Professional Documents
Culture Documents
Número 30
Protagonistas de la Biodiversidad
en Colombia
Germán Amat-García
Jaime Aguirre Ceballos
Editores
Bogotá, Colombia
2015
Prohibida la reproducción, total o parcial, por cualquier medio sin la autorización
escrita del titular de los derechos patrimoniales.
Director Rector
Luisz Olmedo Martínez Zamora Ignacio Mantilla Prada
Germán Amat-García
Jaime Aguirre Ceballos
Editores
Director Director
Luisz Olmedo Martínez Zamora Germán Amat García
Comité Editorial Comité Editorial
(en orden alfabético) Biblioteca José Jerónimo Triana
Germán Amat García
Martha Patricia Hernández Moreno
Jaime Aguirre-Ceballos
María Eugenia Torres Cárcamo
Jaime Uribe-Meléndez
Diego Giraldo-Cañas
Contenido
Presentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Directorio de autores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Agradecimientos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
Capítulo 1
Las raíces del conocimiento sobre la biodiversidad en Colombia
• La Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada
(1783-1812) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
• La Comisión Corográfica (1850-1859) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
• Creación de la Universidad Nacional de Colombia y las labores
pioneras de la Escuela de Ciencias Naturales (1867-1902) . . . . . . . . . . . . 20
Capítulo 2
Semilleros del conocimiento de la biodiversidad colombiana
• Constitución de la Sociedad de Ciencias Naturales
del Instituto de La Salle (1912) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
• El Instituto de Ciencias Naturales
de la Universidad Nacional de Colombia (1936) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24
Capítulo 3
La comunidad científica botánica colombiana de los años 1940
• El Instituto de Ciencias Naturales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 38
• Visión de sociedad del Instituto de Ciencias Naturales . . . . . . . . . . . . . . . . 41
• Legado nacionalista . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 42
5
Capítulo 4
Protagonistas en la documentación de la biodiversidad nacional
• El Hermano Apolinar María (1867-1949) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45
• El Hermano Daniel (1909-1988) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 50
• El Padre Enrique Pérez Arbeláez (1896-1972) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 56
• Richard Evans Schultes (1915-2001) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61
• Hernando García Barriga (1913-2005) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 66
• Jorge Ignacio Hernández Camacho,
“El Mono Hernández” (1935-2001) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 72
6
PRESENTACIÓN
7
obra culmina con la mención de “otros Universidad Nacional de Colombia. El
grandes” que por espacios editoriales Instituto de Ciencias Naturales, que fue
no pudieron tratarse a fondo, pero que fundado por el presbítero Enrique Pé-
solo sus nombres constituyen verdade- rez Arbeláez, en 1936, hace parte ahora
ros espacios dorados, de letra excelsa y de la Facultad de Ciencias, una entidad
bien decir, en los relatos científicos del que en 50 años de existencia ha demar-
país. cado una función central en la consoli-
dación de comunidades científicas y en
Este texto es un testimonio vivo de la el fortalecimiento de disciplinas para la
experticia y del conocimiento de ilus- construcción de nación.
tres profesores del Instituto de Cien-
cias Naturales, una entidad que hoy La presentación de este libro, el número
actúa como salvaguarda y depositaria 2 de la serie “Retratos de la biodiver-
de muchos de los resultados que en sidad”, a la comunidad académica y a
asuntos de flora y fauna, alcanzó la Real la sociedad en general es un motivo de
Expedición Botánica y otras numero- verdadero orgullo; representa una gran
sas misiones que con esos objetivos se dedicación institucional y la existencia
han desarrollado. Cabe destacar aquí de una sinergia, altruista y armónica,
el muy erudito concurso de los profe- entre la Universidad Nacional de Co-
sores Jaime Aguirre Ceballos, Germán lombia y el Jardín Botánico José Ce-
Domingo Amat García y Jaime Uribe lestino Mutis. Abrigo la esperanza de
Meléndez; también son bien recibidas que esta contribución editorial motive
las participaciones de Martha Patricia a todos los estudiosos e interesados en
Hernández Moreno, de la subdirección la historia de la ciencia y los conduzca
científica del Jardín Botánico, del histo- dilucidar no solo el enigmático miste-
riador Sergio Ospina Rey de la Univer- rio de la naturaleza colombiana, sino
sidad de los Andes y de Paola Marcela a conocer un poco más de cerca a sus
Triviño Cruz, estudiante del programa artífices.
de Maestría en Ciencias - Biología de la
8
DIRECTORIO DE AUTORES
9
10
AGRADECIMIENTOS
11
12
INTRODUCCIÓN
Elaborar una retrospectiva histórica por esto, se hace una análisis crítico de
sobre la generación y consolidación cómo era una comunidad científica en
del conocimiento de la biodiversidad los años 40 como la botánica, cuyo reto
colombiana es una tarea difícil y com- fue el de perfilar grandes iniciativas en
pleja, si se tiene en cuenta que la mayo- pro del conocimiento de la biodiversi-
ría de quienes escriben los capítulos de dad nacional. En este análisis se encon-
esta obra se formaron en el campo de tró un fuerte arraigo nacionalista dentro
las ciencias naturales y no de la histo- de la actividad científica de la comuni-
ria. Pese a esto, hemos trazado la tarea dad botánica, que consecuentemente
de recoger los episodios considerados pudo representar algunas condiciones
como los más relevantes, entre 1783 y positivas y otras no tanto (Capítulo 3).
1902, y que pueden formar parte de la
génesis de este conocimiento (Capítulo Presentar de manera personal e indi-
1). Por otra parte, algunos estudiosos vidual a los protagonistas del conoci-
de la historia natural, congregados en miento de la biodiversidad colombiana
comunidades científicas nacientes du- sería otra tarea difícil e inequitativa, en
rante el siglo XX, fueron la semilla para virtud a que podrían quedar al margen,
que nuevos investigadores encontraran por omisión involuntaria de los auto-
un ejemplo a seguir y un escenario en res, muchos personajes que merecida-
el área de las ciencias naturales más for- mente tienen su sitial en la historiogra-
talecido; tal es el caso de la obra de los fía respectiva. Pese a esto, presentamos
Hermanos Lasallistas y del Instituto de seis protagonistas que permiten tener
Ciencias Naturales que, a manera de una idea, también a manera de ejem-
ejemplos, son documentados por los plo sobre el perfil humano, académico
autores (Capítulo 2). y científico que pudieron lograr en sus
existencias. Algunos episodios parciales
La tradición científica de un país como de sus vidas, su legado y la socialización
Colombia ha sido un tema controver- de algunos productos de su quehacer
sial; algunas comunidades científicas científico, en torno a la biodiversidad,
durante el siglo XX tuvieron “proble- quedan plasmados en el libro tan solo
mas” de consolidación y este ha sido un como ventanas para que el lector pueda
factor que merece analizarse con cierto extraer provecho de sus vivencias ejem-
detenimiento y sin contemplaciones a plares (Capítulo 4).
la luz de los acontecimientos históricos;
Los editores
13
14
Capítulo 1
15
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
16
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 1
en Colombia
17
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Figura 3. Material de herbario de la Expedición Botánica, colectado por José Celestino Mutis en 1753
y depositado en el Herbario Nacional Colombiano. Fuente: Herbario Nacional Colombiano (COL).
18
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 1
en Colombia
Mutis son inmortales porque emiten sus entre la Escuela de Mutis, la Comisión
raíces hacia la más alta ambición científi- Corográfica y la naciente Escuela de
ca; hacia un patriotismo fervoroso y hacia Ciencias Naturales. En síntesis, aunque
una naturaleza, como es la colombiana”. las ejecutorias de la Expedición Botá-
nica fueron inconclusas por factores de
Sobrevivientes a las vicisitudes de la índole político-social, derivados de la
Expedición fueron Eloy Valenzuela guerra de independencia, tuvieron rele-
y Francisco Javier Matis; este último vancia nacional por sus tareas de inven-
transmitió sus enseñanzas botánicas tario de los recursos naturales del país
principalmente a Juan M. Céspedes, a y por contribuir en la construcción de
Francisco Bayón y a José Jerónimo Tria- identidad nacional.
na, quienes conforman el gran eslabón
19
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
20
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 1
en Colombia
21
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
22
Capítulo 2
23
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
lectura y otras tantas actividades; todo considerado como el mejor del país y
ello desembocó inexorablemente en uno de los mejores de Suramérica, con
la creación de la Sociedad de Ciencias 73.000 ejemplares (López, 1989).
