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PROF.
MG. CARLOS CABALLERO ALAYO
ALUMNO:
DANILO S. PALMA CARRERA
I. LOCALIZACIÓN
1.1. UBICACIÓN EN EL CONTEXTO LITERARIO
El viejo saurio se retira, primera novela de Miguel Gutiérrez
Correa, se termina de escribir mediados de los años 60 con el título
provisional “Ejercicios Espirituales”. Pues la obra se desarrolla
dentro de un colegio católico, dentro del contexto del prominente
desarrollo y expansión de Piura sobre las llanuras desérticas que
la rodea, esto gracias a la migración trayendo consigo no solo
costumbres del ande sino también de la capital, pues no solo se
adquiere lo bueno sino también lo malo.
Entonces El viejo se Saurio se retira, se desarrolla en un colegio
católico, con muchachos que no postulaban para cura, por el
contrario, estaban en busca de nuevas experiencias, con toda la
voluntad de desafiar al mundo y decirles que correrán lo más lejos
que puedan hasta que la muerte los atrape.
Es en estas circunstancias en las que se habla del destino, la muerte
y si en algún momento está la intervención divina sobre cada uno
de ellos, como dentro del colegio son “la crema y nata” del salón,
pero una vez fuera del colegio vuelven a formar parte de una
sociedad tétrica con sus problemas, donde tan solo queda seguir
existiendo.
Capítulo I
Aspectos ideológicos subyacentes
"El viejo saurio se retira" está inserta dentro de una posición literaria
-en boga durante las décadas de los sesenta y setenta- destinada a
interpretar socio-culturalmente un sector significativo de la realidad
peruana. A la vez está orientada a expresar una línea ideológica de
marcada oposición a los llamados sectores reaccionarios y al
conservadurismo de derecha; oposición plasmada, básicamente,
mediante la caricaturización de una de las instituciones más
tradicionales: la iglesia. Este proyecto novelístico, amplio y
ambicioso, está enraizado en un deseo del autor bastante difundido y
conocido como para soslayarse, a saber, el de una transformación
social y política de la nación peruana, transformación ésta que sería de
tono izquierdista. Se sabe que Miguel Gutiérrez perteneció al
importante grupo literario "Narración", grupo que si bien tenía
diversas propuestas literarias personales, estaba unido por una
convicción que implicaba el siguiente ingrediente básico; la
identificación con las clases populares y por lo mismo, el deseo de
aproximarse lo más posible a ellas mediante la escritura.
Con este fin, los integrantes del grupo "Narración" apostaron por una
oralidad y un coloquialismo que, fundamentalmente, reflejaran el
habla de las capas sociales que eran motivo de su preocupación.
Entonces, la idea del autor no era sólo recrear de la manera más fiel
posible el habla popular por el simple hecho de explotar un discurso
con fines meramente estético-literarios. Por debajo de todo ese
ejercicio narrativo de aquellos escritores estaba un intento de
interpretación del fenómeno social. Para esta interpretación y
denuncia Miguel Gutiérrez se vale en "El viejo saurio se retira" de
ciertas esquematizaciones de cariz ideológico. En el mundo de la
novela que nos ocupa los curas son el reflejo de una especie de
arquetipo que engloba una serie de miserias; hipocresía, ignorancia,
superstición, neurosis, intolerancia fascistoide, etcétera. El autor llega
incluso, en ciertos pasajes, a abandonar la deseable posición de
narrador objetivo y exhibe descarnadamente su intención política,
caminando de esta manera por la peligrosa cornisa de la retórica:
"Hubiera dado todo por ser alemán, pero era polaco y se sintió un
Mussolini."
¿Estás arrepentido?
Ahora ya no; pero me amarga pensar que aquella vez corrí donde
el confesor, desesperado.
Puta, Rodolfo. A todos nos han jodido los curas."
Capítulo II
Aspectos técnico-literarios
Sin embargo, más allá de aquélla impronta política que sin duda fue
un móvil poderoso en el acto creativo de Miguel Gutiérrez, está
también una intención que la expresión literaria lleva implícita y que
tuvo que afrontar; nos referimos directamente a un compromiso con la
escritura.
"Pero esta tarde había sido distinto: el cura Gaspercha para ilustrar
el proceso de corrupción de la carne, había echado mano del pobre
del río Piura, cinco años atrás, mientras el coloradito Saldaña (porque