LOS ENEMIGOS DE LA IGLESIA

Mateo 16:13-20

Introducción:
Ante la confesión de Pedro, revelada por el Padre, “…tú eres el Cristo el Hijo del Dios viviente…”, se abre una bendición,
y una promesa para la Iglesia, en dos dimensiones. La Iglesia sería edificada sobre la Roca (Mateo 6:24; Lucas 6:48; 1
Corintios 10:4). Las Puertas del Hades no prevalecerán contra ella (Mateo 16:18). La pregunta sería: ¿por qué a pesar de
estas promesas, la iglesia del Señor se ve amenazada por enemigos que procuran su ruina? ¿De quién será la
culpa? Leer Hebreos 2:3
Mateo 16:18
¿Quién es la Roca? La Roca es Cristo. La iglesia está edificada sobre Cristo. Y tenemos la explicación misma de Simón
Pedro al respecto. En su primera carta, 2:4 dice: "Viniendo a Él como a una piedra viva, desechada por los hombres, pero
escogida y preciosa delante de Dios". Y el apóstol Pedro citó luego al profeta Isaías 28:16, que dice: "He aquí, pongo en
Sión una piedra escogida, una preciosa piedra angular, y el que crea en El no será avergonzado". Es decir, que la iglesia
está edificada sobre Cristo; Él es el fundamento. Como dice el apóstol Pablo en su primera carta a los Corintios 3:11,
"Nadie puede poner otro fundamento que el que ya está puesto, el cual es Jesucristo". Y Él dijo: "sobre esta roca edificaré
mi iglesia". La iglesia aún era una realidad futura cuando Jesús hizo esta declaración. La iglesia no existía en el Antiguo
Testamento y no empezó a existir hasta después de la muerte, resurrección y ascensión de Cristo y del descenso del
Espíritu Santo. No podía haber iglesia sin estos acontecimientos

Las "puertas del infierno", se refieren a la muerte. La palabra griega utilizada para infierno es hades, que equivale al hebreo
Sheol del Antiguo Testamento, que se refiere al mundo invisible y significa muerte. Las puertas de la muerte no
prevalecerán contra la iglesia de Cristo. Algún día el Señor mismo descenderá del cielo con una voz potente que será como
la voz de un arcángel y como una trompeta, y los muertos en Cristo resucitaran primero.

Mateo 16:19

¿Cuáles son las llaves del reino de los cielos? ¿Fueron entregadas solamente a Simón Pedro? No. Jesús las entregas a
aquellos que hacen la misma confesión que hizo Pedro; aquellos que conocen a Cristo como Salvador. Si tú eres un hijo
de Dios, tienes las llaves igual que cualquier otra persona que las tenga. Las llaves eran un distintivo de autoridad del oficio
de los escribas, que interpretaban las Escrituras al pueblo.

Mateo 16:20

El Señor hizo este pedido porque el simple conocimiento de quien es El no salva. Para recibir la salvación tienes que
conocer quién es El, lo que El hizo y aceptarle por la fe.

Desarrollo.

I. Airarse. (Enojo, enfurecer, irritar).

 Proverbios 14.29; “…el que tarda en airarse es…”
El hombre que se queda tranquilo, incluso frete a la provocación, demuestra sabiduría, sus emociones no entorpecen
su manera de pensar ni determinan sus acciones.
 Efesios 4.26; “…airaos, pero no pequéis; no se ponga el…”
El creyente no debe permitir que la ira lo domine y afecte su relación con DIOS y sus semejantes.

Hay muchos creyentes que no se comportan de una manera digna de su profesión, con temperamentos incontrolables
que dañan su testimonio tanto como cualquier otro factor negativo de su vida podría hacerlo. (Ejemplo de escuela
bíblica)
 Santiago 1.19; “…tardo para hablar, tardo para airarse…”
 Cantares 1.6 “…hijos de mi madre se airaron contra mí…”
II. Altivez. (Arrogancia, soberbia)
 Proverbios 21.4; “…altivez de ojos, y orgullo de .. son pecado…”
 Proverbios 16.5; “…abominación es a Jehová todo altivo de…”
 2 Corintios 10.5; “…derribando .. toda altivez que se levanta…”
 Salmos 138.6; “…al humilde, mas al altivo mira de lejos….”
 Romanos 12.16; “…no altivo, sino asociándoos con los humildes…”
III. Amargura. (Gusto amargo.)
 Salmos 73.21; “…se llenó de amargura mi alma, y en mi corazón…”
 Hechos 8.23; “…porque en hiel de amargura y .. veo que estás…”
 Romanos 3.14; “…su boca está llena de maldición y de amargura…”
 Efesios 4.31; “…quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira…”
 Hebreos 12.15; “…brotando alguna raíz de amargura, os estorbe…”
IV. Afán. (Ansiedad, fatiga, trabajo)
 Salmos 39.6; “…ciertamente en vano se afana…”
 Mateo 13.22; Marcos 4.19; “…el afán .. ahogan la palabra…”
 Lucas 8.14; “…son ahogados por los afanes y las riquezas…”
 Lucas 12.22; “…no os afanéis por vuestra...
 Mateo 6.28; “…por el vestido, ¿por qué os afanáis?..”
V. Desánimo. (Desaliento, falta de ánimo.)
 Números 21.4; “…se desanimó el pueblo por el camino…”
 Números 32.7; “…¿y por qué desanimáis a los hijos de Israel?…”
VI. Murmuración. (Conversación en perjuicio de un ausente.)
 Números 16.41; “…el pueblo murmuró…”
 Filipenses 2.14; “…haced todo sin murmuraciones y contiendas…”
 1 Corintios 10.10; “…ni murmuréis, como .. murmuraron…”
 Santiago 4.11; “…no murmuréis los unos de los otros…”
Conclusión:
Hay enemigos que como cristianos tenemos que combatir, para ello Dios nos ha dado el Espíritu Santo, para fortalecernos.

“…Pero esto es para que se cumpla la palabra que está escrita en su ley: Sin causa me aborrecieron. 26 Pero cuando
venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio
acerca de mí. 27 Y vosotros daréis testimonio también, porque habéis estado conmigo desde el principio…” Juan 15:25-
27
“…Antes, porque os he dicho estas cosas, tristeza ha llenado vuestro corazón. 7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene
que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. 8 Y cuando
él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio...” Juan 16:6-8
“…Cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis por cómo o qué habréis
de responder, o qué habréis de decir; 12 porque el Espíritu Santo os enseñará en la misma hora lo que debáis
decir…” Lucas 12:11-12