Mons.

Conrado Mundaca Peralta

Vida y Obra
Testimonios

2017
Mons. CONRADO MUNDACA PERALTA
Vida y Obra
Testimonios

1era. Edición
2017

José Julio Estela Castro

Compilador

Comité de Edición y Gestión

Ginés Cabanillas Angulo
Segundo V. Portal Chávez

Edición y Produción General

Henry Buezo de Manzanedo V.
Black Line Studios Sac.

Auspicio de la obra:
Municipalidad Provincial de Cajamarca
Cooperativa de Ahorro y Crédito
San Pío X - Cajamarca
 Mons. CONRADO MUNDACA PERALTA
Vida y Obra - Testimonios

En memoria del Mons. CONRADO MUNDACA PERALTA

insigne personaje cajamarquino, quien brilló con luz propia
traspasando las fronteras de nuestra Región, siempre al
servicio permanente de su comunidad en favor de los
más necesitados.
 PRÓLOGO
T engo el honor de prologar esta objetiva y valiosa colección
de testimonios y vivencias en torno a la Vida y Obra de Mons.
Conrado Mundaca Peralta. En este libro, que goza de un carácter
ameno, entretenido y testimonial, usted tendrá la dicha de conocer el
invaluable trabajo apostólico y misionero que desarrolló Mons.
CONRADO MUNDACA durante el ejercicio de su fructífero ministerio
sacerdotal en nuestra amada Cajamarca.
Desde sus primeras líneas, rápidamente descubrimos cual era la
semblanza de este santo sacerdote: una persona ejemplar, un
hombre fiel, alegre, cercano, empapado de una invencible fe. En
definitiva, era un hombre de Dios. próximo a todos, con gran
vocación de servicio, austero y sencillo..
Es un libro testimonial que, bien por cuestión de fe o por simple acto
cultural y amor a nuestra tierra, todo cajamarquino del siglo XXI
debe conocer y leer. Mons. CONRADO MUNDACA fue sacerdote
diocesano, nació en el distrito de Querocoto, provincia de Chota,
Región Cajamarca, hombre de oración y de Sagrario, amante de
Jesucristo Eucaristía, gran promotor de la devoción Mariana, tan
elemental y necesaria en la vida de fe de un verdadero cristiano.
Son muchas las personas que aquí han vertido su testimonio, gracias
a ellas el autor ha sido capaz de describirnos a nuestro querido
Mons. Mundaca como lo que realmente era: un hombre siempre
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alegre, a pesar de las penalidades del día a día, gran guía
vocacional, excelente pedagogo, sacerdote virtuoso, impregnado
de una gran vocación de servicio manifestado en su dedicación en
favor de las pobres y desposeídos, a ejemplo de Jesucristo. Aquí
encontramos la descripción de varias de las obras sociales que
impulsó Monseñor Mundaca.
Así fue este hombre de Dios, un hombre que amaba apasio-
nadamente a nuestra iglesia, y que por ella y en ella gastó e invirtió
toda su vida, dándonos así a todos grandes lecciones de fidelidad,
de constancia, de perseverancia, de solidaridad y de muchísimos
otros valores, que a decir verdad hoy por hoy están muy oscurecida
en nuestra sociedad líquida del siglo XXI.
Deseamos de todo corazón que ustedes disfruten con su lectura, y
que esta colección de testimonios, les anime a emular todas las
obras y acciones buenas que compusieron el colorido y fructífero
pentagrama de la vida de este hombre fiel, alegre, obediente y
perseverante. Enhorabuena a todos los que tengan la oportunidad
de acceder al contenido de este libro. En Cristo y María.
Mons. José Carmelo Martínez Lázaro O.A.R.
Obispo de la Diócesis de Cajamarca
 RECONOCIMIENTO DE LA MUNICIPALIDAD
PROVINCIAL DE CAJAMARCA.
L a Municipalidad Provincial de Cajamarca, en representación
de la comuna cajamarquina, no puede estar ausente en el
reconocimiento de sus insignes y grandes personajes, que sin duda
alguna constituyen un ejemplo de vida y forma parte del legado
histórico de nuestra Región, como es el caso de Mons. CONRADO
MUNDACA PERALTA, ilustre sacerdote cajamarquino que entregó su
fructífera vida al servicio de sus semejantes, especialmente de los
sectores menos favorecidos,
En esta oportunidad, queremos rendirle un merecido y justo homenaje
a través de la publicación de este libro, compartiendo algunos
testimonios acerca de la vida de este gran hombre que con el
trabajo y sencillez de su vida, supo ganarse el cariño y el respeto de
toda nuestra comunidad.
¿Qué familia cajamarquina no tiene algo que contar acerca de
Mons. Mundaca? ¿Quién de los que tuvieron el gusto de tratar con él
por cualquier motivo, no recuerda una anécdota o enseñanza de
este santo varón, que vestido de negro, iba por las calles de
Cajamarca dando testimonio de un cristiano de palabra y obra:
predicando acerca del cielo y el infierno, pero dando de comer al
pobre en la tierra?
Esta obra justamente reúne testimonios de personas que conocieron
de cerca a este hombre de Dios, los que publicamos con la intención
de que su lectura entre niños y jóvenes, y toda la comunidad, sea un
delicioso manjar para el espíritu y ayude a la educación y
superación moral de nuestro pueblo.
El legado material dejado por el Mons. Mundaca es muy
significativo y abundante, como lo relatan los testimonios en este
9
libro buena parte de él de carácter emblemático como la
Cooperativa San Pío X en Cajamarca, el Santuario de Fátima en
Santa Apolonia, el Comedor de Niños y Ancianos Monseñor Pablo
Ramírez Taboada, así como muchas otras obras que silenciosamente
apoyaba a través de iniciativas de sus discípulos. Pero mucho mayor
fue su aporte a la formación cristiana y humana de nuestra
comunidad: Profesor de Religión de San Ramón y Santa Teresita,
Párroco de la Catedral y Vicario de la Diócesis de Cajamarca,
Director Espiritual de diversos grupos apostólicos, y principalmente
confesor y director espiritual por excelencia.
Sabemos que en diferentes épocas y lugares han vivido personas
que con la luz de su ejemplo iluminan el quehacer de los hombres y
sirven de ejemplo para que la humanidad mejore espiritualmente.
La encontramos en diversas religiones y culturas. Cajamarca tiene
como hijos predilectos a varios de ellos y el Mons. Mundaca, es sin
duda alguna uno de estos. Por esta razón nos sentimos orgullosos
de esta obra, agradecemos y felicitamos la iniciativa de su
elaboración que recoge el testimonio de muchos personajes
cajamarquinos que se han animado a ejercer su homenaje con
sentido y merecido aprecio al Mons. situación que nos hace
valorarnos como un pueblo grato y culto. Ser agradecidos y valorar
el trabajo de nuestros mayores es la mejor manera de enrumbar a las
generaciones futuras por la senda del bien y del desarrollo.
Municipalidad Provincial de Cajamarca
Alcalde Manuel Becerra Vilchez

Laura Gloria Peralta Bonilla (La Negra)
TTuve la suerte de nacer en un hogar
católico formado por mis padres
Alejandro y Santos, fuimos 7 hermanos.
Todos tuvimos el privilegio de tener como
miembro de la familia al Mons. Conrado
Mundaca Peralta, hermano de mi padre
(nunca le dijimos tío para nosotros era el
Mons. Mundaca). A decir de ellos “hombre
es el que dice yo soy y no mi padre o mi
tío es.” Lo que nos enseñó a valernos por
nosotros mismos y obtener nuestros
propios logros.
Su presencia constante en el seno familiar
nos dejó como ejemplo su Fe Católica
con una infinita confianza en la Divina
Providencia y un amor filial a María
Santísima. Su austeridad y rigor estricto
en el cumplimiento de sus votos
sacerdotales eran muestra de su
compromiso de vida dedicada a servir al
prójimo en nombre de Dios.
Como familiares, hemos visto como su
constancia lo llevó a dejar grandes
obras al servicio de todos, las cuales
logró con mucho ahínco y cargado de
sencillez. Aunque muchas veces
incomprendido, siempre tenía el don de
congregar personas que lo ayudaban
en su empeño de lograr sus propósitos,
como la Capilla de Santa Apolonia en
homenaje a la Virgen de Fátima, la Cruz
que corona esta colina y que fuera
dinamitada en 1969 y con el apoyo del
pueblo la volvió a construir más grande.
la Cooperativa San Pío X, la
Cooperativa Nuestra Señora del Rosario,
el Comedor de la Casa de la Providencia
(que a pesar de no contar con
presupuesto público atiende a niños y
TESTIMONIO FAMILIAR
adultos mayores con desayunos y
almuerzos).
Infatigable Catequista, nunca se negó a
llevar auxilio espiritual a quien lo
necesitara sin importar la hora o el lugar.
Siempre bromeamos en casa al recordar
que decíamos “el Mons. Mundaca es
candil de la calle y oscuridad de su
casa”, ya que siempre ayudaba a otros
económicamente para gastos de casa,
curación de enfermedades o apoyo a Su madre Doña Dorotea Peralta Garro y su hermana Francisca tuvieron un rol
jóvenes en sus estudios. Ahora importante en la formación espiritual del Padre Conrado, desde muy niño su lugar
comprendemos que la verdadera preferente era la iglesia de Querocoto y Pacopampa, lugar de su nacimiento.
enseñanza que nos pudo dar es que
debemos organizarnos y priorizar gastos,
pero sobre todo mantener la
perseverancia para el logro de nuestras
metas, con la confianza infinita en la
Divina Misericordia teniendo como
intercesora a María Santísima, y vaya
que sí lo hemos palpado en carne propia
en momentos de crisis. Cuánta razón
tenía cuando afirmaba que Dios no
deja de hambre a las avecillas del cielo,
cuanto menos a sus hijos.
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Viene a mi memoria cuando espe-
rábamos que llegara cada día a la hora
del almuerzo y a las ganadas corríamos
a recibirlo para ver quien besaba
primero el Crucifijo que llevaba en el
pecho y que lo acompañó hasta el
momento de su muerte. No interfería en
nuestra crianza pero esperaba
prudentemente cuando nos habían
r e ga ñ a d o p a r a , a c o n s e j a r n o s y
hacernos notar que era lo que habíamos
hecho mal.
Fomentó en todo momento el amor
fraternal entre los siete hermanos a pesar
de las diferencias personales que
podíamos tener. Así que si había
desavenencias la sangre nunca llegó al
río. Esta amistad, aparte del amor
fraternal, nos mantiene siempre juntos a
pesar de las circunstancias o el lugar
donde estemos viviendo.
En los últimos años de su vida tuve la
oportunidad de atenderlo y
acompañarlo un poco más que mis
hermanos ya que soy soltera. Me
acompañó y aconsejó en momentos de
crisis espiritual y tal parecía que
tuviéramos una conexión telepática ya
que cuando tenía un problema sonaba
el teléfono y era él con su peculiar “Negra
. . . estaba leyendo la Biblia o algún otro
libro y me interesó esta parte”, a
continuación leía o me comentaba el
tema, y decía . . . , “creo que es algo que
te puede ser útil”, la verdad me caía
como anillo al dedo pues era justamente
lo que necesitaba escuchar (al redactar
esto me doy cuenta cómo lo echo de
menos), pero estoy convencida que
desde el cielo me sigue acompañando y
rogando por mí, siento su presencia así
como que muchas veces me echa la
mano para solucionar mis problemas.
Recuerdo su infinita paciencia para
afrontar sus males y cómo la gente
recurría a él en busca de consejo y
consuelo a pesar de estar postrado en
cama. Su sencillez y gran calidez para
atender a todos era sorprendente y
donde íbamos siempre terminaba
rodeado de gente que disfrutaba
hablar con él.
Dios, los recuerdos se agolpan en mi
mente y no sé ya qué debería plasmar en
este escrito, sólo quisiera agregar que el
cariño, amor, comprensión y mi fe
católica se lo debo a Mons. Mundaca
(mi tío) y daré gracias infinitas al Señor y
a María Santísima si pudiera hacer la
milésima parte de lo que él hizo en
servicio a los demás.
Mons. Mundaca,
Padrecito, creo que cumplí contigo desde su inico
hasta el final como me lo pediste cuando como, sacerdote
murió mi padre, el acompañarte en tu jamás olvidó a su
trajinar por esta vida hasta dejarte en tu familia, siempre
última morada. mantuvo la
unidad familiar
Dios te bendiga, gracias por todo. con sus
permanentes
visitas
Nuestro sacerdote llevó hasta sus
últimos días su santificada vida con
sencillez y mucha humildad, como lo
demuestran sus objetos personales,
actualmente custodiados por sus
familiares.
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 CONTEMPLANDO UNA VIDA
Luis Rafael Guerra Silva

Los bellos campos de Querocoto, en Sin embargo, le atraían un tanto los

Chota, vieron el nacimiento de Mons.
CONRADO MUNDACA PERALTA un día
21 de setiembre de 1912.
La esperanza y el amor encendieron su
fuego en el corazón de sus virtuosos
padres don Desiderio Mundaca y doña
Dorotea Peralta Garro. Mediante las
aguas purificadoras del bautismo, es hijo
de Dios y el Espíritu Santo mora en él
desde el 27 de octubre de 1912, en la
Iglesia de Querocoto, siendo padrinos
los señores Carlos Vásquez y Carmen
González Vásquez.
El primer aciago dolor hirió su vida a los
15 meses de edad, pues murió su padre y
el niño Conrado, sin saberlo, soltó su
llanto y mezcló lágrimas con su buena
madre.
Dios no abandona a sus hijos, puso
bendición en su familia a través de su tía
Francisca quien atendió la Iglesia del
pueblo, vistió el hábito de la Virgen del
Carmen, acostumbró a hacer meditación
diaria, hizo retiro espiritual frecuente y
Hora Santa los jueves, al mismo tiempo
que fue consuelo de la Señora Dorotea y
alegría del pequeño Conrado.
Durante cuatro años en Querocoto y
dos años en Pacopampa entró por la
puerta de luz de la Educación Primaria,
al mismo tiempo que ayudó en las
labores del campo a la madre de sus
amores y a la buena tía Francisca que lo
miraba con cariño.
Sin padre, sin recursos económicos, de
origen campesino, no tenía posi-
bilidades de llegar a ser Sacerdote y ni
siquiera pensó en ello siendo niño.
ornamentos sagrados y ejerció algunas
veces de monaguillo en la Iglesia de su
pueblo.
Pero el 15 de febrero de 1927 llegó de
Querocotillo un sacerdote joven, el
Padre Enrique Escobedo quien predicó
y dijo "SER SACERDOTE ES SER OTRO
C R I S TO. . . ¿ Q U I É N Q U I E R E V E N I R
CONMIGO PARA SER SACERDOTE? "YO"
- respondió el joven Conrado- VOY
CON USTED, NO ME QUEDO".
Su madre lloró mucho con la partida
cuando, un día 03 de marzo de 1927,
salió de su pueblo en compañía de
cuatro jóvenes y del Padre Escobedo
por el camino de Ocallí, pasando en
balsa el río Marañón.
Su formación sacerdotal la hizo exitosamente y con mucha dedicación, tanto en
el seminario de Cajamarca como en la ciudad de Trujillo, compartiendo
conocimientos y desarrollando su fe con otros seminaristas.
El 23 de marzo de 1927, después
de 21 días de viaje, llegaron a
Chachapoyas, para estudiar en el
Seminario de esta ciudad durante
los años 1927, 1928 y 1929. De los
jóvenes que salieron de Querocoto
solo dos se ordenaron de
s a c e r d o t e s : M o n s. C o n r a d o
Mundaca y el Padre Juan de Cruz
Zúñiga Méndiz.
En los años 1930 y 1931 cursó
estudios en el Seminario "San José"
de Cajamarca, bajo la dirección
del Padre Rubén Olivares y la
orientación espiritual del Padre
Federico Pérez Silva que fue
después Administrador Apostólico
en Cajamarca, Obispo Auxiliar de
Lima, Obispo de Piura, Arzobispo
de Tr ujillo, y a quien Mons.

13
Mundaca recuerda con especialísimo
cariño, porque fue para el padre, amigo,
protector, orientador y consejero
espiritual.
Un día tuvo la tentación de abandonar
el Seminario porque le pareció apreciar
mala voluntad en alguno de sus
profesores hacia su persona y escribió a
su casa: "NO VENDAN LOS TORITOS...
TRABAJARÉ CON ELLOS"...
Decidido a emprender el viaje de
regreso a su casa pidió al Padre
Federico Pérez Silva 80 soles que le
había encargado. Pero no logró la
devolución del dinero sino, más bien, el
consejo y for talecimiento de su
vocación.
Desde entonces, nunca más abandonó
su vocación de Sacerdote y amó a
todos los hombres con toda la fuerza de
su corazón.
Decidido a perfeccionarse, con el
permiso de Monseñor Rafael Villanueva,
Obispo de Cajamarca, viajó a Trujillo
para seguir estudios de Filosofía y
Teología en el Seminario Mayor "San
Carlos y San Marcelo", desde 1932
hasta 1937.
Sus estudios le dieron el profundo
convencimiento de la existencia de un
Dios Real que es amor; de Jesucristo,
resucitado, vivo en la Eucaristía por
amor al hombre; de María, Madre que
intercede en servicio del hombre, por
amor.
Su origen humilde, su fina percepción de
la miseria humana y su experiencia del
dolor le hicieron entender que el amor
solo es realidad en el servicio de los
demás, principalmente de los más
humildes, de los ancianos
desamparados, de los niños pobres, de
las madres abandonadas, de los
enfermos, de los hambrientos y oprimidos, profesor en el Seminario "San José" hasta
de los ignorantes, y decidió, entonces, 1 9 4 8 , s i r vi ó c o m o S e c re t a r i o a
servir más que ser servido, amar más que Monseñor Teodosio Moreno en 1942; a
ser amado, comprender más que ser Monseñor Pablo Ramírez Taboada,
comprendido, porque solo así se es como Vicario General de la Diócesis en
instrumento de la paz, como San 1947; a Monseñor Nemesio Rivera Meza,
Francisco de Asís. en el mismo cargo, durante quince meses.
Se ordenó sacerdote en la Iglesia de Sin perder de meta la fraternidad
Cocharcas, Lima, el 13 de febrero de humana por la común paternidad de
1938, siendo sus padrinos la Señorita Dios, fue Rector del Seminario "San José"
María Luisa Pérez Silva y la Señora en 1958.
Benjamina Eudebert de Prebost. El Fue profesor de religión en el Colegio
Obispo consagrante fue Monseñor Nacional "San Ramón", en el Colegio
Santiago Hermosa. Particular "Indo Americano", en el
Y como Dios es amor y no hay paz entre Instituto Industrial Femenino y en el
los hombres, consagró la persona viva Colegio Santa Teresita de Cajamarca.
de Cristo en su primera Misa en Ama entrañablemente a todos los
Cajamarca el 26 de febrero de 1938. señores obispos de Cajamarca; ama a
En busca de esa paz, para que se sus hermanos sacerdotes; no hay
cumpla en el hombre el amor a Dios, sirvió dolencia, desgracia o miseria material o
como Capellán en el Asilo de Ancianos espiritual que no quiera remediar
de Cajamarca, durante nueve años; fue porque comprende que sentirse útil es
más dulce que sentirse amado.
Orienta y dirige la LEGIÓN DE MARÍA
para llevar, mediante ella, al hombre
hacia María, su Madre, que es amor, y,
por María llegar al amor de Cristo y al
amor a Dios.
Dirige en Cajamarca la Acción Católica,
l o s C a t e c i s m o s, l o s c u r s i l l o s d e
Cristiandad, la Sociedad de Obreros
Católicos, el Coro Santa Cecilia, la Pía
Unión de los Cruzados de Fátima, La
Cofradía de N. S. del Carmen, la
hermandad del Perpetuo Socorro, la
Cofradía del Rosario, el Movimiento
Familiar Cristiano, el Almacén Parroquial,
los Cenáculos de Oración. Amplia labor
cumplida en distintas épocas.
Entre abril de 1952 y 1954, con toda la
El hermoso poblado de Pacopampa, lugar de nacimiento del Mons. Conrado, fue comunidad cajamarquina y en
testigo de sus permanentes visitas y preocupación, muchos familiares y particular, con alumnas de "Santa
pobladores actualmente lo recuerdan con gratitud. Teresita" y alumnos de escuelas y
14
colegios de Cajamarca, mediante la
"operación ladrillo", construye el
Santuario de Fátima en la Colina de
Santa Apolonia para que el hombre
llegue por intercesión de María, su
madre, hasta Dios, su Padre, que es amor.
Por servir al hombre de Cajamarca, en
octubre de 1958, funda la Cooperativa
"San Pío X Ltda. N° 26 y trabaja en ella
durante 15 años, hasta dejarla con un
hermoso edificio, bien organizada y
fuerte.
Para servir al pobre, con humildad,
sencillez, alegría, cariño inmenso,
perseverancia, bondad, delicadeza y
dulzura, inicia en 1967 y continúa aún la
"Fundación Pablo Ramírez Taboada"
con sus diferentes servicios.
Desde mayo de 1982, por nombramiento
que le da Monseñor Damnert, es Párroco
del Sagrario y cada día lo vemos
dedicado a la oración, a la
administración de Sacramentos, a
resolver problemas humanos, a probar
con la elocuencia de sus actos que Dios
es la única fuente de consuelo, amor y
paz.
El 13 de febrero de 1988, celebró con el
júbilo del pueblo católico cajamarquino,
sus Bodas de Plata Sacerdotales.
Poco tiempo después inició el epílogo
de su vida viviendo en el Asilo de
Ancianos Obispo Grosso, al cuidado de
las abnegadas hermanitas religiosas,
desde donde siguió impartiendo su
bendición y apoyo espiritual a sus fieles
hijos que siempre le visitaron.
Ayer murió y en su rostro perdura la
serenidad y la sonrisa de un Santo, como Durante su formación como seminarista, viajó por diferentes lugares
último legado a todo el pueblo huérfano haciendo amistad con muchos otros jóvenes seminaristas de diferentes
de Cajamarca. ¡Bendito sea quien vivió lugares de nuestro país, quienes le prodigaron cariño y estima por su
en el nombre del Señor! peculiar personalidad y sencillez.
15
 TESTIMONIO DE LA LEGIÓN DE MARÍA
L a Conferencia del Episcopado
Latinoamericano en Puebla manifiesta:
"El presbítero anuncia el Reino de Dios
que se inicia en este mundo y tendrá su
plenitud cuando Cristo venga al final de
los tiempos. Por el servicio de ese Reino,
abandona todo para servir a su Señor...”
El presbítero es un hombre de Dios. Sólo
puede ser profeta en la medida en que
haya hecho la experiencia del Dios vivo.
Sólo esta experiencia lo hará portador
de una Palabra poderosa para
transformar la vida personal y social de
los hombres de acuerdo con el signo del
Padre. (Puebla 692-693).
Monseñor Conrado Mundaca Peralta
asumió con fuerza esta amplia
perspectiva apostólica y se compro-
metió generosamente. Ha dado mucho
de sí a Cajamarca, lo ha dado todo. Por
ello, creemos oportuno, en su homenaje,
divulgar, no sólo la gratitud a que su
persona se ha hecho acreedora, sino
también, la espiritualidad y acción de las
instituciones que han recibido su
benéfica influencia. De esa manera no
cantaremos los "triunfos del hombre, sino
la gloria de Dios". Una de esas obras, es
la LEGIÓN DE MARÍA.
¿QUÉ ES LA LEGIÓN DE MARÍA?
Un grupo católico que, fundamentado y
estimulado por una sincera devoción a
María, nuestra Madre, se dispone a
trabajar en una doble inquietud que
supone un mismo ideal: santificarse y
anunciar a Cristo sirviendo a los demás.
La Legión de María tiene características
peculiares como:
-Espiritualidad centrada en la Eucaristía
Estela Goicochea y en la imitación de la Virgen.
-Presencia legionaria en todos los
- Disciplina militar, no en su dimensión ambientes que lo requieren: hospitales,
bélica sino como signo de honor y asilos, escuelas, cárceles, centros
fidelidad: es el ejército de Cristo contra catequísticos; preocupación especial
las huestes del mal, con María por por las visitas domiciliarias y la Liturgia.
Capitana.
- Vivencia comunitaria en pequeñas
células de trabajo llamadas Praesidium, PRESENCIA DE MONSEÑOR MUNDACA
que se integran en unidad de criterios a EN LA LEGIÓN DE MARÍA
través del sistema de coordinación: El 25 de mayo de 1,953, en la primera
Curiae (reunión de Praesidium), Comitium reunión de curia, queda instalada
(Reunión de Curiae), Concilium (centro oficialmente la Legión de María en
mundial de gobierno). nuestra ciudad con cuatro Praesidia:
-S i s t e m a t i z a c i ó n d e l a s o b r a s -Regina Apostolurum (Parroquia de
emprendidas y evaluación permanente Santa Catalina).
mediante informes en la Junta Semanal. -Mater Boni Consilii (Parroquia de San
-Metodología en base a la acción Pedro).
paralela del maestro y aprendiz: se -Auxilium Christianorum (Capellanía de la
aprende a trabajar, trabajando. Recoleta).
-Mater Christi (Capellanía de San José).
La Legión de María surge en Cajamarca
ligada a personajes de grata memoria
como la Hermana Joaquina Lucas,
enviada del Concilium, Monseñor Pablo
Ramírez Taboada, gestor y primer
Director Espiritual.
Monseñor Conrado Mundaca no figura
como fundador; pero, atento a cuanto
significa mayor entrega a la Obra del
Señor, recibió esta nueva Institución con
cariño y la apoyó incondicionalmente.
Su nombre aparece en las actas de
Curia en la tercera sesión, es decir, en
julio de 1,953, en calidad de
representante del Señor Obispo,
delicado de salud.
Realizaba con mucha fe, cargadas de misticismo y jamás perdíó esa sonrisa En su primera allocutio, refleja lo que será
contagiosa cuando estaba con sus colegas sacerdotes, su preocupación permanente: "Cada
amigos o familiares. legionario, en todo momento, pero sobre
16
todo en la hora de hacer el trabajo
apostólico, vuele con el corazón al
Sagrario"... "El legionario requiere piedad
eucarística, confianza en la Virgen y celo
para prodigarse a los ricos, a los pobres,
a los enfermos y desvalidos, con la
seguridad de que Jesús más que
nosotros anhela las conversiones que
buscamos... Él desea más vivamente
reinar en aquel corazón, en aquel
hogar..." (Archivo legionario).
Desde ese primer contacto legionario,
Monseñor Mundaca se convierte en
columna de fortaleza para la Institución;
muy pronto es nombrado Director
E s p i r i t u a l d e l Pr a e s i d i u m Re g i n a
Apostolorum de la Catedral; y el 27 de
julio de 1,961, al ser trasladado de la
Diócesis Monseñor Pablo Ramírez
Taboada, el nuevo Prelado, le nombra
Director Espiritual de la Curia legionaria
que luego se convertirá en Comitium de
Cajamarca.
Son veintiséis años que cumple con
admirable fidelidad la dirección general
de la Legión de María; y
- Si hoy, no son cuatro Praesidia, sino 24
de adultos y 8 juveniles organizados
en dos Curiae...
- Si la Legión mantiene su reglamento y
asume las necesidades de nuestro
tiempo sin desmedro de su primigenia
espiritualidad...
- Si la Legión persevera a pesar de las
incomprensiones, pruebas y propias
debilidades...
- Si le es posible presentar al Señor una
obra callada pero continua y llena
de esfuerzo...
- Si el fuego legionario ha hecho
posible el nacimiento de otras
instituciones con carismas espe-
cíficos como la Fundación Monseñor
Pa b l o R a m í r e z Ta b o a d a , l o s
Cenáculos de Oración...
- Es porque está guiada por un
sacerdote que no desmaya ante las
dificultades y cuyo testimonio de
puntualidad, exactitud y auténtica
espiritualidad, es la fuerza que la
sostiene.
RÁFAGAS DE LUZ: TESTIMONIOS DE
OTROS LEGIONARIOS DE MARÍA
Pedimos perdón a la modestia de
Monseñor Mundaca, para sintetizar
algunos testimonios, vertidos en forma
honesta y sincera por diferentes
legionarios de Cajamarca.
La autenticidad de estos testimonios
está refrendada por la firma de cada
una de las personas que atestiguan, en Solo o acompañado, Mons. grupos no hemos perseverado en forma
los archivos legionarios. Conrado, siempre mostraba una
alegria espiritual, reflejada en su
regular; se suspendían unos por falta de
"No se ha hecho la luz para esconderla...
sonrisa permanente. asistencia y surgían otros, pero es
sino para que los hombres glorifiquen al hermoso poder atestiguar que, hasta el
Padre... En tantos años de compartir día de hoy, una persona ha perseverado
juntos, de bregar a su lado por la siempre y cada día con mayor fervor y
conquista del bien y la verdad, hemos convicción: Mons. Mundaca.
visto mucha luz...” Reconfortan y estimulan sus largas horas
ante el Sagrario, que dan vitalidad al
ANTE EL SAGRARIO clamor de los Obispos de Puebla: "Quien
Cierta mañana, unas tres décadas atrás, no haya aprendido a adorar la
tuve la oportunidad de ingresar en la voluntad del Padre en el silencio de la
Capilla del antiguo local del colegio oración, difícilmente logrará hacerlo
"Santa Teresita, al primer toque del cuando su condición de hermano le exija
"Angelus", para esperar la celebración renuncia, dolor, humillación..." (Puebla,
de la Santa Misa. Mons. Mundaca 251).
estaba en oración. Me impresionó
profundamente su recogimiento; pienso
MINISTRO DE LA RECONCILIACIÓN
que fue entonces cuando comprendí el
valor y la necesidad de la oración. Sufría depresiones, tenía que consultar el
Desde entonces, he participado en Psicólogo, pero, una amiga me aconsejó:
grupos de oración dirigidos por el Padre, "El mejor consultorio para buscar la paz
generalmente en las primeras horas de la es el confesionario". El resultado de ese
mañana y en la Iglesia Catedral. Los consejo fue mi primera entrevista con
17
M o n s. M u n d a c a. Re a l m e n t e, s a l í
reconfortada y sobre todo, convencida
de que sólo la fe puede proporcionar
una auténtica seguridad emocional.
Ya mejor preparada en la Catequesis de
la Reconciliación, y en la conveniencia
de la Dirección Espiritual, puedo afirmar
que una de las tareas más hermosas de
M o n s. M u n d a c a e s s u p a t e r n a l
paciencia para atender confesiones.
¿Cuántas personas en Cajamarca, a
través de cincuenta años, habrán
recibido la paz de Cristo, la absolución
de sus faltas y el optimismo de la vida
cristiana, mediante la bendición de un
sacerdote que es fiel instrumento del
Señor para perdonar y alentar?
LLEVANDO A JESÚS
Desde hace muchos años, una familiar
muy querida, sufre las limitaciones
propias de la edad avanzada. Se
en c uen t ra ca s i p o s t ra d a y es o,
naturalmente, motiva gran dolor en la
familia. Pero, hay un día en la semana en
que nuestra pequeña casa se torna, de
una manera especial, en un lugar de
alegría y paz, ya por la emoción con que
la ancianita espera el momento, ya y
sobre todo, por el privilegio de sentir la
presencia corporal del Señor en la Hostia
Consagrada. Es la mañana en que
Monseñor Mundaca lleva a nuestra
amada enferma la Sagrada Comunión.
Por testimonios diferentes, sé que son
muchos los hogares cajamarquinos que
reciban esta inigualable visita. ¡Benditos
sean los pasos de quien lleva a Jesús
para consuelo y esperanza de los que
sufren.
AUSTERIDAD
El testimonio más fuerte que conservo de
Monseñor Mundaca es su extremada
sencillez y austeridad de vida. Cada
tarde, es posible encontrarle de pie, en la
Sacristía de la Iglesia Catedral, tomando
un frugal refrigerio, siempre de pie, como
quien está de paso para actividades
más importantes luego, una actividad
a r d u a y p r o l o n g a d a : s e s i o n e s,
entrevistas, gestiones... aparte de una
admirable puntualidad en las tareas de
su Minister io, sobre todo, la
administración de los Sacramentos.
Al referirnos a Monseñor Mundaca
podemos hablar con autenticidad del
"Sacerdote Pobre". Su riqueza es darlo
todo para "atesorar solamente en el
cielo".
Muchas veces, he tenido la oportunidad
de ver que madres de familia y enfermos,
hacen turno para recibir de él algún
dinero con que solucionar problemas
como la adquisición de medicinas, útiles
escolares y a veces, el alimento u otras
necesidades de emergencia.
¿Paternalismo?... Tal vez muchos lo
conjeturen así, pero, cuando hay
momentos en la vida en que alguien está
en la situación de aguda enfermedad y
sea por la causa que fuere, no tiene un
centavo para comprar medicina, ¿no Casi en todas las
será hermoso y alentador contar con actividades y
una mano amiga que le tienda festividades
institucionales
generosamente el dinero que necesita?
realizadas en
Cajamarca, siempre fue
SIEMPRE ALEGRE el invitado de honor,
Nos encontrábamos en San Miguel, en donde le rendían justos
una "Peregrinación por Cristo". El pueblo homenajes por sus
respondió admirablemente el llamado de cualidades humanas y
la gracia, pero nos preocupaba la entrega total al servicio
sobrehumana actividad que en el templo de su comunidad.
18
tenía que llevar a cabo el Padre
Mundaca para dar los Sacramentos,
sobre todo, largas filas en espera de
Confesión. Pensábamos que a la Cena
llegaría tan cansado que nos
disponíamos a guardar silencio... pero,
llegó con un humor de niño, directamente
a contar chistes en serie y reía con tanto
entusiasmo, que todos nos sentimos
renovados. Alguien bromeó: Parece que
en el confesionario los sanmiguelinos en
lugar de faltas le han contado al Padre
"chistes del lugar".
Desde entonces, nunca he perdido la
convicción de que Mons. Mundaca, pese
a su aparente seriedad, es una persona
abierta y alegre, cualidades importantes
para el apostolado.
GUÍA VOCACIONAL
Debo la vocación a Dios que me ha
llamado a su servicio, pero, mi respuesta
a ella y mi fidelidad, al fuego espiritual
de Monseñor Mundaca. Sin presiones ni
imposiciones, él anima celosamente la
generosidad para con el Señor en el
servicio de los hermanos. No cuento con
cifras estadísticas, pero son numerosas
las vocaciones cultivadas al amparo de
su Dirección Espiritual; en la
Congregación de Hermanitas de los
Ancianos Desamparados, en el Convento
del Carmen de Trujillo, en "El Buen Pastor",
en las Hermanas de San Vicente de Paúl,
en el Monasterio de la Inmaculada
Concepción de Cajamarca y otras
Casas Religiosas, hay personas que lo
dejaron todo para unirse a Dios con los
Vo t o s d e Po b r e z a , C a s t i d a d y
Obediencia, a fin de que, libres de
ataduras trabajen por el Reino de Cristo.
EL PROFESOR
Ingresé a la Legión cuando era alumna
en "Santa Teresita" y el Mons. Mundaca
era Profesor y Capellán.
La vivencia más grata es la de las
explicaciones sabatinas del Evangelio.
Aún lo recuerdo Mons. con el vigor y
entusiasmo de su juventud, dirigirse a
nosotros desde una "banquita verde"
que le permitía dominar con la vista al
numeroso grupo.
Su pedagogía sencilla y llena de fe, nos
permitió recoger sus mensajes con toda
aceptación que poco a poco calaban
muy hondo en nuestras vidas con una
influencia decisiva en la formación de
nuestra personalidad. Allí aprendimos la
alegría de vivir siempre en la presencia
de Dios, a mantener a cualquier precio la
gracia de Dios, a elaborar un plan de
vida que nos permita vivir orde-
nadamente, a poner una recta intención
en cada acción a fin de "hacer las cosas
comunes de modo no común", a querer y
respetar a nuestras profesoras y
compañeras; sobre todo a amar mucho
a la Virgen.
En todo momento nos inculcó una
permanente actitud de servicio en favor
de todos los hermanos. Dentro de las filas
de la Acción Católica (Aspirantado),
teníamos en el Colegio un permanente
taller de apostolado.
Pa d r e M u n d a c a : La c o m u n i d a d
cajamarquina de hoy tiene mucho de
vuestra personalidad transmitida desde
la "banquita verde".
Parte de su vida sacerdotal lo compartió
con la docencia, especialmente en el
Glorioso Colegio San Ramón de
Cajamarca donde recibió el
reconocimiento, aprecio y cariño de sus
colegas y alumnos.
19
 LAS MISIONES CATÓLICAS EN SU OBRA
DE AFIANZAMIENTO ESPIRITUAL
Alfonso Sánchez Rojas.
"...Vayan, pues, a las gentes de todas las dice: "... este cordón se llama cíngulo y
naciones, y háganlas mis discípulos; representa las cuerdas con que ataron
bautícenlas en el nombre del Padre y del a nuestro Señor". En su trato con los
Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a moradores siempre fue, y es, igual con
obedecer todo lo que les he mandado a todos, sean del campo o de la ciudad.
ustedes..." Recuerdo que en una oportunidad le
(Mateo 28, 19-20) acompañé al caserío de Tongod, en una
Versículos bíblicos como estos, han de estas misiones, y pude allí comprobar
calado profundamente en la el porqué también la gente del campo lo
personalidad de Monseñor Conrado quiere; Sacerdote entregado de lleno a
M u n d a c a, q u i e n, d e n t ro d e s u s su ministerio, identificándose totalmente
ocupaciones, como auténtico con el marginado, sirve a Cristo en el
sacerdote, se dio y se da tiempo para hermano, sin importarle la situación
cumplir los mandatos del Señor: "Predicar económica ni social; sacerdote que
el Evangelio a todos las criaturas". Así poco habla, que le cuesta mucho pedir u
p u e s, c o n t i n u a m e n t e, ya s o l o o
acompañado de algunos cristianos, ha
enrumbado a localidades lejanas con el
objeto de extender la Buena Nueva.
Estas acciones misionales, a mi entender,
las podemos resumir en dos:
En la primera señalamos la respuesta
solícita a las delegaciones de
comunidades, pueblos o ciudades que
se acercan a la parroquia para pedirle
que se digne celebrar sus fiestas
Patronales. Monseñor Mundaca solo o
en compañía de algunos cristianos, viaja
a esas comunidades y su acción
pastoral se deja sentir de inmediato con
la iglesia abarrotada de fieles, las misas
muy participadas y sus homilías con un
profundo mensaje cr istiano. Una
preocupación muy característica en
Mons. Mundaca siempre fue un viajero incansable, visitaba los lugares mas
este santo varón, es ir explicando el alejados llevando la palabra de Dios y atendiendo las necesidades
significado de los ornamentos a medida espirituales, su visita siempre causaba
que se los va colocando. Por ejemplo alegría y regocijo en los pobladores

