¿Por qué la ciencia es un factor importante para el mundo, en
especial para Colombia?
La ciencia se denomina una disciplina que estudia el desarrollo histórico y la
interrelación que ha tenido con la cultura, la economía, la sociedad, la política, la religión y la ideología; a través de los años se ha vuelto indispensable para la cotidianidad, ya que con ella nos hemos transformado y avanzado tecnologías y descubrimientos. Para conocer los acontecimientos naturales, por tal motivo debemos de informarnos y saber porqué la ciencia es un factor que nunca acabará. Para que nosotros podamos aportar a la ciencia debemos hacer investigación y consultarnos como ella ha llegado, hacernos preguntas simples como: ¿por qué llueve?, ¿por qué respiramos?, ¿por qué está el día y la noche? Y otros sin fin de preguntas primitivas, por tal motivo la ciencia se deben conocer, interactuar y renovar. En la prehistoria y/o edad antigua la ciencia presta a la invención de la escritura, que convencionalmente la historiografía ha considerado el hito que permite marcar el final de la prehistoria y el comienzo de la historia, dada la primacía que otorga a las fuentes escritas frente a la cultura material, que estudia con su propio método la arqueología. La escritura es un sistema gráfico de representación de una lengua, por medio de signos trazos o grabados sobre un supone. En tal sentido, la escritura es un modo gráfico típicamente humano de transmitir información. En la edad media la ciencia abrió los descubrimientos habidos en la filosofía natural, tratan de explicar la naturaleza. Los grandes artífices fueron los griegos clásicos, quienes llegaron a escribir numerosos tratados científicos que fueron la base del interés de los romanos por el estudio de la naturaleza, sobre todo en las tierras orientales, donde dominaban el latín y el griego, pero los romanos no hicieron lo mismo, sino que se limitaron, en el mejor de los casos, a traducir o resumir las obras helenísticas clásicas. Tras la caída del imperio romano, en los primeros tiempos de la alta edad media, todo ese interés se perdió durante siglos, debido en gran medida a la división del continente europeo entre oriente y occidente, quedando este último sin acceso a los tratados originales en griego, con lo que la ciencia se vio sumida en un profundo abandono. Ya al final de la edad media, fue decisiva la adopción de innovaciones de origen oriental bruja, pólvora, imprente, que si en la sino céntrica civilización china no pudieron tener un papel transformador, si lo tuvieron en la expansiva civilización europea. En la edad moderna a partir del siglo XV comenzaron a producirse transformaciones significativas en la vida económica, política, social y cultural de Europa occidental, que fueron modelando lo que se conoce como modernidad. Sin embargo, al abordar este período es importante advertir que no hubo un corte tajante con la edad media, por el contrario, persistieron algunos aspectos de la baja edad media, que marcaron una continuidad con el pasado. El desarrollo de la ciencia y de la técnica consigo nuevas formas de concebir el universo que modificaron la imagen de los mundos conocidos, la evolución de los medios de transporte favoreció la expansión del comercio marítimo y los viajes de exploración. Con el descubrimiento de américa y la profundización del conocimiento de África se amplió el horizonte geográfico de los hombres europeos. Durante los tiempos del humanismo y el renacimiento, los estudios científicos cobraron gran importancia, surgió un gran interés por las investigaciones en matemática, botánica, zoología, astronomía, medicina, historia, física, y demás ramas científicas; la ciencia no era autónoma, sino construyo paulatinamente su independencia, tuvo que despegarse del ámbito religioso, que frenaba los adelantos que se opusieran eran el dogma. Cada ciencia se preocupó por el problema del conocimiento: ¿es posible conocer? ¿Cómo puede adelantar el conocimiento en cada rama científica?
