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CAPITULO I - INTRODUCCIÓN
A. CONSIDERACIONES GENERALES 2
B. IMPORTANCIA DEL TEMA 3
C. DEFINICIÓN DEL PROBLEMA 4
D. ENFOQUE DEL TEMA 4
E. METODOLOGÍA DE TRABAJO 5
CAPITULO II -
LA POLÍTICA INTERNACIONAL
A. GENERALIDADES 12
- Los sujetos de la Política Internacional 13
CAPITULO IV
A.- GENERALIDADES 58
B.- LOS PROCEDIMIENTOS AMISTOSOS 59
C.- LA NEGOCIACION 60
D.- LOS TRATADOS 64
E.- SOLUCIONES PACIFICAS CON INTERVENCION
DE TERCEROS 68
1.- Los buenos oficios y la mediación 68
2.- El arbitraje 70
3.- La Justicia Internacional 73
4.- Los Organismos Internacionales 74
F.- LA CONSULTA 75
G.- LOS PROCEDIMIENTOS NO AMISTOSOS 76
H.- LA ACCION SICOLOGICA 77
1.- Propaganda 78
2.- La Guerra Sicológica 80
I.- LOS METODOS COERCITIVOS 83
1.- Retiro de Jefes de Misiones Diplomáticas 83
2.- Ruptura de Relaciones Diplomáticas 83
3.- Ruptura de Relaciones Económicas 84
4.- Interrupción de Comunicaciones 84
5.- Boycott 85
6.- Represalias 85
7.- Embargo 86
8.- Demostraciones Militares sin empleo efectivo de la fuerza 86
J.- LA INTERVENCION 87
K.- LA GUERRA 89
CAPITULO VI
CAPITULO VII
CAPITULO IX
Cátedra de Estrategia
INSTRUMENTOS Y PROCEDIMIENTOS DE
EMERGENCIA NACIONAL.-
Junio de 2000
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN
# Geopolítica:
La Geopolítica es una rama de las Ciencias Políticas que
estudia cuál es la influencia ejercida por los factores geográficos e
históricos en la vida y evolución de los Estados, a fin de extraer
conclusiones de carácter político.- Sirve de guía al estadista en la
conducción de la política interna y externa del Estado al facilitar la previsión del
futuro y establecer la forma en que pueden ser alcanzados los objetivos y, en
consecuencia, deducir las medidas para la conducción política y estratégica
más conveniente.-
La Geografía proporciona la información indispensable sobre el
escenario en que se desenvuelven las relaciones entre los Estados.- El habitat
explica muchos de los móviles que guían a las naciones en su conducta
exterior.-
# Geoestrategia:
# Política Internacional:
# Política Exterior:
La política exterior de un Estado es la proyección de su
personalidad nacional más allá de sus fronteras. Es, por tanto, indivisible de su
política interna, que define esa personalidad en el ámbito doméstico.-
# Política Interna:
El ordenamiento interno de un Estado, la armonía básica
entre gobernantes y gobernados, la vigencia de Instituciones permanentes y
respetadas, la existencia de un consenso popular suficientemente amplio
acerca del régimen que debe imperar, el predominio de creencias básicas en
materia de vida pública, es lo que conforma la política interna y cuyo objetivo es
el bienestar y la prosperidad del pueblo.-
# Doctrina:
Son los principios fundamentales y métodos que sirven de
guía al planeamiento y ejecución de las acciones para lograr objetivos.-
# Doctrina Nacional:
Son los principios fundamentales y métodos adoptados por
un Estado para guiar el planeamiento y ejecución de acciones tendientes a
lograr sus objetivos.-
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CAPÍTULO III
LA POLÍTICA INTERNACIONAL
A.- Generalidades.
