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registraron valores de pH bajos (3,5) 1o que provocé un pulso dcido en las co-
rmientes después de que se derritiera la nieve (Gee y Stoner, 1989).
Depuracién por la vegetacién. La vegetaci6n es capaz de depurar contami-
nantes «secos» y «ocultos» de una manera muy eficaz. Cuando las aguas de Hluvia
atraviesan las copas de los drboles de bosques, los materiales depositados se la-
van de la superficie de las hojas. Las confferas son buenas depuradoras de los
contaminantes atmosféricos y sales marinas, como se aprecia en la Tabla 6.15. A
‘menudo se plantan en tierras altas en las que fluye la cabecera de muchos arroyos
y lagos, Las confferas no son el tinico tipo de vegetacién que depura los contami
nantes, Los niveles de fosfato e iones de cloruro son superiores bajo los robles
que donde se produce la precipitacidn directa. Sin embargo, existen suficientes
cationes base para que se produzca la neutralizacién, por lo que la precipitacién
del suelo bajo los robles es por Io general menos dcida que la precipitacién.
‘Algunos estudios levados a cabo en Gales apuntan que 1a evapotranspiracién
puede representar el 30 por 100 de toda el agua cedida, en comparacién con el 17
por 100 de las cuencas adyacentes a paramos. As, la evapotranspiracién puede
concentrar las soluciones de los materiales depositados en bosques de coniferas,
Jo que agrava la acidificacién (Hornung y Newson, 1986).
Geologia y suelos subyacentes. Las aguas superficiales s6lo se acidulan si
el suelo y la geologia subyacentes son incapaces de amortiguar los efectos de la
precipitacién acida. Diferentes efectos se presentan de una manera clara y conse-
cuente en los casos en los que el decid y/o las finas capas de suelo reposan en una
base de rocas sélidas pobres, como por ejemplo, suelos podsélicos pardos, stag-
nopodsdlicos, podsélicos, suelos sometidos a gleizaciGn, etc. En esta base rocosa
se incluyen rocas igneas, como granitos, pizarras y lutita litificada. Recientemen-
te se ha descubierto que para un tipo dado de suelo, las concentraciones de alumi-
nio en el agua son entre dos y tres veces mayores bajo coniferas de 25 afios de
Tabla 6.15. Comparacién de los valores medios de tres parametros quimi
cos de la precipitacién directa de la deposicion masiva (agua de Iluvia) res-
pecto a dos clases de edad de coniferas, piceas y robles. Se indica el efecto
depurador de la vegetacion
i pit SO,(uea/L) ClipeaL)
Deposicién masiva 46 sa las
(agua de Tluvia) GA7D (21-240) (128-873)
Roble 47 lis 242
1-6.) 39-444) (56-451)
Piceas
12 afios 427 las 186
7-60) G7-1.181) (85.958)
25 aos 432 296 268:
GB659) (51-1512) (56-592)
Segtin Gee y Stoner, 1989.PERSPECTIVAS ECOLOGICAS DE LA CONTAMINACION DEL AGUA 385
edad que en la zona de paramo (Gee y Stoner, 1989). La piedra arenisca rojiza y
los suclos ricos en calcio resultan especialmente favorables para amortiguar los
efectos de la acidez.
La capacidad de una cuenca para neutralizar la acidez depositada también
depende de la ruta que sigue la precipitacién hasta alcanzar la corriente receptora.
Por ejemplo, en algunas cuencas la capacidad neutralizadora en condiciones de
poca corriente es satisfactoria, pero cuando se trata de corrientes considerables,
una elevada proporcién de corriente puede penetrar por escorrentia superficial sin
entrar en contacto con las bases neutralizadoras. Las alteraciones del drenaje
ligadas a las mejoras del suelo 0 a programas de repoblaci6n forestal agravan el
porcentaje de escorrentfa, en especial en condiciones de mucha corriente.
Utilizacién del terreno, De lo que acabamos de ver podemos deducir que ka
utilizacién que se haga de un tipo determinado de suelo influira de manera impor-
tante en la calidad de las aguas superficiales. Esta interaccion entre las aguas
superficiales y el uso de la cuenca se conoce desde hace décadas (Hynes, 1975)
(véase también Capitulo 5). En las regiones altas templadas, muchas de las cuen-
cas s6lo resultan apropiadas para la ganaderia y/o la repoblacién forestal, dos
actividades econémicamente marginales, por lo que son a menudo subvenciona-
das por el gobierno. La repoblacién forestal de coniferas constituye el tipo de
vegetacién natural de las regiones altas templadas. En muchos otros paises, la
repoblacién forestal con plantaciones de coniferas exsticas se ha incrementado
considerablemente en las cueneas de las zonas altas durante los tltimos aiios.