Naturales. Hacia 1929 el Museo ya era
Figura 4. Los Hermanos Lasallistas, en la primera década del siglo xx. Archivo histórico del Museo
de Historia Natural del Colegio San José de Medellín, Proyecto ITM.
24
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 2
en Colombia
25
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Figura 5. El Padre Enrique Pérez Arbeláez, fundador del Instituto de Ciencias Naturales (1936) y el
Jardín Botánico de Bogotá “José Celestino Mutis’’ (1955). Archivo histórico, Instituto de Ciencias
Naturales.
26
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 2
en Colombia
Figura 6. Primera planta docente y administrativa del Instituto de Ciencias Naturales, 1939. Archivo
histórico Instituto de Ciencias Naturales.
27
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
La consolidación de un instituto
de investigación (1960-1980)
En 1959 gracias al Instituto se imple- bios y reptiles pasaban por una etapa
mentó la carrera de Ciencias Naturales incipiente. Otro aporte zoológico desde
(Botánica-Zoología), se promovieron el instituto fue la creación de la revista
las colecciones zoológicas y se vinculó Lozanía- Acta Zoológica Colombiana,
como profesor especial el zoólogo Jorge destinada a la zoología y dedicada al
Hernández Camacho, quien contribu- primero de los zoólogos colombianos,
yó sustancialmente a la creación de la Jorge Tadeo Lozano, Marqués de San
Unidad de Mastozoología. En general, Jorge (1771-1816), quien fue el coor-
las colecciones zoológicas crecieron sig- dinador de los estudios zoológicos de la
nificativamente por la incorporación de Expedición Botánica y editor de Fau-
cientos de ejemplares provenientes de na de Cundinamarca, cuyo objetivo era
las expediciones realizadas en la década el inventario de los animales de todo
de los años cincuenta y sesenta. A dife- el Virreinato de Nueva Granada. Este
rencia de las colecciones ornitológica y período es relevante ya que la Zoología
entomológica que ya estaban consolida- nacional contaba, además de las colec-
das, las colecciones de mamíferos, anfi- ciones del instituto, con las del museo
28
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 2
en Colombia
del Colegio San José de Medellín, crea- En un inicio, según el artículo 4 del
do por los Lasallistas en 1938, con las Acuerdo 48 de 1963 del Consejo Aca-
del museo de historia natural del Insti- démico el Instituto de Ciencias Natu-
tuto de La Salle, creado por el Herma- rales quedó adscrito a la rectoría pero
no Apolinar María desde 1919, y que a dos años más tarde, como efecto de las
pesar de su desmantelamiento por los políticas de integración académica y
incendios de los acontecimientos ne- departamentalización de la Universi-
fastos del 9 de abril de 1948, volvió a dad Nacional de Colombia, se creó la
estructurarse prodigiosamente. En este Facultad de Ciencias y el Instituto de
período se crearon, desde el Instituto, Ciencias Naturales quedó integrado
los primeros programas curriculares en a la nueva facultad con el nombre de
las carreras de Agronomía, Geología, Departamento de Biología (Instituto
Biología y se impartieron los primeros de Ciencias Naturales), se suprimió la
cursos de biología general en la Univer- carrera de Ciencias Naturales y se creó
sidad Nacional. El instituto encontró el primer plan curricular de la carrera
un entorno académico con la idea de de Biología (Mora-Osejo 1990).
universidad estructurada por faculta-
des, las cuales se componían de escuelas
o departamentos.
29
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Figura 9. Tres ventanas editoriales de gran impacto creadas en el Instituto de Ciencias Naturales
(años 1940, 1966 y 1978, respectivamente).
30
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 2
en Colombia
de los setenta se iniciaron los primeros nico Luis Eduardo Mora Osejo. El ob-
procesos de sistematización de datos jetivo central de este programa es el de
de las colecciones; en 1976 se selló el describir en varios volúmenes la riqueza
ejemplar botánico 150.000 y se convo- florística del país (Mora-Osejo, 1978);
có a la primera reunión de curadores de el primer y segundo volúmenes fueron
herbarios del país. En 1977, la Univer- publicados en 1983; hasta hoy se han
sidad Nacional, a través del Instituto de publicado 31 monografías de diferentes
Ciencias Naturales y la Universidad de familias y géneros.
Ámsterdam firmaron un convenio para
la ejecución del proyecto ECOAN- Al analizar estos episodios de con-
DES, encargado del estudio de los solidación institucional entre 1960
ecosistemas de montaña, su distribu- y 1980 merecen la atención los si-
ción espacial, su dinámica y su histo- guientes factores (Amat 2006):
ria; como producto de este convenio se
hicieron importantes expediciones y se • El influjo de la academia alemana
publicaron varios volúmenes de la Serie en el pensamiento científico de los
Estudios en Ecosistemas Tropandinos. forjadores del Instituto. El padre
Enrique Pérez Arbeláez, por ejem-
Un hecho de gran impacto académico plo, tuvo una franca formación
fue la implementación en 1975 de las alemana. El padre Lorenzo Uribe
salidas de campo en los cursos regula- director e investigador del Institu-
res de Taxonomía Vegetal y Taxonomía to se doctoró, siendo ya sacerdote
Animal; se trataba de jornadas de cam- con estudios en la Universidad de
po entre 12 y 15 días en la cuales los Friburgo. El Profesor Luis Eduardo
estudiantes se formaban en el conoci- Mora Osejo, director entre 1965 y
miento de los distintos grupos de plan- 1970, realizó sus estudios de docto-
tas y animales y, con una gran sinergia rado en ciencias, biología-botánica
entre la docencia y la investigación, se de la Universidad Johannes Guten-
realizaban inventarios de la flora y la berg de Maguncia.
fauna de la región visitada. El desarrollo
exitoso de estas actividades académicas • El papel de los investigadores con
aseguró un buen número de generacio- formación religiosa, como los Pa-
nes de biólogos con orientaciones hacia dres Enrique Pérez Arbeláez, Lo-
la Taxonomía y la Sistemática. renzo Uribe, Antonio Olivares,
Gustavo Huertas y Luis A. Camar-
En 1978 el Instituto recibió la Orden go; ellos permitieron que el Insti-
de Boyacá, conferida por sus aportes a tuto fuese en aquella época un ins-
la ciencia colombiana. En este mismo trumento de intercambio científico
año el Instituto presentó a la Universi- abierto a los especialistas y al mun-
dad Nacional de Colombia y a la socie- do. Su disciplina, moldeada desde
dad colombiana el Programa Flora de sus vivencias monacales y religiosas
Colombia, bajo la dirección del botá- tuvieron impacto pedagógico e in-
31
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Internacionalización institucional
entre 1981 y 2000
El importante papel del Instituto como rales estimuló a que fundaciones
responsable directo del conocimiento internacionales como la UICN, el
de la biodiversidad del país se potenció Smthsonian Institution, Conserva-
considerablemente desde 1981 por tres tion International y otras, se acer-
razones de carácter internacional: caran al Instituto para concertar
estudios de inventarios y conserva-
• El posicionamiento de Colombia ción.
como uno de los 10 países megadi-
versos en organismo vivos del pla- • La participación de Colombia en
neta; esto significó que el Instituto 1992 en el Convenio de las Na-
de Ciencias Naturales suscribiera ciones Unidas sobre Diversidad
importantes convenios de coopera- Biológica (CDB), que se constitu-
ción internacional. yó en el primer acuerdo mundial
que aborda todos los aspectos de
• La declaratoria mundial de la cri- la diversidad biológica. Este factor
sis de la biodiversidad por los pro- replanteó las políticas nacionales
cesos de extinción de especies y en el tema del conocimiento, uso
destrucción de sus hábitats natu- y conservación de la biodiversidad
32
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 2
en Colombia
y sin lugar a dudas permitió que el Entre 1980 y 1991 se creó y desarrolló
Instituto mantuviese su estatus de el Programa de Posgrado (Maestría en
órgano consultor del Ministerio de Sistemática- áreas de Botánica y Zoolo-
Ambiente en el escenario del Siste- gía), se fortalecieron los Programas Flo-
ma Nacional Ambiental (SINA). ra y Fauna de Colombia y se realizaron
convenios de relevancia internacional.
Durante el período 1982-1986 se ins-
titucionalizó el programa de Fauna en
Colombia, cuyo primer volumen apa-
reció en diciembre de 1995. En 1983
se creó la serie Biblioteca José Jerónimo
Triana, en homenaje al más grande de
los botánicos colombianos.
