You are on page 1of 4

LA IGLESIA EVANGÉLICA

El término "Nacido de Nuevo" que un Cristiano Evangélico usará para


definirse se hace famoso en esta rama de la Cristiandad, hoy día la mayor
crecimiento.

Las Iglesias evangélicas son herederas de la Reforma Protestante


y predican el Evangelio de Cristo, como su nombre indica, y la máxima
autoridad doctrinal es la Palabra de Dios, reflejada en la Santa Biblia en
oposición a las tradiciones que sean contradictorias a la misma. El creyente
tiene una relación personal con su Salvador, no depende del clero, ni para
salvarse ni para comunicarse con Dios, al contrario que las iglesias litúrgicas
y gobernadas por el clero en las cuales el sacerdocio es un sacramento; por el
contrario, la Biblia declara que el creyente pertenece a una nación de
sacerdotes santos, según la primera carta del apóstol Pedro 2:9. No hay una
sede central como las iglesias nacionales o las iglesias Católica u Ortodoxa,
sino que cada iglesia es independiente. Hay diferencias en los énfasis que se
hacen de distintas doctrinas y formas de alabanza, y esto es básicamente
donde se puede encontrar la diferencia. La base de reunión es congregacional,
como la Iglesia Primitiva, y en las metodistas y en otras de corte calvinista es
de orden presbiteriano.

El Evangelio de nuestro Señor Jesucristo, se expresa en el credo de los


Apóstoles. Creencia en Un solo Dios en tres personas de la Trinidad, Padre,
Hijo y Espíritu Santo, se declara una confesión monoteísta, como el resto del
Cristianismo. Jesús nació de la virgen María. Jesucristo hizo todos los
milagros relatados en la Biblia, directamente o a través de profetas y
apóstoles, antes y hoy. El Hijo de Dios es Dios eterno, Isaías 9:6 y se hizo
hombre para obtener la salvación del hombre por medio de Su propio
sacrificio en la Cruz del Calvario. La salvación se obtiene por el don de Dios
de la fe en la obra redentora de Su Hijo Jesucristo, Yahshua o Yeshua, y no
por méritos propios u obras de la Ley. Las buenas obras se hacen por amor al
prójimo, lo cual revela que se está en Cristo si predicamos Su Evangelio y
ayudamos a los demás en sus necesidades. El hombre está bajo pecado porque
vive sin Dios y no conoce a Cristo y debe arrepentirse, "cambio de mente por
la de Cristo" 1Coríntios 2:16, para vivir acorde con Su creador que le ama
hasta el punto de morir por él. El que recibe la fe, que viene por el oír la
Palabra de Dios, y cree de verdad, y cambia su vida, nace de nuevo por el
Espíritu Santo y ha de bautizarse en agua como rito de confirmación de
aceptación de Cristo, además de tomar las Santa Cena, celebrar el pan y el
vino en memoria de Cristo, en su casa con sus hermanos íntimos, celebrar
espiritualmente las fiestas del Señor, congregarse con los hermanos para orar,
predicar el Evangelio a los que no lo conocen, estudiar y comentar la Biblia
para mantenerse en la sana doctrina e interpretación, organizar la iglesia para
la evangelización, la adoración de Dios y servir a la comunidad de hermanos
y del prójimo y en todo lo que esté en sus manos hacer, como dice Mateo 7:16
...por sus frutos los conoceréis...

Dentro del grupo de iglesias Evangélicas hay excepciones en cuanto a ser


denominados como tal, como algunas iglesias Bautistas, algunas iglesias sin
denominación y pequeños grupos de Cristianos que se congregan en las casas.
Sin embargo, al ser común el mensaje del Evangelio y normalmente no estar
bajo sistemas de gobierno episcopales, van juntos en este apartado, por
coincidencia de doctrinas y de época aunque hay que respetar la creencia de
los orígenes, ya que todas las iglesias de la historia tienen puntos en común,
tanto con la iglesia Primitiva como con la Católica, como con la Protestante y
Evangélica entre ellas, y si lo vemos desde fuera del cristianismo
prácticamente no se diferenciarían en las doctrinas básicas.

