Antíoco, hijo del rey Demetrio,
país y de la ciudad, y elevó las murallas de 15
Jerusalén. 38 Por eso el rey Demetrio lo mandó una carta desde ultramar a
confirmó en el cargo de sumo sacerdote, Simón, sumo sacerdote y jefe de los judíos,
39 lo hizo grande del reino y lo colmó de ho- y a toda la nación, 2 redactada en los si-
nores, 40 porque se enteró de que los roma- guientes términos:
nos llamaban a los judíos amigos, aliados y El rey Antíoco saluda a Simón, sumo sa-
hermanos, y que habían recibido con todos cerdote y jefe del Estado, y al pueblo judío.
los honores a los embajadores de Simón. 3 Considerando que unos canallas se
41 Supo también que los judíos y los sacer- han apoderado del reino de mis padres;
dotes habían determinado que Simón fuese queriendo yo hacer valer mis derechos al
su caudillo y sumo sacerdote vitalicio, has- trono para restaurar el imperio, y habiendo
ta que surgiese un profeta fidedigno, 42 y reclutado numerosas tropas y equipado
que fuese su general, que se ocupara del barcos de guerra 4 con intención de desem-
templo, de la supervisión de las obras, del barcar en el país para vengarme de sus de-
gobierno del país, del armamento, de las vastadores, que han asolado muchas ciu-
plazas fuertes; todos debían obedecerle. dades de mi reino, 5 te confirmo todas las
43 Los documentos oficiales se escribirían exenciones de impuestos concedidas por
todos en su nombre, y él vestiría de púrpu- los reyes predecesores míos y cualesquiera
ra y oro. 44 Se prohíbe a todo el pueblo y a otras exenciones que te otorgaran. 6 Te per-
los sacerdotes desobedecer uno solo de es- mito acuñar moneda propia, de curso legal,
tos puntos, contradecir las órdenes que dic- en tu país. 7 Jerusalén y el templo serán
te, convocar en todo el territorio una reu- ciudad franca. Puedes retener todo el ar-
nión sin su autorización, vestir de púrpura o mamento que has almacenado, así como
llevar un prendedor de oro. 45 Todo el que las plazas fuertes que edificaste y tienes en

15,1-41 Antíoco y Simón. Entra en acción Antíoco de los llamados «renegados» (6,18; 7,4; 9,23.58.69;
VII repitiendo el proceso utilizado por sus anteceso- 11,21.25) o «judíos traidores» (21), constituido por ju-
res: deseos de recuperar el poder ante el usurpador, díos que optaron por el helenismo, abandonando al-
constitución de un ejército, búsqueda de aliados a tra- gunas de sus tradiciones culturales y religiosas. El gru-
vés de concesiones de todo tipo, ataques al enemigo, po contrario es el de los judíos tradicionalistas
triunfo, traición a los aliados, etc. En este contexto se liderado por la familia de los macabeos. Uno de los
entiende la iniciativa de Antíoco VII de enviar una car- objetivos del libro es resaltar el proyecto macabeo y
ta a Simón para ratificar los privilegios otorgados por señalar al grupo de los «renegados» como traidores y
sus antecesores, pero también, para recordarle, sutil- responsables del sufrimiento del pueblo judío. Sin de-
mente, su condición de vasallo. En el año 138 a.C. meritar la gesta macabea, muchos de sus relatos son
Antíoco lanza su ataque contra Trifón que se ve obli- ambiguos o contradictorios, lo que no obsta para en-
gado a huir y refugiarse en Dor. contrar una enseñanza de parte de Dios. Veamos un
Los versículos 15-24 cierran a manera de inclusión, ejemplo. ¿No es contradictorio, que el proyecto ma-
un tema planteado desde el primer capítulo (1,1), y cabeo establezca alianzas con los poderosos y no sea
que ha sido recurrente a lo largo del libro: la presencia capaz de al menos establecer un diálogo con sus pro-
643 1 MACABEOS 15
tu poder. 8 Todas tus deudas, presentes y 21 Por lo tanto, si tienen entre ustedes al-
futuras, pagaderas al tesoro real, te quedan gunos judíos traidores que hayan huido de
perdonadas desde ahora para siempre. 9 Y su país entréguenlos al sumo sacerdote Si-
cuando hayamos restablecido nuestro reino món, para que los castigue conforme a su
te colmaremos de honores a ti, a tu nación ley.
y al santuario, de modo que tu fama será 22 Escribió una carta igual al rey Deme-