20
ordenar, pero que actúa en forma para efectuar estas misiones que
callada, con mucha perseverancia y generalmente se hacen a lugares
empuje. A quienes tenemos la suerte de distantes en donde las comodidades
tenerlo como amigo nos arrastra en su son mínimas y las condiciones religiosas
amor hacia el prójimo, hacia Dios y hacia muy precarias.
la Santísima Virgen. La actividad que realiza en estas
Así como Tongod, se han beneficiado de peregrinaciones es intensa: visita a
su acción: Río Seco, Namora, Matara, a n c i a n o s a b a n d o n a d o s, d a e l
Llapa, San Miguel, etc. sacramento de la unción a enfermos,
La segunda modalidad de su acción prepara y efectúa matrimonios, bautizos,
misionera se realiza en compañía de c o n fi r m a c i o n e s, r e c o n c i l i a c i o n e s ;
algunos cristianos comprometidos, organiza rosarios de la aurora, Vía
pertenecientes al movimiento del Crucis, misas por los difuntos, etc. Su
apostolado "Legión de María", del cual entusiasmo es contagiante, su dinamismo
es Director Espiritual, en las llamadas inacabable, su comprensión constante,
Peregrinaciones Por Cristo (PPC). su ayuda oportuna, su entrega sin límites,
En esta actividad, el grupo alterna la su amor a cada instante presente. Estos
oración con el trabajo apostólico a
tiempo completo.
Empezamos la preocupación una
semana antes de efectuarse la
Peregrinación Por Cristo. Para ello, nos
reunimos desde las 6.30 a 7.30 a.m.
Cada sesión consta de dos partes: en la
primera nos preparamos espiritualmente
y en doctrina con temas tales como la
Gracia, la Oración, el amor al prójimo, la
Fe, l o s S a c r a m e n t o s, e t c. C o n
ejemplificación práctica de Monseñor
Mundaca, tomada de su propia
experiencia, de tal manera que no sólo
tiene autoridad eclesiástica sino una
sólida autoridad moral.
En la segunda fase, nos ayuda en la
organización de las misiones con
directivas precisas sobre aspectos de
carácter práctico, demostrando una vez
más, su capacidad organizadora. En
cuanto al aspecto económico, todo
gasto es sufragado por los peregrinos y Muchas veces solo y otras acompañado de algún sacerdote, visitaba los
por el mismo Padre que también lugares más alejados y empobrecidos de Cajamarca, llevando no solo el
colabora con movilidad. A pesar de su consuelo espiritual y la palabra de Dios, sino también alguna ayuda a las
edad nunca pone dificultad alguna familias pobres y abandonadas, su labor social era reconocida por todos.

21
son los rasgos, entre otros, que Oro, pues las cosas de Dios no surgen al
caracterizan a Monseñor Mundaca en azar, sino por el beneficio que Él
esas peregrinaciones, y durante toda su concede a los que le sirven con
vida. fidelidad, mostrando claramente que
Estas Misiones Católicas denominadas ellos ya tienen su sitio ganado en el cielo
Peregrinación Por Cristo se iniciaron en (Mt. 10,20.. "alégrense de que sus
enero de 1976, gracias a la sugerencia nombres ya están escritos en el cielo...").
del hermano Julio César Cirilo, enviado Creo que el Señor se ha valido de Juan
de la Legión de María a América, quien Pablo II para que en el presente Año
se puso en contacto con Monseñor Mariano que ter mina en Agosto
Mundaca, le explicó el porqué de esta Monseñor Mundaca cumpla 50 años
actividad y el Padre captó claramente dedicados al servicio de Dios y del
esta obra que Dios le ponía en el camino. prójimo.
Desde esa fecha hasta la actualidad, ¡Bendito seas por siempre, Señor! ¡Bendita
aprovechando los períodos seas por siempre Santísima Virgen! ¡Qué
vacacionales ya sea en julio o en enero, Dios siempre te bendiga, Monseñor
ha salido 16 veces en peregrinación a Conrado Mundaca Peralta!
las diferentes comunidades, exten-
diendo la Buena Nueva por nuestro
departamento.
Entre los sitios que se ha visitado
tenemos: San Miguel, que fue el primer
lugar que visitaron los peregrinos, luego
siguieron: Matara, Cajabamba, Pueblo
Nuevo, Río Seco, San Pablo, Llapa, La
Pampa (Cajabamba), Tembladera (dos Aprovechando los
oportunidades), Chilete, San Marcos (en períodos vacacionales
dos oportunidades), Sapuc, y la última ya sea en julio o en
llevada a cabo del 2 al 10 de enero del enero, salía en
presente año a la localidad de San peregrinación a las
Gregorio (San Miguel). diferentes
comunidades,
Para finalizar esta brevísima reflexión
extendiendo la Buena
sobre las Misiones Católicas en su obra
Nueva. Entre ellos San
de afianzamiento espiritual quiero
Miguel, Matara,
agradecer a la Comisión Central "Bodas Cajabamba, Pueblo
de Oro", la oportunidad que me da para Nuevo, Río Seco, San
escribir acerca de esta faceta de la Pablo, Llapa, La
vida de quien ha hecho tanto bien a Pampa, Tembladera,
Cajamarca y al Perú entero. Chilete, San Marcos,
En este Año Mariano, la Santísima Virgen Sapuc, San Gregorio
le ha regalado a Monseñor la (San Miguel), entre
oportunidad de celebrar sus Bodas de otras.

22
 EL SANTUARIO DE
NUESTRA SEÑORA DE FÁTIMA
La vida del hombre se mueve en torno
a dos dimensiones: una mística de
ideales y criterios que forjan su filosofía y
los signos con los cuales siente la
necesidad de exteriorizar su ser
profundo.
El signo es muchas veces insignificante en
sí mismo, mas, no por ello menos
apreciado por quienes comprenden la
grandeza del contenido que expresan.
Tal es el caso del Sagrario de Nuestra
Señora de Fátima en Cajamarca: Una
capilla pequeña y sencilla, pero de rico
simbolismo.
Muy blanca, estratégicamente situada
para que todo cajamarquino pueda
mirarla diariamente; fiel atalaya, testigo
del diario caminar de los hijos del
Cumbe; pálida réplica del famoso
Santuario de Fátima de Portugal; así es
la capillita de Santa Apolonia.
¿Qué significa el Santuario de Fátima
para los cajamarquinos?
Ante todo, es la expresión genuina de
una Cajamarca que se enorgullece de
ser mariana desde sus raíces... y esto, sí es
mística y filosofía.
Puebla, hace suya la frase de Pablo VI:
"No se puede hablar de la Iglesia si no
está presente María"; y agrega: "Se trata
de una presencia femenina que crea el
ambiente familiar, la voluntad de
acogida, el amor y el respeto por la vida.
Es presencia sacramental de los rasgos
maternales de Dios. Es una realidad tan
hondamente humana y santa, que
Blanca Rabanal Aliaga
suscita en los creyentes las plegarias de
ternura, del dolor y de la esperanza"
(Puebla, 291.
María tiene una presencia relevante en
la historia América Latina. La misma
Conferencia Episcopal manifiesta: "En
nuestros pueblos, el Evangelio ha sido
anunciado, presentando a la Virgen
María como su realización más alta”.
(Puebla, 282).
No es extraño, pues, que en Cajamarca,
el amor a la Madre de Dios sea muy
fuerte: Pueden cambiar las épocas,
cambiar las ideologías hasta el punto de
a m e n a z a r la f e c o n d a rd o s d e
hedonismo, de egolatría; pueden surgir
muchas sectas dispuestas a minimizar a
la Madre de Dios; pero, no hay
cajamarquino que en algún momento no
llegue a sentir la tierna necesidad de
recitar el Avemaría.
Monseñor Conrado Mundaca Peralta,
sacerdote de vocación profunda, posee,
entre sus excelentes carismas una filial
devoción a la Virgen; devoción que da
a su personalidad un sello peculiar y al
mismo tiempo, es el instrumento más
poderoso de su apostolado.
¡A Jesús por María!, es la consigna de su
acción ministerial.
¡A Jesús por María! fue el lema que le
impulsó a levantar el Santuario de Fátima
de Cajamarca.
Esta sencillísima obra de arquitectura,
guarda entre sus muros todo un poema
de amor mariano. Ellos son testigos de
23
cómo Monseñor Mundaca llegaba a los
estudiantes y motivaba en ellos las más
simpáticas y entusiastas realizaciones.
Hoy, los que fueron la juventud de los
años 1,952 - 1,954, evocan con alegría
los trabajos emprendidos para construir
el Santuario: Largas filas de alumnos,
niños y jóvenes, portando su ladrillo
hasta Santa Apolonia; numerosos grupos
que, con alegría, ocupaban sus días y
horas de descanso en colaborar con los
obreros alcanzando material y
arrojando desmonte.
El Ingeniero Arrunátegui levanta los
Planos, el humilde maestro de obra,
Marcos Huaccha, con su singular
paciencia y no menos encomiable
sentido artístico construye las
estructuras, pero, es Monseñor Mundaca
quien dirige, anima y alienta toda la
realización del trabajo. Él es el testimonio
del esfuerzo alegre, del optimismo. Él es
quien enseña a los cajamarquinos a
"hacer de modo sobrenatural las
acciones más naturales y humanas".
El trece de octubre de 1,954, después
de dos años y medio de labor, se
inaugura el Santuario, en la fecha que
evoca la última aparición a los
pastorcitos de Fátima.
Desde entonces cada doce de mayo
por la noche, en la víspera del
aniversario de la primera aparición, el
Santuario se convierte en un haz
luminoso gracias a los farolitos que dejan
los niños de las escuelas. Bella imagen del
fuego de amor a la Virgen.
Por la presencia del Santuario, Santa
Apolonia, lugar turístico y de recreación
es, al mismo tiempo, un punto de
encuentro con la fe.
Al celebrar las Bodas de Oro
Sacerdotales del gestor de este
Santuario, es hermoso recordar la risueña
historia de la capillita, pero al mismo
tiempo, es oportunidad para hacer una
sincera evaluación:
Todos los cajamarquinos admiramos con
simpatía el Santuario, todos aceptamos
que Cajamarca es Mariana, pero, hoy en
día, son pocos los que viven plenamente
el Mensaje de la Virgen.
Es preciso que el amor a María no se
El Santuario de Santa
quede en un lirismo sentimental ni menos
Apolonia, en honor a la
en una cláusula de interés. Es auténtico Virgen de Fátima,
devoto de la Virgen, quien la honra y al construido por iniciativa de
mismo tiempo la imita. Mons. Mundaca, se ha
El Mensaje de Fátima, no ha pasado ni convertido en la
pasará de moda, Nuestra Madre espera actualidad en un símbolo
la oración y la acción de sus hijos. Los representativo y patrimonio
cultural de la ciudad de
pastorcitos de Fátima, como instrumentos
Cajamarca; su edificación
de la Virgen, nos hablan de conversión y duró un año y medio de
en efecto, solo cambiando nuestra vida tenaz labor pero con
fría y egoísta, sólo trabajando con tesón mucho entusiasmo, a través
por la construcción del Reino de Dios, del tiempo este lugar ha
mediante la fraternidad y la justicia, ido mejorando desde su
podemos sentirnos verdaderos devotos construcción.
de la Virgen.
El Mensaje de Fátima, es también una
fuerte llamada a la paz. María nos
enseña que no con la destrucción bélica
se salvará el mundo sino por el contrario,
construyendo la paz por medio de la
fraternidad y de la entrega.
María dijo Sí al Señor, y fue como su Hijo:
humilde, pacífica, dueña de sí misma,
supo perdonar, supo callar, fue sincera y
verás. Como Ella, aportaremos a la paz
cuando no nos interese tanto nuestro
propio prestigio sino la gloria del Padre y
la felicidad de los hermanos, cuando
sepamos arriesgarnos por amor a los
demás, cuando copiemos la delicadeza
de María en la visita a Isabel, en las
Bodas de Caná, en todos los pasos de
su vida.
¿No es este también el anhelo de nuestro
querido Monseñor Conrado Mundaca?
24
 TESTIMONIO DE UNA MAESTRA
C
Con el mayor respeto y atendiendo
una amable invitación del señor profesor
Hernán Fernández Sánchez, doy mi
pequeño aporte al conjunto de valiosos
testimonios sobre la fecunda labor
sacerdotal de Mons. Conrado Mundaca
Peralta, al celebrarse sus Bodas de Oro.
Merecido y justo es el homenaje que se le
tributa en estas fiestas jubilares porque
tan virtuoso sacerdote, a Semejanza del
Divino Maestro, con gran amor, en la
Parroquia del Sagrario de Santa
Catalina de Cajamarca, dedica gran
parte de su tiempo a cuidar, orientar y
modelar el alma de los niños. Lo hemos
vis to, con frecuencia, alegre,
perseverante y feliz, guiar a los niños
hacia Dios y al cumplimiento de sus
Sagradas Leyes.
Vivo está el recuerdo, en la mente de
todos, de la delicadeza con que explica
a los niños el significado de la presencia
de Dios Eucaristía, la necesidad de
amarlo y de hacer muchas obras buenas
en nuestra vida sólo por amor a Él.
Perenne y ejemplar, será para nosotros
los maestros, la hondura de su fe y la
didáctica forma de llegar a los alumnos
en la preparación de la Primera
Comunión. Ahí lo vemos con paciencia,
dulzura, respeto y hondo
convencimiento tratando de construir en
la mente y en el alma de los educandos
la "casa fuerte asentada sobre las
rocas" de la que nos habla Jesús en el
Evangelio. Para lograrlo no se detiene en
dificultad alguna, con su característica
serenidad, salpicada de gracia y buen
María Eugenia Guerra Salaverry.
humor. En las reuniones con padres de
familia y maes tros, ha bla de la
importancia de mantener a los niños día
a día, hora a hora, viviendo la vida
cristiana a imitación de tantos Santos
Varones y Mujeres que dedicaron su
vida al servicio de sus hermanos y, a
través de ellos, amaron a Dios y
cumplieron sus mandamientos.
Mons. Padre Mundaca ha extendido su
labor de modo principalísimo a los niños
porque son la esperanza de la Patria y
en ellos se refleja la "Sonrisa de Dios" que
cada cristiano debe conservar toda su
vida. Él, en su misión, evangelizadora, es
ante todo un Educador que enaltece el
espíritu del niño, sin menosprecio de su
cuerpo, porque sabe que, por ley natural,
el organismo, creación de Dios, es una
condición de vida del espíritu y que el
alma necesita del cuerpo, como el
músico de su instrumento, para lograr
equilibrio, arte y armonía. Por esta razón,
la preocupación de Mons. Conrado
Mundaca ha sido brindar a los niños
necesitados de nuestra ciudad
alimentos y cuidados materiales que les
permitan disponer de un cuerpo sano
para lograr una mente sana y una
espiritualidad robusta.
Este gran educador sabe también que si
no se siembra no se puede cosechar y,
por esto, él no cesa de sembrar en el
alma de cada niño el amor a Jesús, a su
Santísima Madre, la Virgen María, y a los
hombres porque somos hermanos. Sabe
muy bien que ésta es la única manera de
evitar la destrucción del hombre por el
25
La formación espiritual de los niños y jóvenes, era la principal preocupación
de Mons. Mundaca, por ello personalmente se dedicaba a prepararlos para
recibir a Cristo en sus vidas.
hombre y de alcanzar la paz, tan
anhelada sobre la Tierra, logrando a la
vez el cielo que Jesús nos ofrece.
Por todo ello, Cajamarca agradecida,
en estas Bodas de Oro Sacerdotales,
ofrece a Mons. Mundaca el tesoro de
sus niños y con amor le dice:
EN ESTAS BODAS DE ORO
QUE CUMPLE EL PADRE MUNDACA
VIBRA CAJAMARCA Y SACA
DE SU AMOR TODO EL TESORO:
Tesoro de sus cariños,
brillante promesa en flor
del querido bicolor:
La riqueza de sus niños...
Y ofrenda con humildad,
en gesto de gratitud,
esta riqueza y virtud
al Padre que es caridad.
Porque la paz y el cariño,
la ofrenda de más valor,
templo del mismo Señor,
es el corazón de un niño.
BIENVENIDO AMOR
María Eugenia Guerra Salaverry.
BIENVENIDO, BIENVENIDO, AMOR
(4 veces)
El amor y la justicia
nos dan la paz verdadera
que lleva al hombre, cimera,
eterna luz celestial.
BIENVENIDO, BIENVENIDO, AMOR
(4 veces)
FRATERNOS Y SIEMPRE UNIDOS
VIVAMOS HOMBRES, FELICES
Y A LOS POBRES INFELICES
DEMOLES EL CORAZON!
El que a sus hermanos no ama
es un hombre mentiroso,
si ufano dice y gozoso
que ama al Padre Celestial.
EN ESTAS BODAS DE ORO
QUE CUMPLE EL PADRE MUNDACA
VIBRA CAJAMARCA Y SACA
EL TESORO DE SU AMOR.
 LA COFRADÍA DE LA
SANTÍSIMA VIRGEN DEL CARMEN
Y LA CONFIANZA DE SALVACIÓN
D esarrollamos este tema, con
reconocimiento a la gentil invitación del
profesor Hernán Fernández, para honrar
con profunda admiración, cariño y
gratitud a nuestro Director Espiritual,
Mons. Conrado Mundaca Peralta, al
celebrar sus Bodas de Oro
Sacerdotales.
Nos conmueve pensar que "tanto amó
Dios al mundo que ha dado a su hijo
único, para quien crea en Él no perezca,
sino que tenga vida eterna" (Jn 3, 16-
17). Y nos alienta sobremanera conocer
que nos lo entregó por medio de María,
la elegida, la más pura, donde el Señor
quiso encarnarse y formarse.
¿Qué sagrario prepararía en Ella para
reposar y descansar como el Señor se
merece? ¿Qué don tan grande de amor,
desprendimiento del corazón de Dios
Amor, que llama al hombre a vivir de su
intimidad, en su mismo corazón? También
nosotros podemos ser sagrarios en los
que descanse Jesús. Imitemos a María,
siendo su Inmaculado Corazón el molde
divino donde nos formemos para que su
hijo pueda reinar en nosotros.
Con este pensar y conocer, sustento de
nuestra actitud católica, alabémosla y
ensalcémosla en la gloriosa devoción de
"LA SANTISIMA VIRGEN DEL CARMEN".
En Cajamarca, histórica y cristiana, como
en Palestina, donde se levanta el Monte
Carmelo, se alza una nubecilla que
derrama lluvia de bendiciones del mismo
modo que allá las aguas regaron la
tierra, fecundaron los campos y
produjeron dulces y sazonados frutos
para calmar el hambre y la angustia del
pueblo.
El conjunto de gracias que recibimos nos
impone conocer la historia de nuestra La fe inquebrantable hacia
Cofradía, desde sus orígenes, para que la Virgen María de gran
conociéndola la amemos y amándola, la parte de la población
sirvamos para gloria de Dios y bien del cajamarquina, hace que un
hombre. grupo de personas bien
intencionadas, formalice en
Nace la Cofradía de la Stma. Virgen del Cajamarca la “Cofradía de
Carmen el siglo XVI, cuando grupos de la Santísima Virgen del
convencidos cr istianos, llamados Carmen”, cuya labor no solo
carmelitas, compartieron oraciones y radica en la parte religiosa ,
buenas obras con el nombre de sino también en las labores
"COFRADES DEL ESCAPULARIO DE LA sociales y apoyo a la
comunidad.
SANTÍSIMA VIRGEN DEL CARMEN" a quien
amaban y veneraban con profundo
sentimiento de hijos, sintiéndose
protegidos de ella como el sediento por
las aguas de una fuente o como el
corazón por el consuelo que necesita a
cada instante.
Por ello, llevaron el "Escapulario Santo",
como signo de unión fraternal y como
seguridad de consuelo en las
dificultades de la vida y de la salvación
eterna, según promesa de la misma Stma.
Virgen a su siervo Simón Stok. Así lo
confirma Sor Lucía de Fátima quien
insiste que la Virgen quiere que se lleve el
Escapulario del Carmen como signo de
consagración a su Corazón Inmaculado,
pues mediante él llega hasta los hombres
su ternura de Madre. En las cintas del
Escapulario encontramos siempre los
26
brazos de nuestra Madre que nos
aprisionan dulcemente y, en los retazos
de tela, la expresión del amor de los que
aman a María de tal modo que jamás
den cabida en su corazón al maligno
espíritu y al pecado que aparta de Dios.
Al impulso de esta dulce historia,
devoción y sentimientos, nos reunimos los
cofrades de Cajamarca, en la Iglesia
Catedral, desde el 6 de febrero de
1959, en que fue fundada la "COFRADÍA
DE NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN",
teniendo la siguiente Junta Directiva:
PRESIDENTA: Srta. Mercedes Zaldívar,
VICE PRESIDENTA: Sra. María Vda. de
M i r a n d a, T E S O R E R A: S r t a. Lu c i l a
Zambrano, VICARIA DE CULTO: Srta. Delia
Chávez Miranda.
Siendo su Director Espiritual el Rvdo.
Padre Sixto Tapia. Posteriormente ha sido
dirigida, con trabajo y consagración,
por los Rvdos. Padres Manuel Ugaz en
1962 y Wálter Perales Gonzales, desde
1978 hasta 1981.
MONSEÑOR CONRADO MUNDACA
PERALTA EN SU RELACIÓN CON LA
COFRADÍA DE LA SANTÍSIMA VIRGEN DEL
CARMEN
Con inmenso aprecio y reconocimiento a
la obra fecunda, apostólica y fraterna
del Rvdo. Padre Conrado Mundaca
Peralta, en su relación con nuestra
Cofradía, damos el siguiente testimonio:
El día 17 de junio de 1982 asume la
Dirección Espiritual de esta importante
Institución Cristiana y Parroquial,
imbuido de un profundo amor a la
Santísima Virgen y con el deseo de
fomentar su culto y devoción entre los
cófrades que deben servir de ejemplo
de devoción mariana en el ambiente
cajamarquino.
Para lograr este objetivo, se traza el
siguiente Plan de Actividades que se
cumplen exactamente en ambiente de
fraternidad y profunda devoción:
Cada 16 de mes, durante todo el año, se
celebra una Misa en honor a la Santísima
Vi r g e n d e l C a r m e n a h o n d a n d o,
mediante la homilía, aspectos que
relacionan con la caridad, sello
característico del cófrade, y con la fe y
esperanza que deben ser el sostén de la
piedad, del amor a Dios y del trabajo
humano en su constante peregrinaje
hacia el Corazón del Padre. Durante la
Santa Misa por exigirlo las reglas de la
Comunidad Carmelitana y porque lo
exige el celo apostólico del Director
Espir itual, Mons. Padre Conrado
Mundaca, todos los cofrades llevan, con
sumo respeto, el Escapulario del Carmen
porque significa el abrazo de María al
hombre y la correspondencia de éste a
su querida Madre. Mons. Conrado, participaba activamente en todas las ceremonias
Pasada la Santa Misa, los miembros de la protocolares, logrando así acercarse a las autoridades y personalidades
cajamarquinas y para conseguir ayuda en su labor pastoral.
Cofradía sentimos los beneficios de su
orientación en una agradable
conversación sobre la fe, la piedad, la
humildad, la paz, la enorme caridad, la
fidelidad, la ternura, la delicadeza que
tuvo la Stma. Virgen en todos sus actos y
que deben servir de modelo a sus
cofrades en su relación personal, familiar
y social. Esta orientación agradable no
termina sólo en su intercambio verbal,
sino, manifestándose en la práctica, se
proyecta a la Comunidad para trabajar
en el Almacén Parroquial, Catequesis,
reparación para Sacramentos ya Padres
y Padrinos, colaboración con otras
Instituciones de la Parroquia en lo que
solicitan. Pero, sobre todo, cabe
destacar la enorme influencia que
dicha orientación tiene en las reuniones
que los cófrades celebran para
compartir el pan, la amistad y el afecto.
27
Durante el mes de julio, entre los días 7 y Madre pedimos que lo bendiga
17, con motivo de las celebraciones de diciéndole:
la festividad de la Stma. Virgen del
Carmen, el espíritu orientador y paternal Bendice al Padre Mundaca,
del padre Conrado Mundaca se Oh Reina Santa de Amor,
agiganta para presentar actividades con devoción te pedimos,
solemnes, ordenadas y llenas de Madre de nuestro Señor.
par ticipación comunal, mediante
mensajes a los fieles a través de los
sacerdotes y las radioemisoras locales. Carmen Velásquez de la Torre,
PRESIDENTA; Luis Pajares Castillo, VICE
El novenario está dirigido íntegramente
PRESIDENTE; Julia Quispe de Oblitas,
a hacer conocer los fundamentos
SECRETARIA; Carmen Salaverry de
históricos y de salvación que encierra el
Guerra, TESORERA; Rita Sánchez de
Escapulario Santo de la Virgen del
Barrantes, VICARIA DE CULTO;
Carmen y esta alentadora promesa de
Salvación eterna, escuchada por San Carmela Novoa de Siccha, VOCAL;
Simón Stok de los labios de María Maguina de Barrantes, VOCAL; María
Santísima: "LOS QUE MUERAN CON EL Aguilar de Tafur, VOCAL.
ESCAPULARIO DEL CARMEN NO SE
CONDENARÁN Y DURANTE LA VIDA
SENTIRÁN SU AYUDA EN LOS PELIGROS".
El Padre Mundaca, manifiesta su
convencimiento y respeto a las palabras
de María, en el rezo del Santo Rosario, la
Lectura de la Novena, la celebración de
l a S a n t a M i s a, l a Pro c e s i ó n, l a
conmemoración de los cofrades difuntos
y la recepción de nuevos cofrades, con
especiales recomendaciones y
preparación personal.
Enriquecido el espíritu con el Pan
Eucarístico, va la orientación al
m a n t e n i m i e n t o d e l c u e r p o, p r i n -
cipalmente de los necesitados, mediante
la participación de viandas en el Asilo
Por sus cualidades humanas y
de Ancianos, a los niños canillitas, a los espirituales y ese carisma que
m e n d i g o s, h e r m a n o s e n f e r m o s y emanaba, el Padre Mundaca
necesitados. era bien recibido en cualquier
En este Año Mariano, dedicado lugar que visitaba, su
capacidad de convocatoria
especialmente a honrar a la Santísima era demostrada en toda visita
Virgen María, rendimos homenaje al y actos religiosos que
Rvdo. Padre Conrado Mundaca. Peralta, realizaba con mucha fe y
en sus Bodas de Oro y a tan buena devocion admirable.

28
 MONSEÑOR MUNDACA
Y LA JUVENTUD CAJAMARQUINA
Francisco Centurión Obando

La figura de Monseñor Conrado un grupo juvenil de la Legión, decidí

Mundaca Peralta, ha resaltado en asistir a un retiro en el Colegio Cristo Rey.
Cajamarca estos 50 años de su vida Sólo conocía a los hermanos de mi
sacerdotal, íntegramente consagrada a grupo, los demás me eran desconocidos.
la Iglesia. Puedo resumir su personalidad Cuando los esperaba a la entrada llegó
como la de un sacerdote con vocación Monseñor Mundaca, quien acercándose
de servicio, con un profundo amor a la me preguntó mi nombre, y con un ligero
Iglesia, de asidua y constante oración y intercambio de palabras me sentí más
con su corazón siempre joven. integrado.
Estas cualidades han hecho de él un A lo largo de todo este tiempo, su
sacerdote que siempre está apto para iniciativa para conocer a los jóvenes
escuchar, dar consejos y aliento a las que por diversas circunstancias se
personas que diariamente acuden a él.
En la ciudad y en muchos pueblos, su
persona es muy querida y felicitada; es
un sacerdote que sabe llegar a los
demás y dar confianza. Siempre
esforzado en sus tareas litúrgicas y
apostólicas, para realizarlas lo mejor
posible.
Creo que una faceta de su
personalidad, tal vez no muy visible, es su
relación con la juventud. Su aspecto un
tanto serio, haría pensar que su relación
con los jóvenes no sería muy frecuente y
estrecha.
Sin embargo, es todo lo contrario. Son
muchos los jóvenes que acuden a él;
pero quiero referirme al movimiento de
laicos al que ha dedicado y dedica
gran parte de su tiempo: la Legión de
María, en la cual he vivido gratas
experiencias en el seguimiento a Cristo.
Recuerdo mi primer contacto personal Una faceta de su personalidad es la estrecha relación que mantuvo
con Monseñor Conrado Mundaca hace con los jóvenes, pese a su rectitud y disciplina, ellos se sentían muy
algo más de ocho años, en que después cómodos luego de conocerlo y compartir sus enseñanzas.
de algún tiempo de haber ingresado a

29
acercan a él, ha ayudado a un mejor
acercamiento a su persona mediante la
dirección espiritual afectuosa.
En muchas ocasiones he oído comentar
luego de las reuniones, retiros y jornadas
que él dirige, a jóvenes hombres y
mujeres, decir: "El Padre sabe llegar a
nosotros". Un tema constante en sus
alocuciones y charlas a los jóvenes está
referido a la vida cotidiana.
Continuamente compara: "cómo haría
Jesús y la Virgen María" esto o aquello,
estudios, comportamiento en el hogar,
trabajo apostólico, oración, etc. Siempre
nos sugiere empezar por dar testimonio
cristiano en las pequeñas cosas de la
vida diaria, y a exigirnos a nosotros
mismos. Esto en verdad contribuye a
formar la base de nuestra vida cristiana;
más aun cuando sus consejos van
acompañados con su vida metódica y
disciplinada que nos sirven de ejemplo.
En julio de 1984, ante el aumento de
grupos legionarios juveniles, se formó la
Curia Juvenil de la Legión de María, y a
fines de 1985 Monseñor Conrado
Mundaca se hizo cargo de la Dirección
Espiritual. Creo que es un gesto más de
su apoyo a la juventud, y que este
contacto continuo, lo ha llevado a tener
mucha fe y esperanza en ella, en muchos
casos a ponerla como ejemplo en los
grupos de adultos. Esto constituye un
gran estímulo, más aún cuando, en la
actualidad, para muchas personas, esta
esperanza en la juventud va
desapareciendo.
También es oportuno señalar su gran
facilidad para adaptarse a situaciones
de la vida comunitaria juvenil, en
veladas y paseos, en los que se
confunde con los jóvenes. No es raro
verlo participar en los juegos, y gozar de
su buen humor contando anécdotas o
vivencias, donde se rompe esa barrera
natural que siempre existe cuando los
jóvenes se hallan entre personas
mayores. Yo diría que sabe dar a cada
lugar y circunstancia su respectivo valor.
Su actitud de estar siempre pronto en
toda actividad, como signo de su
vitalidad, es una virtud más que los
jóvenes admiramos en él; especialmente
su participación en las peregrinaciones,
organizadas por la Legión de María
para realizar apostolado, donde
siempre participan buena cantidad de
jóvenes, que ven en Monseñor Conrado
Mundaca a un guía y acompañante,
entregado y constante en el trabajo,
con una vitalidad contagiante.
Su capacidad de escucha y
aceptación a sugerencias de
a c t i v i d a d e s j u ve n i l e s, s u a p oyo
incondicional con los medios necesarios
Mons. Mundaca tenia una
gran capacidad de
convocatoria, reunía
multitudes, como también
participaba de eventos
importantes, siempre
mostrando su sencillez y
amor al prójimo.
30
y con su presencia, son actos que nos
muestran su gran humildad, y que alejan
de los jóvenes el temor de tratar con
algún superior, para acercarlos más bien
a un amigo a quien se respeta. A pesar de
todo esto, también su humildad, lo lleva a
decir en ocasiones no tener carisma para
los jóvenes; sin embargo los que tratamos
con él vemos que no es así.
Además de tener contacto con jóvenes,
que acuden a él para recibir consejo o
ayuda, es solicitado para dar charlas en
Colegios del medio. De igual manera
muchas personas, que conocieron a
Monseñor Conrado Mundaca cuando
jóvenes, le guardan gratitud, respeto y
confianza.
Todas estas acciones y actitudes
descritas, con las que Monseñor Mundaca
se abre a la juventud, como distintivo
peculiar de su persona consagrada al
servicio de la Iglesia, muestran, una Iglesia
siempre joven, en la que la presencia de la
juventud, indica que la Iglesia la acoge, Tal vez lo antedicho no colme en su Los 75 años de edad de Monseñor
considera y entiende; y que en totalidad las expectativas del tema que Conrado Mundaca, su persona, sus
consecuencia, le comunica la Buena estamos tratando, “Monseñor Mundaca y actos, su vivencia entre los jóvenes,
Nueva de Cristo como modelo, al saber la juventud de Cajamarca”, que sugiere muestran y traslucen que la juventud no
que los jóvenes son parte insustituible en mayor amplitud y, seguramente, muchos es solo un grupo de personas de edad
la Iglesia. valiosos testimonios. Pero creo que estas
cronológica. Es también una actitud
referencias concretas del contacto entre
Que sus pequeños trabajos y desprendi- Monseñor Mundaca y la juventud, que ante la vida, en una etapa no definitiva
miento y aún su solo contacto o presencia corresponden a mi particular vivencia sino transitoria.
en ella, constituyen ya una gran vivencia, de estos últimos años, son una pequeña Quisiera permitirme, en nombre de la
que marca el sentido de ser cristianos, muestra de este contacto con los
desde los primeros años. juventud cajamarquina de ayer y de hoy,
jóvenes, siempre presente a lo largo de aunarme al gozo de la comunidad
Pero esta preferencia de la Iglesia por la sus 50 años de consagración Esta foto histórica habla por si
cristiana, al celebrar las bodas de oro
juventud, no sería posible si sus represen- sacerdotal. sola, se aprecia un inmenso
tantes o ministros, no se esforzasen por sacerdotales de Monseñor Conrado
En el sentido cronológico podría grupo de jóvenes estudiantes,
acoger, escuchar, orientar y confundirse Mundaca Peralta, agradecerle su luego de una jornada de trabajo
hablarse de un acercamiento y servicio
con ellos, lo que muestra la realidad de constante a los jóvenes de ayer y de hoy apoyo y acompañamiento a la juventud, y aprendizaje en plena
esta preferencia. En este sentido las en Cajamarca, sin escatimar esfuerzos ni y al mismo tiempo desearle que su labor construcción del Santuario de
cualidades y el carácter de Monseñor tiempo. Entrega que mantiene su fecunda de estos 50 años, llenos del Santa Apolonia, la tarea de
Conrado Mundaca dan muestra y personalidad en un estado de espíritu mariano, sigan siendo bende- cada joven era llevar un ladrillo
ejemplo de este anhelo de la Iglesia. permanente juventud. cidas por el Señor. hasta el lugar de construcción.

