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ESCUELA DE PSICOLOGÍA

MORFOFUNCIÓN DEL SISTEMA NERVIOSO

ENUNCIADO:
ÓRGANO VOMERONASAL

ELABORADO POR:
RUBÉN GUAMÁN

PROFESOR:
JAIME TERÁN

12-Ene-2018

QUITO
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ÍNDICE
1. ÓRGANO VOMERONASAL .................................................................................. 3

1.1 Concepto. ................................................................................................................. 3

1.2 Introducción. ........................................................................................................... 3

1.3 Implicaciones de la glándula vomeronasal en la libido........................................ 4

1.4 Resultados. ............................................................................................................... 4

1.5 Implicaciones de la glándula vomeronasal en captación de feromonas. ...... 5

2. CONSLUSIONES. .................................................................................................... 6

3. BIBLIOGRAFÍA....................................................................................................... 7
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1. ÓRGANO VOMERONASAL

1.1 Concepto.

El órgano vomeronasal (OVN) descrito por Jacobson en mamíferos


distintos al ser humano, es una incógnita tanto en lo que se refiere a su
localización, así como a su función en la raza humana. Se considera como un
vestigio del olfato, que en los animales mamíferos parece influir en los hábitos
sexuales (feromonas) y sociales. Hasta la fecha han sido escasos los estudios
concluyentes al respecto en humanos (Zeller, 2007).

1.2 Introducción.

Los seres humanos tienen el sentido del olfato menos desarrollado de los
mamíferos terrestres, la evolución conllevo a la desaparición progresiva de
órganos y glándulas que ya no eran indispensables para nuestra supervivencia,
desde que el hombre se ergio en dos pies el sentido del olfato fue involucionando
y el órgano vomeronasal que cumple un papel fundamental para otros mamíferos,
ya que este órgano sirve para percibir información social y sexual de los miembros
de su propia especie.
El órgano vomeronasal también llamado órgano de Jacobson, ha sido
objeto de varios estudios llegando a concluir que es capaz de percibir sustancias
químicas que son las llamadas feromonas las cuales tienen una estructura química
sencilla y está compuesta por una parte volátil, el bisulfito de metilo, el cual causa
la atracción sexual. Estas feromonas son producidas tanto por los machos como
las hembras las cuales acompañan distintas secreciones de los individuos como
saliva, sudor y secreciones vaginales.
¿Los seres humanos tienen órganos vomeronasales?
Un anatomista danés se planteó esta interrogante, Ludwig Levin Jacobson
en 1811, en aquella época propuso que este órgano tenia participación con la
percepción de olores y aunque existían en embriones humanos, desaparecían
durante el desarrollo o permanecían desarrollados de una forma imperfecta. En
los últimos tiempos las investigaciones concluyeron que el órgano vomeronasal
es un órgano auxiliar del sentido del olfato ya que no todas las feromonas son
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captadas por el sentido del olfato existen feromonas que son captadas solo por el
órgano vomeronasal que influyen en ciertos humanos en su comportamiento
social y sexual. A su vez los estudios realizados corroboraron que el órgano
vomeronasal no tiene conexión con el cerebro, sin embargo, existen evidencias
que sugieren que este órgano en algunos humanos que la poseen no se atrofia
completamente y permanece funcional durante toda la vida (Singer, Acosta,
Clancy, & Macrides, 1987).

1.3 Implicaciones de la glándula vomeronasal en la libido.

Para evaluar la correlación del órgano vomeronasal con la libido de los


seres humanos se realizó un estudio en pacientes que asistieron a consultas de
rinología los cuales se evaluaron y examinaron mediante protocolos
estandarizados de investigación. Mediante lo cual se logró una muestra de 150
pacientes (Sarría, Artigas, Rama, Soler, & Tomás, 2014).

1.4 Resultados.

“En nuestro afán de valorar su función decidimos analizar la posible


fluctuación de la libido en 46 pacientes sometidos a septoplastía. En 35 se pudo
completar el estudio. Fueron 21 varones y 14 mujeres los incluidos, con una media
de edad de 39,6 años (18-53) tras la realización de septoplastía tipo Cottle
modificado, a los 15 y 30 días poscirugía. En el 77,1% (27) estaba disminuida, el
17,1% (6) no refirió notar ningún tipo de variación al respecto y en 5,7% (2) había
aumentado a los 15 días tras la retirada de taponamiento nasal, que habitualmente
mantenemos durante 72 horas. Después de un mes de dicho acto, el 77,1% (27)
consideraba que se había normalizado, el 5,7% (2) continuaba disminuida y el
17,1% (6) había aumentado. Todos los pacientes que refirieron aumento de la
libido correspondían al sexo masculino (Figura 3). Con respecto a la influencia en
las timpanoplastías en el 40% (16) estaba disminuida, el 50% (20) no refirió notar
ningún tipo de variación al respecto y en el 10% (4) había aumentado a los 15
días. Después de un mes de dicha intervención, el 90% (36) consideraba que se
había normalizado, el 10% (4) continuaba disminuida y en ningún paciente refirió
haber aumentado. Como anécdota decir que, dos de los pacientes pertenecientes
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al grupo que disminuyó la libido al mes de la timpanoplastía, daban un importante


valor a los pabellones auriculares como zonas erógenas las cuales tras el abordaje
retroauricular disminuyen la sensibilidad (Sarría, Artigas, Rama, Soler, & Tomás,
2014).”