Resulta evidente que, si nos basamos en la estrecha relaciGn que existe entre la
icultura y la acidificaciGn, este tipo de utilizaci6n del suelo de la cuenca in-
fluird en la calidad del agua de la corriente (hidroquimica) y, a la larga, en su
ecologia. Algunas tierras sensibles al dcido se han mejorado con vistas a la ag
cultura, lo que ha aumentado su capacidad neutralizadora y, por ende, reducido la
acidificacién de aguas superficiales.
Efectos de la acidificacién de las aguas superficiales
Calidad de las aguas superficiales. Se ha prestado mucho interés a la influen-
cia de la acidificacién en la calidad de las aguas supesficiales, nv s6lo en lo que
afecta a la calidad del agua potable, sino también debido a las alteraciones de la
ecologfa de los sistemas causadas por la disminuci6n del pH. Dada la escasez y
poca fiabilidad de los datos hist6ricos, hasta hace poco tiempo resultaba dificil
describir las tendencias espaciales y temporales de la acidificaci6n. En el Reino
Unido, el Grupo de Investigacién de Aguas Acidas de Gales (Welsh Acid Waters
Research Group) examiné 57 grupos de datos procedentes de enclaves britéinicos
y s6lo pudo descubrir una clara tendencia a la disminucién de! pH en seis de ellos
(UKAWRG, 1986). Battarbee y sus colaboradores (1985) han examinado las dia
tomeas de lagos de los sedimentos y elaboraron curvas que representaban las,
alteraciones de! pH durante los titimos 150 afios. En algunos lagos, el examen de
la diversidad y composicién de las diatomeas, en especial su transformacién en
una especie resistente al dcido, revel6 una disminucidn del pH de 0,5 a 1,2 unida-
des durante 15 afios. Al comparar los sedimentos extrafdos de embalses de cuen-386 INGENIERIA AMBIENTAL,
cas repobladas y no pobladas de Gales se ha registrado una aceleracién de la
acidez, en embalses repoblados. Mas recientemente, la Welsh Water Authority ha
evado a cabo un extenso muestreo semanal (150 enclaves) en zonas sensibles al
Acido durante 1984, Un 78 por 100 de estos enclaves tenfan un pH mfnimo <5,5 y
un 34 por 100 un pH minimo <4,5. En la actualidad existen pruebas inequivocas
de que la repoblacién forestal en dreas sensibles al dcido disminuye el pH y
aumenta la concentraci6n de aluminio
Hoy en dia, varios estudios han mostrado que el daiio ecolégico esta causado
por una combinacién de acidez y un elevado indice de aluminio cuando las con-
centraciones de calcio son bajas. El umbral a partir del cul se puede prever el
daiio ecol6gico es pH < 5,5, cuando el aluminio monémero abil disuelto >0,2
mel y la dureza <12 mg/l como CaCO,. Las variaciones estacionalles y epis6di
cas también son extremadamente importantes, al producir graves consecuencias
ecoldgicas. En condiciones de mucho flujo, en especial durante el invierno, |
niveles de aluminio alcanzan por regla general sus valores més altos, mientras
que el pH y las concentraciones de calcio se encuentran en sus niveles més bajos.
Por ejempio, en estudios realizados en Gales, se produjo una bajada de dos unida-
des de pH (6,0 a 4,0) y un incremento en la concentracién de aluminio en un
periodo de 11 horas durante una tormenta (Gee y Stoner, 1989). En una corriente
adyacente que flu‘a en un piramo se registré un descenso de pH de 0,9. El bajo
PH de las aguas cidas no es diferente del pH propio de muchas bebidas y comi-
das de consumo cotidiano, por lo que no es probable que suponga riesgo alguno
para nuestra salud. No obstante, la acidificacién del suministro de agua potable
potenciaré su propensi6n a disolver ciertos materiales, sobre todo metales del
suelo y de la red de tuberias (UKAWRG, 1989). La concentracién real de estas
sustancias en el agua bruta en el punto de abstraccién dependeré de la forma y las
cantidades en las que estén presentes en los suelos y rocas de la cuenca de donde
procede el agua. Por ejemplo, de 11 lagos escoceses, entre aquellos en los que el
pH medio era inferior al 5,6, la concentracién de 13 metales era baja e inferior a
la concentracién aceptable méxima establecida en la directiva de la UE sobre
agua vigente en aquella 6poca (EC, 1980). Existen datos sobre aguas més écidas
con alto contenido en aluminio, hierro y manganeso, por ejemplo pH <4,6. El
agua que contiene estos metales y materia orgdnica puede depositar dichas sus-
tancias en el sistema de distribucién doméstica, lo que provoca la decoloracién
temporal del agua del grifo. Sin embargo, dado que la mayor parte del agua
potable (por ejemplo, el abastecimiento publico de agua) se depura antes de ser
consumida (Io que ineluye reajustes del pH, véase Capitulo 11), es probable que
el efecto combinado de la acidificaci6n tan s6lo incremente el costo del trata-
miento del agua y no suponga un riesgo importante para la salud.