31
 EL CATECISMO "SANTA MARÍA GORETTI"
COMO FUENTE DE FORMACIÓN CRISTIANA
PARA LA NIÑEZ CAJAMARQUINA
MO N S E Ñ O R CONRADO
MUNDACA PERALTA, ama a los niños con
el amor que saca del Sagrario. Es de
conocimiento de todos que su celo
apostólico se cristaliza en el amor al
prójimo, especialmente a los más
necesitados: ancianos, enfer mos,
desvalidos; pero es muy notoria también,
su marcada predilección por los niños;
seguramente anhela ver en cada uno de
ellos el futuro hombre de bien, que
primero deba conocer a Dios, para
luego amarle, pues nadie ama lo que no
conoce. Este amor a Dios se proyectará
a su prójimo.
Durante los cincuenta años de su vida
sacerdotal, lo vemos entregado a la
enseñanza de la Doctrina Cristiana,
fuente y manantial de una sana
pedagogía y de una fecundidad
maravillosa.
La experiencia nos dice que si no
conocemos la hermosa Doctrina de
Cristo, no la podemos amar y mucho
menos practicar. Es necesario pues, que
los niños desde que nacen empiecen a
conocer a Jesús. Así lo entiende
Monseñor Mundaca.
Este ejemplar sacerdote, allá por la
década del cincuenta da un gran
impulso al aprendizaje del Catecismo.
Con mucho entusiasmo los niños de las
escuelas de la localidad participan en
un Concurso Público, cuyo premio al
ganador fue un hermoso Cuadro del
Corazón de María, que da el más
perfecto ejemplo a la niñez.
Rosa Elvira Rodríguez de la Puente.
La trayectoria de su labor catequística
no tiene límites porque siempre al inicio
del año escolar, con humildad que le
caracteriza y su acostumbrado interés
por el Catecismo, habla con las
autoridades de Educación y toca las
puertas de cada escuela para solicitar
horas, dedicándolas a la enseñanza del
Evangelio, semillero de amor, de
optimismo, de dicha, de paz, y siguiendo
las huellas del Divino Maestro, Jesús.
En el año 1982 el Señor Obispo, muy
acertadamente, lo nombra Párroco del
Sagrario. Qué oportunidad más propicia
para formar un grupo catequístico; así lo
hace y le denomina con el nombre de Para el Padre Mundaca, no existía lugar lejano o reuniones importantes para
"SANTA MARÍA GORETTI". Invita a padres
llevar la palabra de Dios e inculcar los valores humanos, siempre coordinando
para lograr sus objetivos de ayuda a los más necesitados.
de familia, para que matriculen a sus
hijos. También invita a algunas personas
que conocen y aman a los niños, para
que colaboren con él en este glorioso,
fecundo, necesario y urgente oficio,
llamado "Santísimo", por S.S. el Papa Pío X,
de feliz memoria.
Bajo su paternal dirección funciona este
Catecismo, con un promedio de cien
alumnos asistentes distribuidos por
grados y secciones.
Los catequistas, actualmente formamos
un grupo de catorce personas, de las
cuales cinco con experiencia en la
docencia y nueve siguiendo sus estudios
de Educación Superior, que gustosos
hemos escuchado el llamado de Dios,
mediante la convincente invitación de
Monseñor Mundaca, que con paternal
32
acogida, los domingos recepciona a
alumnos y catequistas ensayando
canciones. Esperamos las 8.30 de la
mañana, para ingresar al templo en
ordenada formación y cumplir con la
obligación de todo cristiano de
participar en el Sacrificio incruento del
Calvario, la Santa Misa.
Mediante el diálogo, instruye a los
asistentes, acerca de los ornamentos
sagrados, su uso y significado. Se
entonan canciones y se comentan las
Lecturas y el Santo Evangelio.
Terminada la Santa Misa, se da
comienzo a la no improvisada sesión
Catequística. En orden y por secciones,
los alumnos van con su respectivo
catequista, a desarrollar el Programa
elaborado de antemano por el Director y
que consta de cinco partes:
- Oraciones: De acuerdo al grado de
estudios.
- Breve comentario del Evangelio del
día: Afianzando la Homilía.
- Doctrina: También según el grado de
estudios.
- Nuestros deberes: Para con Dios,
nuestros padres y superiores y con el
prójimo.
- Aplicaciones prácticas para la vida:
Deducidas de la misma Doctrina.
Para coordinar acciones, los jueves de
cada semana, se reúne con los
catequistas, por espacio aproximado de
una hora, nos da bellas informaciones,
nos hace hermosas lecturas, nos
comunica y comenta los principales
acontecimientos que se relacionan con
el Santo Padre; vidas ejemplares y otros
de la actualidad.
Nada hay que extrañar en la
organización del Catecismo "Santa
María Goretti" pues, no solamente se
enseña y aprende la Doctrina, sino que
también se disfruta de momentos de sana
recreación y esparcimiento; anualmente
nos vamos de paseo al campo, se elige
un lugar cercano para que puedan ir
hasta los más pequeños, sin emplear
movilidad. Par timos todos juntos,
teniendo –como guía al Párroco y Pastor;
se juega, se divierte y se disfruta de un
rico almuerzo proporcionado por la
Parroquia y preparado por algunos
Catequistas. Igualmente participamos en
el Banquete Eucarístico de la Santa Misa
que antes del paseo o al término de él,
celebra nuestro Director.
“A Jesús por María", es el lema de Monseñor
Mundaca, que en todo momento infunde la
devoción a la Madre de Dios,
especialmente en este año dedicado a
Ella, y siendo el Santo Rosario la devoción
predilecta de nuestra Madre del Cielo, él
recomienda de modo especial su
cotidiano rezo. Siempre acudía a cualquier lugar que le solicitaran para difundir la palaba de
Como homenaje a nuestra Santa Patrona, Dios y celebrar actos litúrgicos y eventos religiosos.
cada 6 de julio se hace una pequeña
procesión los niños llevan en andas la
venerada imagen de esta mártir de la Previa preparación de padres de familia y
pureza. alumnos, el 8 de diciembre de cada año,
los niños del Catecismo reciben por vez
primera el Cuerpo de Cristo.
Esta armoniosa y bella tarea, culmina
anualmente, con una ceremonia, que no
por sencilla, deja de ser solemne.
Niños y niñas, todos con mucho interés
coleccionan sus comprobantes de
asistencia dominical, para que según el
número de ellos tengan opción a escoger
entre todos los premios obsequiados por la
Parroquia, el que es de su agrado.
Esta es, en resumen, la modesta labor
catequística realizada para gloria de Dios
y honra de María, su madre.
Confiamos que a los ojos del Altísimo, sea
grande y fructífera, como grandes son
todas las obras que ha emprendido y
emprende nuestro bien querido Monseñor
Conrado Mundaca Peralta.
33
 TESTIMONIO DE UN SACERDOTE
I nvitado por la Junta del Comité
para la celebración de las bodas de
oro sacerdotales de Mons. Conrado
Mundaca Peralta, para escribir algo
acerca de su "labor como párroco,
profesor, amigo, apóstol y consejero" y
contribuir así a hacer una antología de
testimonios sobre la obra de tan ilustre
sacerdote, me atrevo a acceder
sintiéndome muy honrado y feliz de
poder corresponder agradecido a lo
mucho que le debo.
Mons. Conrado Mundaca, nació en
Querocoto, comprensión de la
provincia de Chota, el 21 de setiembre
de 1912. Algunos años fue alumno del
Seminario San José, hizo sus estudios de
Filosofía y Teología en el Seminario de
San Carlos y San Marcelo de Trujillo. Fue
ordenado sacerdote el 13 de Febrero
de 1938, en Lima. De inmediato fue
nombrado profesor del Seminario menor
de San José y Capellán del Asilo
"Obispo Grosso" de Ancianos
Desamparados. Varios años dedicó
buena parte de su trabajo a la
formación intelectual y moral de los
seminaristas.
Cuando Mons. Teodosio Moreno fue
trasladado a otra diócesis y, en su lugar,
fue nombrado obispo de Cajamarca
Mons. Pablo Ramírez Taboada, lo
nombró este prelado su Vicario General,
cargo que desempeñó durante todo el
tiempo que este benemérito prelado
sir vió a Cajamarca. Cuando el
Obispado quedó vacante, por renuncia
de Monseñor Rivera, Monseñor
Mundaca fue nombrado Vicar io
R.P. Walter Perales González
Capitular hasta que tomó posesión del
Obispado Mons. José Damnert Bellido,
nombrado para Cajamarca en Marzo
de 1962, y que es nuestro obispo actual,
que no juzgó conveniente tener Vicario
general y por eso, ha tenido a bien
nombrarlo su Delegado.
Por muchos años ha servido como
Capellán del Colegio Nacional de
Santa Teresita contribuyendo a la
formación de muchas señoritas y, más
tarde, de muchas profesoras, cuando se
creó la Normal de Santa Teresita, junto al
Colegio del mismo nombre.
A la muerte del Deán del Cabildo funciona. Durante su gestión los socios
Catedral Monseñor Héctor Alegría, fue recibíamos el 5 % de nuestros ahorros,
nombrado, en su lugar, Monseñor que sus sucesores lo quitaron hasta hoy.
Mundaca Deán del mencionado En 1963 fue nombrado párroco de
Cabildo y lo es hasta ahora. Santa Catalina, pero en Setiembre pidió
licencia y en Diciembre renunció, para
Durante varios años ha sido Profesor de
poder continuar los trabajos que tenía
Religión en el Colegio Nacional de San
entre manos desde mucho tiempo atrás.
Ramón.
Monseñor José Damnert, nuestro actual
Al poco tiempo de ordenado, como un Obispo, en atención a que la ciudad ha
acto de gratitud al Seminario que lo crecido mucho en población y extensión
formó, fundó la liga sacerdotal, hasta 1982, y su sucesor resultaba un
integrada, al principio por ocho "cura fantasma" demasiado incapaz
sacerdotes. Un poco más tarde fundó la para servir bien una parroquia tan
Asociación de obreros católicos. grande, decidió desmembrar de la
Monseñor Ramírez le encargó que parroquia de Santa Catalina y erigir
hiciera un cursillo de cooperativismo y con una parte de su territorio y
luego que terminó tal cursillo echó las población la nueva parroquia, con el
bases de la Cooperativa de Crédito nombre de "Ntra. Sra. de Guadalupe",
San Pío X, de la cual fue su gerente asignándole, de conformidad con el C.
abnegado y dinámico, casi todo el 1.500 del Derecho vigente entonces, la
tiempo sin sueldo: le dedicó mucho de su mitad de su renta.
tiempo, de día y de noche. Por su El R.P. Walter Perales, vivió su Tan pronto como se hizo cargo, de
iniciativa y dirección, se edificó su apostolado muy cerca del Padre nuevo, de la parroquia madre, Santa
magnífico local, donde actualmente Conrado, por muchos años. Catalina, porque así lo dispuso Mons.
34
Damnert, Mons. Mundaca demostró otra
vez su gran habilidad organizativa, su
dinamismo y espíritu de ser vicio,
logrando una verdadera resurrección
espiritual de una buena parte de sus
feligreses.
Entre sus logros importantes, me parece,
que está la "Fundación Mons. Pablo
Ramírez Taboada, que proporciona
alimento diario a unas cien personas,
además de formación catequística. A
esta institución la ha dotado de un
hermoso y cómodo local en que se
ofrece asistencia médica y formación
laboral.
Secreto de su éxito: es un hombre con
cualidades humanas envidiables: su
memoria feliz conserva el nombre y
fisonomía de muchísimas personas; su
jornada de muchas horas de trabajo, es
tan ordenada que podemos saber, con
precisión casi matemática, a qué hora se
le puede encontrar y dónde; en
Cajamarca es casi el único "puntual" en
todas las reuniones, que no son pocas, a
las que tiene que asistir; es proverbial su
talento organizativo y práctico; a pesar
de su temperamento tímido, tiene coraje
para decir lo que tiene que decir; es
perseverante en todo lo que se propone
hacer para bien de la sociedad; su
desinterés por los bienes temporales es
ejemplar: es casi el único, que en su larga
carrera sacerdotal no tiene casa ni
ahorros personales en el Banco.
Sobre la base humana el Espíritu del
Padre y del Hijo ha formado al cristiano
es decir al hombre de fe, esperanza y
amor. Diariamente dedica un buen
tiempo a la oración, individual y
colectiva: A las 5 a.m. está en pie, desde
las 5.30 a.m. hasta las 6.30 a.m. al menos,
está ante el Sagrario honrando al divino
p r i s i o n e r o d e l a m o r, J e s u c r i s t o
sacramentado; la recitación del
Breviario u Oficio divino lo hace
respetuosamente, sin apresuramiento y
con una pronunciación clara en el tono y
en la vocalización. Su amor a la Santa
Madre de nuestro Salvador es manifiesto
y le ha llevado a levantarle un hermoso,
aunque pequeño santuario y le hace
recitar diariamente el Rosario
devotamente. También carga durante
muchos años la responsabilidad de
dirigir espiritualmente la Legión de María,
tanto en su consejo llamado Comitium
como en los destacamentos llamados
Praesidia, que son tantos, que resulta
difícil entender cómo se da tiempo para
ello.
Finalmente, sabiendo que el camino normal
para alcanzar a Jesucristo es el camino de
la CRUZ, ésta no puede faltar en su vida.
Aunque se le ve siempre alegre, no cabe
duda que sufre porque tanto los
sacerdotes que somos sus ex alumnos, como
muchos profesores, varones y mujeres, a
quienes ha tratado de formar
En cada acto religioso o lugar de residencia, denotó sencillez,
cristianamente, no imitarnos como es cualidad que lo llevó consigo hasta los últimos días de su vida, jamás
debido, su espíritu apostólico. Me parece gozó de bienes materiales, todo lo dedicó al servicio de los demás.
que son muchos centenares de personas
de uno y otro sexo, que de una u otra forma,
han recibido sus enseñanzas y qué pocos
han comprendido que estamos obligados
por razón de nues tro bautismo y
confirmación a proclamar, con la palabra y
la vida, el mensaje del reino de Dios.
Muchas personas están contribuyendo con
un óbolo totalmente voluntario para
hacerle una demostración de su gratitud y
admiración. Qué hermoso y grato le
resultaría si decidieran, precisamente, como
un homenaje, ofrecerle decidida y
sinceramente, trabajar cada cual en el
campo que la divina Providencia les ha
colocado, imitando, siquiera de lejos, su
espír itu a postólico, basada en la
verdadera piedad y devoción, la mejor de
todas, manteniendo siempre el estado de
gracia.
35
 FUNDACIÓN
"MONSEÑOR PABLO RAMÍREZ TABOADA",
OBRA DEL AMOR CRISTIANO
"Porque tuve hambre
y me diste de comer...
tuve sed
y me diste de beber..."
Que el Señor ama tiernamente a sus hijos
más necesitados, que su Providencia es
palpable con los que confían en Él, son
frases conocidas, aceptadas, pero ¡qué
hermoso es vivirlas!
En Cajamarca, hay una Casa que se
llama y no por casualidad, "De la
Providencia" y la entidad que la regenta
es la "Fundación Mons. Pablo Ramírez
Taboada", dirigida por su Fundador y
Presidente Vitalicio: Mons. Conrado
Mundaca Peralta.
Algo de historia: En una reunión de la
Legión de María, se informaba acerca
del trabajo realizado y una hermana
expresó: "Hemos visitado a una familia. La
madre, postrada en una cama con
neumonía, manifestó que su "compañero"
estaba en la cárcel. Sus tres niños, de
pocos años de edad, no habían
probado bocado y eran las cinco de la
tarde".
Tal informe fue motivo de honda reflexión:
se habla, mucho de cambios de
estructuras, todos de acuerdo, es
urgente; se dice que es preciso evitar los
"parches", que solucionan sólo
aparentemente las situaciones de
injusticia social, expresión verdadera,
Lilia Torres Sánchez.
p e r o, e n t a n t o n o c a m b i a n l a s
estructuras, hay tres niños que tienen
h a m b re, q u e n o t i e n e n e d a d n i
capacidad de trabajo, y cuyos padres
están imposibilitados para atenderlos.
Hay que poner un parche no sólo
necesario sino decisivo...
Por otro lado, la Legión tiene su carisma
propio: la Evangelización. Es importante
no desviarlo, no por menosprecio a otras
obras, sino porque es imposible
abarcarlo todo y hay que ser fieles al
espíritu con que se fundó la institución.
Alternativa: formar un grupo en la Así luce el hermoso local de “La Casa de la Providencia” en la ciudad de
Parroquia que, como en otro tiempo los Cajamarca, obra dedicada a la ayuda de los ancianos y niños desposeídos.
Diáconos, se encarguen más espe-
cíficamente de estos casos de asistencia
social... Era preciso también contar con
un fondo de ayuda para casos de
emergencia; se podía recurrir a la
generosidad de los cristianos de
Cajamarca para que donen algunos
centavos mensualmente. El grupo
legionario en sesión reunió los primeros
aportes. Treinta soles fue el primer capital
de la nueva Obra.
¿Cómo comenzar? Surgieron personas
voluntarias, no legionarios, quienes se
comprometieron a procurar la
preparación de un frugal almuerzo, al
que se invitaría a las personas que en las
visitas domiciliarias se encontraran
desamparadas y sin recursos.
Los Padres Franciscanos cedieron un
lugarcito de su Convento, allí, "Toya", que
36
hasta hoy es la artista de la Cocina de la
Providencia, preparaba una olla de
sopa que las personas recogían en
tazones y tarritos para almorzar en casa.
Así nació lo que al principio llamamos "El
Comedor" y que pronto se convirtió en la
Fundación "Monseñor Pablo Ramírez
Taboada", en recuerdo al querido
Obispo de la Diócesis, que falleciera en
Huacho.
El 19 de diciembre de 1,967, se inaugura
la Fundación como un Servicio Benéfico
Social Cristiano.
Se advierte que son los niños quienes
necesitan de mayor amparo y se
reglamenta el Comedor para niños de 3
a 12 años y ancianitos que ya no están
en condiciones de trabajo.
EL LOCAL. El Obispado de Cajamarca,
como hermoso signo de apoyo a la
Obra, dona un terreno en la Calle
Horacio Urteaga y la indesmayable
constancia de Monseñor Mundaca,
convierte el lugar en un hermoso local,
digno de nuestros niños. El Ingeniero
Baltasar Sáenz colabora con los Planos y
nuevamente el Constructor del Santuario,
Marcos Huaccha, ejercita el arte de la
albañilería.
LA PROVIDENCIA. Podemos señalar
numerosos testimonios del auxilio divino:
La Casa de la Providencia se mantiene
en base a colaboraciones voluntarias,
nadie sale a pedir, las donaciones llegan
generosamente.
-No se extienden recibos, se practica una
gran confianza.
-Durante veinte años, se ha dado servicio
permanente y en forma regular; las alzas
por el cos to de vida, las cr isis
económicas, se superan de manera
providencial.
- Naturalmente, a la vanguardia de esa
vivencia de amor fraterno, está
Monseñor Mundaca, a quien pedimos
perdón por herir su modestia, pero,
podemos asegurar que cuanto
pequeño beneficio pecuniario recibe
es para sus niños, incluyendo los
estipendios de las Misas Comunitarias
que cada día celebra en la Catedral.
Aún así, consideramos extraordinario
que, en forma completamente gratuita
almuercen diariamente un centenar de
niños y una veintena de ancianos.
- Como sacerdote, junto al pan material,
Mons. siembra en los niños las sólidas
bases de una formación
auténticamente cristiana; con
paciencia ejemplar les enseña el
Catecismo y corrige sus pequeñas
travesuras. Se preocupa por sus
estudios y cada año procura que En cada rincón de la Casa de la Providencia se siente la presencia del
Padre Conrado, se respira paz y amor y está lleno de mensajes de
todos cuenten con los cuadernos y
solidaridad y entrega total a nuestros semejantes.
útiles necesarios; apoyado por la
Legión de María, ofrece a los
pequeños, clases de reforzamiento
escolar. Es el padre de la Casa.
OTROS SERVICIOS. Un plato de comida
para quienes tienen necesidad "de
emergencia" (como se procura que sea
el grupo de los beneficiados), es
hermoso, pero incompleto. Por ello, la
Fundación Mons. Pablo Ramírez abre
otros canales de caridad:
La Caja de la Providencia. Una
pequeña Cooperativa de Crédito que
deja algunos réditos en favor del
Comedor y al mismo tiempo, ayuda a los
socios con préstamos oportunos, se crea,
el 29 de julio de 1,979 y cuenta con 736
socios.
Ofrenda de la Providencia. Una
pequeña mutual que ayuda a la familia
de los socios fallecidos con un aporte de
37
todos los hermanos. Esta se inicia el 24 de
abril y son ya muchos los hogares que se
han visto favorecidos.
El Consultorio Médico. Es un servicio
que canaliza la ayuda de Alemania
Católica, a través de medicina gratuita
para personas indigentes. El Doctor José
Villavicencio Pajares, con una profunda
mística de vocación humanitaria, atiende
cada día en un ambiente de la Casa de
la Providencia y son numerosos los
enfermos que se ven favorecidos con los
fármacos que cuidan de su salud.
Los Talleres de padres. Es un servicio tal
vez nuevo e incipiente en la Fundación,
pero, al que se le quiere dar, de hoy en
adelante, una decidida atención.
Todos sentimos que el solucionar
necesidades emergentes, como es la del
alimento, es indispensable, pero sólo un
primer paso para el logro de una
sociedad donde la fraternidad tome su
verdadero rostro que es el de la justicia y
el amor. En cambio, o paralelamente, la
promoción del trabajo, es un servicio de
mayor raigambre, por ello se han
instalado algunos talleres.
Siempre con la ayuda de Alemania y del
Anterior Taller "Santa Rosa" dirigido por
la Señorita Sofía Mashota, se cuenta con
doce máquinas de coser, a las que la
Corporación CORDECAJ, ha
implementado con una máquina de tejer.
Se está iniciando un pequeño taller de
costura. Además se organizó en el año
próximo pasado un Club de Madres con
talleres de tejidos de paja, bordados,
etc. En el presente año se instalará un
Programa permanente de alfabetización
y reforzamiento escolar.
La Casa de la Providencia, es un servicio
concreto y engalana la ya hermosa
trayectoria de entrega y generosidad
de Mons. Mundaca.
Que sus Bodas de Oro Sacerdotales,
sean una ocasión para reflexionar en la
necesidad que tenemos los
cajamarquinos de secundar su obra. Si
hasta la fecha, muchos contribuyen con
los óbolos materiales, con esta ocasión,
pedimos el apoyo del trabajo generoso.
La Fundación necesita docentes,
técnicos y toda persona de buena
voluntad que quiera donar parte de su
tiempo para el servicio de los demás.
Como toda Obra de Dios, la Casa de la
Providencia, sufre también pequeños
dardos de incomprensión y hasta
censura, pero, bas ta un análisis
consciente, a la luz del Evangelio, para
quedar con la íntima satisfacción de que
esta Fundación y, en especial, la persona
de Mons. Mundaca, siguen directamente
En los interiores de la Casa de la Providencia podemos apreciar su pequeña
los pasos del Jesús auténtico del
pero hermosa capilla, que es frecuentada por niños y ancianos en forma
Evangelio, siempre sensible ante las
permanente.
necesidades de toda índole, siempre con
un acercamiento especial a los pobres,
siempre dispuesto a alternar su altísima
predicación, con los humildes servicios
de la comida y hasta, como en la Ultima
Cena, de lavar los pies a sus hermanos.
38
 LA CASA DE LA PROVIDENCIA
Por el mes de mayo de 1,979 en
sucesivas conversaciones, que estaban
llenas de voluntad de servicio para
socorrer a los demás, Mons. Conrado
Mundaca Peralta en un ejemplo de
dinamismo anhelaba instituir de la forma
más apropiada, un nuevo servicio en el
que los miembros de la Fundación
Monseñor Pablo Ramírez Taboada "Casa
de la Providencia", que estaban unidos
en la atención del comedor, pudieran
ayudarse mutuamente, incentivando su
solidaridad y su amor en forma horizontal,
y después de algunas consultas a
integrantes de la "Casa de la
Providencia" y con la experiencia que en
cooperativas de ahorro y crédito tiene el
Rvdo. Padre, que como cristiano realiza
una caridad fraterna y efectiva,
esforzándose en hacer suyos los
s u f r i m i e n t o s, l a s d i fi c u l t a d e s, l a s
necesidades materiales y espirituales del
prójimo en el intento de compadecerlas,
socorrerlas y aliviarlas, exige espíritu de
sacr ificio y deshacimiento de la
comodidad y bienestar propios, y sólo es
posible si el amor al prójimo es semejante
al de Jesús, es decir si precede a un amor
grande al Padre Celestial.
Este anhelo se hace realidad cuando
después de tomar todas las previsiones
del caso, el día 29 de julio de 1,979, se
crea la pequeña "Cooperativa de
Ahorro y Crédito" como un servicio de la
Casa de la Providencia, a la que se le
pone el nombre de "Caja de la
Providencia". En esta Mini Cooperativa
de Crédito los intereses del capital
Luis Chávarry Rodríguez
ahorrado por los socios se aplican como
una ayuda a la "Casa de la
Providencia"; esto desde luego ha
seleccionado a los cristianos que
realmente quieren ayudar.
Tenemos que resaltar la forma como es
conducido este ser vicio con la
participación directa Mons. Conrado
Mundaca Peralta, que ha preparado al
personal que durante estos ocho años
atiende a la oficina de la Caja.
Las cuentas llevadas con gran escrúpulo
y maestría han hecho que este servicio,
tomando las mismas palabras de Mons.
Padre Conrado Mundaca Peralta,
"creciera como la bola de nieve a
medida que avanza".
El 19 de abrí de 1,984, por iniciativa del
Rvdo. Padre Conrado Mundaca Peralta
se gesta la "Ofrenda de la Providencia"
cuya reglamentación fue aprobada en
Asamblea General del 29 de julio de ese
mismo año con una pequeña mutual
para el caso de fallecimiento a la que
contribuyan voluntariamente los socios
inscritos para este fin.
Todo esto es posible gracias a un
sacerdote, nuestro querido Mons.
Conrado Mundaca Peralta, que, en
nombre de Jesucristo, ha entregado 50
años de su vida, ejercitando su ministerio
sacerdotal, siempre con su sonrisa serena,
con su mano extendida, siempre con su
voluntad alerta para socorrer a los Actualmente la Congregación “Hijas de María Inmaculada, bajo el patrocinio
demás. de San José” tiene a su cargo el funcionamiento de la Casa de la Providencia,
allí reciben atención y alimentación numerosos ancianos y gran cantidad de
niños en condiciones de pobreza.
39
 En la Calle Cinco esquinas entre Amazonas y Amalia Puga, funcionó
hasta estos últimos años un comedor para niños y ancianos de bajos
recursos, fundado por Monseñor Conrado Mundaca, el cual a su
fallecimiento le pusieron su nombre.

40
 ANÉCDOTAS DE MONSEÑOR
CONRADO MUNDACA PERALTA
José Ramón Gaona Mendo, colaborador del Padre.
“P ara todo pecado hay perdón
(Juan XXIII), la Reconciliación, la
Comunión y perdonar setenta veces
siete”.
Un día el padre me hizo una invitación:
- Ramoncito, te invito a una PPC.
- Padrecito, ¿me está invitando a un
partido político? (pensaba en el Partido
Popular Cristiano). – No hijo, significa
Peregrinación por Cristo, por sus siglas
P.P.C. – Disculpe Padre. - No te preocupes,
ya aprenderás a poquitos; nosotros los
cristianos somos como semillitas que
tenemos que brotar con nuestra doctrina
cristiana.
Eso fue en el año 1973 o 1974, cuando
estábamos en la Legión de María y
fuimos en esta misión a Cajabamba.
Otra anécdota: Estábamos caminando
por el campo, de pronto el padre se
detiene de golpe y dice: -Esperen. Y con
toda reverencia se arrodilla y levanta
unos palos en forma de cruz, la besa y la
guarda en su bolsillo. -Esta es la cama
de Cristo crucificado – sentenció. -
Padre, ¿qué tiene que ver eso?, pueden
haber más cruces por el camino. – Las
levantaremos todas. Es la tradición de la
Iglesia Católica, sentenció sin vacilar.
Era un hombre de oración y nos la
recomendaba para todo momento:
oraciones del día, al terminar el día, a la
hora de los alimentos; al ingresar al
trabajo pedir la bendición, lo mismo
antes de iniciar un viaje, estar siempre en
gracia de Dios. - Porque Dios lo puede
todo, hazlo siempre, Ramoncito, -me
decía-.
Recuerdo algunas de sus frases con las
que siempre nos aconsejaba:
-Con la paciencia se gana la gloria.
-El cristiano debe tener todos los
condimentos, al igual que la comida. Me
refiero a los siete sacramentos de la Gran parte de su vida Mons. Conrado Mundaca la pasó en las
Iglesia, nos decía. instalaciones de la Catedral de Cajamarca, desde allí pudo coordinar
Mons. Mundaca funda en Cajamarca el sus acciones de solidaridad y bien social, ganándose el cariño, respeto y
aprecio de la ´población cajamarquina hasta nuestros dias.
grupo apostólico Legión de María en los
tiempos de Monseñor Pablo Ramirez
Taboada.
Estimaba mucho a los papas, que
gobernaron la Iglesia mientras él vivió,
desde Pio X, Juan XXIII, Pablo VI, Juan
Pablo I, Juan Pablo II, Benedicto XVI. Le
gustaba escuchar sus mensajes y estaba
muy atento a sus Encíclicas y todas sus
indicaciones.
Por Mons. Mundaca se empieza a tener
monitores en las misas, para que ayuden
y entusiasmen a los fieles en la
celebración, como lo es actualmente.
Con el padre Mundaca se empieza a
celebrar las misas en castellano, en los
tiempos de Juan XXIII, conocido como “el
Papa Bueno”, en coordinación con el
Obispo José Damnert Bellido.
41
 Don Ramón Gaona Mendo, tuvo la suerte de compartir desde muy niño con
Mons. Mundaca, en calidad de colaborador de confianza ya que su padre
era el sacristán de la iglesia; él nos muestra los lugares preferentes del Padre
dentro de las instalaciones de la Catedral.

42
 No existe lugar alguno en
la Catedral de Cajamarca
que Mons. Conrado no
haya pisado, incluido el
campanario cuando
enseñaba a tocar los
repiques, labor que lo
hacía en forma personal.

En el sótano de la
Catedral se encuentra la
modesta y sencilla tumba
que guardan sus restos,
haciendo honor a su
santificada personalidad

43
 “SAN PÍO X”, PIONERA DEL
COOPERATIVISMO EN CAJAMARCA
Al señalar las obras de Monseñor
Conrado Mundaca en Cajamarca como
una necesidad de dar gloria a Dios y de
cristalizar el honroso sentimiento de la
gratitud, resalta por amplia y concreta la
fundación de la Cooperativa de
Crédito "San Pío X" Ltda. No. 26.
Como es frecuente entre los religiosos, el
primer paso es fruto de la obediencia. Es
Monseñor Pablo Ramírez Taboada,
entonces Obispo de Cajamarca, quien
pide a Monseñor Mundaca que se
interese por esta forma de solidaridad
que se extendía por el Sur del Perú, y le
facilita el viaje a la ciudad de Puno,
para asistir a un Curso sobre
Cooperativismo, organizado por la
Cooperativa "San Juan Bautista". A su
retorno, con el ascendiente y confianza
de que ya gozaba en la ciudad, le fue
muy fácil reunir 68 personas con las
cuales tuvo la reunión preliminar el 14 de
junio de 1,958. De allí surgió el Comité
Organizador que bajo su dirección
trabajó intensamente y el 2 de octubre
del mismo año se instaló la Cooperativa
con 203 socios y un capital de
cincuenta y cuatro mil soles.
El primer préstamo fue otorgado el 13 de
ese mes por un monto de mil quinientos
soles. El 8 de julio de 1,959, fue
reconocida oficialmente por Decreto
Supremo No. 141.
Clara Luz Pérez G.
Monseñor Conrado Mundaca tomó la
obra con el empuje y tesón que le
caracterizan. Su mayor preocupación
era la educación cooperativista, cada
semana y a veces con mayor frecuencia
dictaba charlas sobre el tema. Como
buen sacerdote, enfocó siempre el
cooperativismo como una hermosa forma
de fraternidad cristiana. El coopera-
tivismo nos enseñaría pensar en los
demás, a ser ordenados y honestos en
nuestras propias realizaciones y
compromisos, a compartir alegría y
amistad en un grupo que se une para
ayudarse mutuamente. No es exagerado
decir que Monseñor Mundaca convirtió
en púlpito el pequeño local y más tarde
el auditorio de la Cooperativa. Pero su
acción no quedó allí. Demostró, además,
una admirable capacidad como
Administrador, como Economista y sobre Quizá una de las más
importantes obras
todo, como el trabajador infatigable y
realizadas por Mons.
generoso. Siempre rechazó la idea de Conrado fue la creación
sueldo, le bastaba la honda satisfacción de la Coop. de Ahorro y
de servir a sus hermanos. Ni siquiera hizo Crédito “San Pio X”.
uso del justo derecho del Crédito; los Como buen sacerdote,
pequeños préstamos que figuran en su enfocó siempre el
cooperativismo como una
tarjeta de socio, los empleados antiguos
hermosa forma de
atestiguan que nunca fueron para fraternidad cristiana,
utilidad personal, sino para solucionar actualmente existe dentro
problemas de familias que se lo pedían. de sus instalaciones un
busto del Padre como
EL LOCAL COOPERATIVO. Es digno de símbolo de recuerdo y
mención el esfuerzo que desplegó aprecio.
44
Monseñor Mundaca para levantar el lo más hermoso, a pesar de las
imponente edificio que alberga a las dificultades y equivocaciones propias
distintas dependencias de la de una Institución de semejante
Cooperativa. Muchos socios envergadura, aún subsiste y esperamos
consideraron una obra irrealizable, pero, que no muera nunca, la mística de amor y
movidos por el poder de convicción del servicio trazada por su Fundador.
Director Gerente, más propiamente, del Con motivo de celebrarse en Cajamarca
Padre de la Cooperativa, pusieron el las Bodas de Oro Sacerdotales de Mons.
hombro y ladrillo sobre ladrillo, se culminó Conrado Mundaca, llegue hacia él, la
la obra en muy poco tiempo. gratitud sincera de Cajamarca. El ser
humano es limitado. Tenemos que pedir
LOS SERVICIOS. Durante los 15 años perdón a Monseñor por no haber sido lo
suficientemente reconocidos a su
que Monseñor condujo la Cooperativa,
benéfica obra. Él, como su Maestro Jesús,
fueron surgiendo nuevos servicios: En una
ha sentido, sin lugar a dudas, en muchas
sesión Monseñor sugirió: "Es un signo
ocasiones, la tristeza de no ser
fraterno el hacerse presente a la muerte
secundado en muchos de sus nobles
de un amigo, para ofrecer a los deudos
ideales, pero, por encima de esta
aunque no fuera sino una pequeña vela
pobreza de la actitud humana,
o una flor. ¿Por qué no unimos nuestros
Monseñor Mundaca tiene un sitial de
cortos presentes y llegamos a los
honor en todos y cada uno de los
hogares en duelo con una ofrenda
cooperativistas, en todos y cada uno de
económica que solucione, en parte el
los hogares que gracias a los Derechos
desembolso del momento?” Se acordó un
otorgados por los Estatutos
sol por socio y así nació el "Fondo
cooperativos, han visto, en muchas
Mortuorio" que ha llevado consuelo a
ocasiones la luz del consuelo y la
miles de familias.
esperanza, el amor de Dios hecho carne
Un poco más tarde se aperturó la en sus hermanos y en especial en la
Biblioteca de la Cooperativa para paternal persona de su Fundador.
ayuda de los estudiantes.
Luego, un consultorio médico y otro,
dental. Cuando la Cooperativa había
tomado la estructura de una importante
empresa, Mons. Mundaca dejó el
gobierno de ella en manos de seglares.
Su misión de sacerdote había terminado.
Hoy día, la Cooperativa "San Pío X",
cuenta con varios miles de socios y un
amplio cuerpo de Empleados.
La ceremonia de colocación de la primera piedra para la
Podemos afirmar que un alto porcentaje construcción del local cooperativo, constituye todo un
de hogares cajamarquinos se ven acontecimiento histórico ya que fue una de las primeras
favorecidos por sus diferentes servicios y instituciones crediticias en Cajamarca y ejecutada por
cajamarquinos.

