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ALUNMO: ANDERSON INFANTES VALENZUELA

CODIGO: 131.0802.522
FECHA: 25/08/2014

PRPOPIEDADES
FISICAS DE LOS
MINERALES
Propiedades físicas de los minerales

P
odemos clasificar los minerales por sus propiedades físicas, ópticas,
eléctricas, magnéticas y por su composición química, aunque este último
no es el método habitual, ya la mayoría pueden ser identificados mediante
observación espectroscópica e incluso visual. Aun así, el análisis químico es la
única forma de identificar con exactitud la naturaleza de un mineral.
Las propiedades físicas son de gran importancia en el estudio de los minerales.
Muchas se pueden observar fácilmente, o recurrir a un espectroscopio.

Dureza de un mineral:
La dureza de un mineral es la resistencia que presenta a ser rayado. Un mineral
posee una dureza mayor que otro, cuando el primero es capaz de rayar al
segundo.
El mineralogista alemán Mohs estableció en 1822 una escala de medidas que
lleva su nombre, y que se utiliza en la actualidad, en la que cada mineral puede
ser rayado por los que le siguen. Se toman 10 minerales comparativos de más
blando a más duro, que son: talco, yeso, calcita, fluorita, apatito, ortosa
(feldespato), cuarzo, topacio, corindón y diamante.
Tenacidad o cohesión:
La tenacidad o cohesión es el mayor o menor grado de resistencia que ofrece un
mineral a la rotura, deformación, aplastamiento, curvatura o pulverización.
Se distinguen las siguientes clases de tenacidad:

- Frágil: es el mineral que se rompe o pulveriza con facilidad. Ejemplos: cuarzo


y el azufre.

- Maleable: el que puede ser batido y extendido en láminas o planchas.


Ejemplos: oro, plata, platino, cobre, estaño.

- Dúctil: el que puede ser reducido a hilos o alambres delgados. Ejemplos: oro,
plata y cobre.

- Flexible: si se dobla fácilmente pero, una vez deja de recibir presión, no es


capaz de recobrar su forma original. Ejemplos: yeso y talco.

- Elástico: el que puede ser doblado y, una vez deja de recibir presión,
recupera su forma original. Ejemplo: la mica.
Peso específico: (densidad relativa). Es el nº que representa la relación entre
su peso y el peso de un volumen igual de agua a 4º.

Fractura de un mineral:
Cuando un mineral se rompe lo puede hacer de diversas formas:
- Exfoliación: significa que el mineral se puede separar por superficies planas
y paralelas a las caras reales. Ejemplos: mica, galena, fluorita y yeso.

- Laminar o fibrosa: cuando presenta una superficie irregular en forma de


astillas o fibras. Ejemplo: la actinolita.

- Concoidea: la fractura presenta una superficie lisa y de suave curva, como la


que muestra una concha por su parte interior. Ejemplos: sílex y obsidiana.

- Ganchuda: cuando se produce una superficie tosca e irregular, con bordes


agudos y dentados. Ejemplos: magnetita y cobre nativo.

- Lisa: es la que presenta una superficie lisa y regular.

- Terrosa: es la que se fractura dejando una superficie con aspecto granuloso


o pulverulento.
Electricidad y magnetismo:
Muchos minerales conducen bien la electricidad (conductores), mientras que se
oponen a su paso (aislantes). Unos pocos la conducen medianamente
(semiconductores). Gracias a estos últimos se han desarrollado
semiconductores que permiten al ser humano conseguir un alto nivel
tecnológico. Pero hay más comportamientos de los minerales en relación con
las fuerzas electromagnéticas:

- Magnetismo: consiste en atraer el hierro y sus derivados. Los imanes


naturales son permanentes. La magnetita es un imán natural conocido desde
tiempos muy remotos.

- Piezoelectricidad: es la capacidad para producir corrientes eléctricas cuando


se les aplica presión. Si se aplica una fuerza a las caras de un cristal, genera
cargas eléctricas y, si se aplican cargas eléctricas, entonces se produce una
deformación de las caras del cristal. Ejemplo: el cuarzo.

- Piroelectricidad: se producen corrientes eléctricas en el extremo de las caras


cuando el mineral se somete a un cambio de temperatura. Ejemplos: cuarzo y
turmalina.

- Radiactividad: es la propiedad que poseen determinados minerales para


emitir partículas de forma natural y espontánea. La radiactividad natural tiene
muchas aplicaciones científicas, médicas e industriales, y los minerales que la
poseen raramente alcanzan niveles peligrosos. Ejemplo: la uraninita.
Propiedades Ópticas:
Color:
En general, el color es un medio poco eficiente para identificar minerales
debido a que éstos no se presentan siempre con el mismo color, lo que hace
que no sea un indicador unívoco. En relación con el color se distinguen dos
grupos de minerales Dicromáticos, que son aquellos que tienen colores
característicos según su composición. Sólo para este grupo de minerales el
color es un antecedente útil como medio de identificación.

Alocromáticos, son aquellos minerales que presentan un rango de colores


debido a la presencia de impurezas o de inclusiones en su estructura.

Raya:
Para determinar este parámetro, se raya el mineral utilizando otro de mayor
dureza. Se determina el color del polvo fino obtenido. Este parámetro es útil
para identificar minerales y menas, ya que suele ser constante, incluso si varía
el color del trozo.

Para reconocer rayas:


La raya del feldespato potásico siempre es blanca, sin importar si el trozo es
incoloro, color carne o verde.

La raya de la magnetita es negra.

La raya de la hematita es rojo cereza.

Hábito:
El hábito se refiere a la forma más común en que se presenta un mineral.
Puede corresponder a cristales bien formados o a formas aparentemente no
cristalinas. Según las formas básicas de los minerales, se pueden distinguir
diferentes hábitos.
El cobre puede presentarse como óxido de cobre, sulfuro de cobre o en estado
nativo, por lo que puede tener diferentes hábitos dependiendo del tipo, estado y
condiciones de entorno (alteraciones).
Brillo o lustre:
Se refiere al aspecto general que se observa en la superficie de un mineral
cuando éste refleja la luz. En general, es una distinción difícil de establecer, ya
que es muy subjetiva

Para reconocer brillos existen tres grandes tipos de brillo o lustre:


Metálico: mineral opaco a la luz, que tiene el aspecto brillante de un metal, y
una raya negra o muy ascua. Por ejemplo, galena, pirita y calcopirita.
Semimetálico: brillo propio de minerales transparentes o semitransparentes.
Por ejemplo, argentita.

No metálico: brillo que no tiene aspecto metálico. En general, son de colores


claros y transmiten la luz a través de láminas delgadas. Su raya es incolora o
de color muy débil.
Los minerales de brillo no metálico se pueden agrupar en categorías, siendo
las dos primeras las más frecuentes.
Vítreos: tiene el reflejo del vidrio (por ejemplo, cuarzo).
Sedoso: con apariencia de seda (por ejemplo, yeso fibroso, malaquita y
serpentina).
Resinoso: tiene el aspecto de la resina (por ejemplo, blenda).

Graso: parece estar cubierto con una delgada capa de aceite (por ejemplo,
yeso, malaquita, serpentina).

Adamantino: de reflejo fuerte y brillante por su alto índice de refracción (por


ejemplo, minerales transparentes de plomo, como crucita y anglesita).

Nacarado: brillo con el aspecto iridiscente de la perla. Esta característica se


observa en superficies de los minerales que se distribuyen paralelas a los
planos de exfoliación (por ejemplo, apofilita en el plano basal).

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