33
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
A B C
Figura 11. Tres proyectos editoriales creados desde el Instituto de Ciencias Naturales. a) Flora de
la Real Expedición Botánica (en asocio con España), creada en1952. b) Serie José Jerónimo Triana,
creada en 1983. c) Fauna de Colombia, creada en1995.
34
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 2
en Colombia
En esta nueva etapa las colecciones del distinguido por Colciencias en forma
Instituto de Ciencias Naturales crecie- consecutiva durante tres años (1998-
ron considerablemente en las décadas 2000) como Centro de Excelencia en la
de los años 90 y 2000 y se iniciaron “Categoría A” en investigación y el me-
importantes procesos tendientes a la jor equipo nacional de investigación en
sistematización de datos y a la geore- Taxonomía y Sistemática. En esta etapa
ferenciación. Como iniciativa del Ins- estuvieron en calidad de investigadores
tituto se crea en el 2000 el programa visitantes: Jonnathan Coddington, del
de Doctorado en Ciencias-Biología, Smithsonian Institution (USA); Pedro
con las líneas de investigación en Reyes Castillo, del Instituto de Ecología
Taxonomía y Sistemática, Biodiversi- (México) y Christian Samper (Instituto
dad y Conservación y Paleoecología. Humboldt, Colombia), entre otros.
El Instituto de Ciencias Naturales fue
35
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
B
Figura 12. Ilustres visitantes del Instituto de
Ciencias Naturales: a) Edward Wilson, 2007,
entomólogo y uno de los pensadores más influ-
A yentes del siglo XX y b) Paul Ehrlich, 2010, re-
conocido especialista mundial en Coevolución.
Archivo histórico ICN.
36
Capítulo 3
38
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 3
en Colombia
Figura 13. El Instituto de Ciencias Naturales de 1945. De izquierda a derecha: Alicia González,
Jesús Idrobo, Helena Schiefer, Armando Dugand, María Teresa Murillo, Alvaro Fernández y Roberto
Jaramillo. Archivo histórico ICN.
5 Suponemos que Germán Amat García 6 Enrique Pérez Arbeláez fue un perso-
se refiere con “diversificación de las fun- naje muy destacado e influyente en la
ciones” al hecho de que en el ICN se comunidad científica colombiana de su
emprendieron variadas expediciones, se época y por lo tanto un caso interesante
publicó la revista Caldasia, y en general para los historiadores de la ciencia del
intentaron ir más allá que ser simple- siglo 20 en Colombia. El fundó el Her-
mente el guardián del Herbario Na- bario Nacional Colombiano en 1929 y
cional. Ver AMAT GARCÍA, Germán dirigió los incipientes institutos que fi-
“Reseña histórica del Instituto...”, pp. nalmente formaron el ICN, entre otras
310-311. actividades destacadas. No fue un he-
cho fortuito que fuera el primer galar-
39
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
los primeros pasos para conformar una investigación botánica desde comienzos
comunidad científica botánica y zooló- del siglo XX fue menospreciada como
gica moderna dando vida al Instituto base válida para consolidar una comu-
Botánico de la Universidad Nacional, nidad científica en los años por venir.
ya que “[a] su regreso de Alemania [don-
de cursó sus estudios en Botánica] en- La década de 1940 fue entonces una
época de renacimiento de la investiga-
contró un país indiferente y ajeno a sus
ción en ciencias naturales en Colombia
pretensiones académicas; se puede afirmar
con un lugar especial para la botánica.
que partió de ceros [...]”7. Aunque esos
Sería entonces durante la primera déca-
ceros no pueden ser asumidos en térmi-
da de existencia del ICN que el nombre
nos absolutos, ya que existían algunos
de la botánica colombiana ganó im-
centros científicos colombianos con
portancia internacional y se consolidó
estudios en botánica8, sí es evidente la
como el centro nacional en esta rama.
preocupación de botánicos de la época
Este auge de la ciencia natural se da
por la ausencia de tradición botánica
precisamente durante los años de la
moderna en el país. Como veremos más
República Liberal, término usado por
adelante, los que se creían los anteceso- la historiografía nacional para nombrar
res de su labor serían personajes de casi los gobiernos del partido liberal entre
100 años antes y más. En otras pala- 1930 y 1946. Durante estos gobiernos
bras, lo mucho o poco que existiera en hubo un brote ostensible de institucio-
nes académicas y científicas, entre las
donado con el premio Alejandro Ángel
cuales vale mencionar a la Academia de
Escobar en el año 1955. Él publicó mu-
chos y variados artículos en revistas de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, la
la época, y además, su correspondencia Escuela Normal Superior, el Instituto
privada es conservada en el Archivo Ge- Agustín Codazzi, y ciertas moderniza-
neral de la Nación en Bogotá. Hay su- ciones dentro de la Universidad Nacio-
ficiente materia prima para emprender nal. El apoyo de estos gobiernos para
una investigación histórica basada en él. el avance de la actividad científica en
7 Citado en AMAT GARCÍA, Germán Colombia fue destacado y ostensible9.
“Reseña histórica del Instituto...”, p.
310. Original fue tomado de ARANGO 9 Un ejemplo de lo dicho en el caso co-
T. Enrique Pérez Arbeláez, su vida y su lombiano dice: “los años treinta, do-
obra, Bogotá, Fondo FEN, 1992, p. 8. minados por administraciones liberales
8 Antes del inicio del ICN se pueden progresistas en el gobierno, fueron fértiles
nombrar la Sociedad de Ciencias Natu- en la creación de instituciones científicas”
rales del Instituto de la Salle, la Sociedad en POVEDA RAMOS, Gabriel “100
Geográfica de Colombia y la Academia años de ciencia colombiana” en TIRA-
Colombiana de Ciencias Exactas, Físi- DO MEJIA, Alvaro (director) Nueva
cas y Naturales. Ver OBREGÓN TO- Historia de Colombia, Bogotá, Planeta,
RRES, Diana Sociedades científicas en Tomo IV, p. 171. Es interesante com-
Colombia: la invención de una tradición, parar lo dicho con la hipótesis de Stuart
1859-1936, Bogotá, Banco de la repú- McCook, donde asegura que la ciencia
blica, 1992. botánica renació en el Caribe durante
40
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 3
en Colombia
41
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
sia. Desde su primer número del año revista elaborada con estándares y for-
1940 fue un instrumento que facilitó el matos de revistas científicas reconocidas
establecimiento de relaciones con cien- en el mundo le ofrecía al ICN una po-
tíficos primordialmente norteamerica- sición de mayor reconocimiento entre
nos y europeos. La revista con artículos pares colombianos y extranjeros. Cien-
sobre la fauna y flora colombiana fue tíficos del mundo podían inscribirse a
una herramienta que colocaba al ICN ella o intercambiar sus respectivas revis-
en una posición mejor aceptada como tas con el ICN, ése era un puente muy
centro de producción científica ante el efectivo para llamar la atención del res-
resto del mundo. El hecho de ser una to del mundo científico.
Legado nacionalista
Como lo introdujimos en un comien- paginaba de manera cabal para desper-
zo, estos años de la década de 1940 es- tar la indignación social. Además, este
tuvieron enmarcados por un contexto esfuerzo de recobrar las láminas tendría
de nacionalismo en Colombia. Por ello como objetivo emprender una obra de
es interesante encontrar iniciativas de ciencia botánica que haría relucir a otro
fuerte arraigo nacionalista dentro de nuevo baluarte nacional: el nuevo gru-
la actividad científica de la comunidad po de científicos, y por ende la mismí-
botánica. Por ejemplo, el patriotismo sima ciencia nacional12. En la revista de
de los botánicos se hizo evidente con el la Academia de Ciencias Exactas, Físi-
proyecto de la publicación de la flora cas y Naturales se dijo que:
de Colombia, una empresa que desde
tiempos coloniales rondaba la cabeza de “no es posible que los colombianos nos con-
los botánicos de turno. A modo de un tentemos hoy con que en España se haga
la publicación tardía de los trabajos de
eterno retorno, ese afán por conocer la
Mutis, Caldas, Zea, Lozano y demás
riqueza de la flora colombiana aún des-
miembros de la Expedición Botánica,
conocida es retomado una vez más. cuando estamos empeñados en la elabo-
Para comenzar de nuevo semejante
12 Es cierto que esa repatriación era tam-
tarea, se reinició la discusión sobre la bién una muestra de nacionalismo, una
consecución de las láminas de la Expe- apropiación de soberanía ya no de un
dición Botánica que fueron arrebatadas territorio, sino de conocimiento cien-
de manos locales durante la reconquista tífico, como dice McCOOK, Stuart
española a comienzos del siglo XIX y States of Nature...., pp. 8 y 45. Lo que
que reposan aún hoy día en el Jardín insistimos acá es que todo ello son sím-
Botánico de Madrid en España. Te- bolos textuales de nacionalidad, pero
niendo en cuenta que esta expedición finalmente el objetivo final estaría más
era y ha sido un símbolo nacional por orientado a las finalidades propias de la
comunidad científica.
