LA DEPRESIÓN, ¿PARA QUÉ ME SIRVE?

Según la Organización Mundial de la Salud, la depresión es un estado

mental caracterizado por la Tristeza, la perdida de interés o de placer, de sentimientos de
culpabilidad o de baja autoestima, una sensación de fatiga y de falta de concentración.
Desde la descodificación, esta melancolía o malestar es invariablemente la consecuencia de “un
conflicto de territorio” asociado a un bloqueo hormonal.

Todo síntoma es casi siempre la mejor adaptación posible a la presión del medio interno o
externo y está allí para ayudarnos a gerenciar esta presión. La depresión no es entonces
la excepción.
¿Y cuál es el sentido por el que una persona entra en este estado de ánimo? ¿Para qué su
biología opta por esta solución?... En esta forma de aislamiento, la energía de la persona
baja a una frecuencia más lenta y con ello obtiene …más tiempo para BAJAR LA
PRESIÓN interna.
Gracias a la de–Presión la persona puede regular el estrés, la presión interna. El estrés está
sobre todo inducido por el miedo, la inseguridad y a veces también por la frustración. Puede re-
encontrarse a sí misma, hacer los duelos necesarios frente a eventos de impacto
emocional que pueda haber vivido, tomar decisiones que no ha sido capaz de tomar,
etc. Es decir, retornar a su COHERENCIA emocional.
Estar en Incoherencia quiere decir que hay un desorden entre lo que pensamos, lo que
sentimos y lo que hacemos. Se ha perdido la coherencia entre alma-mente-cuerpo.
“No poder hacer lo que deseamos ni poder no hacer lo que no deseamos, nos provoca una
falta de autoestima profunda, causa de depresiones y enfermedades graves”.
Alejandro Jodorosky
“Una de las funciones biológicas que tiene la depresión es, bajar mi metabolismo, por eso
cuando tengo una depresión no tengo ganas de hacer nada”
Enric Corbera
El Dr. Salomón Sellam explica desde la visión de la psicosomática clínica, que existen dos
tipos de depresión: “exógena” que vienes del exterior y “endógena”, es decir, que viene
del interior de la persona.
“las tres cuartas partes de las depresiones, sobre todo las endógenas, no nos pertenecen, son
Reparaciones Familiares o Transgeneracionales, es decir que he nacido con ellas de algún
modo”.
Salomon Sellam
Las peleas dentro de “MI territorio” ya sean con mi pareja, mis hijos, mis hermanos, mi
jefe, madre, mi padre, etc. generan estados de estrés, angustia, miedo, tensión donde la
persona desea “Huir” de su realidad y de sus responsabilidades para así evitar el conflicto. Estos
eventos están asociados a una gran tristeza e incluso se piensa en el suicidio como la
mejor alternativa para “Escapar” de esa realidad que “no me gusta y no soporto”.
Resulta difícil imaginar a alguien hoy día que no haya sufrido en algún momento
de depresión. De hecho muchos más de los que imaginamos la viven diariamente y es un
periodo de tiempo en el que simplemente desean “desaparecer”.
A muchas personas les molesta hablar de que tienen o han tenido depresión porque siempre
existe un gran temor a ser juzgados o simplemente no dicen lo que les pasa por evitar que
sus familiares se preocupen o se angustien (ya saben, como siempre, pensamos en lo
que es bueno para los demás y no para nosotros mismos).
Hay que comprender perfectamente este estado emocional en el que el miedo y la
frustración son los grandes protagonistas. Entender que simplemente vives un gran
conflicto de identidad en el que dejas de SER TÚ. Es decir, dejas de hacer lo que tú deseas por
complacer a todos los que te rodean. En consecuencia te encuentras perdido, desorientado y con
una gran tristeza y deseos de morir pensando que así todos tus problemas desaparecerán.
Ceder nuestra voluntad es permitir que otro se adueñe de nuestra existencia y esto nos da una
sensación de vacío, de ser y no ser, de vacuidad.
Pero la muerte no es lo que muchos de nosotros creemos. Morir es sinónimo de
transformación, de pasar a otro estado o nivel de conciencia o de conocimiento. Se puede
morir muchas veces en una misma vida y no darnos cuenta.
Uno de los grandes hallazgos a través de la BioNeuroEmocion y el Transgeneracional es
que si tú tienes o has vivido “depresión”, es seguro que tienes una conexión emocional o
identificación con algún miembro de tu familia, en tu árbol genealógico o en tu clan familiar.
Muy probablemente encuentres historia de excluidos, grandes secretos, cosas que no
se cuentan y que permanecen ocultas (los llamados “No dichos”).
¿Este es tú caso? Te dejo esta frase sanadora para que la repitas cuando quieras o
cuando te sientas mal.
“Por mi voluntad, Yo me asiento. Me quedo en la vida. Corto todo y con todos. Me libero”
Para muchos hubo solución, alégrate de saber que tú también puedes encontrar el equilibrio
interior nuevamente, la puerta de entrada es la misma por la que se sale. Solo atrévete a hacer
conscientes tus miedos y a desconectarte de estos vínculos emocionales tan limitantes. En tu
interior ya están todas las respuestas.
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pareja, familiares, y que también afectan tu salud física? Yo te acompaño a liberarte de las emociones y duelos
bloqueados, las improntas del pasado, los contratos inconscientes y de las creencias que están limitando tu vida.
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