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@) gélomeite| dé a storia erftica de la loses fin del siglo presente, sino de ‘las mismas ‘bras que tltimamenté se han publieades y ‘como estas obras si no son del todo necesde Fas, deben sietopre_consultarse para asogurar nas lun scertado juici, rservo lx publieacion de mi discurso, para cuando tenge sobre las nuevas ‘octrinas noticias mos copioses y mas individuales. eicocosenccoeconsoreceosced! GRAMATICA GENERAL, Execiones ‘preliminares sobre las Jacitiades det alma, es th ace le eae: fitud de, operaciones, y descomponién- dalas Ilegamos 4 descubrir que unas nacen_de ot Sub4mos 4 su origen para hallar el étden de nnestras ideas ¢, los, procedimientos del lenguage. De las sensaciones. 1. Nos rodean tna multitud de co éas que obrando en, nuestros sentidos dan materia, como. yerémos despues, & todas las operaciones del alma. A ese fas cosas lamanos enerpos: a'los drs anos por donde. estos trasmiten sus 2 impresiones al alma Hamamos sentidos, y damos el nombre de objeto cuane Yo puede conmover los sentidos ¢ obrar en nuestra alma, 2, El alma siente primero las im- presiones, las refiere luego 4 los cuer» pos y despues se representa la imagen He cstos. De aqué vacen las tres pri meras operaciones que distinguimos en alalma 4 saber: Perespcion, esto és, la Sola. impresion que cl alma siente, pres- tindiendo del objeto que la_ha ocasio nado, Srsacion, 6 Ia referencia que hae Go ol alma de su percepcion al objeto que In ha ocasionades Idea, es decir lk roprosentacion de este objeto en el alma. 3. Por lo que hemos dicho (§ 1.) se ve que para sentir son necesari tres, cosas: Cuorpos sentidos, alma, Un cielo. no parcibe los colores pues aun- que hay objeto, y alma no hay 6 no por donde ésta los reciba, asi con ‘mo tapoco los veria, sino existieran los éverpos. Finalmente, un eadiver mo ve i cye, en una palabra no siente; pues i@ haya clerpos y tenga aun so Srganos, falta. sin embargo el alma, por que, extd ya. separada del cucrpor © 4. Los sentidos son cinco: el érgae no de la vista, el del cido, el del ol- fato, el del gusto y del tacto. Por la ista_no pueden entrar los olores, ni por el, oido los colores &c. luego cada sentido trasmite al alma impresiones mejantes entre si y absolutamente de. terminadas. 5, Una cosa absolutamente determi- nada es un individu. y uua reunion de es- tos forma une especie, Luego lalma ree ibe cinco especies de sensaciones, y por, comsiguieule, tiene cinco. especies de ideas, " _6., En Ja naturaleza no hay mas que indjviduos; ast pues. todas las ide individuales. Conciencia. 7. La facultad'de pereibir es la pric mera que descubrimos en el alma, Miene tras esta, permanece unida con 41 cu po, percibe todas las impresiones que for objetos hacen en los drganos bien 4 eonformados. (3) {Pero tié nocimiento de todas sus percepcione? Examinémos est en un ejemplo. Re- presentémonos un templo magtifico qt se levanta entre wna mulitud de “ed ficios ménos suntuosos: todos ésto¥ ob fotos han herido nuestros érganos, pot ‘que los hemos visto; y no. los ‘hein: ¥isto sino porque el alin ha recibido las impresiones de ellos: luego “el alma hin tenido ‘tantas percepeiones cuantos ob- jetos fan afectado los sentidos. Pero ‘el templo nos hizo una imprésion tin ‘viva; que olvidéndonos dé los otros edi- ficios, creemos no tener mas percepcion que Ja de aquel objeto. 