excelencia, la retórica nacionalista com-
42
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 3
en Colombia
ración de la nuestra Flora y tales trabajos por manos colombianas sería una car-
puede considerarse como su fundamento. ta de presentación al mundo científico
(...) no es posible declararnos ampliamen- donde se valoraría tanto las capacidades
te satisfechos sino cuando el Gobierno de de la botánica colombiana actual como
la Madre Patria devuelva a la Ciencia
las del pasado ya colombianizado.
colombiana este tesoro de que es simple
depositario”13. Otro evento destacado dentro del ca-
La obra de la Expedición Botánica ha- rácter nacionalista de la comunidad
bía que nacionalizarla y “complementar- botánica fue la selección y declaración
la con los nuevos trabajos llevados a cabo de la flor y árbol nacionales. Ya desde
en el país (...), para que pudiese en verdad la década de 1930 se había declarado a
catalogarse como la verdadera obra de la la variedad de orquídea Cattleya trianae
Flora colombiana (...)”14. Así entonces, como flor nacional, y después en el año
el ánimo por publicar la obra de Mutis, 1949, el director del ICN y reconocido
argumentado bajo un velo nacionalista, experto en palmas, Armando Dugand,
era finalmente el esfuerzo por comple- propuso la palma de cera del Quindío
tarla con conocimientos botánicos ac- (Ceroxylon quindiense) como árbol na-
tuales de los científicos colombianos; cional ante el comité organizador del
esa sería la manera más expedita y sutil Tercer Congreso Suramericano de Bo-
de colombianizar la expedición botáni- tánica.
ca, arrebatársela a España, y finalmente Ahora bien, el nacionalismo que ali-
hacer relucir las capacidades científicas mentó y promulgó este grupo de cien-
de la comunidad colombiana15. Una tíficos debe también ser entendido bajo
obra de tal talante acabada y refinada lo que se entendió como nación para
ellos. La nación era elitista y excluyen-
13 “Notas de la Dirección” en Revista de
te, y revertir estas brechas no era la in-
la Academia..., núm. 25-26, Diciem-
tención del nacionalismo promulgado.
bre-1946, p.11.
14 “La Academia Colombiana de Ciencias Por ejemplo, el público de Caldasia se
Exactas, Físicas y Naturales y el Proyec- supone que debía ser muy selecto, una
to de Publicación de la Iconografía de característica que vehementemente ex-
la Expedición Botánica” en Revista de presa Armando Dugand en medio de
la Academia..., núm. 25-26, Diciem- su queja por la falta de reconocimiento
bre-1946, p.221. de la revista en ciertos círculos cultura-
15 Armando Dugand se queja de la falta les del país; “cierto es que nuestras pu-
de ayuda y arrogancia de algunos pares blicaciones son dirigidas a una minoría
científicos españoles. “(...) Pensé enton-
selecta, que sí entiende...”16, comentaba
ces que los augustos señores del Botánico
Dugand.
madrileño estarían creyendo que Colom-
bia y sus botánicos no estarían “a la altu-
ra” de la tarea (...)” Armando Dugand 16 Armando Dugand a Libardo Gutiérrez
a padre Lorenzo Uribe-Uribe, 17-Novi- Márquez, 22-Agosto-1952, archivo
embre-1950, archivo ICN, libro 1950. ICN, libro 1952.
43
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
44
Capítulo 4
protagonistas en la documentación de la
biodiversidad nacional
45
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Su legado
El Hermano Apolinar logró interesar Zoología colombiana. Fue condecorado
en las Ciencias Naturales a muchas ge- por las academias francesa y norteame-
neraciones de estudiantes, por tanto su ricana. Por su parte, la Academia Co-
dedicación pedagógica e investigativa al lombiana de Ciencias Exactas, Físicas y
servicio a la naciente comunidad cien- Naturales lo postuló miembro honora-
tífica de la época lo hace merecedor del rio y el gobierno colombiano lo conde-
honorífico calificativo de Padre de la coró con la Cruz de Boyacá.
46
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Soc. Cienc. Nat. Ins. La Salle, 1: Cienc. Nat. Ins. La Salle, 8-9:231-
8-14. Bogotá. 235. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1914. Espe- Apolinar, María, hermano. 1914. In-
cies Nuevas. Bol. Soc. Cienc. Nat. dicaciones para los jóvenes natura-
Ins. La Salle, 3: 65-68. Bogotá. listas. Bol. Soc. Cienc. Nat. Ins. La
Salle, 8-9: 263-269. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1914. Las
moscas (continuación). Bol. Soc. Apolinar, María, hermano. 1915. Mi-
Cienc. Nat. Ins. La Salle, 3: 68-73. nerales de Colombia y en especial
Bogotá. de la cordillera oriental. Bol. Soc.
Cienc. Nat. Ins. La Salle, 2: 23-26.
Apolinar, María, hermano. 1914. El Bogotá.
Cernícalo. Bol. Soc. Cienc. Nat.
Ins. La Salle, 4: 100-109. Bogotá. Apolinar, María, hermano. 1915. Psa-
lidognathus friendi Gray. Bol. Soc.
Apolinar, María, hermano. 1914. Mi- Cienc. Nat. Ins. La Salle, 4: 54-63.
nerales de Colombia. Bol. Soc. Bogotá.
Cienc. Nat. Ins. La Salle, 4: 125-
127. Bogotá. Apolinar, María, hermano. 1915. El
Ornitologista colombiano. Bol.
Apolinar, María, hermano. 1914. Aves Soc. Cienc. Nat. Ins. La Salle, 6:
descubiertas y descritas por el señor 82-87. Bogotá.
doctor don Frank M. Chapman.
Bol. Soc. Cienc. Nat. Ins. La Salle, Apolinar, María, hermano. 1915. Da-
6: 170-173. Bogotá. tos para la entomología. Bol. Soc.
Cienc. Nat. Ins. La Salle, 9: 136-
Apolinar, María, hermano. 1914. Mi- 139. Bogotá.
nerales de Colombia y en especial
de la cordillera oriental. Cuarzo Apolinar, María, hermano. 1915. Pri-
(continuación). Bol. Soc. Cienc. meros estados de mariposas colom-
Nat. Ins. La Salle, 6: 184-187. Bo- bianas. Bol. Soc. Cienc. Nat. Ins.
gotá. La Salle, 9: 139-141. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1914. Thri- Apolinar, María, hermano. 1916. In-
nacodus apolinari sp.nov. Bol. Soc. sectos. Estudio de los Catagrámi-
47
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
dos. Bol. Soc. Cienc. Nat. Ins. La Soc. Col. Cienc. Nat, 76: 88-95.
Salle, 32: 102-104. Bogotá. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1917. Las Apolinar, María, hermano. 1925. El
grandes serpientes. Bol. Ins. La Sa- ratón runcho (Caenolestes obscurus)
lle, 27: 59-61. Bogotá. (Thomas). Bol. Ins. La Salle, 96:
34-37. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1917. El
Eucalipto. Bol. Soc. Cienc. Nat. Apolinar, María, hermano. 1925. Ara-
Ins. La Salle, 40: 68-74. Bogotá. neismo (Latrodectus walkn). Bol.
Soc. Col. Cienc. Nat, 81: 89-102.
Apolinar, María, hermano. 1921. Una Bogotá.
araña venenosa. Bol. Ins. La Salle,
64- 65: 80-83. Bogotá. Apolinar, María, hermano. 1926. Las
Ranunculáceas colombianas. Bol.
Apolinar, María, hermano. 1922. Los Soc. Col. Cienc. Nat, 85: 60-75.
peligros de las moscas. Bol. Ins. La Bogotá.
Salle, 70: 2-6. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1926. Las
Apolinar, María, hermano. 1923. Ma- Crucíferas colombianas. Bol. Soc.
riposas colombianas. Bol. Soc. Col. Col. Cienc. Nat, 87: 131- 132. Bo-
Cienc. Nat, 71: 297-308. Bogotá. gotá.
Apolinar, María, hermano. 1923. Ara- Apolinar, María, hermano. 1927. Voca-
chis hipogaea L. Bol. Soc. Col. bulario explicativo de los términos
Cienc. Nat, 73: 381-388. Bogotá. vulgares usados en la República.