45
 Muchos fueron los reconocimientos
que recibió por su dedicación y
perseverancia desplegada a lo largo
de los años.

La presencia y dirección del Padre

Mundaca en la institución fue decisiva
para su desarrollo, constantemente se
realizaban eventos de motivación y
educación convirtiéndola en una de las
cooperativas más grandes de la región.

46
 La Junta Directiva actual, como sus trabajadores son personas con
alta calidad humana y profesional, garantizando la esencia de
servicio social de la institución.
De izquierda a derecha: Américo Saldaña (Vocal)
Miguel Huamán (Secretario), Segundo Portal Chávez (Presidente)
Alicia Bazán (Vice Presidente) Ruitor Arriaga (Vocal)
y Edgardo Vásquez (Gerente)

Actualmente la Coop. de Ahorro y Crédito San Pío X está consolidada

y modernizada, brindadno atención a sus socios en forma oportuna
siempe con un contenido social como lo percibió su fundador.
47
El Consejo de Vigilancia lo conforman el Sr. Jorge F. Guerrero
Figueroa como presidente, Alejandro H. Silva Quiroz como
Vicepresidente y Alejandro Mendoza Tafur como secretario,
personas con amplia vocación de servicio y capacidades
dirigenciales.

Copias de los documentos originales, de las Actas Notariales de Constitución

y Estatutos de nuestra Cooperativa San Pio X, que datan del año 1958.

48
 59 AÑOS DE VUESTRA COOPERATIVA SAN PÍO X
Obra emblemática de Monseñor Conrado Mundaca Peralta
Como miembros del Consejo de
Administración, conjuntamente con la
Gerencia, es emocionante, nostálgico y
a la vez sentimos mucha alegría y
satisfacción de pertenecer a este gran
proyecto de vida que lo inició nuestro
siempre recordado Mons. Conrado
Mundaca Peralta.
Deseamos expresar en las siguientes
líneas la gran vocación de servicio que
deslumbraba este personaje ilustre
fundador de la actual COOPAC SAN
PIO X LTDA. Además de mencionar
algunos sucesos en la trayectoria de
vues tra ins titución y como nos
proyectamos en el futuro tan incierto
pero con visión de seguir creciendo y
brindando mejores servicios a nuestros
asociados.
Vuestra Cooperativa ha atravesado
59 largos y fructuosos años desde su
fundación el 02 de Octubre de 1958.
En toda su trayectoria ha pasado por
casi sesenta décadas abarcando
diferentes gobiernos militares y
democráticos, acogiéndose a sus
distintas políticas gubernamentales,
económicas y monetarias; durante este
tiempo La Cooperativa en un trabajo
conjunto de la mano de sus
trabajadores y sus directivos han
sabido soportar y salir adelante ante
las crisis económicas que se hayan
presentado durante este tiempo.
Felicitar a aquellos directivos que de la
mano de nuestro Mons. Conrado
Mundaca nunca quebrantaron y
siguieron luchando por servir a sus
asociados de la comunidad
cajamarquina.
En la actualidad queremos rescatar el
trabajo que se viene realizando en
aras de proyectar un futuro exitoso; la
competitividad y la globalización de
los mercados financieros han
c o n l l eva d o a r e a l i z a r c a m b i o s
importantes en vuestra institución,
algunos de ellos por ejemplo es mejorar
nuestros productos financieros y ser
competitivos en el mercado local de
Cajamarca y sus Provincias; también
reestructurar nuestras áreas, siempre
optimizando los recursos y buscando la
eficiencia y eficacia en los trabaja-
dores, con ello se ha iniciado a
repotenciar la parte comercial de la
cooperativa siempre enfocados en la
49
rentabilidad sostenible para perdurar Secretario: Miguel Chávez Huamán,
en el tiempo y estar al servicio de Primer Vocal: Américo Porfirio Saldaña
nuestros asociados; además retomar Ruiz, Segundo Vocal: Ruitor Francisco
las diferentes actividades y servicios Arriaga Navarro, Presidente del
que como legado nos dejó nuestro Consejo de Vigilancia: Jorge Fernando
fundador. Guerrero Figueroa, Vicepresidente del
Consejo de Vigilancia Alejandro Hugo
Hemos visto que en este mundo
Silva Quiroz, Secretario: Alejandro
competitivo y de grandes cambios
Mendoza Tafur, Comité de Educación:
tecnológicos e informáticos, nosotros
Presidenta Alicia Jesús Bazán Uriarte,
seguiremos trabajando para estar a la
Vice Presidenta: Irma Esther
vanguardia y ser competitivos pero
Cusquisapón Cerna, Secretaria: Julia
siempre con el valor agregado que
Bocanegra de Rodríguez, Comité
nuestro fundador Mons. Conrado
Electoral: Presidente: Bernardo Chávez
Munda Peralta nos dejó.
Vargas, Vicepresidente: Eladio Huamán
Para finalizar, queremos expresar Vásquez, Secretario: Emerenciana
nuestro sincero agradecimiento a Sánchez Sánchez.
todas y cada una de las personas e
instituciones que de alguna manera
han contribuido para la elaboración Segundo V. Portal Chávez
de este libro en forma especial a sus
gestores y compilador por tan noble y Presidente del Consejo de
brillante gesto, así mismo a la Directiva Administración
actual de nuestra institución
Abraham E. Vásquez Muñoz
conformada por las siguientes
personas: Gerente.
Presidente del Consejo de
Administración: Segundo V. Portal
Chávez, Vicepresidente del Consejo de
Administración: Alicia J. Bazán Uriarte,

MONSEÑOR CONRADO MUNDACA
Y LA COOPERATIVA SAN PÍO X
O bras son amores cuando se
construyen para el servicio del pueblo
cajamarquino, tal como lo hizo el
Mons. Conrado Mundaca Peralta al
fundar un 02 de octubre de 1958, la
Cooperativa de Ahorro y Crédito San
Pío X Ltda.
Mons. Mundaca conceptuó que para
contribuir a aliviar las necesidades
económicas y sociales de los más
desprotegidos, era necesario juntar
recursos económicos mediante el modelo
de la cooperación y la ayuda mutua,
siendo la primera tarea capacitarse
para tan noble fin, viajando en marzo de
1958 a Puno para participar del cursillo
de cooperativismo convocado por el
Rvdo. Padre. Mclean, conjuntamente con
Sacerdotes representantes de las
diferentes Diócesis del país.
Al regresar de Puno, comenzó a visitar y
promover entres sus amigos y feligreses la
necesidad de formar una Cooperativa
de Ahorro y Crédito. "Cuando éramos
jóvenes nos reuníamos en las esquinas
con Mons. Mundaca, muy amicalmente
como un club de barr io donde
conversábamos sobre la necesidad de
formar una cooperativa", le dijo al autor
de esta nota en vida el prestigioso y
recordado Dr. Luis Ortiz Sánchez, quien
también participó de su fundación junto
a otros notables cajamarquinos, tal
como figura en una histórica fotografía
que se encuentra al ingreso de la
Cooperativa San Pío X.
EN EL 54° ANIVERSARIO
Walter Castillo Radas
El 14 de Junio de 1958 a las 5:00 p.m. se
realizó la Primera Asamblea General de
simpatizantes para la formación de la
cooperativa, tan como consta en el Acta
N° 01, reuniéndose en el salón de Actos
de la Escuela Normal y Colegio Nacional
Santa Teresita, cerca de 60 personas,
por invitación de Mons. Conrado
Mundaca, quien expresó su
complacencia por la acogida y
trascendencia de dicha reunión,
manifestando en forma elocuente los
beneficios espirituales y materiales de la
Cooperativa. El primer punto a tratar fue Como todos los años, la institución cooperativa celebra sus aniversarios
recibiendo la gratitud de toda la población cajamarquina recordando con
el nombre de la institución que a
propuesta de Mons. Mundaca fue de mucho aprecio a su gestor y fundador R..P. Conrado Mundaca.
San Pío X. Recordando al referido Papa
quien fue de origen campesino tan
parecido al que tuvo Mons. Mundaca y
que siendo Papa fiel a los principios del
cristianismo, visitaba los barrios más
pobres proponiéndose ser siervo de
todos y quien un 03 de abril de 1908
creó la Diócesis de Cajamarca.
"Posiblemente Monseñor Conrado
Mundaca se inspiró en este Papa para
realizar sus obras, una de ellas la
Cooperativa San Pío X", nos dice el Rvdo.
Padre César Leoncio Urrelo Álvarez.
Volviendo a la Primera Asamblea de
simpatizantes es importante mencionar el
nombramiento del Consejo Interino,
siendo elegidos como Presidente el Sr.
Pedro Sánchez Hoyos, Secretaria Srta.
Luisa N. De Francesch Alvarado y como
Tesorero Monseñor Conrado Mundaca.
50
Es anecdótico señalar que en esta
Asamblea un asistente sugirió la idea de
comprar un número de la lotería con
dinero de la Cooperativa, manifestando
Monseñor Mundaca que este dinero era
intangible, afirmación que desde su
inicio el fundador señaló una línea y
política de disciplina financiera para la
buena marcha institucional; que al
devenir con los siguientes años tuvo un
gran desarrollo alcanzando hasta 28 mil
socios con muchas familias completas
cuando la población de Cajamarca era
de 90 mil aproxi-madamente, brindando
servicios financieros solidarios, asistencia
médica destacándose una línea de
crédito que otorgó el Banco
Interamericano de Desarrollo (BID) a la
cooperativa para financiar la
construcción de viviendas a tasas
preferenciales, beneficiando a muchas
familias con el sueño de la casa propia.
Continuando con la labor promotora de
difundir las finanzas solidarias, el 21 de
diciembre de 1962 también fundó la
Cooperativa de Ahorro y Crédito
Nuestra Señora del Rosario en
Cajabamba, y en ese mismo año, la
Caja de la Providencia fundada
conjuntamente con el Dr. Luis Chávarri
Rodríguez.
El desarrollo sostenido de la
Cooperativa San Pío X, requirió de
instalaciones apropiadas para mejorar
la atención y servicios a los socios,
promoviendo Mons. Mundaca la
construcción de un inmueble de cuatro
pisos ubicado en el Jr. Amazonas N°
1000, el que construyó del 03 de
setiembre de 1966 al 29 de julio 1968,
contando con la colaboración ad
honorem de los diseñadores y
constructores profesionales: Raúl
Centurión Vargas, Joel Tejada Sánchez y
Carlos Ara Valera, así como también los
socios ayudaron con ladrillos, cemento y
fierro, siendo la mano de obra ofrecida
por los presos de la época a quienes se
les proporcionó alimentos por su
c o l a b o r a c i ó n , s o l i c i t a n d o M o n s.
Mundaca, según refieren los vecinos,
rezar para que los presos no se escapen.
Mons. Mundaca dedicó desde la
fundación de la Cooperativa 15
intensos años que permitieron sentar las
bases para su desarrollo sostenido. Su
vida y obra solidaria continúa vigente al
celebrar el 54° Aniversario esta
emblemática institución cajamarquina, al
juntar el esfuerzo de los aportes de los
socios para mejorar su calidad de vida,
cuyo modelo organizacional exitoso y La participación de sus socios a través de las Asambleas, es hasta ahora una
autosostenido ha sido reconocido garantía para el buen desarrollo y progreso institucional dentro de un
mundialmente por las Naciones Unidas al ambiente democrático y compartido, como lo enseñó su fundador.
denominar el 2012 como el "Año
Internacional de las Cooperativas y
Mar", afirmando: "Las Cooperativas en
sus diversas formas promueven la mayor
participación posible en el desarrollo
económico y social de todas las
personas incluyendo mujeres, jóvenes,
personas mayores, discapacitados y
pueblos indígenas y se han transformado
en un factor mayor de desarrollo
económico y social y contribuyen a la
erradicación de la pobreza" (Resolución
N° 64/136-2010).
Cajamarca, 02 de octubre 2012
Publicado en el Diario Panorama
Cajamarquino con motivo del 54º
aniversario de la COOPAC San Pío X.
51
 TESTIMONIO DE UNA TRABAJADORA
DE LA COOPAC SAN PÍO X
Consuelo Romero Sanchez

Dios me dio la oportunidad de conocer Lunes y martes de todas las semanas, a

al Padre Conrado Mundaca hace más de pesar de todo yo era feliz, me sentía una
45 años. Durante ese tiempo, tuve la suerte persona privilegiada, por estar tantas horas
de recibir su dirección espiritual. junto a un hombre santo; algunas veces le
En febrero de 1961 empecé a trabajar en serví de monaguillo o ayudándole a
la Cooperativa San Pío X, que fue creada desplazarse en su silla de ruedas, lo hice
el 02 de octubre de 1958, la que tuvo con mucho respeto, cariño, y gratitud a mi
mucho éxito gracias a su acertada director espiritual de tantos años. Su
conducción y la que todavía presta partida dejó en todos sus hijos e hijas
servicios a la comunidad cajamarquina. Es espirituales un profundo dolor y un gran
aquí, donde pude conocerlo más de cerca. vacío que solo la esperanza de que él ya
está gozando de Dios, nos da la
Fue un sacerdote de mucha vida espiritual, conformidad y resignación cristiana.
de oración intensa, honrado, honesto, de un
talento práctico excepcional, muy prudente, Periódicamente el Padre Mundaca realizaba paseos y visitas con los
siempre tenía una palabra amable para directivos y socios a diferentes lugares de Cajamarca como tarea de
todos y cada uno, trataba de solucionar los incentivo y difusión de la obra cooperativa, al mismo tiempo que era
problemas por medio del diálogo. reconocido y homenajeado por su labor social.
Durante los tres años y dos meses que duró
la enfermedad del padre Mundaca, fue la
época de más acercamiento con él; cada
día paso a paso veía como iba
deteriorándose, desgastándose, perdiendo
sus fuerzas físicas, soportando sufrimientos
sin quejarse, sin protestar, sin exigir nada,
tomando todo lo que le prescribían los
médicos (él que nunca tomó pastillas, por
tener su estómago delicado), aceptando
todo por obediencia y todo lo que el señor
disponía para ese día, dolores, grandes
dolores del cuerpo, del alma, morales, y todo
diciendo siempre “ Hagamos la voluntad de
Dios ”.
No fue fácil para mí, ver a su persona que
otrora fue tan fuerte física y espiritualmente,
que nos alentaba con sus sabios consejos y
sobre todo con su ejemplo, que iba
terminando su existencia y su acercamiento
a Dios era inminente.

52
 Las asambleas y reuniones de socios eran muy concurridas y se desarrollaban
dentro de un ambiente democratico, siempre con la presencia y participación
del R.P. Mundaca.

53
Actualmente la
Cooperativa es
una institución
económicamente
saludable,
cuenta con un
edificio de cinco
pisos con amplias
y modernas
instalaciones
brindando
seguridad y
calidad de
atención a sus
socios.

54
 ASOCIACIÓN NUESTRA SEÑORA
DEL PERPETUO SOCORRO
El nombre "NUESTRA SEÑORA DEL
PERPETUO SOCORRO", es el nombre que
se da a la Santísima Virgen por su
protección continua y oportuna a los
que acuden a Ella. Protección, no de un
día sino de siempre, desde la cuna hasta
la tumba. Perpetuo Socorro, quiere decir,
consuelo en las aflicciones, en la
enfermedad, en los trabajos; fuerza para
seguir adelante en nuestras empresas.
Perpetuo Socorro, quiere decir, que aún
cuando todo parezca desesperado,
queda un recurso seguro: la protección
de la Virgen Santísima.
NUESTRO ORIGEN
El año 1920, nace en Cajamarca la
Archicofradía del PERPETUO SOCORRO.
Su Presidenta la Srta. Delia Chávez. Su
Asesor el Rvdo. Padre Serafín Uriarte.
OBJETIVO: Servir y honrar a la Santísima
Virgen María, bajo la advocación de "EL
PERPETUO SOCORRO", propagando
esta devoción en el pueblo
cajamarquino.
Sus integrantes realizan sesiones
esporádicas, generalmente con motivo
de la festividad de la Patrona.
Es de notar también la labor de las Srtas.
Rosa Sánchez y Celia Mestanza como
Presidentas de dicha organización
religiosa, sucesivamente. Hasta que el
año 1982 se reorganiza de acuerdo al
momento histórico en el que toca
desenvolvernos, con el nombre de
Por Luisa Mercado
ASOCIACIÓN "NUESTRA SEÑORA DEL
PERPETUO SOCORRO", formando un
Comité Central por personas adultas y
Células de Bases, por jóvenes.
OBJETIVO FUNDAMENTAL: Orientar en la
comunidad el COMPROMISO
CRISTIANO, HOY; fomentando la
formación del ESPÍRITU MARIANO.
ACTUALMENTE
Dando importancia a la Comunidad
Parroquial, esta Asociación está
estructurada en "EQUIPOS DE TRABAJO",
según las Parroquias existentes en
nuestro medio, con la finalidad de que
cada Equipo trabaje en su respectiva
Parroquia, teniendo su Sede Central en
la de Santa Catalina y en cuyo salón
nos reunimos los primeros jueves de cada
mes, a las 5 p.m. para celebrar nuestras
sesiones. En el año 1920, nace
en Cajamarca la
Al accionar de un Equipo los demás
Archicofradía del
automáticamente se convierten en
PERPETUO SOCORRO.
colaboradores, contando siempre con asesorada por el Rvdo.
la intervención de una Coordinadora. Padre Serafín Uriarte.
Por hoy cuenta nuestra Asociación con con el objetivo de
Servir y honrar a la
24 socias Activas y 26 socias Auxiliares,
Santísima Virgen María,
las que conocen a cabalidad sus
bajo la advocación de
Estatutos y Reglamento.
"EL PERPETUO
SOCORRO",luego de su
reorganización en 1982
¿QUE HACEMOS?
el Padre Mundaca
Trazado el objetivo fundamental, desplegó un papel
llegamos a la comunidad con sencillez y importante para
servicio a través de reuniones familiares fortalecer y desarrollar
de cristiandad. dicha institución.
55
 AGENDA DE TRABAJO: Socorro a nivel Diocesano, para la
PRIMER MOMENTO: Festividad de nuestra Patrona.
En esta actividad participarán todas
LOORES A MARIA.
las Hermandades y Asociaciones
a.- Ingreso de las equipistas portando Religiosas de nuestra ciudad y se
el Ícono de la Virgen. i n v i t a r á t a m b i é n a l o s R R . P P.
b.- Recepción por los asistentes con Redentoristas que son los propulsores de
cánticos, vivos y aplausos. la devoción a Nuestra Señora del
c.- Bienvenida, por el dueño de casa. Perpetuo Socorro.
d.- Poesías a la Virgen, por los niños
asistentes. NUESTROS ASESORES
e.- Rezo de una parte del Rosario. El Rvdo. Padre Cristóbal Sáiz, Superior
Diálogo sobre un tema Mariano de la Orden Franciscana en Cajamarca,
(Nombres de Virgen, Favores, quien acoge con beneplácito la
Apariciones, Presencia de María en iniciativa de las Socias y está atento a
cada uno, etc.). las celebraciones litúrgicas que se
programan.
SEGUNDO MOMENTO: También el Párroco de Santa Catalina,
Monseñor Conrado Mundaca, nos
MENSAJE EVANGÉLICO.
brinda un generoso apoyo; nos acogió
A.- Lectura de la Biblia. con cariño en el momento que
B.- Comentario. necesitábamos de un local para
C.- Conclusión. nuestras reuniones y nos hace partícipes
D.- Asignación - Trabajo práctico. de sus orientaciones, de su afán por
lograr el Reino de Cristo entre los
hombres.
TERCER MOMENTO: Monseñor Conrado Mundaca es un
DOCTRINA CRISTIANA. gran propagador de la devoción a la
a.- Reparto del ASUNTO DOCTRINAL, Santísima Virgen María; es pues un
mimeografiado. sacerdote providencial y ejemplar
b.- Repaso (memorización por los pastor de su comunidad.
niños). Hoy que el Pueblo Cajamarquino
reconoce y agradece sus 50 años de
c.- Comentario (explicación por los
servicios sacerdotales, LA ASOCIACIÓN
adultos).
"NUESTRA SEÑORA DEL PERPETUO
SOCORRO":
CUARTO MOMENTO:
DESPEDIDA ¡PRESENTE!
a.- Oración. EN LAS BODAS DE ORO SACERDOTALES
b.- Canto. DE MONSEÑOR CONRADO MUNDACA. Monseñor Conrado Mundaca: tu obra por Cajamarca ¡es grande! y
Actualmente estamos planificando un ¡Presente! para decirle: Te reverenciamos nuestro sentimiento palpitante de amor, unido al de todo el Pueblo,
encuentro de Asociaciones del Perpetuo como a Maestro y Bienhechor. quien lo recuerda con inmensa gratitud y cariño.

56
Monseñor Conrado Mundaca: tu obra
por Cajamarca ¡es grande! y nuestro
sentimiento palpitante de amor, unido al
de todo el Pueblo, hoy se eleva al cielo y
adquiere la magnitud de una plegaria
de gratitud.
¿QUIÉN PUEDE ENGROSAR NUESTRAS
FILAS?
Tú que deseas colmar la vida de
acciones fecundas, revitalizando lo
espir itual, retomando la marcha
ascendente en el servicio a los demás.
Tú que quieres ser un cr is tiano
comprometido: Y ¿quién es un cristiano
comprometido? . . Pues bien, lo sabrás.
Es una persona que aporta una
respuesta a los grandes problemas
humanos, del hambre, de la dignidad, de
la justicia social, de la promoción
personal y colectiva. Pues el trabajo
Mons. Conrado Mundaca desde muy niño hasta los últimos días de su existencia, siempre
mantuvo su fe inquebrantable en Cristo y la Virgen María, su ancianidad no lo alejó de sus
quehaceres litúrgicos y compromisos con la Iglesia.
consiste en encontrar en Jesucristo y su
Madre Santa, los materiales, las razones
y la fuerza para construir una nueva
civilización: LA CIVILIZACIÓN DEL AMOR,
LA VERDAD, LA JUSTICIA y LA PAZ.
En es te trabajo de cambio, de
renovación espiritual y material, los
laicos tenemos un papel preponderante.
Si tú eres una persona generosa, sensible
y espontánea, rica en esperanzas,
s u e ñ o s y e n e r g í a s, f o r m a r á s l a
vanguardia de los constructores de esta
NUEVA CIVILIZACIÓN. Inscríbete en
cualquiera de las Asociaciones
Religiosas que existen en tu pueblo.
“LA MIES ES MUCHA, LOS OPERARIOS
POCOS" ¡Nos urgen personas que
pongan su hombro generoso a la ardua
tarea de construir un MUNDO NUEVO!
57
 CONDECORACIÓN EN EL HONORABLE
CONCEJO PROVINCIAL DE CAJAMARCA
EEl jueves 11 de febrero de 1988,
Cajamarca, una vez más, recogió en los
pliegues de su Bandera, la gloria inmortal
de sus Héroes Toribio Casanova, Pedro
J o s é Vi l l a n u e va y J u a n A n t o n i o
Egúsquiza para elevarlos muy alto, sobre
el cielo del Perú, como ejemplo y guía de
las generaciones venideras.
Al amparo del ideal sublime de esa
sangre histórica que proclama la
necesidad de "DAR EJEMPLO DE VALOR
Y PATRIOTISMO PARA SENTAR LAS BASES
DEL ADELANTO POSITIVO DE NUESTRA
TIERRA", el honorable Concejo Provincial
de Cajamarca, presidido por su Alcalde,
Profesor Eloy García Guevara, bajo el
marco enaltecedor de una magnífica
concurrencia, EN SESION SOLEMNE,
honró a los hijos de Cajamarca que, a
través de 133 años, desde la creación
del Departamento, han trabajado para
darle gloria, prestigio y libertad. Y junto
a hombres tan prominentes, en esta
reunión enaltecida, de modo especial, se
honró a Mons. Conrado Mundaca
Peralta porque durante 50 años, desde
su ordenación sacerdotal, con sencillez
irrefragable, pero con voluntad firme, ha
colaborado en el desarrollo de
Cajamarca, mereciendo la general
veneración, por su caridad, honradez,
bondad, abnegación sacerdotal,
espíritu de servicio y reconocido mérito
de hombre de bien.
Este testimonio, manifiesto en las
palabras del Señor Alcalde, fue
ratificado con la "BANDA DE GOBIERNO
Luis Rafael Guerra Silva.
DE CAJAMARCA", un significativo diploma
y una hermosísima medalla con preseas
de esta tierra que son condecoraciones
otorgadas a los hombres que, con el
testimonio de su vida, acrecientan el
tesoro de la fraternidad y aceleran la
marcha ascendente de los pueblos.
No dejaremos de reconocer la respuesta
del Padre Mundaca Peralta en tan
solemne ceremonia: "Permítanme -dijo-
manifestar mis sentimientos: La confusión
que causa mi humilde persona, muy
modesta y de origen campesino, la Una vez más, doy reiterados
grandeza de esta manifestación, muy A lo largo de su fructífera vida
sacerdotal, el Padre Mundaca recibió agradecimientos al Señor Alcalde y a
desproporcionada a mi mérito personal, todos, en nombre del sacerdocio,
pero sí muy acorde con la generosa innumerables reconocimientos de
diferentes entidades. reconocido en mi persona, y en nombre
bondad del Señor Alcalde, de su de Cristo y de nuestra Madre, la
honorable Concejo Provincial y de los Santísima Virgen Inmaculada, porque
organizadores de esta reunión cívica. ellos son la irradiación de la paz que
Agradezco humildemente a todos, en anhelamos y de la fraterna acción moral
general, la inmensa generosidad de que anima nuestros actos"...
reconocer mi modestísima colaboración
en algunas obras cuya ejecución y Un aplauso prolongado, un abrazo
cariñoso y la bellísima poesía "BODAS DE
permanencia se deben a la inteligencia
ORO", declamada por su autora,
y tesón de valiosas personas de la
señorita Clara Luz Pérez sellaron las
comunidad cajamarquina, con quienes
palabras de Mons. Conrado Mundaca
he trabajado y que merecen este premio.
Peralta y de esta condecoración del
A nombre de ellas recibo estas
Concejo Municipal de Cajamarca.
condecoraciones y ofrezco a Dios, sin
La Ceremonia terminó, hábilmente
cuya omnipotencia y bondad soy nada,
dirigida por el señor Segundo Urteaga
la parte espiritual de estos dones que
llevan el espíritu animoso y grande de un Villarreal; pero, en el cielo de Cajamarca,
pueblo de cualidades sobresalientes y permanece aún la ilustre figura de
yo me quedo con la parte material, que nuestros héroes y la Paternidad de Dios
reconozco y aprecio mucho, pero que invitando a todos a ser dignos
pronto he de dejar con la transitoriedad continuadores de quienes nutren y
que tienen las glorias y bienes de esta fortalecen, con amor, las altezas de la
vida. vida.
58
 RECONOCIMIENTO POR MOTIVO
DE SU NONAGÉSIMO CUMPLEAÑOS
"PEDRO, ¿ME AMAS? SÍ, SEÑOR, TÚ
SABES QUE TE AMO"
Jn. 21, 15 ss.
Pregunta y respuesta resumen el
diálogo que es la sustancia misma de la
vida entera de este gran sacerdote
cajamarquino, nuestro hermano y nuestro
amigo, Mons. Conrado Mundaca
Peralta.
Casi ningún acontecimiento importante
de su vida podría explicarse sin esta
clave de amor. Su ingreso en el Seminario
fue una llamada y una respuesta de
amor. Su ordenación sacerdotal fue un
episodio en el que escuchó: "¿Me
amas?", y él respondió: "Tú sabes que te
quiero". Sus compromisos pastorales son
compromisos de amor recibidos del
Señor y ofrecidos a Él. Con razón
llamaba San Agustín al Ministerio
Pastoral "OFICIO DE AMOR".
Efectivamente, Mons. Conrado Mundaca
Peralta ha hecho de su Ministerio
Sacerdotal un Oficio de Amor. El Amor
Pastoral de Yahvéh a su pueblo,
encarnado en su Hijo, el Buen Pastor de
todos los pueblos, quiere perpetuarse en
el corazón y en la vida de un puñado de
creyentes: los sacerdotes. Para esto son
llamados por el Señor al ministerio
sacerdotal. Por amor a la comunidad
cristiana y por amor a ellos mismos, son
elegidos por el Padre para hacer
presente, visible y tangible en su Iglesia
el Amor Pastoral de Cristo. Su misma
vocación es ya un acto de amor por el
que Jesucristo toma la iniciativa.
Blanca Cortez Alvarado
Este amor de Cristo ha desencadenado
en el corazón de Mons. Conrado
Mundaca una secuencia de respuestas
que ha ido ofreciendo a lo largo de su
vida.
Todas sus actividades apostólicas, que
son innumerables, son actualización de
este amor pastoral.
Tres características de este amor han
quedado consignadas en el texto de
Juan, al que hemos hecho referencia.
1. EL CUIDADO:
"Cuida de mis ovejas". El cuidado no es
una atención cualquiera: es una atención
esmerada y responsable. Mons. cuida de
sus hijos, el hortelano cuida de las plantas
de su huerto, el guardián cuida de los
tesoros a él confiados. El cuidado puede
congelarse en el Corazón de un Pastor.
Pueden instalarse, en su lugar, la rutina
mecanicista, el descuido, la ley del mínimo
esfuerzo. Es una gracia preciosa, Mons.
Mundaca, haber mantenido a lo largo de
sus 64 años de ministerio, el CUIDADO
PASTORAL de la grey cajamarquina.
2. EL SEGUIMIENTO ESPECÍFICO
DEL SEÑOR:
El diálogo entre Jesús y Pedro se cierra
con esta expresión: "tú, sígueme". Seguir a
Jesús, pobre, obediente y casto, ha sido
la dicha, la vocación y la cruz de Mons.
Mundaca. En otras palabras, ha vivido un
amor de identificación a Cristo Pastor. Sin
duda, que él ha experimentado cada día
la desproporción entre los sentimientos
59
pastorales de Jesús y sus propios
sentimientos. Pero esta desproporción no
le abatió ni le desalentó. Produjo en él,
humildad y confianza.
3. LA CONTRARIEDAD Y EL SUFRIMIENTO:
Seguir a Jesús significó para Pedro
contrariar sus propios sentimientos de
seguridad, de comodidad, de
autonomía. Experimentó "que otro le
ceñía y le llevaba adonde no quería Ir".
Toda la historia espiritual de un
sacerdote, consiste en asumir esta
contrariedad, elegir la voluntad de
Jesús por encima de la propia hasta
llegar a introducir en su interior, por la
acción del Espíritu Santo, una segunda
espontaneidad, costosa pero real, en
virtud de la cual no descansamos hasta
caer en el surco de la voluntad del Señor
y no sabemos ni podemos ni queremos
hacer otra cosa que renunciar a
nuestras querencias primarias y decir
con el alma vencida, convencida y
contenta: "Nuestro gozo, Señor, es hacer
tu voluntad".
Mons. Conrado Mundaca ha querido
vivir sinceramente así.
Queridísimo Padre: Tú que llevas tantos
años de fidelidad a la espalda, estás
llamado aún a una mayor y mejor
fidelidad, que consiste en transformar tu
experiencia humana y sacerdotal en
SABIDURÍA CRISTIANA Y SACERDOTAL.
Cuando comienzas a experimentar el
despojo progresivo que la vida va
causando en tu salud, en tus facultades,
en tus responsabilidades, la sabiduría
cristiana y sacerdotal te invita a
conver tir el despojo en entrega
voluntaria. Esa sabiduría te enseñará
también a valorar y cultivar aquello
que es verdaderamente importante: orar
con sosiego y asiduidad, ofrecer el
testimonio de paz y bien, prestar
servicios pastorales sencillos y oscuros,
reunirte con tus hermanos sacerdotes y
laicos en auténtica fraternidad, releer tu
vida entera con ojos y corazón
agradecidos, aceptar pacientemente
la cruz de la edad, seguir creciendo
como hombre interior, mientras el hombre
exterior se desmorona día a día.
Querido Mons. Conrado Mundaca:
Acompañado por todos tus amigos y
por multitud de fieles católicos, el
Obispo de Cajamarca, interpretando el
sentir de la Diócesis, quiere agradecer a
Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, tus
90 años de edad y 64 de ministerio
sacerdotal, pero sobre todo el hecho de
que hayas gastado tu vida y hayas
dejado tu piel en el surco de nuestros
pueblos y parroquias. Al mismo tiempo
que muchos claudicaban, tú, Mons.
Mundaca, permaneciste fiel y por eso El Padre Conrado siempre se dio, tiempo para estudiar y aprender cosas
eres como el trigo de nuestros campos, nuevas, y en su ancianidad jamas se negó asistir a actos que tuvieran que
que ha aguantado a pie firme el estiaje ver con el servicio y apoyo social.
y la sequía. Por eso eres un monumento a
la fidelidad y un ejemplo para todos
nosotros, los sacerdotes.
A la manera como después del verano,
con la llegada de la lluvias comienzan a
reverdecer los campos de nuestra sierra,
así nuestra Iglesia de Cajamarca, tengo
la firme convicción de que volverá a
contar con una nueva generación de
sacerdotes, que siguiendo tus pasos,
estén dispuestos a entregar su vida al
servicio de la gente. Una generación
que siembre esperanza, una generación
que viva la comunión afectiva y efectiva
con aquellos que son principio y
fundamento de unidad.
Que el Señor te bendiga, Mons.
Mundaca y te conceda aún más años
de vida. Gracias, gracias por tu vida,
Padre Mundaca.
60
 POEMA AL PADRE MUNDACA
A Mons. Padre Conrado Mundaca Peralta, como testimonio de
gratitud a su infatigable labor cristiana en favor del pueblo
CONRADO MUNDACA PERALTA
cajamarquino.
SANTO SACERDOTE
Cubierto por velo celestial
en benéfica misión sacerdotal
das a la vida sabio resplandor
¡Oh, sublime grandeza de amor!
Humilde sacerdote propulsor de la luz
vas siguiendo las huellas del Divino Jesús.
Desde el santo templo, imploras compasión
y para tu pueblo amado: paz y perdón.
Con mirada dulce y cariñosa
iluminas la mañana hermosa
y hasta el rocío del verde prado
brilla radiante y emocionado.
Tu corazón, abrazado al corazón de Dios
con vocación divina palpitante de amor.
Saludo al Mons.
Mons. Conrado Mundaca Peralta:
Es un gusto tener que expresar
estas palabras al conmemorarse
el 75° Aniversario del feliz nacimiento
de un amigo, hermano en Cristo, maestro
y pastor de la Cristiandad Cajamarquina.
"Cuando el amor es grande;
no hacen falta las palabras;
porque aún en el silencio más completo,
el AMOR lo dice todo".
Reciba, Mons., nuestro aprecio,
nuestra estima personal y comunitaria.
¡Qué hermoso! es ir a un lugar
fuera de Cajamarca y escuchar:
¿Y...el Mons. Mundaca?
Saber entonces...que las estrellas
no sólo brillan en este cielo

sino también en otros...