Las " políticas de disgregación " generaron los " Estados Vasallos "
como fórmula de tránsito a la plena independencia.-
Las " políticas de reparto de poder " generaron la institución del
condominio y así sucesivamente.- Puede afirmarse que a todo sistema político
corresponde un tipo de institución jurídica que le es propio.-
El principio " pacta sunt servanda" ( los pactos deben ser cumplidos )
representa una de las contribuciones más valiosas del Derecho Internacional
para que las relaciones entre los pueblos se mantengan dentro de normas
dignas y civilizadas.-
Uno de los precursores del método científico, Quincy Wrigth, dice: " las
tablas de valores morales de los principales países del mundo difieren y
son, en grado diverso, recíprocamente incompatibles. Al acentuarse las
vinculaciones materiales de todo tipo entre las regiones más apartadas de la
tierra, esas incompatibilidades han agudizado los conflictos".-
Pero por otra parte, de esos mismos contactos ha resultado una especie
de cultura universal que se manifiesta:
# por la difusión, a través del mundo entero, de las técnicas y valores de
las culturas de mayor entidad.
# por la universalización de ciertos cánones literarios y artísticos.
# por la proliferación de Organismos Internacionales.
# por los intentos de los pensadores de las culturas principales para
formular una tabla de valores comunes a la emergente cultura universal.-
CAPÍTULO IV
A.- GENERALIDADES
C. ANTECEDENTES HISTÓRlCOS:
que hace Tucídides de las negociaciones entre Atenas y Esparta poco antes
de iniciarse las guerras del Peloponeso, constituye un testimonio vívido del
grado de adelanto que había alcanzado la diplomacia entre los griegos. En
esas negociaciones, realizadas en Esparta, los delegados atenienses pudieron
exponer públicamente y con toda amplitud los puntos de vista de su gobierno, y
una vez fracasadas las tentativas de arreglo pacífico, se les permitió regresar a
su patria sin sufrir la menor molestia.
Los romanos, en cambio, no practicaron las artes diplomáticas con mucha
asiduidad. La vocación imperialista del pueblo romano no lo movía a resolver
sus conflictos por medio de la negociación, sino por medio de la guerra. Para
Roma no había alternativas respecto de los enemigos fuera de la sumisión o
del aniquilamiento. En compensación, ese pueblo de juristas estableció
normas legales que definían la situación jurídica de los extranjeros dentro del
Estado romano y fijaban sus obligaciones y derechos.
D. LA DIPLOMACIA CLÁSICA
Para Harold Nicolson, los tres elementos capitales que han contribuído a
la creación de la diplomacia contemporánea son: el sentido creciente de la
comunidad internacional, la valoración cada vez mayor del factor opinión
pública y la aceleración de las comunicaciones.
Se trata, tal vez, del rasgo que más nítidamente distingue a la diplomacia
contemporánea de su predecesora, la diplomacia clásica.
Entre las leyendas que rodean a esta peculiar profesión figura la de que el
diplomático debe ser, en principio, y casi siempre lo es en los hechos, un
personaje mendaz, ejercitado en el arte del disimulo e incapaz de expresarse
con franqueza. Así lo muestra una conocida definición: "El diplomático es un
hombre honesto enviado por su gobierno al extranjero para mentir en provecho
de su país".
Que haya diplomáticos a los cuales esa leyenda convenga, no cabe
negarlo. Pero no es cierto que la mejor diplomacia consista en la ocultación o
deformación sistemática de la verdad. Creemos, por el contrario, que la
veracidad en lo esencial constituye una virtud capital del diplomático y una
condición indispensable para el buen éxito de su misión.
Decimos "en lo esencial", porque es bastante obvio que no siempre el
diplomático, cuando trata con la contraparte, puede decir todo lo que sabe. La
verdad cruda resulta muchas veces perjudicial para los intereses que le han
sido confiados y hasta es posible que en determinados casos llegue a resultar
ofensiva. Lo que se quiere significar cuando se dice que el diplomático debe
ser veraz, es que no debe falsificar los hechos, ni inducir deliberadamente a
error al interlocutor, ni hacer promesas que sabe que no han de ser cumplidas.
La otra condición que cabría exigir al diplomático (entre las muchas más
que deben adornarlo) es su comprensión íntima del país donde sirve.