Apolinar, María, hermano. 1924. Al- Bol. Soc. Col. Cienc. Nat, 89: 26-
gunos mamíferos de las regiones 32. Bogotá.
de Medellín y Bogotá, clasificados Apolinar, María, hermano. 1930. Las
por el eminente mamálogo doctor tres palmas. Bol. Ins. La Salle, 124:
Olfrield Thomas. Bol. Soc. Col. 89-90. Bogotá.
Cienc. Nat, 74: 3-11. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1931. Con-
Apolinar, María, hermano. 1924. Los tribuciones al estudio de la flora
chinches. Bol. Soc. Col. Cienc. adventicia de Bogotá. Bol. Ins. La
Nat, 74: 36-39. Bogotá. Salle, 127: 4-6. Bogotá.
Apolinar, María, hermano. 1924. El Apolinar, María, hermano. 1936. Espe-
paludismo. Bol. Ins. La Salle, 89: cies colombianas del género Calo-
30-33. Bogotá. soma Weber. Rev. Acad. Colomb.
Apolinar, María, hermano. 1924. Espe- Cienc. Exactas Fís. Nat, 1: 8-9.
cies nuevas y observaciones diver- Bogotá.
sas sobre dermápteros y ortópteros Apolinar, María, hermano. 1938. Mis-
colombianos (continuación). Bol. celánea botánica. Bol. Ins. La Salle,
48
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
A B
Figura 14. a) Óleo del Hno. Apolinar María. b) Portada del Boletín de la Sociedad Colombiana de
Ciencias Naturales, fundada por el Hno. Apolinar María en 1912. Archivo histórico ICN.
49
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Apuntes biográficos
El Hermano Daniel nació en Bogotá en la Academia Colombiana de Ciencias
1909 y perteneció a esas generaciones Exactas, Físicas y Naturales.
favorecidas con la llegada al país de los
Hermanos Cristianos de la Congrega- En su historial bibliográfico se conocen
ción de San Juan Bautista de La Salle. unas doscientas publicaciones como
Su nombre fue Julián González Patiño producto de sus tareas de pedagogía,
y realizó sus estudios primarios en La investigación y divulgación. La mayor
Escuela San Víctor, anexa al Instituto parte de estas contribuciones corres-
de la Salle en Bogotá. A los 16 años ponden a la Botánica, a la Zoología,
de edad se ordenó como Hermano de a la Geología y a la Paleontología del
la Comunidad Lasallista y a los 19 se país y fueron escritas a lo largo de casi
graduó como bachiller de la Escuela cuatro décadas, entre 1934 y 1969.
Normal de Los Hermanos de La Salle, Durante este lapso de tiempo investigó
donde fue profesor en las áreas de Bio- sobre muchos grupos de plantas, entre
logía y Química. ellas las acuáticas, los helechos, las gra-
míneas, las euforbiáceas, las malpigiá-
En 1933 inició las tareas docentes de ceas, las verbenáceas, las bromeliáceas,
los cursos de biología, botánica, zoo- las orquidáceas, las lauráceas y aquellas
logía y química en el Colegio San José de importancia toxicológica y médica.
de Medellín; al año siguiente asumió la Con referencia a la zoología, son im-
dirección del Museo de Ciencias Natu- portantes sus observaciones sobre los
rales del Colegio San José de Medellín, moluscos, arácnidos, insectos, peces,
desde donde inició las colecciones de serpientes y mamíferos marsupiales.
material botánico, zoológico y minera- El hermano Daniel también se ocupó
lógico, representativo del departamento en tareas de divulgación sobre fauna
de Antioquia. Gracias a sus incansables extinta, haciendo énfasis en grupos de
excursiones sus colecciones se amplia- la paleofauna colombiana, como la pre-
ron a todo el país y hoy constituyen sencia de mastodontes en Colombia.
importantes fuentes de información
sobre el inventario de la biodiversidad En 1945 fue nombrado profesor de Far-
colombiana. macognosia en la Universidad de An-
tioquia y en ese año presentó y aprobó
En 1938 fundó la Sociedad de Cien- los exámenes reglamentarios para optar
cias Naturales de Caldas para fomentar al título de doctor en Ciencias Natura-
en los estudiantes el conocimiento de les. Participó activamente en la creación
la naturaleza y al año siguiente fue de- del Centro de Investigaciones Astronó-
signado miembro correspondiente de micas de la Universidad de Antioquia.
50
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Su legado
La botánica y la zoología colombiana igualmente, el Museo de la Universidad
están en deuda con el Hermano Daniel, de La Salle heredó del Hermano Daniel
quien se dedicó a estudiar hasta conver- unos 600 ejemplares botánicos.
tirse en un maestro naturalista. Dio a
conocer las floras locales como El Ca- En 1959 la Asamblea de Antioquia lo
piro y Salamina (Antioquia) y Sasaima postuló como Maestro de juventudes,
(Cundinamarca), alrededores de Bogo- un calificativo que resume todas sus
tá y Medellín, entre otras. Del material actividades pedagógicas, entre ellas la
botánico colectado por él en la mayor producción de textos en Ciencias Na-
parte del territorio colombiano (hay turales para la instrucción secundaria
versiones que alcanzó a colectar unas (Figura 16). Sinopsis de Biología, fue un
12000 plantas) se conocen nuevas espe- texto publicado en 1952 para estudian-
cies, e incluso algunas descritas por él o tes de 3er año de bachillerato y llegó a
en asocio con ilustres naturalistas de la constituirse en un valioso instrumen-
época como Armando Dugand (Figura to pedagógico para los profesores de
15). Su legado botánico reposa en va- secundaria. En este texto, además de
rios herbarios colombianos; el Herba- conocimientos básicos en las ciencias
rio Nacional Colombiano (COL), por naturales, el Hermano Daniel hizo im-
ejemplo, cuenta con unos 1100 ejem- portantes anotaciones a las floras y fau-
plares, con localidades de colecta en nas regionales de Colombia.
la mayoría de departamentos del país;
51
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Figura 16. Material de herbario con Eschweilera antioquensis, olla de mono, especie vegetal descu-
bierta por Armando Dugand y el Hno. Daniel en 1937. Fuente: Herbario Nacional Colombia-
no (COL).
52
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
El pensamiento conservacionista
del Hermano Daniel
En mayo de 1955 la Revista de la Facul- de especies colombianas de artrópodos,
tad Nacional de Agronomía, editada en reptiles y aves. Entre líneas de su escrito
Medellín, publicó un número especial el religioso expresaba:
con el título “Algunos aspectos de la
“Las plagas están constituidas por animales
lucha biológica”, bajo la autoría del o por vegetales parásitos que se hallan
Hermano Daniel. Esta obra sintetiza, empeñados en arrebatar al hombre el
en parte, el profundo conocimiento fruto de sus esfuerzos y sudores. En
del Hermano sobre la Historia Natural esta lucha desigual le hubieran ya ven-
y resalta la importancia de las especies cido, a no dudarlo, si no existiera en
animales y vegetales en el manteni- la naturaleza ese admirable equilibrio
miento de los ecosistemas naturales y resultante de la lucha por la vida que
su comportamiento en hábitats que se libran todos los seres vivos y si el hom-
han modificado a consecuencia de las bre no hubiera sabido aprovechar los
recursos que le brindan su experiencia
prácticas agrícolas. En este libro olvi-
y el conocimiento adquirido en su dia-
dado de la literatura naturalística del rio contacto con el campo(…). Fuera
país, el Hermano Daniel introduce el de los medios que ha suministrado la
concepto de control biológico para un industria en la represión de las plagas,
entendimiento integral del problema como los líquidos insecticidas y fun-
de las especies plaga. La identificación gicidas, el hombre cuenta además con
de los enemigos naturales de las espe- otro medio poderoso y barato en esta
cies calificadas como “plagas” represen- guerra en que se haya empeñado; es la
ta una pauta de corte conservacionista, ayuda de los predatores, es decir, de los
que garantiza, por una parte el mante- animales perseguidores de los mismos
parásitos. Mientras el labrador descansa
nimiento de los ecosistemas naturales, y
tranquilo de sus faenas cotidianas, éstos
por otro lado el aprovechamiento de los continúan incansables la persecución
mismos para obtener alimento, a través de obedecimiento a la imperiosa necesi-
de las prácticas agrícolas. En su libro se dad de vivir; de esta manera, ayudan de
ocupa del conocimiento taxonómico y modo inconsciente al trabajo realizado
del papel ecológico de un gran número por el hombre”.