conocida de todo el mundo. trio, a Atalo, Ariarates y Arsaces, 23 y a to-


10 El año ciento setenta y cuatro Antíoco dos los países: Sansame, Esparta, Delos,
marchó al país de sus padres; toda la tropa Mindo, Sición, Caria, Samos, Panfilia, Licia,
se pasó a él, de manera que quedaron po- Halicarnaso, Rodas, Fasélida, Cos, Side,
cos con Trifón. Arvad, Górtina, Cnido, Chipre y Cirene.
11 Antíoco lo persiguió. Trifón se refugió 24 Al sumo sacerdote, Simón, le envia-

en Dor del Mar, 12 dándose perfecta cuenta ron una copia.


de su desesperada situación al haber sido 25 Mientras tanto, el rey Antíoco atacaba

abandonado por sus soldados. de nuevo a Dor, lanzando contra ella ince-
13 Antíoco acampó frente a Dor con santemente sus batallones y levantando
ciento veinte mil guerreros de a pie y ocho máquinas de guerra. Tenía cercado a Tri-
mil jinetes. 14 Cercaron la ciudad. Los bar- fón, sin dejarle salir ni entrar.
cos se acercaron por mar, de modo que 26 Simón le envió dos mil soldados para

Antíoco bloqueó la ciudad por mar y tierra, luchar como aliados, y además plata, oro y
sin dejar entrar ni salir a nadie. Mientras material suficiente. 27 Pero Antíoco no sólo
tanto, 15 Numenio y su comitiva llegaron de no quiso recibirlos, sino que revocó las con-
Roma con una carta para los reyes de los cesiones hechas a Simón, rompiendo con
diversos países, en la que se decía: él. 28 Le envió uno de sus amigos, Atenobio,
16 Lucio, cónsul de Roma, saluda al rey como parlamentario, con este mensaje:
Tolomeo. Tienen en su poder Jafa, Guézer y la for-
17 Enviados por el sumo sacerdote, Si- taleza de Jerusalén, ciudades de mi impe-
món, y el pueblo judío, se nos han pre- rio. 29 Han asolado sus territorios, han cau-
sentado los embajadores judíos, nuestros sado graves daños al país y se han
amigos y aliados, 18 trayéndonos un escudo apoderado de muchas poblaciones de mi
de oro de seiscientos kilos. imperio. 30 Así que devuélvanme ahora
19 Nos es grato escribir a los reyes de los mismo las ciudades que han ocupado y los
diversos países para que no intenten hacer- impuestos de las poblaciones que han so-
les daño ni les ataquen a ellos, a sus ciuda- metido fuera de los límites de Judá. 31 De lo
des y su país, ni se alíen con sus enemigos. contrario, paguen nueve mil kilos de plata,
20 Hemos decidido aceptarles ese es- y otros tantos como indemnización por da-
cudo. ños y perjuicios y por los impuestos de las
pios hermanos judíos «renegados»? ¿No son más ocupar territorios extranjeros, cosa que no es cierta,
apóstatas y traidores los emperadores? ¿Por qué se porque el territorio recuperado es la herencia de los
envían comisiones donde los emperadores con rega- antepasados (Éx 23,31; Dt 11,24; Jos 11,23).
los de oro y plata, mientras a los hermanos judíos «re- La reacción de Atenobio ante el «esplendor de Si-
negados» que se encuentran en el exilio, se les persi- món, sus aparadores repletos de vajillas de oro y pla-
gue sin descanso? De los macabeos aprendemos que ta…», recuerda las riquezas de Salomón (1 Re 10,14-
hay que luchar por la libertad y conservación de la 29), pero también recuerda, que fueron riquezas
cultura, pero también hay que desaprender la tarea logradas a costa de esclavizar a su pueblo (1 Re 12,4).
de eliminar a quienes piensan diferente, buscando El énfasis que hace el autor en la riqueza de Simón
más bien el camino del diálogo tal como lo enseñó Je- Macabeo hay que entenderlo como una manera de
sús. demostrar no sólo la soberanía sino también el po-
Pareciera propio de los emperadores-faraones, que tencial económico alcanzado. Queda una pregunta
cuando alcanzan el poder son seducidos por la ambi- por resolver, ¿hasta qué punto el pueblo pobre parti-
ción de tener más y más poder, olvidando los pactos cipa de esta riqueza? Desde la perspectiva de Jesús,