8 Supiesto quo esto iltimo noha sucedido en Ia'realidad, dirémos que nuestra alma tiene mas conocimiento de esta percepcion que de las otr por estar mas adveitida de ella, Debe- mos pues admitir en nuestra alma una facultad que Te advierte de sus percep- ciones: esta facultad se Mama concien aia [a]. Hemos visto (8)'que'la contions tia ‘aivierte ‘al al ciotiesy pero estat da de! thas que de ‘otras eoncluit que tiene ‘mayor co7 nag que door consiste, Siguictido el ejemp! ido, vemos que ‘casi Bo extin las pereepcioiies de. los-edificios ménos suntudsos. y “subsistio la del: tents plot porque, interesandonos mas este ob- Jeto que los otros, se detavo mag tiempo nuestra. alma en. esta percep. cion, Luego debemos admitir en el ma la facultad de detenerse mas en lunad pereepiciones que en otras: dles- ta facultad dams el tiombre de ateneion, Reminiscencia, 10, Degpiws de habor fijado vas Fias ‘Yeees “Ta ‘engion“en un objeto; la’ conteiencia ‘no oto advierte con mas rivera f nuestia ‘thin de su percepcion aotuaking de qiie esta percepcion yale é ha tenido otra vez: asi es como la ates ion engendra esia nueva facultad que se Hama reminiscencia. 11, Si estuvieramos privados de elle, por mas impresiones que hubiesemos Tecibido siempre las tendriamos por nue- vas. Y siendo cierto que no. tene- mos conocimiento de que existimos sino porque sentimos nuestra vida; ca- da momento de esta seria para noso- tros el primero de nuestra existencia. No tendriamos experiencia y por ecn- siguiente serian ningunos nuestros ade~ Iantos. Tmaginacion. 12. Cuando dirigimos con euidado Jn atencion acia un objeto conseguimos & fuerza do ropetir esta accion de nues- tra alma, reproducir Ia imagen del ob- jeto que esta ausente. Aun hay mas: po- ‘demos reunir dos imagenes y hacer una mova: v. g. de les dos imagenes que tengo; esto és, templo y oro, me rer presento un templo de oro. He aqué uns. Dellisima facultad, Ia imoginacion. $ 13. Ella, pues, nos hace eomponer seres que no hay on la naturaleza, mo- dificur los que existen, y_presentarlos a veces con todo el atractivo de la no~ yedad. Por cella se adquiere cl ingenio esto es, Ia facultad de crear, inventar, y aun de hacer interesantes las cosas mas comunes, La oratoria, la poesia y las bellas: artes le son deudoras de sus grandes progresos y de sus mas bee ilos adornos. Pero si ella es la fucn- te de las producciones mas interesantes Jo es tambien con frecuencia de nues~ tros ertores y de nuestros males: vas tiandonos los objetos y haciendolos des- conocer nos estravia, asi como nos ha- ce padecer mas, agrarando nuestros dolores, y_sufrir antes que llegue In dese gracia. Memoria. If, A. veces todos nuestros ese faerzos para reproducit la imagen del objeto ausente fon vanosy apenas low gramos recordar algunas circunstane eias 0 el signo del objeto: en esto cone a memoria, .qua.es.a facultad ¢ odueir en nuestra alma.algunas.c 0. que quteremiog re igno. {Je Ponomos 4 Ia vista dos. flores, a atencion sc fja en la que de pronto le interesa maa pasa luego. 4 fa otra quo no le. es iudiferente: vucl- ve aun & la primera, so fja de nuevo, en la segunda y asi alternativaments so deticue, ya en una, ya en. otfa. La atencion conducida de. ¢ ve nos lleva. & descubrir cn, nuestra elaya.ona, nueva facultad, exta.c3 bre. que primitivamen cion de un cuerpo, que despues de r chocado en otto toma una dirce- cion contraria 4 la.que trata, como s0 ve en una bola defule. Le semejanza ge hay entre ext accion dun eer Jo, ¥- aquella operneion, del, alma, hizo, pie zo llaméra. refzion Ja facultad que, tiene el alma de. llevar succesivamente su atencion. 