53
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Daniel, hermano. 1936. Flora del Ca- Boletín del Colegio San José de Medellín,
piro. Boletín del Colegio San José de p. 10-12.
Medellín, 38:22-37. Medellín.
Daniel, hermano. 1940. Contribución
Daniel, hermano. 1936. Notas sobre al- al conocimiento de la flora antio-
gunas euforbiáceas. Boletín del Cole- queña. Caldasia, 1, 85-88.
gio San José de Medellín, 38:21-34.
Daniel, hermano. 1941. Ciperáceas de
Daniel, hermano. 1936. Una Malpigiá- los alrededores de Medellín. Calda-
cea de nuestros Llanos Orientales. sia, 2, 63-66.
Revista Dyna, Universidad Nacional
de Colombia, Medellín, 8:260-262. Daniel, hermano. 1941. Apuntes sobre
algunos moluscos colombianos.
Daniel, hermano. 1940. Plantas colec- Rev. Acad. Colomb. Cienc. Exactas
cionadas en una excursión al Salto Fís. Nat, 19: 372--379. Bogotá.
de Guadalupe.
Figura 17. Portadas de los textos en Botánica y Zoología para estudiantes de bachillerato (1956-
1958), escritos por el Hno. Daniel, como contribución a la pedagogía de la biodiversidad colom-
biana.
54
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Daniel, hermano. 1944. Por los predios Daniel, hermano. 1947. Las Ciencias
de la Flora regional. Boletín del Co- Naturales en Antioquia. Boletín del
legio San José de Medellín, 44,10-12. Instituto de la Salle, 181,182: 48-
56. Medellín.
Daniel, hermano. 1944. A través del
mundo de los dípteros. Revista de la Daniel, hermano. 1950. Catálogo de
U. Pontificia Bolivariana, Medellín, ofidios colombianos. Revista de la
11 (38): 90-102. U. de Antioquia Bolivariana, Mede-
llín, 96: 410-441.
Daniel, hermano. 1945. Preliminares
sobre la Flora Criptogámica de An- Daniel, hermano. 1959. Anatomía de
tioquia. Revista de la U. Pontificia las orquídeas y su clasificación. Re-
Bolivariana, Medellín, 43: 14-30. vista de la U. Pontificia Bolivariana,
Medellín, 23 (84): 312-335.
Daniel, hermano. 1946. Consideracio-
nes sobre algunas Lauráceas. Bole- Daniel, hermano. 1955. Algunos aspec-
tín del Colegio San José de Medellín, tos de la lucha biológica. Revista de
47, 89-94. la Facultad Nacional de Agrono-
mía, Medellín, 16 (48): 1-169.
Daniel, hermano. 1945. Algunas Gra-
míneas colombianas. Revista de la Daniel, hermano. 1962. La isla de san
U. Pontificia Bolivariana, Medellín, Andrés: sorpresa para el botánico.
47: 498-510. Boletín del Colegio San José de Me-
dellín, 3-40.
55
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
56
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
57
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
58
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
59
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Figura 18. Protagonistas de la biodiversidad colombiana. a) El Padre Enrique Pérez Arbeláez, impar-
tiendo cátedra en el Instituto de Ciencias Naturales (1939). b) Richard Evans Schultes acompañado
de Hernando García Barriga, en una excursión en Soratama, Apaporis (1951). Archivo histórico
ICN y cortesía de la familia Hernández y la Revista de la Academia de Ciencias Exactas, Físicas y
Naturales.
60
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Richard Evans
20 Este texto Schultes
es un extractoesdeununo
nombre Durante
de los capítulos de lacasi 12 años,de
monografía desde
grado1941
OSPINAhas-
destacado en la etnobotánica del siglo ta 1953, Schultes realizó varias
REY, Sergio. FRONTERAS DE LA CIENCIA. Nacionalismo, geografía de la ciencia y re- y largas
pasado; unColombia-EE.UU.
laciones hombre recordado más
en la botánica visitas a Colombia
que colombiana comode parte
y las expediciones RicharddeEvans
una
todoSchultes
por suenlabor docente
las décadas e investiga-
de 1940 investigación
y 1950, Monografía de gradobotánica
para optarsobre
por el especies
título de
tivaHistoriador
en la Universidad de Harvard
(sin publicar), Universidad de la
en de los selva2013.
Andes, amazónica; esas expediciones
EE.UU., pero siempre relacionado y se concentraban en trabajo de campo
enmarcado por sus años de expedicio- recolectando especímenes. Largas esta-
nes científicas en la selva amazónica, días en Colombia requirieron entonces
recorridos hechos en su gran parte por que él construyera estrechos lazos con
territorio colombiano. Sus intereses personajes locales que hicieron de algu-
principales y primordiales fueron las na u otra manera parte de su expedición
plantas medicinales y alucinógenas uti- científica. Schultes hizo del Instituto de
lizadas por comunidades indígenas, de Ciencias Naturales (ICN) de la Univer-
las cuales buscó un uso práctico en la sidad Nacional su centro de operacio-
medicina occidental. Así entonces, sus nes en Colombia y entabló amistad y
pasos lo llevaron por hongos alucinó- relación científica con científicos e in-
genos en México, venenos cinegéticos telectuales colombianos, y con comuni-
del Putumayo, bejucos psicotrópicos dades campesinas e indígenas a lo largo
en el Amazonas, y marihuana en Afga- de los territorios que recorrió. Guías
nistán. En esta breve reseña biográfica locales, ayudantes en campo, científicos
nos enfocaremos en el paso de Schultes colombianos, todo ellos fueron todos
por Colombia, sus expediciones cien- de gran importancia para el éxito de su
tíficas y las relaciones que entabló con trabajo. El silencio y ocultamiento que
la comunidad de científicos botánicos muchos de ellos han sufrido a través de
locales. las muchas veces apologética imagen de
un Schultes como explorador solitario
s1 desdibuja la importancia que ellos tu-
vieron para su investigación. Afortuna-
20 Este texto es un extracto de uno de los
damente, los contactos de este botánico
capítulos de la monografía de grado
OSPINA REY, Sergio. FRONTERAS extranjero con la sociedad y la natura-
DE LA CIENCIA. Nacionalismo, geo- leza locales han dejado algunas huellas
grafía de la ciencia y relaciones Colom- que ayudan a complementar la biogra-
bia-EE.UU. en la botánica colombia- fía de Schultes que ha sido publicada
na y las expediciones de Richard Evans hasta ahora (ver la bibliografía anexa).
Schultes en las décadas de 1940 y 1950,
Monografía de grado para optar por Schultes era originario de Boston,
el título de Historiador (sin publicar), EE.UU. donde también cursó sus es-
Universidad de los Andes, 2013. tudios universitarios en la reconocida
61
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Universidad de Harvard. Allá recibió Las plantas por las que Schultes se inte-
en 1941 su título de doctorado, en resó en sus investigaciones en Colom-
cuya tesis descifró el enigma etnobotá- bia se encuentran predominantemente
nico del hongo alucinógeno teonanacatl en la región amazónica, por lo tanto sus
de la región de Oaxaca, México. Justo viajes por ese país fueron exploraciones
después de recibir su grado, en el ve- de campo por ríos como el Negro y el
rano de ese mismo año aterrizó en Co- Apaporis, desde las regiones del Putu-
lombia gracias a una beca del National mayo hasta las fronteras selváticas entre
Research Council para investigar el Colombia y Venezuela. Sin embargo,
curare, una sustancia venenosa usada también pasó algunas temporadas en
por grupos indígenas en el Amazonas Bogotá, donde se encontraba con sus
colombiano. Sin embargo, la guerra compañeros botánicos colombianos y
hizo variar sus planes. Como empleado preparaba sus expediciones y el material
del gobierno norteamericano, Schultes botánico recolectado para enviarlo a
tuvo que concentrarse en investigar el Harvard. Schultes repartió su tiempo de
caucho colombiano para evaluar la po- esos casi 12 años, de manera muy igual
sibilidad de reemplazar los suministros se podría decir, entre Boston, Bogotá
de caucho del sureste asiático que Japón y la selva amazónica, descontando sus
había cortado tras su invasión militar. cortas visitas a herbarios, instituciones
Schultes entonces investigó durante o conferencias en América y Europa.