¡Qué hermoso! es también

Mitigas la miseria, sufres en el dolor
pensar, como dice el poeta búlgaro
y a todos nos arrulla tu enternecida voz. Nicola Vaptzarov:
"Cuando vida y obra
¡Oh! Padre de los niños pobres abandonados se conjugan en un todo armonioso,
y de aquellos que en el mundo aún viven olvidados se beneficia el mismo hombre
la Bandera de Cristo llevas enardecido y toda la humanidad".
y brillará por siempre tu nombre bendecido.
Mons. MUNDACA:
Al fulgor de tiernas alboradas Que nuestras mejores palabras
bajo la sombra del Divino Hacedor. sea, nuestra presencia;
formando sociedades justas y renovadas y el mejor regalo, nuestras vidas.
caminas refulgente con verdadero amor. Son solamente 75 años...
nada más: un 7 junto a un 5;
Hoy día en las alturas, celestes criaturas y todavía le queda "MUCHO MÁS QUÉ HACER".
con inmensa alegría cantan himnos de paz. Reciba, pues nuestro aprecio...
Roguemos de rodillas al Todopoderoso Nuestra GRATITUD, y sobre todo:
¡Este Lucero Hermoso, no se oculte jamás! NUESTRO AMOR.

Blanca Cortez Alvarado Jorge Wálter Villanueva Cruzado

61
 POEMA
MONSEÑOR CONRADO MUNDACA,
PADRE Y SOL
Luis Rafael Guerra Silva.
Conrado Mundaca Peralta, SOL ETERNO por su vida,
al volar glorioso al cielo con su alma bendecida
nos OBSEQUIA en Cajamarca con su acción sacerdotal
MUCHAS OBRAS que pusieron junto a Cristo y a María
los tesoros para el pobre, para todos alegría
y hermandad, pan y justicia, junto al Padre Celestial.
Permanece entre nosotros su recuerdo y su grandeza,
sus bondades que quitaron el dolor y la tristeza
elevándose en el pueblo como campos de arrebol.
Brilla siempre él por sus dones, ideales y oraciones,
por su piedad, sacrificio, su talento, creaciones;
brilla mucho y entusiasma PORQUE ES PADRE Y ES UN SOL.
Y por eso aquí estaremos admirando la hermosura
de ese sol que nos impulsa a decir con donosura:
"¡MANTENDREMOS LOS CRISTIANOS TUS FULGORES, PADRE FIEL!”
Con el óleo de tu savia nuestras vidas ungiremos;
Tras las rutas que nos trazas, entusiastas seguiremos
por hacer de Cajamarca luz brillante, dulce miel.
Porque tú eres nuestro Padre que con Cristo resucitas
y a gozar con tu cariño a tus hijos siempre invitas,
eres fuerza y dinamismo en las luchas y en la acción;
pues tu ejemplo nos impulsa al martirio sin rendirnos,
recibiendo tus destellos al luchar y siempre unirnos
contra todo aquel que hiera con su indigna corrupción.
No estarán entre tus lumbres ni los viles traidores,
ni serviles, ni cobardes ni del pobre explotadores
porque son ellos escoria que avergüenza tu virtud
y son causa de las hambres, la miseria y los dolores
de mujeres, niños tristes y de muchos sinsabores
que padecen los valientes, hijos dignos del Perú.
62
No DISFRUTARÁN TUS RAYOS y grandiosas sinfonías
los hipócritas mendaces que en horribles felonías
prometieron a tu pueblo pan, trabajo, gozo y miel,
para luego acorralarlo con engaños y patraña
que son muestra de egoísta, insensible y dura entraña
que a los labios de tus CRISTOS solo alcanza amarga hiel.
Lucirán contigo en cambio con firmeza y con ternura
dando UNIÓN, FUERZA A LOS PUEBLOS, junto a tu excelsa figura
para hacer de Cajamarca CUMBRE DE LA HUMANIDAD
los que siendo honrados, francos, LUCHADORES, generosos,
quieren que esta tierra sea por sus ESFUERZOS valiosos
PATRIMONIO DE LA HISTORIA, CUNA DE LA LIBERTAD.
Y para este PATRIMONIO de valor enaltecido
pusiste en Santa Apolonia un Santuario bendecido
para nuestra Madre María, ESENCIA DE CARIDAD,
para que Ella ENTRE SUS HIJOS derrame DIVINAS GRACIAS,
con sus MATERNOS AMORES Y EVITÁNDONOS DESGRACIAS
nos aleje para siempre la TRISTEZA Y SOLEDAD.
Rechazaste demagogias, halagos y adulaciones
porque son los signos VILES que OSTENTAN los epulones
acumulando riquezas CON EGOÍSTA ANSIEDAD.
Tú más bien diste a los NIÑOS, LOS ANCIANOS, OPRIMIDOS,
en Institución de Ayuda, los tesoros bendecidos
por la presencia de "CRISTOS que buscan PAN Y AMISTAD”.
Con Cristo Sacramentado BRINDASTE inmortales palmas
y en los Santos Sacramentos, gracia y fe para las almas.
Fraternidad y justicia mostraste junto a Jesús.
Y así en tus cooperativas nació un bello porvenir,
seguridad pata todos, alegrías de vivir,
porque las grandes conquistas se forjan junto a la Cruz.
Y por eso Cajamarca, cuna eterna del Perú, que reúne en su bellezas
valor, grandeza y virtud, refundiendo historia y glorias en un inmenso
crisol, dice a Monseñor Mundaca con su pueblo agradecido;
"¡Tú vivirás, en nuestra alma, siempre muy ENALTECIDO,
porque eres un Alter Christus y eres Padre y eres Sol!...
 Los aniversarios de las instituciones
creadas por el Padre Mundaca, eran
celebrados con suma sencillez pero
con gran acogida y expectativa por
parte de la población. Servían para
fortalecerlas y comprometerlas a que
se cumplan sus fines para los cuales
fueron creadas.