Efectos biolégicos de la acidificacién. La acidificacién puede afectar a los
organismos de manera directa mediante tensién fisiolégica o indirecta por cam-
bios en el abastecimiento de comida, provision del habitat y predacién. Como
cabe esperar, la respuesta del ecosistema a la acidificacién es muy compleja,
como lo son los procesos ecol6gicos y de contaminaci6n. En los casos de escasa
descomposicién, la actividad microbiana disminuye. Por ejemplo, en EstadosPERSPECTIVAS ECOLOGICAS DE LA CONTAMINACION DEL AGUA 387
Unidos, algunos estudios han demostrado que la cantidad y actividad de las bac-
terias epiliticas disminuye en corrientes acidas (UKAWRG, 1989). En lagos, las
diatomeas normalmente decaen cuando el pH <5,5 y las algas verdes filamento-
sas predominan en habitats de litoral. En aguas extremadamente dcidas existen
muy pocas especies, como se aprecia en estudios Ievados a cabo en Estados
Unidos y el Reino Unido, que descubrieron una disminucién en la diversidad de
especies de zooplancton. Por ejemplo, Fryer y Forshaw (1979) concluyeron que
en las aguas mas dcidas (pH 5,14) existfan menos especies (9,8 de media) que en
Jas aguas menos dcidas (pH 6,48; 11,26 de media de especies). Mas concretamen-
te, las especies daphnid y copepod no estaban presentes en aguas dcidas. Parece
ser que nutrientes como el calcio del exoesqueleto y la disponibilidad de comida
fueron factores més determinantes que la acidez en sf.
Los organismos de las corrientes afectados por la acidificacién son los ma-
croinvertebrados benténicos, fundamentales para los procesos de autolimpieza de
los sistemas de aguas dulces. La relaci6n entre el status dcido-base de las corrientes
de agua y lagos y la fauna de macroinvertebrados se ha descrito y afirmado e
incluso se han relacionado algunas diferencias contundentes de agrupaciones de
invertebrados en varias dreas geogréficas con la acidez (Townsend et al-; Hildrew y
Giller, 1994). Por regla general, la diversidad de las aguas dcidas es bastante reduci-
da (Fig. 6.9). Existen dos hipstesis que explican este hecho:
1, Los efectos fisiolégicos directos de los factores relacionados con Ia aci-
dez, tales como los iones hidrégeno y algunos metales pesados excluyen
taxones sensibles.
2. Los factores relacionados con la acidez influyen en los invertebrados de
modo indirecto mediante interacciones de la cadena tréfica, ya sea en
sentido descendente (por ejemplo, la liberacién de la predaciGn de los
peces) 0 ascendente (como la alteracién del abastecimiento de comida),
DArroyos en paramos
Di Arroyos en zona boscosa
Porcentsje de fracuencias
69 12 1315 1B 1921 2224 2428 2728
Figura 6.9. Porcentaje de frecuencia de la riqueza de familias de macroin-
vertebrados (numero de familias) en 25 lugares de estudio en paramos y
cuencas pobladas de rboles que ilustran el efecto del aumento de acidez de
la corriente sobre la biologia de corrientes repobladas de la regin (segin
‘Omerod et al., 1987).388° INGENIERIA AMBIENTAL
En Ia actualidad, las alteraciones de la distribucién geografica de los peces
debidas a la acidificacién ya han sido descritas con rigor. Las aguas dcidas se
caracterizan por la escasa diversidad de especies y a menudo las anguilas son los
inicos presentes en aquellas aguas con pH <4,5. La acidez afecta a los peces en
muchos aspectos, sobre todo en Ia fisiologfa de las branquias y la sangre (control
de iones alterados y status dcido-base) en la fisiologfa del aparato reproductor, en
el desarrollo y desmineralizacién, acumulacién de metales y cambios de conduc-
ta. Estos efectos son provocados por el pH 0 por la combinacién de pH con
aluminio.
En as aguas naturales, 1a importancia relativa de los iones hidrégeno y Ia
idad del aluminio varian considerablemente. En un extremo, algunos rfos de
agua marrén de Canada se caracterizan por presentar proporciones muy bajas de
gtupos de aluminio