You are on page 1of 3

Universidad Autónoma de Campeche

“Dr. Alberto Trueba Urbina”

Asignatura:

Derecho Constitucional Mexicano

Docente:

Víctor Manuel Collí Ek

Alumno:

Salvador Martín Cáceres Medina

Grado: 2° Semestre Grupo: “C”

Ciclo escolar: 2016-2017

Fecha de entrega: jueves 1 de junio de 2017


Ensayo Contradicción de Tesis 293/2011

El Pleno de la SCJN resolvió, por mayoría de diez votos, la contradicción de tesis


293/2011, en la cual se atiende la problemática causada en torno a si existe
jerarquía entre la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y los
tratados internacionales que contengan derechos humanos, a partir de la reforma
constitucional de 10 de junio de 2011 en materia de Derechos Humanos.

En dicho asunto, respecto del cual no se ha publicado ejecutoria, la mayoría


resuelve distintas cuestiones: la no distinción de la fuente, ya sea constitucional o
convencional, por la cual derivan los derechos humanos; el reconocimiento de
rango constitucional de los derechos humanos de fuente internacional; la
armonización a través del principio pro persona de las normas nacionales e
internacionales; la prevalencia de la Constitución cuando ésta prevea
expresamente una restricción al ejercicio de Derechos Humanos; y la
obligatoriedad de toda la jurisprudencia de la Corte Interamericana para los jueces
mexicanos, siempre que la misma resulte más favorable para la persona. Para el
estudio de dicha resolución, se hará una división consistente en tres apartados.

En el primero se expondrá la postura que adopta la mayoría del Pleno, en el


segundo las objeciones que hace el Ministro Cossío respecto del mismo, y en el
tercero se trascribe el texto de la jurisprudencia aparentemente aprobada por la
mayoría

Los criterios jurisprudenciales de la Corte Interamericana de Derechos Humanos,


con independencia de que el Estado mexicano haya sido parte en el litigio ante
dicho tribunal, resultan vinculantes para los jueces nacionales al constituir una
extensión de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, toda vez que
en dichos criterios se determina el contenido de los derechos humanos contenidos
en ese tratado. La fuerza vinculante de la jurisprudencia interamericana se
desprende del propio mandato constitucional establecido en el artículo 1º
constitucional, pues el principio pro persona obliga a los jueces nacional esa
resolver cada caso atendiendo a la interpretación más favorable a la persona. En
cumplimiento de este mandato constitucional, los operadores jurídicos deben
atender a lo siguiente: (i) cuando el criterio se haya emitido en un caso en el que
el Estado mexicano no haya sido parte, la aplicabilidad del precedente al caso
específico debe determinarse con base en la verificación de la existencia de las
mismas razones que motivaron el pronunciamiento; (ii) en todos los casos en que
sea posible, debe armonizarse la jurisprudencia interamericana con la nacional; y
(iii) de ser imposible la armonización, debe aplicarse el criterio que resulte más
favorecedor para la protección de los derechos humanos de las personas.

En lo que toca a las discusiones del pleno por la Contradicción de tesis 293/2011,
fueron evidentes los dos principios que se argumentaron. El primero referido al
principio de la supremacía de la Constitución, establecido en el artículo 133, y por
otro el principio pro-persona en la interpretación de los derechos humanos
reconocidos en el artículo 1°. Lo subyacente en estos principios es que la reforma
al artículo 1° configura una “masa de derechos” de jerarquía constitucional que
provienen de fuente directa, de la propia Constitución, y de fuente convencional,
de los tratados internacionales de los que México es parte. Por tal reforma, se
prevén posibles “conflictos” o “colisiones” entre estos derechos de fuente
internacional y la Constitución, y era necesario que la Corte señalara la forma de
resolverlas.

Cinco ministros señalaron que lo mejor era no señalar una directiva clara de
jerarquía, sino permitir que los jueces resolvieran la interpretación de acuerdo al
caso de su conocimiento, aduciendo que la relación sería de armonía, y no de
jerarquía, como se había decidido en dos casos previos ya resueltos. Los otros
seis ministros se decantaron por señalar que en caso de que la Constitución
señalara una restricción, prevalecía esta sobre el principio “pro persona” en la
interpretación de los derechos humanos.

En riesgo de que no se aprobara el proyecto, se hicieron modificaciones al mismo,


y se espera que en su redacción final se señale con claridad esta cuestión.

Mi conclusión final es estimar que, si bien no se logró todo lo que se intentaba el


proyecto original de la contradicción de tesis 293/2011, la decisión alcanzada por
el voto de diez ministros abona en la dirección correcta: la gradual y paulatina
construcción del Estado Constitucional Mexicano.

La presente jurisprudencia nos deja claro que como mexicanos tenemos derecho
a todos y cada uno de los derechos contenidos en la Constitución política de los
Estados Unidos Mexicanos, así mismo que todos estos derechos de alguna
manera se encuentran contenidos en los Tratados internacionales de modo que
tanto la constitución como los Tratados Internacionales se complementan y que
para casos de litigios ninguna de estas dos legislaciones está por encima de la
otra, sino que se podrá tomar cualquiera de ellas que resulte más benéfico para
la persona al momento de dictar sentencia.

Adicionalmente, establece también el valor de la jurisprudencia de la Corte


Interamericana de Derechos Humanos.

En síntesis, lo relevante de ésta jurisprudencia considero que es que la Suprema


Corte de Justicia de la Nación reconoce que tanto la Constitución como los
Tratados Internacionales son igual de importantes en beneficio siempre de la
sociedad.

You might also like