Comprensión no es exactamente igual a conocimiento, porque se puede
conocer algo y no comprenderlo. Pero para conocer a un país hay que
empezar por conocerlo; por recorrerle físicamente; si es posible por aprender
su idioma; por vincularse a sus diversos estratos sociales; por apreciar sus
méritos y discernir sus fallas. El gran riesgo que acecha a los diplomáticos en
el exterior es la incomprensión, y ésta se traduce, las más de las veces, en
aversión insuperable. Esta aversión, que por lo demás no tarda en ser
advertida, conspira contra la eficacia de la acción del diplomático, pues lo aísla
de la comunidad y lo priva de medios de información y de penetración en el
medio en que actúa.
constituye otra modalidad del lenguaje diplomático. No nos referimos tan sólo
a las palabras o expresiones técnicas, tales como agreement o modus vivendi
,sino a los giros convencionales que se usan en los tratados, en las
comunicaciones de gobierno a gobierno, en los discursos protocolares y en las
demás formas de trato entre los Estados.
Una de las manifestaciones más ostensibles del tránsito de la diplomacia
clásica a la diplomacia actual ha sido la sustitución de muchos de los
eufemismos y giros propios del lenguaje diplomático por otro más directo, y a
menudo más crudo. La guerra fría ha dado pie a una verdadera irrupción de
vulgaridad en el otrora pulcro y atildado idioma de las Cancillerías. Cabe
reconocer que si los comunistas comenzaron con este menosprecio por las
formas verbales, muchas veces los occidentales no quedaron a la zaga. La
diplomacia parlamentaria de los organismos internacionales fue, desde ese
punto de vista, una escuela de agresividad y de malos modales. Todavía está
presente en la memoria de quienes contemplaron la escena el gesto de
Khrushchev interrumpiendo al Primer Ministro inglés Harold Macmillan,
mediante el procedimiento de sacarse el zapato y golpear violentamente con él
su pupitre en la Asamblea de las Naciones Unidas.
Por anacrónico y rebuscado que pueda parecer a los profanos en
nuestra época, el lenguaje diplomático representa un auxiliar valioso para
promover la convivencia internacional. La suavidad de las expresiones no
engaña al interlocutor sobre el verdadero sentido que éstas encierran, pero
atenúan la dureza de los choques y no exacerba a la opinión pública. Es de
desear, por tanto, que en este punto al menos se recupere algo del afinamiento
verbal logrado por la diplomacia clásica.
La diplomacia tradicional no sólo tuvo un lenguaje propio sino también
un idioma común. Este idioma varió según las épocas, pero siempre
representó el vehículo para el diálogo entre los países de lenguas distintas.
Desde los orígenes de la diplomacia clásica y hasta comienzos del siglo
XVIII, el idioma diplomático fue el latín, la lengua culta del mundo occidental.
En latín se redactaban los tratados, se comunicaban entre sí las Cancillerías,
conversaban los embajadores, tanto entre sí como con los representantes de
las potencias extranjeras. En latín fueron escritas todas las obras primas del
derecho internacional.
En tercer lugar, las reuniones a tan alto nivel suelen carecer de la debida
preparación técnica. La exclusión de los diplomáticos profesionales, la
frecuente carencia de un orden del día ajustado y preciso, coadyuvan a la
confusión de los debates. En algunos casos extremos los gobernantes se
apartan de las líneas centrales de la política de sus países y deben, luego,
desdecirse de sus promesas y compromisos.
No hay duda que esas críticas son exactas. Pero como el propio autor de
ellas lo señala, la diplomacia directa y, muy especialmente, la que se limita a
dos países, puede ser útil para momentos difíciles. El encuentro entre los
Presidentes Errázuriz de Chile y Roca de la Argentina, celebrado en el estrecho
de Magallanes en 1899, contribuyó eficazmente a preservar la paz entre ambos
países.
2) La diplomacia bilateral
Aun cuando dos o más Estados consideren del caso plantear un asunto de
interés común para ellos ante otro Estado, no es habitual que la gestión se
haga en forma conjunta, pues las demandas colectivas son consideradas por lo
general inamistosas y sólo se practican en situaciones de gran tensión. Ello
ocurrió en 1902 cuando Alemania, Gran Bretaña e Italia actuaron
conjuntamente ante el gobierno de Venezuela mediante una operación naval.
De este hecho, justamente censurado por la opinión pública internacional,
surgió la doctrina Drago sobre cobro compulsivo de las deuda públicas.
