HF
Een
Clorosis férrica
Prediccion a partir de propiedades edaficas
M. C. del Campillo y J. Torrent.
Departamento de Ciencias y Recursos Agricolas y Forestales, Universidad de Cordoba
Los autores exponen un estudio detallado de las condiciones edéficas del suelo
que inciden en la clorosis férrica y que afecta a numerosos cultivos de regiones dridas
La clorosis férrieca
1 término clorosis férriea designa
tun conjunto de problemas en la
planta que suele desaparecer cuando se
fertiliza con algin compuesto de Fe
(como sulfato ferroso 0 quelato de hie~
70) pero no cuando se fertiliza con
algdn otro nutriente
La clorosis férrica, o deficiencia de
hierro, se observaen las hojas mis j6ve.
nes dela planta, Dichas hojas adquieren
tuna tonalidad verde clara que suele evo-
lucionar a amarillenta sila clorosis per-
siste, pero con la particular caracteristi-
cca de que los nervios de las hojas per-
‘manecen verdes y claramente definidos
sobre el limbo de color amarillento (Fig.
MORTOFRUTICULTURA 3-199
0 semidridas.
1), Sila clorosis progresa, suelen apare~
cen manchas necroticas en los bordes de
Jas hojas que pueden dafiar la hoja ente-
ra. Si no se corrige esta deficiencia, no
s6lo disminuye la produccién sino que
se puede llegar a perder el cultivo o la
plantacién,
Situacién actual
de Ia clorosis féerrica
Numerosos cultivos agricolas de las,
regiones dridas y semidridas sufren clo-
rosis férrica. Entre las plantas més afec-
tadas se encuentran frutales como Ios
eitricos - naranjo, limonero y mandari-
‘no -el melocotonero, el cerezo, el cirue-
lo, el almendro, el olivo, el peral, el
‘manzano, la vid y el aguacate; cultivos
extensivos como el trigo, cebada, mai
alfalfa, esparragos, garbanzo, altramuz,
girasol, sorgo y soja; cultivos horticolas
como la judia, el tomate, guisante, pepi:
no, fresa y fresén, y numerosas orna-
mentales (SANZ y col., 1992). La sus-
ceptibilidad a la clorosis puede variar
entre especies e incluso entre cultiva-
La clorosis férrica se ha observado
generalmente en suelos calizos, aun-
gue, en ocasiones, plantas muy sensi-
bles cultivadas en suelos arenosos, dci-
dos y muy lavados y en suelos orgéni-
cos 0 con drenaje deficiente también
‘han mostrado los sfntomas caracteristi-
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t
[—
80
60
40
Contenido de clorofila relativo (%)
20
Fig. 2. Relacisn entre ol contenido de clorofila relativo (%) en hoja de garbanzo y la
caliza activa (g/kg suelo), indicando el nivel
TORRENT (1982a), con autoriza
cos de esta deficiencia, Se estima que
Jos suelos calizos ocupan aproximada-
‘mente un 30 % de los suelos del mundo
(CHEN y BARAK, 1982), En Espafa,
los suelos caledreos son también relati-
vameiite abundantes. Destacan por stu
abundancia el valle del Ebro, la zona de
Castilla-La Mancha, Andaluefa (en par-
te) y grandes dreas del litoral mediterré-
neo. De este modo, el problema de la
clorosis férrica es el mas extendido en-
tre [os microelementos en la agricultura
actual por el nimero de especies de
interés agrondmico sensibles a esta de-
ficiencia, por lo abundantes que son los,
suelos caledreos en nuestro pais, y por
el coste econémico que supone reme-
diarlo
‘Aunque parezea una contradiccién,
elhierro en el suelo es el cuarto elemen-
to més abundante después del oxigeno,
silicio y aluminio. Asf, 1a clorosis férri-
ca rara vez es debida a una deficiencia