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LAS MANOS DEL ALFARERO, LAS MEJORES MANOS

Maestro: Jorge Manzano

Edad: 13-17 años

Verso lema: “Ahora pues, Jehová, tú eres nuestro padre; nosotros barro,
y tú el que nos formaste; así que obra de tus manos somos todos nosotros”.
Isaías 64:8

INTRODUCCIÓN

Quizás alguna vez has pasado por un lugar donde venden artesanías, y te ha
llamado la atención alguna de las cerámicas que allí ofrecen, imagina por
un momento que estás viendo una vasija hermosa, con adornos muy bien
diseñados, esta vasija te causa tanta impresión que no ahorras palabras para
expresar su belleza y hermosura.

Quizás hayas tomamos un tiempo para pensar ¿quién sería la persona que
fabricó esta hermosa vasija? ¿Cuánto tiempo y dedicación fue necesario
para sacar a la luz una obra de arte como ésta? ¿Cuál sería el proceso al
cual fue sometida la materia prima que el alfarero utilizó?

DESARROLLO

Hubo un alfarero que hace muchos años tomó del polvo de la tierra para
hacer una hermosa vasija, sus manos, las mejores manos le dieron forma a
esta obra especial, de tal manera que sobresalía en medio de las demás y
después de haberla realizado la puso en un lugar de privilegio. En este
lugar él la veía, la contemplaba y era tanta su satisfacción que no podía
quedarse sin palparle con sus manos.

Pero algo trágico le sucedió a esta vasija, después de haber estado en ese
sitio de honor, ese lugar de privilegio que mencionamos, la vasija se cayó y
se rompió en pedazos, solamente pedazos quedaron de aquella obra
esplendorosa, perdió su forma, ya no servía más para almacenar el agua y
el aceite que solía depositarse en ella. Al caer en el suelo, los que pasaban
por el camino la pisoteaban sin misericordia, el alfarero se dolía en su
corazón por la condición en que había quedado su más grande obra, veía
cómo en sólo unos instantes había perdido todo el esfuerzo y
dedicación con el cual había hecho aquella vasija.
Para comprender cuánto representa una vasija de barro o de arcilla para un
alfarero debemos investigar acerca de su proceso de fabricación, esto nos
permite comprender que es toda una obra de arte su elaboración.

 Las vasijas son hechas de barro, este barro debe estar constituido de
tierra finamente dividida, debe contener algunas impurezas que dan la
coloración y ayudan a mantener su forma durante la cocción.

 El alfarero con sus manos le da forma cilíndrica, luego le hace un


agujero con el dedo pulgar en la parte superior del cilindro. Para sacar la
vasija del torno se pasa un alambre debajo de la base.

 La pieza ya está lista para ser introducida en el horno, deben ser cocidas
a temperaturas de 900 – 1200 grados.

 Cuando la arcilla ha sido sacada del horno puede efectuarse su


decoración: incisiones, estampaciones o líneas y otros motivos.

APLICACIÓN

Tú y yo éramos aquella vasija que el Señor formó con sus manos, pero a
causa del pecado perdimos la imagen de Dios en nuestras vidas, fuimos
reducidos a pedazos que tirados en el suelo no daban muestras de valor
alguno.

Pero este alfarero viendo nuestra condición descendió desde el mismo


cielo, desnudó su brazo y tomó lo que quedaba de nosotros y hoy ha hecho
una obra que ningún otro podía hacer, porque sólo el creador, quien se
acordó que estábamos hechos del polvo de la tierra, que éramos vasijas de
barro, pudo hacer de nosotros unas nuevas vasijas, nos ha hecho depósito
de su presencia gloriosa, su palabra mora en nuestras vidas, hoy podemos
comprender que aunque estamos llenos de debilidad y somos vasos
frágiles, nuestro excelencia está en el tesoro que Dios ha puesto en nuestros
corazones.

También es cierto que el alfarero aún no ha terminado su obra en nosotros,


estamos en sus manos, él nos moldea cada día hasta que llegamos a la
perfección, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo, por esta
razón cuando lleguen a tu vida pruebas y dificultades recuerda que tú eres
barro en manos del alfarero, el te está limpiando, si es necesario algunas
veces serás quebrantado pero al finalizar el proceso serás igual a aquella
vasija hermosa en la que el Señor se deleitaba, ¿no sé en qué etapa del
proceso te encuentras? Quizás seas barro fresco al cual el Señor le está
dando la forma, o ya seas una vasija formada lista para ser sometida al
fuego, te quiero decir que puedes estar confiado en las manos del Señor
Jesús, Él es el alfarero por excelencia.

Alabanza lema:

Cambia Señor con tu Espíritu

//Cámbiame Señor con tu Espíritu

Cámbiame Señor hazme como Tú//

Coro

//Tú el alfarero, barro soy yo

Cámbiame y límpiame es mi oración//

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