LOS PROCEDIMIENTOS DE LA
POLITICA INTERNACIONAL
A.- GENERALIDADES
Otra fórmula para evitar que una de las partes en una negociación
internacional resulte perjudicada por el problema de la sede consiste en
alternar las reuniones, celebrándolas de modo fragmentado en uno y otro de
los Estados que negocian. Las negociaciones entre la Argentina y Chile sobre
las cuestiones de límites planteadas entre ambos países en el extremo sur
tuvieron lugar, durante el año 1977, alternativamente en las respectivas
capitales.
La negociación internacional puede versar sobre los temas más dispares,
desde los más trascendentes hasta los más baladíes. Pero en todos los casos,
las pautas que acabamos de indicar constituyen, entre otras, elementos que
deben ser tenidos en cuenta por quienes tienen a su cargo la delicada tarea de
representar a sus países frente a las potencias extranjeras, en asuntos en que
está en juego algún asunto de interés nacional.
2.- El arbitraje
Tanto los poderes del árbitro como la materia sobre la cual debe versar el
laudo y otros aspectos secundarios vinculados al asunto, están establecidos
en un instrumento llamado "compromiso arbitral". En él, las Partes pueden
determinar las normas del derecho internacional que deben aplicar los árbitros
para el caso concreto, e incluso pueden determinar que su fallo se fundamente
en la equidad. ( Solo pueden fallar los árbitros por equidad si las Partes así lo
autorizan). También es facultativo para las partes dar o no al árbitro un plazo
para pronunciar el laudo.
Para concluir con este tema, diremos que el arbitraje ha sido uno de los
más nobles y eficaces instrumentos para la solución pacífica de los conflictos
internacionales. Gracias a él ha sido posible evitar muchas guerras y, en
general, las decisiones tomadas por los árbitros han sido justas y equitativas.
En América Latina, particularmente, el arbitraje ha permitido resolver muchos
de los intrincados problemas territoriales y de límites, producidos con el
surgimiento de las antiguas posesiones de España y Portugal a la vida
independiente.
F.- LA CONSULTA
1.- La propaganda
Los métodos coercitivos son aquellos actos mediante los cuales los
Estados procuran obtener de otros Estados que se allanen a sus
exigencias, en virtud del temor o de los perjuicios que tales actos les
provoquen. En este acápite nos limitaremos a considerar los procedimientos
coercitivos no violentos (ya mencionados más arriba en este capítulo), dejando
para la parte final el estudio de los dos procedimientos coercitivos mediante el
uso de la fuerza armada: la intervención y la guerra.
Los procedimientos coercitivos, como dijimos antes, son hoy sólo
lícitos cuando están decretados por una organización internacional y
asumen el carácter de sanciones. Las Cartas de la ONU y de la OEA
enumeran una serie de procedimientos coercitivos que tomaremos como punto
de referencia para nuestro examen.
5.- Boycott:
6.- Represalias:
K.- LA GUERRA
"Por primera vez, pues, en la historia del género humano", dice Mario
Amadeo en 1978,"se está frente a la perspectiva de que la guerra tenga como
resultado el aniquilamiento de los contendores y, también, de quienes se han
mantenido ajenos a la lucha. La trágica realidad de ese riesgo, representa hoy
la única esperanza de paz y de salvación Todo indica que los que tienen en su
mano la facultad de provocar la destrucción integral han tomado conciencia de
ese peligro. Falta saber si el temor a perderlo todo será más fuerte que la
tendencia de las sociedades humanas a enfrentarse violentamente y a usar de
todos los medios de destrucción a su alcance. Esta es la incógnita que sólo el
transcurso del tiempo habrá de develar". A esta incógnita, nosotros podemos
aventurar una respuesta, que nunca será definitiva por depender de la
naturaleza del Hombre y de cada situación. La Guerra del Golfo nos dejó la
experiencia de una fuerza multinacional, formada por países amigos, contra un
Estado agresor, donde la efectividad de las acciones diplomáticas logró los
apoyos adecuados y/o neutralizó los posibles adversarios, obteniendo,
también, una opinión pública favorable. Inclusive podemos apreciar cómo este
conflicto, pudiendo haber llegado a las últimas consecuencias para con las
tropas de Iraq, no fue una guerra de destrucción total y masiva, sino de
selección de blancos, permitiéndole al enemigo replegar sus medios cuando se
sintió derrotado.
