Professional Documents
Culture Documents
• Más de 40%
• De 5 a 40%
• Menos de 5%
Costa Rica, Argentina, Canadá, Guyana, Brasil, Colombia, Jamaica, Paraguay, Estados Unidos,
Dominica, Venezuela
Fuentes: Reports on the Evaluation of the International Decade of the Indigenous, Peoples of the World, PAHO, 2004.
Hall G, Patrinos AH. Indigenous Peoples, Poverty and Human Development in Latin America: 1994–2004.
Washington,DC: World Bank, 2005. Montenegro R, Stephens C. Indigenous health in Latin America and the Caribbean
[Indigenous Health 2]. Lancet 2006; 367:1859–6
A pesar de su presencia, la población indígena presentan una gran vulnerabilidad producto de las
condiciones de inequidad y contantes violaciones de sus derechos humanos, sociales, políticos y
económicos. Esto se traduce en pobreza y precariedades condiciones de vida, estado de salud y
acceso a servicios sanitarios.
En Bolivia y Guatemala, por ejemplo, más de la mitad de la población total es pobre, pero
prácticamente tres cuartas partes de la población indígena es pobre. A su vez, del total de hogares
pobres en Perú, 43% son indígenas (OPS ; 2007)
A su vez, el Banco Interamericano de Desarrollo (Deruyttere, 2017), estimó que, hasta una cuarta
parte de la diferencia en los niveles de ingreso se puede atribuir al sólo hecho de pertenecer a un
grupo étnico indígena o afrolatino.
A lo largo de la historia las poblaciones indígenas han padecido mayores tasas de mortalidad
materna e infantil, desnutrición y enfermedades infecciosas que el resto de la población. La razón
de mortalidad materna en Guatemala es tres veces superior (211 por 100.000 nacidos vivos) a la
de madres no indígenas (70 por 100.000 nacidos vivos), y la más alta de la región de América
Latina (año 2000), En Bolivia, la tasa de mortalidad infantil promedio es de 102 por 1.000 nacidos
vivos en 51 municipios rurales con más de 50% de mujeres indígenas monolingües, el doble de la
población general. En Argentina el 80% de los niños desnutridos son indígenas y con alta tasas de
contagio de parásitos asociados principalmente al saneamiento ambiental.
Pero así como en algunos países no hay datos respecto de indígenas o afrodescendientes, porque
no se ha incluido la variable etnia o raza, en aquellos que si tiene incluido los antecedentes, los
datos no siempre están desagregados por género (OPS, 2007)
En Bolivia, la tasa de mortalidad infantil promedio es de 102 por 1.000 nacidos vivos en 51
municipios rurales con más de 50% de mujeres indígenas monolingües, o de más del doble al
compararla con la correspondiente a la población general (54 por 1.000 nacidos vivos) (OPS,2007)
Las tasas de analfabetismo son más altas en mujeres que en hombres indígenas y más altas que
en población no ética; en Perú, las mujeres indígenas jefas de hogar tienen 4,6 menos años de
escolaridad que las mujeres no indígenas (Lopéz, 2011)
Un estudio realizado en distintos municipios en México, que comparó los municipios indígenas con
los no indígenas, encontró que, para el período 1990–1996, los indígenas vivían 64 años y los no
indígenas vivían 68 años (OPS, 2007)
La cobertura de salud para los pueblos indígenas es mucho menor que para las personas no
indígenas. En Bolivia, donde las tasas de cobertura de salud son bajas, los indígenas presentan
tasas de 10% de cobertura pública de salud y 2% de acceso a la cobertura privada de salud. En
México, cerca de un 45% de la población tiene cobertura de salud, mientras que solamente 18%
de la población indígena lo tiene (OPS, 2007)
Respecto del consumo de alcohol en población indígena, un estudio realizado en 2000 en diversas
comunidades aymarás del altiplano de Puno y en comunidades shipibo del Amazonas, se encontró
que el consumo de alcohol predominaba entre los hombres y que se asociaba con conductas
agresivas hacia las esposas, los hijos y otros parientes cercanos. Según OPS (2007) múltiples
informes indican un aumento en el consumo de alcohol en la población indígena de las zonas
urbanas.