63

MONS. CONRADO MUNDACA PERALTA
Sacerdote Cajamarquino
¿Canonizable?
¿Pronto, tarde, nunca?
Dios lo dirá a través de la Iglesia.
Pobladores de Cajamarca, Sacerdotes, Religiosas, Laicos hemos apreciado las
virtudes con que el Señor adornó su preciosa alma a las que supo corresponder
con fidelidad y perseverancia.
El amor y respeto a su sacerdocio ministerial con todo lo que ello implica. Su
fervor en la Celebración Eucarística, su abnegada atención en el Sacramento de
la Reconciliación y Dirección Espiritual. Su asesoramiento a grupos de Oración
especialmente a la Legión de María...
Su preocupación por ayudar a los pobres creando para ellos Asociaciones
benéficas confiadas en la providencia.
Su devoción a la Santísima Virgen que ha tratado de inculcar en los corazones
Cajamarquinos llegando a levantar un Santuario dedicado a la Santísima Virgen
de Fátima en lo alto del cerro de Santa Apolonia.
Nuestro Monasterio de Religiosas Concepcionistas ha tenido la gracia de
recibir en muchas ocasiones las pláticas de Retiro Mensual y la de los Ejercicios
Espirituales y del Sacramento de la confesión y unción de las enfermas.
Por todo ello brota de nuestros corazones un himno de gratitud y alabanza a
Dios nuestro Señor.
EN RECUERDO DE MONS. CONRADO
MUNDACA, ENERO 2008
Alfonso Castañeda, Berlín
Larga ha sido su vida! Durante toda ella pudo acumular la "riqueza humana",
que pocos la poseen. Lo conocí desde mi ingreso al Seminario de Cajamarca,
recibiendo de él, no solamente dirección espiritual e intelectual, sino también
"sensibilidad humana" que, posiblemente, sin notarlo él mismo, la inculcó en todos los
que estuvimos cercanos a él.
Cumplió con su "misión sacerdotal y humana", de acuerdo a sus principios de
"servidor"; tal vez aferrado a la imagen del "Sacerdote Santo tradicional", pero,
seguro en su fe, respetuoso y conciliador, frente a las diferentes "líneas" de los
Pastores con quienes le tocó trabajar.
64
Marcada fue su preocupación por la formación de jóvenes a adultos; tratando
de organizar grupos e instituciones, de acuerdo a movimientos y métodos de
formación que iban surgiendo: Acción Católica, Legión de María, Cursillos de
Cristiandad, etc., Pero, también interesado en obras de servicio social:
Cooperativa "San Pío X", Comedor "Mons. Pablo Ramírez", para los pobres, etc.; sin
dejar de olvidar la construcción del "Santuario a la Virgen de Fátima", en Santa
Apolonia....
En fin, obras que hablan y hablarán favorablemente de él, y que permanecerán
en el recuerdo de todos los que lo conocimos. Lo tendré presente en mis oraciones,
acompañado del "pesar" por habernos dejado; pero, también con la "alegría" de
que, con seguridad, habrá logrado su deseo de "estar junto a quien representó y
sirvió"....
¡Qué descanse en Paz!
SEMBLANZA DEL PADRE CONRADO
MUNDACA
Carmen Elena Carranza Fernández
Se me invitó a alcanzar por escrito algún testimonio sobre la vida o virtudes de
nuestro querido Mons. Conrado Mundaca, primero con algún temor de no poder
expresar con claridad alguna partecita de la fisonomía espiritual de una persona
que vivió tan a la perfección el cristianismo acepté, mas este primer temor fue
superado por la confianza. Mi alma se llenó de alegría, no es nada difícil hablar de
una persona con quien tuve la suerte de pasar la mayor parte de mi vida.
Contaba cuando lo conocí tenía alrededor de 8 años y desde entonces sentí la
bendición del Cielo. Fui preparada para mi primera Comunión en la Escuela Belén y
allí nos hablaban de la vida ejemplar de los santos, y desde entonces pude ver en
la persona de Mons. Mundaca, un ser muy especial. Las grandes virtudes de los
santos, que siempre me gustaban leer, las veía en él; sobre todo su amor por el
Señor en el Santísimo Sacramento, saludándolo con profunda devoción y respeto
desde la genuflexión bien hecha hasta la adoración interminable en su presencia
real y en el corazón a lo largo de cada hora del día. Tenía en el brazo un reloj que
le recordaba la hora y abstrayéndose de sus actividades, entrecruzando los
dedos, pronunciaba la oración del Padre Nuestro.
Sé que muchísimas cosas serán escritas sobre él y nunca serán demasiado como
interminables son el número de los corazones cajamarquinos y otros, que alguna
vez acudieron a él solicitando un favor con la seguridad de encontrar siempre la
paz y el consejo oportuno; por ello, yo quisiera recordar algo de su vida desde la
faceta de su fidelidad.
 Fidelidad a Dios y a los hermanos, fidelidad a los seres que le dieron la vida, y a
los que la condujeron por el camino de la santidad, fidelidad a sus superiores,
fidelidad a sus orígenes, para ellos brindándoles máxima consideración y
obediencia para lo otro amando entrañablemente al hombre en la persona del
pobre y del más necesitado.
Fidelidad a lo grande, fidelidad a los pequeños.
Si alguna vez nos habló de la paciencia, nunca la perdió.
De la aceptación del sufrimiento, él lo abrazó sin queja y sonriente fuese lo que
fuese.
Del compartir los dones recibidos, él fue un don para todos.
Del perdonar las ofensas, el amó y se entregó como Cristo, sin bajarse de la cruz.
Del orden, limpieza y puntualidad, él fue un trasunto del hogar de Nazaret.
Cada cosa en su sitio; cada tarea a su hora. Su mirada, sus palabras, su silencio
trasluciendo siempre la pureza de su alma.
Nadie menos importante, nadie culpable, nadie olvidado.
A todos nos recibía como si fuésemos los únicos, a todos justificaba, a todos
recordaba con esa memoria privilegiada que el Señor le concedió como un
galardón por su fidelidad.
Al árbol se conoce por sus frutos y nuestro querido Padrecito produjo a su
tiempo frutos sazonados. Cuántos excelentes cristianos se han forjado gracias a su
ejemplo y constancia, cuántas vocaciones confirmadas, cuántas almas salvadas,
cuántos hambres calmados sólo Dios lo sabe, a nosotros nos queda sólo pedir que
pronto se abra el proceso de reconocimiento de sus virtudes heroicamente
practicadas y la perpetuación de su obra.
Y a propósito de obras quisiera también hablar de algunas obras suyas poco
conocidas.
Existen muchas obras de gran envergadura gestadas por nuestro querido
Padrecito como son la creación de la Cooperativa de Ahorro y Crédito San Pío X,
la Casa de la Providencia, Caja de la Providencia, el Santuario de Santa Apolonia,
grupos de apostolado y oración, etc. Pero existen otras obras que son poco
conocidas o mencionadas como son la Cooperativa de Ahorro y Crédito Nuestra
Señora del Rosario en la provincia de Cajabamba que ha alcanzado gran
prestigio y estabilidad como la existente en nuestra ciudad, la Legión de María en
la Pampa y en Cajabamba con más de 50 años de apostolado.
Yo quiero abocarme en esta oportunidad a dos obras que por justicia no
debo callar y que se hicieron realidad gracias a su iniciativa, confianza y oración,
ellas son:
65
CONSTRUCCIÓN DE UN TEMPLO EN HONOR
AL SEÑOR DE LA MISERICORDIA.
Año 2001. Quien les habla era, en ese tiempo, Presidenta de la Asociación del
Señor de la Misericordia en Cajamarca, y el Padrecito Mundaca el Director
Espiritual de la Asociación. Un día le manifesté mi deseo de hacer realidad la
construcción de un Templo en honor del Señor de la Misericordia. En realidad la
idea no era mía, se trataba de rescatar el deseo de la Asociación que hace años
había tenido e incluso había puesto ya la primera piedra pero al perder el terreno
por falta de construcción, la Municipalidad dio el cambio de uso signándole a la
Comunidad de las Hijas de San Vicente por espacio de dos años, al término del
cual tampoco ellas pudieron construir su deseada Casa de Recuperación para
enfermos mentales, el terreno revirtió nuevamente a la Municipalidad. Fue entonces
cuando Mons. Angol Francisco Simón Piorno, Obispo de la Diócesis, solicitó
nuevamente dicho terreno para el Templo del Señor de la Misericordia. La
Comunidad se opuso alegando que cuando ellos querían un Templo la
Municipalidad no les apoyó, y ahora lo querían para otro fin.
Frente a esta situación surgió la idea de realizar una campaña para adquirir
fondos y comprar un terreno. La consulta la hice primeramente a nuestro Director
Espiritual. Le pareció muy bonita; luego consulté a la Señorita Dolores Estela
Goicochea quien se alegró muchísimo, con ambos veredictos consulté a la
Asociación, y al aceptarla emprendimos juntos la tarea de adquirir dichos fondos.
El 19 de junio del 2001 recibimos la primera donación de la Señorita Lilia Torres
Sánchez como respuesta a la Campaña "Un metro para el Señor" consistente en
$60 (sesenta dólares americanos). Sé que fue gracias a las oraciones de nuestro
Padrecito Mundaca que la obra se hizo realidad. Se cursaron oficios a personas
más piadosas y conocidas y muchas de ellas respondieron generosamente, otras
se unieron después con trabajos, oraciones, objetos para ser rifados y dinero.
Nuestro Padrecito agradecía a Dios cada día que la suma aumentaba y la obra
se hacía realidad.
Mons. Ángel Francisco por su parte nos concedió una carta abierta avalando
cualquier gestión que se realizara pues él también tenía gran devoción al Señor
de la Misericordia.
Se construyó el Templo, no en un terreno comprado sino en el terreno que nos
propuso Mons. Ángel Francisco. Pues la comunidad de Santa Rosa le venía
pidiendo que les ayudara para construir una capilla. El aceptó ayudarles siempre
que fuese ofrecido y dedicado al Señor de la Misericordia. La Asociación pondría
el dinero y la comunidad de Santa Rosa el terreno, se elevó a consulta esta
propuesta y al ser aceptada en Asamblea de la Asociación se comenzó a
entregar el dinero recolectado en la Campaña y otras actividades según consta
en los recibos firmados por Mons. Simón Piorno y la Tesorera Pro Construcción del
Templo: Srta. Socorro Vásquez Barrantes. Posteriormente se formó un comité de
barrio teniendo como presidenta a la Sra. Martha Cedrón de Farfán y éste
continuó con los terminados del Templo.
Quiero agradecer públicamente a todas las personas que colaboraron
desinteresadamente en dicha construcción y expresarles una vez más en este
homenaje póstumo a nuestro Padrecito Mundaca su agradecimiento y bendición
desde el cielo pues siempre los tuvo presente en sus oraciones, sobre todo a las
tres de la tarde Hora de la Gran Misericordia.
Si el Santo Rosario era su oración favorita, la Coronilla al Señor de la
Misericordia no quedó atrás, así hasta el último día lo rezó con gran devoción y
cariño.
La presente lista corresponde a las personas que en ese tiempo colaboraron en
dólares y en soles durante mi gestión y de lo cual podemos dar fe junto con la
Tesorera, posteriormente se dieron otras donaciones que las hicieron llegar al
Comité de Barrio.
A estas contribuciones se agregaron los ingresos adquiridos mediante rifas,
tómbolas, tés, venta de almanaques y devocionarios, pesca milagrosa, limosnas de
alcancía y otras actividades en las cuales participaron activamente las hermanas
de los diversos núcleos de la Asociación de la Divina Misericordia entregando un
total de $ 8 687 y S/. 7 170.00 entre el 05 de diciembre del 2002 y 07 de enero del
2004 en presencia de nuestro Director Espiritual Mons. Conrado Mundaca Peralta.
Paralelamente a esta campaña, Mons. Ángel Francisco, presentó un proyecto a
la Organización de Adveniat obteniéndose para dicho templo la cantidad de $
25 mil dólares con los cuales se inició el trabajo dejándolo techado con teja
andina que le donara Minera Yanacocha.
Hoy se reúnen allí un promedio de 200 personas en las misas dominicales para
dar culto a nuestro Buen Dios.
66
OTRA OBRA POCO CONOCIDA
PERO DE MUCHO ALCANCE
Otra obra nacida a iniciativa de nuestro querido Padrecito y que es
poco conocida fuera del ámbito en el cual se desenvuelve es la denominada:
"GRUPO DE COLABORADORES DE RADIO MARIA". Fue en el mes de mayo del 2004
cuando un grupo de 21 personas a invitación de Mons. Conrado Mundaca,
decidieron apoyar la labor que viene realizando Radio María aportando
voluntariamente una cuota mensual. Transcribo textualmente la primera
comunicación que él mismo envió a Lima:"Conrado Mundaca Peralta, tiene la
alegría de saludar a Radio María, y comunicarle que unos cristianos de la ciudad
de Cajamarca, sencillos, humildes y de escasos recursos económicos, se van
juntado para reunir sus pequeños aportes y enviarlos mensualmente para
colaborar con un granito de arena a levantar el gran edificio de la
evangelización en el mundo entero, de modo particular en nuestra querida Patria;
con esta comunicación estoy enviando el fruto del mes de mayo, por la modesta
suma de S/. 245.00 nuevos soles, por intermedio del Banco de Crédito, cuyo
comprobante adjunto a la presente comunicación. Muy fraternalmente en Cristo”.
02 de junio del 2004.
Luego agregó en la primera cartita: "De esta forma iré informando a las
personas que se vayan uniendo al grupo de "Colaboradores de Radio María" el
resultado de cada mes. En el segundo mes ya éramos 29 colaboradores y al
finalizar el año 2004 fuimos 74. En Diciembre del 2007 llegamos a 97.
Algunos dejaron de aportar en algunas ocasiones, otros ingresaban y así se ha
mantenido mes a mes. La Srta. Rosa Núñez Jave recibe en la Casa de la
Providencia las aportaciones de la mayoría de Colaboradores, otros me entregan
personalmente. Los primeros días de cada mes hacemos juntas el balance mensual.
A partir del segundo mes, me invitó a asumir la correspondencia entre el grupo
diciéndome que lo tomara como un bonito apostolado, así hemos venido
haciéndolo desde entonces. Cada mes se les envía una cartita abierta a cada
colaborador indicándoles la cantidad recolectada.
Después de un año y a pedido de los Colaboradores, el Grupo llegó a
denominarse: "GRUPO DE COLABORADORES DE RADIO MARÍA, PADRE CONRADO
MUNDACA".
El nombre de Mons. Mundaca nunca faltará en nuestros cuadernos de
Aportaciones, y así desde enero de este año tres personas aportaron una cuota
extraordinaria en su nombre; en febrero, se agregó la colaboración del Santuario
de la Virgen de Fátima y en marzo dos personas más.
 Para terminar quiero agradecer a Dios el darme como Padre Espiritual al
Padrecito Mundaca. Personalmente tengo muchísimos recuerdos maravillosos que
los conservaré por siempre en mi corazón, como cuando estuvo pendiente de la
salud de mi madre a quien le extirparon un riñón en la ciudad de Trujillo hace 34
años. El me alentaba con sus cartas o llamadas telefónicas y gracias a sus
oraciones la tengo viva hasta hoy; o cuando mi hijito de 02 días de nacido se
enfermó gravemente, él iba a visitarlo todos los días al hospital. La gente
preguntaba quién estaba enfermo, ¿será algún sacerdote? o ¿quizás el Sr.
Obispo?, y cuando les respondían que era un niño de 2 días se admiraban de su
gentileza. Y más tarde cuando ya tenía 2 años lo recogía todas las mañanas en su
voslwagen para darle unas vueltitas, el bebé regresaba feliz y el Padre volvía al
día siguiente porque sabía que el bebé lo estaba esperando, o cuando nos llevó
a la Grama al ser trasladada manejando él mismo su carrito a fin de que los bebés
no se maltrataran en el ómnibus. ¡Cuántos viajes juntos! por trabajo o apostolado
con la Legión de María. Cuantos rosarios ofrecidos a María Santísima, o el rezo de
las Horas. Lo que siempre pude ver y constatar es que no tenía ni un solo minuto
perdido. Cuando se agotaba un tema de conversación inmediatamente recurría a
la oración o a la lectura meditada, qué bien sabía desviar la conversación
cuando alguien lo elogiaba o callar sí se trataba de alguna queja contra
alguien.
En su enfermedad conservó la misma serenidad de por vida. Siempre
agradecido por algún servicio o atención, siempre pendiente de todos. Cuando lo
saludaba, no dejaba un solo día de preguntar por cada uno de los integrantes de
mi familia, este gesto tuvo siempre con todos los que se le acercaban. Fue
realmente un padre o por decirlo mejor fue siempre el rostro del Padre
Misericordioso que esperaba con paciencia el retorno de sus hijos y cuando los
tenía ante él no había prisas, siempre atento a todo cuanto tuviéramos que decirle.
El Padre lo ha llevado, pero también lo ha dejado con nosotros, es uno de esos
misterios de Dios, a nosotros nos queda recordarlo y practicar sus enseñanzas
sobre todo cuando se trate de cumplir la voluntad de Dios quien todo lo permite,
según nuestra capacidad de comprensión "nada se mueve o sucede sin que Dios
lo permita" y a todos nos da exactamente según nuestras fuerzas "en número, peso,
y medida", siendo así por qué angustiarnos? "Dios que es nuestro Padre y nos
conoce, no permitirá que nos suceda algo que no podamos soportarlo" (Mons.
Conrado Mundaca)
67
TESTIMONIOS DE SACERDOTES
Padre José Alejandro Gil Montoya
Mons. Mundaca era muy amigo con el Monseñor Pablo Ramírez Taboada y por
eso, en su nombre de fundó el comedor de niños pobres Pablo Ramírez Taboada en
la Av. Horacio Urteaga. También organizó una atención a los enfermos pobres, allí
junto al comedor, que hasta ahora está funcionando.
Después organizó la Legión de María. Construyó el Santuario de la Virgen de
Fátima, también organizó la Cooperativa San Pío X.
Él no fue nombrado párroco de las provincias, solo trabajó en la ciudad de
Cajamarca.
Fue un hombre muy entregado a la oración. Se lo veía por la calle rezando su
Rosario, leyendo un libro y esto es un ejemplo para todos nosotros porque de esta
manera se alimenta nuestra vida espiritual.
Es un ejemplo de una persona honorable, nunca se lo escuchó que estaba en
algún pecado, sino más bien era un ejemplo de todos los sacerdotes que sentimos
su muerte. Lamentablemente a su entierro, que se hizo en la Iglesia La Catedral, no
estábamos porque fuimos a un retiro espiritual allá a un conventito de Trujillo. Solo
vinieron dos: el padre Manuel Alvarezy el padre Pedro Cáceda.
Padre Rolando Estela Díaz
El testimonio que puedo dar del padre Conrado Mundaca es que, desde que lo
he conocido ha sido un hombre muy sencillo y bueno, en su espiritualidad, muy
profundo y muy cercano a la gente con una sencillez que le hacía llegar a todos;
eso es en términos generales, lo que podría decir del padre Mundaca.
Aquí en Cajamarca ha estado por lo menos 60 años. Ha sido un apóstol
entregado a la iglesia de la ciudad de Cajamarca como guía espiritual, como
maestro de la Legión de María, muy devoto de la Santísima Virgen y muy constante.
No se ha contentado con tener la Legión de María solo en Cajamarca sino que
él ha salido a los pueblos: a Cajabamba por ejemplo, por Bambamarca, por los
distritos de Cajamarca. Siempre ha tratado de llevar el mensaje de la Legión de
María a muchos cristianos.
Otra cosa que ha resaltado siempre en el Padre Mundaca es su bondad, su
sencillez, su cercanía a la gente y muy alegre. Cuando teníamos nuestros retiros, por
ejemplo. En una ocasión tuvimos uno en Baños del Inca y cómo gozaba él
contando chistes y anécdotas de su vida sacerdotal.
Deseamos que el testimonio de Mons. Conrado Mundaca sea acogido por la
gente porque nunca se lo ha visto como una persona pesada y sufriente sino que
cuando le ha tocado el sufrimiento ha estado siempre sonriente y alegre.
También la constante preocupación por la vida real de sus hermanos, por eso
fundó la Cooperativa de Ahorros San Pío X en Cajamarca. Es señal evidente que
él ha estado tras de todo lo que es la problemática de la vida real de nuestro
pueblo. De igual modo ha sido fundador de la Casa de la Asistencia a los pobres
de Cajamarca; todo eso le hace un cristiano auténtico, para mí. Preocupado
mucho por la espiritualidad, que se encarna en la preocupación por la vida, sus
problemas, su economía y la vida de todos.
Testimonio del Padre David
Conocí a Mons. Conrado Mundaca cuando estuve en el seminario San José
de Cajamarca. Tuve la ocasión en dos oportunidades de tenerlo como confesor
y de esos pocos encuentros con él, puedo decir que era un hombre que irradiaba
mucha paz, mucha seguridad en la fe, mucha convicción. Tenía palabras muy
sabias para aconsejarnos en la confesión, irradiaba la fe que todos necesitamos
y anhelamos en nuestra vida. En cuanto uno lo veía lo saludaba y él nos dirigía una
palabra con una espiritualidad profunda, vivida intensamente. Para nosotros, en el
seminario, era un sacerdote modelo, digno de seguir sus pasos por quienes
éramos, en ese entonces, aspirantes para sacerdotes y nos servía al mismo
tiempo como sostén para aspirar a esa Santidad que creo que lo ha logrado.
Testimonio del Padre Lorenzo Vigo
Yo solamente quiero decir que lo encontré de profesor del Seminario San
José. Su característica fue siempre ser fiel a Dios y por ese motivo, él terminó en el
Asilo. No porque fue inútil sino porque él quería espiritualizarse más para morir
santamente y entregar su alma a Dios. Él tiene una obrita pequeña editada que
se llama Preparación a la muerte.
Siempre le gustó servir al Asilo, allí le daban a veces de comer, tomar desayuno
y sobre todo le daban su almuercito y cuando podía caminar allí estaba él
preparándose para la muerte hasta que murió en el Asilo. Fue un hombre
verdaderamente un ejemplo para los curas. Mire, Juan Pablo II ha muerto con el
Rosario en sus manos y Mons. Mundaca fue como él, con una devoción muy grande
a la Virgen de Fátima que es un testimonio vivo que está en el Santuario de
Fátima. Él propagó acá esa devoción porque la quería mucho.
En cuanto a su piedad, podemos resumirlo en esto: En la Sacristía de la
Catedral había un cartoncito escrito, parece por su propia mano, que decía:
68
Despacio y con devoción,
di sacerdote tu misa,
que lo corrido y la prisa
desdice tu dignidad.
¿Qué quiere decir esto?, que la misa tiene su tiempo determinado, no es para
más y tampoco se debe terminarla rápido.
Este escrito ya no está hoy, han puesto imágenes porque hay un montón de
curas que se alocan por retocar imágenes, no para que la gente le dé culto sino
para que lo regalen a sus amigos o las vendan.
Mons. Mundaca es el modelo de los curas en la Santa Confesión; le encantaba
confesar y gran parte del tiempo lo encontraban en el confesionario los que lo
buscaban. Si era muy urgente los atendía y aprovechaba para dar un consejito a
alguien. Si era sacerdote para que no seamos pues tan toscos, porque hay un
refrán que dice: por un lado nos entra el mensaje de Dios y por otro lado sale y
Mons. Mundaca riéndose nos decía: “Ustedes son como tubos, por un lado, les
entra y por otro les sale”. Se van al retiro, entran con entusiasmo, salen del retiro
con cara triste, pero al mes ya están vuelta a Satanás. Los que hemos
desequilibrado al mundo somos los curas con nuestro comportamiento, muy pocos
son los fieles al cuerpo, al juramento sacerdotal.
Yo siempre he sido su devoto y me he confesado con él, siempre obtuve buenos
consejos y entusiasmo para vivir. Luego ha sido mi Director Espiritual.
Para el día de mi santo siempre tenía él una tarjetita y S/.100.oo soles de su
desprendimiento. Él ha sido profesor de San Ramón como yo; si no hubiéramos
tenido eso no hubiéramos tenido nada porque la vida del cura, qué sabrá para el
dinero, es la cruz de los pobres. Los que son amantes del dinero son ambiciosos,
envidiosos, les gusta hacer quedar mal a otros curitas que son un fastidio para
ellos.
Juan Pablo II, la primera vez que se fue a EE.UU. y regresó a Roma, reunió a los
cardenales y lloró en su presencia porque encontró mucho homosexual, mucho
pedófilo, mucho lesbianismo y la iglesia no puede marchar así. En el mundo entero
estamos divididos con esta gente. Yo no sé cómo prometemos a Dios reverencia y
obediencia, cuando lo primero que pretenden es apartarse de la iglesia, por eso
a muchos los han tenido que excomulgar en estos últimos meses y se han casado.
Yo quiero morirme pobre como Mons. Mundaca, hace poco me he ido al Asilo a
agradecerles a las hermanitas porque lo han atendido. Él fue un modelo en todo.
Yo he seguido ese ejemplo de él de vivir pobremente.
El padre Mundaca está en el cielo indiscutiblemente y estará en los pies de la
virgencita de Fátima, a los pies del Santísimo.
 La bendición más grande que he tenido de Dios, es que me ha dado curas que
admirar, el padre Mundaca, Luis Rebasa y muchos más.
En algún momento lo propusieron para obispo al Mons Mundaca, no lo han
hecho porque él era hijo natural, y otros que querían ser obispos también se
prendieron de eso, pero él nunca tuvo odios, siempre tuvo una risa para aquellos
que lo acusaron, lo mismo que a monseñor Dammert, que “era comunista” porque
tenía sus amigos de la teología de la liberación.
Testimonio del R.P. Efraín Castillo
Yo conocí al Padre Mundaca en el año 1979, cuando vine por primera vez a
Cajamarca, y siempre lo vi preocupado en sus trabajos pastorales en torno a
Santa Catalina, que conocemos hoy como la Iglesia Catedral. Lo conocí cerca del
altar, cerca del confesionario; en sus grupos apostólicos, en especial la Legión de
María, e igualmente con algunas obras sociales que dirigía o estaba próximo,
como la Cooperativa San Pío X y el hogar Monseñor Grosso.
SOBRE SUS VIRTUDES
Fue una persona ejemplar, siempre se le vio concentrado en su tarea, en la
consejería espiritual, en el confesionario en especial. Muchas familias y personas de
Cajamarca se identificaban con él en su quehacer, hombre de oración y cercano
al altar, ahí creo que estriban sus grandes virtudes.
ENSEÑANZA AL CLERO DE CAJAMARCA
La gran enseñanza que deja es la dedicación y la firmeza más allá de
cualquier circunstancia que uno pueda tener en la vida. Su dedicación exclusiva
al servicio de la Iglesia al servicio del Señor y también su desprendimiento para no
acumular cosas para sí, sino para la Iglesia.
SOBRE SU LABOR PASTORAL EN LA DIÓCESIS DE CAJAMARCA
Yo creo que ha sido muy significativa, ha marcado en el movimiento y en las
personas más allá del movimiento; es el caso del Colegio María de Nazaret por
ejemplo, que la fundadora y el entorno a ella era gente cultivada por el Padre
Mundaca, concretando una actividad de tipo educativa. También el gran amor a
la Virgen en la construcción del santuario de Fátima en Santa Apolonia.
69
Testimonio del Padre Segundo Alarcón
Yo trabajé dos años con él en la Catedral, al inicio de mi ministerio, fue una
experiencia muy agradable, ya que fue una persona muy cercana a Dios, orante,
muy querida porque era una sacerdote que estuvo trabajando muchos años en la
Catedral, entonces era muy apreciado por todas las personas.
Yo destacaría dos cosas de él, lo primero es su trabajo muy cercano a lo que es
la Legión de María, con los jóvenes, con los adultos, y con todos los grupos que
pertenecían a este movimiento, quizás, pero su dedicación a este grupo ha sido
casi total, y esto lo llevaba a acompañar a los jóvenes, a darles retiros, reflexiones
en sus reuniones, y la otra cosa es su práctica orante, que era muy asidua,
constante y creo que eso decía mucho de él como una persona muy cercana a
Dios, muy convencida de lo que estaba haciendo. Y al final de sus días, cuando lo
estuve visitando en el Asilo, le llevaba la comunión, veía su gran fervor para recibir
la Eucaristía cada día.
Creo que son aspectos por los que hay que darle las gracias a Dios por la vida
del Padre y por el testimonio que ha dado y además por el legado que ha dejado,
porque ha formado a muchas generaciones en el aspecto religioso aquí en
Cajamarca.
El día de su sepelio ha sido una muestra de esta gratitud la presencia de
innumerables fieles, que le siguen recordando con cariño ya que ha sido un
Sacerdote esmerado, entregado, convencido de lo que ha hecho.
UNAS PALABRAS DE RECUERDO
DE MONS. CONRADO MUNDACA
Miguel Garnett.
Si hay una sola palabra que puede resumir el testimonio sacerdotal del padre
Conrado Mundaca, creo que es la fidelidad. Casi siempre en la ordenación
sacerdotal, el obispo toca el tema de la fidelidad, pero, lamentablemente, es una
palabra que frecuentemente cae en saco roto. Vivimos en una época de mucha
infidelidad, sea en la familia, sea en el campo de la política, sea en la vida religiosa.
Posiblemente esta falta de fidelidad sea una faceta de la filosofía reinante en el
mundo occidental, el postmodernismo. Esta es una filosofía escéptica, donde ya no
hay ninguna verdad absoluta y donde todo es relativo. Entonces no hay un
concepto de la fidelidad durante toda la vida a una promesa hecha cuando
alguien es joven. Más bien se dice que las personas, las cosas y las situaciones
cambian, y, por tanto, que una promesa hecha hace algunos años ya no obliga.
Contra este relativismo, la Iglesia tiene la misión de anunciar la verdad del
Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo. Es una verdad perenne y el padre Conrado
fue ejemplar en su testimonio a esto durante toda su vida. Desde aquel día,
cuando se postró en el piso durante la invocación a Dios y a los Santos en la
Letanía, en su ordenación sacerdotal, se mantuvo absolutamente fiel a su promesa
de servir al Señor y al prójimo.
Vinculado con su fidelidad, Don Conrado era un hombre muy humano, muy
comprensivo de las debilidades de los demás. Sabía guiar a los fieles de tal
manera que siempre animaba y alentaba su esperanza. No hablaba con dureza
con respecto a otras personas, pero sí, era muy exigente consigo mismo, viviendo
una vida abnegada y austera. Durante varios años, en las vacaciones del
Seminario, tuve el gusto de almorzar con el Padre Conrado y de compartir la
sobremesa. Recibí los frutos de su sabiduría y experiencia, y ambos gozábamos de
los chistes y anécdotas que contábamos. Sí, el Padre Conrado tenía un profundo
sentido del humor y sabía reír con generosidad y alegrías sinceras. Por todo esto
mis recuerdos de su compañía y de su testimonio son de los más gratos.
¡Qué descanse en la paz y en la alegría del Señor!
TESTIMONIO DE OTROS
AMIGOS DEL PADRE MUNDACA
Testimonio del Dr. LUIS ORTIZ
Podemos resumir la vida de Mons. Mundaca en tres aspectos importantes:
humildad, castidad y obediencia.
En primer lugar, le gustaba mucho y se enorgullecía contar que él era de origen
campesino, sus ancestros gente muy humilde.
En segundo lugar, la castidad, porque fue mi confesor y mi amigo de muchísimos
años, con él formamos la Cooperativa San Pío X, lo ayudé mucho en el santuario de
Fátima, su comedor y después el otro comedor que lleva hoy su nombre. Siempre
estaba deseoso de servir. El otro aspecto ha sido la caridad que demostraba
teniendo una serie de pobres, a los cuales, les ayudaba económicamente sin hacer
demasiados aspavientos, sin que nadie se dé cuenta.
Tan humano, conversando con él tan amigablemente y profundamente, de vez
en cuando pasaba por pequeñas crisis. Se preguntaba sobre el resultado de su
vida, sobre qué he hecho y es un rasgo de mucha sinceridad, de tal manera que
tenía además una obediencia tremenda a sus superiores, sin considerar pequeñas
70
fallas que podían tener ellos. Era incapaz de tomar decisiones propias e
independientes sin estar consultando con sus superiores.
Resumiendo, era un hombre cabal, completo, humano; pero dentro de su
humildad, tenía rasgos de grandeza espiritual.
Cuando cumplió sus 75 años de sacerdocio, escribió una carta a todos sus
amigos, dentro de los cuales estaba yo, donde se despedía de sus labores
eclesiásticas. De tal manera que Mons. Mundaca, como humano, ha sido una
persona excelente.
Testimonio de Felipe Miranda
Voy a contar vivencias, recuedos de nuestro amigo, quien fue para mí un asesor
espiritual permanente. A Mons. Mundaca lo llegué a conocer por una casualidad,
era más o menos el año 1952 o 1953 y Cajamarca siempre se ha distinguido por su
fe católica y por su cristianismo. Para la semana santa, las madrecitas nos exigían
que tuviéramos que prepararnos.
Justamente en Semana Santa, tendría más o menos 15 años y me acerqué a la
Iglesia San Francisco para confesarme porque esa era la costumbre, después de
hacer la cola y viendo que había bastantes jóvenes y adultos, decidí ir a la
Catedral a la mano derecha y esperé mi turno hasta llegar junto a Mons.
Mundaca, quien me recibió con mucha alegría, me preguntó mi nombre, cuántos
años tengo y qué cosa estoy haciendo, prácticamente todo eso fue la confesión al
padre, le dije que había terminado la primaria, pero mi madrecita me ha dicho que
ya no podré seguir estudiando por falta de recursos, y que en ese momento estoy
en un taller de mecánica aprendiendo la profesión de mecánica. Me dijo: -¡Muy
bien! Mira, Felipe, en Cajamarca estoy formando la asociación de Obreros
Católicos, ¿no te gustaría pertenecer? Le contesté, no sé padre de qué se trata,
pero sí usted me invita, con mucho gusto, le contesté. Para que conozcas te vienes
el miércoles a la 8:00 p.m. a los altos del obispado, allí nos reuniremos, te espero.
Llegó el miércoles y fui a las 8 y 05, encontrando varias personas mayores en
el salón y Mons. Mundaca estaba dirigiendo la reunión y les dijo a todos: acá
tenemos a un nuevo socio de Obreros Católicos, es un jovencito y lo vamos a
incorporar a nuestra asociación, y todos dijeron: ¡Muy bien! Desde allí empezamos
a ser buenos amigos con Mons. Mundaca.
Fui criado y protegido por mi madrecita, no tenía papá porque desde muy
joven perdí a mi padre. Para esa época, la orientación y consejos de la madre eran
suficientes, pero también tenía que haber, de todas maneras, la voz paternal,
varonil y el Mons. Mundaca, me ayudó en ese sentido, pues sus consejos fueron muy
importantes en cada día de mi vida, convirtiéndose en mi guía espiritual.
 A inicios del 1957, estaba con la intención de casarme, obviamente, antes
había arreglado y preparado todo para el matrimonio y esto le consulté al padre,
cuál sería el consejo; Me dijo: ¡Bien!, ¿ya estás preparado profesionalmente, es
correcto, todo va en unión y armonía con los padres de la novia y con ella? Sí le
dije, padre, me contestó: ¡Muy bien! Y tú qué has pensado, y le dije que tenía que
primero consultarlo con usted, padre ¡Muy bien!, me contestó. Luego me preguntó y
cuándo va a ser, el siguiente año, le dije, porque tengo que comprar algunas cosas
para formar mi hogar. ¡Perfecto!, me dijo.
Llegó la fecha del matrimonio, fijada para el 27 de noviembre de 1957 y él me
dijo: -te voy a casar y el matrimonio, el primero creo, lo vamos a celebrar en el
Santuario de la Virgen de Fátima, ¿te parece?, está bien padrecito, lo que usted
diga, allí lo vamos a hacer, le contesté.
Llegó la fecha y se llevó a cabo el matrimonio, después continuamos con sus
inquietudes de hacer alguna obra de bien social. Cuando se proponía hacer
algo, consultaba con sus amigos para ver en donde encontraba la fortaleza y se
decidía a hacer la obra. Antes, se fue a Puno a prepararse sobre cooperativismo y
cuando regresó, vino con toda la inquietud de la cooperativa. Me dijo: Felipe,
vamos a instaurar la cooperativa en Cajamarca, y se empezó a trabajar en la
Cooperativa. Después de dos años, le vino la inquietud de formar un comedor para
niños pobres y ancianos indigentes que estaban en el abandono. Allí, ya éramos un
grupo numeroso. Estaba Doly Estela, una señorita muy preparada y de mucha
vocación de servicio, y con ellos se instauró este servicio que lleva el nombre de La
Casa de la Providencia Monseñor Pablo Ramírez Taboada, comedor para niños
pobres. Desde esa fecha viene funcionando este comedor.
Llegaron los 25 años de vida matrimonial con mi esposa y padre Mundaca
celebró las Bodas de plata, muy feliz, muy contento. Llegaron los 40, Bodas de rubí
y también lo celebró muy contento. Al cumplir los 50 años de matrimonio, nos fuimos
a ver al padre Mundaca a su aposento para agradecer a Dios junto con él por
estos 50 años de bodas matrimoniales y al mismo tiempo nos dio su bendición.
En los últimos años, yo fui su peluquero y barbero. Todos los miércoles le hacía la
barba y se quedaba muy feliz, muy contento y agradecido. Hasta que un martes 07
de enero, ya no logré hacerle la barba esa semana, porque había fallecido.
Durante todo este tiempo he logrado observar las virtudes, las grandezas
morales y espirituales del reverendo padre Conrado Mundaca, por eso es que no
hay forma de agradecer por tanto favor que recibió la comunidad de Cajamarca,
con tanta humildad, paciencia y sobre todo con tanta inteligencia. Siempre daba
soluciones inteligentes a todos aquellos que se acercaban con sus problemas y
dificultades.
Para mí y toda mi familia ha sido y seguirá siendo un gran soporte moral y
espiritual, porque hoy más que nunca, tenemos más fuerza y fortaleza; debido a
que el señor lo tiene en su gloria y el Reverendo Padre estoy seguro que no se va
olvidar de sus amigos.
71
En este momento, una gran cantidad de cajamarquinos ya no son los que
conocimos a Mons. Mundaca. Quedan muy pocos. Los que viven desde hace 30
años ya no conocen la su trayectoria, pero si se les pregunta a los que tienen más
30 o 40 años van a contar cosas muy asombrosas. Él era un ser con una fe
inquebrantable. Siempre estaba en su plan de oración y hasta por las calles lo
veíamos leyendo sus libritos. Anécdotas hay muchas.
Mons. Mundaca fue un sacerdote que no se quebró jamás en nada, a pesar
que tenía hostilización de su misma agrupación. Le decían: estamos en el siglo XX,
usted tiene que sacarse la sotana y esto lo consultaba con uno y con otro de sus
amigos. Decía: ¿Qué les parece? Algunos, muy prudentes, le decían que se haga su
voluntad padre; otros, conservadores, “-no padre no se saque”: Él nunca se sacó la
sotana. Fue un hombre que cumplió su vocación sacerdotal. La obediencia, por
ejemplo. Cuando tuvieron que operarlo de una hernia decía que tiene que pedir
permiso a su obispo, por eso fue un hombre tan fiel y cumplidor con su palabra, con
la obediencia y el respeto a su jefe y a los jerarcas de la iglesia. En cuanto a su fe
ésta ha sido inquebrantable. Nada pudieron hacer para quebrar su fe, al
contrario, la fortalecieron más.
He sido testigo palpable del poder de protección hacia sus hermanos. Era más
o menos el año 1975, estábamos haciendo una sesión ordinaria del comedor
Pablo Ramírez Taboada en el Jr. Mario Urteaga. Eran las 4: 30 p.m. y de pronto
escuchamos gritos por la calle y ruido fuerte del agua que venía por el río San
Lucas. Le dije al padre, perdón, voy a ver qué está pasando. La gente decía “-trae
gente, trae gente”; entonces entré a avisarle al padre que ha crecido el río San
Lucas y está trayendo gente. Cuando hemos salido rezando y vimos un joven, que
se llamaba Wilson Sánchez, bajando de su casa, que estaba a la orilla del río, a
recibir a su abuelito que estaba haciendo unos arreglos a media cuadra de su
casa. Al bajar a la orilla del río se encontró que traía a una chica, que venía
envuelta con barro, muy golpeada y desnuda, es decir, un cadáver prácticamente
porque el río la había arrastrado más o menos un kilómetro y no se movía ni daba
otras señales de vida. Cuando la muchacha estaba ya en la pista, el padre la
encontró cadáver, todos decían está muerta y el padre lo tapó con su capa, que
siempre se ponía, unos diez minutos. Después de tanto esperar llegó la ambulancia
y la llevó al hospital, al llegar para allá, había signos de vida.
Después de un tiempo, me enteré que la señorita vivía en Trujillo y había venido
a agradecer al joven rescatista. Entonces el milagro es real y allí está. Mons.
Mundaca hizo un milagro porque fue santo a pesar de algunas críticas de algunas
personas, consideradas enemigos gratuitos y son las personas que mucho daño
hacen porque lo hacen por debajo, nunca se enfrentan a decir cuál es el
problema que tienen.
Me acuerdo que en una oportunidad, yo arreglaba una camioneta Ford que
había comprado el padre Mundaca del señor Julio Suárez, ya de segunda mano,
por eso le dio a un precio muy cómodo y especial para que así pudiera comprarla,
porque si hubiera nueva no la habría comprado nunca. Me llamó para que me
vaya a recogerla de la Plaza de Armas porque se ha quedado botada desde la
noche anterior. Me dijo al momento de llegar que no arrancaba y abrió la puerta y
me encuentro con un tremendo pasquín y con qué improperios, con qué bajezas y
nunca le dije ni le enseñe al padre. A muchos no les gusta que haya defensores de
los pobres, que luchen por una causa y por la justicia; entonces, todo esto lo
hacían por desprestigiarlo seguramente. El padre jamás contestó a los insultos ni a
las calumnias; lo que si decía él, es que hay hermanos que no me ven bien y decía
“-Cristo mismo tenía tanta persona que no le pasaba, y que será yo pues que soy
un humilde sacerdote”.
Yo era el socio Nº 57 y él, el socio Nº 58 y siempre lo decía así. Desde el momento
de los ataques al ver esa forma tan desleal y tan ingrata de tanta gente, le dije:
padre, yo salgo de esta cooperativa, él no me dijo sí o no, y en algún momento
también me dijo “-yo también voy a salir”, pero no salió, pero yo sí salí porque no
había una consecuencia, no había una respuesta positiva de parte de todos los
socios, porque ya hubo intereses que quisieron apoderarse del gobierno de la
cooperativa y lograron sacarlo al padre.
Juan Pablo II hacía una visita al Perú y se organizaban en caravanas en todo el
país para ir a su Lima a recibir al Papa. En esa oportunidad, en Cajamarca se
organizaron todos los grupos religiosos. Monseñor José Dammer Bellido le dijo a
Mons. Mundaca, “-Vaya usted en mi representación, le voy a dar una carta, porque
yo no puedo ir”. El padre contestó: “-Como usted diga Monseñor”. Sabemos que los
obispos tienen un lugar especial en la Conferencia Episcopal y el padre con su
sencillez, su humildad y obediencia cumplió con presentar la carta en la
Conferencia y el secretario le dijo: esto no es para usted, esto es para los obispos,
de tal manera que usted no puede entrar allí. Entonces el padre con mucha
humildad se paró a un lado por donde todos los obispos pasan a su respectivo
lugar, pero el padre dice: ¡Milagro de Dios! Como yo estaba arrinconadito, en ese
momento llegó el Papa y tenía que pasar por mi lado porque ya no podía ir más
allá. Cuando de repente, el cardenal Landázuri me vio y me reconoció, y como
estaba muy cerca al Papa le dijo: “-Mons. Mundaca de Cajamarca” y el Papa se
alegró diciendo: “-¡Mons. Mundaca de Cajamarca!” Mons. Mundaca decía: “-
Como me conocía el Papa, me abrazó, me saludó y se fue”.
Antes que tenga su carro, los domingos por la tarde me iba a sacarlo de la
Catedral de 2 a 3 p.m. y lo llevaba a Aylambo y en el gras, donde están las flores,
se acostaba y se quedaba media hora durmiendo, luego se despertaba y decía
“-Que rico he descansado, vámonos ya”. Esto lo hice un buen tiempo. Después tuvo
una camioneta y en 1955, le enseñé a manejar y él emocionado decía: “-Me
encanta manejar”. Salía por el campo a hacer cualquier actividad relacionada
con su vocación de sacerdote.
Era un excelente consejero. Cuando el padre Manuel Ugaz iba a ser
destacado al distrito de Tembladera, quería comprar un carro; Mons. Mundaca,
con mucha inteligencia y conociendo a los feligreses cómo rápidamente hacen
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prejuicios, le dijo que debe comprarlo aquí en Cajamarca antes que vaya a
Tembladera. Llega con tu carrito aunque viejito, pero que te vean que llevas tu
carro; no vaya ser que lo compres cuando estés en Tembladera y vayan a decir
que lo estás comprando con las limosnas de la Iglesia. Entones el padre Ugaz le
dijo: quisiera comprarme un pequeño nomás como el de Felipe. Entonces, Mons.
Mundaca me dijo que el padre Ugaz necesita un carro para que vaya a
Tembladera de párroco y que deberíamos apoyarlo a conseguir, y me preguntó si
quería vender mi carro, le dije que sí y le vendí mi carro al Padre Ugaz. Con este, se
fue a Tembladera atendiendo al consejo de Mons. Mundaca.
Después lo sacaba a pasear en mi carro por diferentes lugares. Primero nos
íbamos a Santa Apolonia y le decía padre, se acuerda de Cajamarca por los años
30 y me contestaba ya está invadido de casas y el valle está chico. Después ya se
postró en el Asilo y nos envió un circular diciendo que sigamos trabajando sus
obras, en las que muchos años nos ha acompañado, y él ya tiene que dejar por
las limitaciones que tiene, esto fue en 1999 que se fue al Asilo.
Mons. Mundaca con el pasar de los años, se convirtió un padre espiritual en mi
vida. He tenido dos escenarios en mi vida que me han dado una formación bien
definida. El primer escenario me lo dio Mons. Mundaca, de ser una persona con
todos los valores que se requiere, ser un buen cristiano, no por eso quiero decir que
soy perfecto, pero si preocupado siempre en seguir con lo que nos exige nuestro
hermano Cristo. Entonces, ese escenario de la obediencia, de la responsabilidad,
del cumplimiento, de la honestidad, de la transparencia, ese, es del padre
Mundaca. El otro escenario es que soy de un carácter bien firme y enérgico, este
escenario me enseñó Monseñor Dammert Bellido, quien fue muy amigo del padre
Mundaca, con él hemos trabajado mucho tiempo. Él me enseñó que el cristiano
debe luchar contra la injusticia, la discriminación, la pobreza y educación con
fortaleza y posiciones firmes. Mons. Mundaca me decía tranquilo, Felipe, no hay
que ser impulsivos, hay que esperar con paciencia y todo lo que se haga, que se
haga por Dios, ten la seguridad que va hacer fortalecido, no va a perecer. Por eso,
tranquilo. Si Dios quiere que se hagan las cosas, se harán de manera lenta, pero
segura. Monseñor Dammert, en cambio, me decía: Felipe, posiciones firmes en las
decisiones, hay que luchar contra la corrupción.
Lo que debo destacar del Mons. Mundaca es su humildad y pobreza, así que,
hasta los últimos días de su existencia lo vestían su guardapolvo, su capa, su
sotanita y su sombrero, esa era toda su fortuna. La pobreza se notaba a la
distancia. Cuando su sotana estaba un poco raída, sus amigos le compraban la
sotana como también, sus zapatos porque no le alcanzaba. El poco dinero que le
daban o le asignaban eso lo regalaba a los pobres y todos los días le caían
gente pobre y él se compadecía y a todos les daba, pero la mayoría no han sido
consecuentes, se han olvidado de toda la ayuda, porque inclusive, hubo una
oportunidad que ayudaba a jóvenes estudiantes de la Normal y cuando se
recibieron de profesores, nunca más supimos de ellos. Para él esto no tenía mayor
trascendencia. También no le gustaba estar en las reuniones de fiestas cívicas.
Cuando lo invitaban él iba, pero trataba de buscar un sitio muy poco
trascendente, pero lo ubicaban el primer asiento. Lo único que en la vida tuvo
como riqueza fue su carrito que compró y lo vendió y el dinero lo acabó de
regalar.
También debo referir que el Mons. Mundaca vivió mucho tiempo con su madre,
su hermano, su cuñada y sus sobrinos. Tenía la costumbre de almorzar juntos con
ellos, manteniendo esa unidad familiar, pero lamentablemente murió la mamá y se
retiró de la casa y almorzaba en el obispado y finalmente en el Asilo los últimos
años.
Fui el barbero de Mons. Mundaca y él me decía en son de broma “-Tú eres el
barbero de miércoles”, porque todos los días miércoles le hacía la barba. Él ha
tenido un gran sentido del humor y siempre ha sido invitado por las familias a
almorzar, a tomar un lonchecito. Cuántas anécdotas les habrá contado, estoy
seguro que hubo conversaciones muy agradables y amenas de Mons. Mundaca.
Fue muy reconocido por los alumnos del colegio San Ramón, Indoamericano y
Santa Teresita. Los alumnos de San Ramón cuando venían a las fiestas de su
aniversario, lo primero que se acordaban es de Mons. Mundaca. Por eso, lo
invitaban las distintas promociones para que les haga la clase del recuerdo en las
aulas del colegio todos los años. Él tenía una memoria excepcional porque a
todos los conocía por su chapa y su nombre. Tenía una lucidez mental
extraordinaria, se acordaba de nombres, fechas y estaba al día de todo de lo que
acontecía a diario. Su radio lo había sintonizado en Radio María y se informaba
de todas las noticias que acontecían diariamente, conversaba y comentaba de
ellas con sus allegados. Como docente era de carácter paciente y cuando
corregía lo hacía con la mirada. Era justo y daba oportunidades para que el
alumno se recupere.
Ha recibido muchas felicitaciones y condecoraciones, y todas las ha recibido
con mucha humildad, no se vanagloriaba de nada, porque él se interesaba por
hacer bien a Dios. Ya quería estar con Dios por eso decía “-Ya cumplí”, tenía la
seguridad de que él ha cumplido correctamente y que ya quiere estar con Dios.
Tenía muchos dogmas, muchos principios y era muy carismático. Su gran vocación
y compromiso como sacerdote, específicamente, tratándose del celibato, desde el
año que lo conocí, desde 1952 hasta el 2008, puedo asegurar en un cien por
ciento de que su conducta, su moral fue intachable y eso lo pueden afirmar
también muchísimos cajamarquinos que conocieron la vida activa de nuestro
Mons. Conrado Mundaca Peralta.
Sobre la construcción del Santuario de Fátima, él escribió cómo se inició, quién
dirigió la obra, cuánto costó, cómo se hizo, en qué fecha se inició. Me dijo: “-Felipe,
voy a escribir una carta para que no se tergiverse porque estoy escuchando otras
cosas”. Él siempre fue honesto y justo, en vez de coger más bien él daba. En la
Cooperativa San Pío, por ejemplo, se trabajaba con honestidad tratando de
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hacer el mejor ahorro y cuando él renunció, los nuevos directivos empezaron a
comprar sillas, alfombras y toda implementación de primera, de la noche a la
mañana, secretaria por aquí, secretaria por allá, pero él trabajaba solamente con
una secretaria. Esa era su forma de actuar en la Cooperativa San Pío, con una
vida austera.
En cuanto a su honradez, era incapaz de coger el dinero de las limosnas, de
aceptar alguna cosa ilícita en cuanto a la parte económica porque demostrado
está que su sueldito que recibía todo ese dinero lo repartía entre sus hermanos
pobres. Les daba a los niños, ancianos y demás personas más necesitadas. Por eso,
pocos son los sacerdotes que cumplen las promesas, pero del padre Mundaca
puedo afirmar con mucha certeza, que él si cumplió con todo lo que se
comprometió, con su iglesia, con su religión cristiana y con nuestro Padre
todopoderoso y misericordioso.
Su vida ha sido muy transparente; es por eso que, hombres y mujeres de todas
las edades acudían con toda confianza y seguridad de que era un baúl
secreto de todo lo que le confiaban. Él nos daba las recomendaciones muy
precisas de cómo debemos conducirnos en el camino del Señor. Muchas veces,
hablaba con la mirada, no gritaba, no se molestaba, no hacía aspavientos de
irritación, de cólera sino simplemente con una cara serena, muy profunda y de
humildad, parecía que decía háblame la verdad porque de lo contrario, yo no te
voy a creer; y eso es lo que daba la confianza y seguridad de que todo lo que
podíamos decirle iba ser bien recibido, bien guardado, y luego, lo tamizaba bien
para darnos el consejito preciso sobre tal o cual conducta que estábamos
llevando: hombres, mujeres, niños, señoritas y cuántas personas pedían su consejo y
ayuda.
En su vida activa de todos los días, empezaba a la 4:00 a.m. haciendo la
oración y a prepararse para hacer todas su tareas del día tanto en su
responsabilidad como pastor como también de sus obras sociales. En eso él
ocupaba todo su tiempo hasta las 11 p.m. y a veces se pasaba hasta las 12 de la
noche, y de allí sacamos la conclusión de que dormía un promedio de cinco horas
diarias toda su vida.
En cuanto a su vida de sacrificio y penitencia, una de ellas penitencias era la
oración. Nunca dejaba, podía estar muy agotado, pero la oración no la dejaba
ningún día. Siempre lo encontrábamos en el oratorio después de hacer una
pequeña siesta.
En los últimos tiempos, ya tenía dolores propios de enfermedades de una edad
avanzada. No se quejaba, decía nomás por ejemplo, “-Me duele mucho la
espalda”; seguramente por la posición que estaba descansando en la cama. Se
rompió la cadera, pero no decía “-Me duele”, simplemente lo recibía con
resignación; y así fue siempre, en todo lo que le sucedía en la vida desde muy
joven, siempre lo aceptaba con resignación, con mucha paciencia, con esa
verdadera vocación de ser un buen cristiano.
 El padre tenía mucha ascendencia con todos sus amigos jóvenes y adultos.
Siempre tenía un trato especial. A todos nos trataba por igual, con mucho respeto
y consideración y eso pues, a nosotros, nos elevaba, porque siendo personas muy
humildes y al no estar al nivel de Mons. Mundaca, nos trataba como hermanito,
entonces para nosotros ya significaba buena consideración y buen respeto. Eso
para mí también tiene mucho valor, porque nos daba el verdadero nivel de seres
humanos y hermanos en Cristo para él.
Testimonio de Ana María Roncal Vargas
Conocí al padre Conrado Mundaca Peralta, desde muy niña, en el colegio
Santa Teresita donde hice todos mis estudios. Lo recuerdo con emoción cuando
hacía la bendición con el santísimo sacramento en la capilla durante todo el mes
del Sagrado Corazón de Jesús, en Secundaria, cuando el alumnado lo
esperábamos en formación los días sábados para recibir explicaciones religiosas.
Parado desde una banca color verde para que lo viéramos mejor, desde allí nos
explicaba el Evangelio del domingo, sacaba conclusiones, luego hacía preguntas
a cualquier alumna para ver si estaba atenta y si no, con una sonrisa decía “-Te
mereces un cocacho”.
En el año 1953, llegó a Cajamarca una hermana seglar desde las Islas Filipinas,
Juaquina Lucas, a fundar la Legión de María en la Diócesis. Fue muy bien recibida
por el obispo de ese entonces y por el Mons. Mundaca. Él, muy entusiasta, hizo la
primera invitación a las alumnas del Colegio Santa Teresita. Nos dio a conocer el
carisma de este grupo apostólico en el mundo y muchas alumnas nos alistamos
para engrosar esta institución; así, todas sus inquietudes las compartía con las
alumnas. Recuerdo que un día sábado nos dijo: -les voy a contar un sueño, que lo
tengo dentro, y debe hacerse realidad y para esto, cuento con ustedes; es la
construcción de un santuario dedicado a la Virgen de Fátima en la colina Santa
Apolonia, que presidirá la vista panorámica de la ciudad y desde acá la
imploraremos y ella desde arriba nos dará su bendición; ¿qué les parece? ¡Bien,
padre, al unísono contestamos todo el alumnado. Lo haremos con la operación
ladrillo; así ustedes y los alumnos del colegio San Ramón -donde era también
profesor-, llevarán un ladrillo los sábados por la tarde. Efectivamente, era una
algarabía de algunos, ir y venir con los ladrillos; aún llevábamos los costales para
arrojar el desmonte, sacado del lugar donde iban a hacer los cimientos para la
construcción del Santuario. Al padre se lo veía muy feliz, puesto un guardapolvo
beige, dirigiendo el trabajo de alumnos y pueblo en general hasta ver concluida
esta obra que fue inaugurada y bendecida con la presencia de autoridades,
pueblo y alumnado, enseñándonos a rendir homenaje a la Santísima Virgen todos
los días trece de cada mes con el rosario de la Aurora.
Cuando estudiábamos para profesoras en el mismo colegio, en la sección
normal, fue nuestro asesor dándonos clases de formación espiritual, sobre todo,
nos hacía comprender la noble misión de ser maestra. Si nos tocaba ir al campo
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nos decía: “- Allí serán apóstoles, servirán de sacerdote, jueces, consejeros; vayan
con la mirada puesta en Dios y en su Santísima madre”.
Creo que con esta preparación quien más quien menos hemos cumplido los
consejos de un padre espiritual; no solo para los estudiantes sino para el pueblo
de Cajamarca, de quien hoy ha dejado en nuestras vidas un gran vacío.
Viendo las necesidades económicas de nuestras familias cajamarquinas, con
mucho amor, desprendimiento y deseo de servir a su pueblo, recibió el encargo de
fundar la Cooperativa de Ahorro y Crédito San Pío X. Vimos y vivimos sus primeros
años de funcionamiento de una manera muy modesta; pues todo el pueblo
confiaba en su honorabilidad y luego creció con su buena dirección. Recibíamos
préstamos a bajos intereses, solucionando muchas necesidades familiares.
Cuidaba con mucha delicadeza y honradez los fondos que día a día crecían.
Recuerdo esta anécdota que la dijo en una asamblea de más de mil socios: - “lo
que nace pequeño, se vuelve monstruo; así que, vean ustedes a personas
profesionales y técnicas para que dirijan esta institución, porque yo solo sé sumar y
restar, un poco de multiplicar y otro poco de dividir”. Muy modesto, pues lo hacía
muy bien que hasta llegó a construir un gran edificio, que para los cajamarquinos,
es un recuerdo imperecedero. Cuando pasamos por allí, nos viene a la memoria
este edificio y decimos: es obra de Mons. Mundaca.
Es así como conocía los problemas espirituales y materiales de muchísimas
familias que acudían a pedir consejos y consuelos para sobrellevar con
resignación y valentía, ofreciendo a Dios sus imploraciones. Cajamarca ha perdido
un gran padre espiritual y creemos que está gozando de la presencia de Dios.
Testimonio de la Hermana Pepita Novoa
Aquí diremos una breve historia del Santuario de Fátima. Esta fue una idea muy
especial de este Santuario. Cuando llegó el sacerdote trayendo la Virgen de
Fátima, la peregrina, a Cajamarca. Subió por acá y dijo: -aquí hace falta un lugar
para descansar; entonces Monseñor Mundaca, que era un sacerdote muy
jovencito, allí mismo le nacería en el corazón y en la mente, la idea de tener aquí un
Santuario y justo pensó en este Santuario y se formó. Él hizo su grupo con gente
mayor que nosotros que tuvo más ideas y empezó a formarse el Santuario como se
ve en la historia que está escrita. En una de estas fotografías está la señorita Doly
Estela. Es una hija espiritual de Monseñor Conrado Mundaca desde muy jovencita,
desde que estudiaba la primaria en Santa Teresita y cuando ya entró a la
Secundaria, el Monseñor Mundaca hizo buena amistad con ella. Fue una hija que
lo lloró mucho cuando estuvo enfermo en el Asilo, no le faltaban sus medicinas. Ella
fue una mujer tan caritativa, sin que nadie sepa, ella llegaba con sus medicinas y
se preocupaba por su atención. Gracias a ella, la Legión de María tomó
responsabilidad de ir a cuidar a Mons. Mundaca, porque las hermanitas no tenían
tiempo y no se abastecían. Iban unas en la mañana y otras en la tarde,
especialmente, Carmen González. Ella lo ha visto más que todas. Gracias a la
señorita Consuelo Romero fue posible que la Cooperativa fundada por él, le
hiciera llegar siempre sus medicinas y también enfermeras que lo cuiden.
Doly fue quien dio la iniciativa de estar siempre al cuidado del padre. Recuerdo
mucho sus 90 años, cómo organizó la fiesta en los Baños del Inca. Le hizo su
almuerzo. El padre Mundaca, aunque con bastón, asistió a ese almuerzo. Su plato
favorito era el cuy con su papita picante. Para su cumpleaños la Legión de María
le hacía sus fiestas. Ya después tomaron parte las demás instituciones.
Monseñor Mundaca ha educado a muchas promociones y por eso, muchos hoy
lo lloran y lo mismo ha hecho Doly. Ella tiene muchísima gente que yo conozco que
son profesionales porque ella les ha ayudado sin decirle a nadie.
Sentimos mucho la ausencia de Mons. Mundaca. Él nunca faltó acá al Santuario
a la misa de los días sábados; hora exacta estaba aquí para la Santa Misa. Por
eso él estaba tranquilo porque nos había enseñado todo, especialmente, Olguita
Salas que era la presidenta y yo que era la vice presidenta. Le echamos de menos
mucho a Doly, especialmente, el día 13, porque ella era la que hacía los programas
prácticamente, todo para la fiesta del 13 de mayo. Se nos ha ido Mons. Mundaca,
pero vive en nuestros corazones. Tenemos la suerte de verlo siempre y visitarlo allá
a la catedral, menos mal que está cerca. Muy pronto, estamos seguros que
tendremos un santo intercediendo por nosotros, ha sido un hombre digno, de
veneración, de respeto, jamás se le vio una distracción. Todos los días rezábamos
el rosario de 6:30 a 7:00 p.m. en la catedral. Hasta ahora rezo el rosario, pero lo
hago temprano. Él celebraba muy bien la misa, él cantaba, no necesitaba coro, nos
invitaba a cantar. Amaba mucho a los pobres, porque él era también un
sacerdote pobre. Los retiros legionarios lo hacíamos en el convento de San
Francisco y si algo no le gustaba ponía una seriedad única, que se lo respetaba
pues. A él le gustaba que lleguemos puntal, decía: “-La hora es la hora”.
Cuando se fue al Asilo, lo encontramos arrodillado y le corrían sus lágrimas y ya
tenía su sagrario, allí en su departamento. Cuando terminó de orar empezó a
cantar esta canción que dice:.
Corazón el más puro y más santo
Corazón de mi dulce Jesús,
Tú eres siempre
Mi dicha y encanto
Eres siempre mi paz y mi amor. (bis)
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Ser quisiste mi fiel compañero
En el valle de llanto y dolor
Ser mi hermano,
Mi amigo sincero
El más puro ideal de mi amor. ( bis)
En el Santo Sagrario do moras
me bendices do quiera que estoy.
Y me dices “-Yo soy el que adoras
Nada temas contigo yo estoy. (bis)
No se quitó nunca su sotana ni cuando íbamos a paseo ni cuando jugaba
fútbol con lo legionarios. Se iba a un matrimonio decentemente, no se quitaba su
sotana. Le servían a veces su comida, les decía salud, se despedía y se iba. No se
sentaba allí a beber. ¡Ese era sacerdote! Por eso, quién no lo quería, quién no lo
invitaba a su casa, por eso es que Cajamarca lo llegó a estimar mucho.
Él jamás tuvo una propiedad, se dedicó a trabajar desde jovencito por
Cajamarca. Fue un sacerdote admirable. Yo sí lo lloré y dije: “-Hoy si ya no hay”.
Jamás llegó tarde, ni tampoco, el día que tenía que hacer misa nos plantó. Era un
hombre exacto a la hora, correcto en su comportamiento, también era duro
cuando nos portábamos mal. Nos decía las cosas claras, sin preámbulos. Era un
hombre muy sincero y capaz, muy caritativo, de él tengo muchos recuerdos. Gracias
a él no he tenido problemas en la vida. Nos decía siempre qué debemos ver, oír y
callar si del mundo queremos gozar. Nos enseñaba la caridad, no le gustaba que
critiquemos de nadie.
Rezábamos el Rosario de aurora en la Catedral a las 04 de la mañana y se iba
bastante gente y ahora el rosario es a las 06 de la mañana. Él también nos enseñó
a rezar en los difuntos. Para el carnaval, los legionarios hacíamos el retiro en el
comedor(x) ¡A rezar los tres días!. Éramos un promedio de cuarenta legionarios y
no salíamos para nada los tres días. A las 5.00 a.m. nos despertaba a todos y
empezaba a rezar. Él se levantaba todos los días a las 4:30 a.m.
Mons. Mundaca en el aspecto de la castidad y la pureza, era casto hasta en el
mirar. Por eso cuando celebraba la Santa Misa, ponía dos legionarios a la entrada
y a las señoritas que estaban con manga corta y escote como hoy, se las
mandaba que se pongan su chompa. Al templo se entraba vestida
adecuadamente, porque decía el padre que no solamente con el acto se peca
sino también, se pecaba con los ojos, con los oídos. Hasta en su conversación era
muy casto. Jamás se le escuchó un chiste inmoral, nunca. Jamás hubo una crítica.
Muy poco miraba de frente y andaba por la calle con su rosario y su denario
rezando. Fue un hombre muy virtuoso y muy admirado de la pureza de la Santísima
Virgen. Fue un hombre fiel a su celibato y a la Iglesia. Cuando hacía la Santa Misa,
lo hacía con qué devoción, qué respeto que inspiraba. Antes de su muerte dijo:
gustaba mucho escuchar noticias por radio y vivía en el Jr. Dos de mayo. Era alegre
y bien discreta. Le gustaba leer y hacer su oración. Cuando murió, en el año 1973,
toda la Legión de María acompañamos en el sepelio. Había gran muchedumbre
de gente acompañando al padre al cementerio general de Cajamarca.
Mucho le gustaba cantar a la Virgen María, por eso cuando estaba ya en el
Asilo y delicado, a mí me tocó cuidarlo los días jueves. Lo bajaba en la silla de
ruedas y él me decía: - Hay que bajar cantando a la Virgen. Subíamos, después
de que hacía la misa, de igual manera, cantando.
Cuando el padre iba a las casas, infundía mucha paz y hacía unas oraciones
preciosas. A mi madre le puso los Santos Óleos, con unas oraciones, que a ningún
sacerdote lo he escuchado que las haga a un moribundo. Cuando le ofrecían
algo de comer aceptaba sin ningún detalle y eso, nos inspiraba confianza. Mucho
le gustaba la oración y es por eso que, siempre lo encontrábamos en la Catedral
arrodillado y orando solo.
Él trabajó en San Ramón y Santa Teresita, por eso tenía su sueldo del gobierno.
Cuando estaba en el Asilo lo cuidaban hasta dos enfermeras y eso era un gastito
fuerte; pero la madre superiora me dijo: “-Gracias a Dios el padre tiene su sueldito,
eso nos está ayudando”.
Refiriéndome a las vocaciones sacerdotales y religiosas, a él le ha gustado
mucho, preparaba a las señoritas que tenían vocación antes de ingresar a una
congregación. Para ello nos dijo, a mí y a otra señora, lo siguiente: “-Una señorita
antes de ingresar a la congregación debe tener una experiencia: debe tener su
enamorado, igual que los varones deben tener su enamorada antes de decidirse
por el sacerdocio, para que tengan experiencia, porque después tienen
problemas en el seminario o en una congregación”
Esa fue la opinión que dio ante las vocaciones sacerdotales y religiosas.
Seguramente, habrá visto algo sobre este tema.
La penitencia más grande, creo yo, era de ser tolerante y paciente con la
gente: me pude dar cuanta allá en la casa de la Divina Providencia, donde está el
comedor de niños. Era un problema de papeles pero la gente estaba
reclamando. Esa tolerancia de aguantar a la gente, para mí es un sacrificio muy
grande. Nunca se lo veía enojado, tal vez tenía cierta cólera, pero él no lo dio a
demostrar.
Después que falleció Mons. Conrado Mundaca, fue en el mes de enero,
cruzando el Jr. Ilimane y la Av. Mario Urteaga, hice mi oración a Dios orando al cielo
y también invoque el nombre Mons. Conrado Mundaca. Pedí que interceda por mí
porque ese día, económicamente, estaba muy mal y dije así: “-Señor y Dios mío, tú
ves como estoy económicamente, tu sabrás para el pan que hoy día necesito”.
También invoque al padre Mundaca diciéndole: “-Ruega a Jesús que me dé dinero
hoy día”; es así que, caminé unos pasos en la Av. Mario Urtega y se presentó a mis
pies dos billetes de 50 y otro de 20 soles. Yo sentí una gracia del padre, como
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también de nuestro señor Jesucristo que estaba escuchando mi oración y el
padre, seguramente intercedió por mí. Di muchas gracias a Dios y en ese instante
me vertieron las lágrimas de alegría porque Dios escuchó mi oración y estoy
segura que el padre intercedió por mí. Contándole esto a mi hermana, me dijo: “-
Es que el padre ha muerto santo”. Él era de un corazón tan noble que se
interesaba tanto por la gente sufrida y necesitada. Le gustaba animar a las
personas que lveía con el espíritu caído. Y en el cielo seguirá siempre rogando por
nosotros, seguramente.
CELEBRACIÓN DE LOS CIEN AÑOS
DE NACIMIENTO DEL PADRE
MUNDACA
Discurso de la hermana Apolonia Molina Cigüeñas
¡BUENAS NOCHES! CON TODOS.
Un saludo cordial al Sr. Walter Castillo Radas, Gerente de Cooperativa San Pió
X, trabajadores, socios, socias y a todos los invitados.
Yo soy la hermana Apolonia Molina Cigüeñas de la Congregación: "Hijas de
Nuestra Sra. de la Piedad", nuestro convento queda en la Urbanización Las
Torrecitas, camino al aeropuerto.
Esta noche tengo el agrado de unirme a todos ustedes para rendir un justo
HOMENAJE a nuestro venerado Mons. CONRADO MUNDACA PERALTA por sus CIEN
AÑOS DE NACIMIENTO.
He venido para contribuir con mi testimonio de la VIDA EJEMPLAR de esta gran
personalidad de Cajamarca más conocido cariñosamente como: Padre
Mundaca.
La primera vez lo vi en el año 2002, primera semana de agosto de nuestra
llegada en esta histórica ciudad de Cajamarca. Fuimos al obispado y estábamos
esperando al Sr. Obispo; allí el Padre entró con un bastón en una mano y con un
maletín en la otra. De pronto me llamó la atención su porte elegante, ordenado y su
aspecto de un hombre espiritual, un hombre de Dios (y nosotras las monjitas pronto
sabemos detectar estas características).
Años más tarde en una de mis visitas recuerdo una frase hermosa que dijo
respecto al ORDEN que es uno de los valores muy importantes para la sociedad;
“-No gasten en arreglos florales; lo que van a gastar en arreglos, hagan una bolsa
y llévela al comedor de los niños”. Por eso, cuando murió dijimos: “-Se acabó
nuestro sacerdote Santo”.
Testimonio de Elvia Tirado Cerdán
Voy a detallar algo de mi vida con respecto a mi director espiritual,
Mons. Padre Conrado Mundaca Peralta. En el año 1969, yo atravesaba una
decadencia espiritual, me sentía como que nuestro señor Jesucristo me dejara sola.
Cruzando la Plaza de Armas de Cajamarca y dirigiéndome a la Iglesia Catedral,
por la puerta principal de la derecha, me iba en busca de un sacerdote para que
me ayudara. Salió una señora y le pregunté si tal vez conocía a un sacerdote que
sea buen confesor, que yo estaba buscando. Ella me dijo: “-Diríjase a la puerta
junto a la sacristía y Mons. Mundaca está allí confesando”. Dirigiéndome hacia él,
hice mi confesión general y él me comprendió mucho. Para entonces mi vida
cambió.
Me invitó a la Legión de María, quedando presentarme a las hermanas
legionarias un día sábado a las 3 p.m. Entré a la Legión de María; hice mi promesa
legionaria. Diez años después, he sido legionaria de María en el departamento de
Cajamarca y he tenido como mi director espiritual al Mons. Conrado Mundaca
Peralta. Él me ayudó bastante y le hacía mis confesiones; de esta manera, él ha
conocido mi vida y mi alma. Es así que tuve grandes deseos de consagrarme a
Dios por el voto de castidad para siempre. Y él hizo la pequeña ceremonia.
En 1970, me designó para trabajar en la cárcel con los presos con la señorita
Dolores Estela Goicochea. Visitaba a los presos todos los domingos. Después,
decidió el padre Mundaca que yo fuera catequista de niños infantiles.
Doy gracias al señor Jesucristo que encontré al sacerdote que me ha
comprendido. Era mi confesor espiritual y dirigía mi alma hacia Dios; por eso es que
doy gracias a Dios que encontré el sacerdote santo que no lo esperaba. Él ha sido
un sacerdote santo y entregado al servicio de Cajamarca.
A partir de 1973, por motivos de trabajo, viajé a la ciudad de Trujillo; pues,
desde allí continuamente venía a hacer mi confesión con mi Director Espiritual Mons.
Conrado Mundaca Peralta, porque no encontraba un director espiritual como él
en la ciudad de Trujillo. Venía personalmente o a veces escribía mis cartas a él y
me respondía alentando mi alma, aconsejándome que siga siempre adelante sin
desmayar y eso me daba mucho valor para vencer dificultades que en nuestra
vida se presentan, porque a veces en el camino, tenemos pruebas grandes. Él ha
sido el sacerdote que más me ha comprendido hasta los últimos fines de su vida.
En algunas oportunidades, se llevaba a cabo paseos campestres y el padre
era el más alegre porque tenía un buen sentido del humor. Con sus chistes nos
77
alegraba a todos. Era muy comprensivo con la gente, porque a veces hay ciertas
desviaciones de algunas personas. Él nunca culpaba ni criticaba; no se hace
caso –decía-, piensen que somos humanos y tenemos fallas. En la calle así haya
estado tan ocupado o estaba con alguien, nos veía pasar, nos saludaba con un
estilo muy peculiar, similar al estilo militar. Él ha dejado muchos recuerdos y es difícil
olvidarse muy pronto.
Cuando él fundó la Cooperativa San Pío X, yo estaba trabajando en la ciudad
de Trujillo. El la estaba dirigiendo muy bien. Sabía comprender a todos los socios
de la cooperativa, pero habían sucedido algunos problemas. Una hermana
legionaria me detalló todos los motivos que habían sucedido por los cuales el
padre se retiró: que lo habían culpado que se cogía el dinero. El padre, muy
honrado lo sintió bastante, sometiendo a una Asamblea General a todos los
socios para explicarles muchas cosas con la verdad, les dijo: “-Dejo la cooperativa
con ustedes y adminístrenla bien”. Cuando vine de Trujillo, ya había renunciado a
la cooperativa. Luego hubo una decadencia, los socios pusieron de
administrador a un abogado, el cual no administró bien los bienes y dio por
quebrada la misma. Miles de socios perdieron su dinero, inclusive mis padres.
Después de un tiempo empezó la cooperativa a recuperarse de esa quiebra y
ahora está trabajando normal. Ojalá ya no sigan estos problemas.
Mons. Padre Mundaca nos trataba a todos por igual, no tenía preferencias ni
distinciones con nadie. Saludaba a los adultos, jóvenes y niños con mucho cariño.
Cuando caminaba por la calle se detenía un momento para saludar a sus amigos
y hacer cariño a los niños. Él quería mucho a los niños porque decía que ellos son la
alegría de Jesús.
Una vez me manifestó sobre su vocación sacerdotal; cuando él estaba en su
pueblito natal de Querocoto, que pertenece a la provincia de Chota. Me contó lo
siguiente: Un sacerdote se fue de visita pastoral a ese pueblito de Querocoto y él
lo miraba al sacerdote y en su corazón decía: “Yo también quiero ser sacerdote
como él”; y es así que cuando el sacerdote regresó, Mons. Mundaca vino junto
con ese sacerdote. Luego ingresó al seminario San José de Cajamarca y al
Seminario San Carlos de la ciudad de Trujillo, realizando allí sus estudios de
Filosofía y Teología hasta el día de su ordenación sacerdotal.
Él tenía mucha paciencia. Recuerdo que una vez, yo estaba con unos
problemas espirituales serios y me fui a verlo y empecé a llorar de rodillas, dejó
llorar varios minutos, sentadito. Me decía: - “ya te pasó, ya te pasó”. Luego en el
momento de despedirme me dijo: - toma tus caramelos, ándate como comer. Por
eso, mucho agradezco al Mons. que me apoyó espiritualmente y me ayudó a
levantar mi espíritu que estaba tan caído en ese tiempo. Así ha apoyado a mucha
gente, como también económicamente, decía: - “Lo que Dios manda para sus hijos,
no lo puedo retener”.
Conocí a la madre del Mons. Conrado Mundaca. Fue una señora muy buena y
cristiana. Residió también en Cajamarca. El padre se parecía mucho a su mamá y le
me decía: "si yo y usted fuéramos más ordenados y fieles a nuestro deber el mundo
sería más ordenado". De hecho no se refería solamente al orden físico y exterior;
sino también y sobre todo al orden ético y moral en nuestras vidas como personas
creyentes.
ALGUNAS CARTAS
Desde el año 2002 hasta 2005 yo no sabía dónde vivía el Padre. Luego por
casualidad escuché un comentario de un sacerdote que decía que Mons. Y TESTIMONIOS DE MONS.
Mundaca confesaba bien, que iba mucha gente y que era un sacerdote Santo. Me
vino un gran deseo de conocerlo; entonces averigüé, lo localicé y me fui a verlo en
la casa de las Hermanitas del Asilo. Había mucha gente que lo iba a visitar,
CONRADO MUNDACA PERALTA
hacíamos cola para saludarlo.
Las veces que me iba a visitarle yo prestaba mucha atención para escucharle, Conrado Mundaca Peralta
lo observaba y concluía en mi interior con esta afirmación: ¡es un santo! por eso SACERDOTE DIOCESANO
según mi modesta opinión yo lo describo así:
Av. Hoyos Rubio Nº 497 – Teléf. 82 2757
Un hombre de una extraordinaria sencillez, Coherente con lo que predicaba. Un Apartado 75
hombre de una sola pieza. Profundamente humano, sensible y a la vez altamente CAJAMARCA
espiritual (las pruebas las tenemos en sus múltiples obras sociales) Entre las
personas que íbamos a visitarle habían también varias familias de bajos recursos
económicos; el daba lo que tenía, si había en su bolsillo 2.00 daba los 2.00 y si Cajamarca, 9 de mayo de 1 999
había 20.00 daba los 20.00, lo daba todo y varias veces la Superiora del Asilo me
decía que ayudaba a la gente con el dinero que recibía como ofrenda para sus
medicinas. A los Miembros del Consejo Directivo
de lo "Casa de la Providencia”
Él tenía un trato igual con todos ricos o pobres. Era un sacerdote auténtico y de
gran relevancia por su profunda humildad. Los cajamarquinos han sido testigos de Doctor José A. Villavicencio Pajares
sus muchas obras que él nunca se atribuía. Más bien decía siempre: EL PUEBLO LO Señora Carmen González de Figueroa
HIZO. Hablaba bien de todos, en los 3 años que estuve muy cerca de él jamás Señor Felipe Miranda Jave
escuché una crítica. De esta Cooperativa San Pío X hablaba con cariño y alegría, Señora Berta Peralta de Rodríguez
decía que aquí trabajaban gente competente con gran profesionalismo y Señorita Nora Lucila Burgos Rojas
responsabilidad. Varias veces he presenciado cuando el padre recibía con una Ciudad
calurosa acogida al Sr. Walter Castillo y a los demás socios.
Mi queridos y buenos amigos:
Todos los que le hacíamos visita nos retirábamos enriquecidos porque siempre
nos dejaba un sabio mensaje que nos acompañaba hasta la próxima visita donde
recibíamos otra dosis espiritual. Las circunstancias me obligan a escribirles la presente, y comienzo con un
saludo atento, fraternal y lleno de agradecimiento; en seguida les comunico que el
Los recuerdos son muchísimos; pero por la brevedad del tiempo quiero concluir jueves 29 del pasado abril, por la noche y en la cama, me cogió un malestar, que,
dando gracias a Dios por haber donado a Cajamarca un hijo sacerdote brillante dada mi avanzada edad, limitará más mis pocas actividades, sobre todo las
por su santidad, sabiduría y profunda humanidad. relacionadas con la "Casa de la Providencia"; en consecuencia, ustedes tomarán
Nosotros desde el año 1600 seguimos solo con San Martín de Porres, Santa la conducción total de la pequeña obra de los cristianos, tan querida por todos
Rosa de Lima que son nuestros santos peruanos; ojalá y yo confío en Dios y creo nosotros y tan necesaria para nuestros pobres; y para cuya conducción fueron
que muy pronto tendremos otro santo peruano y además cajamarquino: elegidos ustedes providencialmente en Asambleas Generales.
Nuestro Padre Dios “que dispone todas las cosas para el bien de los que le
aman", ha suscitado en el Señor Obispo de la Diócesis, Monseñor Ángel Francisco
MONS. CONRADO MUNDACA PERALTA Simón Piorno, un marcado interés por la permanencia y mejoramiento de la OBRA;
Pido fuertes aplausos para él. GRACIAS. con su consejo y asesoramiento deberán solucionar, cuando se presenten, todos