Signo tenue pero auspicioso de que el primero de los sentimientos
arriba mencionados sigue prevaleciendo, es la firma de acuerdos durante la
década del ´70, entre los Estados Unidos y la URSS, para evitar la guerra por
sorpresa o error de cálculo.
Este Derecho, que involucra al mundo entero, hace que nos detengamos
para diferenciar el derecho a hacer la guerra y el derecho en la guerra.- Como
expresamos anteriormente, la definición de guerra dada por Clausewitz es
mucho más que "la continuación de la diplomacia por otros medios". La guerra
es uno de los grandes misterios de la naturaleza humana, y un acontecimiento
capital de las relaciones internacionales, pues es la lucha armada entre dos o
más Estados mediante la cual una parte procura destruir el poder del
adversario e imponerle su voluntad. Conceptualizando esta idea para
diferenciar "el derecho a..." y "el Derecho en..." podemos afirmar, refiriéndonos
al primero, que ningún Estado está a salvo de tener que recurrir a los medios
bélicos si él se encuentra en la encrucijada de tener que salvaguardar sus más
altos intereses nacionales como es el de la defensa de su integridad territorial
ante la usurpación, invasión u ocupación, entre otros; ello será el Deber de todo
ciudadano, más allá de las posibilidades físicas, lo moral tomará
preponderancia.
En cambio, cuando expresamos "el Derecho en ...", nos referimos a
todas las normas de derecho positivo creadas para proteger al Hombre y
su cultura, estableciéndose códigos que limitan la barbarie, inclusive la
prevalecencia de un poderoso sobre un débil relativamente,
exponiéndose el transgresor al escarnio público y al juzgamiento
internacional.
Mucho se ha escrito sobre los Derechos en la Guerra, también muchos son
los Tratados que ha firmado la comunidad internacional al respecto y es por
ello que periódicamente se realizan diversos simposios o cursos en diferentes
países para trabajar, pensar y difundir el Derecho Internacional de los
Conflictos Armados ( D.I.C.A.).-
A estos efectos, se llevó a cabo en San Remo, Italia, en Marzo 2000, el 82º
curso sobre el D.I.C.A., con el objetivo general de informar en el ámbito de la
responsabilidad militar acerca de que su actuación debe realizarse en
conformidad con los principios y las normas del Derecho de los Conflictos
Armados.
No nos extenderemos más en este análisis por estar fuera del tema central
de este trabajo, máxime cuando él, por él mismo, ameritaría su propio estudio,
pero es de pertinencia resaltar, por las razones antes expresadas, la
importancia que se le brinda a nivel mundial y, existiendo múltiples Tratados
escritos y que son de recibo en el plano internacional, solo restaría conjuntar
todo ese articulado y codificarlo, tal cual hizo Napoleón con las leyes civiles.-
A.- Generalidades:
" Las viejas amenazas para nuestro país estuvieron siempre ligadas a dos
posibilidades:
• Agresión externa de un país vecino
• Agresión interna, con o sin apoyo del exterior "
y dice que ni los cambios habidos en el contexto internacional, ni la
percepción de algunos en cuanto a que hay un clima favorable para las
buenas relaciones entre los Estados, permiten asegurar que nuestro país
pueda descartar por la situación coyuntural actual, cualquier conflicto con los
países vecinos. Continúa diciendo el autor: " esta afirmación es coherente
con nuestro concepto de Defensa Nacional que garantiza contra todas las
formas de agresión ( y nosotros agregamos los Arts. 2, 7, 168 -inc.1, de la
Constitución de la República), y con la misión que la ley establece a las FF.AA
de defender la independencia, la paz de la República, su integridad
territorial...-
En cuanto a las posibilidades de conflicto interno, continúa diciendo, como
el que nuestro país vivió en la década del ´70, con grupos que, creyendo en la
existencia de condiciones objetivas tales como las de un nivel popular
suficientemente concientizado ideológicamente y condiciones de pobreza, le
permitirían alcanzar el poder mediante el método de la lucha armada. Estas
posibilidades de conflicto, no son de desechar por cuanto aún persisten
núcleos que hacen la apología histórica de aquella agresión, aunque hoy les
falte sustento material del exterior; pero nosotros agregamos que aún
tampoco han renegado al uso de las armas como instrumento para alcanzar el
poder; inclusive nuestra Carta Fundamental lo prevé en el Art.80 - inc. 6,
donde se establece la suspensión de la ciudadanía por formar parte de
organizaciones sociales o políticas que, por medio de la violencia, o de
propaganda que incitase a la violencia, tiendan a destruir las bases
fundamentales de la nacionalidad.
