razones
para
que
The
Sartorialist
te
guste
más
(si
es
eso
posible)
1.
I
love
it
when
you
call
me
big
pop-pa
El
autor
detrás
de
este
blog
es
Scott
Schuman,
que
antes
de
convertirse
en
blogger
extraordinaire
estuvo
inmerso
en
el
mundo
de
la
moda
durante
15
años,
trabajando
en
publicidad
y
marketing
para
casas
de
moda
como
Valentino,
Jean-‐Paul
Gaultier
entre
otros.
Se
rumora
(Wikipedia)
que
cerró
su
showroom
(espacio
en
donde
los
diseñadores
exponen
sus
colecciones
para
darlas
a
conocer
a
compradores
y
consumidores)
para
cuidar
a
su
hija
recién
nacida
en
septiembre
de
2005
y
al
no
tener
mucho
que
hacer
comenzó
a
cargar
su
cámara
fotográfica
a
donde
quiera
que
iba,
tomando
fotos
a
todas
las
personas
que
llamaban
su
atención
en
cuanto
a
estilo
propio,
entonces
alguien
le
sugirió
que
subiera
esas
fotos
a
un
blog
y
lo
demás
es
historia,
de
la
cual
somos
testigos
cada
vez
que
abrimos
su
pagina
para
checar
qué
es
lo
que
se
está
usando
en
el
mundo.
The
Sartorialist
tiene
un
aproximado
de
250,000
visitas
diarias
y
durante
casi
cinco
años
ha
sido
considerado
uno
de
los
sitios
más
influyentes
en
el
mundo.
2. “He
who
seeks
beauty,
will
find
it"
(el
que
busca,
encuentra)
The
Sartorialist
tiene
abuelito.
Se
llama
Bill
Cunningham,
tiene
81
años
y
ha
fotografiado
el
mundo
de
la
moda
y
el
estilo
urbano
en
las
calles
de
Nueva
York,
Paris
y
cualquier
ciudad
que
sea
anfitriona
de
Fashion
Weeks
o
eventos
de
la
moda
por
más
de
50
años.
“El
verdadero
acontecimiento
de
la
moda
está
en
las
calles.
Siempre
ha
sido
y
será
así”
dice
Cunningham
mientras
recorre
las
calles
con
su
cámara
Nikon,
camisa
de
mezclilla
azul,
boina
y
bicicleta.
Ana
Wintour
ha
dicho
que
se
viste
para
que
él
la
fotografíe.
Intentemos
imaginárnosla
a
ella
quien
pertenece
a
la
pequeñísima
burbuja
de
mentes
que
deciden
qué
se
usa
y
qué
no
en
cualquier
rincón
del
mundo
preocupada
por
decidir
qué
ponerse
para
ser
fotografiada
por
Cunningham.
Ahí
la
paradoja:
quien
entonces
guía
el
espíritu
de
la
moda
y
el
estilo
no
es
nadie
mas
que
él,
un
pequeño
dios
que
montado
en
su
bicicletita
va
dando
click,
click
click
a
la
cámara.
3. A
blog
is
a
blog
is
a
blog
Esta
característica,
es
la
más
valiosa
pero
al
mismo
tiempo
la
más
evidente
y
por
eso
casi
invisible.
La
cuestión
de
que
todas
estás
fotografías
estén
en
una
bitácora
en
lugar
de
un
sitio
de
Internet
tradicional,
es
en
gran
parte
la
razón
de
su
éxito.
A
mitad
del
2000,
cuando
la
web
era
ya
un
país
que
pertenecía
a
todos,
una
ventana
en
la
que
el
mundo
(o
al
menos
una
gran
parte)
podía
asomarse
sin
miedo
ya
a
caerse
y
las
herramientas
que
existían
para
poder
expresarnos
dentro
de
él
las
habíamos
ya
convertido
en
nuestras,
el
boom
de
los
blogeros
estalló.
The
Sartorialist
no
fue
un
simple
accidente
o
un
éxito
por
casualidad
si
no
más
bien
un
espacio
que
nació
a
partir
de
la
necesidad
de
Scott
Schuman
de
retratar
esa
grieta
que
se
dibujaba
entre
la
gente
real
y
lo
que
se
veía
en
las
pasarela,
y
al
mismo
tiempo
este
espacio
fue
bien
recibido
porque
quienes
lo
visitaban
se
reconocían
en
la
gente
fotografiada
o
bien
veían
una
posibilidad
de
cambio
en
su
estilo
a
partir
de
personas
iguales
a
ellas.
Lo
más
importante:
tiene
activado
los
comentarios
en
su
blog.
