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Shams ad-Din Abu Abd Allah Muhammad Ibn Muhammad Ibn Ibrahim al-
Luwati at-Tanyi, mejor conocido como Ibn Battuta, fue un viajero, geógrafo,
explorador, escritor y cartógrafo árabe de la época medieval, famoso por
los relatos de todos sus viajes y excursiones y es el más conocido de los
grandes viajeros musulmanes y es uno de los más grandes viajeros de
todo el tiempo.
Donde Battuta plasmó cada uno de los detalles durante sus experiencias
vividas a lo largo de esos 120.000 kilómetros que recorrió desde el año
1325, hasta el año 1354, en esos 120.000 kilómetros que Battuta recorrió,
conoció a más de 1500 personas donde a la mayoría de estas, las cita en
su libro de viajes y este libro es considerado uno de los más importantes
libros de viaje de toda la Edad Media porque en ese libro se encuentran
las miles descripciones y detalles de cada uno de los lugares que Ibn
Battuta visitó y es uno de los pocos documentos en la actualidad que se
dispone para conocer lo que había en aquella época, esta es una de las
razones por la cual el libro Rihlah o A través del Islam tiene un valor
importante en la historia. Ibn Battuta desde muy pequeño se aficionó a las
lecturas, en especial las obras que estaban relacionadas con la geografía
y con los libros de viajes, ayudado por los altos recursos que su familia
tenía, a los 21 años de edad empezó su travesía viajera y opto hacerlo
solo, sin compañeros, sin protección,
sin nada. Así lo relata en su crónica, en
ese momento, ni él se habría imaginado
que iba a recorrer más de 120.000
kilómetros y que sería el viajero que
más distancia ha recorrido, superando a
su contemporáneo Marco Polo, con el
triple de distancia que éste llegó a
recorrer y superando a grandes viajeros
Ilustración de un viajero árabe de la época como:
de 1237, obra de Yahia Ibn
Mahmud al-Wasiti
El granadino Abu Hamid, el valenciano Ibn Yubayr, el tunecino Ibn Jaldún
o el español Ruy González de Clavijo.
Irak en ese tiempo estaba controlada por los mongoles y en primer lugar,
él visita a la ciudad de Navaf, lugar donde estaba enterrado Ali Ibn Abi
Talib, que era el cuarto califa. De Navaf, Battuta se dirigió a Basora y
después se dirigió a Persia, visitando Isfahan, que había sido destruida por
Temerlán unas épocas anteriores, luego visitó Shiraz y muchos otros
lugares que había alrededor. Ibn Battuta regresa a Irak y visita Kufa y
Badgad, que era la antigua capital de los Abasíes, que en ese momento
había perdido parte del gran esplendor que tenía por haber sido saqueada
por las tropas mongolas de Hulagu Jan. En Badgad, Battuta conoció a un
joven llamado Abu Said Bahador Jan, que era el rey de los dos Irak y era
el último gobernante del Iljanato unificado cuya muerte y la fragmentación
de su reino, Battuta lo relataría en su libro de viajes varias décadas
después. Luego, Ibn Battuta viajó con una caravana real y se desvía de
ella acompañando a uno de los príncipes de la ciudad Persa de Tabriz en
la Ruda de la Seda, esto para regresar después al campamento de Abu
Saíd. En la Rihla, Battuta resalta que en sus viajes de Irak y Persia tuvo el
placer de conocer a muchos chiíes.
Luego de ganarse la confianza de Abu Said, este le suministró los medios
suficiente para realizar una segunda peregrinación a La Meca, Battuta
regresa a Bagdad para iniciar los preparativos y luego sale con una
caravana de peregrinos para visitar el norte del país. Durante su viaje,
atravesó poblaciones como Sammarra, Mosul, Tikrit, llegando hasta el
Kurdistán.
Luego de cumplir por segunda vez el quinto pilar del Islam, el Hajj, Ibn
Battuta permaneció tres años seguidos en La Meca, dedicándose a la vida
religiosa permitiendo enseñar su conocimiento con numerosos peregrinos
creando nuevas amistades, y también se dedicó a ser profesor de teología.
Luego a Battuta le dio la curiosidad de conocer nuevos lugares, así que
prosiguió con su periplo, con destino hacia el sur, lo emprende en
diciembre de 1330. En Jedda, Battuta se embarca hacia la costa Nubia,
que actualmente es Sudán, para poder cruzar el mar Rojo de nuevo, y
poco después con destino hacía Yemen, en donde fue alojado por el Nur
ad-Din Ali. Luego desde Adén, que era el lugar donde tenía la intención de
ser comerciante de los bienes que fluían a la Península Arábiga desde
todo el Océano Indico pero antes de hacer esto, emprendió un viaje más,
este viaje consistía en viajar por mar donde recorrió las costas de África,
el sur de la Península Arábiga y el golfo Pérsico, pasando alrededor de
una semana en cada uno de esos destinos, Battuta visitó Etiopía,
Mombasa, Zanzíbar, Mogadiscio y Kilwa Kissiwani, entre otros lugares.
Despues de todos estos viajes, Ibn Battuta regresó hacia el sur de Arabia
y antes de establecerse, visitó el estrecho de Ormuz y Omán y realizando
esto, emprendió su viaje a La Meca otra vez. Al cabo de un año, se dirigió
hacía Anatolia que estaba controlada por los turcos selyúcidas para poder
unirse a una de las caravanas que iban de allí hasta la India. Se fue por
mar en un barco de Génova desde Damasco, este barco genovés lo llevó
hasta Alanya en la costa sur de la actual Turquía y desde Alanya, viajó por
tierra hacia Konya y después hacia Sinope en la costa del mar Negro. Tras
haber cruzado dicho mar, Battuta se adentró en Kaffa, que es la actual
ciudad de Feodosia e importante factoría comercial de Génova y entró en
las tierras de la Horda de Oro, que fue un estado mongol que abarcó parte
de las actuales Rusia, Ucrania y Kazajistán tras la ruptura del Imperio
mongol en la década de 1240, y en la Horda de Oro, compró carro. Y de
forma Imprevista se unió a una caravana de Ozbeg, en un viaje hasta
Rutas por años de los viajes que realizó el viajero y geógrafo, Ibn Battuta