4 dos objetos, 4 ABSTRACCION. “Ideas absiracias, ideas generales, 16, Lo primero que conseguimos pot medio de la reflexion es eenocer que uno de los dos objetos que considera- mos no es el otro: conocer que un ob- Jeto no es el otro, ex distinguirlos en- tre si. Por esto podemos decir que primer efecto de nuestra reflexion es Ja distincion de nuestras ideas. 17. . Podemos distinguir un cuerpo de otro y tambien de alguna de sus mor ificaciones 6 cualidades, por que una cualidad, ¥. g. el olor de una pifia, no es la misina pifia. Entre dos objetos que istinguimos, podemos muy bien con- siderat el uno sin el otro; asi pues, no hay inconveniente en considerar el olor separado de la pifia: cuando hacemos esto, se dice que abstraemos. 18. Mas aimgue podamos practicar esta abstraccion, nunca nos represen+ tarémos una cualidad separada de la sustancia; pero sf el signo conque he- mos indicado la cualidad abstraida del suerpo. Dirémos, pues, que, idea abs 2 10 tracta es_laYepresentacion del, signo que espresa una cualidad abstraida de Ja sustancia v. g. olor. 19. Si podemos conéiderar una cua- Fidad sin “el cuorpo en quo esta, tam: Dien podiémos considerar este sin tna @ alginas de sis cualidades. “Asi consi- deramos tin bufete, sin hacer caso del Color que tiene. Este es un nuevo efee- to dela reflexion: veamos ahora como por este medio conseguimos generally Pore para mejor deeit, clasificar nucs ‘tras ideas. Mo traslado & tina’ huerta pobla- tun millon de. Arboles diferentes {quiero ponerme en estado de explicar 16 due he visto. Que hago ‘pues? Siendo Fada drbol un individvo, para dar nom bre thmbien 4 cada tino, necesito de javentat cn millon do’ signos. Pero de- teniendo mi ateneior, Yeo prinero uaa fila formada de perales: observo que todos son semejantes ‘porque dan una thisia fruta y que solo se distinguen fea qué «nos ¢on mas grandes que oirds ¥ sobte todo en que cada uno octipa {"idgit distinto!” entonces hago uu Jado, estas, cuslidades, que los distinguen, y fijandome solo en las que los cons- tituyen. semejantes, hago extensivo 4 to- dos el nombre, de peral, Paso. adelan- te y moto que 4 mas de ln fila rales, hay. otras tres, & saber, de jos, Hmoneros. y manzanos: practicai luego la mistna operacion que con la. primera, fila, aplico. un, notnbrc ‘ cada una de las otras: y he aqui, ¢o- mo cuatro signos ‘han sido suficientes para nombrar un millon de arboles. Or- denar asi nuesiras ideas so lama formar clases, 21 Aun’ podemos evar mas ad Jante esta operacion porque todavia se Gistinguen entre si, el pera, el nara el fimonero y el manzao, gn que se di finguen? cn que cada und da diversa fru gen que se asemejen? en que tc os tienen tronco,ramas y ojas, Despue prescindo de Jas clases de fruta y consi- dero solo, las semejanzas: y en est caso la palabra, érbol los représenta todo: 22, El Arbol. no es la piedra, la, ma- dera Ke. luego se distingucn eh, algu- ‘nas cualidades, Prescindamos de elles, 2 entonces vemos que todas estas cosas, ‘cuyas oualidades esclusivas he separado ‘conservan aun algunas semejantes: porque ‘examindndolas, encuentro que todas tic- nen partes agregadas unss 4 otras lo cual constituye la exfencion: que esta so halla terminada por todos lados, lo que éntendemos por figura: 3 gue cada ‘ocupa de tal mancra vn lugar determie nado, que otra no puede ocuparlo al mis~ mo tiempo, lo que llamamos impenelra- bilidad, Y como a reunion de estas tres propiedades, esto 6s, la extension, Ia fix guia y la impenetrabilided se halla en todos fos ubjetos que se