Figura 1. La libido tras la realización de septoplastía.

1.5 Implicaciones de la glándula vomeronasal en captación de feromonas.

Con los resultados del estudio realizado podemos concluir que puede
existir una comunicación feromonal en los seres humanos, lo que expande los
campos de exploración y estudio como el de la regulación de la natalidad (UNAM,
2004).

Existe un grado de certeza en cuanto a las feromonas esteroides las cuales


modulan la actividad del eje hipotálamo- hipófisis a través del órgano
vomeronasal. Lo que a su vez nos explicaría la sensación que experimentamos
durante el proceso de atracción en los cuales se manifiesta un cambio en la
frecuencia cardiaca y la respiratoria (UNAM, 2004).

Los manifestaciones de las feromonas son también a nivel corporal, ya que


el conjunto de señales químico sensoriales que emite un sujeto hacia el o los
sujetos receptores, es explotado hoy en día en la industria de la perfumería que en
estos últimos años han volcado su dinero a la investigación de las feromonas y su
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reacción en hombres y mujeres, perfeccionando la atracción sexual para que la


química entre ambos sexos se de una manera más imperceptible (UNAM, 2004).

2. CONSLUSIONES.

El órgano vomeronasal es vestigio anatómico de nuestros ancestros que algunos


de nosotros heredamos, los pocos estudios que se han realizado alrededor de este
enigmático y a la vez tan fascinante órgano nos lleva a concluir la veracidad de su
existencia en algunos especímenes humanos.

La implicación del órgano vomeronasal en la libido tras los análisis de varios


estudios no terminan de ser lo suficientemente concluyentes para afirmar que el
órgano vomeronasal afecta directamente en la libido de los seres humanos.

Otros estudios realizados al órgano vomeronasal y su relación con el sistema nasal


– olfativo indican que este órgano es completamente activo al captar las feromonas
que desprenden otros seres humanos y capaz de tener conductuales a la hora de
relacionarse con el sexo opuesto.

Con la información y estudios expuestos en este ensayo podemos concluir que el


órgano vomeronasal está presente en parte de los seres humanos y que es un vestigio
de los mamíferos primitivos de los cuales evolucionamos, se encuentra activo para
algunas funciones como la captación de feromonas de los seres humanos, pero no es
concluyente que tenga una implicación directa en la libido de los humanos, los
estudios posteriores desvelaran más detalles sobre este órgano y a futuro podamos
concluir en el efecto directo sobre los humanos que lo poseen.
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4. BIBLIOGRAFÍA.

Axel, R. (1995). The molecular logic of smell. Sci Amer, 9-154.


Axel, R., & Dulac, C. (1998). Expression of Candidate Pheromone Receptor Genes in
Vomeronasal Neurons. Chem Senses, 75-467.
Borgarelli, M. (2007). Aporte para el conocimiento anátomo-funcional del órgano
vomeronasal humano y su probable relación con la conducta socio-sexual.
Revista Argentina de Clínica Neuropsiquiátrica, 5-48.
Gaafar, H., Tantawy, A., & Meus, A. (1998). The vomeronasal organ in adult humans:
frequency of occurrence and enzymatic study. Acta Otolaryngol, 12-409.
Sarría, P., Artigas, C., Rama, J., Soler, R., & Tomás, M. (2014). Órgano vomeronasal.
Estudio anatómico de prevalencia y su función. Revista de Otorrinolaringologia,
115-122.
Singer, A., Acosta, W., Clancy, A., & Macrides, F. (1987). The chemistry of
vomeronasally detected pheromones: Characterization of an aphrodisiac protein.
Ann New York, 98-287.
Smith, T., & Bhatnagar, K. (2001). The human vomeronasal organ. Part III. Postnatal
development from infancy to the ninth decade. J Anat.
Smith, TD; Bhatnagar, KP. (2002). The human vomeronasal organ. Part IV: Incidence,
topography, endoscopy, and ultrastructure of the nasopalatine recess,
nasopalatine fossa, and vomeronasal organ. American Journal of Rhinology, 50-
343.
UNAM. (2004). ¿Cuál es el papel de las feromonas en la conducta sexual humana?
Revista de la Facultad de Medicina, 16-20.
Zeller, F. (2007). Anatomía normal y frecuencia del órgano vomeronasal de Jacobson
en fetos humanos. Rev Argentina de Urología, 9-17.

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