varios años el género Hevea hasta que
al final de la década de 1940 regresó a Si bien las investigaciones botánicas y
sus intereses etnobotánicos y profun- etnobotánicas de este científico nor-
dizó en el estudio del yagé, una bebida teamericano abarcan un espectro más
usada por grupos indígenas en rituales amplio que el que hemos resumido,
y hecha con el bejuco del alma, nombre han sido aquellas sobre el caucho y las
local que Schultes usó como título en plantas alucinógenas la causa principal
uno de sus libros publicado en la déca- de su reconocimiento posterior22. Ri-
da de 199021. Después de sus años en chard Evans Schultes falleció en el año
Colombia, este hijo de Harvard regresó 2001 después de décadas dedicadas a
a su alma máter y se vinculó a la vida sus labores en la Universidad de Har-
académica como profesor e investiga- 22 La cultura hippie de los años venide-
dor en Boston a partir de 1953. ros tomó a Schultes como uno de sus
ídolos científicos (él tuvo una estrecha
relación con Albert Hoffman, el crea-
dor del LSD, quién fue coautor de uno
21 SCHULTES, Richard Evans; RA-
de sus libros). Algunos herederos de esa
FAUFF, Robert El bejuco del alma: los
cultura en Colombia han hecho lo pro-
médicos tradicionales de la Amazonia
pio, en especial debido a los estudios
colombiana, sus plantas y sus rituales,
de Schultes sobre el yagé y su particular
Bogotá, El Áncora Editores, Fondo de
acercamiento a las comunidades indí-
Cultura Económica, 2004 [primera
genas.
edición en inglés de 1992].
62
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
63
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
64
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
65
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
66
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Sus exploraciones son las que más han cio del Instituto, ya que viajamos jun-
contribuido al importante Herbario tos “botanizando” en diversas oportu-
Nacional Colombiano. Sus colecciones nidades del pasado, desde el año 1938,
cuentan con un considerable número cuando navegamos hasta las bocas del
de tipos de especies nuevas. Sus publi- Meta en el Orinoco, y subimos a los
caciones taxonómicas y sobre plantas nevados de Boyacá, y a otros lugares en
medicinales son valiosas e importantes años posteriores, sellándose entre noso-
en el progreso realizado en el conoci- tros una sincera amistad. Hernando fue
miento de la botánica colombiana y an- siempre el explorador acucioso, experto
dina en general. Me tengo por el testigo en las labores del campo y compañero
más antiguo de sus actividades al servi- ejemplar” (Cuatrecasas, 1986).
Figura 20. Hernando García Barriga, en una excursión en el Putumayo (1935). Cortesía de la familia
García.
67
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
El legado
Definitivamente el legado más impor- etapas, que obviamente empiezan por
tante que nos dejó el profesor Hernan- el conocimiento del uso por parte de los
do García-Barriga es la “Flora Medici- indígenas y campesinos, y continua con
nal de Colombia”. Monumental obra un estudio muy profundo, la correcta
en tres tomos cuya primera edición data identificación de la planta, el estudio
de 1974 y una segunda de 1992. Es una fitoquímico, el análisis de la actividad
obra de obligatoria consulta para cual- biológica de los extractos, hasta llegar
quier trabajo sobre plantas medicinales. a una correcta formulación. El, como
Cuenta el mismo García-Barriga que la botánico, sabía perfectamente que la
obra se le ocurrió en su primer viaje al documentación de una planta parte de
Putumayo en 1935 y desde ese momen- un ejemplar de herbario que sirva como
to empezó a acumular información so- testigo para la correcta identificación de
bre los usos medicinales de las plantas, la misma, es por eso que en sus múlti-
por parte de indígenas y campesinos de ples viajes de colección, siempre trató
todos los sitios que recorrió. Durante de tener un muy buen ejemplar de her-
treinta años recopiló información sobre bario correspondiente a la planta de la
las plantas, su clasificación, su nom- que estaba obteniendo información por
bre científico, los nombres vulgares o parte del indígena o campesino. A la par
vernáculos, descripción botánica, los de su trabajo sobre las plantas medici-
componentes, usos y su distribución nales publicó otros trabajos sobre bo-
con ejemplares testigo depositados en tánica, describió varias especies nuevas
diferentes herbarios. Uno de los aspec- de las familias, Bombacaceae, Araceae,
tos más importantes de la obra de Gar- Rapataceae y Rosaceae. Para quienes
cía-Barriga es la calidad científica de la tuvimos la fortuna de conocerlo, su
misma. Siempre hizo énfasis en que el franca amistad y su manera espontánea
uso de una planta como medicinal debe y sin reservas de dar sus conocimientos,
hacerse mediante un estudio en varias fueron sus dones más grandes.
68
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
terapéuticos más comunes y triviales y Al reunir en esta obra las plantas medicina-
este empírico conocimiento sirvió de les de que tengo conocimiento, es mi
fuente importante a la técnica que ha interés, en primer lugar, dar a conocer
venido descubriendo esa materia mé- y estudiar las que crecen en estado sil-
dica tan acertada en los que ha venido vestre o espontáneo en Colombia y en
descubriendo esa materia médica tan segundo las que figuran en la farmacog-
acertada en los medios ya desarrollados. nosia exótica pero plantadas en Colom-
Como se quiera tomar la génesis de esta bia o con crecimiento subespontáneo
evolución, lo cierto es que existen mu- en nuestro país.
chas plantas, principalmente herbáceas,
que tuvieron una buena reputación me- No podemos descartar la seguridad de que
dicinal entre las sencillas gentes de los el número de las plantas con supuestas
campos, por lo que la ciencia debió to- propiedades medicinales que hoy seña-
mar apuntes importantes respecto de los lamos, debido a nuestra rica y variada
principios básicos de los mismos. Con Flora, se vea como principio de un in-
los análisis químicos y pruebas farma- menso acopio de propiedades curativas
céuticas llegamos a conocer una cierta para mí desconocidas. Pero esta resul-
verdad de su virtud curativa, o a descar- tante dará la más grande satisfacción
tar racionalmente atribuciones fantásti- por haber despertado el interés hacia la
cas de un uso medicinal ficticio lanzado divulgación de conocimientos que por
por gentes incautas que creen haber ob- la limitación humana no puede en un
tenido alguna utilidad o de hechiceros o momento dado radicarse en una sola
curanderos que, sin principio ético, se persona. Toda rectificación referente a
dedicaron a divulgar especies conocidas cuanto aquí se expone y que se inspire
como falsas, por ellos mismos. en la verdad general y no en el propósito
de avasallar a quienes se atreven a ren-
Empero es interesante saber la aceptación dir su modesta contribución a la verdad
unánime de una planta entre las gen- científica, será desde ahora aceptada con
tes del campo y las de sectores urbanos agradecimiento, pues nuestro propósito
para adivinar en ellos una experiencia no es otro que el de difundir los cono-
no exacta de alguna verdad nacida del cimientos adquiridos por el permanente
principio de conservación. Esto hace contacto que en fortuna me ha corres-
pensar en que los remedios populares, pondido mantener con la naturaleza
si no son la síntesis de la perfecta aplica- en nuestras selvas, llanos, páramos, las
ción, sí muestran un medio en el que se montañas y sabanas en Colombia.
debe desenvolver una técnica investiga- …
ción. No nos olvidemos de este origen
empírico y sencillo de las drogas de la Esta obra se concibió por el año de 1935
más poderosa actividad, ellas han sido cuando me encontraba por primera vez
antes en alguna forma los remedios usa- en la selva del Putumayo buscando las
dos por los pueblos menos desarrolla- especies con que los indígenas preparan el
dos, acogidos más tarde con entusiasmo Curare, el Yagé, el Yoco, e indagando por
por hombres de ciencia, quienes con especies que los indígenas usaban para cu-
tesón y verdadero sentido científico los rar. Desde entonces y especialmente cuan-
han preconizado. do el Rector de la Universidad Javeriana
… me llamó a colaborar en la Facultad de
69
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Publicaciones de Hernando
García Barriga
García-Barriga, H. 1937. Algunos pro- Ciencias Naturales, Universidad
ductos de la Flora colombiana. Re- Nacional de Colombia. 1-170, il.
vista de Agricultura 9(9):181-182
García-Barriga, H. 1958. El Yagé, Caapi
García-Barriga, H. 1938. Pastos natu- o Ayahuasca. Revista Universidad
rales y aclimatados de los Llanos Nacional de Colombia 23:59-76
Orientales. Revista de Agricultura
García-Barriga, H. 1968. Árboles de la
9(9):181-182
Sabana de Bogotá. Rev. Acad. Col.