Lo
tuvo
desde
el
principio
y
aún
a
la
fecha,
cuando
es
uno
de
los
50
sitios
más
importantes
del
mundo
sigue
abierto
a
comentarios.
La
importancia
de
algún
tema
que
en
verdad
preocupa
a
la
gente
puede
verse
reflejado
en
el
numero
de
comentarios
que
hay
a
partir
de
cierta
imagen.
Estos
intereses
no
siempre
se
ven
la
luz
en
otras
plataformas
de
medios
que
abarcan
la
moda,
las
revistas
o
sitios
de
Internet,
en
muchas
ocasiones
dentro
de
su
obstinación
por
reflejar
una
imagen
perfecta
sin
ningún
tipo
de
fallas,
estos
se
empeñan
en
ignorar
temas
que
interesan
y
preocupan
a
casi
cualquier
sociedad.
Schuman
tiene
una
sensibilidad
especial
para
tomar
el
puso
a
estas
problemáticas,
y
siempre
toma
nota
y
responde
a
los
comentarios
que
causan
inquietud
por
medio
de
posts
en
dónde
alienta
a
sus
lectores
a
que
le
den
su
opinión
sobre
qué
les
molesta
o
qué
es
lo
que
quisieran
decir
acerca
del
tema.
La
oportunidad
de
que
la
gente
este
en
contacto
con
él
y
que
además
se
sienta
escuchada
es
lo
que
a
mi
parecer
mantiene
activo
este
sitio.
¿La
ultima
gran
polémica
en
su
blog?
Subió
una
imagen
de
una
style
blogger
(Angelika
Milan)
y
escribió
a
manera
de
pie
de
foto
que
estaba
encantado
con
que
ésta
joven
fuera
mucho
más
grande
y
curvilínea
(bigger,
curvier)
de
lo
que
se
acostumbra
a
ver
en
los
shows
de
moda,
las
opiniones
acerca
de
qué
es
grande
y
qué
es
curvilíneo
en
el
mundo
de
la
moda
versus
la
realidad
no
se
hicieron
esperar
y
el
debate
sigue
abierto
hasta
la
fecha
en
los
comentarios.
4. Si
Van
der
Rohe
viviera
usaría
una
playera
con
esta
leyenda:
I
heart
The
Sartorialist
La
frase
“Dios
está
en
los
detalles”
es
atribuida
a
este
arquitecto,
y
The
Sartorialist
está
lleno
de
ellos.
Hay
páginas
enteras
de
fotografías
sólo
enfocando
destellos
de
color,
accesorios,
texturas,
la
combinación
de
patrones
y
telas
diferentes,
zapatos,
sombreros;
incluso
sonrisas
o
miradas
sin
importar
el
total
outfit.
Ésta
es
una
de
las
razones
por
las
que
este
blog
es
genial,
es
un
sitio
de
estilo,
no
de
moda.
Es
acerca
del
sentimiento
y
la
emoción
con
la
que
armas
tu
atuendo
al
despertar
por
las
mañanas,
la
carga
emocional
al
usar
tal
accesorio
de
tu
abuela
o
lo
que
quieres
expresar
al
decidir
un
tono
contrastante
de
zapatos,
no
tiene
nada
que
ver
con
lo
que
se
está
usando
para
la
temporada
primavera/verano
este
año.
Bajo
este
mojo,
Schumman
ha
fotografiado
a
vagabundos,
parejas
octogenarias
que
viven
en
el
Harlem,
intendentes
de
la
basura,
chóferes,
estudiantes
y
cualquier
persona
con
estilo
que
su
ojo
bien
entrenado
detecte.
Repite
entonces
una
y
otra
vez
algo
que
nosotros
no
debemos
nunca
olvidar:
el
estilo
no
tiene
que
ver
con
dinero,
marcas
o
joyería
cara,
es
una
actitud
definida,
una
manera
de
existir.
5. Garancé
and
Scott
sitting
in
a
tree:
K-I-S-S-I-N-G
La
novia
de
Scott
Schuman
es
Garancé
Doré.
Garancé
es
una
ilustradora
francesa
que
llegó
a
la
treintena
de
edad
sin
saber
bien
a
bien
qué
hacer
con
su
vida.
Había
decidido
dedicarse
tiempo
completo
a
la
ilustración
y
mientras
casi
se
moría
de
hambre
en
el
intento
decidió
subir
sus
ilustraciones
acompañadas
de
fotos
de
street
style,
que
tomaba
en
sus
largos
tiempos
sin
hacer
nada,
a
su
blog.
Es
el
ejemplo
perfecto
del
timing
en
ésta
época:
llegó
en
el
momento
ideal.
Justo
cuando
todos
hablaban
de
darle
el
poder
a
los
blogs
como
plataforma
y
puente
entre
la
gente
real
y
la
moda,
llegó
ella.
