YO SOY LA QUE SE ADELANTO
Algunos me llaman difunta,
Otros dicen que soy aquella que se murió,
Yo prefiero que me digas que soy la que se adelanto
Me libre del cuerpo físico que me empezaba a apretar,
Pues mi espíritu es tan grande que entre cadenas
Ya no podía estar.
Por difícil que te parezca, todos vamos al mismo lugar,
Por lo tanto quítate la pena a lo que nadie puede evitar.
He vuelto a mi esencia, mi verdadero hogar,
Mis vecinas son las estrellas.
Estoy tan bien aquí, que en mejor lugar
No podría estar.
Si me heriste, si me ofendiste,
Donde estoy ahora no me afecta más,
Y desde aquí te doy las gracias, porque esa herida o esa ofensa
Era la lección que yo debía tomar.
Si te herí o te ofendí te pido perdón, Pero así como yo,
Tú, también tenías que tomar la lección.
Por mí no te preocupes, he vuelto a mi lugar.
No me llores, cada lagrima que derramas
Atrasa el cumplimiento de mi ciclo.
Regálame sonrisas y bendiciones,
Son el mejor regalo espiritual.
Nunca te he abandonado a pesar de que no me puedas ver.
Comunícate conmigo a través del pensamiento
Y escucha mis respuestas con lo que tú llamas coincidencias.
No me lleves flores a mi tumba, Ahí no estoy.
Ahora estoy en todas partes, el universo es mi mansión.
Estoy en tu mente y en tu corazón,
Y ahí estaré viva mientras me recuerdes con emoción.
No tomes ni te emborraches “a mi salud”,
Entre más sobrio y consiente estés, Más vida me puedes dar.
El mejor tributo que me puedes rendir
Es valorar todo aquello que dejo, Que puedes disfrutar.
Disfruta cada amanecer y cada anochecer,
Y todas las sonrisas y abrazos que puedas dar.
Dame un regalo: recuerda los momentos bellos que vivimos,
Recuérdame sonriendo y no te preocupes por mí.
Estoy bien, ahora he trascendido lo físico
Y puedo estar mucho más cerca de ti.
Cuando te sientas solo o abatido, Invócame.
Yo siempre te escucho y si tú lo quieres,
Puedo se tu guía y consejera espiritual.
Estoy mejor que nunca, te bendigo y te protejo
Y desde aquí te deseo lo mejor.
Yo soy la que se adelantó.