Por estas razones no nos permitimos descartar definitivamente esta
amenaza.
Es así que vemos como uno de los esfuerzos posibles el de crear una
corriente de opinión, como lo está realizando el Sr. Presidente de la República,
quien en diferentes ámbitos nacionales: Cámara del Comercio, Sociedad Rural;
o en lo internacional, por ejemplo en la reciente Cumbre de Presidentes en
Cartagena - Colombia; para promover la búsqueda de la eliminación de las
barreras comerciales en el exterior, como lo son los subsidios a la producción
que establecen una competencia desleal con nuestros productores y sus
productos, que coartan la creación o el ensanchamiento de las oportunidades
de trabajo de nuestro país, fundamentalmente para abrir las puertas al mercado
exterior.
Todo esto lleva a que nuestra diplomacia tenga una muy buena
representación, que nuestro pueblo se merece y que exigen los intereses de
nuestro país. Hay que ser previsores en el trazado de los caminos de este
nuevo milenio y a medida que crezca el flujo de personas, información,
tecnología, dinero y comercio a través de las fronteras, la frontera entre la
política interna y exterior se entrelazarán, aún más, permitiendo la
incrementación de la seguridad y el bienestar interno participando activamente
en un mundo que trasciende fronteras.
La revolución tecnológica enriquece nuestras vidas, pero también facilita a
terroristas, narcotraficantes y criminales desafiar la seguridad de nuestros
ciudadanos y la seguridad de nuestras fronteras en nuevas formas. Los
problemas transnacionales como el consumo de los recursos, (la toma de
agua de manera furtiva, de nuestros cursos fluviales, por parte de particulares
brasileños, es un ejemplo en nuestra frontera con ese Estado.) el rápido
crecimiento demográfico, la degradación ambiental, la migración en general, la
futura escasez de agua, el SIDA, recientemente catalogado como amenaza por
EE.UU, y el Terrorismo Informático, mencionada, en el corriente año 2000, por
el Sr. Ministro de Defensa Nacional de nuestro país, son nuevas amenazas
que consideramos agregar nosotros, y que obligan a que nuestra estrategia
deba ser pensada con especial profesionalismo y profundidad.
EL USO DE LA FUERZA
EN LAS
RELACIONES INTERNACIONALES
Con motivo del bloqueo de las costas de Venezuela, realizado en 1902 por
Alemania, Gran Bretaña e Italia, el Ministro de Relaciones Exteriores de la
República Argentina, Dr. José M. Drago, sostuvo el principio de que el
incumplimiento por un Estado de su deuda pública no justifica el empleo de la
fuerza armada en su contra. En la Segunda Conferencia de Paz de la Haya (
1907) se suscribió la llamada Convención Drago - Porter, la cual, en parte
recoge esta doctrina. En esta Convención, las partes contratantes se obligan a
no recurrir a la fuerza armada para el cobro de deudas contractuales debidas
por el gobierno de un país a los nacionales de otro, excepto si el gobierno
deudor rechaza el arbitraje o no cumple la sentencia arbitral dictada.
• I.- Convenio para Aliviar la Suerte de los Heridos y los Enfermos de las
Fuerzas Armadas en Campaña.
• II.- Convenio para Aliviar la Suerte de los Heridos, Enfermos y Náufragos de
las Fuerzas Armadas en el Mar.
• III.- Convenio sobre el Trato a los Prisioneros de Guerra.