y arremetiendo militarmente contra otros pueblos so- es preferible que Atenobio se hubiera asombrado no
beranos. Siguiendo esta lógica, Antíoco VII rompe sus por el lujo del palacio de Simón, sino por ver un pue-
relaciones con Simón y lo acusa entre otras cosas de blo con sus necesidades básicas satisfechas.
1 MACABEOS 15 644
ciudades. De no ser así, me presentaré ahí –Mis hermanos y yo, y toda mi familia,
para atacarte. combatimos a los enemigos de Israel, des-
32 Atenobio, amigo del rey, llegó a Jeru- de jóvenes hasta hoy, y muchas veces con-
salén y se quedó asombrado ante el es- seguimos liberar a Israel con nuestro es-
plendor de Simón, sus aparadores repletos fuerzo. 3 Yo ya soy viejo, pero ustedes están
de vajilla de oro y plata, y todo el fasto que en la mejor edad, gracias a Dios. Ocupen
lo rodeaba. Entregó a Simón el mensaje del mi puesto y el de mi hermano. Salgan a lu-
rey, 33 y Simón respondió: char por nuestra patria. Que la ayuda del
–Ni hemos ocupado tierra extranjera ni cielo los acompañe.
nos hemos apoderado de bienes ajenos, 4 Seleccionó veinte mil guerreros y jine-
sino de la herencia de nuestros antepasa- tes del país, y marcharon contra Cendebeo.
dos, que ha estado algún tiempo en poder Pernoctaron en Modín, 5 y de madrugada
enemigo injustamente. 34 Aprovechando la caminaron hacia la llanura; se toparon con
ocasión hemos recuperado la herencia de un ejército numeroso, de infantería y caba-
nuestros antepasados. 35 En cuanto a Jafa llería, separado de ellos por un río.
y Guézer, que tú reclamas, eran ellas pre- 6 Juan y sus tropas formaron frente a
cisamente las que causaban graves daños ellos; al ver que la tropa no se atrevía a pa-
a nuestro pueblo y asolaban el país. Te da- sar el río, Juan lo pasó el primero. Al verlo
remos por ellas tres mil kilos –de plata–. sus soldados, pasaron tras él. 7 Luego divi-
36 Atenobio no respondió. Enfurecido, se dió a la tropa, colocando en medio a los ji-
volvió a donde estaba el rey y le transmitió netes, porque la caballería enemiga era
la respuesta; le habló de la fastuosidad de muy numerosa. 8 Sonaron las trompetas, y
Simón y de todo lo que había visto. El rey Cendebeo y su ejército fueron derrotados:
se puso furioso. cayeron muchos heridos, y los demás hu-
37 Por su parte, Trifón pudo huir por mar yeron a la plaza fuerte. 9 Entonces fue heri-
a Ortosia. do Judas, el hermano de Juan. Juan los
38 El rey nombró a Cendebeo jefe su- persiguió hasta llegar a Cedrón, recons-
premo del litoral, y le asignó soldados de truida por Cendebeo. 10 Huyeron a las to-
infantería y caballería. 39 Le mandó acam- rres de la campiña de Asdod. Juan incen-
par frente a Judá, reconstruir Cedrón, refor- dió la ciudad, causando dos mil bajas al
zar sus puertas y hostilizar al pueblo mien- enemigo. Después regresó a Judá.
tras el rey perseguía a Trifón. Muerte de Simón
40 Cendebeo se presentó en Yamnia y
11 Tolomeo de Abubo había sido nom-
empezó a provocar al pueblo, a invadir brado gobernador de la llanura de Jericó.
Judá, a hacer presiones y a matar gente. Tenía mucha plata y oro, 12 por ser yerno
41 Reconstruyó Cedrón y acantonó allí jine-
del sumo sacerdote, 13 pero, lleno de sober-
tes e infantería, para que hicieran incursio- bia, quiso apoderarse del país, y conspiró
nes y marchas por las rutas de Judá, como para eliminar a Simón y sus hijos. 14 Simón
se lo había ordenado el rey. estaba inspeccionando las poblaciones del
Primer éxito de Juan país, ocupado en sus problemas adminis-
1 Juan
subió de Guézer y comunicó trativos. Bajó a Jericó con sus hijos Mata-
16 a su padre, Simón, lo que hacía tías y Judas, el año ciento setenta y siete,
Cendebeo. Simón llamó a sus dos hijos
2 el mes de enero, o sea, el mes Sebat. 15 El
mayores, Judas y Juan, y les dijo: hijo de Abubo los recibió pérfidamente en