García-Barriga, H. 1941. Tres especies Cien. Ex. Fis. Nat. 13(50):273-277
de Herrania de la Flora Colombia-
García-Barriga, H. 1974. Flora Me-
na. Caldasia 1(2):55-62
dicinal de Colombia. Instituto de
García-Barriga, H. 1943. Los vegetales Ciencias Naturales, Universidad
en la enfermedad de Hansen. Re- Nacional de Colombia. 3 vol.
vista de la Facultad de Medicina,
García-Barriga, H. 1977. Horizonte de
Universidad Nacional de Colombia
la Botánica Médica en Colombia.
12(4):190-206
Memoria I Simposio sobre plantas
García-Barriga, H. 1952. Contribución medicinales populares. Instituto
al estudio de las Bombacáceas de Italo Latino Americano. Roma p.
Colombia. Mutisia 2:1-5 361-365
70
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Figura 21. Portada de los volúmenes 1, 2 y 3 de la obra Flora Medicinal de Colombia (1974), de
Hernando García Barriga. Las portadas de los volúmenes 2 y 3 son óleos dibujados por el artista
Darío García Botero (1975). Archivo histórico ICN.
71
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Apuntes biográficos
Precoz incursión a la academia
El Mono Hernández nació en Bogotá, calificaciones y se dedicaba a disfrutar
el 17 de enero de 1935. Creció en el del aprendizaje, ayudar a sus compa-
municipio de Chía, Cundinamarca. ñeros y recorrer el campo de la sabana
Desde su infancia se caracterizó por su bogotana en búsqueda de animales y
curiosidad por la naturaleza y fue a muy plantas34.
corta edad cuando empezó a desarrollar
su impresionante capacidad de obser- En el año de 1947, el Mono conoce a
vación y análisis de los seres vivos. Su los hijos de Armando Dugand, en ese
crianza estuvo a cargo de doña Paulina, entonces director del Instituto de Cien-
su madre y de su abuela, doña Beatriz, cias Naturales y quien lo apoyaría en su
quienes practicaban un activo hábito de precoz inicio académico, permitiéndo-
lectura que fue heredada por el Mono. le visitar las colecciones científicas del
Instituto, comenzando por el Herbario
Durante sus primeros años de vida, pa- Nacional.
saba sus días entre las estrictas lecciones
de su madre y abuela y las horas de jue- Es así como al final de la década del
go al aire libre; sus compañeros de jue- 40, no era extraño ver a un niñito, de
go solían ser las plantas y animales que 12 años de edad, andando en pantalón
le rodeaban. Esto le generó una fuerte corto por los pasillos del Instituto de
conexión con su entorno y así aprendió Ciencias Naturales de la Universidad
a relacionarse con él y entenderlo de Nacional de Colombia. Llevaba con-
forma natural y espontánea. sigo muestras de plantas, ranas, insec-
tos y cualquier otro organismo que le
A lo largo de sus primeros años de sus causara curiosidad. Este niño vendría
estudios, en la escuela primaria, fue a convertirse en uno de los naturalistas
un destacado estudiante que aprendía y conservacionistas más reconocidos y
con asombrosa facilidad las lecciones; apreciados del país, Jorge Ignacio Her-
sin embargo, el Mono a muy tempra- nández Camacho, “El Mono” Hernán-
na edad se desencantó de lo “relativo y dez.
desconfiable” del sistema de calificación
34 Entrevista La palabra del Mono, por
que se empleaba en la escuela. Fue por
Ángela Sánchez. En: Jorge I. Hernán-
ello que dejó de interesarse por ocupar dez Camacho. Premio a la vida y Obra
el primer puesto o por obtener buenas 1997. Fondo FEN Colombia.
72
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Figura 22. La época escolar del Mono: a) A la edad de 7 años. b) el cuaderno de apuntes que llevaba al
Instituto de Ciencias Naturales. c) Detalle de sus dibujos faunísticos. Archivo de la familia Hernández.
73
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Figura 23. El Mono a sus 21 años (centro), como Profesor Especial del Instituto de Ciencias Na-
turales. Lo acompañan Julia Sánchez (izquierda) y Ernesto Barriga Bonilla (derecha). Archivo de la
familia Hernández.
Y es que no era para menos la petición docente en las áreas de Biología, Zoolo-
que hacía la madre del Mono, ya que gía, Anatomía Comparada de vertebra-
pasaba tanto tiempo en el Instituto, dos y Taxonomía animal35.
que descuidó sus estudios. Pero fue tan
grande el interés de seguir aprendien- Como profesor, el Mono es recordado
do en las colecciones biológicas, que el por sus largas conferencias magistrales
Mono se dedicó a terminar su secunda- acerca de cualquier tema relacionado
ria y fue en 1953 cuando se graduó del con el estudio de la biodiversidad del
Liceo Nuevo. país, así como por su admirable des-
treza para dibujar y realizar disecciones
Luego de su graduación, en 1954, el exactas de cualquier animal, a pesar de
Mono Hernández ingresó como asis- que, desde muy joven, sus manos tem-
tente de la biblioteca del Instituto de blaban profusamente. Quienes fueron
Ciencias Naturales. En 1959, con tan sus alumnos, se sorprenden aún de la
sólo 21 años, fue nombrado como Pro-
fesor Especial de la Universidad Nacio- 35 Jorge I. Hernández Camacho. Premio a
la vida y Obra. 1997. Fondo FEN Co-
nal; en dicho puesto se destacó como
lombia.
74
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
75
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Su legado
El contacto con la naturaleza, los innu- es que la tenía. Esta es una muestra de
merables viajes y salidas de campo con el su esencia naturalista.
Inderena y el Instituto de Ciencias Na-
turales, y sobretodo, esa impresionante Y es que a pesar de su enorme bagaje y
capacidad de observación y análisis lo conocimiento, el Mono Hernández no
hicieron un científico y un hombre par- perdió la capacidad de sorprenderse con
ticular, tanto así que las personas que lo que le rodeaba y de alegrarse y entu-
tuvieron la fortuna de compartir con él siasmarse con todos los temas acerca de
recuerdan claramente su personalidad la historia natural, ecología, política,
y sus palabras, pero no pueden definir geología, antropología, arqueología, en-
con certeza cuál era su especialidad, si tre muchos otros. Se dedicaba a reunir
76
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
B C
Figura 24. Tres épocas inolvidables en la vida del Mono Hernández: a) 1952. b) 1975. c) 1998.
Cortesía de la señora Julia de Hernández.
77
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
Publicaciones de Jorge I.
Hernández-Camacho
Como autor principal
Hernández-Camacho, J. I., & Barriga- Hernández-Camacho, J. I., & Samper,
Bonilla, E. (1966). Hallazgo del ge- D. (1995). Desiertos: zonas áridas
nero Callimico. Mammalia, Prima- y semiáridas de Colombia. Banco
tes) En Colombia. Caldasia, 9(44), de Occidente Credencial.
365–377.
Hernández-Camacho, J. I., &Defler,
Hernández-Camacho, J. I., & Cooper, T. R. (1985). Some aspects of the
R. W. (1976).The non-human pri- conservation of non- human pri-
mates of Colombia Neotropical mates in Colombia. Prim. Conserv,
Primates: Field Studies and Con- 6, 42–50.
servation, 35.
Hernández-Camacho, J. I., & Defler,
Hernández-Camacho, J. I., & De Por- T. R. (1989). Algunos aspectos de
ta, J. (1963). El primer Ictiosaurio la conservación de primates no-
del Cretácico de Colombia. Boletín humanos en Colombia. La Prima-
de Geología, (11-15). tología En Latinoamérica, 67–100.
78
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
79
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
80
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
81
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
82
Protagonistas de la Biodiversidad Capítulo 4
en Colombia
Defler, T. R., Bueno, M. L., & Hernán- Zúñiga, H., Pinto, M., Hernández-Ca-
dez-Camacho, J. I. (2001). Taxo- macho, J.I., & Torres, O. (2002).
nomic status of Aotus hershkovitzi: Revisión taxonómica de las especies
its relationship to Aotus lemurinus. del genero Cavia (Rodentia: Cavii-
Neotropical, 9(2), 37. dae) en Colombia. Acta Zoológica
Mexicana, 87.
83
galería de otros protagonistas
de la biodiversidad
84
Armando Dugand Gnecco
1906 - 1971
85
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
86
Bibliografía general
87
Germán Amat-García & Jaime Aguirre Ceballos Colección
Editores Retratos de la Biodiversidad
88
89
Protagonistas de la Biodiversidad en Colombia
se terminó de imprimir en Bogotá
en septiembre de 2015.