Fábula del “Lobo con piel de oveja”

“Lobo con piel de oveja”, Fábula sobre las consecuencias del egoísmo.

Esta fábula es ideal para enseñar a las personas a ser auténticas. Sí, a las personas,
aunque sería bueno que todos la lean, reflexionen y la entiendan a conciencia. Es muy
simple. Tal vez haríamos mejor a este mundo si todos leen esta fábula. Basta de preludios
que va la historia:

Érase una vez un lobo que tenía mucha hambre, y quería comerse una oveja de un
rebaño que vivía cerca de su casa. Pero el pastor y dueño de los animales siempre
estaba muy atento y por muchos intentos que hacía el lobo nunca lo conseguía.

De tanto pensar y pensar, el lobo ideó cambiar de apariencia para que así le fuera más
fácil conseguir su comida. Paseando por el bosque con gran sorpresa vio una piel de
oveja y se la puso encima para parecer una de ellas.

Se fue a pastar con el rebaño, despistando totalmente al pastor.

Al atardecer, todas las ovejas y el lobo farsante fueron llevados a la granja, donde
quedaron encerradas bajo llave.

Ante tan buena fortuna, el lobo se dijo: “Ahora, cuando el pastor se duerma, cogeré a la
oveja que esté más gorda y me daré un auténtico festín”.

Pero esa noche, buscando el pastor la comida para el día siguiente de su familia, fue
donde estaba el rebaño, cogió al lobo creyendo que era una oveja y lo sacrificó al
instante.

Cuando la mujer del pastor intentó cocinarlo, se dio cuenta que realmente no era una
oveja, sino un lobo, y llamó a su marido. Este reconoció al animal que ya había intentado
en varias ocasiones atacar a sus ovejas, y se puso muy contento por haberlo matado.

FIN

Esta fábula no solo advierte de las consecuencias para los que usan las apariencias con
fines egoístas. La moraleja que nos deja este relato es que “según nuestra
autenticidad, así recibiremos verdadera amistad”. También nos advierte que debemos
tener mucho cuidado, pues las apariencias engañan. Piensa y reflexiona en ello. Y
recuerda que las acciones hablan más que las palabras.