16,1-10 Primer éxito de Juan. Sin ningún preám- 13,3; 14,26). La audacia militar y la inteligencia es-
bulo entran en acción Judas y Juan, hijos de Simón y tratégica de Juan le procuran el triunfo en la batalla
representantes de la tercera generación de la familia contra Cendebeo. Actitudes que recuerdan a sus tíos
de los Macabeos. Simón aún puede ejercer las fun- y lo identifican plenamente como uno de los maca-
ciones de gobierno, pero por su edad, ya no puede ir beos.
al frente de batalla, misión que delega en sus hijos, de 16,11-24 Muerte de Simón. Las divisiones y trai-
la misma manera que tiempo atrás lo hizo Matatías, ciones no son ahora entre reyes o gobernantes, sino
antes de morir, con su hijo Judas (2,49-68; cfr. 12,15; entre la misma familia. Parece que prácticas nepotis-
645 1 MACABEOS 16
el fortín llamado Doc, construido por él; les ran con él, que les daría plata, oro y regalos.
ofreció un banquete y apostó allí unos 20 A otro grupo lo mandó a Jerusalén, para
cuantos hombres. 16 Cuando Simón y sus apoderarse de la ciudad y del monte del tem-
hijos estaban bebidos, Tolomeo y sus hom- plo. 21 Pero hubo uno que corrió a Guézer y
bres se levantaron, empuñaron sus armas, avisó a Juan de la muerte de su padre y her-
se precipitaron sobre Simón en la sala del manos, y que Tolomeo había mandado gen-
banquete, y lo mataron junto con sus dos te para matarle también a él. 22 Juan quedó
hijos y algunos de su séquito. consternado ante la noticia. Luego apresó a
17 ¡Fue una gran traición devolver mal los que venían a asesinarlo y los ejecutó, sa-
por bien! biendo que llegaban para matarlo.
18 Tolomeo consignó por escrito lo suce- 23 Para otros datos sobre Juan y las ha-
dido y envió el informe al rey, pidiéndole tro- zañas militares que realizó, las murallas
pas de socorro y el mando sobre la provincia que construyó y sus empresas, 24 véanse
y las poblaciones. 19 Despachó a Guézer los anales de su pontificado, a partir de la
otros emisarios para eliminar a Juan; envió fecha de su consagración como sumo sa-
cartas a la oficialidad para que se entrevista- cerdote, sucesor de su padre.

tas llevaron a que miembros de la familia macabea tor? Probablemente quiere colocar a Juan Hircano,
vieran crecer rápidamente su riqueza y su poder, que reinó entre los años 134-104 a.C., en la misma
como en el caso de Tolomeo de Abubo (11; cfr. 2 Sm línea de los reyes de Judá, y a la dinastía Asmonea,
13,28), nombrado por su suegro Simón, gobernador que es la misma de los macabeos, como la continua-
de la región de Jericó. Los deseos libertarios de otros dora de la dinastía davídica y de la monarquía judía,
tiempos, se cambian por la codicia y la ambición de interrumpida por más de cuatrocientos años. Una pre-
poder. Tal es el caso de Tolomeo, que en el año 142 gunta para la reflexión: ¿Realmente querrá Dios «re-
a.C. asesina de manera vil y traicionera a Simón, el úl- sucitar» el proyecto monárquico cuando fue un ro-
timo de los hermanos Macabeos. Juan, el hijo de Si- tundo fracaso en la historia de Israel? La respuesta es
món, logra salvarse al ser avisado de los planes para no, prueba de ello es que en poco tiempo la dinastía
asesinarlo. De esta manera queda «bautizado» Juan Asmonea va a ser tan odiada, que ni siquiera el libro
Hircano como el continuador de la obra macabea. de los Macabeos fue aceptado en el canon judío. El
Los dos últimos versículos de nuestro libro (23s) son proyecto macabeo que comenzó como un proyecto
muy importantes al compararlos con la fórmula clási- libertario contra el emperador idólatra y esclavizador,
ca utilizada en el Libro de los Reyes de Judá (1 Re terminó siendo una monarquía tan cruel e idólatra
11,41; 14,19; 15,23). ¿Cuál será la intención del au- como aquella que combatió.

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