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Garantizar que las emergencias que pueden ocurrir en las instalaciones, sean
atendidas y controladas adecuadamente para asegurar la continuidad de las operaciones y
minimizar el riesgo de accidentes laborales.
OBJETIVOS ESPECIFICOS.
GENERALIDADES DE LA EMPRESA
5.- BAÑO
6.- AREA DE RECEPCION Y DESPACHO: (una computadora, un escritorio, un archivo, un
aire acondicionado, facturas, carpetas y papelería en general)
CLASES DE FUEGOS.
Conocer bien la clase de fuego, nos ayudar a elegir el procedimiento más apropiado para
apagarlo.
Fuegos de la clase A.- Son los que se producen al arder los combustibles sólidos comunes,
como maderas, papeles, corcho, etc.
Fuegos de la clase B.- Son los que se producen al arder combustibles líquidos, como
gasolina, gasóleo, alcohol, disolventes etc.
Fuegos de la clase C.- Son los que se producen al arder gases como butano, propano,
acetileno, etc.
Fuegos de la clase D.- Llamados también fuegos metálicos, son los fuegos ocasionados con
metales como el sodio, magnesio, etc.
Fuegos de la clase E.- Son aquellos que se producen en instalaciones o equipos eléctricos o
en sus proximidades.
Toda las industrias debe inspeccionar su área de trabajo para detectar posibles
fuentes de ignición y velar por mantener en buen estado los materiales y equipos para el
combate de incendios.
Los extintores son aparatos portátiles, los pequeños o transportables sobre ruedas los
mayores, que tienen como finalidad apagar conatos de incendios, o evitar su propagación,
permitiendo así la llegada de refuerzos con medios de extinción más potentes.
Todo el mundo debiera estar adiestrado al uso de extintores, ya que en los primeros
momentos de un incendio, un extintor, suele ser suficiente para reducir y extinguir un fuego,
siempre que la persona que lo haga, conozca el manejo apropiado del extintor, en cada una
de las posible emergencias ya que la persona que carece de los conocimientos elementales
puede llegar a ponerse en peligro, o poner en peligro a otras personas.
SALIDAS DE EMERGENCIA / RUTAS DE ESCAPE.
Para determinar lo adecuado de las salidas de los edificios, los siguientes principios y
disposiciones deben considerarse como primordiales.
La necesidad de salidas de emergencia depende de la construcción del edificio, de los
riesgos de incendio, de los materiales almacenados o de los procesos a los que se les somete,
de la protección contra incendio que se proporciona y de las características de los ocupantes.
Sin embargo, en la práctica no conviene variar mucho los requisitos de salida. En general
el mejor sistema que se puede seguir es instalar suficientes salidas para hacer frente en forma
adecuada a la peor combinación de circunstancias adversas que puede surgir.
Es fundamental, para la seguridad, la instalación de dos salidas, en forma tal que, sea
muy improbable la obstrucción de las dos al mismo tiempo. Este principio debe desatarse en
los lugares en que se congrega gran número de personas, en cualquier propósito.
Las salidas deben ser accesibles y no estar obstruidas, y el camino de escape no debe
prestarse a confusiones y debe estar bien iluminado.
Todas las puertas de salida deben abrirse hacia fuera, con excepción de las puertas
corredizas.