• IV.- Convenio sobre la Protección de las Personas Civiles y sus bienes, en
Tiempos de Guerra.
Los cuatro Convenios de Ginebra de 1949 dan expresión concreta a
principios generales de derecho humanitario que son obligatorios como
tales incluso para los Estados que no son partes en dichos Convenios.
Es por eso que una cláusula común a todos ellos dispone que la denuncia por
un Estado a alguno de los Convenios "no tendrá efecto alguno sobre las
obligaciones que las Partes contendientes han de cumplir en virtud de los
principios de derecho de gentes, tal y como resultan de los usos establecidos
entre naciones civilizadas, de las leyes de humanidad y de las exigencias a la
conciencia pública".
SOLUCIÓN DE CONTROVERSIAS:
Por lo tanto, podemos apreciar que existe gran margen de libertad para
la elección de la vía a seguir para la solución de los conflictos. La única
condición es que esa vía sea pacífica.
3.- Arreglo de las controversias por medios pacíficos para no poner en peligro
la paz y la seguridad internacionales ni la justicia.
Art. 33 - 1.- Las Partes de una controversia cuya continuación sea susceptible
de poner en peligro el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales
tratarán de buscar la solución, ante todo, mediante:
♦ La negociación
• La investigación y la mediación
• La conciliación
• El arbitraje
• El arreglo judicial
• El recurso a organismos o acuerdos regionales
• U otros medios pacíficos de su elección.-
Art. 35 - 1 .- Todo Miembro de las Naciones Unidas podrá llevar cualquier
controversia, o cualquier situación susceptible de conducir a fricción
internacional o dar origen a una controversia, a la atención del Consejo de
Seguridad o de la Asamblea General.
Art. 42 .- Caso de las medidas del Art. 41, puedan ser inadecuadas o han
demostrado serlo, el Consejo de Seguridad podrá ejercer por medio de las
fuerzas armadas, la acción necesaria para mantener o restablecer la paz y la
seguridad internacionales. Tal acción podrá comprender:
• Demostraciones
• Bloqueos
• Otras operaciones.
Art. 103.- En caso de conflicto entre las obligaciones contraídas por los
miembros de las NN.UU. en virtud de la presente Carta y sus obligaciones
contraídas en virtud de cualquier otro convenio internacional, prevalecerán las
obligaciones impuestas por la presente Carta.-
Los dos rasgos más definidamente constitucionales de la Carta son los arts.103
y 108. El primero de éstos, el art. 103, establece lo que, glosando una
expresión de Hauriou, cabría llamar "la super-legalidad constitucional" de este
instrumento internacional.
Dice el art. 103: "en caso de conflicto entre las obligaciones contraídas
por los Miembros de las Naciones Unidas en virtud de la presente Carta y sus
obligaciones contraídas en virtud de cualquier otro convenio internacional,
prevalecerán las obligaciones impuestas por la presente Carta".
La razón fundamental y determinante de la inclusión de este precepto en
la Carta, es que ella prevé la adopción de sanciones de orden económico
principalmente, en caso de amenazas, quebrantamientos de la paz y actos de
agresión. Esas sanciones pueden, según lo dice expresamente el art. 41,
comprender la interrupción parcial o total de relaciones económicas y de
comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales, telegráficas,
radioeléctricas y otros medios de comunicación. La aplicación de estas
medidas coercitivas puede colocar a los Miembros en la obligación de dejar de
cumplir, y aún de infringir, los acuerdos económicos y comerciales, o las
convenciones generales en materia de comunicaciones, por ejemplo, que
hayan celebrado con el Estado sancionado.
En previsión de éstas y de otras contingencias similares fue incorporado
el art. 103 de la Carta.
Este precepto supone una alteración radical y casi revolucionaria de los
principios que rigen en el Derecho internacional común la cuestión de los
tratados sucesivos incompatibles entre sí. Según estas normas generales,
cuando el conflicto se produce entre dos tratados incompatibles cuyas partes
son idénticas, se aplica la regla "ley posterior, deroga la anterior". Cuando el
conflicto se produce entre dos tratados cuyas partes no coinciden en forma
total, se aplica la regla opuesta "contrato primero, deroga el posterior". "Un
tratado es nulo si su ejecución implica el quebrantamiento de una obligación
convencional previamente asumida por una o más de las partes contratantes".