La edad contemporánea se caracteriza desde el punto de vista científico, por
un extraordinario aumento de los descubrimientos, muchos de los cuales ya han tenido repercusiones en la industria y hoy forman parte de nuestra vida cotidiana, como por ejemplo la electricidad, las fibras artificiales, la gasolina, los ordenadores o las telecomunicaciones. Como también los acontecimientos de esta época las artes y la literatura sufren un retroceso. Unos de los personajes más importantes para esta edad son: Miguel Servet médico y teólogo español el cual hizo el descubrimiento de la circulación pulmonar, dejando el tema abierto para que se descubra la circulación de la sangre; Gregorio Marañón también médico y escritor español. Autor de estudios de endocrinología; Gabriel García Márquez un gran escritor colombiano, premio nobel de literatura en 1982 con su mayor obra y muestra del realismo mágico “cien años de soledad”; Federico García Lorca poeta y dramaturgo español, representante den veintisiete y autor del romancero gitano; Karl Marx filósofo, economista y teórico del socialismo alemán, autor del “manifiesto comunista” y “el capital”, su objetivo primordial fue abolir el capitalismo por considerarlo el mal de la sociedad; José Ortega filósofo y ensayista español, exponente principal de la teoría del perspectivismo y de la razón vital e histórica. Una célebre frase de él es “YO SOY YO Y MI CIRCUNSTANCIA”, con sus obras famosas “la rebelión de las masas”, “España invertebrada” y “meditaciones del quijote”; Mozart gran compositor austriaco, uno de los grandes maestros de la ópera, autor de las bodas de fígaro, don Juan y demás, también compuso sinfonías y conciertos para piano, obras de música religiosa y de cámara y un magnífico “réquiem”, precursor del romanticismo; Manuel de Falla compositor nacido en Cádiz, autor del “sombrero de tres picos”, “el amor brujo”; Adolf Hitler político alemán, padre de la doctrina ultranacionalista y racista del nazismo, creador de la organización militar al servicio de Hitler con la misión de proteger y defender la pureza de la raza aria germana; Adolfo Suárez político español, dirigió la reforma política de la transición a la democracia como presidente del gobierno y creador del partido unión centro democrático; Friedrich Wilhelm alcanzó una considerable fama y ejerciendo un notable influjo que se dejará sentir en el desarrollo del pensamiento contemporáneo; George Edward Moore inicio en el idealismo de la mano de su profesor Ellis McTaggart pero posteriormente aceptó la postura realista. La primera ruptura con el idealismo se refleja en un artículo temprano, “la naturaleza del juicio”. Y es en esta época donde entramos nosotros a seguir construyendo ciencia e innovar.
“A pesar de ser Colombia un país con un gran desarrollo los gobernantes de
paso no valoran que la ciencia y la tecnología ayudan a las áreas más cotidianas, cercanas y relevantes, cuando se hace ciencia se genera empleo”. Para muchos de nosotros no tenemos en mente la importancia de la ciencia y la investigación, no nos esforzamos a mirar más allá de ya lo conocido, si no que nos detenemos y nos basamos solo en cosas mediocres que no aportan al conocimiento ni a la construcción de una persona. Colombia es un país donde nosotros los seres humanos no somos capaces de leer al menos uno o dos pequeños libros al año, ocupamos los últimos puestos a nivel académico ante los censos internacionales y solo aportamos un 0,2% de producción científica para el mundo entero. La culpa no es solo del pueblo colombiano, el problema colombiano es que no contamos con un sistema educativo el cual no eduque a las generaciones pequeñas para comprender a la ciencia como algo apasionante e interesante, hasta en las universidades el apoyo nacional de proyecciones investigativas sea prácticamente invisible. “EDUCAR CIENTÍFICAMENTE A LA JUVENTUD NO ES NI SERÁ UNA REALIDAD EN NUESTRO PAÍS”. Pero hay que tener algo en cuenta, y que solo vemos la ciencia como innovador de tecnologías e industrias y no en cómo fortalecer campos. En el 2015 se habló de otorgar solo un 1% del PIB (producto interno bruto) a la ciencia y a la tecnología, pero no para ese año sino para el 2018. Nos hablan de una “gran” inversión para este presupuesto en el país, el nuevo modelo de regalías le otorgaría a este campo casi un billón anual, pero la realidad es otra.