Normalmente Ud. encontrará la verdad, pero debido al problema de siempre,


la imperfección del hombre, al igual que en todas las iglesias, hay fallos en la
organización y algunas doctrinas dependiendo de la iglesia, como en mayor
medida los hay en la iglesia Católica, Ortodoxa, Anglicana, en algunas se
llega a abusar de la autoridad de los pastores, del diezmo u
ofrendas que son de Dios y para fines de Dios, y se ensombrece el mensaje de
Cristo. Pero en ellas encontrará la salvación. No se deje absorber por el
sistema de una Iglesia si no predican la sana doctrina, si está seguro de que en
su iglesia yerran, intente dar luz a los que están en ellas, aunque difícilmente
conseguirá mucho si es una iglesia sumida en algún error doctrinal o en
imposiciones y tratos excluyentes y elitistas que degeneran en un espíritu
sectario. No obstante pienso que cada uno estará y formará parte del Cuerpo
de Cristo donde Dios le ponga. De esto se trata, de trabajar y compartir el
yugo de Cristo y de llevar nuestra cruz.

A IGLESIA PROTESTANTE

Las iglesias protestantes son aquellas que surgieron tras la Reforma del siglo
XVI iniciada por Lutero y que fueron depurando la doctrina hasta hoy, en las
iglesias bautistas y evangélicas. Creo que es necesario hacer una distinción
entre la Iglesia Protestante y la Evangélica por diferencia doctrinal y por
época. Si bien la Iglesia Evangélica y todas sus denominaciones se pueden
calificar de Protestantes, las comunidades tanto Bautistas como Metodistas y
algunas otras, profesan una historicidad anterior a Lutero y por lo tanto no han
mantenido, ni la Eucaristía con transubstanciación, sino lo que denominó
unión sacramental de las materias para no entrar en aclaraciones, ni el sistema
de gobierno, ni otras doctrinas, así como hay otras que no mantienen la
doctrina calvinista de la doble predestinación de los que son condenados y de
los que se salvan, a la que se opuso Arminios en la libertad de elección del
hombre por la fe en el Evangelio. También podemos calificar de reformadas a
las iglesias Protestantes, pero hay diferentes grados de reforma, por ello, y
porque actualmente la Iglesia Evangélica en general está, cuando menos más
cerca de la Iglesia Primitiva de lo que lo estuvo en el siglo XVI.

El objetivo de los grandes reformadores Lutero y Calvino, no era la


separación de la Iglesia Católica sino la depuración de la doctrina cristiana la
cual se halla en la Biblia, la cual había sido desviada por las tradiciones de
hombres que lideraron la iglesia Católica y su degeneración durante doce
siglos, desde el siglo IV hasta el XVI. El término protestante se originó en
tono despectivo contra las ciudades imperiales que permitiesen la enseñanza
de las doctrinas luteranas en los territorios del Sacro Imperio Romano
Germánico donde no eran conocidas; un intento de que no se descubriese el
engaño en el que estaban sumidos los pueblos bajo el liderazgo de Roma, el
mismo motivo por el que la Palabra de Dios estaba prohibida. Curiosamente
el Evangelio de Cristo que expone la salvación por la fe, esa misma fe sin
obras de la Ley que ocasionó que los Judíos de la primera iglesia, que fueron
incrédulos se apartaron, permaneciendo en la tradición, provocaría en la
Reforma el mismo resultado en la iglesia Católica.

El movimiento de la reforma ha sido promovido durante un período de


tiempo por varios Cristianos reformadores, unos previos y otros
contemporáneos de Lutero y que ya denunciaban la desviación doctrinal y
clerical dentro del seno católico, que ya estaba dividido por la separación del
Cisma de Occidente con dos papas, y causados por la desviación del Camino
de Cristo y de los Apóstoles. Además de en los países del norte de Europa
resulta obligado mencionar en España la obra que fue realizada por el
cardenal Cisneros, Católico pero reformador de la Iglesia, arzobispo de
Toledo e inquisidor general, fundaría la Universidad de Alcalá de Henares,
consejero de los Reyes Católicos, quien promovía entonces el Evangelio en
lengua vernácula lo que llegaría a concluir en la Biblia Sacra Políglota,
llamada Complutense, antes incluso que la de Lutero, quien conseguiría
cambiar su país y liderar el movimiento que cambiaría Europa, sin embargo
España que tuvo esta oportunidad la desaprovechó, sin duda hubiese influido
en Portugal, Italia y Sur América. Contemporáneos de Cisneros fueron los
llamados místicos, Teresa de Jesús y Juan de la Cruz que denunciaron la vida
en los conventos y que solo pudieron dejar sus obras escritas, que no es poco.
El resultado hoy es evidente, de quienes lideran el mundo. Los que si
seguirían el mismo espíritu reformador de Lutero, unos antes, otros
contemporáneos y otros después serían: John Wycliffe, Inglaterra siglo XIV,
Hans Huss, Checoslovaquia siglo XV, Ulric Zwinglio, Suiza siglo XIV, Juan
Calvino, Suiza siglo XVI y John Knox, Escocia siglo XVI.

You might also like