78
los problemas, teniendo siempre presente que se trata de una Obra de nuestra acompañaba: "ayúdeme un poquito a subir, para bajar yo me las arreglo", esta
Santa Madre la Iglesia Católica. frase manifiesta que no solamente estaba resignado y tranquilo, sino que estaba
Por otro Lado, la Madre Superiora General de la Congregación de las bromeando; Dios le había otorgado la ayuda necesaria para el momento.
"Hermanas de la Inmaculada Concepción bajo el Patrocinio de San José" ha Con respecto a la segunda: es verdad que hace falta salud para trabajar,
confirmado la aceptación de su Congregación para que tome la administración pero también es cierto que el pequeño trabajo que puede realizar un enfermo,
de las distintas actividades de la Obra, y que una Comunidad de cuatro tiene muchísimo más valor como medio de propia santificación y como poderoso
Religiosas llegará en los primeros días del próximo mes de julio. medio de apostolado, así se dice que el Beato José María Escriba refería que la
Reiterando mi más profundo y sincero agradecimiento a todos y a cada uno de Congregación de Opus Dei era obra de los enfermos de los Hospitales.
ustedes por su larga amistad, por su apoyo incondicional y por su constante Para cumplir con un ofrecimiento que hice a tu hermana Kika fui a visitar a tus
comprensión, tengo la satisfacción de suscribirme fraternalmente en Cristo nuestro padres: estuve bastante rato con tu hermana Anita y unos breves momentos con tu
Salvador. mamá primero y con tu papá después; con frecuencia vea tus hermanas Anita y
Juanita.
Conrado Mundaca Peralta Anteayer salió la Madre Superiora de esta Comunidad en dirección de Chota,
al lugar donde ha sucedido la catástrofe, porque han sufrido la muerte familiares
de la Hermanita Florentina, esta Hermanita acompañó a la Madre Superiora; estas
desgracias son pruebas y avisos de Dios.
Conrado Mundaca Peralta
Con un respetuoso saludo para tu Madre Superiora y las demás Hermanitas me
SACERDOTE DIOCESANO despido hasta una próxima ocasión.
Av. Hoyos Rublo Nº 497 – Teléf. 82 2757
Apartado 75 CAJAMARCA
Cajamarca, 16 de noviembre de 1999.
Sor Teodosia Roncal Vargas
Chiclayo

Mi recordada Hermanita:
Tuve, muchísimo gusto al recibir tu carta de fecha 19 del pasado mes de
octubre, en la cual me das un informe detallado de tus enfermedades y que ellas te
impidieron escribirme en el mes anterior con motivo del cumpleaños; también tus
enfermedades han ocasionado tus prontos cambios de lugares para el
cumplimiento de tu sagrada vocación, así mientras creía yo que estabas en
Huancavelica, de pronto me informaron que te encontrabas en Chiclayo; quiero
decir que los males no vienen solos, todos están acompañados de diversas
circunstancias, con frecuencia también dolorosas.
Solo una breve aclaración a dos palabras de tu carta acerca de la
enfermedad: "El Señor no permita cosa peor" y "salud para trabajar"; con respecto
la primera) te cuento lo que se refiere de Santo Tomás Moro, el Gran Canciller de
reino de Inglaterra en tiempo de Enrique VIII: estando él en la cárcel por defender
su fe católica, dijo: "Espero que los designios del rey no prosperen más y si fueran
más adelante, confío en que el Señor me dará las fuerzas necesarias para soportar
todo mal”, y en efecto, la maldad del rey siguió adelante, mandando que lo Monseñor Conrado siempre mantuvo un acercamiento efectivo con la población
llevaran al cadalso, y mientras subía al lugar del suplicio, dijo al verdugo que lo cajamarquina, especialmente con los jóvenes a través de diversas actividades.

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Conrado Mundaca Peralta
SACERDOTE DIOCESANO
Av. Hoyos Rubio Nº 497 – Teléf. 82 2757
Apartado 75
CAJAMARCA
Cajamarca, 24 de setiembre del 2000.
Sor
Teodosia Roncal Vargas
Chiclayo
Mi recordada y estimada Hermanita:
He tenido la satisfacción de recibir tu linda cartita, la misma que ha sido traída
por la Madre Superiora de este Hogar "Obispo Groso" y que la has fechado el
mismo 21, porque la has redactado para manifestar tu saludo con motivo de mi
cumpleaños, ofreciéndome además la contribución de tus especiales oraciones;
por eso la presente desea ser también la manifestación de mi sincero
agradecimiento, así como el ofrecimiento de rogar a Dios, como lo he hecho hoy, por
ejemplo, ofreciendo la Santa Misa por todos cuantos me tuvieron presente en su
recuerdo y en sus oraciones en esa fecha; que mi oración sea escuchada y recibas
las gracias que más necesitas.
Con ocasión del cumpleaños, la INER de esta ciudad se dignó invitarme para
estar juntos en un agasajo en el "Café Jazmín" ubicado en la casa que fuera de las
que llamábamos "Señoritas Misa" en la calle Amazonas, y fuera tu hermana Anita la
que tuvo las palabras de saludo y de ofrecimiento; la reunión transcurrió en un
ambiente de fraternal alegría recordando hechos y dichos y cantando nuestros
cantos más conocidos de alabanzas a Nuestro Señor.
Se me comunicó que mi primo hermano, el Padre Antero Mundaca, estaba
alojado en ese Asilo con el cuidado especial de sus hermanas, entre ellas la
Hermana Anita Zoila, llegada desde Bolivia; tuve la ocasión de hablar con los dos,
el mismo día 21, y supe que están a la espera de la decisión de los médicos; estaría
demás decirte que te intereses por el enfermo como si lo hicieras con mi propia
persona y yo te lo agradeceré como es debido.
Reiterando mi agradecimiento, tengo el agrado de suscribirme como tu Padre en
los Corazones de Jesús y de María.
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Conrado Mundaca Peralta
SACERDOTE DIOCESANO
Av. Hoyos Rubio Nº 497 – Teléf. 82 2757
Apartado 75
CAJAMARCA
Cajamarca, 25 de setiembre del 2001.
Sor
Teodosia Roncal Vargas
Chiclayo
Mi siempre recordada Hermanita:
Tuve la alegría de recibir tu saludo de cumpleaños con tu inconfundible letra y
en una linda estampa de la Santísima Virgen María; que Dios te pague
concediéndote las gracias que más necesitas para perseverar en el trabajo y el
espíritu de la vocación a la que has sido llamada y que te da la seguridad de la
vida eterna al lado de las almas que han consagrado su existencia al seguimiento
de Cristo en el cuidado de los más necesitados.
Con tu hermana Anita me vi el martes pasado 18, que vino a este Hogar en
compañía de sus Hermanas de la UNER, trayéndome el saludo anticipado; como
en otras ocasiones, hicieron su saludo con unos cantos muy apropiados y volveré
a verla el próximo domingo, porque para esa fecha sus compañeras de la
Promoción "Mater Dolorosa" han programado la celebración de sus "Bodas de
Zafiro" y como primer número está la Santa Misa, a las 10 de la mañana en este
Hogar.
Con tus hermanos Kyka y Pelayo nos encontramos en la inauguración del
Movimiento "Vida ascendente" del cual es asesora nacional Kyka y ella ha traído el
Movimiento a esta Diócesis, la inauguración fue el 13 de junio de este año.
Aquí estoy en compañía del Padre Antero, que vino de Chiclayo el primero de
julio, sigue delicado de salud, se aloja en el pabellón de los Sacerdotes y está
atendido por su hermana Flor.
Reiterando mi sincero agradecimiento y con mis respetuosos saludos para tu
Madre Superiora y para tus Hermanitas de vocación y de apostolado, tengo el
agrado de suscribirme como siempre muy afectuosamente.
Conrado Mundaca Peralta
SACERDOTE DIOCESANO
Av. Hoyos Rubio Nº 497 – Teléf. 82 2757
Apartado 75
CAJAMARCA
Cajamarca, 28 de diciembre del 2001.
Sor
Teodosia Roncal Vargas
Chiclayo
Mi recordada Hermanita:
He tenido mucha satisfacción de recibir tu saludo con ocasión de las fiestas de
Navidad, mediante una esquela y una estampa del Niño Jesús de Belén con una
hermosísima Oración; mucho te agradezco por este recuerdo, que Nuestro Señor
te recompense, concediéndote las gracias que más necesitas para tu
adelantamiento en el fiel cumplimiento de los deberes propios de tu santa
vocación.
Desde el 15 del presente estoy recaído en este Hogar, sin salida a la calle, por
motivo de una complicación bronquial, y por esto no he tenido oportunidad de
ver a tus hermanos, supongo que todos tus familiares se hallen ya reponiéndose
espiritualmente por la irreparable pérdida sufrida con la separación del jefe del
hogar, aceptando la voluntad de Dios, que como buen Padre lo hace todo bien y
a su tiempo.
Reiterando mi agradecimiento por tu cariñoso saludo y con mis respetuosos
saludos para tu Madre Superiora y para las Hermanitas, tus compañeras de
vocación y de apostolado, me despido hasta una próxima ocasión, si Dios así lo
quiere.
ACERCA DEL SANTUARIO DE LA VIRGEN DE FÁTIMA
Conrado Mundaca Peralta
Narración de un testigo ocular, que afirma decir la verdad, para que se
conserven datos antes que se pierdan o sean alterados acerca de este hecho.
El SANTUARIO es una obra única en su género, por la forma como fue
construido.
El pueblo católico lo hizo inspirado y dirigido por la divina Providencia, y
porque el pueblo lo hizo, no se han guardado documentos escritos, puesto que
no se tenía que rendir cuentas más que a Dios.
Y como el pueblo lo hizo, sus hijos han trabajado sin pedir remuneraciones, ni
sueldos, ni se han firmado planillas: y, cuando se necesitaba dinero para comprar
útiles o pagar trabajos especiales, se contaba con la pequeña Alcancía, que
estaba colocada en la Catedral, cerca del altar de la Virgen de Fátima.
El SANTUARIO se ha construido en la altura para que pudiera ser visto con
mayor facilidad por todos, y para que los fieles se sintieran visiblemente protegidos
y amparados con la protección de la Madre de Dios, a quien invocaban día y
noche con gran confianza filial.
Para demostrar cuánto se viene diciendo acerca de esta Obra, es necesario
conocer algunos pormenores de mayor importancia.
La adquisición del terreno para la construcción se hizo por medio de una
Solicitud de la Acción Católica -Rama de la Juventud femenina- a la
Municipalidad, que estaba dirigida por el Señor Fortunato Cacho Cépeda, quien
contestó trasmitiendo el acuerdo de Concejo, donando un lote de terreno en la
falda del cerro de Santa Apolonia: esto sucedió en los primeros meses de 1952.
La fijación de tos linderos del lote donado, se hizo con estacas de madera,
desde este momento aparecen los Colegiales de "San Ramón" y de "Santa
Teresita", que fueron como el espíritu de la construcción, ocupándose en varios
trabajos, propios de su estado y edad, contagiando su espíritu y entusiasmo
juvenil a todos y en todo momento.
Uno de los trabajos que caracterizaron la construcción del SANTUARIO, fue, sin
duda, el traslado de ladrillos, unos quince mil, desde la Catedral, en donde estaba
el depósito, hasta el lugar de la construcción, todos los sábados y domingos por la
tarde: esta labor fue lo que más llamó la atención y que la recuerdan con alegría o
con nostalgia las personas que participaron, fue un acontecimiento
extraordinario: ver largas hileras de personas mayores, jóvenes y también niños,
subiendo al cerro, portando cada uno los ladrillos que sus fuerzas les permitían:
todos alegres y contentos.
El tote del terreno estaba en la falda del cerro, y era necesario preparar una
explanada para levantar la construcción, además el cerro es de cantería, material