Es
una
de
las
bloggeras
más
queridas
del
medio,
es
muy
guapa,
inteligente
y
además
encantadora.
Su
blog
(www.garancedore.fr)
ha
evolucionado
hasta
el
día
de
hoy
en
hablar
más
acerca
de
temas
o
personas
a
partir
de
lo
que
ella
vive
o
a
quienes
conoce.
Siempre
acompaña
sus
ilustraciones
o
imágenes
con
una
reflexión
tipo
Sex
and
the
city,
pero
a
la
francesa.
Es
decir
con
mayor
estilo
y
más
inteligente.
6. Strike
a
pose
Las
imágenes
que
aparecen
The
Sartorialist
a
primera
vista
parecerían
ser
iguales
a
las
de
cualquier
blog
de
estilo
urbano
que
visites
ahora
mismo.
Pero
en
realidad
no
es
así.
Primero
porque
la
selección
de
personajes
que
hay
en
este
blog
es
todo
menos
homogénea.
Puedes
encontrar
a
una
chica
punk
de
Londres
y
más
arriba
un
gentleman
italiano
con
sombrero
panamá
y
más
abajo
a
una
joven
japonesa
que
parece
salida
de
algún
comic
manga,
eso
por
nombrar
a
los
más
pintorescos,
pero
siempre
sus
fotografías
vibran
en
muy
variados
tonos
y
situaciones.
Él
es
capaz
de
encontrar
los
detalles
más
exquisitos,
los
que
se
construyen
cuando
alguien
se
viste
para
uno
mismo.
El
layering
de
una
chica
usando
al
mismo
tiempo
un
suéter,
una
blusa
y
una
camisola,
las
botas
desgastadas
de
hombre
usadas
por
una
adolescente,
el
largo
inusual
de
unos
pantalones,
el
juego
de
colores
que
apenas
se
asoma
en
unos
aretes,
zapatos
o
bolsa.
Segundo,
porque
no
sólo
fotografía
lo
que
la
gente
lleva
puesto,
sino
escenas
de
cómo
las
personas
viven
a
través
de
su
ropa.
Una
mujer
guapísima
corriendo
bajo
la
lluvia,
jóvenes
jugando
basketball,
dos
ancianos
jugando
ajedrez
en
un
parque.
Lo
que
menos
interesa
es
que
la
ropa
se
vea
perfecta,
más
bien
que
el
espíritu
del
estilo
se
capture
en
la
imagen.
7. Abuelita
a
mi
me
gusta
tu
style
Las
modas
son
cíclicas.
Estamos
condenados
a
ser
sísifos
en
modalidad
relevo,
a
vestir
lo
mismo
que
vistieron
nuestros
padres
y
lo
que
vistieron
nuestros
abuelos.
El
amor
por
lo
vintage
se
ha
hecho
siempre
presente
en
el
blog
de
Schuman:
fotografías
que
dejan
todo
su
protagonismo
en
piezas
únicas
y
cargadas
de
nostalgia
que
al
mismo
tiempo
son
atemporales,
que
podrían
usarse
para
asistir
al
fin
del
mundo,
la
fecha
que
este
por
fin
sea.
Esta
nostalgia
por
el
pasado
ha
ido
regresando
en
forma
lenta
pero
contundente
hacia
nosotros
y
se
ha
filtrado
en
el
mundo
de
la
moda
y
en
el
estilo
poco
a
poco.
Scott
lo
sabe
y
como
buen
predicador
que
escucha
a
sus
seguidores,
ha
invitado
a
sus
lectores
a
que
le
manden
imágenes
de
sus
padres
y
abuelos
en
donde
pueden
verse
lo
estilosos
que
ellos
eran.
Si
algo
ha
destacado
siempre
en
The
Sartorialist
es
la
belleza
de
ser
un
caballero
o
una
dama
sin
importar
la
edad
o
lo
que
se
usa.
Todo
es
cuestión
de
actitud,
de
tener
ese
je
ne
sais
quoi
que
surge
de
la
armonía
en
conjunto,
de
cada
uno
de
los
detalles
del
atuendo
de
una
persona.
En
estos
momentos
el
blog
está
lleno
de
páginas
que
mezclan
fotos
antiguas
con
lo
que
pasa
justo
ahora
en
las
calles
de
las
ciudades
más
cosmopolitas
del
mundo.
Podría
parecer
chocante
esta
mezcla,
sin
embargo
la
armonía
de
la
pagina
y
el
diálogo
entre
épocas
hacen
algo
evidente:
lo
que
permanece
a
través
de
los
años
es
el
estilo,
no
las
tendencias.