0, como ya escribía Vattel, "si existe un conflicto entre dos tratados hechos con
dos diferentes Estados, el tratado anterior prevalece".
PRINCIPIOS:
• Derecho Internacional es la norma
• Orden Internacional es: respeto por las soberanías, independencia, y
personalidad de los Estados; así como el cumplimiento de las
obligaciones de los Tratados.
• La buena fe debe regir las relaciones entre los Estados
• Solidaridad.
• Libre elección de sistema político, económico y social.
• No intervención en asuntos internos de otro Estado.
• Condena a la agresión.
• Agresión a un Estado, es agresión a todos los demás.
• Solución de las controversias por medios pacíficos.
• Cooperación económica.
• Derechos fundamentales de la persona sin distinción de raza,
nacionalidad, credo o sexo.
• Respeto a la cultura de cada Nación.
• Educación debe ser de justicia, libertad y paz.
Art. 3º - 1.- Las Altas Partes Contratantes convienen que un ataque armado
por parte de cualquier Estado contra un Estado Americano, será
considerado como un ataque contra todos los Estados Americanos, y en
consecuencia, cada una de dichas Partes Contratantes se compromete a
ayudar a hacer frente al ataque, en ejercicio del derecho inmanente de legítima
defensa individual o colectiva que reconoce el Art. 51 de la Carta de las
NN.UU.-
Art. 4º.- Límites de la región ( TIAR ).-
Art. 5º.- Envío de los antecedentes de controversias al Consejo de Seguridad .-
Cap. I - Art. 1º.- Las Altas Partes Contratantes, reafirmando solemnemente sus
compromisos contraídos por anteriores convenciones y declaraciones
internacionales así como por la Carta de las NN.UU., convienen en abstenerse
de la amenaza, del uso de la fuerza o de cualquier otro medio de coacción para
el arreglo de sus controversias y en recurrir en todo tiempo a procedimientos
pacíficos.
Procedimiento Judicial:
Cap. IV - Art. 31º.- De conformidad con el Inc. 2º del Art. 36 del Estatuto de la
Corte Internacional de Justicia, las Altas Partes Contratantes declaran que
reconocen respecto a cualquier otro Estado Americano como obligatoria ipso
facto, sin necesidad de ningún convenio especial mientras esté vigente el
presente Tratado, la jurisdicción de la expresada Corte en todas las
controversias de orden jurídico que surjan entre ellas y que versen sobre:
- La interpretación de un tratado.
- Cualquier cuestión de Derecho Internacional.
- La existencia de todo hecho que, si fuere establecido, constituiría la
violación de una obligación internacional.
- La naturaleza o extensión de la reparación que ha de hacerse por el
quebrantamiento de una obligación internacional.
Procedimiento de arbitraje:
Opiniones consultivas:
Cap. VII - Art. 51º.- Las Partes interesadas en la solución de una controversia
podrán, de común acuerdo, pedir a la asamblea general o al consejo de
Seguridad de las NN.UU. que soliciten de la Corte Internacional de Justicia
opiniones consultivas sobre cualquier gestión jurídica.
CAPÍTULO IX
D.- RESUMEN
La Diplomacia: Directa
Indirecta
Multilateral
# Violentos - La intervención
- La guerra
e.- La intervención:
- Individual
- Colectiva
f.- La guerra
Este sería un tema para profundizar, pero para finalizar , debemos decir
que si se pensó en humanizar los conflictos armados , para librar de la muerte
a la humanidad, hoy ésta está sufriendo la muerte por inanición y
enfermedades, y éstas a su vez, constituídas en causales de nuevos conflictos.
Estamos en un momento justo para no dilatar más, para que los
Tratadistas, en representación de los Estados del Mundo, piensen La Segunda
Carta de las Naciones Unidas para humanizar la Cuarta Guerra Mundial, la
Guerra Económica, y como un ejemplo de que ello es posible , la Humanidad
cuenta con el Tratado Antártico, que así lo demuestra.-
BIBLIOGRAFÍA