En Colombia la corrupción es la mayor potencia de no dejar que avance la
ciencia, la tecnología y la educación. Los presupuestos otorgados para estas dan como resultados que esos mismos dineros o parte de ellos sean ejecutados en proyectos totalmente diferentes, los gobernantes actuales decidieron destinar esos fondos para la construcción de vías. Por estas cosas nuestro país Colombiano podemos ser personas con infinidades de culturas, podemos ser grandes personas amables y queridas, pero tan cortos en mente, los proyectos como “Colombia científica” son solo pañitos de agua tibia en el panorama tan deplorable que existe. “Sin hablar de la falta de doctores y el hecho de que mucho de los que hay sean chimbos, el poco apoyo a las universidades que representan el 90% de la investigaciones en el país, de un ministro que cree que repartiendo tabletas ya está cambiando el paradigma educativo de un país. NO. Es que sobre el asfalto de esos hermosas carreteras que se construirán irán aquellos físicos, astrónomos, microbiólogos, médicos, filósofos, antropólogos, y un sinfín de profesionales que seguramente no serán colombianos.” Colombia ha enfrentado grandes e importantes retos para poner y fortalecer el conocimiento generado, al servicio de sus sistemas productivos, económicos, sociales y ambientales. Para esto, es prioritario eliminar o mitigar barreras tales como baja inversión nacional en ciencia y tecnología, utilizando una metodología que siga los lineamientos de la UNESCO (organización de las naciones unidas para la educación, la ciencia y la cultura) para medir el monto, cambiando la concepción de gasto a inversión pasando del 0,37% del PIB al 2% en 2019 y consolidando nuevas fuentes de financiación. “En 2014 el presupuesto de ciencia y tecnología en el país fue de 414.000 millones de pesos. Un monto que fue reducido hasta los 333.000 millones en el 2015 y que en 2016 apenas alcanzó los 284.000 millones” El gobierno de Juan Manuel Santos, presidente actual de Colombia, anuncio en marzo la consolidación del programa “Colombia científica”, por el que buscar apoyar ocho programas de investigación por un valor de hasta 19 mil millones de cada uno. Sin embargo, como apuntó Norah Elizabeth Hoyos, fundadora de Maloka y una de las principales impulsadoras de la ciencia en el país los recursos son todavía insuficientes y el más afectado sigue siendo Colciencias. “Óscar Gualdrón, director de fomento a la investigación de Colciencias, en el foro de regalías realizado por la universidad del rosario, uno de los principales afectados por estas medidas de recorte es Colciencias, la entidad, indicó que requiere 3,7 billones de pesos para actividades de investigación y desarrollo. 1,4 billones para innovación empresarial y transferencia de conocimiento y 290 mil millones para crear cultura. Cifras que hasta el momento son imposibles de cumplir por el gobierno que se propuso destinar en ciencia, tecnología e innovación el 2% del PIB en 2015 y a día de hoy solo invierte entre el 0,2 y el 0,5%”. Para que Colombia pueda llegar a ser una de las mayores potencias de Sudamérica por ahora debe: Necesita invertir por lo menos el 1% del PIB Identificar las áreas prioritarias para la investigación para potencializarla y formar un doctor por cada mil habitantes. Seguir con las pequeñas investigaciones de las universidades como lo son Nacional de Colombia, industrial de Santander, tecnológicas de Pereira, Cauca, Valle, Los Andes y demás, y pocos colegios. “Un país como Colombia, con una producción científica insuficiente en el contexto latinoamericano y mundial, con una inversión limitada no puede dedicarse a generar impactos en cien mil áreas, sino que tiene que dedicarse a los temas que realmente sean los que impacten es sus procesos de desarrollo económico y social”, dice Oscar Gualdrón. Afortunada mente, frente a los desafíos hoy se vislumbran importantes esfuerzos estatales para financiar proyectos de investigación, otorgamiento de becas y préstamos para adelantar estudios en el exterior y desarrollo de formar de cooperación internacional. A pesar de los rezagos frente a otros países, permanentemente se siguen creando grupos de investigación, se siguen generando patente, y si siguen publicando conocimiento científico en revistas reconocidas por la comunidad científica. “Mirar en detalle cada una de las áreas que se consideren estratégicas, evaluando lo que existe y a lo que se le debe apostar”, Rafael Molina, vicerrector de Investigación de la Universidad Nacional de Colombia. “El impulso de programas de formación doctoral y de maestrías centradas en investigación es un capítulo de nivel incipiente den el país. Graduamos alrededor de cien doctores anuales, mientras país como Brasil gradúan cerca de 10 mil al año. Hay una brecha demasiado grande que cubrir, y si un país no tiene la capacidad de generar el talento humano que necesita, difícilmente va a producir el conocimiento que requiere su progreso socioeconómico” Eduardo Rojas, Universidad del Cauca. ENSAYO “LA CIENCIA EN COLOMBIA”