offecen & los sentidos, formamos wna clase mas general que ex- presamos con el nombre de cuerpo. A es tas clases que comprenden otras llama- 0s géneros, ‘Hemos subido desdo cl indivi- duo al género, considcrando las seme- janzas y prescindiendo de las diferen- ‘cing; asimismo podemos por una opera~ cion inversa descender desde el génc- to al individuo, Veamos cémo. Signien- do el mismo simil, puedo reunir a es tas cualidades que coustituyen el euet- 13 po en generuly otras que no le consti« tayen v. ge rule, tronco, ramas, hojas Aqui Way dos especies. de cualidades, & ber las que eonstituyen el cuerpo, y otras que no le constituyen pero: si le modifican: & las primeras damos el nom- bre de cualidadss constitutivas, 6 propieda- des; y alas otras, el de mouifiaciones 6 simplemonte cualidades. 21, Pero, uniégndolas todas, formo la idea de drbol el cual es ya cierta especie @e cuerpo, Entonces las raices, tronco, &e, que eran puras modificuciones res. peeto del cuerpo en generols pasan 4 ser cualidades constitutivas del drbol porque sin ellas no bay érbol. El dar eros es una modificacion respecto del Arbol; pero una vex unida con las cua lidades de este, es ya una eualidad consti- tutiva de cierta clase de arboles, esto es, del perol: finalmente el tener cierta fic gird, cierto tamato y sobre todo es- tar en eierfo igor, son motlificaciones respect del peral; pero cualidades ne- cesarias para determinar el peral que vi primero, esto’ es, el individuo. 25, Hemos visto que podemos en 4 vyirtud de la reflexion. generalizar nuos- tras. ideas, esto es, subir por . medio de la. abstraccion: del, individuo al, ge nero ¥ descender por una operacion con- traria del género. al, individuo..Cada coleccion de individuos. forma una espe- cic (5)'y la. reunion de todas las espe cis se llama género (22).Tambien her mos visto que entre la primera. espe cic y el género, hay,.otras, clases. En clecto Ins hay y & todas ellas. se da el nombre de clases, que serdn mag 6 menos generales segun el nimero de individuos que contengan. Casi todos han dicho que estas son las ideas generales, pero nosotros que hemos seguido com fi Gelidad Ja marcha del alma. en sus op raciones gpodremos convenit cn estor Sitorlos los objetos son individuos, si ng hay. ninguno’ en general, gpodremos te- ner ideas que no sean singulares? Lo que no ecsiste no, puede. tepresentarse en el alia. Siendo, pues idea la representa. cion del objeto en el. alma, es eviden: tosque:no: tenemos, ideas. generales. 26. Lo ‘nico que, hemos hecho ¢ clasificar nuestras ideas individuales, pa- 15 ta distribuirlas con orden, 'y dat & cada clase un signo que nos represento ol re- sultado obtenido al clasificar nuestras ideas. Este resultado ha sido conocer que los individuos semejantes tienen unas mismas cualidades y que bajo es to respecto, se puede decit de todos ellos lo que se diga de uno. El signo que se habia dado al primero, convie~ ne muy bien & los otros. Diremos pues mejor, que idea general es la represen- tacion del signo, que conviene @ mu- chos objetos. (c) 27. La reunion do las cualidades constitutivas del objeto que consideramos se llama sustancia (d). Aniilisis. 28, Cuando subimos del individuo al género; fué necesario ir descompo- niendo, & fin de hacer @ un lado cicr- tas cualidades y dejar otras, despues de haberlss conocido todas on Ia de: composicion: al contrario, euando hes ajado desde el gériero hasta et individao, ha sido indispensable ir com-

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