81
duro, que necesitaba fuerzas y hasta dinamita, y la dinamita requiere técnica en su
manejo: para este trabajo se encontró a don Alejandro Rodríguez Pajares, viejo
conocedor de explosivos, que los ha empleado abriendo trochas para las
carreteras, él fue contratado para dirigir este delicado trabajo, y lo cumplió muy
bien, evitando accidentes o daños en las casas vecinas, aquí trabajaron varios
peones, arrojando el abundante desmonte colaboraron también los colegiales de
“San Ramón”.
Para la construcción se necesitaba, en primer lugar, planos; para nuestra
construcción, Dios pone en el camino al Ingeniero Luis Arrunátegui, que estaba
radicando en Cajamarca por motivo de su trabajo; a él se le habla del proyecto
de edificar una Capilla en el vecino cerro y manifiesta interés por la obra y ofrece
de inmediato y generosamente sus servicios profesionales: a este Ingeniero se
deben los planos: él dirigió personalmente el trazado de las zapatas para las
primeras columnas, y deja a Marcos Huaccha López la ejecución de los planos.
Marcos Huaccha López es el hombre providencialmente elegido por Dios para
la construcción del SANTUARIO. Y ¿quién es Marcos Huaccha López? Es un sencillo
y humilde albañil, sin mayores conocimientos que los aprendidos en la Escuela de
su comunidad, pero de alma grande. Entra en contacto con la construcción del
SANTUARIO como guardián, y su primera actividad fue hacer una caseta de
madera para su habitación y ofrece sus servicios para la construcción, empleando
sus conocimientos; se le ve un hombre serio: se le ofrece un modesto jornal por sus
trabajos, sin agregar una paga más por la guardianía: él acepta y se
compromete. De este modo, de esta sencilla y breve conversación, nace el
Convenio, sólo de palabra, sin firmar ningún documento, porque se trataba de la
Obra de Dios y entre personas honradas.
Comenzó su trabajo, abriendo las zanjas para las zapatas de las primeras
columnas: él trabaja algunos días solo y otros con los peones necesarios, de este
modo se convierte, en la construcción del SANTUARIO, en el Constructor, en el
Maestro de Obras, en el Técnico que interpreta los planos, en el Capataz y en el
peón que realiza su tarea diaria con honradez y con ejemplar puntualidad: él
levantó las columnas de cemento armado, él hizo las paredes de ladrillo, él hizo el
techo con malla de fierro, él levantó la torre, hasta coronarla con la Cruz, hizo
todos los enlucidos, y él finalmente pintó las paredes y entregó la obra, que fue
bendecida por el Señor Obispo de la Diócesis, Monseñor Pablo Ramírez Taboada,
y fue inaugurada el 13 de octubre de 1954, como reza la placa conmemorativa,
puesta a la vista.
Se entregó el SANTUARIO para el Culto divino sin que hubiera ningún reclamo,
ninguna queja, ni menos que se registrara alguna denuncia.
Marcos Huaccha siguió trabajando y construyó la gran Cruz de junto al
SANTUARIO, y que reemplazó a la que había en la cumbre del cerro, empleando los
mismos materiales y el mismo procedimiento, que se emplearon en el SANTUARIO.
La caseta de madera construida para el guardián, fue sustituida por una
82
pequeña casa, hecha en las inmediaciones del SANTUARIO para habitación de
Marcos y su familia. La prole fue aumentando con el correr del tiempo y cuando los
hijos crecieron se hizo otra casita, junto a la primera, allí vivían todos y fueron
independizándose poco a poco: allí murió Marcos Huaccha, sus restos mortales
fueron velados en el SANTUARIO, en donde se celebraron también las exequias, y
de allí fueron conducidos al Cementerio General. Sus herederos han continuado
viviendo allí y cuidando el SANTUARIO, a cambio de usar las casitas, como lo han
seguido haciendo hasta ahora.
El dinero empleado en toda la construcción, unos ciento cincuenta mil soles,
ha provenido de distintas fuentes, siendo la primera la pequeña alcancía
colocada en la Catedral. Esta alcancía se abría todos los sábados, allí se
encontraba el dinero necesario para los gastos de la semana, sólo un sábado se
encontró una cantidad especial, tres mil soles, seguramente que en esa semana los
gastos también habrán sido mayores. Otra forma de recibir dinero, fueron los
donativos, pequeños o grandes, entregados directamente, por los cuales no se
solicitó ni se otorgó ni un solo recibo.
Las pocas rifas que se han realizado, ya sea de animales o de pequeños
objetos, donados con esta finalidad, también han proporcionado dinero.
Conviene recordar aquí a don Abraham Noriega y a don Manuel Paredes, que
donaron una ternera y un torete, respectivamente y cuya rifa rindió buena
cantidad de dinero.
Finalmente, se hizo una colecta voluntaria y pública en una circunstancia muy
especial: cuando la Cruz de la cumbre del cerro fue derribada, los buenos
cristianos hicieron una Romería el Viernes Santo, como desagravio por ese
atentado sacrílego, allí manifestaron sus sentimientos cristianos con oraciones,
cantos y protestas por el mal y al mismo tiempo decían "¡Haremos otra Cruz!" y con
este fin comenzó la colecta: ese dinero fue la base para la nueva Cruz.
Para el Culto divino, no bastan los edificios, se necesita muebles y objetos. Para
proveer de todo lo necesario para poner el SANTUARIO al servicio de los fieles
para la gloria de Dios: la historia reclama el nombre de las personas e instituciones
que se han encargado de completar la Obra.
El pavimento de loseta se debe a las alumnas internas de “Santa Teresita", ellas
compraron el material y luego ellas mismas subieron en sus propios brazos todas
las losetas al SANTUARIO.
El Coro, que originalmente era de madera, fue remodelado por la generosidad
del señor Lizardo Collantes, quedando en la forma que ahora lo vemos.
Para confeccionar la mesa del altar para la celebración de la Santa Misa, los
muebles que lo acompañan y demás accesorios, fueron contratados los hermanos
Jara, conocidos trabajadores en madera, ellos cumplieron el encargo, tomando
como modelo el de la Capilla del Colegio Santa Teresita, y fueron felicitados por
su trabajo.
 El cáliz y el Misal fueron obsequiados por la tía y sobrina Cacho, objetos
sagrados que habían servido en la Capilla de su fundo.
El arbolito, en donde está la Imagen de la Santísima Virgen, tratando de imitar
la forma como fueron las apariciones a los tres pastorcitos en Fátima, fue regalado
por el señor Álvarez, que lo cortó en su vecina chacra y lo transportó, en compañía
de otras personas, al SANTUARIO.
Las hojas del arbolito, que parecen naturales, aunque son de badana, fueron
confeccionadas generosamente por la señorita Amelia Calderón y su hermana.
La hermosa imagen de la Santísima Virgen, que se posa en el arbolito, fue
adquirida en Lima, lo mismo que la que se venera en la Catedral, en los talleres
"PIERINELLI".
Las arañas para la luz fueron obsequiadas por un cajamarquino residente en
Lima.
Los datos importantes que han sido omitidos, por falta de memoria, en esta
narración, podrán ser completados por otros testigos.
Cajamarca, 08 de Diciembre del 2005
Conrado Mundaca Peralta
Sacerdote Diocesano
TESTIMONIO SOBRE LA HISTORIA DE LA VOCACIÓN
SACERDOTAL DEL PADRE CONRADO MUNDACA PERALTA
Entrevista hecha en el Asilo de Ancianos Obispo Grosso en el año 2005 por
Sor Apolonia Molina Cigüeñas, religiosa de la Hijas de Nuestra Señora de la
piedad.
-Quisiéramos empezar preguntándole sobre cómo surgió su vocación,
tengo entendido que usted vivía en el campo, ¿hubo algún familiar que era
religioso y cuáles fueron sus primeros contactos con la Iglesia?
-Siempre doy gracias a Dios por tener una tía, hermana de mi mamá, llamada
Panchita. Ella no fue a la escuela, pero fue una mujer extraordinaria. Aprendió a
leer porque decían que mi abuelita Isabel siempre les decía a los visitantes que
llegaban a la casa: “A ver sí le enseñas alguna letrita a mi Francisca”. Ella,
entonces, fue aprendiendo así. No sé cómo entró en contacto con la Santa
Religión siendo del campo, familia de campesinos y netamente pobres. Hizo de la
casa, una casa de cristianos. Así por ejemplo, siempre digo en ningún momento he
vivido fuera del Cristianismo en esa casita; mi mamá me explicaba que la familia
no se levantaba de su cama sin alabar a Dios, porque así pues nos enseñaron
desde chiquitos. Gracias a esa tía, que fue una santa mujer, hizo para mí cosas
extraordinarias. La conocí cuando tuvo uso de razón con hábito de la virgen del
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Carmen y así la vi morir. Por eso, todos en la casa y en la comunidad tenían un
escapulario. Todos los sábados rezábamos quince minutos a la virgen de
Carmen; además los miércoles y los sábados no comíamos carne. Entonces tuvimos
allá una vida cristiana en todo sentido.
Tenía familiares en Querocotillo y nos íbamos para las fiestas y es allí donde
tomé contacto con el sacerdote Don Carlos Alba Pérez, buen sacerdote, y me
gustaba mucho sus celebraciones porque cantaba bonito; aprendí por ejemplo,
El Padre Nuestro sin que me lo enseñe y nos vestía a tres niños de monaguillos. Yo
tenía más o menos 08 años y a esa edad entre a la escuela en Querocoto.
Llegó un sacerdote de Querocotillo, jovencito, que era huérfano como yo; lo
había llevado (para estudiar) un sacerdote de Querocotillo, Hankamer y después
de unos años, llegó como sacerdote. Conocía otro sacerdote que tenía que viajar
a Chachapoyas; se llamaba Manuel Enrique Escobedo y estando para regresar a
Chachapoyas, donde se había formado, llegó una noticia a nuestra casita del
campo y comentaba mi mamá: - Dicen que el padre Escobedo está invitando a
algunos muchachos para ir al seminario y me parece que en ese momento dije: -
“Yo me voy con él, yo no me quedo”, nada más. Fue el primer chispazo de vocación.
Nunca pensé ser sacerdote, imposible, siendo un muchacho completamente pobre
y ni sabía que hay centro de formación para sacerdotes; pero como lo vi a él un
sacerdote joven y usaba su toquita, como yo, y decir que me podía llevar al
seminario, me parece que dije esa frase: “Yo me voy con él, yo no me quedo”, sin
comentar a mamá nada; entonces, comenzó a llorar y preocupada de cómo me
iba a ir a Chachapoyas, siendo completamente pobre y huérfano de padre al año
y medio de vida. Mi mamá y mi tía Francisca se agenciaron de algo de dinero y
prepararon todo lo que se podía preparar para el viaje.
Había una cosa admirable, también, en Querocotillo teníamos un pariente muy
durito para dar. Él era empleado de una tienda comercial y sastre; se llamaba
Eleuterio Vásquez Garro; tenía un caballo bueno, me gustaba prestarlo, pero con
la forma de vivir de este mi primo, me parece que un milagro sucedió para que se
desprendiera totalmente del caballo. Me dijo: - aquí está el caballo aperadito
para montar. Un 03 de marzo de 1927 salimos de Querocotillo y llegamos a
Chachapoyas el 23 de marzo.
Salimos de Querocotillo luego a Pacopampa, Huambos, Cutervo, Chota,
Bambamarca, Celendín, Jerez, Huasmín, subimos la cordillera del Calla Calla,
Leymebamba, Magdalena y finalmente Chachapoyas. Conforme íbamos
pasando por cada pueblo nos quedábamos a dormir y comer. Nos íbamos 04
muchachos, uno de 13 años, dos de 14 y uno de 15. Yo tenía 14 años. Éramos
edades con otro muchacho llamado Juan de la Rosa Zúñiga Méndiz y en el
seminario le cambiaron de nombre por Juan de la Cruz Zúñiga Méndiz. Lo
admirable de este sacerdote es que nos llevó como nuestro papá. Nosotros no nos
preocupamos por nada, él veía todo el viaje; buscaba alojamiento y
alimentación.
 En el camino nos sucedieron unas cosas maravillosas. Cuando se cansó un
caballo en un descampado, aquí he visto siempre una providencia de Dios pero
admirable, esto fue yéndonos por la jalca de Bambamarca a Celendín. El Padre
Escobedo se acercó a una casita y arregló el asunto. El dueño de la misma prestó
un caballo y nos acompaño hasta Celendín para regresar su caballo y, por ese
valor, se quedó el caballito cansado. Si no nos sucede ese percance, de hecho,
nos perdíamos en el camino. Fue este señor que nos guió.
En Celendín encontré al padre Carlos Alba Pérez, a quien conocí en
Querocotillo, allí por primera vez los sacerdotes bendecían la misa en latín. Aquí
nos quedamos como dos días y el padre Escobedo tuvo que comprar otro
caballo porque el dueño del caballo prestado ya se regresaba. Seguimos
avanzando y pasamos el Marañón por un puente colgante. En la subida de la
cumbre se cansó otro caballo y eso fue fatal, porque no había casas, pero con la
providencia de Dios, encontramos después de caminar varios kilómetros, una casa
de horcones y sin paredes donde dormían los animales y nos quedamos allí sobre
ellos. Al día siguiente tuvimos que pasar la cordillera Calla Calla. Se llama así
porque, según la anécdota, una señora llevaba cardo a su hijo y comenzó a llorar
y ella le decía calla calla y se calló porque había muerto. Esa dice la tradición que
es el origen de la cordillera Calla Calla.
Recuerdo que pasando Leymebamba, no había casas donde quedarnos,
tampoco había agua y tuvimos que ir al río Ushcubamba. Ya de regreso y en la
salida en una cuesta pendiente, nos dijo el padre Escobedo: - Así es la subida del
sacerdocio. Nos quedamos en una chocita. Por la mañana, salimos a buscar los
caballos y aquí otro milagro de Dios. Nos fuimos temprano a ver los caballos y no
habían, entonces estuvimos buscándolos varias horas y al fin los encontramos. Lo
que había pasado es que los caballos habían salido al camino con dirección
hacia Chachapoyas, pero encontraron una tranca cerrada, ¡Providencia de Dios!
Al no poder pasar, regresaron. Nos dimos cuenta por las sogas. Al día siguiente
llegamos al Seminario de Chachapoyas y al otro día empezamos con las clases y
algunas de ellas las teníamos fuera del Seminario.
El caballo de mi primo como era bueno, el padre lo conservó y lo encargó a un
señor que lo cuidara y los otros los vendió. Un día llega el señor diciendo que el
caballo se había ahorcado y entonces tuve un poco de pena.
El padre nos llevó a Chachapoyas y no nos trajo a Cajamarca porque estaba
incompleto; lo llamaban medio internado, porque los alumnos estaban solamente
en el día y por las noches se iban a sus casas.
En 1928 hizo un traslado a Cajamarca un muchacho y nos quedamos tres y en
1929 hicieron su traslado otros dos y me quedé yo solo. No tenía ninguna
facilidad, mi mamá estaba lejos, pero el padre Escobedo estaba velando por
nosotros y ya estaba de párroco en Celendín.
Un día llegó a Chachapoyas un comerciante celendino y dijo que le había
encargado el párroco de Celendín que traslade al seminarista Mundaca a
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Cajamarca. El señor obispo se lamentó diciendo: - Vienen por un tiempo y después
me dejan solo. Al día siguiente me despedí y salimos de Chachapoyas con destino
a Sucre. Él señor era arriero, tenía varias mulas y se comprometía en llevar y
regresar mercadería. La arriería era como si fuera una agencia de carros en estos
tiempos; tenía sus peones, llamados parcanas. Salimos sus tres arrieros, Don José
Chávez y yo. Don José Chávez me dijo: - Usted se parece a mi hijo Almanzor,
éramos de la misma edad, estaba estudiando para policía. Don José me tomó
cariño y me hacía dormir en su seno, porque al llegar la parcana, ponían los bultos
unos sobre de otros formando una pared y luego tiraban una capa al suelo
amarrándola en estacas; por eso Don José me hacía dormir en la misma cama con
pellejitos. En el trayecto, nos demoramos ocho días. Todo el día caminábamos,
tomábamos desayuno y sin almorzar hasta la tarde. Ellos solamente se alimentaban
de chochoca y harina. Al salir levaban 04 costalillos: 02 de chochoca y 02 de
harina. Comíamos en el desayuno sopa de chochoca con harina y por la tarde,
igual. Era rico, pero una misma cosa todos los días, me cansó.
Llegamos a Sucre a la casa del señor Chávez y al día siguiente me envió con su
hijo Almanzor a Celendín para visitar al padre Escobedo; esto fue en marzo de
1930. El 11 de abril del año siguiente murió el padre, muy jovencito. Lo recuerdo
mucho, un santo sacerdote y buenísimo. Luego me encargó a su sobrino del señor
Chávez, que hacía servicio de arriería a Cajamarca, para que me trajera a esta
ciudad. Nos quedamos en Polloc y dormimos en la pampa con la soga del caballo
atada a la canilla para sentir a los ladrones que llegaban en la noche. Salimos muy
temprano y por los Baños comencé a ver a los campesinos vestidos con su traje
típico, ¡qué raro!, dije y pensé seguramente, Cajamarca está de fiesta y por eso,
han venido los cañarejos, porque en Querocotillo a las fiestas vienen los cañarejos
de los cañaris del Ecuador que hablan su lengua y usan sus vestidos típicos.
Llegamos a las 8 a.m. a Cajamarca. El señor me llevó a una casita conocida por
él, seguramente, para bajar la alforja y de allí al Seminario en la mañana del 02 de
mayo de 1930. Aquí guardo esta palabra, cuando entré al Seminario San José de
Cajamarca, lo hice agarrándome de las paredes para no caerme de vergüenza,
porque vi una casa más o menos elegante, porque como campesino no conocía
casas buenas. Los seminaristas ya bien vestidos, porque en Chachapoyas no les
extrañe, no usábamos zapatos diariamente sino solamente para la misa. Toda la
semana descalzos por todas partes y solamente el domingo nos poníamos
zapatos. Yo uso zapatos permanentemente desde mi venida de Chachapoyas a
Cajamarca. Entonces aquí ya encuentro gente elegante; al padre Espejo, que era
de Cutervo, ya lo encuentro con su abrigo.
En el Seminario me recibió Federico Pérez Silva, jovencito y Lazarista; como me
vio muchacho pobre, me tuvo cariño. Después él me llevó hasta el sacerdocio, mis
primeros años de sacerdote y dirige mi vida. Él era profesor nomás en esos
entonces, pero luego fue Rector del Seminario. En Cajamarca solo estuve un año y
en marzo de 1931 fui a Trujillo y estuve allí seis años. Siempre recuerdo a Monseñor
Pérez Silva, lo estimo y no habrá palabras para mostrar mi agradecimiento a ese
 Así luce actualmente la modesta casa donde nació nuestro Monseñor Conrado, hoy
conservada y al cuidado de sus familiares, está ubicada en el lugar denominado Succhurán,
sector de Pacopampa, centro poblado del distrito de Querocoto Provincia de Chota.

En Cajamarca existe aún la casa familiar, donde frecuentaba

cotidianamente para compartir de cerca con su familia y
personas que lo visitaban, ya que su vida diaria lo pasó
mayormente en una pequeña habitación en los corredores del Incontables son las personas que hasta hoy diariamente le rinden
segundo piso de la Iglesia Catedral homenaje y expresan su cariño a nuestro Monseñor Conrado Mundaca.

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Santo Sacerdote, murió de cáncer y como Obispo de Trujillo. También decirles lo
bueno que hizo este padre conmigo: cuando fui de vacaciones al terminar el año
1930, por primera vez nos fuimos a nuestra casita en vacaciones después de
cuatro años. Al regresar mi mamá me había buscado 80 soles para ayudarme y le
encargué al padre Pérez Silva diciéndole: - Mi mamá me ha dado 80 soles
guárdelos, me va dando como los voy necesitando.
El año 1931, vino la tentación por el compañerismo; estábamos en cuarto año
de Secundaria y unos compañeros comenzaron a criticar al Rector, Padre Rubén
Olivares, un Santo Sacerdote. Lo criticaban que no nos quiere y que nos trata mal.
Yo instigado por el demonio, seguramente me sumé a esa corriente. Entonces,
clandestinamente envié una carta a mi mamá diciendo que no vendan los toritos
porque con ellos voy a hacer mi yunta; porque cuando vine de la casa vi que
había dos becerritos, y ya voy a dejar el Seminario. Mi mamá contestó y gracias a
Dios llegó a manos del Rector, pero antes le pido al padre Pérez Silva los 80 soles.
¿Para qué? me dijo y le confesé diciéndole “ya me voy”. Me conversó un ratito y
luego estuve totalmente cambiado porque me hizo reflexionar; después, el rector
me llama y me dio una tremenda reprimenda y tranquilo la recibí porque ya estaba
preparado; entones, ese fue el primer favor del Padre Pérez Silva.
También sepan que mis estudios fueron muy irregulares. Salí de Pacopampa con
cuarto año de primaria, en Chachapoyas estudié hasta tercer año de Secundaria
y en Cajamarca estudié el cuarto año. Estando de Rector el padre Pérez Silva, me
dijo que debía ir a cursar mis estudios superiores a Trujillo, así es que sin haber
terminado la Secundaria me mandó a Trujillo. Estando allá nos escribía
contantemente, cada mes. Al terminar mis estudios en 1937, por el mes de setiembre,
murió el Obispo Guillén de Cajamarca; entonces, eligen al padre Pérez Silva de
Administrador Apostólico y él tenía clases a tiempo completo en el Seminario.
Rector del Seminario y Administrador Apostólico, ya no tenía tiempo de dictar
clases. Como yo estaba terminando de estudiar Teología en Trujillo, me escribió en
octubre diciéndome, “tienes que venir para ayudarme en algunas clasecitas aquí
en el Seminario porque yo no puedo solo”.
El 07 de octubre de 1937 llegué de frente al Seminario, terminé el año 37 como
profesor del seminario y me encargaron para formar la Comunidad Lazarista Pérez
Silva había tomado esta determinación: que los seminaristas al terminar sus
estudios para sacerdotes, quedarían un año a su lado para ir formándose más
como sacerdotes y después sacarlos a las parroquias. El 13 de febrero de 1938
me ordené como sacerdote en Lima y el 27 de febrero del mismo año, el Padre
Pérez Silva me prepara la primera misa en la Catedral. La primera misa privada la
celebré en el Asilo el 28 de febrero de 1938 y luego me dijo el padre: - El día de
mañana te haces cargo de la capilla del Asilo. Aquí viene otra providencia de Dios
manifiesta: yo estaba el 38 y el 39 tenía que venir el padre Juan Zúñiga en mi
reemplazo, pero un día me dice el Padre Pérez Silva: - Juan Zúñiga ha dispuesto las
cosas para su ordenación sin comunicarme, ha nombrado sus padrinos, ha fijado
fecha para su primera misa sin comunicarme; entonces, como el está haciendo lo
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que le parece sin consultar al superior, que siga su vida libremente y tú te quedas
mientras tanto; entonces el padre Zúñiga no me reemplazó el 39 por esa
circunstancia y me quedé ese año. El 40 me quedé; como soy un sacerdote poco
conflictivo, generalmente no fastidio a nadie, nadie me hacía caso ni para
ascenderme ni para bajarme, yo vivía tranquilo, calladito.
Desde 1938 hasta 1947 me quedé en el Seminario y 09 años de capellán en el
Asilo; es por eso que conozco tanta gente. Entonces viví 10 años en el Seminario
con vida reglamentada y en comunidad.
En 1947 nombran a Monseñor Ramírez Taboada de Obispo de Cajamarca
porque el anterior había renunciado. Él me envía una carta nombrándome Vicario
General; ambos no nos conocíamos. En los canónicos habían nombrado a un jefe
que en Lima no lo aceptaban mucho; por lo tanto, le obligaron al Monseñor
Ramírez Taboada para que inmediatamente tome posición de la Diócesis de
Cajamarca, aunque sin consagrarse mediante su Vicario. Yo tomé posesión de la
Diócesis de Cajamarca como pdelegado del Monseñor Ramírez Taboada. Lo
consagraron a él el 09 de noviembre de 1947 y el 02 de diciembre hizo su
llegada a Cajamarca. Este obispo hizo conmigo lo siguiente: me nombró Vicario
sin conocerme, avisó cuando llegaba a Cajamarca y como Vicario me fui a
recibirlo, estaba alojado en el Seminario.
Me trasladé a vivir del Seminario al Obispado, formé una pequeña comunidad
de sacerdotes y vivimos en comunidad. Nos levantábamos todos a las 5:00 a.m.
para hacer oración juntos; después cada uno salía a su trabajo.
En 1960, Monseñor Ramírez Taboada salió de Cajamarca y se trasladó a
Huacho. Lo acompañé hasta el aeropuerto. El avión demoró en llegar y los
acompañantes estaban mudos allí porque si hablábamos, llorábamos de emoción
y de pena. El obispo fue muy querido y estuve trabajando 12 años con él.
Me dicen: - Usted es un poco ordenado en sus cosas y les digo: - Cómo no voy
a ser ordenado, pues: 14 años en mi casita y en la chacra, qué desorden puede
haber allí de un muchacho, en esos tiempos, no había ni TV ni radio, entonces de
noche a dormir, de día a trabajar o estudiar 11 años en el Seminario: 03 en
Chachapoyas, 02 en Cajamarca, y 06 en Trujillo y con vida reglamentada; 10
años de profesor en el seminario formando comunidad con los Lazaristas; 12 años
con Monseñor Ramírez Taboada formando comunidad. Entonces, 47 años, ni tan
torpe ni tan tonto que no pueda aprovechar esa vida reglamentada y que no
pueda ser un poco ordenado ahora.
Monseñor Pérez Silva me nombró profesor del Seminario, Capellán del Asilo,
profesor de San Ramón, de Santa Teresita y comencé a salir a la calle y me decían:
- Y antes dónde ha estado usted que no lo hemos visto; y les contestaba:- he
pasado en el Seminario y me iba a celebrar la misa a una cuadra, me regresaba al
Seminario y no salía para nada; por eso, me he encariñado tanto con los
seminaristas porque no tenía más familiares. Mis tías, mi abuelita, mi mamá y mi
hermano menor se habían quedado allá en el campo. Me mandaron a San Ramón,
Santa Teresita e Indoamericano y me encariñaba con los estudiantes. Recuerdo
que Monseñor Pérez Silva nos enseño una palabrita: - Cuando sean sacerdotes
no pidan ni rechacen nada, acepten lo que manda el superior. Con el favor de
Dios, siempre me ha ido muy bien y no he puesto obstáculos.
Me cogió la edad de 75 años en la parroquia de la Catedral y como manda
la norma que, cumpliendo esta edad se tiene que renunciar, presenté la renuncia
a Monseñor Dammert Bellido. Él sabía que no tenía casa y no tenía donde vivir
porque vivía en el Obispado, me preguntó: -¿Y ahora qué vas a hacer? Y le
contesté: - Siempre he pensado que voy a pasar mis últimos días en el Asilo, y
contento me dijo: - ¡Qué bien! Contentísimo. Entonces, llegué al Asilo el 03 de
noviembre de 1991.
El 12 de agosto de 1991, las madres hicieron bendecir el pabellón donde
estoy. Monseñor Dammert hizo la bendición en el comedor. Lo acompañé allí y al
salir, las madrecitas sabían que yo tenía interés por el Asilo; entones, me dice una
de ellas: - Escoja ya pues su cuarto; y le contesté: -Este que sea, pues. Está junto al
Santísimo, pero en ese momento todavía no estaba el Santísimo. ¡Qué providencia
de Dios! Así que ya estoy 14 años aquí.
-Usted nos hablaba de que en un momento, estando en el Seminario, tuvo
una tentación de dejar el sacerdocio, a través de todos estos años ¿cómo ha
mantenido la fe, porque seguramente ha habido otras tentaciones no tan
grandes, pero quizás algunas desviaciones?
-Tal vez esta idea de que siendo un pobre campesino y tener la oportunidad
de estudiar una profesión, tal vez haya sido uno de los móviles para mantenerme
en el Seminario; pensar que voy a llegar a mi tierra como sacerdote humanamente.
En Trujillo el 15 de marzo de 1932 me pusieron la sotanita y parece que ha sido
otro de los motivos, que me encariñé con la sotana. Cuando entró la moda de que
los sacerdotes vestían sin sotana, es decir, sin sotanismo, entonces, tenía mucha
pena y era fuerte la presión. A un sacerdote joven le regalaron un terno para que
deje la sotana. La última tentación ha sido cuando decían y nos echaban la culpa
a los sacerdotes, que estamos utilizando la sotana, que estamos dividiendo a los
sacerdotes. Vino un predicador de esos modernos y dije tengo que consultarle, me
echaban la culpa de usar sotana y trabajar en la Cooperativa San Pío X y me
dijo: - Monseñor Dammert usa sotana porque usted la usa, así lo encontró por eso
él sigue usándola; como diciéndome usted se saca la sotana e inmediatamente
Monseñor también hace lo mismo; y en cuanto a la cooperativa, me dijo que
debería dejarla de inmediato, porque estaba así la moda, no había otra razón.
Entonces, ante esta presión, decidí hacerme dos ternos para cambiarme. Para
acostúmbrame a usar el terno, pensé ir al Orfelinato que tenía su finca en Tartar
usando el terno. ¡Providencia de Dios! Estaba aquí una hermanita religiosa que la
conocí aquí de seglar, jovencita, trabaja en la Argentina y se llamaba Antonia y al
momento de irse, al despedirla, le dije: - Es tan fuerte la presión contra la sotana y
tengo que quitármela. Ella no me dijo nada, pero ¡Providencia de Dios! salimos y en
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la puerta estaba la madre superiora de aquellos tiempos, la madre Ángeles.
Antonia le dice: -El padre ya se va a quitar la sotana, entonces madre Ángeles, me
hizo un sermoncito que me dejó contentísimo y en ese momento, me fui a mi hermano
y le dije: aquí tienes dos ternos, úsalos porque yo no me quito la sotana.
Dejé de trabajar en la Cooperativa porque el gobierno pedía gente titulada
para que la maneje. Como no tengo ningún título, antes que me boten yo salí.
Cuando me dieron en el Municipio un cartoncito nombrándome Hijo Predilecto
de Cajamarca, precisamente, al cumplir 90 años, en el momento de agradecer dije:
las obras que me atribuyen en Cajamarca, no son obras mías; son obras del
pueblo católico, porque qué podría hacer yo: un ser pobre, nunca me he
enriquecido, sin recursos para obras, sin influencias políticas. La obras que ven, son
del pueblo y si me nombran Hijo Predilecto, entonces, soy hijo del pueblo porque
con el pueblo se ha hecho.
Acabo de sacar una relación explicando cómo se hizo el Santuario de Santa
Apolonia y es una obra única en su género por su construcción. No hubo comité;
por tanto, no hubo presidente, ni secretario, ni tesorero. El pueblo lo hizo. Yo no he
estudiado relaciones públicas sino solamente por mi figurita la gente apoyaba en
la construcción, nada más. No se hizo propaganda, eso es: ¡Providencia de Dios!
Todos los años por el mes de enero, los obispos se reunían en Asamblea general
y en enero de 1958, un padre norteamericano, Mclelan, informaba a los obispos
sobre lo que ha hecho en su parroquia San Juan de Puno. Había formado una
cooperativa de crédito y tenía 03 años y le iba muy bien; entonces, los obispos se
entusiasmaron y le sugirieron que se dicte un cursillo de cooperativismo en Puno.
Los Obispos se comprometieron a mandar un sacerdote de cada una de la
Diócesis a ese cursillo. Recibí una carta de monseñor Ramírez Taboada,
diciéndome: - el padre norteamericano nos ha hablado sobre una cooperativa
de crédito en Puno y he pensado que usted podría ir a ese cursillo. Le contesté: es
primera vez que oigo cooperativa, pero como usted lo ordena, hoy empiezo a
hacer mis ahorritos para el viaje. Se llegó en tiempo del cursillo, en abril, y
Monseñor Ramírez Taboada me dijo: - Usted va en avión y regresa en avión. El
cursillo duró una semana. Habíamos 31 sacerdotes de todas las Diócesis, desde
Tumbes hasta Tacna. Por eso habrán oído que las cooperativas fueron fundadas
por sacerdotes. Vine a informar al Monseñor sobre el cursillo y me dijo: - A ver si
usted hace lo que puede. Empecé a visitar a unos amiguitos para comunicarles y
explicarles qué es una cooperativa y decirles que tendremos reunión los sábados
en el local de Sata Teresita. Conforme avanzábamos en las explicaciones que les
daba sobre cooperativa, ellos se iban entusiasmando. En junio, empezaron hacer
una tentativa sobre el funcionamiento de una cooperativa y me nombraron
tesorero. El 02 de octubre de 1958 se formó la constituyente conformada por:
Consejo de Administración, Consejo de Vigilancia y Comité de Crédito. No
teníamos local, pero teníamos una pequeña habitación en el local de los Obreros
Católicos, que ya no existe. Ellos habían hipotecado un cuartito al señor Bazán y
allí funcionaba como oficina de 6:00 p.m. a 8:00 p.m. No había empleados. Llegó
una señorita que había terminado en Santa Teresita y le hablé de la cooperativa y
dijo que quería trabajar aquí. Le di las pautas y le asignaron un sueldito de 30
soles. De allí, volvió a funcionar en el día; luego en el jirón El Comercio, el padre
Tapia hizo la construcción de la parroquia y allí había dos cuartos desocupados,
los arrendamos. Mientras estábamos allí, se comenzó la construcción del edificio de
la cooperativa y a los 10 años estábamos inaugurando el edificio de la
cooperativa.
La construcción de la cooperativa fue dirigida por 03 ingenieros sanramoninos,
uno de ellos se apellidaba Centurión. Ellos dijeron –Padre, lo hacemos
gratuitamente. Entonces, el pueblo, todo lo hizo el pueblo.
La construcción del santuario de Santa Apolonia lo dirigió un simple albañil; él
hizo toda la construcción. Un ingeniero solamente trazó los planos, lo demás lo
ejecutó el albañil, él fue el capataz, el obrero puntualísimo, trabajando muchos días
solito, pero tenía su jornalito. También trabajaba su hijo, no pedían propina, ni
jornales, ni firmaban planillas. Para algunos gastos que se hacía, como comprar
Cemento y otros, se formó una alcancía en la catedral, junto a la Virgen de Fátima;
se abría los sábados y con eso abastecía para los gastos de la semana, con
excepción de un sábado que encontramos 3,000 soles con cheques nuevecitos. La
construcción del Santuario costó 150,000 soles, no hay ningún documento, no se ha
dado ningún recibo, porque el pueblo lo hizo. Yo no he hecho discursos ni sermones
para atraer a la gente sino por mi humilde figura, nada más. Yo fui un instrumento de
Dios. Uno de los trabajos más llamativos fue subir los ladrillos. Hicimos un depósito en
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la Catedral y los sábados y domingos nos reuníamos por las tardes, se formaban
hileras de cristianos jóvenes, ancianos y hasta niños dirigidos por mí. Por eso, don
Manuel Paredes, que estaba en la cantina, me decía: -¡Qué vergüenza! Nosotros
chupando aquí y ustedes trabajando, pero al final nos obsequió un torete para
rifarlo; por eso digo que he tenido muchos y grandes amigos.
Cuando algunos me preguntan: - ¿Y sus enemigos, Padre,? les digo: - yo no he
tenido enemigos sino que no me han pasado, tres no me han pasado; quería
saludarlos, pero no me respondían el saludo. Eran cristianos del pueblo; entones
digo: lo único que tengo yo es ser sacerdote, nada más. Algunos me dicen ¿por ue
le dicen Monseñor?, y les contesto: - Es mi chapa.
El primer premio que recibí fue en el primer año de escuela, a los nueve años. Fue
un librito, el primer libro que he conocido. Nosotros no conocimos los libros, mi
mamá no tenía nada para comprar.
He tenido pocos sufrimientos de enfermedades, pero con la edad ya vienen
los sufrimientos. Ya me han operado una vez de amígdalas y dos veces de hernia.
En 1954 me operó de amígdalas el doctor Ortiz Sánchez y me dice que tuve
una hemorragia, medio que me desvanecí y que bajó el pulso; por eso, el doctor
se puso nerviosísimo, después pasó, sin mayores consecuencias. También sufría
con dolor de muelas desde chico, pero soportaba con mucha paciencia,
solamente me sanaba con salmuera. Del dolor de muelas tengo una bonita lección
y digo: aunque no fuera el dolor de muelas más que el infierno ya sería terrible y
Jesús no dice vayan al lugar de muelas sino vayan al fuego infernal. ¿Cómo será
esto?
 RECONOCIMIENTO Y AGRADECIMIENTO
Monseñor CONRADO MUNDACA PERALTA, hombre de bien, virtuoso y de actuar
correcto; íntegro y de profunda sensibilidad social e inquebrantable fe; su vida
la dedicó a Dios nuestro y a la obra solidaria al prójimo sin distinción social y
económica alguna; dejando una huella imposible de borrar. En síntesis un hombre
de excepcionales cualidades.
Fiel a sus principios y valores cristianos el Padre Conrado impregnó en su vida los
preceptos de la Iglesia universal, trascendiendo los espacios y rituales
estrictamente religiosos, vivificando su fe en la dimensión social y de la docencia,
formando y orientado a la juventud, acompañando al desvalido y extendiendo la
ayuda material y espiritual al hermano y hermana urgido de tranquilidad y paz
interna y de convivencia social, al igual que forjando instituciones de ayuda y
cooperación.
Testimonios de vida y obra social y evangelizadora de nuestro Pastor que
motivó y animó la idea de recoger y reunir en un escrito el legado que dejó en su
peregrinaje por este mundo tan ilustre personaje, que indudablemente llena de
orgullo a los cajamarquinos. En sí, su vida ES UN EJEMPLO A SEGUIR Y EN
GRATITUD NO DEBEMOS OLVIDAR
Muchas gestiones postergadas y el tiempo de espera que se prolongó,
antecedieron la edición del Libro; sin embargo, ello no debilitó nuestro propósito,
ni tampoco tornó improductivo nuestro colectivo quehacer, pues hemos logrado
alcanzar lo deseado; cuál es: perennizar en un escrito la vida y obra del
Monseñor; desde luego el camino está trazado y su recorrido recién se habría
iniciado. Acompáñanos.
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Queremos resaltar en esta oportunidad el auspicio económico compartido por la
Municipalidad Provincial de Cajamarca y la Cooperativa de Ahorro y Crédito
“San Pío X” de Cajamarca, cuyos aportes permitieron materializar la edición del
Libro; y a quienes nos dieron acceso a valiosa información documental,
testimonial y fotográfica sobre la vida y obra del Monseñor Conrado, como el
Obispado de Cajamarca, en la persona de Monseñor José Carmelo Martínez
Lázaro, al R.P. Edilberto Bernal Cubas de la Prelatura de Chota; a sus familiares en
la persona de la Sra. Laura Peralta Bonilla y a quien acompañó a nuestro Pastor
en muchas ocasiones su peregrinar y vida religiosa, e l Sr. José Ramón Gaona
Mendo, y en forma especial al compilador de la obra Ing. José Julio Estela castro
por su esfuerzo y dedicación, como también a la hermana Sor Apolonia Molina
Cigüeñas por ser una de las promotoras de la edición de esta obra y haber
realizado las entrevistas que permitieron recopilar el testimonio de varios autores y
contar también con las palabras del Monseñor Mundaca en una entrevista
epilogal de su vida que enriqueció notoriamente el contenido de nuestro libra,
también nuestro agradecimiento al profesor Wualter Díaz Angulo por la
transcripción de los audios y corrección preliminar de los textos.
En fin, a todo aquel, persona o institución, nuestro sincero agradecimiento por su
contribución; pues, tan loable actitud, expresa su desinteresado
desprendimiento, posponiendo los de índole particular en pro de un trabajo
conjunto que hizo posible la culminación del Libro.
En la lógica de no poder reunir toda una vida en un escrito y la fragilidad de la
memoria, dejamos constancia nuestras disculpas por el olvido de alguna
mención.
GINES CABANILLAS ANGULO
COMITÉ DE EDICION Y GESTION
 Mons. CONRADO MUNDACA PERALTA
Vida y Obra
Testimonios
De José Julio Estela Castro – Compilador,
fué posible su publicación gracias al auspicio
de la Municipalidad Provincial de Cajamarca y la
Cooperativa de Ahorro y Crédito San Pio X de Cajamarca,
se terminó de imprimir en el mes de octubre del 2017,
en los talleres de Cespedesgraf SAC, en la ciudad de Lima
por encargo de Balck Line Studios Sac
Telf. 945043153 – Email: henrymanza@hotmail.com

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