En VIH Sida y etnia, hay datos por país , más que por región, por ejemplo la tasa acumulada en los
garífunas en Honduras es casi 15 veces superior a la nacional y más de 8% son seropositivos al VIH,
lo cual representa una cifra cuatro veces superior al promedio nacional
La población que se considera indígenas en Chile paso del 4,6% al 9% (INE, 2017), siendo el pueblo
mapuche, quien representa el 87,3% de todos los indígenas (INE 2002- 2017). Los indígenas en
Chile, al igual que en la mayoría de los países de Las Américas tiene el porcentaje más alto en
pobreza y extrema pobreza que los no indígenas (INE, 2017). Las causas de muertes por
enfermedades del sistema circulatorio en el total de la población indígena masculina ha alcanzado
una tasa de 247,8 por 100.000, mientras en población no indígena es de 172,4 por 100000
habitantes, en términos de riesgo relativo, esto implica que los hombres indígenas tienen un 40%
más riesgo de morir por esta causa que sus congéneres no indígenas (MINSAL, 2017).
La mortalidad por causa cerebro vascular es de 80,1 en población indígena y 46,8 por 100000
habitantes en población no indígena, las muertes por neoplasia son 193,4 en población indígena
y en no indígena por 148,7 por 100.000 habitantes y las muertes por causas externas son 148,7 en
población indígena y 50,8 en población no indígena por 100.000 habitantes . Es decir estas 4
causas de mortalidad son mayor en población indígena que no indigena. Además, según el
Ministerio de Salud de Chile: “existen antecedentes certeros sobre la prevalencia de
enfermedades fuertemente asociadas a determinantes sociales de la salud que afectan
especialmente a indígenas tales como la tuberculosis, alcoholismo, las enfermedades parasitarias
e infecciosas, además de los problemas asociados al trabajo por las deficientes condiciones en que
desarrollan su actividad laboral y problemas de salud mental, expresado en altas tasas de suicidio”
(MINSAL, 2017)
En le siguiente cuadro podemos observar las inequidades que se presentan en los pasises que
adhieren a los objetivos de Desarrollo del Milenio
(ESTE CUADRO DEBO RECREARLO)
Demostrando la gran inequidad que sufren las poblaciones indígenas en el acceso a la salud y en
su propio estado de salud y calidad de vida.
Una situación de gran vulnerabilidad viven los afrodescendientes en América del Sur, similar a la
que sufren los pueblos indígenas. En el Ecuador, el porcentaje de la población afrodescendiente
pobre se eleva a 52%, semejante a los niveles de pobreza de los pueblos indígenas, en Brasil los
afredescendiente representan el 52% de los pobres, frente al 26% del resto de la población. Los
hombres afrodescendientes tiene menor educación formal que las mujeres afrodescendientes y
menos que el resto de la población, un 78% de los varones completo 6 años de educación, frente
al 80% de la mujeres y al 87% del resto del país. En Brasil se observa una situación similar, pero
con un brecha mayor entre hombres y mujeres, con un 56,2% de los varones y 66% de las mujeres
afrodescendientes con seis años de estudio, frente a 80,9% y 85,2% respectivamente del resto de
la población (Lopez, 2011)
Ante el contagio de VIH, en Honduras, más de 8% de los garífunas adultos son VIH positivos frente
a 2% del promedio nacional y la tasa acumulativa de casos de VIH es casi 15 veces la tasa nacional.
En Brasil con la incorporación de la terapia retroviral un una fuerte caída en la mortalidad de la
población blanca masculina contagiada, pero no ocurrió dicho decremento en la población
masculina afrodescendiente.
Bibliografia